Bondage

Rencien salida de la ducha, sin secarme, ya me esperas con una cuerda larga en la mano. vas a diseñarme mi traje nuevo.

Me colocas frente al espejo y comienzas a trabajar.

La expresion entre la excitacion y el asombro que veo en mi reflejo es impactante y morbosa, gracias Amo.

Comienzas a trabajar con la mirada concentrada...

Pliegas la cuerda en dos y la pasas alrededor de mi cuello, dejando caer ambos cabos a cada parte de mi cuerpo. Haces un nudo por encima de mis tetas, otro entre ellas, el tercero a mitad de camino entre el segundo y el ombligo... y el cuarto entre el ombligo y mi sexo, que sigue empapado. Me pasas la cuerda entre las piernas acomodandomela entre los labios y el culo y recorres subiendo toda mi columna pasando los extremos por el bucle del cuello, dejandolos colgar de nuevo hacia abajo. Separas ambos extremos y lo atraes hacia mi torax pasandolos, uno por cada lado justo por debajo de mis pechos.

Comienzo a verme preciosa... sonrio y me besas.

Continuas metiendo los cabos entre las dos cuerdas que forman el primer segmento y vuelves a llevarlos a mi espalda entrelazandolos alli.

Lo haces dulcemente para que ningun roce brusco me produzca una quemadura antes de tiempo.

Estas respirando tan cerca de mi l que no dejas de erizarseme la piel...

Entre tarea y tarea me miras... y admirando tu creacion me pasas la lengua calida en mi pezon izquierdo, primero, que abultandose aun mas y provocandome un dulce dolor, te lo agradece... y depues en el derecho.

Continuas entrelazandome los cabos con los segmentos, hasta que terminas.

Los dos miramos el espejo. Tu me colocas el pelo a tu gusto para terminar el conjunto, yo, medio extasiada no puedo cerrar la boca.

Me encanta Amo, gracias.

"Estas preciosa"

Si, si que lo estoy.

"Quedate aqui, no me sigas con la mirada"

Te marchas, no se donde vas. Cierro los ojos, quiero ser una perrita buena, me has hecho un traje nuevo que me encanta, no quiero desobedecerte.

Ahi vuelves.

"Vas a ponerte un vestido suave, facil de poner y de quitar, pero como estas tan excitada con tu traje, tienes los pezones bastante visibles, asi que vamos a taparlos"

Entonces coges una especie de cinta americana adhesiva negra, la cortas en dos rectagulos estrechos y me tapas los pezones. Uff va a ser bastante doloroso al despegarlo.

"Debes quedarte asi hasta que yo te de la orden, saldremos, cenaremos y durante la cena estaras pendiente de mi señal"

Uf, Amo, ¿sabes como puede llegar a excitarme eso? La imaginacion me vuela a un salon lleno de gente, a aromas de sabrosos platos, a ruidos de cubiertos, a sonidos de vasos y copas repiqueando. Tu mirada, mi excusa para levantarme, mi huida al baño... me inunda el deseo.

Busco entre mis ropas algo con las caracteristicas requeridas. Por fin lo encuentro. Es un vestido negro, corto y suelto, con el cuello alto que deja al descubierto mis brazos y mis piernas, asi tapara la cuerdas. Es facil de poner y de quitar porque solo consta de unos botones redondos en la parte delantera que al juntarlos y apretar, se encajan uno en el otro. Creo que sera perfecto.

Estamos cenando junto a un grupo de gente, gente que conocemos pero que no hemos visto nunca. Yo estoy sentada a tu lado, pendiente de ti por si en algun momento tu mirada pide algo que yo deba adivinar.

Me siento muy especial, la mejor de todas las mujeres que alli se encuentran, excitada porque se que soy tuya, hoy mas que nunca y se que manejas mis hilos. Aun asi, hablo con todos para sentir la experiencia mas intensa, saber que voy atada por mi Amo entre tantos extraños que me miran si saberlo, me despierta el morbo a cada segundo, solo es suficiente que mi mente lo recuerde para sentirme completamente humeda.

Doy un sorbo a mi ligth y noto como acercas tu mano a mi espalda y das un tiron seco y disimulado de mi ropa interior. Ha sido un momento muy excitante, que ha mezclado la vergüenza de sentirme ruborizada y el placer que he sentido tras la presion que la cuerda ejerce en mi entrepierna.

Alguien comenta mi estado de rubor, a lo que tu contestas por mi, salvandome.

"Es su estado natural y esta preciosa"

No puedo evitar mi debido gracias y casi, casi, casi, tambien digo mi palabra preferida, Amo, pero hago un sobreesfruerzo y me la trago.

Estoy tan excitada, no paro de pensar en lo que me espera la noche, en el estado de temperatura que podre alcanzar y en la manera en que conseguirar sacarme esta sensacion de orgasmo continuo que no paro de sentir.

De nuevo vuelves a tirar y esta vez un sonido agonico, un gemido contenido se me escapa. Miro a todos con disimulo comprobando si ha sido revelador o si en cambio, ha pasado desapercibido. Entre todas las miradas encuentro la tuya. Sonries, sonrio.

Te acercas a mi oido y me susurras.

"Te portas muy bien perrita, ¿has traido tu collar?"

Asiento con cara de susto y asombro. Me vas a pedir que me lo ponga uf, no se si soy tan valiente.

Desde que tengo mi collar siempre lo llevo en el bolso por si quieres que me lo ponga, es tan bonito. Pero bueno, ponermelo aqui en publico y asi de pronto me asusta bastante, aunque a la vez me haria sentir tu zorra, que es lo que me gusta ser.

Asi pues, lo saco del bolso y me lo coloco. Uf, no se si puedo explicar la sensacion que se produce en alguien como yo al ponerse un collar que demuestra ante todos que soy tu perra sumisa.

Todo el mundo me mira extrañado, es como si jugaran a encontrar las siete diferencias.

Noto como un brillo de orgullo te sale por los ojos y mi unico deseo en ese momento es arrodillarme ante ti y suplicarte que me digas a gritos, buena perrita, pero no creo que sea apropiado, tendre que esperar.

Te miro y veo como arqueas la cejas en direccion al baño, es la señal que estaba esperando. Tengo que ir al baño y quitarme la cinta adhesiva que oculta mis sufridos pezones. En seguida lo hago, necesito liberarlos, sentir sobre ellos el roce de mi vestido e incluso, en un oculto desear, necesito tambien que los demas noten lo excitada que estoy.

Me dirijo al baño, vuelvo la mirada antes de entrar y veo que me miras, sonrio. Entro en una de las puertas, cierro el pestillo y me quito el vestido, me acaricio las cuerdas... cierro los ojos y disfruto de esa sensacion. Justo despues intento despegar por el filo la cinta... esta bastante pegada... se que me va a doler y que me provocara una irritacion bastante dificil de disimular en mis pezones, eso me excita. Asi que tiro despacio, como queriendo disfrutar el momento y por si despues tu quieres que te lo cuente, no quiero perder detalle. Una vez libres, mis pezones arden y adquieren una dureza como el diamante, me asaltan fuertes ganas de ir fuera y mirarme al espejo, quiero ver la imagen que despido con mi traje nuevo y mis pezones recien liberados. Intento oir a traves de la puerta si hay alguna chica en la zona de espejos y no oigo nada, es algo arriesgado salir asi fuera, puede entrar alguien y verme con mi traje de zorra sumisa, pero mis ganas de mirarme superan el miedo al riesgo y con el vestido en la mano salgo fuera. Me gusta muchisimo verme asi, me gusta muchisimo lo que me hace sentir y embobada, queriendo quedarme alli mirando mi reflejo durante toda la vida, oigo el ruido del picaporte, corro de nuevo al baño y cierro la puerta... no puedo evitar reirme. Me coloco el vestido rapidamente y salgo muy feliz de nuevo a tu encuentro.

El vestido marca considerablemente mis pezones, noto como varias miradas se dirigen a mi, me da cierta verguenza pero el morbo que me proporcina es bastante mayor.

Me acerco a ti, me miras y me susurras de nuevo.

"Eres una buena perrita, ahora estas mas preciosa aun"

Y un escalofrio me recorre desde el coxis hasta la nuca, tras la cuerda... te deseo Amo, soy tuya.

Uno de los conocidos se me acerca, me agarra de la cintura y me dice algo al oido... -me gusta tu collar- le sonrio mas halagada de lo que el cree. Te miro, estas a otras cosas y considero que puedo seguir hablando con el. Tengo curiosidad de saber con que intencion me dijo aquello y asi le pregunto que por que le gusta, me contesta que me queda muy bien y que me da un aire de sumisa. Uf eso no me lo esperaba... no se si tengo permiso para ser deseada por otros solo por ser sumisa, no tengo ordenes sobre eso, asi que intento alejarme. Como me tiene agarrada por la cintura, al retirarme su mano se desliza por mi espalda y nota las cuerdas. De nuevo me sonrojo y lo miro para comprobar que cara se le ha quedado, si sabra que es o si simplemente no se ha percatado. Pues parece que si, su sonrisa y sus ojos asi lo demuestran.

Entonces corro a tu lado, necesito tu proteccion, sentirme segura y sentir que no hice nada malo, que todo va bien.

La gente se va marchando y al final, el conocido se vuelve a acercar a nosotros. Habla contigo, tu pareces contento y orgulloso, asi que todo va bien.

Salimos de alli los tres y tu me preguntas...

"¿Que te parece si le enseñamos tu traje nuevo?

Como supuse, al rozar con sus manos la cuerda, el conocido sabia de que iba todo, asi, que orgullosa de que pueda ver lo guapa que me ha puesto mi Amo, le contesto que me encantaria enseñarselo.

En el camino hacia el hotel me siento muy excitada, el roce de la cuerda, el morbo de que alguien me vea con ella... aunque tambien me ronda la preocupacion, no se si mi Amo querra que el conocido me use. Parece que me adivina el pensamiento y me dice delante de el.

"No va a tocarte por ahora pequeña, solo puede mirar"

Eso me tranquiliza y me excita aun mucho mas... mi Amo siempre me cuida y sabe hacer a la vez que este caliente como su perra que soy. Si despues decide que el conocido puede usarme, sera porque sabe que yo tambien lo deseo.

Llegamos al hotel y ya en la habitacion sin darme tiempo a entrar si quiera, tira de mi vestido y me deja solo con el traje nuevo.

El conocido parece satisfecho con mi imagen, mi Amo aun mas. El sentirme observada asi, como una zorra sumisa atada por su Amo me hace mojarme... noto mi coño como se humedece por momentos. Te acercas a mi y me rozas entre las piernas con tu mano para ver lo mojada que estoy... y despues, tiras de la cuerda obligandome a soltar un gemido liberador.

"¿Quieres que vea como me sirves zorra?" me susurras al oido, me muerdes el cuello... me siento totalmente entregada, excitada... ansiosa.

Si Amo, me gustaria mucho.

Y me muerdes los pezones agarrandome las tetas con fuerza, me duele, me gusta... soy una zorra.

"Arrodillate zorra, quiero que vea como disfrutas con la polla de tu Amo en la boca"

Obedezco, dios, cada segundo que pasa el calor y las ganas de ser sometida van subiendo. De rodillas, a tus pies, metes tu polla en mi boca y me agarras del pelo adentrandote en ella.

De reojo miro al conocido y entre sus piernas noto su excitacion... le gusta mirarnos y a mi me gusta que me mire, me gusta que sepa lo zorra que soy.

"Levantate"

Me levanto y me vendas los ojos. Comienzas a desatarme hasta dejarme desnuda, me acomodas apoyando mis manos en la cama, me abres las piernas exponiendome a cuatro patas, dejando ver bien mi sexo empapado y mi culito cerrado.

Me encanta estar asi Amo, totalmente sometida a ti...

Me azotas los cachetes, una vez, otra, intercalandolos con presiones calmantes, Me abres los cachetes y noto tu lengua lamiendome el culo, me separas los labios y sigues urgando con tu leguna, no paro de gemir, de arquearme... me gusta Amo, me lames con hambre, me chupas...

De pronto noto tu dedo introduciendose en mi coño con fuerza, dos dedos, tres... ufff ...

Ahora lo intentas con mi culo, se resiste pero lo undes sin piedad y tras la primera resistencia y con un grito de dolor, lo adentras moviendolo en circulos... uff me gusta mucho Amo. Imagino al conocido sentado en la silla, viendo como violas mi culito con tu dedo... eso hace que me guste aun mas y te suplico que sigas. Metes otro dedo y lo hundes, ya desaparece por completo el dolor, solo existe el placer.

Ahora noto como intentas meter tu polla, de nuevo mi culo se resiste un poco y comienzas a abrilo poco a poco... gimo, me gusta Amo... y asi, oyendo mis gemidos, mis suplicas y mis gritos me la metes hasta el fondo, dandome cachetadas en cada embestida... una vez, sacas y de nuevo empujas ahora con mas fuerza... grito y me azotas, dos, sacas y vuelves a adentrarte con fuera, la dejas dentro, presionando... uff Amo, quiero correrme Amo, te suplico que me dejes hacerlo.

"Correte para tu Amo, zorra" consigo apenas oir entre mis gemidos.

Y mientras tus embestidas continuan, consigues que me corra como una perra caliente ensartada por su macho, quedandome extasiada, satisfecha, derrotada y vencida reposando mi cuerpo sobre la cama. Asi, noto como sacas tu polla y como te corres sobre mi, noto tu semen caliente sombre mis nalgas.

Me quitas la venda y cuando mis ojos se acostumbran a la luz... te veo justo frente a mi, sentado en la silla que antes ocupaba el conocido, con tu polla dura y jugosa, mirandome... y a mi lado, el, con la venda en la mano.

"Ven y chupamela pequeña"