Biografía sexual (5)

En esta oportunidad les relatare un hecho que se desarrollo en el año 2002, y tal vez unos de los más arriesgado de mi vida. Hay Fotos.

Biografía sexual (Quinta Parte)

Hola amigos de Todo Relatos, como estas?, en esta oportunidad les relatare un hecho que se desarrollo en el año 2002, y tal vez unos de los más arriesgado de mi vida.

Como recordaran, yo a esa altura de mi vida tenia un amante infiel, llamado Mario, amigo de mi novio Hernán; le debo contar que estaba llevando una doble vida, ya que compartía mis sentimientos y mi cuerpo entre Hernán y Mario, claro esta que el primero era el oficial, pero les debo confesar que estaba muy mal con el, dado que estaba compleménteme confundida emocionalmente, y para colmo, cada día que pasaba me estaba comportando como una autentica puta, y eso me gustaba mucho, prueba de ello es el relato que le paso a comentar a continuación:

Recuerdo que un día jueves alrededor de las 12:30 me llamo mi novio a mi trabajo para decirme que esa noche teníamos una cena con Mario y su esposa en su casa, y que irían además el abogado de la empresa de Hernán, llamado Julián con su esposa Cristina. Yo inmediatamente al escuchar tal noticia le hable al celular a Mario para preguntarle por que había organizado un asado con mi novio y su amigo, y el muy sádico me contesto que era una cena de trabajo - ya que iban arreglar un negocio - y además para que yo me diera cuenta que lo nuestro no podía ser, y así poder tomar distancia entre ambos; entonces ofuscada le conteste:

Pero que necesidad hay de juntarnos todos, mi novio, tu esposa y yo?, le pregunte

Para que caigas de las nubes nena, y te des cuenta que lo nuestro es una fantasía, que nunca vamos a tener algo serio, yo tengo una familia, y vos tenes novio, madura pendeja, y me corto, yo me quede con la palabra en la boca y eso si que me molesta mucho

Velozmente al salir de mi trabajo me dirigí al departamento de Hernán para hablar del famoso asado de esa noche en el domicilio de Mario; entre sin tocar el portero eléctrico ya que tenia una juego de llave, al entrar no escuche ruidos algunos, pensé que Hernán no estaba, me dirigí hacia su cuarto y cuando iba a entrar vi algo que me dejo paralizada, allí estaba Hernán frente a su computadora viendo una foto digital de la cola de mi madre de la fiesta de egreso mi hermana - leer relato 4 - sentado en una silla con los pies estirado y con su pene afuera, y una de mis tangas rehollada en su miembro, obviamente se estaba haciendo una espectacular masturbación inspirada por mi tanga y el culo de mi madre. Yo solo escuchaba los sonidos que producían aquellos movimientos, ya que Hernán frotaba su miembro con mi tanga muy rápidamente, solo salían gemidos de su boca, yo me quede impresionada de esa imagen, mi novio era un depravado morboso, quizás mas aun al ver que el se calentaba con el culo de mi mama.

A todo esto Hernán no se percato de mi presencia, siguió con su actividad lujuriosa - estaba escuchando música a través de su auriculares del MP3 -; era un momento de confusión para mi, yo estaba parada en la entrada de su habitación, sin hacer nada, viendo como se masturbaba y de repente sentí nuevamente ese cosquilleo de saberme admirada y deseada, además ahora también notaba que me gustaba espiar y así como estaba, de pie con las piernas abiertas, me subí las faldas por encima de la cadera, bajé la mano hasta mi vagina, corrí mi tanga y allí aprecie que estaba hipersensible y mas que húmeda mi concha, entonces empecé a masturbarme como si la vida me fuera en ello, mientras no quitaba la vista en la verga de Hernán, de pronto vi como un gemido hizo estallar a mi novio retorciéndose ahí sentado, y un potente chorro de semen rociaron mi tanga, era tan pervertida y depravada esta imagen que mi propio orgasmo subió como un surtidor entre mis piernas y entre gritos contenidos yo también me corrí como una perra, sin ningún sentido de la vergüenza o de la moral.

Luego me marche sin hacer ningún tipo de ruido, pero esa imagen de mi novio masturbándose con la foto digital de mi madre me indigno muchísimo – a pesar que me había excitado -, por eso decide vengarme, y la mejor forma posible era vestirme muy provocativa para que el se excitara y luego caiga rendido a mis pies.

Por eso esa noche para ir a la cena me puse una minifalda roja súper corta con un tajo en unos de los laterales, una tanga bien de puta que no había estrenado todavía, color oro y negra muy chiquita, con una fantasía de mariposa, pero lo mas llamativo era que adelante era abierta, o sea que se me veía mi vagina; lo combine esa tanga con media con pretinas hasta mis muslos color piel y una remerita color crema muy ajustada que me marcaba muy bien mis senos, y por supuesto tacos altos; el toque de distinción es que me ate el pelo con una colita – en ese momento de mi vida estaba rubia, ya sabes, yo cambio mi aspecto como Madona – jajajaja - ; Hernán a ver me recriminó que estaba muy zafada con esa vestimenta, ya que iríamos a un cena con gente amiga, pero no le hice caso y fui así vestida.

Al llegar a la casa de Mario ya estaba Julián preparaban el asado, Marina - esposa de Mario - y Cristina - esposa de Julián - estaban haciendo distintas tipos de ensaladas; lo primero que me llamo la atención fue Marina, ya que esa noche llevaba un pantalón rosa muy ajustado, que transparentaba una bombachita tipo vedetina color rosa y una remera muy ajustada negra, con un escote pronunciado que resaltaba sus tetas, lo que impacto que ella hasta ese momento no tenia nada de tetas, pero al verla ahora si, evidentemente se había puesto nuevas lolas.

Marina tenia aproximadamente es esa fecha 30 años, sus labios son carnosos y ojos oscuros con una mirada muy profunda, pero su rostro no es lindo, es bastante fea a mi modo ver, además siempre fue muy conservadora para vestirse, pero al parecer Mario fue paulatinamente cambiando su personalidad, al punto de vestirse muy provocativamente, mi novio al verla se queda sorprendido de su cambio de look, pero inmediatamente se puso a ver el asado, y como buen asador que es le recrimino el método de cocción y se puso hacerlo el mismo, mientras tanto Mario me pido que le ayude a traer los platos y vasos de la cocina, yo acepte con gusto y nos dirigimos para allá.

Cuando estuvimos solo en la cocina Mario me dijo:

Que sexy estás con esa mini falda!, me piropeó

Gracias, le contesté agradecida, aunque mi pulso comenzó a acelerarse

Es la verdad, esta infernal

Escucha Mario, por favor no me vuelas a corta la llamada nunca más, entendiste?, mientras le di la espalda y me apoye sobre la mesa para buscar los platos.

Al verme Mario de espalda y apreciar mis culito con esa mini tan corta se pegó a mí por detrás, juntando su pelvis a mi culito, lo que hizo que todo mi cuerpo sintiera un escalofrío, así permaneció unos segundos y yo no hice nada durante ese tiempo, me estaba calentando por momentos y me gustaba sentir la dureza de su miembro en mi culo.

Como aquello no le pareció suficiente, sus manos agarraron mi cintura y subiéndolas lentamente acarició mis pechos por los costados de mi remerita, fue entonces cuando me separé de él y le dije:

Estas loco Mario?, le dije con enfado, mientras gire de forma brusca hacia el, quedando cara a cara

Acaso no te gusta?, preguntó con ironía y con cara de vicio

Definitivamente no, estas loco, se le dije mirándole sus ojos

Vamos Vale, se que te gusto

Lo cierto es que lo que decía era verdad, estaba muy encendida, casi fuera de mí y lo que más deseaba era ver su pija a tope y sentir sus manos sobre mi piel, meterme su aparato en la boca o sentirle entre mis piernas, pero no podía ser, mi novio y su esposa estaba en el quincho del patio esperando por nosotros, no podía ser, era una locura, pensaba yo.

Mario no insistas por favor, quieres que se lo diga a Hernán?, le dije de nuevo a modo de amenaza (que amenaza tonta) con la intención de que abandonara su actitud

Jajajaja, dale, no seas tonta, si vos tenes ganas, te morís por coger ahora

No lo negué, pero tampoco dije nada, me apoyé semi sentada en la mesa de la cocina esperando su nueva reacción, el inmediatamente se colocó frente a mí y me preguntó:

Quieres ver mi pija como la tengo?

No Mario, por favor, Hernán y Marina puede venir

Mejor aún, me encanta el morbo de poder ser descubiertos

Pero Hernán es mi novio y es tu esposa

Y tú eres una preciosidad y te deseo, lo demás no importa, además noto como estás caliente, no te gustaría coger acá?

Como sabía el muy cabrón, yo estaba caliente, muy caliente, entonces Mario cumplió sus palabras y se bajó su pantalón quedando desnudo frente a mí, esta vez su pija se mostraba a pleno rendimiento, era un aparato hermoso, su pija brillaba igual que mis ojos que no apartaban la vista de él, me quedé inmóvil, en la misma posición con mi culo apoyado en la mesa de la cocina.

Mario por favor, le supliqué aunque en el fondo me fascinaba verlo así

Luego el se acercó hasta mí, me agarró por la cintura, me separó las piernas y se apretujó contra mí, al principio yo me dejaba hacer, no sabía lo que me pasaba, pero no era dueña de mí, la locura había llegado al máximo, o aún no?; el apoyo su pene en mis piernas y gracias a la altura de la mesa su sexo quedó a la altura del mío, percibiendo su calor y la dureza de su pene desnudo sobre mi choncha a través de la tela de mi falda. Le separé de nuevo empujándole por el pecho.

Para ya por favor

Por un momento miré a la puerta para ver si venia alguien, pero Mario volvió al ataque pegándose a mi de nuevo y me acariciaba las tetas por encima de la remera, evidentemente me entregué a sus caricias, era algo contra lo que no podía luchar y era lo que más deseaba. Comenzó a besarme primero en cortos y suaves besos sobre mis labios, que acabaron siendo apasionados, cuando nuestras lenguas se juntaron en nuestras ardientes bocas, yo estaba a tope, sin importarme nada, es más, me excitaba mucho la idea de poder ser descubierta por mi novio y Marina.

Me fue quitando despacio la remera, luego siguió con mi corpiño hasta que mis tetas quedaron libres, empezó con el chupeteo sobre mis tetas pellizcando mis pezones con sus dientes, a mí me encantaba, estaba alucinando, un gusto tremendo me invadía, después me levanto mi falda por completo, quedando solo con la media y la tanga. Él parecía estar disfrutando igual que yo con la situación, luego se agachó frente a mí e intentó bajarme la tanga, yo me resistí agarrándolas fuertemente y tirando de ellas hacia arriba, y me dijo:

Que tanga de puta que tenes Vale, son una hija de puta, me volves loco, te la pusiste para mi?

No, no, por favor, no sigas, le dije en voz baja, sintiendo aquello como algo que no parecía tener remedio

Cállate putita ….

No, por favor

Mmmmmm, que tanga, como me calienta, pero debería depilarte completamente la concha Vale, sin nada de pelos?

El no se hizo esperar, me giro 360 grados quedando contra la mesa, se agacho y metió su cara entre mis piernas devorando literalmente mi sexo, mis ingles, mi clítoris, a través del hueco de la tanga. El gusto fue en aumento, yo estaba como loca, abría las piernas inconscientemente para que pudiera llegar mejor a todos los rincones de mi sexo.

Me estaba dando un gusto fuera de lo normal, sus labios jugaban con mi concha y sus manos pellizcaban mis pezones. Luego se incorporó, coloco su pija en la abertura de mi tanga, y empezó a pasarla arriba y abajo por mi rajita, intentaba ir metiéndomela, pero yo aún sentía cierta culpabilidad a pesar de estar muy caliente.

No, por favor, no hagas eso, Mario.

Él insistía e intentaba por todos los medios introducirlo en mi interior, mientras yo seguía resistiéndome, pero era en vano, pero le suplicaba:

No me la metas, por Dios, no, no, le dije nerviosa, aunque lo que más deseaba era tenerla dentro de mi, partiéndome en dos

Otra vez intento para entrar en mi y otra vez yo me resistía, aunque cada vez con menos intensidad

No, no, no, Mario... por favor

Y al fin me insertó de golpe casi la mitad de su miembro, yo me moría de gusto.

Ohhh, Dios, no, no, no.... ohhh, si, si, si., gemía yo entrecortadamente

Volvió hacia atrás sacando casi por entero su pija, hasta introducírmela por completo, así permanecimos unos segundos, sentí un gusto increíble cuando estaba completamente metida y eso que parecía que no me iba a entrar. Mario comenzó a moverse adelante y atrás metiéndomela con fuerza, hasta que sus huevos chocaban contra mí culo, su miembro se adaptó a mi mejor de lo que esperaba, sabía mover las caderas como nadie, sabía buscar y proporcionar el máximo placer. Estábamos allí contra la mesa de la cocina, yo de espalda y el metiéndomela por atrás, sudando con nuestros desnudos cuerpos, mientras yo le decía en voy baja:

Sii, siiiiii, siiiiiiii, cogeme con todo.

No tardé en notar la proximidad del orgasmo y fue entonces cuando el gusto invadió mi cuerpo, llegando desde mi clítoris hasta cada centímetro de mi piel, viviendo un orgasmo increíble, aunque no podía expresar mis gritos de gozo, ni mis jadeos, pero fue increíble, al rato Mario, aceleró el ritmo, chocando contra mí con mucha fuerza y de pronto paró en seco con toda su verga dentro de mí, inundándome con su leche, yo podía notar como a cada espasmo de su pene, su semen bañaba mis entrañas, mientras el me apretar mis tetas bruscamente, pues también pareció tener un buen orgasmo ya que sentía que no paraba se salir semen de su pija, el muy cabron me había llenado mi concha de leche.

Luego me di vuelta y nos quedamos unidos un rato, sin saber muy bien lo que me había pasado. Por un lado me sentí en la gloria, pero por otro no podía remediar un sentimiento de culpabilidad y sentirme como una zorra, pero de repente escuchamos la voy de su esposa desde lejos:

Mario donde estas?

Aquello me hizo volver a la realidad y precipitadamente Mario contesto

Si cariño, estoy en la cocina, ya voy

A toda prisa volví a ponerme la mini falda, el corpiño y la remera, pero en cambio Mario se tomó su tiempo mientras me sonreía y me miraba detenidamente, no parecía importarle nada ni nadie, allí el me pido la tanga con recuerdo, yo por supuesto le negué tal petitorio, y me cambie lo mas rápido posible.

Apenas dos minutos entro Marina a la cocina, nos miro sin entender mucho, y nos dijo:

Ya esta el asado

Ahí vamos, le contesto Mario

Al llegar al quincho Hernán me pregunto por que había tardado tanto, yo le conteste que se me había roto la media y por eso me retrase, el se trago el azuelo y empezamos a comer como si nada.

Yo apenas pude hablar durante la comida, me encontraba mal, me sentía angustiada, abochornada y para colmo sucia, ya que me encontraba allí con mi vagina choreado semen, en cambio Mario como si nada, es más, mirándome fijamente a los ojos y a modo de broma le decía a Hernán:

Oye, está buenísimo, hacía tiempo que no me comía un asado así

Hernán entendió que lo decía por el asado, pero yo sabía que no era eso exactamente a lo que se refería, e insistió con su ironía

Que rico está, mmmmmm, esta muy sabroso la carne.

Te gusta en serio?, le dijo Hernán

Esta de 10 esta carne, hace mucho que no comía este tipo de carne, mientras me miraba a mí fijamente

Que sinvergüenza, yo me encontraba echa polvo y él como si nada, acabábamos de hacer algo increíble tan cerca de Hernán, y para colmo Mario estaba restregándoselo a su amigo, aunque éste no se diera cuenta, sentí odio por él y por mi misma, me sentí fatal, en serio, estaba muy mal.

Luego de cenar las mujeres empezamos a levantar la mesa, Marina se disculpo con nosotras un ratito ya que la llamaba Mario, entonces se dirigió hacia su dormitorio; yo me queda hablando con Cristina en la cocina de nuestras profesiones – ella es medica, con especialidad en ginecología -. Les cuento que Cristina es una chica muy flaca, alta, con pocos senos y una cola parada, que no se viste para nada sexy, es mas, nunca usa nada apretado, y esa noche no fue la excepción, ya que tenia puesto un pantalón de Jean suelto y una remera poco ajustada.

Bueno, volvamos al relato, al cabo de 15 minutos aparecieron los dos nuevamente, Marina estaba distinta, estaba colorada y agitada, y cuando se dio vuelta para acomodar algo sobre la mesa allí descubrí que no llevaba nada debajo de ese pantalón rosa que le quedaba tan bien, eso me dio muchos celos y rabia, ya que obviamente se fueron a su habitación para echarse un polvo.

Luego nos sentamos nuevamente a la mesa para tomar unos Fernet con coca y ver una película, Mario apago las luces de la sala y se sentó al lado mió y de Hernán; en un momento de la película, yo me subí mi mini lo máximo que puede, para que Mario viera mis piernas, luego mi sorpresa fue muy grande cuando note que Mario tocaba mi pierna con su mano, mire a Hernán, pero estaba muy entretenido viendo la peli, yo excitada por la situación puse mi mano por encima del bulto de Mario, el me miro, luego agarre su mano y la puse en mi pierna y poco a poco fue llegando a mis labios vaginales por la abertura de mi tanga, que en ese momento estaban hinchados y muy mojados, el se puso loco de caliente, yo estaba hirviendo como nunca, y al ver que nadie se daba cuenta ya que todos estaban muy atento en la película - tape mis piernas con una servilleta para mas seguridad -, Mario introdujo un dedo sin ninguna dificultad, por lo que decidió sacarlo y meter dos, yo no sabia que hacer ni a quien mirar, Mario me estaba cogiendo con sus dedos delante de novio y su esposa, esto me ponía cada vez más y más caliente, me mordí los labios para no gritar de placer, y en ese momento una oleada de calor me recorrió todo el cuerpo, estaba pronto por llegar a un orgasmo, y eso no quería que suceda, por eso agarre la mano de Mario y saque sus dedos de mi choncha, inmediatamente el se llevo los dedos a su boca y la chupo mirándome a la cara.

Luego fui al baño a límpiame, me lave la cara con agua fría, para despejarme de la calentura, yo estaba inclinada en el lavabo con los ojos cerrados pensando en lo que había ocurrido, y de pronto unas manos presionaron mi cabeza contra el grifo, era Mario que me apretaba su pija contra mi culo, me asuste, pero estaba tan caliente que no le dije nada, me tapo los ojos con sus manos y me empujo hacia el water cerrando la puerta con violencia, me agarro por detrás aplastándome las tetas con sus manos por encima de la remera, me dio la vuelta y me sentó en la taza del water, me agarro las manos y me las puso encima de su paquete. Yo estaba como una loca, lo único que quería era hacerle una mamada, empecé a tocársela por encima del pantalón, pero mi ansias me hizo bajarle la cremallera, meter mi mano y sacársela, estaba caliente y su punta muy mojada, me la metí en la boca y empecé a chupársela mientras yo me tocaba mi concha.

Mientras se la chupaba con ganas, el me subió la remera junto con el corpiño hasta el cuello y amasaba mis tetas reduciéndome dolor, en ese momento saque su pene de mi boca y le dije:

Sos un hijo de puta, te cogiste a tu mujer también?

Si, la cogi pensando vos

Y que te imaginaste?

Que te cogia en mi cama matrimonial y vos tenias puesto su juego de lencería

Mmmmm Bebe, eso me calienta mucho, mientras se le empecé a chupar fuertemente

Luego me apartó mi boca de su pija, me levanto y me dio la vuelta, subió mi falda, de un empujón me puso contra la pared haciéndome que me agachara dejando mi concha a su entera disposición, con su mano la puso en la entrada y de un solo golpe me metió la pija hasta dentro, sus huevos golpeaban contra mi culo a cada sacudida, era tan excitante la situación que me llegue rápidamente, él lo noto, y después de bobearme un poco más, la saco por completo, tenia la pija totalmente mojada gracias a mi orgasmo, y allí le dije:

La puta de tu esposa no te la chupo?

Siiiiiiiii, mientras yo fantaseaba que ambas me la chupaban

Jajajaja, eso no va pasar, pero te gusto?

Si, pero no se trago mi leche

Queres eso?

Siiiiiiiiii, me contesto

Entonces el me sentó en la taza del water, empujó mi cabeza hacia su pija y empezó a meterla y sacarla de mi boca, al cabo de unos minutos un chorro de leche caliente me lleno la boca por completo, estaba tan excitada que me trague todo hasta que no saliera ni una sola gota más, de pronto sentimos que Cristina toco la puerta del baño y pregunto si estaba allí, yo conteste que si y que en un minuto salía, entonces inmediatamente me empecé a vestir lo más rápido posible, fue tan rápido que ni si quiera me lave la boca y ni mi vagina, me desespere, quería salir de ese baño y volver enseguida con los demás.

Entonces me dirigí nuevamente a la mesa sin que me novio y su esposa se diera cuenta de nada, al llegar le di un beso a mi novio y el me sonrió como si nada, al cabo de 2 minutos apareció Mario con unos tragos para los hombres.

Luego de ver la película nos despedimos y nos marchamos para nuestro departamento; al llegar, Hernán inmediatamente se me abalanzo hacia mi cuerpo, y me dijo: ‘’que puta que estas‘’ ´´ te gusta bebe, me vestí linda para vos’’, entonces el me agarro y me apoyo sobre la mesa del living, me subió la falda, y allí se dio cuenta de la tanga que tenia puesto, y me dijo ‘’dios Vale, que tanga de puta que tenes?, me encanta’’, ´´entonces si te gusta tanto chupamela’’; le agarre de la cabeza y se la direccione hasta me concha para que me la chupe, pero el primero introdujo un dedo en mi vagina, allí observo que la tenia toda roja y con poco de liquido espeso blanco, pero le resto importancia, acto seguido fue bajando con su boca por los muslos y metió su lengua en la cueva, yo estaba loca de placer, y le abría las piernas lo más que podía para que siga chupando, de esa manera la lengua de Hernán se hundió hasta el fondo y me empezó a chupar el papo como un desesperado, mientras le decía, ‘’tu gusta bebe, decime que te gusta chupar mi concha’’ y ‘’siiiiiii Vale, me encanta´´, yo insistía que me digiera eso, ya que me calentaba que estuviera chupando mi concha que hace un rato Mario me había llenado de leche, luego se paro y beso apasionadamente, y empezó a mover su lengua de manera agresiva como un pez atrapado en una red, yo no quería que me siga besando, porque seguro que tenia un olor a verga insoportable, entonce lo corte de seco y me arrodille, desprendí su bragueta y saque su pija, escupí sobre ella y la introduje entera, recorriendo el tronco hasta su base, casi haciendo perder el equilibrio de Hernán, ya que todavía tenía los pantalones por los tobillos; besaba los huevos, se lo metía en la boca y lo chupaba como una loca, Hernán jadeaba y disfrutaba, mientras me decía:

Vale, donde aprendiste a chupar así?

Te gusta bebe, te gusta que sea una puta, mientras le agarraba la pija por su base con las dos manos y le empecé a hacerle una paja fenomenal, luego lleve su pija en la boca, dando lengüetazos, de pronto Hernán me advirtió que se llegaría, entonces le dije que quiera su leche caliente en mi cara y así lo hizo, me lleno la cara de leche.

Seguirá

Vale