Best Friends - Harry Potter - II
Hermione era una chica muy hambrienta, aunque no lo pareciera. Allí en la Biblioteca, se le estaba antojando un poco de leche. Miró a Harry que estaba estudiando a su lado. "Harry... quiero leche" "¿Puedo?" Él asintió algo perturbado.
Aclaro: Solo soy una persona con una mente muy pervertida que quiere plasmar sus visiones en historias.
Los personajes no me pertenecen, son de la propiedad de JK Rowling. Hago esto sin fines de lucro, únicamente por mera diversión.
“Cuando quieras”
Bostezó algo cansada.
Miró desganada el libro de Aritmancia, y miró a Harry quién estaba haciendo los deberes de Pociones concentrado. En la Biblioteca no se escuchaba nada más que una buena cantidad de plumas rasgando los pergaminos, los sonidos del pasar de las hojas o los tacones de Madame Prince que se colocaba a ordenar ciertos papeles. Hermione miró por la ventana y pudo ver que ya era muy de noche.
-Harry-le susurró bajo y su amigo le miró-Nos hemos perdido la cena-dijo algo disgustada.-Me gustaría algo de leche…
-Te dije que comieras antes-le regañó. Hermione hizo un leve puchero y en segundos su estomago rugía pidiendo comida. Un leve sonrojo cubrió sus mejillas.-¿Tienes mucha hambre?-ella asintió-Después pasamos a la cocina y le pedimos a Dobby que te de algo.-y se volvió a concentrar en su tarea extrañamente.
Hermione se removió en su asiento.
-Harry-le llamó nuevamente.
-¿Qué sucede?-le susurró acercándose a ella.
-Harry-le miró-Quiero…quiero leche…-dijo algo avergonzada. Y Harry cayó. Quería ése tipo de leche.
-¿Ahora?-ella asintió.
-¿Puedo?-preguntó acercándose a él. Él asintió titubeante.
La castaña sin dudarlo, se dirigió al miembro del chico, por debajo de la mesa, y aún sentada, con la cabeza gacha, desabrochó el pantalón y bajó lentamente la cremallera. Los abrió un poco, metió su mano en el bóxer, y sacó el miembro de su mejor amigo.
Harry pegó un respingo al sentir la lengua de su amiga recorrer su miembro por completo, soltó un leve suspiro. Su amiga era muy zorra cuando quería serlo, y estaba vez lo estaba siendo, porque iba muy lento, más de lo habitual.
Hermione abría lo más que podía de su boca para recibir el viril miembro de su amigo, paseaba su lengua lentamente por su tronco, y apretaba con los labios la cabeza de su miembro lentamente.
Sentía la lengua de la castaña mojar su miembro lentamente, la pasaba de arriba hacia abajo, se detuvo en la altura del frenillo, tras bajar el prepucio, se entretuvo un buen rato en el frenillo que le daba tanto placer, como ella sabía. Lo comenzó a succionar de una forma lenta y luego rápida, sin parar, sintió también como la mano de la chica se metía dentro, y empezaba a acariciar sus huevos suavemente y sin descaro.
Harry pegó un respingo, la miró y le acarició el cabello.
-Eso, eso, que ya va a salir lo que tanto te gusta-le dijo suavemente, mientras se arqueaba de placer. Hermione aumentaba más la mamada, el mete y saca se hacía más rápido, con su otra mano comenzó a masturbar el miembro de Harry mientras que con su lengua lamía la cabeza y lo saboreaba lentamente. Dejó el ritmo rápido, apartó la mano que le masturbaba, Hermione deslizaba por aquel miembro su lengua, tranquila y sensualmente, dejo que la llenara por completo hasta su garganta y con cuidado lo sacaba y nuevamente lo introducía en su boca hasta que su nariz rozara los vellos del chico.
Y volvía a aumentar nuevamente el ritmo, haciendo que su pene duro entrara por completo en su boca, iba más rápido, lamía y succionaba a la vez sin dejar de acariciar sus huevos rítmicamente, y apretaba con sus labios la cabeza del pene cuando llegaba a ésta.
-Herm…ione…-dijo Harry entre jadeos-Ahí… viene… la leche-la castaña comenzó a aumentar más el ritmo al escuchar eso, y sin poder más el chico de gafas, impulsó la cabeza de la chica más a su miembro disparando unas cuantas chorreadas incontrolables de semen en la boca de la chica, podía sentir como ella la tragaba ansiosa y no dejaba que nada se le escapara. Suspiró una vez terminado de correrse, y veía como la chica seguía lamiendo su pene sin dejar de saborear aquella leche exquisita que tanto le gustaba, le acarició nuevamente el cabello de una forma casi tierna.
Hermione succionó el miembro del chico por última vez, lo lamió por completo y cuando lo sacó besó la cabeza de éste, le subió bien el bóxer, subió su cremallera y le abrochó el pantalón, y se sentó, miró a Harry que este le observaba sonriente.
-Has sido una buena niña-le dijo, y pasó un dedo por los labios de la chica que tenía un poco de semen-Pero tienes que terminarte todo-le dijo y la castaña lamió el dedo del ojiverde.
La castaña le observó algo abochornada. Era la manía de Harry de tratarla como una niña pequeña e inocente que provocaba ello.
-Gracias Harry-dijo la chica.
-¿Ya no tienes hambre?-ella negó con la cabeza.
-Ha estado exquisito-sonrió.
-Pues ya sabes Hermione, cuando tengas hambre, ya sabes a quien acudir.
-¿Cuándo yo quiera?
-Cuantas veces quieras-Y sin decir más ni menos, prosiguieron con los estudios. Harry nuevamente trató de hacer la tarea de Pociones, mientras que Hermione pensaba en que le gustaría nuevamente tomar leche en algún pasillo de Hogwarts.
Al fin y al cabo, iba a ser cuando ella quisiera.