Binomio Padre e Hijo

Por las casualidades de la vida me vi nuevamente aleccionando a un novato con la ayuda de su padre que me lo agradecio... y de que forma mas rica...

Me había llamado mi ex suegro, para que fuera a Madrid a solucionar un tema de herencia de un solar , de mi difunto Paco y aunque intente que fuera Paul, este no quiso ir pues yo ya le había contado mis vivencia y prefirió dejar que yo solucionara el tema por si el   viejo, estaba aún por la labor de tener un encuentro de cama conmigo.

Fui un par de días antes por salir de compras por esa ciudad, dirigiéndome al hotel en el que había reservado habitación, estando en la recepción esperando turno tras un hombre y su hijo, el recepcionista me pedio mi D.N.I para formalizar los tramites, se los di a la vez que ellos, que me miraron sorprendidos con una sonrisa, pensando me colaba o era una cliente preferente,.. Nos dio las llaves tarjeta a la vez y subimos juntos en el ascensor a la planta correspondiente.

Mire el número y me dirigí a la habitación, cuando comprobé que ellos hacia lo mismo, llegando los tres a la puerta, nos miramos sorprendidos y riendo comprobamos era el mismo número, el padre mirando sin parar de sonreír, dijo, el recepcionista pensó eras mi esposa, por eso nos dio las mismas llaves.. Igualmente esboce una sonrisa por la coincidencia, mientras bajamos a solucionar el enredo,..

Se presentó como Pedro en el ascensor y su hijo Raúl, aparentaba unos 60 años, con pelo engominado blanco hacia atrás, muy bien trajeado y de aspecto muy sexy, el hijo estaría a punto de cumplir los 18 creo, pues tenía aspecto muy niño aun, y parecía tímido, todo lo contrario que el padre, que lucía una cara madura y atractiva, y aunque afeitado correctamente, su rostro estaba marcado por una espesa barba que hacia sombrear toda su cara.

Solucionamos el tema y yo me quede con la habitación y ellos con la contigua a la mía, tras darme la correspondiente ducha, y relajarme baje al comedor dispuesta a sentarme, cuando me llamaron de una mesa al pasar, mire y eran ellos, Pedro riendo me dijo, “ mujer te estamos esperando, ya que eres mi esposa en el Hotel, come con tu marido e hijo”, no pude más que reír y acepte la invitación gratamente, pues aquel hombre me atraía mucho,.. Charlamos muy distendidamente, quizás más de la cuenta y allí supe que era viudo, que estaban por Madrid de vacaciones, eran de Cáceres y me pareció entender quería bautizarlo sexualmente al hijo, pues este se puso rojo cuando su padre insinuó que esperaba allí se soltara, pues nunca lo veía ni con novia ni amigos y acababa de cumplir 18 años.

Comimos y tomamos café continuando la charla, cada vez más animada y desenfadada, ofreciéndose a acompañarme esa tarde de compras para que le ayudara a ellos, por lo que acepte y así pasamos la tarde de tienda en tienda, aflorando cierta amistad a la vez que notaba más confianza en el.

Me di cuenta cuando se probaba el algún pantalón y camisa, que mis sospechas de que ese hombre estaba bien dotado eran ciertas y además era de esos machos con el pectoral fornido y poblado, eso sí, ya con tinte blanco pero tremendamente atractivo, todo lo contrario de hijo que tenía un cuerpo muy delgado y casi imberbe.

Llege al Hotel cargada de bolsas al igual que ellos, y me pidió que pasara un momento a su habitación para que comprobara la ropa del hijo y le asesorara para que ponerse para salir de noche, pues lo cierto es Raúl, el hijo, vestía muy campechano, y quería darle un aire más juvenil y elegante, y a él no le hacía mucho caso.

Se probó varios pantalones junto a camisa y camisetas, primero con timidez pues se sintió violentado cuando yo le comprobaba la cintura y las piernas de las prendas, riéndose Pedro por verlo así de ruborizado, diciendo, ojala fuese yo hijo al que le tocan, si tienes que sentirte afortunado que una mujer tan guapa de toque aunque sea a través de la ropa… aunque veo que no te disgusta, pues tras echarle mano al paquete le dijo al hijo, “ pero mira si estas casi empalmado”, esto aún lo ruborizo más y lo puso más cortado.

Fue a marcharse el hijo al baño cuando el padre le dijo, no seas más tímido que Tere ya ha visto seguramente más de un aparato y no se va a escandalizar por verte en slip o verte medio empalmado.

Yo estaba algo violentada también, pero me lo tome como un cumplido, continuando el hijo cambiándose de pantalón, esta vez allí mismo, delante de mí, quedándose en slip, y lo cierto es que se le notaba el calentamiento y más cuando su padre me dijo, ¿Tere que te parece? ¿tiene futuro ese paquete? , volviendo a reír a la vez que ante la sorpresa le hizo ademan de bajarle el slip, asomando parte del joven rabo por un lado de ellos, me miro y dijo, perdona por la confianza pero dile si está bien dotado que es virgo y está asustado pensando no da la talla, pues comparado con la mía dice es muy pequeña.

Yo algo cortada por la situación, le dije, no la vi bien pero lo importante es que sepa jugar con ella, y sepa satisfacer a la mujer, en eso el padre ya lanzado como un miura, le dijo, enséñale a este chaval como se hace que lo he traído a Madrid para que aprenda y que mejor que una mujer madura y atractiva como tú que seguro tienes arte en ello, y perdona no es que te quiera tratar con ello de fulana, sino de experta en la materia.

Y volviendo a agarrar el slip se lo bajo, mostrando su fino y duro rabo ya apuntando a la barriga, … me quede cortada y estaba a punto de salir del cuarto cuando Pedro me cogió la mano y me la llevo al rabo de su hijo…., no sé cómo, pero me deje llevar y el chaval más rojo que un tomate, no dijo nada cuando sintió mi mano tocarlo.

Me recordó a una lección que había tenido con el hijo de un antiguo amigo y que ya conté aquí, por lo que deje seguir los acontecimientos y tras tocarlo ya con las dos manos y ver que palpitaba esa polla a mis caricias, le dije, no está nada mal, no se comparada con el padre como será pero está bien para su cuerpo, haciendo un pequeño e instintivo amago de chuparla, que tras ver no la retiraba, hice finalmente, tomándolo con tacto y llevándomelo a la boca para besar con los labios y chupar con delicadeza aquel fino y tierno rabo.

El padre resoplo como un toro a mis espaldas notando por el ruido del cinturón que se estaba quitando la ropa también, gire instintivamente la cabeza y ya solo llevaba un bóxer blanco marcando un bulto de escándalo y su camisa abierta a punto de dejarla caer.

Raúl gemía como un niño casi a punto de llorar del placer que le daba mi boca, y tuve que parar un poco pues no iba a tardar nada en correrse si seguía así.

Me levanto Pedro cogiéndome por mis sobacos por la espalda y besándome por la nuca, dándome las gracias comenzó a desvestirme delante de su hijo, que a la vez se estaba quitando toda la ropa por orden de su padre.

Sentí su duro rabo en mi trasero y más cuando me bajo las bragas con suavidad , llevando las manos a mi conejito, dijo, mmmmm afeitado , ideal para comenzar Raúl, mira que hembra más rica , ven toca aquí conmigo… cogió la mano del hijo y la llevo a mi sexo mientras me mordía la oreja y me volvía a dar las gracias,,, dijo ves hijo que mojado esta ya, eso es señal que esta excitada y preparada para montar.

Me pareció me trataba como a una yegua pero me excitaba mucho, y más el roce de aquel mástil en mi trasero, me giro y dijo mira come aquí como le hiciste a mi hijo, entonces vi que aquello era mayor de lo que imaginaba, parecía una réplica del rabo de Paul, aunque un poco más fino pero muy venoso y duro, con la cabeza totalmente cubierta por una fina piel que parecía explotar por la tensión del grosor.

Lo descapulle con cuidado con mi mano y me lo llevo a la boca, a la vez que llamo a Raúl y le dijo, ven aquí con nosotros, acercando este, su palpitante polla que estaba a punto de derramarse.

Las puse las dos juntas y la diferencia era tremenda, con razón el hijo estaba acomplejado, el padre era un portento de la naturaleza, pero yo comí las dos con cautela turnando una y otra.

Agarre los huevos de los dos y ahí también había cambio de tamaño, unos pegados la culo y los de Pedro, hermosos y colgando con dos enormes bolsas pobladas de fino pelo que lo hacían más sexi aun.

Raúl comenzó a gemir cada vez más fuerte mientras comía las dos cabezas que previamente había juntado una frente a la otra, y sin previo aviso comenzó a vomitar leche ese fino rabo, impregnando la del padre de chorros de nata así como mi boca.

Pedro se rio sujetando al hijo por los hombros pues este parecía iba a caerse de la excitación, mientras le dijo, ahora mira un poco y aprende lo que le gusta a las mujeres.

Tomándome con sus fuertes brazos me levanto en peso y me poso desnuda sobre la cama, llamo al hijo y le dijo ven, y se pusoa besarme y comer mis pezones a la vez que su mano hurgaba en mi conejito hambriento, fue bajando e indicándole al hijo que mordiera mis pezones, mientras el comenzó a comerme mi sexo, el hijo le hizo caso aunque no lo hacía muy bien , pero lo cierto es que estaba sintiendo un placer inmenso.

Me corrí en su boca y esto lo puso aún más bravo, pues siguió comiéndome el conejo con más fuerza como intentando sacarme todos los jugos, yo le eche mano a la polla del hijo para ver cómo se había quedado y animarlo un poco mas, y esto encendió más al Padre, que dijo, ehhh veo tienes gana de rabo, y levantándose sobre mí, acerco aquel misil gordo y venoso y comenzó a meterlo lentamente ayudado por su mano en mi empapado gazapo, comenzando afollarme suavemente, para pasar a ir acelerando paulatinamente.

Estaba a punto de correrme otra vez y más tras los sabios besos con lengua que me daba aquel macho extremeño, pero lo que realmente me volvía loca era los movimientos de cadera tan buenos que tenía sobre mí con su enorme pollon dentro.

Me giro y me puso de varias posturas, mostrandole al hijo como debía de follar una hembra, y así tuve un par de orgasmos más… Raúl ante aquel espectaculo había vuelto a empalmarse como un burro viendo como su padre daba cuenta de mí.

Paro Pedro un segundo y me dijo, te han follado por detrás alguna vez tu pareja u otra persona?.. yo medio temerosa por ver aquel rabo grande , pensé en decirle que no, pero la idea de sentir aquel cuerpo venoso dentro de mi trasero me atraía mucho y le dije que sí.

Entonces se tumbó de espaldas sobre la cama y sentándome sobre su rabo me lo fue metiendo lentamente ante los pequeños quejidos por la primera entrada, cuando estuvo todo dentro me agarro de los pechos y me dejo caer sobre su pecho peludo, sintiendo mi espalda ese matorral, mientras su rabo entraba hasta lo más dentro de mí.

Llamo a su hijo, y le dijo vamos a penetrarla los dos,… lo vi un poco dubitativo a Raúl, pero se posición de rodillas delante de mí como para montarme, tuve que agarrarle la fina polla e indicarle me penetrara, sintiéndolo rápidamente como entraba con suavidad aquel fino pero duro rabillo.

No había color entre uno y otro pero verme así entre Padre e hijo me hizo explotar con enorme y largo orgasmo que casi asusta al hijo, que tras cinco minutos cabalgando comenzó nuevamente a correrse, siendo su padre ahora el que aflojaba su duro rabo en el interior de mi trasero, inundándolo como si le fuese la vida en ello.

Quede tremenda rendida aun sobre Pedro pero ya con su rabo fuera, y descabalgada de su hijo también, que estaba tumbado medio pálido sobre la cama.

Me incorpore y para darle más morbo al hijo, comencé a chuparle la morcinollona polla a su padre quitándole todos los restos de leche que aun fluían por esa enorme cabeza, a la vez masajeaba los huevos fuertemente e incluso baje a comerle su peludo culo, esto lo puso loco y más con el sin cesar de mi mano sobre su polla, que sorprendentemente no aflojaba e incluso parecía volver a estar dura.

Ahora el que gemía como un poseso era Pedro ante la hambrienta comida que le estaba dando, le mordía, chupaba, lamia, sorbía, cada centímetro de aquel venoso y largo misil, mientras su cadera subía centímetros saltando ante la acometida que le estaba dando.

Tras diez o quince minutos de gloria, volvió a soltarme esta vez dentro de mi boca y sobre la cara, una serie de ráfagas de pastosa y cremosa leche, que hasta yo me vi sorprendida, tanto por la cantidad siendo la segunda corrida en poco tiempo, como por la espeses de la misma, impidiendo que pudiera tragar con facilidad aquel rico manjar.

El hijo se había quedado atónito, viendo aquella mamada que acababa de darle a su padre, que este me agradeció con un beso esplendido diciéndome que ni en el mejor de los sueños hubiera podido planear un encuentro así para el bautizo de su hijo en el sexo.

Me duche con ellos ya solo con algún juego erótico sin nada más de sexo y tras cambiarme de ropa en mi habitación, quede con ellos para cenar, esta vez salimos fuera del hotel y fui invitada en un afamado mesón de Madrid.

Cenamos y tomamos una copa y sobre las tres de la mañana regresamos al Hotel, pidiéndome Pedro si podía quedarse conmigo en el cuarto, pues el hijo entre los polvos de la tarde y las copas estaba medio rendido.

Acepte aunque pensé como le contaría esto a Paul, pero lo cierto es que estaba deseando estar otra vez con aquel hombre, y sobre todo tener sexo más calmado y pausado los dos solos.

La noche de la que no no voy a entrar en detalles fue digna de enmarcar, pues nos dormimos sobre las 5 , se pueden imaginar lo que se puede hacer en dos horas… simplemente les diré que fue algo único e inolvidable, y aunque hubiera seguido hasta el amanecer, lo cierto es que tenía cita con mi ex suegro a las 11 en una Notaria, y no sabía aun el día que me esperaba… que por cierto dejo corto al anterior, pero eso si quieren y me lo piden se lo contare en el próximo relato, donde mi ex suegro hizo de las suyas y que decir de este binomio padre e hijo ….