¿Bailamos? Epilogo

Toda historia que comienza debe terminar, algunas cosas quedan abierta en pos de un futuro; otras cosas quedan cerradas por ahora, pero se pueden abrir más adelante...ya que mientras una historia termina, otra comienza; lo que hoy es seguro, mañana no lo será. Si quieres segunda parte solo apoya.

¿Bailamos?

Epilogo

No hace falta jurar que mi vida a raíz de todo esto cambio, por las mañanas estaba con Cristina ya que María tiene que ir a trabajar; a veces retozábamos hasta tarde, hasta algunos días tuve que salir corriendo para mi trabajo porque no llegaba.

Respecto a la cafetería, poco a poco fui controlando el tema; mi tío empezó a descansar más, además siempre me miraba con orgullo. Tampoco es que se fuera mucho tiempo, se iba a echar una siesta a su casa y luego volvía; comprendió que era demasiado peso para mí y se lo agradezco. Las chicas siempre pasan a tomar el café de la tarde, normalmente juntas; mi tío me deja sentarme un cuarto de hora con ellas, siempre me mira feliz y solo yo me doy cuenta que en realidad sus ojos están tristes.

Por las tardes cuando salgo de trabajar y llego a casa, siempre pillo a María duchándose; tras hacerlo como animales en celo, nos relajamos hasta la hora del ensayo viendo alguna serie o película y luego en la calle vamos por caminos separados. Tras el ensayo, llegan mi tío y Cristina juntos; Miguel me pregunto sobre Cristina y le dije que nos estábamos conociendo, él se alegró por mí y prometió no decirle nada a Alberto. Mi tío fiel a su palabra se ha apuntado a clases, en un principio le cuesta eso de bailar y soltarse; arrimarse a desconocidas según el no es lo suyo, entonces le devolví su consejo: “imagínatelas desnudas” no sé si ayudarle le ayudo…pero reírse, ha estado riéndose toda la clase. Leti repentinamente ha dejado de tontear conmigo… no obstante, todos en clase la vemos muy cercana a Miguel; María cuando lo ve me sonríe, pero no me dice nada y ella sigue cumpliendo su palabra.

Leti incluso a veces se la lleva Miguel en coche, pero nadie dice nada; algún alumno o alumna le pregunta a María ocasionalmente sino le importa y ella responde: es una alumna, no importa confío en el y siempre que lo dice me mira a mí.

Tras eso, todos nos vamos charlando a casa; cuando nos hemos alejado lo suficiente de la escuela, ya no solo voy andando agarrado a Cristina y es que María se une a nosotros. Los jueves y domingo vamos a bailar al duende, alguna vez hemos arrastrado a mi tío con nosotros; aunque son sobre todo las chicas que lo convencen, pero les cuesta la misma vida y es que mi tío tiene miedo de conocer a alguien.

Los días que no hay clase o tras acabar las clases cuando no hay duende, hacemos cosas muy dispares; hemos puesto una regla, la hemos llamado “uno de tres” y eso significa: “cada rato libre 1 de los 3 decide que hacemos los 3 o los 2, asi todos acabamos satisfechos de nuestras necesidades; cada vez que una de ellas pide 1 rato a solas, la otra recibe otro rato a solas. Algunos días nos quedamos en casa viendo Tenflix, muchos días María me pide salir de Estepa para poder estar juntos por la calle; algunos días Cristina me pide pasear, pero sobre todo María quiere cine y Cristina sexo o bailar.

Según María, en 3 años de relación con Miguel solo ha visto 1 día el cine; conmigo obviamente quiere tener lo que no pudo tener con él, cariño…compañía y cine.

En el caso de Cristina, en 7 años de relación lo único que no podía tener con Alberto es sexo o bailar; obviamente conmigo quiere que todo sea diferente, asi que ambos lo estamos intentando.

A veces en raras veces sacamos a mi tio al duende, a tomar una cerveza; a comer por ahí, al cine. Cuando salgo con las dos a la vez es un numerito, los tíos me miran con envidia o coraje y las tías con asco o celos; pero nosotros los miramos y les sonreímos, después de todo uno da lo que tiene en el corazón.

Con el paso del tiempo, lo que va cambiando es la situación; pero nosotros prácticamente seguimos igual, al menos no noto muchos cambios.

1 semana después, estrenamos el show en el duende; 1 mes después fue al congreso de nosolobaile, algo impresionante y actuamos delante de 1000 personas. Tras eso el show lo recuperaron Miguel y María, pero fiel a su palabra Miguel; empezó a crear un show para que lo hiciéramos Cristina y yo, por nuestra cuenta María y yo ensayamos en casa un show propio.

Pero como dije la situación cambio, María empezó a agobiarse un poco porque se sentía extraña al hacer el show con él y no conmigo; pero el show brillaba y les salieron contratos por Alemania, en los que iban ellos solos. Además, el la presionaba mucho ya que veía que el show no tenía la magia que tenía conmigo; sin saber que la magia no era algo de practica sino de sentimientos, la hizo practicar hasta la extenuación.

Mi tío poco a poco se fue soltando más, fue yendo a más sitios; Miguel lo invitaba a todos lados y mi tío iba, asi que fue bailando mejor y a ser conocido entre las cuarentonas.

Pero como dije esta historia, aunque sea un final de una etapa; no es más que el comienzo de una nueva historia, que me gustaría contaros alguna vez.

Si queréis una segunda parte, no tenéis más que pedirla; espero comentarios y votos, sino simplemente me pondré a otra cosa.