Buenas noches amor...
La noche de la azotea mi vecino viene por mi y me viola de lo mas rico.
Buenas noches amor
El calor era insoportable pero me negaba encender el aire acondicionado pero si quería tomar una rica y fría ducha, y mientras lo hacia no dejaba de pensar en las palabras del vecino y las evocaba en mi mente:
Que calor hace, no vecina?
Y esa mirada... esa mirada deslizándose por mi cuerpo como la caricia de un amante ardiente ohh...Dios!!!! casi podía sentir el peso de sus manos sobre mis senos, su humedad mezclándose con mi sudor, acariciándome, palpándome, estrujándome hasta hacerme mojar como perra en celo.
Acariciar a ese papacito que tanto me apetece y bajarle los pantalones de un solo tirón para comprobar lo que mis ojos, boca y, Dios me perdone, mi toto tanto desean; Saber si le hace honor al color, si ese morenazo tan bello tiene una verga digna de su raza, me pregunto como la mete, despacito para hacértela sentir en toda se extensión o lo meterá rápido y duro para hacerte gemir de puro gozo.
La imaginación me esta matando, no quiero que mi esposo piense que no tengo fondo, pero necesito un orgasmo y lo necesito ahora, así que ni hablar con una mano me pellizco un pezón y con la otra me masajeo el clítoris lentamente, el agua cae por mi cuerpo y su ruido al caer ahoga mis perezosos gemidos, ya no me controlo mas e introduzco dos dedos en mi hoyo imaginando que es su pinga la que me meto sin cesar, me imagino ese morenazo mientras me folla,quiero tener sexo con el algo caliente ,duro y sudoroso; Ya no aguanto mas y el tan ansiado orgasmo se avecina como una avalancha, cierro los ojos extasiada y me dejo llevar estremecida por la sensación que tantas veces y de tantas maneras sentimos pero que siempre ansiamos experimentar una vez mas.
-Que tanto haces en el baño mi amor- su voz me saca del ensueño.
-Ahora voy cielo, ya voy- termino de secar mi cuerpo ya satisfecho por hoy y me acuesto al lado de mi marido.
-Buenas noches, papi.
-Buenas noches amor... que tengas dulces sueños.
Mi cuerpo cae laxo y mi mente con el, dulce, dulce muy dulce casi puedo sentir las ruedas de mi imaginación girando y de repente ahí esta el ,mi vecino, mi querido vecinito esta lavando su carro apenas tiene una camisetita blanca que con el agua había transparentado sus tetillas, el agua corría y corría por sus piernas y yo suspire desde mi balcón por poder observar a ese adonis el mira hacia arriba y me sonríe yo pienso que lo hace de simpático hasta que recuerdo el vestidito que tengo nada decente y roja como un tomate me meto en la casa para seguir lavando la ropa.
Ya caía la tarde eran como las seis y algo yo subí arriba a la azotea a recoger la ropa que había lavado la suave brisa que corría levantaba la falda de mi vestido hasta dejar ver mis pantaletas y los tiritos del vestido se me bajaban por estar moviendo los hombros pero yo no era conciente de eso sin embargo mi observador si.
Buenas tardes vecinita- con un grito de sobresalto me di la vuelta solo para ver a mi vecino a mis espaldas tomándose una cerveza y con otra en la mano- quiere que la ayude?
No por favor no se preocupe- me eche a temblar de vergüenza por la alusión explicita con lo de las dos cervezas, de expectación o de excitación, no sabia ni me interesaba pero me quería ir de ahí.
No, no es una molestia- dejo las cervezas en el piso, se acerco y me quito de las manos una sabana que estaba doblando.
Así estuvimos un buen rato doblando ropa y cuando terminamos me dijo que me quedara para terminarme la cerveza ya me había relajado y no me pareció malo quedarme, así que me quede, entonces las cosas cambiaron:
Vecinita usted no cree que ese vestido esta muy corto?- me pregunto mirándome lascivamente.
No, no lo creo y todavía lo estuviera no creo que esos sean problemas suyos o de nadie realmente estaba ofendida y acalorada con la cerveza, ya que no es mi costumbre beber, subida a la cabeza así que prácticamente le escupí esa respuesta, agarre el cesto con la ropa y me disponía a marcharme cuando el me agarro nada amablemente del brazo y me dijo:
Eres una coqueta calienta poyas,o acaso piensas que nadie se entero de tu numerito del otro día, lo haces para enloquecerme? Porque ya he notado como me miras, pero si pinga quieres pinga vas a tener.
Suélteme estúpido- y lo golpee en el rostro lo mas fuerte que pude con el movimiento la cesta se cayo y la ropa quedo esparcida por el suelo, pero a mi no me importaba lo único que quería era deshacerme de ese idiota que tenia que estar borracho o drogado para hacer algo tan estúpido.
El no me respondió, no me devolvió el golpe pero me beso de una forma ruda lastimándome la boca, me tiro en el piso encima de mi ropa lavada y me bajo los tirantes de mi vestido de un tirón se apodero de mis senos sin ninguna delicadeza los chupo, los lamió, los mordió y a todo eso yo solo gemía como una puta porque: me gustaba como el mismo demonio!!!!!!! Me rompió las pantaletas de un tirón y su mano caliente se poso en mi sexo lo masajeo con su palma, me rozo con sus dedos y yo solo podía retorcerme jadeante.
Oh Dios, por favor!!! Por favor!!! le suplicaba mientras me arqueaba hacia el.
Esto es lo que quieres- pregunto frotándome su miembro- tómalo muñeca es todo tuyo.
Cuando por fin lo metió solloce de alivio, de desesperación, de éxtasis y de vergüenza no lo había metido bien y me vine aferrándome a su espalda ,el tardo un poco mas, me embestía con rabia, con desesperación como si mas que hacerme el amor se estuviera deshaciendo de algo yo lo aprisionaba con las piernas alrededor de su cintura para que no se alejara de mi.
- Te gusta mi amor? abrí los ojos a la luz de la mañana, a mi esposo encima de mi haciendo me el amor y contrariada lo abrace y lo acune en mis senos cuando termino, todo había sido un sueño pero en mi había quedado la sensación de realidad de que en mis sueños mi deliciosamente atractivo vecino me había violado y habia dejado una marca en mi que abría mi mente a nuevas y desconcertantes sensaciones.