Brenda, señora de culo fácil

de como me cojo a una mujer madura, y seguimos gonzando hasta ahora.

BRENDA, SEÑORA DE CULO FACIL

De pronto gritó ya viene uno y por el culo no lo puedo creer, no pares, por favor no pares, seguí dándole más

Como ya les había relatado el primer encuentro con Brenda, en el día de mi graduación. Después de ese día no nos vimos en una semana, de hecho ella me dijo después que no se volvería a repetir, pero al transcurso de la semana me llamó, para llevarla a comer, nos anduvimos paseando por allí, cachondeamos un poco en algunos lugares lo cual ella solo quedó mojadísima y yo súper caliente. Después de eso nos vimos al día siguiente, me pidió que la invitara a mi casa, lo cual no tuve ningún inconveniente y la llevé, allí en mi casa lo hicimos, y desde esa ocasión lo hacíamos dos o tres veces por día y casi a diario o cada tercer día, me encantaba lo caliente que es. Pero no fue hasta los dos meses cuando ella me pidió que la acompañara al Distrito Federal, para arreglar lo de su Célula Profesional, una vez que se la entregaron y ya estando en Cuernavaca la invité a comer para festejar, lo cual estuvimos cachondeando toda la noche y tomando trago, ya que como era algo especial para ella accedió a tomar un trago, ya que ella no bebe comimos, pedimos unos tragos, los tragos aumentaban al igual que las horas trascurrían cuando nos dimos cuenta ya era noche, pero el alcohol tarde o temprano haría sus efectos y fue el caso que, nos pusimos a mil, la besaba ella me correspondía a mis besos solo que esta vez la desconocí, el alcohol la hizo mostrar lo puta que verdaderamente es, la voz le cambió, sus gestos, todo me abrazaba y me jalaba pero no podíamos hacer mucho ya que el lugar estaba lleno, llevaba un vestidito bastante corto, lo que le hacia lucir sus hermosas piernas y sus lindos pies, cada vez nos cachondeabamos más, sentía mi verga mojadísima y paradísima. Pues cuando pedí la cuenta y nos paramos del lugar, se me hacia el bulto, ella lo miró y me abrazó para darse unos repelones. Salimos del lugar y ella quería que la llevara a su casa, pero le insistí en que era un día especial y que debíamos festejarlo de forma especial le dije que le tenia algo que le quería dar algo, ella se resistió un poco, me dijo que tenia que llegar a su casa que ya era tarde, cuando pude metí mi mano entre sus piernas y pude sentir lo caliente y mojada que estaba, por lo que le dije que ella al igual que yo estábamos al 1000 e iguales, contestándome que llegando a su casa se masturbaría y se le irían las ganas, y mil cosas más, al final accedió, pues se que tan caliente y puta es, no le quedaba otra se moría por probar y tener una verga en su panocha. Nos fuimos a un Hotel de los que hay en el centro.

Pedí una habitación, ella entró de inmediato, como si se escondiera de alguien, pero bueno eso a mi no me importó en lo mas mínimo, una vez que entramos ella estaba súper caliente y mojada, además de que los tragos la hicieron prenderse como nunca la había visto, en cuanto entré cerré bien la puerta, cuando vi ya la tenia hincada y bajándome el pantalón para mamarme la verga, empezó dándole lengüetazos a mi verga, después con su lengua besando todo mi tronco y mis testículos, en ocasiones anteriores me había mamado la verga, pero nunca como ahora, lo hacia con tal pasión que sentía que me exprimía por completo, pero al final me empezó a metérselo y empezó el riquísimo mete y saca me puso como nunca la agarré de los cabellos y le jalé un poco, para así manejarla a mi antojo diciéndole: -Trágatelo todo putita, demuéstrame lo puta que eres. Estaba tan caliente que quería ver que se la comiera toda. Se sacó la verga de su boca y me dijo: quieres ver a una puta de verdad, te la voy a mostrar, quieres ver a tu niña buena convertida en una verdadera puta. Si quieres jugar juguemos. Quiero que te acuestes en la cama, me dijo, con la verga hacia arriba. Por lo que de inmediato y sin demora lo hice.

-te voy a dar una mamada como nunca y probaras el fondo de mi garganta amor. Pero por hoy seré tu puta, trátame como tal. Agarró mi verga con sus dos manos siguió mamándomela después de que dejó mi verga bien mojada con su saliva me dijo. -espero que te guste amor. Y se la metió todo, no lo podía creer que garganta tan profunda, no creía que una mujer pudiera hacer eso, pero me di cuenta de que era posible. Toda mi verga entró en garganta lo puse sentir. Se la metía y tragaba toda, me excitaba ver su cara de putona y su boca de puta. Me dio por decirle cosas. - Así es puta trágatela toda. Trágatela toda puta. Así, trágatela toda. Ahora te voy a dar lo tuyo, le quité la verga de su boca y la empecé a besar. Ella aún estaba

vestida, pues sabe que me gusta desvestirla, hice lo mío, le quité el vestidito poco a poco, se quedó en tanga, como es su costumbre y como las otras veces me encantaba mamarle sus nalgas, más que todo sus piernas y el recto de su culo, e hice lo que nunca, estaba tan caliente como nunca que me dio por meterle mi lengua en el orificio de su culo, al principio le incomodó pero después le empezó a gustar, estaba acostada y levantó más el culo, le abrí las nalgas y trataba de meter toda mi lengua en su culo, me gustó su aroma y eso me calentó más. Me dieron unas ganas inmensas de metérselo, pero no me lo imaginaba y de hecho no me atrevía a pedírselo, eso solo lo había visto en películas, pero me ganó la calentura le pedí que se acomodara de perrito y como era mi costumbre siempre me encantaba torearla, le pasaba mi verga por sus nalgas y por su recto, se la pasaba por sus labios de su concha y ella trataba de ensartarse, eso nos excitaba mucho y a ella le encantaba, y empecé a jugar otro juego se la pasaba por su recto y se lo pegaba al orificio de su culo, estuve hacia unos 5 minutos, ella respondía con sus movimientos circulares de cadera, cuando paró y me dijo: - Quieres probar mi culo chiquito, no por allí no, me vas a lastimar, además dicen que duele bastante. Mejor métemelo por mi conchita, anda papito métemelo por mi panocha por allí es más rico. Pero me quedó la sensación de querer metérselo y seguí jugando con mi verga en su culito. Y le dije: -solo una vez flaca, déjame romperte tu culito solo una vez. Es más déjame metértelo solo un poco. Que dices, si. -No lo se, contestó ella, bueno esta bien, pero solo un poco y deja que yo lo vaya metiendo conforme pueda, si te digo que me duele o veo que no hay forma de que me entre así lo dejaremos y me darás por mi concha ¿ok? -Está bien, le dije. Me posesioné detrás de ella, ella estaba en posición de perrito, le di un escupitajo a mi verga, y le mamé por unos segundos el culo, para lubricarlo lo más que se pudiera, le pasé mi verga por el recto y lo puse en posición a su culo, ella movía sus caderas y trataba de abrir su culo, pero mi verga se resbalaba y cambiaba de lugar, ella seguí insistiendo hasta que sorpresa, entró la cabeza de mi verga. Pero en eso me dijo. -no me la vayas a dejar caer toda yo sola me la iré metiendo. Que sensación tan rica, me encantó sentir como su culo apretaba mi verga, al principio me lastimó un poco, pues tenia el culo súper apretadísimo, pero al mismo tiempo. ese apretón me causaba una enorme satisfacción, y eso me calentaba más, hasta que sentí que entró toda mi verga, me esforcé por metérsela lo más que pude, me encantó y

le di un gran empujón que la hizo gritar, y me pidió que lo hiciera despacio, fueron como dos o tres veces que le metí y le saqué la verga con todo el amor y cuidado, pero con eso su culo se dilató y se amoldó a mi verga, empezó el mete y saca, a ella le fascinó cada vez lo hacia más rápido, hasta que ella empezó a gritar de placer y no fue ni un minuto cuando gritó que le venia el primer orgasmo, la piel se le estremeció, su cuerpo perdió fuerza y me pidió que no parara, le empecé a dar más rápido cuando de pronto gritó ¡ya viene uno y por el culo no lo puedo creer, no pares, por favor no pares, seguí dándole más, sin parar y fue en cuestión de segundos cuando dijo otro, ahí viene otro, no lo puedo creer, dos, por favor no pares, no pares, dame más papito, soy tu puta, dame más, no pares, le gustaba la forma en que la tenia bien enculada y no tardó mucho, nuevamente cuando dijo ahí viene otro y por el culo tres por el culo, esto es genial dame más, le llegó el tercero y como siempre en cada orgasmo se pone como loca, me gusta ver su cara verla perdida y su mente vagar cuando está en el orgasmo. Después de que le vino el tercero me dijo que ahora era mi turno y que disfrutara su culo como quisiera le empecé a bombear lenta y después rápidamente, me encantaba su culo súper apretado, en una de esas embestidas rápidas le saqué los pedos, pero era rico, tenerla clavada por el culo, me gustaba ver cuando mi verga entraba, la forma en que su culo se adaptaba, después ya no era ningún problema, ya no había dolor, para ella, me causó la mejor de las sensaciones tener mi verga en su culo. Era algo que nunca pensé que haría y mucho menos con ella, pero en ese momento solo me concentraba en disfrutar su culo, cada embestida que le daba, su apretón eso me encantaba, hasta que sentí venirme y le empecé a dar con más fuerza y movimientos más sincronizados, cuando sentí que ya no aguantaría mucho, sacaba mi verga lentamente y se la dejaba caer de jalón, y ya estando adentro le volvía a dar más duro para que entrara lo más que pudiera, así hasta que ya no aguanté y me di una gran embestida, mi paralicé y no podía aguantar tan gran sensación me había venido como nunca, le vacié toda mi leche en su culo, mi verga salió con ese olor a semen y un poco del aroma de su culo, entramos a darnos un baño. En el baño me lavó bien la verga y allí dentro me la empezó a mamar. Se repego a la pared dándome la espalda y me pidió que se la metiera allí, pero esta vez en su panocha, le abrí las piernas para que pudiera entrar mi verga, una se la levanté y se la puse en la taza, para que así levantara más y mi verga entrara con facilidad, le meto mi verga y como siempre lo primero que me gusta sentir, es cuando mi verga entra por primera vez y siente lo caliente de una concha, es riquísimo, sentir sus jugos calientes y sus paredes ardiendo. Estuvimos así hasta que le vino otro orgasmo, y cuando que yo también

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me iba a venir le pedí su boca que ya quería venirme en ella, me vine y después nos volvimos a bañar y nos vestimos para retirarnos, sorpresa, ya era bastante noche, se preocupó bastante por llegar a su casa no pensaba en otra cosa, más que en eso, la llevé lo más rápido que pude, a partir de ese día, me volvía loco pensar en los culos, se volvieron mi delirio y ahora me encanta probar unos ricos culos y mamarlos, además de que ella me daba oportunidad de metérselo más seguido, pero si hay algo que me ponga como loco es probar un rico culo, y así termino agradeciéndole a ella, por iniciarme en este también sexual que es tan