Bienvenida a Hardlin: Aislamiento para sumisas

Laura, una joven de Madrid ,está pasando por una mala racha. Sus padres deciden enviarla a un internado, sin saber que es un aislamiento de máxima seguridad para sumisas. Ahora la vida de laura cambiará, tendrá que aprender a ser humillada, castigada y follada por todos. Ahora es una putita.

No era demasiado tarde ni hacía demasiado frio,no estaba cansada ni tenía hambre, ni siquiera había nadie en casa atormentándola, pero por alguna extraña razón a Laura se la ocurrió volver a autolesionarse.

Laura aparentemente es una chica normal, tiene 18 años, está formandose en uno de los mejores colegios de Madrid para ser abogada, su sueño, tiene un grupo de amigas en su escuela y cuenta con un cuerpo estupendo: mide 1,72 , disfruta de un buen escote y un blanco y brillante tono de piel. Vive en una de las casas más lujosas del barrio de la Castellana y goza de todo tipo de servicios y comodidaes. Quizá ese fue su problema, una hija úníca a merced de sus padres ,siempre fue el centro de antención. Pero ahora las cosas han cambiado, sus padres recién divorciados cambian su forma de vida, ella se queda entra semana en un nuevo apartamento con su madre, y los findes  tiene que viajar hasta Barcelona para pasar 48 horas con su padre y su nueva novia. La presión cada día la consumía más , hasta que un día entró en pánico, no asumía su nueva vida, ver a sus padres así, tener que pasar todo el día viajando , el resultado de eso fueron unas pequeñas rajas en sus muñecas que se hizo con la tijera de su estuche del colegio. Durante esa semana estuvo escondiendolo de su madre con jerseis de manga larga y pulseras, pero cuando llegó el fin de semana  su padre la descubrió. La respuesta de este fue el pánico total, llamó a su exmujer y comentaron lo sucedido, después de horas hablando decidieron que el apoyo psicologico la ayudaría, lo que sus padre no sabían esque esto solo era el principio de una larga racha de heridas, peleas, conflictos.....Fueron 7 meses desastrosos para su familia, ella no conseguía controlar sus emociones y lo reflejaba en odio hacia su cuerpo, al parecer la hacían olvidar sus problemas por un momento y solo concentrarse en el dolor de las magulladuras que ella misma se causaba. Por un minuto podía respirar, olvidarse de todo lo que le rondaba la cabeza y centrarse unicamente en ella. Esto sus padres no lo entendían, cansados de descartar decenas de psicologos y  psiquiatras, despues de otra grave autolesión de su hija, decidieron acudir a un vecino con el que tenían mucha amistad antiguamente . Un hombre un tanto peculiar que contaba ya con unos 50 años, tenía 6 hijas y todas ellas habían tendido actitudes impolutas a lo largo de su vida, eran la envidia del barrio, las llamaban las seis fieles, siempre iban perfectamente vestidas, respetaban a sus padres, eran educadas, agradables.... La cita se concerto para un martes a las 16:00 en una cafetería bastante modesta del centro de Madrid, Damián y Marta(los padres de Laura) y su vecino , David, llegaron puntuales. Durante la conversación se tocaron varios temas , le explicaron todo lo que había sucedido estos meses en su familia y la situación tan delicada de la pequeña Laura. Su vecino sin pensarselo dos veces les dió una solucion: el internado Hardlin. Los padres, desconcertados, no tenía ni idea de que se hacía en aquel misterioso sitio pero su vecino consiguió convencerles.

-Laura ya no es una niña, tiene que asumir su madurez, aprender a comportarse, establecer unas rutinas y unas pautas en su vida. Volver a tener algo por lo que querer disfrutar su existencia, eso es fundamental.- Dijo el hombre con tono convencido. - En ese sitio madurará, se ocuparán de ella como lo hicieron con mis hijas.

La cita terminó y los padres de Laura regresaron al apartamento de Marta, Damián se estaba quedando a dormir allí mientras solucionaban el tema de su hija. Toda la noche la pasaron recapacitando sobre aquel misterioso lugar, lo buscaron por internet, pero no encontraron nada , debía de ser un sitio muy reservado. Con la llegada del sol llegó sufirme decisión : ellos, por motivos laborales, no podían hacerse cargo de todos los problemas de su hija, y habiendo descartado puñados de opciónes ,el internado Hardlin , aunque desconocido para ellos, sería su útima opción.

Laura amaneció aquel miércoles muy cansada, fue hasta la cocina para desayunar y se encontró a sus padres sentados esperandola. La pequeña no entendía el porqué de aquel silecio asi que decidió rompero ella misma el hielo.

-Hoy tampoco voy a ir a clase, no me encuentro bien. - Repitio la muchacha como cada mañana. Sus padres la miraron y su madre dicidió tomar la iniciativa.

-Laura, cariño, estos meses han sido devastadores tanto para tí como para nosotros. Papá y yo hemos tenido que pensar mucho sobre como solucionamos este tema y creemos que lo mejor para tí sería pasar una temporada en un internado.

Los lloros de Laura comenzaron , los gritos , los reproches a sus padres , ella intentó convencerles de mil maneras de que esa no era la solución , que cambiaría , que sería una chica diferente a partir de ahora , pero sus padres tenían clara su decisión.

-¿Recuerdas a David, nuestro antiguo vecino? Es amigo de uno de los coordinadores del centro y nos ha ayudado a concertar una cita para que te entrevisten, asi que vete a tu cuarto , duchaté, arreglate y prepara la maleta, hoy tenemos que estar alli para las 11, por lo que nos ha contado no es un sitio al que le guste la impuntualidad. Si te aceptan , hoy ya te quedarás allí.

Laura intentó a diestro y siniestro reprimir a sus padres , ella había oido hablar alguna vez de que su vecino era un sádico al que le gustaba pegar a sus hijas y eso a ella la aterrorizaba . Un lugar recomendado por él, no podía ser muy afable.

A las 9:30 ya estaban todos subidos en el  coche familiar rumbo a Hardlin . En el GPS no salían indicaciones sobre como llegar allií , asi que su vecino les había dado pautas . Ya había pasado una hora y 15 minutos desde que estaban en carretera y aún no había visto ni un solo cartel, ni nadie que pudiera indicarles , hasta que vieron una pequeña valla en medio del bosque situada al lado de una cabina con un guardia . En lo alto de la cabina ,había un pequeño letrero en el que ponía: Hardlin.

El lugar se encontraba a las afueras de la cibilización. Los padres de Laura no se asustaron ya que su vecino les había informado de que era un sitio alejado para el control de las internas, evitar las fugas y promulgar el contacto con el medio ambiente. Se acercaron a donde el guardia y preguntaron:

-¿Perdone, es aquí el internado Hardlin?. - Preguntaron al robusto hombre de la entrada.

-Si. - Respondió .- ¿Ustedes deben de ser la familia Hernandez , verdad? Estabamos esperando su visita. Y ¿esta pequeña debe de ser Laura ,no? Descargen sus maletas, yo me ocuparé de su establecimiento.

-¿No podemos entrar con ella?. - Preguntó su madre asombrada.

-No , al recinto solo pueden entrar internas y los porfesionales que trabajan con ellas , lo hacemos por su seguridad. Ahora deben despedirse de ella, la cita con el director la tiene concertada para las 11 y faltan escasos minutos.

La familia descargó la maleta de su hija y una mochila que llevaba con ella, su madre la prometió que la escribiría a menudo y la dijo que la quería con locura, que aprovechase el tiempo allí. Su padre se despidió también , subieron al coche y se fueron alejando.

Ahora Laura estaba sola , y el miedo que se respiraba en aquel sitio estaba empezando a asustarla. El guardia salió de su cabina y la abrió la puerta. A partir de ahora, la vida de la muchacha cambiaría por completo.

Tras varios minutos caminando por el busque junto al guardia llegarón al recinto , vallado, logicamente . La seguridad en Hardlin  era uno de sus pilares , como ya la habían dicho sus padres  ,era un internado solo para chicas. El sitio era escalofriante , colores oscuros , no se veía un alma por los alrededores, perdido en medio del bosque..... El guardia la dejó sola enfrente de la puerta de entrada y la dijo que buscase el despacho del director, que tenía que ir aprendiendo a resolverse los preblemas solita ,el hombre desapareció. A Laura la recorrió un escalofriante temblor por todo el cuerpo, no conocía aquel sitió , había varios edificios a cada cual mas aterrador, pero no la quedaba otro remedio , asi que  decidió entrar.

El lugar era antiguo pero estaba perfectamente limpio y acomodado, parecia un castillo, pero no de una princesa , más como el de un villano. El hall de entrada era enorme y en una de sus paredes encontró un cuadro con un plano del edificio principal. En principio, parecía como un instituto. Abajo tenía salas de estudio y bibliotecas, arriba estaban las aulas  y en la parte superior los despachos. Había planos también del resto de los edificios, el comedor , la residencia con las habitaciones, el gimnasio ..... A priorí, todo parecía normal ,hasta que vio otro edificio en el que estaba escrito : sala de castigos, mazmorras, sala de aislamiento , pasadizos.... y un sinfín de salas, edificios, y rincones que aparecían sin nombrar en aquel mapa. Laura quedó perpleja, no entendía nada , supuso que era un lugar muy exigente y  debía de ir descubriendolo ella sola. Cagada de miedo subio las grandes escaleras de madera hacia la planta más alta, allí supuso que estaría el despacho del director. Los techos eran altos y las lamparas eran gigantes de cristal. Cuando llegó al tercer piso se encontró con un laberinto de pasillos con multiples despachos, comenzo a indagar por ellos y leyendo las placas de cada puerta: Adiestrador Minch, Educadora Silvana, Señor Garten, no entendía muy bien el porque de esos nombres pero cuando llegó al final de un pasillo encontró una puerta grande en la que poníaDirector Menson. Miró su muñeca , eran ya las 11:03 ,pensó que tres minutos no importarían,  asi que, entró.

El despacho, enorme, habitación oscura  y paredes forradas con terciopelo,  muebles de madera maziza, una gran alformbra y un espejo en el techo que hacía mas tenebrosa la estancia .

-Buu bu buu buenos días - Dijo Laura entre cortada.

-¿Es usted Laura?.  - Lanzó el Sr. Menson mirandola fijamente.

-Si, soy yo. Me dijeron que me pasase por aquí. - Sus muslos no hacían más que temblar y su rostro mostraba una mueca de pavor impresionante.

-¿Le parece a usted correcto llegar tarde a una primera entrevista en el  centro? Esto es una institución seria y no nos gustan las cerdas impuntuales como usted.

Laura se quedó pasmada, no podía creerse lo que la acababa de llamar, no sabía como responder a ese pedazo de imbecil a si que opto por frustrarse y quedarse callada.

-Veo que todavía no has sido informada de la vestimenta aquí.

-No, nadie me dijo nada. - Respondió ella.

-Bueno pues ya te lo advierto yo. En este centro hay unas normas, y todas y cada una de ellas están para acatarlas extrictamente. Una de las más importantes es la vestimenta. Acostumbrarás a utilizar el uniforme del centro, que te proporcionará tu adiestrador cuando salgas de aquí. En Hardlin aprenderas como se comportan las cerdas como tú y cuando seas desobediente trendrás tu castigo . Así de facil y asi de complicado.

Laura no entendía nada ...¿disciplina?....¿obediencia? ...¿donde estaba metida?

-¿Mi adiestrador?. -  Respondió Laura con tono suave.

-Si, cada putita teneis asignado un adiestrador que os controla, el puede hacer lo que quiera con vosotras.

-Perdona pero creo que no le estoy entendiendo , no soy una puta y nadie puede hacer conmigo lo que quiera. ¡¡Me esta tocando mucho las narices!!

-¿Está respondiendome? Creo que tenemos que comenzar con mano dura con usted. Bajese su falda y pongase encima de mi mesa, vas a enterarte de como funcionan las cosas aqui.

Laura no lo hizo. ¿Por qué un hombre que acababa de conocer quería pegarla? No entndía porque la humillaban y castigaban. El director se levanto y se dirigió hasta ella furioso, la agarró de las manos y forzo hasta conseguir dejarla inmovil en su escritorio, agarró unos agarradores que tenía en su despacho y la dejo sujeta los brazos al escritorio. Despues fue hacia un pequeñó mueble, abrio un cajón y desenfundo otros atadores que colocó al rededor de sus tobillos dejandola inmovil sus pies. Laura no sabía que hacer y comenzo a gritar.

-No seas tan cerda y portate bien , por mucho que grites aquí nadie podrá escucharte.

Laura estaba humillada, asustada , dolorida por el forcejeo, pero esto no había hecho más que empezar. Menson se quitó su cinturon y la bajo la falda dejando ver su hermoso tanguita , el cual más tarde quitó. La empalmada de sus pantalones era visible asi que comenzo. La piel de la niña era blanca como la leche y sabía que las marcas del cinturon quedaría facilmente gravadas.

-Vas a contar los azotes , si no lo haces prometo dartelos en el coñito y dejartelo en carne viva ,¿Entendido zorra?

Laura asintió con la cabeza, no podía hacer nada más que acatar las ordenes de aquel hombre si quería salir viva de aquel despacho, asi que tuvo que tragarse su orgullo y comenzar a contar.

Menson lanzó el primer golpe con el cinturón. Laura estremecio todo su precioso cuerpo sobre la mesa de aquel hombre.

-¿No vas a contar ,perrita? Pues el siguiente procurare dartelo más fuerte. - El director lanzó el segundo que quedó marcado en el culito de Laura, este había sido mucho más doloroso, asi que Laura , por su bien, se puso a contar.

Tras diez azotes en el trasero de aquella muchacha el director decidió que ya había tenido suficiente. La desató y la ordenó sentarse.

-En este internado aprenderas a respetar a tus adiestradores y educadores, comprenderas que solo eres una perra viciosa a la que la gusta que la pongan caliente y que la follen. Asimilarás que has nacido para dar placer a tus amos y que debes hacerlo con deboción. Aquí no nos importan tus problemas, ni siquiera te tienen que importar a tí. Estas aquí para aprender a ser una buena sumisa y lo harás , cueste lo que cueste.

La niña quedó asombrada despues de semejante discurso, si que había oido hablar de amos y sumisas pero nunca imaginaría que el sitio en el que estaba no era un internado , sino que un aislamiento de máxima seguridad para adiestrar sumisas.

-No intentes escaparte de aqui, tenemos responsabilidad jurídica sobre tí, asume cuanto antes tu nueva vida y ponte las pilas. Aquí aprenderas  a disfrutar del dolor y la humillación. Ahora puedes retirarte.

Laura se agachó para cojer su falda pero el Sr. Menson se lo impidió. -Las niñas malas deben de ir por ahí enseñando su culito rojo al resto de zorras. -Asi que esta falda me la quedo yo. La niña , muerta de verguenza, salio de aquel despacho con lagrimas en los ojos y medio desnuda. Por el camino se encontro con alguna otras chicas que murmureaban a su paso.

-Esta es la nueva

-Mira como la han dado la bienvenida.... con un  buen castigo, jajajaja. El resto de chicas se reían pero mantenian la compostura porque sabían que podían ser castigadas por  algun educador en cualquier momento.

El director le había dado a Laura indicaciones de como llegar a su cuarto. Salio del edifico principal y , por suerte para ella, no había nadie en la parte de afuera, recorrió la zona, medio desnuda, hasta que encontró un edificio en el que ponía residencia de habitaciones, entró y recorrió sus pasillos hasta llegar a su habitación . Cuando abrió la puerta se encontró una pequeña sala con dos camas, supuso que la otra sería la de su compañera de habitación. Abrió su armario y vio el uniforme colgado de la percha: faldita plisada blanca y gris , camisa blanca y corbata gris, zapatos negros y medias hasta la rodilla. Colgado del uniforme había una pequeña nota en la que ponía:

La maleta y el resto de pertenencias personales deben de llevarse a seguridad antes de las 13:00 , allí le dirán que es lo que puede pasar y que no. Además te darán todo lo necesario para vivir aqui: tu nueva ropa interior, toallas , cepillo de diente.... Los telefonos moviles,  y aparatos electrónicos estan prohibidos. La recomendamos no dejar nada escondido , si lo encontramos su castigo será inminente. Pongasé el uniforme, lleve sus pertenencias al registro de seguridad y pase por enfermería par su chequeo semanal. Bienvenida a Hardlin

Laura seguía anonadada por todo aquello, aparte de quitarla su voluntad ,la iban a quitar también sus pertenencias. La quedaba 1 hora para tener que ir a seguridad, asi que se tumbó en la cama a descansar e intentar asimilar donde estaba, lo que no podía imaginarse es que estaba mojada, palpó su suave coñito y notó como sus dedos quedaban inundados por la humedad de su vagina, la pequeña estaba asombrada , pero de repende, sonó la puerta.