Barbacoa con los amigos (I)

Nos vamos de barbacoa al chalet con piscina de unos amigos

Parece que os han gustado las aventuras con Paula así que voy a seguir contando más. Para esta aventura  no es necesario leer los relatos anteriores, pero si se aconseja para conocer a los personajes


Corría primavera y ya empezaba a hacer buen tiempo. Una semana nos llamaron una pareja de amigos con los que nos solemos juntar bastante. Él es amigo mío de toda la vida, y los padres de él tienen bastante pasta y tienen una casa bastante grande. Tiene una piscina cubierta, de manera que no te puedes bañar en ella todo el año pero mientras no sea pleno invierno y haga un frio que pela no hay problema.

Nos llamaron que ese fin de semana daban bueno, y los padres de Julián (así es como se llama) habían invitado a otra pareja de amigos a hacer una barbacoa en su casa. Nos estuvo comentando que con la cubierta ya había estrenado ese año y se estaba muy bien, así que aceptamos y quedamos para hacer el finde, y que Julián se encargaba de comprar todo.

Durante la semana le estuve intentado convencer a Paula para que se pusiera el tanga de bikini que le había comprado en el centro comercial. No conseguí convencerle, pero sí de que se pusiera las braguitas brasileñas que se compró a la vez. No parece gran cosa, pero Paula nunca había llevado algo tan escueto de tela delante de amigos, así que de pensarlo durante toda la semana estaba cardiaco.

Llego el fin de semana y finalmente la otra pareja de amigos no pude ir. Llegamos a la casa de Julián y nos abrió Eva, la novia de Julián. Eva es una chica rubia y alta, delgada (para mi demasiado). Tiene pocas tetas y debido a que va bastante al gimnasio tiene un culo muy bonito, para nada delgado, y que le gusta lucir en pantalones apretados.

Cuando nos abrió iba en un bikini rosa fucsia. La parte de arriba era sin tirantes, aunque como Eva tiene pocas tetas no dejaba ver más de la cuenta. Después de saludarle y darle dos besos se dio la vuelta  para ir dentro de casa y le pude ver por detrás. La parte de abajo para mi desgracia no era nada comparado a la de Paula, tapándole todo el culo perfectamente. Aun así nunca había visto a Eva en bikini, y aunque le tapaba todo el bikini le hacía un culo impresionante.

Entramos dentro y saludamos a Julián que estaba limpiando la piscina. Fui con él a por unas cervezas y a meter a la nevera 2 botellas de vino blanco que habíamos llevado. Cuando volvimos las chicas ya estaban en la piscina, así que nos metimos con ellas. Paula estaba espectacular con su bikini nuevo. Era verde clarito. La parte de arriba era de triángulos que se ataban con unos nudos. Le marcaban un canalillo espectacular, y aunque no corría peligro de llegar a enseñar nada impudoroso, los triángulos se le movían algo y según como estuvieran colocados enseñaba bastante teta.

Estuvimos en el agua tranquilamente tomándonos la cerveza, cada uno con su pareja y hablando. Habíamos llegado bastante tarde así que en cuando nos la acabamos Jaime y yo nos fuimos a hacer la barbacoa. Por supuesto seguimos tomando cervezas, ellas en la piscina y nosotros mientras preparábamos el fuego.

Cuando ya estaba casi el fuego Paula y Eva se salieron a poner la mesa. Julián aun no había visto a Eva en bikini, así que cuando la vio se le quedo mirando. Yo me di cuenta perfectamente, y apostaría que Eva y Paula también, pero nadie dijo nada. En cualquier caso mientras estaban poniendo la mesa Eva se agacho un momento con el culo en pompa hacia nosotros, y yo también me quede mirando algo más de lo que la discreción recomienda. Con el bikini mojado Eva aun marcaba más el culo en la parte de abajo, y era espectacular.

Estuvimos comiendo muy tranquilamente. Durante la comida nos acabamos alguna cerveza más y las 2 botellas de vino blanco. Si le sumas que Julián abrió al final una botella de licor y nos tomamos varios chupitos al final de la comida estábamos bastante contentillos. Como suele ser habitual a ellas se les notaba algo más, pero especialmente a Eva, que al estar bastante delgadita parece que tolera el alcohol bastante menos.

Tras reposar un poco nos metimos otra vez a la piscina. Parece que entre la borrachera y ver a ambas en bikini tanto Julián como yo estábamos algo cachondos, porque los dos nos pusimos a jugar con nuestras respectivas parejas y a darles algún besito, pero nada escandaloso por ahora. Estuvimos un buen rato en la piscina y finalmente ellas se salieron a tomar el sol mientras nosotros nos quedábamos en el agua tomando unas cervezas.

Mientras estábamos en el agua escuche como Eva iniciaba con Paula una conversación que cambiaría la tarde

  • Me encanta tu bikini – le comentaba Eva a Paula

  • La verdad es que esta chulo, me lo compre hace unos meses en el centro comercial

  • Pues me encanta, aunque yo no sé si me atrevo a llevar bikinis con tan poca tela

  • A mí al principio también me costaba, pero a Pedro le encanta y le doy el capricho de vez en cuando – no le menciono nada de que incluso tenía algún tanga y que ya se lo había puesto en la playa

  • A Julián no le hace mucha gracia. Dice que no le gusta que me miren en la playa. Y como a mí me da un poco de corte. Me compre un bikini similar el año pasado y aun no lo he estrenado

  • Oye que yo no te lo he prohibido eh. Simplemente no me hace gracia – replico Julián desde el agua, y después se dirigió hacia mí – y a ti te da igual que miren a tu novia en la playa o que

  • A mí me da mucho morbo, que la miren pero luego me la follo yo – estábamos todos algo borrachos y no mediamos mucho lo que decíamos – no veas que polvos echamos este verano de pensar que le vieran las tetas y el culo

  • Oyeee, que eso no se cuenta – se quejó Paula

  • ¿Estuviste haciendo topless? – Le pregunto Eva – que valor

  • Si bueno. Al principio me dio mucho corte, pero luego se esta tan bien

  • Pues no te cortes eh – volvió a gritar desde el agua Julián

  • Cállate – le echo la bronca Eva – que ya vas borracho y eres un salido

La conversación se quedó ahí. Seguimos echando la tarde entre chapuzones en la piscina, jugando a las cartas y cerveza. A media tarde después de un chapuzón Eva dijo que tenía frio. El sol empezaba a bajar, aunque aún faltaba para que anocheciera y la verdad es que hacía más fresco. Eva se metió a casa y dijo que se iba a cambiar de bikini, que lo tenía mojado.

Nosotros seguíamos en el agua, aunque nos íbamos a salir enseguida pues Paula decía que también tenía frio. Estábamos de espaldas a la casa y Julián mirando hacia la puerta cuando vi que le cambio la cara y puso una cara rara. Me di la vuelta y Paula había entrado en la zona de la piscina con un bikini rojo. Metió los pies en el agua y se quedó sentada en el borde de la piscina mientras nos daba una nueva ronda de cervezas.

Al rato cuando nos salimos del agua, Eva se levantó, y en un momento que se dio la vuelta entendí la cara rara de Julián en el agua. El bikini debía ser del que hablaban antes. No era nada muy pequeño, lo normal hoy en día. De hecho el de Paula era algo más pequeño. Claro está, el culo de Paula sin estar mal no era como el de Eva, y ver a Eva con ese bikini era espectacular.

Paula se dio cuenta también, y no perdió la oportunidad de comentarle. Sé que no le había hecho gracia los comentarios de Julián esa tarde, así que no perdió la oportunidad.

  • Ese es el bikini que a Julián “no le hacía gracia” que estrenaras – le dijo acentuando ese mismo no le hacía gracia

  • Si, el mismo. Me lo había traído para igual estrenarlo mañana, pero me he dicho, que narices

  • ¿Qué te parece cariño? Te gusta – dijo Paula dirigiéndose a mi

  • La verdad es que te queda muy bien Eva – dije muerto de vergüenza, aunque Paula parecía dispuesta a ponernos a todos a cien

  • ¿A que le hace buen culo? – dijo mientras daba la mano y le hacía dar la vuelta a Eva para que la viéramos bien. Incluso le dio una palmada en el culo

  • Oyeee – se quejó Eva, ahorrándome el mal trago de tener que contestar. Por supuesto que le hacía buen culo – anda, dame crema – le dijo a Julián mientras se tumbaba boca abajo en la sombrilla

Julián se sentó encima de las piernas de Eva y pese a estar nosotros delante no perdió la oportunidad. No estuvo ni 30 segundos dándole crema por la espalda a Eva que enseguida paso a su culo. Se lo sobo bien sobado, pareciendo incluso que nosotros no estábamos allí.

Eva mientras tanto estaba con los ojos cerrados así que no se percataba de nada a su alrededor. Paula se sentó al lado mío, que por supuesto no perdía detalle del culazo de Eva bien manoseado.

  • No lo mires tanto que lo vas a desgastar – me dijo Paula al oído. Incluso me sobo un poco el paquete, que en ese momento estaba a cien. Afortunadamente estaba sentado y no se me notaba nada

Cuando Julián termino de darle crema, o más bien se cansó de sobarle el culo, ambos se sentaron, aparentando total normalidad. Seguimos la tarde con algún chapuzón más (pese a que teóricamente Eva se había puesto el bikini porque el otro estaba mojado). Si con el bikini nuevo ya le hacía un culo espectacular, mojado, que aún se marcaba mas era ya increíble.

Finalmente se hizo de noche. Julián nos dijo que nos quedáramos si queríamos a dormir. Había habitaciones de sobra y yo estaba bastante borracho como para coger el coche de vuelta. Además había sobrado carne de la comida y así encendíamos otra barbacoa y la terminábamos.

Antes de volver a encender la barbacoa, ya de noche, nos dimos un último chapuzón. El jardín tenia luces, por lo que la zona de las hamacas, la barbacoa, la mesa, etc estaba iluminada, pero sin embargo la zona de la piscina llegaba la luz por las justas. Esto me dio vía libre para en el agua sobar a Paula sin ningún reparo, ya que Eva y Julián no nos veían bien. Incluso cuando estos estaban lejos le saque un momento las tetas del bikini a Paula y le pegue un pequeño pellizco. Paula no perdía el tiempo y también me sobaba la polla por debajo del agua, mientras aparentando normalidad hablábamos con Julián y Eva.

Cuando las chicas se salieron tanto Julián como yo nos quedamos algo en el agua. Supuse que Julián también habría estado metiéndose mano con Eva y también se tenía que relajar como yo, ya que no había motivo para quedarnos en el agua.

Al salir ya hacia frio así que nos metimos a la casa para ducharnos y cambiarnos. La habitación que nos dieron para Paula y para mi tenia ducha, así que nos podíamos duchar tranquilamente. Sin embargo no eran mis intenciones. En cuanto atravesamos la puerta de la habitación y la cerré me abalance sobre Paula dispuesta a follarla.

Esta respondió a mis caricias y a mis besos mientras nos tirábamos a la cama, y mientras me bajaba el bañador y me sobaba la polla me dijo entre beso y beso

  • ¿Eres consciente de que no tenemos condones no?

  • ¡¡¡Nooo!!! No me acordaba

  • Buenoo, tranquilo, que podemos jugar un poco

Acto seguido se levantó de la cama. Se quitó las 2 partes del bikini, y poniéndose entre mis piernas se volvió a tumbar en la cama a hacerme una mamada. Se metió primero toda mi polla sin calentamiento entra en la boca, para después sacársela y empezar como de costumbre a chupármela lentamente.

Cuando no llevaba ni dos minutos chupándomela me pareció escuchar un ruido. Agudice un poco el oído y me di cuenta que claramente era la cama de nuestros amigos. Parece que también tenían ganas de echar un polvo. Le avise a Paula y esta dejo de chupármela para ponerse al lado mía. Mientras nos íbamos masturbando uno al otro teníamos el oído atento a ver si pescábamos algo.

La situación nos estaba poniendo cachondisimos. Yo tenía 2 dedos dentro del coño de Paula que estaba mojadisima. De repente escuchamos unos gemidos, claramente de Eva. En ese momento Paula me hablo al oído:

  • Me está poniendo la situación cachondisima. Consigue que me corra y te dejo correrte donde quieras

Ni me lo pensé. Me puse entre sus piernas y mientras seguía con dos dedos en su coño empecé a chuparle el coño. Mi lengua iba entre sus labios y el clítoris que estaba ya algo hinchado. Paula se movía del placer, haciendo que nuestra cama también sonara algo.

De repente se volvieron a escuchar gemidos de Eva. Simultáneamente acelere los dedos en el coño de Eva que se empezó a correr también. Pese a que vi que se mordía el labio para no hacer ruido se le escapo un gemido, que Eva y Julián tuvieron que escuchar perfectamente. Cuando dejo de correrse le deje descansar un poco.

  • ¿Sabes que te han tenido que oír no? – le dije

  • Si, lo sé. Pero bueno, también hemos oído a Eva

  • Anda, vamos a darnos una ducha

Nos fuimos al baño y nos metimos los dos desnudos a la ducha. Nos estuvimos besando mientras nos empezábamos a dar jabón, y Paula sin mediar palabra se agacho y me empezó a chupar la polla. Mientras me estaba chupando la polla llamaron a la puerta de la habitación.

  • Hola. ¿Puedo pasar? Os traigo toallas – era la voz de Eva

  • No pares de chupármela que estoy a punto – le dije bajito a Paula – Pasa Eva y déjanoslas en la cama – le dije después a Eva. La puerta del baño estaba cerrada así que no había peligro

Se escuchó la puerta de la habitación y pasos. Paula no solo seguía chupándomela sino que agarrándome del culo se la empezó a meter y sacar de la boca entera. Tras unos segundos sin oír a Eva esta toco la puerta del baño

  • ¿Qué estáis haciendo los dos en el baño pillines?

Fue escuchar esto de Eva que le saque la polla a Paula de su boca y me empecé a correr sobre su cara abundantemente. No sé cómo conseguí no hacer ruido porque la corrida fue increíble, dejándole la cara llena a Paula. Tras unos segundos esta, todavía con la cara manchada le dijo a Paula

  • A ti te lo voy a contar guarrilla. Anda déjanos terminar

  • No tardéis mucho. Que tengo hambre – le dijo Eva desde fuera

Paula se levantó, y después de lavarse la cara con el agua de la ducha me dio un beso.

  • ¿Te ha gustado cariño? – me dijo mientras me daba un beso

  • Como siempre, cada día la chupas mejor. Y con la corrida en tu carita estas guapísima. Anda, vamos a terminar que yo también tengo hambre