Boda con sorpresa...
Una chica abandona una boda antes de tiempo... descubriendo que su peor pesadilla es también su mayor fantasía.
Erase una chica de 30 años recién cumplidos.
Unas caderas bien curvadas y unas tetas que habían marcar tanto sus pezones en la ropa que solía llevar en la tienda que los hombres hacían cola en su mostrador.
La historia empieza cuando decide abandonar a mitad la celebración de una boda, en las cercanías de Madrid, por un dolor de cabeza que la estaba fastidiando. Iba acompañada, pero como tenía las llaves del coche y no veía a su acompañante decidió irse sola al hotel donde pasarían la noche.
Llevaba un vestido azul celeste abierto por la parte de atrás hasta casi la cintura y por delante con escote de media luna.
El aparcamiento está oscuro, pero al estar cerca de la entrada el coche, avanza hacia allí con sus tacones como único sonido en el parking, pero justo cuando iba a meter la llave para abrir la puerta... una mano la tapa la boca y es agarrada por la cintura.
Sin miramientos, es introducida en una furgoneta justo al lado del coche de alquiler. Allí la tiran a un colchón que cubre el suelo y sus manos son atadas a la espalda, para luego amordazarla y atar también los tobillos juntitos.
Arrancan y escucha moverse la furgoneta hasta llegar a un descampado...
Se detiene la furgoneta y ponen una venda en los ojos de la chica antes de encender la luz de la parte de atrás... cosa que deduce cuando es agarrada para desatar los brazos de su descubierta espalda antes de atarla esta vez por las muñecas a los extremos del techo de la furgoneta para que quede en pie con los brazos alzados y abiertos al máximo. Escucha como se desnuda sus captores, acercándose por delante y por detrás.
Nota sus alientos... siente sus manos rozar el cuerpo sobre el vestido... y empieza a notar el roce de una mano por la espalda descubierta bajando hasta meterse bajo la parte final y llegar a la braga, metiendo dentro la mano y acariciándo con fuerza los labios vaginales.
Mientras, el que está delante suyo, procede a usar su lengua y su boca sobre los desprotegidos labios tras quitar la mordaza... para luego ir bajando por su cuello con su lengua hasta dejar un camino de babas hasta el escote... antes de introducir una mano y empezar a palpar las tetas desnudas sin sujetador bajo ese vestido que apenas resiste cubriendo una mínima parte del cuerpo... sin que pueda ofrecer resistencia inmovilizada en las muñecas y con los tobillos atados fuertemente...
La chica no puede evitar excitarse, pues siempre había tenido la fantasía de ser violada por unos desconocidos y empieza a correrse sin poder evitarlo.
Al notar su excitación los secuestradores pasan a la acción, el de delante agarra el vestido y lo rompe por la mitad, quedando colgado de los hombros.
El de atrás rompe la braga de un tirón y empieza a meter los dedos a la fuerza dentro de esa conchita mojada sin que pueda mover las piernas ni para impedirlo ni para ayudar...
Durante esos momentos, el que está delante aprovecha para comerse las tetas y pellizcar duramente los pezones cuando abandona una teta para pasar la boca a la otra... antes de volver a comprobar con la boca cómo tienes el pezón castigado. Y durante todo este tiempo, la chica nota las pollas duras y húmedas golpeando y dejando un rastro de líquido sobre caderas y piernas según la van rozando.
Aún tiene los tobillos y muñecas fuertemente atados imposibilitando que pueda escapar o dejarse llevar por sus instintos sexuales primarios... aunque al encontrarse con la boca libre, su consciencia la obliga a gritar pidiendo ayuda.
La respuesta a sus chillidos pidiendo auxilio se nota rápidamente. El de delante la pellizca ambos pezones duramente mientras el de atrás agarra con dureza la conchita con una mano y tira de la cabeza hacia atrás agarrándo del pelo. Luego te suelta de golpe y cambia de idea para azotar el culito con la mano durante cinco largos minutos... durante los cuales la chica sufre más pellizcos pezonares.
Cuando por fin se da cuenta de que la han soltado los tobillos no puede evitar que vuelvan a estar presos, esta vez por separado, obligándola a abrir al máximo las piernas y ofrecer sin resistencia toda su conchita. Nota como echan una espuma sobre sus pelitos protectores y como lentamente van depilandola la conchita... mientras el de atrás vuelve a tocar su vaginita con los dedos y sufre pensando que pueden cortarla si no deja de arquearse con el placer que obtiene de esos dedos... Cuando terminan de depilarla, nota que han puesto una especie de tubo en su ano por el que empiezan a meter una especie de líquido viscoso... no sabes qué es pero teme lo peor... y en efecto, al poco empieza a notar como una polla entra en su ano... ¡era lubricante!... y... ¡antes de darse cuenta la clavan una segunda polla por delante!. No puede impedirlo.
Atada de pies y manos en una X perfecta está siendo empalada por vagina y ano a la vez mientras sus tetas son presa de toqueteos de cuatro manos y una boca... porque la segunda boca está lamiendo la espalda y las orejitas mientras la agarran a veces del pelo...
Intenta de nuevo gritar pidiendo ayuda para ser liberada de tan cruel rapto... pero vuelve a sufrir las consecuencias de la soledad del descampado.
El que la está follando el ano empieza a darla tortas con la mano al ritmo de sus embestidas durante otro largo minuto mientras el que está follandola la vaginita saca su polla y la obliga a chuparle los dedos empapados en una mezcla de fluídos vaginales y líquidos preseminales antes de volver a meterla de un golpe su dura polla dentro de tu vagina húmeda y caliente. Se detienen y sacan ambos las pollas.
La meten sus propias bragas en la boca (lo sabe por el olor y sabor) mientras desatan las muñecas del techo para hacer que la chica se doble por la cintura y atarla ahora las muñecas a los laterales de la furgoneta. Repiten lo mismo con los tobillos tras ponerla un apoyo en el abdomen.
Queda así paralela al suelo y manteniendo la postura de X completamente expuestos sus genitales a los secuestradores... pero que ahora los abandonan para castigar definitivamente su falta de obediencia. Retiran las bragas de la boca y primero una polla y luego otra entran en su boca, obligándola a chuparselas y dejárselas limpias tanto la que tiene una mezcla de líquidos vaginales-preseminales como la de lubricante-preseminal.
Se van alternando sus pollas en tu boca mientras sufres tocamientos externos del conejito depilado a la fuerza... hasta que deciden soltar toda su leche dentro de la boca de la chica y descansar un rato divirtiéndose con esas ricas tetas que cuelgan hacia el suelo así como de la vaginita expuesta mediante el uso de sus dedos... sabiendo que estas nuevas atenciones son sólo el preludio de la reaparición de sus erecciones y la completa penetración y violación que la tenían preparada por haber abandonado la boda tan pronto...
Por tercera vez intenta pedir ayuda... pero casi antes de poder articular una palabra, uno de los secuestradores empieza a darla tortas en el culo hasta dejarselo rojo y hacerla callar.
No contentos, la obligan a mamarles de nuevo las pollas hasta conseguir reactivar sus erecciones dentro de tu boca e incluso que uno vuelva a soltar su leche... pero sólo parte dentro de la boca porque antes de terminar saca la polla y la rocía el resto por la cara.
Mientras, el otro se pone entre sus piernas y sujetandola por las caderas empieza a jugar con la cabecita de su polla en la conchita... rozándola, paseándola entre los labios vaginales... hasta meter la puntita de la cabeza y empezar un lento mete saca con sólo la puntita de la cabeza de la polla. A la vez el que se ha corrido en tu cara restriega la polla por sus tetas para limpiarsela y vuelve a ponersela en la boca para que la chica termine la limpieza. En ese momento el que estaba jugando aprieta sus manos contra la cintura de la secuestrada y clava de un golpe la polla hasta el fondo...
El que tiene su polla en la boca, agarra con fuerza el pelo de la chica para obligarla a no separar la cara y que tenga que hacerle una buena limpieza de su polla entumecida... mientras el que está detrás suyo mantiene un rato su polla completamente dentro de la vagina de tal forma que la chica nota sus huevos contra sus labios vaginales. Pero pronto termina la inactividad... empieza a sacar lentamente su polla hasta dejar sólo la cabeza... y empieza a follarla de nuevo sólo con la puntita... y luego se la vuelve a clavar entera. Repite esta operación otras cinco o seis veces... pero después ya pasa a embestir fuerte y de forma continua sin permitirla un respiro, pues aún tiene la otra polla creciendo dentro de la boca y sabiendo que en cualquier momento puede ser objeto de una doble emisión de semen caliente en su cuerpo por arriba y por abajo...
Justo cuando nota que van a eyacular dentro de su vagina, se para y acercándose a la boca la obliga a abrirla al máximo para rociar directamente con su leche el fondo de la garganta profunda...
Y vuelven a cambiarla de postura. La suben un poco las piernas y retiran el apoyo del vientre. Después atan las muñecas más hacia delante de forma que apoya las manos en el suelo y queda formando un ángulo de 60º dejando la conchita expuesta al máximo pero con la boca a salvo de nuevas lechadas... Para divertirse, se dedican a pellizcar los pezones al máximo unos minutos mientras uno usa la mano libre para mantener la conchita abierta y mojadita... para al cabo de un rato levantarse y ponerse detrás de la indefensa chica, colocando esta vez su polla en el ano. La mete de un golpe haciéndola daño, pero no se detiene y empieza a bombear con fuerza mientras el otro secuestrador se entretiene jugando con su lengua en las preciosas tetas. Esta vez te folla hasta eyacular dentro de tu ano... la chica entiende que la próxima polla visitará su conchita y sólo ve una solución para tratar de impedir que rellenen de semen su vagina. Les dice chillando: soy vuestra puta y podéis hacer conmigo todo lo que queráis.
Eso estaban esperando oir... Inmediatamente la desatan y quitan la venda... para descubrir que sus secuestradores y violadores desconocidos eran en realidad el novio recién casado y su propio acompañante... descubriendo que ella era el regalo de bodas especial que no la habían querido decir en qué consistía.
Para terminar la noche, ella se pone a cuatro patas y les exige a los dos una última penetración... esta vez con preservativos... antes de volver al hotel a descansar antes del viaje de regreso a la monotonía del trabajo diario...