Benamadena (05: en el garage)

Me dijo que quería enseñarme algo.

Hola amigos, continuare con el relato anterior donde lo habíamos pasado en grande mis sumisas y yo en un club de intercambio, donde también hicimos amistad con una pareja de Málaga y con la que quedamos en volver a vernos,

De ahí nos fuimos al hotel, donde estuvimos charlando un rato y nos quedamos dormidos los tres en la cama.

Por la mañana nos levantamos y nos fuimos de excursión por la zona. Y fuimos a la playa, cuando estábamos allí tomando el sol recibo un msg, era de la pareja con la que estuvimos anoche, me decía que estaban por la zona y si me apetecía tomar una cerveza con Jaime, que asil se llamaba el chico, yo les dije a mis sumisas que tenia que ir a hacer unas cosas, y que les dejaba las llaves del coche por si querían ir a algún sitio, me fui y lo llame para vernos, en pocos minutos estábamos tomando una cerveza el y yo en una terraza, me pregunto si conocía algo sobre S/M, pues al ver la noche anterior que mis chicas tenían collares de perro, le dije que eran mis sumisas, pero que esto empezó hacia un par de días, y que nunca lo habíamos hecho ni teníamos experiencia, entonces me dijo que quería enseñarme algo, subimos a su coche y nos dirigimos a su casa, tenían un adosado con un poco de jardín y garaje, al llegar a casa, estaba su mujer Silvia haciendo las tareas de casa, nos ofreció una cerveza y comentamos lo de la noche anterior, después Jaime me bajo al garaje, aquello era un garaje normal, pero empezó a mover cosas y enseñarme, yo cada vez alucinaba mas, junto un par de tablones y tenia una especie de X con grilletes en las esquinas, de otro sitio tenia cadenas colgadas, varios látigos, en fin muchas cosas de S/M, mi cabeza no paraba de dar vueltas imaginando aquello con mis sumisas, luego subimos a la casa y ella me acerco un ordenador portátil, me estuvo enseñando fotos, fotos de ellos, las fotos eran preciosas, ella atada, en varias posturas, azotada, en fin vi. Muchas fotos, yo inevitablemente empecé a tener una erección, me estaba poniendo como una moto, entonces ella me dice, parece que las fotos te gustan, verdad?, joder, me encantan,

Ya lo veo, me contesta, poniéndome la mano sobre el paquete y acariciándolo por encima, luego abrió la bragueta y la saco fuera, Jaime se acerco y se la metió en la boca, ufff como me gustaba aquello, ella me besaba y el me la chupaba, yo apenas pude aguantar unos minutos y pronto empecé avisar mi corrida, pero el siguió con lo que le llene la boca, estuve un par de veces a punto de cojerle la polla pero no se, no me atreví,

Después de eso me recompuse y me dijeron que llevara a su casa a mis sumisas que las iban a adiestrar bien, y en eso quedamos a una hora convenida, luego Jaime y yo volvimos a benalmadena, por el camino llame a mi sumisas y estaban en un burguer, Jaime me dejo allí en la puerta, y me dijo que no dijera nada sobre lo que me enseño, que ya lo probarían ellas, habíamos trazado un plan para la noche.

El resto del día lo pasamos paseando y de compras,

Por la noche se fueron a vestir para salir, pero les dije que solo se pusieran las medias, los ligueros, y el vestido, yo coji los antifaces,

Cuando subimos al coche les puse los antifaces y me dirigí a casa de los amigos, cuando estaba cerca les hice una llamada perdida, al llegar tenían la puerta del jardín abierta con lo que metí el coche dentro, y las baje con los antifaces puestos, Silvia me beso en la boca y después las beso a cada una de ella en la boca, y Jaime dijo,

Entramos en casa les quitamos los vestidos, las llevamos al garaje, estaba todo preparado, a mi mujer la atamos sobre la X de madera con lo que estaba toda abierta y con el culo para ser azotado, a nuestra amiga(zorrita) le atamos los brazos abiertos a unas barras con grilletes en las puntas y en los pies igual, esa barra tenia un grillete en el centro, bajo una cadena de un elevador eléctrico con una cadena al techo, allí estaban preciosas, mi mujer en cruz sobre la madera y la zorrita en el centro de la habitación en igual posición con lo que quedaba todo al alcance,

Jaime empezó a hablar.

Amigo me has traído un par de zorritas desobedientes, y tienen que aprender a obedecer sin rechistar, ser castigadas,

A eso se acerca Silvia a mi mujer y le suelta un par de cachetadas en el culo que soporta sin rechistar, luego le mete la mano por debajo y le toca el coño, metiéndole un par de dedos sin mucho miramiento, luego se va hacia nuestra amiga(zorrita), y le pasa la mano por la boca, limpiándole los jugos de mi mujer, luego le da un par de azotes en el culo y le mete la un par de dedos, exclamando, joder como se ha puesto la zorrita esta,

Le saca los dedos y se los lame, ummm que bien sabe esto,

Jaime coje una fusta y comienza a darle a mi mujer, que aguantaba estoicamente, algunos eran realmente fuertes y quedaban marcados en el culo. Silvia me cojio de la mano y me sentó en un sillón, allí estaba yo observando la escena, después cambio y cojio algo parecido a una paleta de pin pon, y siguió dándole, la zorrita estaba allí esperando su turno y oyendo solo lo que le hacían a mi mujer, Silvia se vino a mi, se sentó a mi lado y me empezó a acariciar la polla que en esos momentos estaba a tope, de vez en cuando me daba alguna chupadita, luego Jaime se fue hacia la zorrita y empezó a acariciarla, cuando llego a su coño le dio un trotazo, que hizo que levantara la cara, después empezó a darle varios mas, no se quejaba, aunque le debía doler, pues se le notaba en la cara, después de darle varios tenia el coño enrojecido y tas partes altas de las piernas también se llevaron algunos trotazos, luego cojio la fusta y le volvió a dar en el coño y piernas, luego le dio la vuelta para que yo pudiera verlo todo y empezó con el culo, que azoto ampliamente,

Silvia se levanto y subió a la casa, bajo con un corsé de plástico o cuero, no se, era precioso, negro, entonces le soltaron las manos a la zorrita y le quitaron el corsé que tenia puesto, para ponerle el otro,

Como ya dije anteriormente te Silvia era mas menuda que mis sumisas, y ese corsé era de los que se atan con cuerdas cruzadas por detrás, se lo pusieron y le estaba muy pequeño, pero lo apretaron mucho y cuando la vi. Con ese corsé puesto tuve que hacer esfuerzos para no levantarme, estaba fantástica, los pechos que eran de tamaño normal parecían enormes y los pezones parecían a punto de saltar,

Le costaba trabajo respirar, le volvieron a atar los brazos arriba, Silvia me trajo una cámara de fotos y de vez en cuando hacia alguna, me encantaba verlas así,

Silvia cojio un consolador anal y después de lamerle el culo a la zorrita le puso un consolador anal, yo hubiera cogido algo de lubricante, pero ella se lo metió y le entro muy bien, entro solo, y empezó a gemir, luego Silvia se lo saco y metió otro mas gordo, aquello ya no entraba tan fácil, pero también entro, le estuvo follando el culo un rato.

Mientras Jaime hacia lo mismo con mi putita, las dos tenían el culo bien abierto, luego Silvia se lo saco y metió un dildo con una base estrecha para que no se saliera, Jaime hizo lo mismo con mi putita, allí las dejaron a las dos, se vinieron conmigo y empezamos a charlar como si no estuvieran allí, el también mostraba una buena erección, entonces Silvia se agacho delante nuestra y nos la empezó a mamar a los dos alternando, en una de las veces que me la estaba chupando a mi, alargue la mano y se la coji a el, no había tocado nunca una polla, pero la sensación me gusto, se la estuve masajeando un ratito,

Luego se levantaron diciendo, bueno zorritas, se acabo el descanso, diciendo esto descaro un fustazo sobre el culo de mi mujer, y en la espalda, le daba bastante fuerte, le arranco algún que otro grito, Jaime dijo, da igual que grites aquí nadie te oye, pero lo único que vas a conseguir es que te de mas fuerte, así que no grito mas,

Luego la soltaron y la ataron en el mismo sitio, pero esta vez mirando hacia fuera, y le empezó a da en las ingles las piernas y el coño que ya empezaba también a enrojecer, yo pensaba que no aguantaría mas, no me imaginaba que aguantaran tanto,

Me levante y le metí lo dedos en el coño a mi putita, estaba empapada, acerque mi boca a sus pechos y le mordí un pezón, estaba riquísimo,

Luego me volví a sentar a ver el espectáculo,

Jaime seguía con la fusta y Silvia le puso las pinzas de los pechos,

Jaime vio que mi mujer decía algo bajito, se acerco a oírlo y le decía que se estaba orinando, a ver putita repíteme eso, lo volvió a repetir bajito, y el volvió, no te oigo, y mi mujer sin mas dijo, que me meo joderrr,

Entonces Silvia dijo, tienes que aguantarte, sino tú castigo ser mayor, y le empezó a follar el coño con un consolador, luego la dejo, mi mujer se debatía entre correrse u orinarse,

Jaime se fue hacia la zorrita que seguía allí colgada y la soltó, la puso de rodillas como los perros, se la hizo chupar un rato, luego la llevo y la acostó debajo de las piernas de mi mujer, Silvia le volvió a meter el consolador a mi mujer y volvió a follarla con el, entonces Jaime dijo, ahora puedes orinar, pero como, así?,

Como una única respuesta recibió un par de fustazos en la piernas, quien te dio permiso para hablar?, haz lo que te digo y no preguntes,

Entonces mi mujer estaba muerta de gusto con lo que le estaba haciendo en el coño con el consolador, se ve que quería orinarse pero no podía, eran dos sensaciones juntas, Silvia se le acerca al oído y le dice, no sabes si correrte o mearte, no?, entonces Jaime dice, tienes permiso para correrte así que tu misma,

Mi mujer daba gritos, se estaba corriendo con el consolador y de pronto saca Silvia el consolador y broto de allí un chorro de pis, ya solo gritaba, se retorcía, orinaba, estaba loca, le vinieron mas orgasmos mientras soltaba el chorro que iba a parar al cuerpo de su amiga que estaba allí debajo, y al final se dejo caer quedando colgada de los brazos pues ya sus piernas no la aguantaban, allí quedo como adormecida,

Era el turno de la zorrita que estaba allí tumbada con todo el cuerpo mojado, la levantaron y la pusieron de rodillas, la trajeron hacia donde yo estaba, y Silvia se sentó a mi lado, acercaron su boca al coño de Silvia y la cojio del pelo haciéndole comer todo,

Yo me baje del sofá y me puse detrás para verlo, yo estaba que me salía viéndola comerse ese coñito, quería follarme ese culo que en esos momentos estaba perforado por el dildo, no aguantaba mucho mas, así que se lo saque y le metí la polla en el culo, entro solo, lo tenia muy bien abierto, así me la estuve follando mientras se lo comía a Silvia, que ya daba notas de un orgasmo cercano,

Mientras Jaime fue a soltar a mi mujer de donde estaba y se la trajo al lado de la zorrita, hizo lo mismo que yo, le quito el dildo y le empezó a follar el culo, entonces la zorrita al notarla a su lado acerco la mano a su coño que empezó a masturbar, mi mujer volvió a sus orgasmos, y sus gritos, Jaime se corrió en su culo

Silvia también, tuvo su orgasmo con la boca de la zorrita, que también se estaba corriendo con mis embestidas en el culo,

Yo estuve un rato, pero no se porque no me corría, supongo que de haber aguantado tanto tiempo, pero la tenia como una piedra, viendo que no me corría Silvia se quito de esa posición y le quito los antifaces a las chicas, estaban agotadas y recuperaban el aliento, entonces me hizo señas para sentarme en el sofá,

Me senté y ella se subió sobre mí metiéndosela, empezó un movimiento muy sensual, y Jaime me metió la mano en los huevos y a veces pasaba un dedo por mi ano si meterlo,

De pronto me vino una gran corrida, de esas inesperadas que vienen de pronto y que parece que nunca van a dejar de soltar leche,

Nos quedamos todos allí sudando, y sin abrir la boca, hasta que Jaime dijo, esto tenemos que repetirlo otro día, y mi mujer salto con un siiiiiii que le salio de dentro,

Estuvimos un rato charlando y luego nos subimos comer algo y al dormitorio, pero esta vez sin sado, sino todos en la cama, para hacer y tocar todo lo que nos viniera en gana, también fue fantástico,

Espero que les gusten estos relatos que vuelvo a repetir son verídicos, lo único que esta cambiado son los nombres, es lógico,

Espero volver a enviar lo siguiente muy pronto

Gracias por leerme