Belinda

BELINDA

Mira que es atractiva la tía, mira que pelo liso negro, que moldea ondulado y lo hace caer como la más guapa de las actrices de hollywood que hayas visto. Piel blanca, labios gruesos y rosados, nariz de cleopatra y ojos negros azabache. Esbelta figura y atlética, tiene cintura y anda con una clase que se te va la perola, pero mira que es mala.... que ha nacido con mala leche, pero no de modales, pues es educada y elegante, con clase, pero hijaputa como la perra que es, Belinda.

Estaba viviendo con un buenazo, forrado y futbolista del equipo local de 2ª división, y aun así tenia sus miradas picaras y contactos con los hombres mas adinerados a los que tenia acceso, unos por motivos de trabajo de el, y otros por ella, a sus 27 años. Con ese pecho redondo y descarado de lo erguido que tenia, sus fabulosas piernas largas, unidas a una cadera que dibujaba un culo de modelo, con una cinturilla que hacia girar la cabeza a todos.

Un día me encargo un servicio en mi empresa, y me pareció preciosa, todo era delicioso, hasta nos peleamos por ver quien iba a ser el que trabajara en su casa, y soñar con estar allí a solas con ella… pero… puteo al montador, puteo al transportista, hizo cambiar los productos 3 veces por que decía que venían feos de fabrica, insulto al fabricante. Tras hacer todo lo que nos pidió, dijo que no nos pagaba por que no le daba la gana... y tenia dinero, de verdad, que tenia mucho, se compro un BMW serie 5 de los nuevos, la muy puta. Y cada vez que trataba de cobrarle me decía que me pagaría pero cuando le viniera en gana, tal cual lo lees aquí... La muy perra.... 7200€ para su coño... así sin mas... y casi me da una ulcera, hasta mi mujer estaba asustada conmigo.

Y un día ya no pude mas, la deseaba y quería matarla pero humillándola, despellejarla la muy perra. Así que me decidí y busque un frasco de éter, la seguí en el parking privado de su edificio y cuando iba a entrar en el coche derramé el interior en su ropa cerrando la puerta, ella se puso nerviosa y solo vio mi figura con chándal barato y la cara con pasamontañas, en 5 segundos cayó dormida. Espere 20 segundos mas y abrí las puertas de su coche para ventilar, subiéndome en este y llevándola hasta el cortijo de un amigo al que solo vamos de vez en cuando. Conduciendo la ví en el asiento del copiloto, bellísima, con su camisa blanca entreabierta, y su pantalón ajustado negro, con los tacones brillantes y afilados... que tobillos, que piernas, que mollita de pecho asomaba entre la camisa... la muy puta... ahora se iba a enterar de lo que vale un peine...

Llegamos en 30 minutos, había un chucho dentro del recinto, pulgoso y sucio, que vino a saludarnos moviendo la cola, seria mediano, el típico perro de caza marrón y blanco de unos 60 cm. de alto. La lleve dentro del cortijo, que estaba algo fresquete, sabia que no tardaría en despertarse... por lo que me apresure y le puse mi pasamontañas al revés, la puse de rodillas recostada sobre un banco, para atarle las manos bien abajo y las rodillas con los bajos del viejo banco de madera... Una vez sujeta le abrí la camisa y le descoloque el sujetador, que pezones, que tacto y que maravilla de frío que endurecía aquellas bolitas rosadas... Le baje los pantalones, y vaya espectáculo de cintura fina con culo precioso que apareció, vaya tanga de lujo, con el encaje a juego con el suje, olía a mil maravillas....a calorcito, a hembra dulce... a hija de puta finolis.

No pude mas con la excitación, y sin perder tiempo ( por si acaso me fallaba algo y perdía la oportunidad ), me la saque, me coloque detrás de ella y despacito se la metí, para mi disfrute, que gustazo, que excitación, que calentito estaba, que aroma, que suavidad, me fui como una jibia, de momento, no tarde ni un segundo... ya estaba conseguido... ahora a relajarme...

Me repuse un poco, salí fuera y mire alrededor para asegurarme y respirar tranquilo, cuando empecé a oírla hablar. Corrí hacia a ella, y la encontré tratando de liberarse, con un hilo de mi semen saliendo de su lindo conejito... Empezó a ponerse histérica, así que saque las llaves y se las puse en el cuello, lo que hizo que se quedara inmóvil.

Fíjate que despiste que me deje la puerta abierta, y entro el chucho apestoso, este, juguetón y cariñoso como era, se puso a olfatearme a mi y a Belinda, hasta que dio con su precioso culo, lo que, al perfume sentido, decidió darle bastantes besitos con la lengua por los cachetes, y eso encendió mi lado mas fauno... le abrí los cachetes con una mano mientras con la otra tenia la llave, Belinda sollozaba, la muy perra, y mientras el chucho dio con la fuente de mas calor, y se entretuvo allí, dando unos lengüetazos sonoros estupendos. No entiendo el efecto que provocaron muy bien, pero de repente Belinda se quedo en silencio y muy quieta, por lo que me relaje y pude acercarme a observar como el animalito se deleitaba con ese perfumado manjar... y es que era para ponerse a tono, que buena estaba la jodida, así que quise inventar lo que fuera para que el perro se la follara y así joderla mas... intente coger al perro y levantarlo pero este se zafo de momento, parece que no quería cooperar...

Yo volvía a estar a tono, pero como el corazón me latía como una moto por los nervios de poder hacer esa fantasía realidad, quise hacer las cosas bien, así que me relaje, y volví a empezar de nuevo... Esta vez el perro al acercarse fue directamente al chocho de Belinda, y ahora me acerque despacio para ir acariciando al perro, y así, que se acostumbrara a mi, hasta llegar a su pija, que notaba algo durilla... Empecé a masturbarlo despacito, copando con la mano toda la bolsa del pene, sin tocarle la punta, apenas sin moverme, viendo como este solo empezaba a hacer los movimientos del folleteo, desviando su mirada a mi mano y lamiéndome como agradecimiento, y volviendo al pronto a devorar la cueva de Belinda, que no se como, no se movía ni un pelo...

A esto que el perro empieza a moverse ya bastante fuerte, arqueando la espalda y justo ahí suelto la mano para que avance si quiere recibir gustito otra vez, y funciona, así que sin darme cuenta, este avanza sin subir pegando su pecho contra el culo de Belinda, atrapo otra vez el bulto y el solo, hop, y se sube atrapándola con las patas de adelante.... que fácil!!... Y esto que empieza Belinda a gritar ¡ Pero que es esto ! ¡ Por favor bájamelo de encima, por favor!, y mientras, guío agachado el rosado dardo a la zona brillante y remojada, y ya apenas ví mas, se abalanzó el perro hacia el culo, tapando todo y moviéndose como un desesperado, clavándole toda su virilidad de golpe, y haciendo que Belinda se desesperara, pero solo unos segundos, pues los sollozos de repente se volvieron raros, como gritos pero ahogados o algo así...  que escena, madre mía, que maravilla....

Duro poquito, el perro como yo, se fue de momento, pero el maricón no quería bajarse, así que hice una fotico con el móvil, y me deleite con la situación...

Tenia la espalda llena de babas del perro, la perra, je je je, y estaba sollozando de forma rara todo el rato, je je je. Al poco ví que el perro se bajo con un pollón tremendo y rojo, y le dejo el chocho como abierto... así que ahora me dispuse a disfrutar... me saque la polla, le eche un poco de saliva al culo, y empezó Belinda otra vez a sollozar, la puse en el sitio, y empecé a disfrutar de lo lindo, que calentito.... ahhh, que gustado encular a esta perra.... y me dispuse a jugar con las teticas que las tenia aplastadas por la tabla del banco, una se salía y la otra se aplastaba, y me sorprendió ver que los pezones de las dos estaban de puntísima, duros duros para apretarlos, pensé que seria por el frío... Y así estuve un buen rato, hasta que el chucho se acerco a ver lo que podía chupar, y así, me termine de bajar los pantalones para disfrutar esas lamidas de huevos que me propino la bestia... que maravilla, y entre el culazo, las tetas, y ese culo rico, me fui corriendo de la forma mas vengativa que haya hecho nunca... que gustazo...

Así me levante y me repuse cuando el perro cabrón empieza a chupar su coño otra vez, y de repente se sube y empieza otra vez a puntear su culo.... Belinda ya apenas hacia ruidos.... solo estaba quieta, así que decidí descansar un poco viendo la escena....

El perro cabrón no se cansaba, y trataba de ensartarla de cualquier manera, de lado, de otro lado, chupaba aquí, chupaba allá, en una ocasión le dio por lamer el duro pezón que asomaba aplastado por un lado, y en esto que me dio por ayudar y cuando estuvo en posición cercana, le volví a coger la minga y ponerla pero en el culete... a ver si la rompía a la puta esta.... y esta vez duro mas que yo incluso, que ritmo tenia el bicho... y dale y dale, y la otra respiraba profundo y todo... hasta que termino el perrito, quedándose mas enganchado esta vez.

Una vez terminado, volví a coger el éter, dormí a Belinda de nuevo, la lleve al BMW, y la deje tirada con los pantalones bajados y la camisa abierta en el mismo parking dentro del coche....

FIN