Cabrón, cuantos pelos tienes
Comiéndome una al tiempo que me follaba con varios de mis dedos, no pudiendo ni mirar a los mirones, uniéndose uno de ellos, comenzando por acariciar mi cuerpo, quitarme la camisa y dejar mi cuerpo peludo a la vista, soltándome Joder, cabrón, cuantos pelos tiene.
Cabrón, cuantos pelos tienes
Antes de nada. Os debo de confesar que siempre me he esforzado en mejorar… sexualmente, como bien sabéis mis gustos son los hombres maduros, buscando en lo posible mis preferencias, no importándome nunca si comienzo con uno y acabo con varios. Busco hombres activos pero no hay día que no acabe con un versátil, me considero glotón y como curioso me gusta probar, además no hay maduros que no deseen una buena putita, encontrando en mí a esa glotona que de paso se deja preñar… mmm. Os debo dejar claro que no busco amistad, pues lo mío es puro sexo, solo relaciones a ser posible esporádicas.
Hoy martes (31/10/2017) tenía planes, planes que mi mujer me los ha roto, claro está ella no sabía de ellos, como se va a imaginar mis planes. Estos no era otro que quedar con uno de mis viejos amigos en su casa por la mañana, dejando la segunda para esta tarde sobre las cinco de la tarde. Dos citas muy distintas, mientras la primera iba a ser en el centro, la segunda iba a ser cerca de Torneo, ambas iba a ser el objeto de placer… mmm!!!. Me sentía muy caliente por todos mis planes, deseaba ser muy puta y no me lo pensé dos veces.
Comenzaron desde esta mañana, pues estando en la oficina no deje de quejarme, dando un doble juego, pues intentaba no molestar a mis compañeros, pero por otro lado mi comportamiento por mi estado, mostrando ellos preocupación por mí, tanto fue el efecto que en menos de una hora, mi propio jefe se acercó y me dijo...
- "José, vete a casa que eso que tienes, tiene todas las papeletas que estas incubando un germen y no quiero que nos contagies".
Lógicamente y cumpliendo con mi papel, me marche a casa no sin antes, cubrirme las espaldas a modo de hacerles saber que no dijeran nada a mi mujer, ya que estaba muy liada y no deseaba que ella se preocupara. Acabando por marcharme a casa, no sabiendo bien que hacer, acabando por desvestirme e ir preparándome, comencé por ponerme mi tanga negro de hilo... mmm!!!. Tanga que me pone súper cerdo, luego cogí mi tetina al tiempo que llene el bidé de agua tibia. Comenzando a hacerme una lavativa... mmm!!!, hasta cerciorarme que estaba bien limpia.
Me mire al espejo una vez tras otra, no pensándomelo dos veces y me puse mis medias negras de liga, todo esto con el corazón a mil. Sintiendo los latidos de mi corazón, no deseando ser descubierto por mi mujer en esta comprometida situación... mmm!!!. Minutos más tarde, volví a mirarme al espejo y viéndome cada vez más puta, cosa que mande un Whatsap a un amigo y se lo hice saber. Este no sólo me deseaba lo peor sino que me pidió fotos que lo colaborara, fotos que comencé a hacerme... mmm!!!.
Comencé por preparar el escenario, no siendo otro que mi propio dormitorio, luego quite almohadones, muñecos y colcha de la cama de matrimonio, dejando solo las sábanas blancas… mmm!!!. Cogí mi móvil y comencé a hacerme las primeras fotos… siendo estas sin nada (como Dios me trajo al mundo), continúe con el reportaje. Haciéndome las segundas que eran como las primeras pero en esta ocasión con mascara (joder, pues es víspera de Halloween), las terceras igual que la segunda pero con el tanga, las cuartas al igual que la tercera pero con las medias y las quintas como las anteriores pero con zapatos de tacones... uuummm!!!. Mi polla estaba como una piedra, emanando por mi glande fluidos por la excitación... mmm!!!. Soltándome mi amigo...
"Joder, zorra. Cómo de buena que estas”.
“Quedamos y te dejas follar, tengo ganas de preñarte”.
Contestándole...
- "Estoy muy caliente".
En eso casi me corta mi calentura, cuando un Whatsap de mi mujer, me recuerda unos planes para esta tarde. Planes que en verdad, me estropea todas mis citas, no teniendo más remedio que excusarme con esos amigos con derecho, dejando las citas para otro día. Mandándome uno de ellos, fotos de su polla y diciéndome…
- "Vale cielo, no sabes lo que te pierdes”.
Enseñándome fotos de su pollón… mmm!!!. Volviéndome a insistir...
- "Escápate un rato o mejor voy a buscarte, no hace falta que vayamos muy lejos, me la puedes comer en el coche como tanto te gusta… mmm!!!. Vale".
No quedándome otra que negárselo, prometiéndole dejarme hacer de todo a su voluntad. Soltándome este antes de despedirnos…
- “Vale… te tomo la palabra, serás el regalo para un buen amigo”.
Su comentario me puso aun peor de lo que estaba, pensar que nuestro próximo encuentro, seré el regalo de uno de sus amigos… mmm!!!, me enciende aún más. Pero aun así, mi cuerpo pedía guerra y no iba a dejar de dársela, comenzando por castigarme mediante el dolor. Dejando constancia de ello, ya sea con unas pinzas (alfileres de ropa) en mis pezones, como un dildo anal vibratorio dentro de mi culito... ooohhh!!!. Todo esto sin dejar de hacer cosas, eso con mi tanga puesto e incluso las medias... mmm!!!, comencé a introducirme un objeto de no más de veinte centímetros por tres de diámetro, objeto que me ayuda en mis ratos de placer... ooohhh!!!, deseando tener en esos momentos otro en mi boca, no pudiendo contentarme con otra cosa que un vibrador de látex... ooohhh!!!. Uno de esos que emula un gran miembro, teniendo todo aquello que uno o una desea tener, no solo por su textura, sino por todos los detalles, menos lo que a veces más deseo… la leche… uuuffff!!!.
Bueno sigo, comienzo a introducírmelo, tragándome algo más de quince centímetros, forzándome a tragar más a pesar de las arcadas... aaahhh!!!. Pero claro está, mi cuerpo pedía más y no pude negarme, intentando introducirme un juguete más por mi orificio... mmm!!!, siendo dos los que deseaba entrar. Probando posiciones, ya sea tumbado sobre la cama frente al espejo con las piernas separadas, una a un lado y la otra apoyando un pie al espejo, dándome una panorámica de placer que pocas hembras se le ocurren. Viendo como forzaba mi orificio, enrojecido y dolorido, no tanto por el dolor que mis pezones están sufriendo por aquellos alfileres... aaahhh!!!.
Comprendiendo que solo conseguí un par de minutos que estos dos entrará, me dispuse a hacer otras labores más porque descansara mi orificio, mientras hablaba con mis tres amigos con derecho, amigos que solo uno de ellos de momento había conseguido ser mí amante. Teniendo derechos que pocos han disfrutado o se han atrevido a hacer, ya sea por no pedirlo o por poca imaginación. Pues este no sólo me ha hecho disfrutar como una buena hembra… mmm!!!, demostrándome lo macho semental que es y lo AMO dominante que llega a ser, demostrándomelo no solo con hechos sino con dolor... mmm!!!. Pidiéndome unos de mis amigos…
“Vale… putona, veo que estas muy caliente”.
“Quiero verte vestido de mujer, déjate el tanga, las medias y los zapatos y ponte un sujetador, falda y blusa o vestido”.
Proposición que me hizo desear, dirigiéndome al armario de mi mujer y a pesar que yo tengo una talla menos que ella, no me lo pensé dos veces. Cogí un sujetador y me lo coloque, introduciéndome varios calcetines a modo de emular pechos, le cogí una blusa y varias faldas. Probándome cada una de ellas, dándome cuenta el mal gusto que tiene mi mujer últimamente por la ropa, acabando por ponerme uno de sus vestidos largos que tiene… mmm!!!. Luego tras unas fotos, acabo por mandárselas a mi amigo el cual suelta…
“Coño que buena estas, este verano no pasa en que te depiles”.
“No me seas así, vente un minuto, vente el tiempo de descargar y de paso preñarte”.
No me queda otra que despedirme y desconectar. Volviendo a mis quehaceres, volviendo a mi deseo de placer, pues he dejado lo último para el final. Pues como he dicho… he estado dejado poco a poco lo último para el final, no siendo otra cosa que un objeto tan parecido a una polla, no solo por la textura sino por la sensación... mmm!!!.
Cuya longitud ronda los treinta centímetros y cuyo diámetro está cerca de los seis centímetros... uuuffff!!!, lo intente una primera vez no pudiendo entrar más de tres centímetros, echándome más vaselina y jugando un poco más con mi orificio… aaahhh!!!, intentándolo una segunda vez y en esta ocasión en otra posición, entrándome en esta ocasión al menos diez centímetros… uuuffff!!!.
Caliente perdido y salido a no da más, he continuado dándome placer y dolor, tanto con los alfileres (pinzas de ropas) en mis pezones, sumándolos ahora en mis testículos… aaahhh!!!. Continuando por sentarme ahora sobre este objeto y con gran dolor… uuummm!!!, acabando por entrarme cerca de dieciocho centímetros, cuyo glande golpeaba al menos hay lo sentí… mmm!!!. En mis testículos, doliéndome enormemente, acabando por explotar, conduciendo toda mi leche… aaahhh!!!, hacia mi orificio anal… uuuffff!!!. Quedándome extasiado sobre mi cama de matrimonio, mirando el reloj de mi mesita de noche y ver lo tardísimo que era, pues me he dado placer durante al menos cinco horas, castigado por el peor AMO de todos, no siendo este otro que yo mismo… mmm!!!.
No deseaba que esto acabara aquí y mientras preparaba mi almuerzo, no deje de llevar tanto dos bolas chinas de gran tamaño como un dildo vibrador dentro de mí, mientras mi miembro era castigado por pinzas… uuuffff!!!... aaahhh!!!... mmm!!!. No importándome el dolor, pues el placer obtenido es mucho mayor... mmm.
Mirad, gracias a estar publicando mis experiencias en el portal de www.todorelatos.com , puedo decir que he podido ampliar no solo mis “amigos” sino también mis experiencias. Aunque no todos son del tipo de hombres que me atraen (muy maduros), pero si son de mi agrado, no descartándolos para un futuro… mmm!!!. Pero a raíz de mis confesiones, no solo han sido hombres sino mujeres e incluso parejas, donde me han pedido de todo… K, desde pidiendo fotos hasta por verme por CAM. Pero bueno, volveré a mis experiencias, haciéndome recordar precisamente a raíz de esto, una ocurrida este pasado verano.
Donde uno de estos me pidió fotos mías en tanguita y medias negras, fotos que finalmente le mande y que según pude ver, pues no solo me lo hizo saber… sino las fotos suyas desnudo, le gusto. No tardando en pedirme verme vestida de esta manera, no teniendo sitio donde el poderme ver, proponiéndome finalmente el vernos detrás de la Estación de Cartuja en el Charco de la Pava, lugar que más tarde y mediante un enlace desde el “Maps” me indico. Yo lógicamente le hice ver que no podía ir de esa manera, sugiriéndole…
- “Mira, yo no puedo salir a la calle de esta manera, siempre pido discreción al menos en lugares públicos. Si quieres, acudo como normalmente salgo a la calle y que allí mismo me cambio”.
Este no le pareció malo, pero acabo por proponerme…
“Mejor te vienes vestido normal, pantalones y camisa… pero con las prendas debajo”.
“Mira puta, cuando vayas a llegar, te desvistes antes, quedándote con tan solo las medias, el tanga y la camisa, pero algo que me gustaría muchísimo que te vengas también con zapatos de tacón… mmm!!!”.
Finalmente he hecho eso, he salido de casa con ropa normal, llevando debajo medias de ligas negras y mi tanga de hilo de igual color, dentro de una bolsa unos zapatos de tacón. Me fui al lugar indicado y antes de llegar, me despoje de mis zapatos, pantalón, quedándome con las medias de ligas con encajes, el tanga negro de hilo, los zapatos de tacón y claro está mi camisa.
Lo vi donde dijimos, sabiendo yo como es por sus fotos, detuve mi coche detrás del suyo, me baje de mi auto y muy femenina camine hacia el suyo, me miro y sonriente sin decir palabra me abrió su puerta. Dejándome ver lo preparado que él venía también, pues tenía su polla en mano… no dije nada, solo me arrodille… cosa que este me impido. Quedándome inclinado hacia delante mientras le masturbaba con ambas manos, mientras el me acariciaba mis nalgas y muslos… mmm!!!, sintiendo su mano deslizarse sobre mis medias. Mientras me soltaba toda clase de obscenidades y guarradas, acabando por soltarme…
- “Cómetela, guarra”.
Dirigiendo su glande a mi boca, degustándome con ella a pesar de no ser muy grande… mmm!!!, este no dejo de suspirar y de gemir, haciéndome saber lo bien que lo hago e incluso avisándome de poderse venir, cosa que aminore la marcha… yendo algo más despacio… ooohhh!!!.
Sabía de sobra que había un par de tíos mirándonos, mirones que a algunos ahuyente y a otros les permití mirar… mmm!!!. Al que se la chupaba, me pidió…
- “Hazte un dedo cabrona, quiero ver cómo te hundes tus dedos dentro de tu coño… uuuffff!!!”.
Cosa que comencé a hacerme… ooohhh!!!, comiéndome una polla al tiempo que me follaba con varios de mis dedos, no pudiendo ya ni mirar a los mirones. Momentos en que acabo por unirse uno de ellos, comenzando este por acariciar mi cuerpo, acabando por quitarme allí mismo de un tirón la camisa, mostrando mi cuerpo peludo y soltarme…
- “Joder, cabrón, cuantos pelos tiene”.
Cosa que poco le debió de importar, cuando siento como me come el culo… ooohhh!!!, sintiendo no solo su lengua sino como sus dedos hurga en mi interior… aaahhh!, masturbándome al mismo tiempo y sin verlo venir, aunque eso sí… deseándolo. Sentir como me penetra… ooohhh!!!, no pudiéndolo gritar y menos aullar de placer… uuuffff!!!. Dándome cuenta como este cabrón tiene una buena polla… aaahhh!!!, no deja de embestirme mientras me tiene sujeto por la cintura, momentos que levanto la cabeza y me encuentro a este cerdo grabando con su móvil… mmm!!!.
Sintiendo como este acelera la penetración y tras unos minutos la saca, sintiéndola nuevamente entrar y el chocar de sus grandes huevos contra mis nalgas… uuuffff!!!, me hace pensar que este es otro… ooohhh!!!. Sintiendo el gran placer de sus pollas entrar en mí… aaahhh!!!, alternándose entre ellos… uuuffff!!!, sintiendo la polla de una larga y fina y la del otro… ooohhh!!!, gruesa y de menor tamaño… uuuffff!!!. Haciéndome saber entre alaridos que pronto se iban a venir… mmm!!!, sintiendo sus corridas fuera de mí… aaahhh!!!, corridas que noto como me la echan encima… uuummm!!!, manchando mis medias de ligas nuevas entre insultos, gemidos y obscenidades… mmm!!!. Mientras me veo obligado a tragarme la lefa de aquel a quien mamaba, no quedándome otra que tragar… aaahhh!!!.
Llevándome la mayor decepción al echarme de su coche y tras arrancar marcharse, quedándome allí a escasos metros de mi coche casi desnudo, estando con tan solo zapatos de tacón, medias de ligas negras y tanga de hilo, pues mi camisa rota acabo por tirarla al suelo. Marchándome hacia mi coche, no queriendo mirar hacia atrás, mientras me invitaban a continuar, invitación que provenían de hasta tres machos… mmm.
Bueno antes de despedirme hasta una nueva experiencia, os voy a adelantar que hoy jueves he salido como un hetero más de mi casa, cuya salvedad es el tanga de hilo negro que llevo… mmm!!!, prendas que te acostumbras ya a llevarla, aunque al principio me era muy molesta, no solo por el dolor de la tira entre mis glúteos, sino por la incomodidad de llevarla. Pero poco a poco te vas acostumbrando, tanto que la echas de menos cuando no la llevas, pues te hace ir más ligero.
Eso me hace recordar el día en que me fui a correr, no siendo tan normal en mí, pues no suelo hacerlo, pero me dio por hacerlo esa vez. Yo soy de esos que no habla bien de los hombres d color a raíz de una experiencia, experiencia en que no se vio la fama que tenían. Pero ese día en que me fui a correr a las tres y media de la tarde, hora que siendo noviembre no es tan descabellada la hora, no fui precisamente a buscar nada, solo a correr y de paso pensar en unas cosas, yéndome a correr precisamente al parque del Alamillo.
Donde tras dejar el coche frente al Estadio Olímpico, me adentre por una de las puertas de acceso, me puse mis auriculares y me adentre en uno de tantos caminos. No escuchaba más que música para poder concentrarme, pues debía de decidir unas cuestiones muy importantes que no entran al tema.
Cuando precisamente me cruce con dos hombres de raza musulmán, hombres que no eche ni cuenta, no importándome pero en mi segunda vuelta, vi a uno de ellos arrodillado en el suelo. No pensándomelo dos veces y me acerque a ver que le pasaba, me quite los auriculares y le pregunte…
- “Perdón, le pasa a usted algo”.
Este mirándome seriamente, me contesto…
- “No, solo estaba descansando, he sentido como un palpito y he creído mejor pararme”.
Ayudándole a levantarse al tiempo que le ofrecí mi botella de agua, mientras este bebía le ayude a caminar hasta un banco cercano, banco donde poder este descansar, no marchándome pues no me parecía bien abandonarle. Acabando decirme…
- “Mira, gracias por tu ayuda, pero ya estoy bien, si quieres puedes irte”.
Pensé en verdad en marcharme, pero cuando lo vi levantarse y casi perder el equilibrio, no me marche. Cosa que veo como este se quita la camiseta, alegando que tenía mucho calor, quedándome mirando… pero no fue precisamente su musculoso cuerpo, sino algo más abajo… mmm!!!, mí vista se clavó en ese tremendo bulto de su entrepierna.
Como explicaros como acabe con este tío desnudo dentro de unos arbustos, donde este no solo me dejo que se la comiera, sino que tras follarme con su dedos mi culo, continuo con su enorme polla… mmm!!!. Ver como este se colocaba un preservativo, cuando otros que van de seguros ni se los colocan, me hizo agradecérselo de corazón, dejándome follar por este árabe el cual me dio por el culo hasta reventar. Pero sorpresa que me lleve, cuando veo entrar por los arbustos su compañero, sorpresa que este me alejo cuando me hizo saber que el mismo le aviso, siendo ahora dos a los que satisfacer… mmm!!!.
Cuyas embestidas me hicieron ver las estrellas, pues más parecía que me machacaban los huevos, cuando me penetraban, encantándome estos dos musulmanes. Cuyo trato fue ejemplar, quedándose conmigo hasta que me vestí, acompañándome a mi coche y se marcharon al suyo, no sin antes intercambiar móviles, pues nadie sabe cuándo podemos volver a repetirlo… mmm!!!. Bueno aquí dejo una experiencia más, espero que os haya gustado tanto como a mí, espero vuestros comentarios. Mi email (lógicamente todo junto) es… Jhosua 1974 @ Gmail . com