Busco Dama

Me inscribí en uno de esos sitios de Internet para encontrar pareja. Mi mensaje decía: "No quiero romance ni sexo, solo quiero golpearte en la cara con mi verga y hacerte sonar los cachetes"

A los pocos días, recibí una contestación:

"Que original tu propuesta. Escribime a mi mail y explicámela mejor.

Beso.

Fefa"

Le respondí:

"Hola Fefa.

Gracias por escribir.

Te explico:

Me interesa golpearle la cara a una chica con mi verga erecta y dura, y hacerle sonar los cachetes.

Ya lo hice antes con mi novia. Una vez que me estaba chupando, se la saqué de la boca y le empecé a dar golpes en la cara con mi pija bien tiesa y mojada de su saliva, como si la estuviera castigando. Y me encantó como sonaba mi verga en su cara.

• ¿Me querés castigar? ¡Malo!" me decía ella y cerraba los ojos y se dejaba golpear.

Al otro día le pregunté:

¿Te gusta que te castigue con mi verga, bebé?

Siiiiii… - me respondió mimosa- Quiero que me golpes bien fuerte con tu verga dura en la cara. Y yo te la chupo todita y te hago acabar y vos me golpeas con tu pija bien mojadita de leche.

Y así lo empezamos a hacer. Yo me pongo encima de ella o de costado- a veces también yo sentado y ella con la cabeza entre mis piernas- y la castigo en la cara con mi pija y le hago sonar los cachetes. Ella me chupa con ganas y me hace acabar y yo después la golpeo bien fuerte, con mi verga bien mojada de leche.

La golpeo por toda la cara, no solo en las mejillas. En la boca, en la frente, en la nariz.

¡Me encanta como suena mi pija en su cara!

Estoy enamoradísimo de mi novia, pero fantaseo con golpear con mi verga la cara de otra chica. Hasta ahora no lo hice con nadie más, solo con ella.

En el ómnibus, cuando va lleno, y yo voy parado en el pasillo y me toca quedar al lado de alguna mujer interesante que va sentada, me caliento al verla con su cabeza a nivel de mi bragueta. Me dan ganas de sacarla afuera ahí mismo y darle unos golpes en la cara, delante de todo el mundo.

Sería solo esto, sin compromiso; solo cumplir mi fantasía de golpearle la cara con mi verga a otra chica que no sea mi novia.

Espero tu respuesta.

Un beso."

Me respondió al otro día.

"Ahora te entendí. Sos bien clarito. Pero decime, ¿para vos golpearle la cara a una chica con la pija no es tener sexo?

De cualquier forma, me gustó.

Te dejo mi cel. Llamame y hablamos.

Besito.

Fefa."

Le mandé un sms

"Quise decir que no me interesa coger. Solo golpearte en la cara con mi pija. Y si querés, me la chupás."

Al ratito, respuesta.

"Ok. Estoy trabajando. Te llamo después. Beso".

Me llamó. Hablamos y arreglamos para vernos en su casa, un jueves.

Ese día mi novia tenía clase en la Facultad hasta tarde, así que no había problema.

Fefa resultó tener una cara preciosa. Cara de nena picarona, con unos ojos azules que me miraban como diciendo: "Mirá quien es el tipo que me quiere hacer sonar los cachetes con la pija".

Me convidó con Coca Cola y galletitas y charlamos un rato sobre mi fantasía. Me confesó que cuando leyó mi mensaje, enseguida le gustó y esa noche se acarició pensando en eso.

Después nos besamos, nos quitamos la ropa y nos fuimos a cama.

Ella se tendió boca arriba, expectante de mi verga dura como un palo y yo me coloqué de rodillas a su lado.

Me la tomé con la mano y se la puse ante los ojos.

• ¡Ahora vas a ver! Te voy a castigar con ganas - le dije con fingido tono de amenaza.

Ella me miraba desde abajo.

• ¿Que me vas a hacer, degeneradito? Te ratoneás con las minas del ómni...

No pudo terminar la frase porque la golpee con mi pija en la cara. Ella se rió y ¡Paf! ¡Paf! ¡Paf! le empecé a hacer sonar los cachetes con mi verga. ¡Me fascinaba como sonaban mis golpes en su cara!

Ella se reía y movía la cabeza de un lado a otro, tratando de esquivar los golpes y se quejaba con placer cuando los golpes eran demasiado fuertes.

Yo me senté encima, para que no se me escapara y ella cerraba los ojos y se dejaba golpear con gusto. Le deba con la verga en la boca, en la nariz, en la frente, en los ojos

Entonces, en un momento, me la agarró y se la metió en la boca de un gran bocado y me empezó a chupar con ganas.

Yo me dejé mamar un rato, pero de un tirón se la saqué de la boca y la golpee con la verga mojada de su saliva. La golpee de arriba, de abajo. Ella se dejaba golpear con mi verga que le mojaba toda la cara con su saliva y con los jugos pre seminales que ya me empezaban a salir.

La castigué con fuerza y con ganas, dejándole la cara roja, hasta que me rogó que la dejara chuparme. Le di unos goles más y me senté en la cama, con la espalda apoyada en la pared. Y me empezó a lamer y a mamar con unas ansias locas. El sentir la pija en la cara golpeándola la había dejado super excitada.

Se la metía toda en la boca, se la tragaba hasta la base y la volvía a sacar. La chupaba sorbiendo y haciendo ruido con la boca. Subía y bajaba una y otra vez con esa boca caliente y deliciosa a lo largo de mi verga. Hasta que me hizo correr.

Se la sacó de la boca y me masturbó frenéticamente haciendo que salieran grandes chorros de leche. Después la saboreo toda con la lengua, hasta que le tuve que pedir que parara, porque me daban espasmos.

Nos quedamos tendidos, jadeantes y satisfechos.

• ¡Qué bueno que estuvo! – exclamo con la respiración entrecortada.

Nos empezamos a ver todos los jueves, para que yo la golpeara en la cara con mi verga y ella me chupara con unas ganas locas hasta hacerme acabar con enormes chorros de semen.

Toda iba a las mil maravillas, hasta que hace un mes, revisando mis mensajes de Internet en el sitio de encuentros, vi uno que decía:

"No quiero que me beses ni que me hagas el amor, solo quiero que me castigues en la cara con tu verga dura".

Miré la descripción de la chica y coincidía en todo con mi novia:

29 años, Castaña, contextura mediana, 1.70 de estatura, ojos marrones… ¡Y su nick era casi idéntico al mail de mi novia!

No bien llegó a casa, la encaré. Primero intentó zafar, pero al final terminó confesando. ¡Era ella la del mensaje! Me puse horrible. ¡Mi novia estaba buscando otro tipo que le golpeara la cara con la pija! Me explicó que me quería muchísimo, que estaba super enamorada de mi, pero que había empezado fantasear con que otro tipo le golpeara la cara con la verga.

Se excitaba cuando viajando en un ómnibus lleno, sentada en el asiento del pasillo, un tipo se paraba a su lado, quedando la bragueta justo al nivel de su cabeza. Le daban ganas que el tipo la sacara ahí mismo y le diera unos buenos golpes en la cara, delante de todo el mundo.

Le grité, la traté de puta de mierda, de hija de puta.

Pero entonces, ella pareció pensar y me preguntó:

¿Y vos como sabés que me inscribí en Internet?

Me encaró. Yo primero traté zafar, pero al final confesé. Yo también estaba inscripto y hacía más de un mes que le estaba golpeando la cara a otra chica con mi verga.

Se puso horrible. Me trato de hijo de puta, se puso a llorar y me terminó echando de la casa.

Rompimos ese mismo día y tuve que volver a la casa de mis padres.

Todavía le sigo golpeando la cara a Fefa con mi pija, pero cada tanto reviso mi cuenta de correo, a ver si tengo algún nuevo mensaje.