Buscando Mi Camino (14)

Susurros del Corazon

Capítulo 14:

¡Por la grandísima madre que me pario! Es que solo yo tengo la recontra maldita suerte de que pase esto…. No lo puedo creer que me dejen con esta bronca…

-niña me podrías explicar que paso aquí- ¡y empezamos!

-madre creo que eso deberías de peguntárselo a tu otra hija- le respondo lo más calmada que puedo, la beso y me marcho antes de que comience el verdadero interrogatorio y mi paciencia se agote. Mientras me alejo puedo escuchar como Mom me habla pero la ignoro y sigo caminando hasta el estacionamiento, en el camino intento llamar a Kimberley y a Christina sin mucho éxito, cuando por fin encuentro mi auto la rabia se apodera de mí solo logro liberar un poco pateando las llantas.

-¿Qué ganas haciendo eso? El auto no tiene la culpa-

-Si quieres tomar su lugar eres bienvenida-

-tampoco veo que sea una buena opción-

-¿Por qué me persigues?

-pues no me apareció buena idea el dejarte sola en estas condiciones, además de que el auto no soportara por mucho tiempo tus desquites-

-ya te dije que puedes tomar su lugar-

-vamos bonita respira y canaliza bien tu ira, que yo no tengo la culpa y tampoco estoy contra ti, además respóndeme una cosa ¿qué te molesto más que se hallan ido o que te dejaran con el paquete?

-es básicamente lo mismo, que ahora te crees psicóloga-

No pero soy muy buena compañía-

-arrogante- suena su teléfono contesta y la oigo algo de que no se preocupe que más tarde llegara, cuelga y me mira sonriente- bien bonita ¿Qué hacemos?-

-no se tu pero yo tengo dos ejecuciones programadas-

-te acompaño- abre la puerta del copiloto y se sube al auto

-hey hey hey quien te dijo que podías subir-

-yo lo digo y ni te creas que me perderte esto- se pone el cinturón y me hace señas para que me suba también

-¿no desistirás verdad?-

-no- me contesta sonriente

No muy segura me subo al auto, lo enciendo y lo pongo en marcha rumbo al departamento pues estoy más que segura de que hay se encuentran las protagonistas de mi desgracia, Mary habla y habla pero no le prestó atención pues solo puedo pensar en las mil y una forma de asesinar a ese par… ach es que como se les ocurre armar semejante escena de celos frente a Mom y luego irse dejando el desastre formado.

Estando ya frente a la puerta de entrada del departamento Mary trata de persuadirme para que olvide todo, lo cual solo causa que me encienda más de lo que estaba. Entro al departamento como un tornado llamándolas a todo pulmón al ver que nadie responde me dirijo con paso firme al cuarto de Christina, cuando estoy a solo tres pasos de derribar la puerta Mary me frena poniéndose delante de mi

-Paty, mujer tranquila-

-no me digas que me tranquilice porque hasta tú puedes salir perdiendo-

-y no lo dudo con el humor que andas, hasta fuego echas, mira por que no nos vamos por unos tragos, dejamos que ellas se arreglen y luego tú te desquitas… piénsalo ahora mismo deben de estar discutiendo y tu enojo no lograra gran impacto ya que ellas están en modo estrés, pero si esperas a que todo se calme y luego ejecutas tu plan maestro será todo un espectáculo, ¿Qué dices?-

-me gusta tu forma de pensar- le digo un poco más calmada

-entonces que dices ¿vamos por unos tragos?-

-tu ganas pero ni creas que las has salvado-

-yo te ayudare con tu venganza de ser necesario- dice guiñándome un ojo

Ya de vuelta en el auto y con los aires más calmados, Mary me indica de un buen local donde podremos tomar y comer algo tranquilamente ya que yo no conozco mucho de este lugar le hago caso y nos ponemos en marcha… normalmente no soy nada fácil de convencer pero en este caso lo hago porque de verdad me gusto su propuesta y hace tiempo que no salgo a tomar nada… ahora que lo pienso hace casi un año que no ingiero nada de alcohol ni salgo de fiesta, nada… no lo hago desde que paso ese accidente.

-Hey ¿te piensas bajar?- pregunta Mary sacándome de mis pensamientos –vamos a ordenar algo- dice arrastrándome dentro del local, mientras ella ordena yo me dedico a observar mi alrededor, no hay mucha gente por lo que el ambiente está tranquilo, tiene su pista de baile y hasta televisores donde pasan diversos deportes –ten- me ofrece Mary una cerveza y me señala para que tome asiento –no es súper animado pero es perfecto para pasar un buen rato y platicar – dice mientras toma su primer sorbo

-así parece-

  • hmmm cuéntame de ti Patricia-

-¿eh? ¿Qué quieres saber?-

-veamos ¿a qué te dedicas?-

-soy editora… ya sabes básicamente hago que la locura que alguien escribió se vea decente-

-enserio, yo no podría y cuéntame que es lo más loco que te a tocado revisar-

-a ver hmm ya pues hace poco me toco una novela de tención/terror de esas súper explicitas y anormales hahaha pero me gustó mucho creo que pediré una copia para mi colección-

-phcyco-

-gracias-

-¿te encuentras bien?-pregunta repentinamente – pregunto porque no has probado tu bebida… ¿no tomas? No me digas que me saliste monja- dice burlona

-ah… la verdad hace mucho que no tomo nada alcohólico – respondo mirando la botella en mi mano

-¿alcohólicos anónimos?-

  • algo así-

-¿eh? Explícate-

-¿a que realmente te dedicas tú?- evado su pregunta

-ni creas que te vas a zafar… soy representante de ventas, pero últimamente me dedico a mantener a los clientes contentos-

-¿mantener a los clientes contentos?-

-¡no soy puta si eso insinúas! Solo hago charlas y reviso que todo este en orden con los productos-

-¿y para que necesitas a Kimbo?-

-pues necesito quien me ayude a organizarme y que suerte tuve en encontrarla porque ella es mucho mejor que yo en ese tema-

-¿Qué eres siega? Kimbo es lo más despistado que existe-

-Si lo admito ella es despistada pero lo es solo con sus cosas personales ya si es relacionado a alguien más es bastante atenta-

-si tú lo dices…-

-Hey ya enserio ¿no vas a tomártela?- señala mi bebida

--la verdad no me apetece… pero no quiero ser descortés-

-¡pues dámela mal agradecida!-

-va, va está bien me la tomo ¿Qué podría pasar?

-dale te prometo no violarte si te emborrachas-

-Que reconfortante- le digo tomando mi primer trago

-aburrida- me saca la lengua y observando alrededor me dice – vamos a bailar-

-no te basta con volverme alcohólica también quieres que haga el ridículo-

-no haras el ridículo porque tendrás una muy buena compañera-

-no gracias, engreída-

-hay dale di que siiiii-

-que jodes te dije ya que no-

-en nada me quieres complacer- se hace la herida

-no tengo porque hacerlo-

-si lo haces yo podría brindarte información-

-ahora me quieres chantajear-

-dime que no te mueres por saber del pasado de tu cuñadita, saber si de verdad es apta para tu hermana-

-no seré tu mono para obtener información, además me resultaría más sencillo sacárselo a Kim-

-¿te gusta hacerte la ruda?

-¿hacerme?-

-con lo poco que te conozco sé que no eres tan ruda como quieres aparentar-

-no me pongas a prueba-

-¿Qué haras? Me golpearas, torturaras hasta que acepte lo equivocada que estoy-

-eres desesperante lo sabes-

-lo sé, ¿bailamos?- me pregunta sonriente mientras yo solo la miro fijamente, si le digo que no es capaz de seguir jodiendo y si le digo que si… además de ser humillante obtendría información sobre Kimbo y me ahorraría un buen dolor de cabeza, me tomo lo que queda de la botella y tras un largo suspiro me levanto y le ofrezco mi mano invitándola a la pista, ella emocionada me corresponde.

La noche se ha ido en un parpadeo, entre bailes, copas y charlas sin sentido el tiempo paso en un suspiro. Me siento mareada, algo atontado y desubicada así que le digo a Mary que es hora de irnos, para mi sorpresa acepta sin ninguna queja, nos dirigimos al auto cuando me doy cuenta que no podre conducir –Alex, amor conduce tu ¿sí? No me siento con ganas-

-¿Eh? Vale yo conduzco, siéntate y te quedas quietecita-

Me subo al auto y arrancamos, la cabeza me da vueltas dificultándome la concentración asiéndome dudar de lo que es real y lo que no…

-¿estás bien amor?-

-¡¿EH!?-

-te ves pálida patricia ¿quieres que me detenga? ¿Necesitas algo?- oigo a preguntar Mary

-No, estoy bien solo algo mareada y quiero llegar a casa-

-ok, tratare de avanzar-

-siempre fuiste mala tomando amor-

-¡cállate! ¿Quién te pregunto? –

-tranquila mujer, la vas a asustar-

-¿Qué te importa lo que haga? Crees que puedes ir y venir como se te plazca…-

-ok… me voy a estacionar-

-¡NO! No Mary lo siento, ya me callo…-

-si mejor porque pareces loca- achhh

-segura que no quieres que nos detengamos un rato-

-muy segura, es solo que tengo una gran jaqueca-

-hahaha como te salvas, pero ya me quedo calladito y quietecito hasta que lleguemos-

Esto no me puede estar pasando, a pesar de los mareos, el dolor de cabeza y las ganas de devolver lo peor que me puede estar pasando es verlo a él ¿Por qué? ¿Por qué me atormenta de esta manera?

Lo observo y lo observo sin poderlo creer, porque el porqué de tantas alucinaciones que podría estar teniendo porque esta.

-Paty, bonita despierta ya llegamos- me dice Mary mientras me acaricia el rostro y recoge una fugitiva lagrima- ¿Por qué lloras linda?-

-¿Eh? No seas tonta es por el sueño- le respondo mientras alejo su mano de mi rostro

-vale grumpy, te acompaño a tu depa-

Bajamos del coche, entramos al edificio y nos subimos al elevador. Yo solo alcanzo a recostarme de una de las paredes de este, mientras Mary se encarga de los botones. El elevador comienza a subir me volteo y lo veo hay parado frente a mi como si fuera lo más normal del mundo.

-¿Por qué diablos sigues aquí? Pregunto enojada

-discúlpame, ¿Por qué me hablas así? Además ya te dije que no me iré hasta dejarte sana y salva en tu depa-

-no te lo dije a ti, se lo dije a Ale… no, no nada no me hagas caso, estoy ebria- le intento sonreír

-huy pues en ese caso será mejor que hasta te lleve a acostar- dice mientras se me acerca coquetamente

-ni loca, estaré ebria pero no demente- le responde frenándola a lo cual solo me sonríe y se recuesta a mi lado

-tu amiguita es bien lanzada-

-aaaa cuando va a llegar esto- grito ya desesperada al momento que el elevador se detiene y abre sus puertas

  • valla, grita de nuevo pero esta vez pide un millón de dólares- se burla Mary

-graciosa, ya llegue ya te puedes ir-

-de ninguna manera, te dije que te dejaría en tu depa y eso hare-

Sin ganas de discutir me baje del elevador y comencé a caminar como pude hasta llegar a la puerta del depa, cada paso que daba podía sentir como todo se distorsionaba hasta comenzar a ver todo difuso y oscuro.

-cuando dejaras de ignorarme y hablaras con migo-

-nunca, tú me abandonaste recuerdas-

-no fue por elección y lo sabes-

-no importa, lo hiciste y es lo que cuenta; además no sé qué hago hablando te si tu estas…-no puedo terminar de decirlo, la impotencia hace que me deslice asía el suelo

-¿muerto? Sí, pero aun así no puedo alejarme de ti, no puedo descansar viéndote sufrir- me dice mientras se arrodilla frente a mí- aunque debo admitir que has progresado mucho con toda la ayuda que le has brindado a Christi y a esa chiquilla- me acaricia la mejilla- sabes eres hermosa y deberías darte otra oportunidad, además sabes que si alguien se atreve a hacerte daño tendrá pesadillas el resto de su vida y no solo lo digo por ti yo me dedicare a atormentarlo también-

-idiota- le digo sin poder evitar sonreír

-vamos levántate, entra a tu casa, date un buen baño y acuéstate que mañana es un nuevo día-

-no es tan fácil-

-lo sé-

-no me dejes- lo abrazó y lo siento tan real… su textura, calor y su olor se siente tan real, lo puedo sentir aquí con migo, me separo un poco de él y acaricio su rostro mientras me pierdo en sus ojos- te extraño tanto Alex- observo sus labios y como si de un imán se tratara me atrae uniendo nuestros labios en un beso lleno de recuerdos de amor, impotencia y dolor que más que un dolor de perdida se siente más bien a la punzada que sientes al saber que tienes que despedirte, dejándote con la inquietud pero también la tranquilidad de saber que aun que te duela todo estará bien. Al momento siento ese sabor salado tan característico del llanto, nos separamos y me obsequia una leve sonrisa

-te amo Patricia y siempre lo hare y por ello quiero que pienses en lo que te hecho y no cierres ese bello corazón que posees-

-gracias y te prometo intentarlo-

-así se habla y ahora es tiempo de que reacciones-

-¿Qué?-

-Patricia reacciona- escucho a lo lejos mientras todo se vuelve oscuro nuevamente tengo que pestañar repetidamente para poder enfocar, cuando por fin lo logro veo a Mary con cara de aflicción- Paty, a por fin que susto me has dado – dice abalanzándose sobre mi

-¿susto porque?-

-cuando llegaste a la puerta te fuiste en blanco así el suelo, me diste un gran susto mujer – dice volviendo a abrasarme

-ya todo está bien, estoy bien vez, tranquila-

-aaa sabes hablaste muchas cosas pero en especial hubo algo que me llamo la atención-

-¿Qué fue?-

-¿Quién es Alex?

-Es una larga historia que quizás otro día te cuente… talvez lo haga cuando me cuentes todo lo que quiero saber de Kimberley- le digo sonriente

-es un trato-

-vale Mary, buenas noches y gracias por ayudarme a despejarme hoy-

-cuando quieras, buenas noches- me besa en la mejilla y observo como se aleja hasta subirse en el elevador haciendo una señal de despedida le respondo y entro por fin a el depa, todo está oscuro y en silencio ya en mi habitación me recuesto en la cama observando tomando la foto que tengo sobre la mesita de noche –tratare de hacer lo que me pediste esposo mío- apago la pequeña lámpara y cierro mis ojos perdiéndome en los recuerdos.