Becaria chantajeada por Gerente II

Me estaba penetrando muy fuerte que cada vez que movía mis caderas sentía que mis entrañas estaban siendo estiradas... Continúa el chantaje hacia la becaria que poco a poco va cediendo. déjenme sus comentarios para ir mejorando, también acepto sugerencias.

Han pasado ya varios días desde que el Gerente de Recursos Humanos encargado del programa de becarios al cual pertenezco de mi universidad me chantajea obligándome a tener sexo con él, debido a que me grabó teniendo relaciones con mi novio en el estacionamiento de la oficina.

No sé en que vaya a terminar todo esto, no sé si denunciar y que todo se vaya al carajo o solo aguantar lo que resta del programa y que me deje en paz como lo prometió

G -Mírate nada más, hace diez días de nuestro primer encuentro y parece que te has acostumbrado bastante a esto.-

Estaba chupando esa gran cosa que tiene entre las piernas, no me cabía en la boca así que lo masturbaba mientras pasaba mi lengua por su cabeza gorda. Él estaba sentado en su sillón sin pantalones con un mano recargada en el respaldo y con la otra tocando mi trasero y metiendo uno que otro dedo en mi vagina. Yo estaba a un lado de de rodillas, mamandosela con solo la blusa del uniforme y con las tetas de fuera restregandoselas sobre la pierna. Intentaba hacer lo mejor posible pero no sabía bien nunca había tenido frente a mí una verga de esas dimensiones.

G -¿Querías pene verdad? Jajaja… estoy seguro que estabas pensando en él mientras trabajabas.-

Su olor no era el más agradable, su sabor mucho menos, pero había algo que me excitaba demasiado y le estaba dando la mejor mamada que había hecho en mi vida. Mi labios recorrían lo que podía del largo de su pene, mi lengua se encargaba de su cabeza, tenía que utilizar ambas manos para poder masturbarlo.

V -nhh… ahh… mmm.-

G -¿Mentiste cuando dijiste que no tenías mucha experiencia? En realidad eres bastante buenas para chupar vergas. ¿Verdad?-

V -Eso es… mmmm… algo… ahhh… que vi en… internet.-

G -Videos porno ¿Eh? No imagine que una chica buena como tú fuera tan pervertida.-

Esas palabras retumbaban dentro de mí cabeza, al instante me pidió que me levantara que quería que me subiera a su verga, yo no pude demasiada objeción y lo obedecí. Me senté sobre él dándole la espalda, mi vagina aún era demasiado estrecha para su verga y la tenía tan grande que yo me sentía completamente llena y aún no terminaba de meterla.

G -Siii… asi… comienza a mover tus caderas.-

V -Ahhh…. ahh.. sii… siii… ahhh..

Mis tetas rebotaban de arriba a abajo, él las apretaba y pellizcaba mis pezones. Me estaba penetrando muy fuerte que cada vez que movía mis caderas sentía que mis entrañas estaban siendo estiradas, era demasiado intenso el ritmo con el cual me estaba cogiendo que yo me estaba volviendo loca.

G -¿Qué tal se siente Vane? Parece que en verdad te está gustando.-

No sabía qué estaba haciendo, me preguntaba qué era lo que estaba pasando y por qué en verdad lo estaba disfrutando, la verga del Gerente en realidad me estaba haciendo sentir bien y él lo sabía, notaba mi excitación y comenzó a darme gusto.

G -No hay necesidad de que te contengas, comienza a disfrutarlo tanto como quieras.-

Me volteo, me empino sobre el escritorio me levanto una pierna y volvió a penetrarme, sus embestidas eran más duras con más fuerza y rapidez, su pene entraba y salía por  mi vagina que estaba completamente mojada.

V -Ahhh… ahhh…. no… por favor… ahhh… pare… se lo… ahhh… se lo ruego… pare.-

G -¿Parar? ¿Parar por qué? Si se nota que lo estás disfrutando tanto.-

Se acercó completamente a mí me tomó de la cara y metió su lengua en mi boca, algo dentro de mí sabía que eso estaba mal, pero mi lengua comenzó a jugar con la suya, nos estábamos besando atascadamente. Las piernas no paraban de temblarme, ya no tenía el control de mi cuerpo.

G -Puedo sentir como aprietas más, puedo sentir como te estremeces

Estás a punto de correrte. Yo también estoy por correrme, así que no te detengas.-

V -Ahhhhhhhhhh……-

Ese fue el orgasmo más rico que había tenido en toda mi vida. En ese momento entendí que la verga del Gerente podía hacerme sentir cosas que mi novio no podía hacer.

Toda la tarde pensé en ese momento y no sabia que hacer lo había disfrutado tanto pero estaba haciendo mal además esa noche iba a salir con mi novio al cine y después a cenar, siempre que ocurría eso terminamos en su departamento haciéndolo.

V -Más fuerte… ahh… ándale Sergio... dame más fuerte. Por favor cógeme hasta más no poder… ahhh.-

S -¿Soy yo o te estás volviendo más atrevida recientemente?-

V -Te amo Sergio, me fascina como me coges.-

Estaba completamente perdida y lo sabía porque comenzaba a comparar el pequeño pene de mi novio con la gran verga del Gerente y no me gustaba para nada, yo siempre había sido fiel y mi novio era lo más importante para mi, no podía disfrutar del sexo si no era con él.

Pero sucumbi ante el Gerente, sentada sobre sus piernas de frente a él y ambos completamente desnudos con mis brazos rodeando su cuello y los suyos rodeando mi cintura sus besos no me parecía tan repugnantes al contrario los disfrutaba en demasía que ni a mí novio lo besaba así.

G -Realmente disfrutas teniendo sexo conmigo ¿Verdad?-

V -No… ahhh… no… no no es verdad…

G -Jajaja tu cara lo dice todo, tú todavía no lo admites y si así es como va a ser… tendré que hacerte entender de la manera difícil.-

Me agarró de las nalgas, me levanto y de una me metió toda su verga. El Gerente sabía lo que hacía me daba en diferentes posiciones, me movía de un lado para otro, me levantaba las piernas, hacia conmigo lo que quería, pero siempre cogiéndome muy fuerte y rápido.

G -Si sigues moviéndote así no podré soportarlo más.-

V -Ahhh… pare… por… ahh… pare ya… ahh.-

G -¿Cuántas veces te he hecho correr hoy? Acepta que mi verga es muy buena.-

V -Nooo… ahh… no me… no me… he corrido… y no… no se... siente… bien.-

De verdad que estaba mal, sabía que estaba engañando a mi novio, sabía que me estaban chantajeado, pero ¿Por qué lo estaba disfrutando tanto?

G -¿Por qué te estás conteniendo? Deja de mentirte a ti misma, deja de pensar en ese inútil.

En ese momento cambió todo, no necesitaba contenerme más, necesitaba disfrutar.

Me tenía de perrito jalando mis brazos hacia atrás dándome muy duro. Sentía sus huevos chocar contra mí una y otra vez, mis pechos rebotaban al mismo movimiento.

V -Siii… siii Licenciado… ahhh… usted… es tan bueno… increíble… ahh… siii… se siente tan bien… cogame… cogame… cogame tan duro… ahhhhh… por favor…-

G -Finalmente eres honesta, ahora dime… ¿Qué verga te coge mejor?

V -La suya… ahh… su gran… verga… esa es… la que me coge… ahhh… la que me encanta… la que me hace sentir bien… ahh… no como… el pitito de mi novio… ahh…-

G -No te contengas dejalo salir.-

V -Ahhh… ahhh… estoy… es… estoy apunto de… ahhh… corrermeeee… ahhhhh... siiiiiiii… ahhhhh…-

Estaba agotada de tanto placer, mi cuerpo estaba sudado, estaba llena de semen saliendo por mí vagina. Tumbada boca abajo sobre el sillón más que una estudiante de universidad parecía una cualquiera. Esto apenas era el principio había una cosa que el Gerente quería tomar de mí… mi virginidad.

Continuará...