Bendito internet 4

Aborde el autobús y mientras venia en camino pensé en esa noche, me sorprendí sonriendo con solo imaginar lo que había pasado, me mojaba de nuevo, para entonces ya no estaba tan segura de no querer volver a verla, sentía algo dentro de mi, algo que no quería reconocer aun y me decía a mi misma, que esto no me llevaría a nada, ella estaba con alguien mas, me recrimine pensé que si tal vez, solo tal vez hubiera venido aquella vez entonces seria yo la que ocupara el lugar de la ex, pero bueno las cosas pasan por algo y esta historia apenas comenzaba a escribirse, aun no se jugaban las cartas principales

Eran las 10 de la mañana y yo iba llegando a Tlaxcala, llevaba puestos unos jeans de mezclilla, una blusa verde militar con un delicado encaje café claro en mi pecho, lo que permitía ver el nacimiento de mis senos, zapatillas verdes con café, bolsa de mano y mi equipaje, descendí del autobús y le marque a Aby por el móvil para saber donde estaba, me pidió que le diera unos minutos mas, que ya estaba cerca de la estación. Acordamos el lugar exacto donde la esperaría y tome asiento, mientras esperaba mi mente viajaba, me trataba de imaginar como seria, que traería puesto, a donde iríamos, en fin, me encontraba totalmente nerviosa y ansiosa.

De repente una silueta alta como de aproximadamente 1.65 se paro frente a mi, era delgada, cabello corto, vestía jeans de mezclilla y sudadera roja con blando, calzaba unos tenis que hacían juego con su sudadera, pero hubo algo que me dejo sin aliento, esos ojos cafés claros me movieron todo dentro de mi, tenia un aspecto un poco mas parecido a un niño que a una niña, aun así me pareció perfecta.

Aby: Diana?

Le conteste que si.

Aby: mucho gusto, vamos te ayudo con tus cosas.

Cruzamos la calle y abrió la cajuela de un auto azul marino, introdujo mi equipaje y rápidamente abrió la puerta del copiloto, espero a que subiera y cerró la puerta, dio vuelta al carro y subió. Dentro del auto entonces si, me tomo la mano, y me dio un beso en la mejilla.

Aby: tenias mucho tiempo esperando?

Diana: de hecho iba bajando cuando te llame, le dije

Se me quedo mirando mientras conducía, me pregunto si deseaba ir primero a desayunar, le dije que aun no tenía hambre y como creía que estaría pensando en comida si realmente lo que tenía eran unos nervios inmensos.

Aby: Mira te voy a llevar a que conozcas una reserva natural muy bonita que esta en Puebla, espero que te guste y te parece si de camino comemos algo?

Le respondí que si, lo que menos me importaba en ese momento era la comida, me agradaba ella, mucho mas de lo que llegue a imaginar.

Cuando íbamos de camino, tome mi móvil y marque a mi casa, dio dos timbrazos y mi escuche a mi mamá del otro lado de la línea.

Diana: mami?, ya estoy aquí con Aby, todo esta bien y vamos a ir a comer, mas tarde te llamo para decirte donde me voy a quedar, solo deja de preocuparte ya, por favor.

Mamá: que bueno que ya estas allá pero antes que nada, déjame hablar con tu amiga por favor.

Me pareció un poco extralimitada esa reacción pero la entendía, así que le pregunte a Aby si tenía algún problema con hablar con mi madre.

Ella me miro, sonrió un poco con una sonrisa entre picara y tierna y con un ademan me pidió mi móvil, se lo di.

Aby: buenos días Sra., Diana ya esta aquí y esta bien, le prometo que mañana sale para allá, no se preocupe.

Mamá: hola Aby, te encargo mucho a mi gatito, me respondes con tu vida por ella, pórtense bien y por favor te la encargo, mucho gusto.

Se despidieron  y me paso mi móvil, después de prometerle a mi madre que la llamaría en la tarde, después en la noche antes de dormir y en la mañana, colgué.

Me percate del camino, Tlaxcala no era indiferente para mi y menos la Cd donde estábamos, mi papá era de ahí, de un pueblito cerca que se llama Tlaxco, le platique acerca de ello y me comento que casualmente pasarías por ahí, ya que al lugar que me llevaría era delante de esos pueblos.

Platicamos de música, de nuestros gustos personales, en fin cosas triviales, me dijo que se sentía sumamente alagada de que estuviera ahí y que de verdad deseaba que me la pasara genial a su lado, dentro de mí desee lo mismo. Como era de esperar en ese mes estaba brisando y conforme subíamos el cerro mas neblina bajaba, aun así era una vista maravillosa, lleno de pinos muy grandes y con el color verde predominando por todos lados, pasamos Chignahuapan y me trajo muchos recuerdos también era un lugar que visitaba con mi padre antes de que falleciera, delante de ahí pasamos a comer, mientras lo hacíamos hablábamos de cosas triviales, hasta que ella se animo y dijo.

Aby; tiene unos ojos hermosos Diana, son cafes muy claros, tu boca chiquita hace juego con tu cara y eres muy blanca, pensé que eras más morenita.

En tono de broma le cuestione que si era racista, reímos las dos por el comentario, me dijo que no, que solo me lo comentaba porque por medio de la cámara de la compu me veía así, pero que era algo que no le importaba, que solo deseaba decirme que para su particular punto de vista era hermosa.

Me dejo sin aliento y sin risa claro, desvié la conversación a algo mas superficial y que me ocasionara menos escalofríos.

Salimos del restaurante y proseguimos nuestro camino, aun nos faltaba un poco.  Llegamos y estaciono el carro, descendimos y entramos a la reserva, de verdad era muy grande y se veía realmente hermoso, había unas piedras enormes encimadas unas con otras y a la vez daban diferentes formas, se podía apreciar una gran tortuga de piedra cerca del rio que por ahí cruzaba, subimos una lomita buscando un poco mas de privacidad y estando ahí, ella me miro fijamente a los ojos, lo que ocasiono que desviara mi mirada ya que lograba cohibirme, se acerco mucho a mi y me dijo que aunque no había sido un buen 14 de agosto, deseaba felicitarme por mi cumpleaños, al decirlo ya estaba yo entre sus brazos, eran largos y sus manos grandes, muy diferentes a mis pequeñas manos, claro acordes a mi 1.58 de estatura, de repente me percate que estaba muy cómoda ahí, entre sus brazos, reaccione y di dos pasos hacia atrás, reí nerviosamente y continuamos la caminata, yo le di, una cadena de oro con un dije de corazón craquelado en oro también que le había comprado, aunque supuse que no era su estilo, ya que como menciono, parecía mas bien un chico aun así, lo compre pensando en ella y le pertenecía, agradeció el detalle y se apeno por no tener nada para mi, le asegure que eso no importaba que no se lo había llevado esperando que ella me diera algo a mi, en eso estábamos cuando al voltearnos descubrimos que la neblina había bajado tanto que no se podía ver mas allá delante nuestro, me tomo de la mano e intento tranquilizarme, diciéndome que solo teníamos que seguir el ruido del rio para poder comenzar a bajar, así lo hicimos, cuando afortunadamente salió un cuidador de la reserva y nos llevo hasta la salida, le agradecimos y volvimos al carro, en el entablo una conversación poco agradable para mi, me confeso que había discutido con su novia y que ese fin había querido ir a verla pero que como ya teníamos el plan de vernos no se animo a decírmelo, me sentí muy mal, un poco incomoda e intrusa, le dije que con que lo hubiera dicho yo habría entendido, revise mi reloj, eran apenas las 4 de la tarde, le dije que si deseaba llevarme a la terminal, me regresaría y podía entonces ir a verla para que platicaran y que de verdad no había problema, se negó argumentando que le quedaba a 5 horas de ahí, me pido que olvidara lo que me había dicho, aunque por el momento era prácticamente imposible que lo hiciera, no podía dejar de pensar que mientras en cuerpo estaba ahí en mente se encontraba con su novia o deseando estar allá.

Trate de que no se notara mi incomodidad, pasamos a ver la artesanía del lugar, compramos algunos recuerdos y buscamos un hotel.

Llegamos y pidió una habitación para dos personas, le proporcionaron el numero y metió el carro en el estacionamiento, bajo las maletas y subimos al cuarto, cuando entramos vimos que solo tenia una cama, ninguna de las dos dijo nada, entramos y me senté en ella, se acomodo junto a mi, y lentamente me hecho hacia atrás hasta quedar recostadas, me dijo que le gustaba mucho y que sentía deseos de darme un beso, cuando lo iba a hacer, me levante y le dije que me iría a bañar, en ese momento traía en mi cabeza lo que me había dicho acerca de su novia, además de que pensé que había sido precisamente su novia la que le dijo el día que murió mi hermana que fueran a acompañarme y sentí  pena al pensar que ella había tenido un detalle cuando no me conocía en persona, como para que yo le jugara chueco con su pareja.

Me metí  a bañar y mientras lo hacia, también analice las cosas y las probabilidades, ahí estábamos las dos, solas, sin nadie que nos cuestionara, libres por un fin de semana, yo le gustaba y ella a mi, una idea cruzo mi mente, nada me aseguraba volverla a ver, así que lo decidí, esa noche seria nuestra, quería entregarme a ella y hacer el amor o sexo o como se llamara.

Salí del baño, con una bata blanca de encaje y ella me miro, me dijo que me veía aun mas hermosa y muy tierna, me recosté a su lado y conversamos mientras ella veía mi sombra, volvió a decirme que le encantaban mis ojos y mis pestañas rizadas, que le agradaba mas mi cabello rizado y que me daba un aspecto infantil, en eso es encontraba cuando la sorprendí callándola con un beso, largo, duradero, parecía que deseaba quedarme así toda la noche. Me pidió tiempo y se metió a bañar, salió y para entonces yo estaba acostada esperándola dentro las cobijas, sin nada más que una sabana cubriéndome.

Cuando se acostó a mi lado y se percato de mi desnudez se sorprendió gratamente, comenzó a besarme el cuello, bajando un poco a mis senos, nuestros cuerpos húmedos se rozaban y yo podía sentir sus senos rozando mi abdomen mientras ella me besaba, me ladeo un poco para tener acceso a mi espalda y la lleno de mas besos, bajo lentamente hasta mi pelvis e introdujo su manos en mi entrepierna, mi sexo estaba palpitando de placer, deseaba cada vez mas que me hiciera el amor, pero se tomo su tiempo, volvió a subir y siguió besándome mientras tocaba mis partes intimas estimulándolas también, era tal mi excitación que prácticamente le pedí casi susurrándole al oído que me penetrara, se acomodo delante de mi, abrió suavemente mis piernas y toco mi clítoris, de una forma única, como jamás nadie lo había hecho, me produjo tanto placer que antes de darme cuenta estaba totalmente húmeda, introdujo dos dedos dentro de mi y sentí una descarga eléctrica recorrer mi cuerpo, comencé a moverme al compas que ella me marcaba, sentía mucho placer, mis gemidos inundaron la habitación posteriormente, se acomodo sobre mi, y pego nuestro sexos, comenzó a moverse en el mejor vaivén sentido hasta ese momento, pude sentir el calor de su  parte intima junto al mío y mi clítoris nuevamente entro en acción y sentí mas placer, pude notar entre la poca luz que entraba a la habitación por la ventana que ella estaba disfrutando mucho también ese momento, continúe moviéndome e incrementamos la velocidad, nuestros sexos estaban mojados y yo deseaba que me penetrara otra vez, la necesitaba dentro de mi, se lo pedí y se inco entre mis piernas, con dos dedos me penetro y con los otros dos tomo mi clítoris para estimularlo, sentí  un millón de descargas y mucho placer mis gemidos que hasta ese momento habían sido moderados, no pudieron ahogarse mas y mi respiración se acelero, yo me retorcía en la cama de tanto placer y ella me veía fijamente, me comento que le agradaban mis senos grandes, los tomo entre sus manos y comenzó a chuparlos mas rápido, introdujo de nuevo sus dedos dentro de mi mientras mantenía mi seno en sui boca y lo succionaba…fue exquisito, lo hicimos toda la noche, sin dormir, descansábamos un poco, tomábamos agua y comenzábamos de nuevo, entre esos descansos me confeso que había terminado con su novia de Querétaro, pero que en las vacaciones se había ido con sus amigas de la normal a un viaje y que se había reencontrado con una ex, de la cual se entero estaba mal de salud y aunque no la amaba ya, le pidió que la dejara ayudarla por el gran cariño que sentía por ella, pero que no se lo había permitido como amigas, sino como pareja y que Aby había accedido, asi que ahora andaba con otra persona, al principio me moleste, pero después recordé que no nos volveríamos a ver, así que, que mas me daba con quien estuviera?, con esa idea en mi mente continuamos, además de que tampoco quería parar, fue genial, grandioso, nos sorprendió el amaneces y fue el mas bonito en muchos, muchos años.

Nos levantamos a las 10 de la mañana sin haber dormido nada, nos metimos a bañar y nos arreglamos, acomodamos nuestras cosas en las maletas y dejamos la habitación, pasamos a desayunar, platicamos acerca de lo que había pasado con su novia de Querétaro, me dijo que se llamaba Gabriela y que le había comentado que iría con sus amigas de la normal de viaje y que querían ir a ver a su ex; la cuan era amiga de todas y ellas ignoraban la relación que las había unido; porque había estado enferma, pero todo en plan de amigas y que su Gabriela primero le había dicho que no tenia problemas, estando en el viaje Aby le llamo para desearle buena noche y que Gaby la sorprendió diciéndole que mejor terminaran y que se quedara con su ex, colgándole el teléfono, al principio Aby no le tomo mucha importancia, ya que me dijo Gaby acostumbraba a tener reacciones de ese tipo con ella, así que solo le mando un mensaje diciéndole que la amaba a ella, pero recibió la misma respuesta, después de dos intentos mas y teniendo siempre la misma actitud de parte de Gaby, decidió dejarla en paz y fue cuando su Ex (en ese momento me entere que se llamaba Guadalupe) le había pedido estar con ella, pero no como amiga, sino como pareja y Aby le dijo que aunque no sentía por ella lo que años atrás, intentaría estar ahí cerca y que volvieran a ser lo que antes fueron, una pareja que se amaba.

La escuche y no, no quería mas detalles, lo que sentía ahora era alegría por haber estado con ella y el pensar que no volveríamos a vernos por extraño que pareciera me dolía un poco, regresamos a Tlaxcala, me llevo a la estación, nos despedimos con un abrazo y sin decir si volveríamos a vernos nos despedimos, ella me agradeció nuevamente y yo solo sonreí, me sentía viva, plena y un poco temerosa.

Aborde el autobús y mientras venia en camino pensé en esa noche, me sorprendí sonriendo con solo imaginar lo que había pasado, me mojaba de nuevo, para entonces ya no estaba tan segura de no querer volver a verla, sentía algo dentro de mi, algo que no quería reconocer aun y me decía a mi misma, que esto no me llevaría a nada, ella estaba con alguien mas, me recrimine pensé que si tal vez, solo tal vez hubiera venido aquella vez entonces seria yo la que ocupara el lugar de la ex, pero bueno las cosas pasan por algo y esta historia apenas comenzaba a escribirse, aun no se jugaban las cartas principales…