¿Bailamos? 6. En salsa
La vida es un cúmulo de situaciones que no son ni buenas ni malas, depende de ti sacarle partido; a veces el más listo se queda con un palmo de narices y otras veces muy distintas...el tonto hace lo que tiene que hacer para sacarle partido.
Capítulo 6. En salsa
De camino a casa me fijo en que la amiga de María separa mucho las piernas al andar, no me fije el otro dia; así que no se si es algo normal o algo nuevo; aunque imagino que no es normal.
¿que te pasa?
¿a que te refieres?
no se, andas con las piernas muy abiertas.
...
¿no piensas decírmelo?
te dije que pararás.
lo dijiste, pero no lo deseabas.
...
Tras un rato en silencio en el que estábamos llegando.
me arde la rájita, siento un extraño hormigueo; y me has ensanchado las caderas.
...
¿no piensas decir nada? Algo como lo siento, por ejemplo.
no, es que no lo siento; me ha gustado y si te dejaras, repetiría.
no cuentes con ello.
una lastima.
Llegamos a casa la invito a entrar y me parece muy curioso, que antes de entrar se asegura que nadie la vea; luego entra y me hace cerrar rápidamente, acelerandome el pulso.
¿que pasa?
nada, ¿que crees que va a pensar la gente que me conoce si me ven entrar aquí a solas contigo?
¿que estás entrando en una casa con un chico?
tsk...que simple eres - dice tras un sonido de molestia. - ¿el baño, por favor?
esa puerta.
Preparo otra ropa y espero unos minutos cuando escucho el agua abrirse, entro sin permiso; ella se tapa con la cortina, como si no se ve a través de ella.
¡¿pero que haces?! - grita.
yo también tengo que ducharme, sino lo hacemos a la vez; no llego a tiempo.
pues llega tarde, follar cuesta.
ni lo sueñes.
-... - se queda callada mientras me desnudo - vale, pero no me mires.
- que tontería - digo metiéndome en la ducha - ¡pero si ya te he visto!
La verdad es que al girarme hacía ella, ella se puso de espaldas; pero me gustó lo que vi, estaba casi tan buena como María de cuerpo.
estas muy buena
gracias, pero callate y enjabonate
Me heche jabón en las manos y empecé a enjabonarle la espalda.
¿que haces? ¡dejame!
dejame ayudarte
Poco a poco mis manos, dejaron la espalda; y viajaron por delante, tanto por zonas prohibidas como no.
ahí puedo yo sola
da igual, yo te ayudo.
Para llegar a delante me pego a ella, con la visión y las caricias; mi miembro había subido otra vez, le estaba rozando por la parte indicada y nos estábamos poniendo a mil otra vez.
mmm...aléjate, no porfa; otra vez no, que me tienes escaldada. - suplico casi sin fuerzas.
Venga un poco más, ahora te doy cremita.
mmm...vale, pero algo rápidito, que no llegamos a clase.
De un solo movimiento casi al mismo tiempo, ella se sentó sobre mi miembro que ya estaba mojaita por mis caricias y roces; di hacia arriba para metersela sin esperar que ella diera hacia abajo, por lo que de un solo movimiento le entro sola y pego un gran gemido. Mis manos seguían acariciando y enjabonando su cuerpo, aumentando el morbo de la situación; ella guió los movimientos de mis manos en principio, luego se agarro a mi culo para que me la follara salvajemente y a mi pelo para que le comiera el cuello.
Ambos nos fuimos a la vez por su parte un orgasmo brutal y por la mia una corrida brutal, tras eso nos duchamos; y al salir de la ducha me da una cachetada en la cara, me toco la cara dolido.
te dije que no idiota.
tu decías que no, pero tu cuerpo suplicaba que si.
no puedo ni cerrar las piernas, ¿donde tienes la crema?
aquí, espera un segundo.
Agarro la crema
- abre bien las piernas.
Ella me mira un segundo y niega con la cabeza.
no, dame la crema; que me conozco y te conozco.
no seas tonta, abrelas.
Ella las abre avergonzada, me pongo rojo como un tomate; lo tiene hinchadisimo, muy lubricado y al enseñarmelo parece que lubrica más. Abierto y rojo por el roce, me lleno el dedo entero de crema y se lo paso por la apertura del chocho; ella suspira, jadea y gime.
es solo crema.
pero no veas como estoy por tu culpa
Sonrió y le meto el dedo dentro y se lo muevo, ella pone gesto de dolor; que luego se transforma en alivio, se lo hundo hasta el fondo y se lo muevo dentro.
mmm que alivio, sigue; por fa.
¿y luego quien me ayuda con esto?
no haberte ofrecido.
Empiezo a sacarselo, ella agarra mi mano.
- te ayudo
Sigo con mi masaje, hasta que ella tiene un orgasmo; y parece que se relaja, ahora soy yo el que tiene el problema. Ella me la agarra a disgusto y empieza a masturbarme, aunque no le pone mucho énfasis noto que se pone otra vez; esto es el cuento de no acabar, hasta que me corro en sus manos y va a lavarse.
que asco, cochino.
anda ya, si te visto la cara de morbo; si te ha gustado.
...más quisieras...
si te has puesto húmeda
idiota
estúpida
imbécil
guarrilla
Iba a pegarme le agarre la mano
- muy lenta - con una sonrisita burlona.
Ambos nos reímos cómo dos idiotas y nos vestimos, ella mira antes de salir y luego; una vez fuera.
yo voy a coger por el camino directo, tu coge por allí; Pedro.
¿no vamos juntos?
¡no! No vamos a ir juntos y menos andando así.
pues yo no se llegar por allí, tendrás que ir tu.
¿me vas a hacer ir andando por el camino largo estando cómo estoy?
ehhh...si.
eres un capullo
si, pero te gusta; mi capullo.
guarro, nos vemos allí.
¿no me das dos o un beso?
más quisieras.
Y así se fue andando hacia un lado con las piernas abiertas y yo hacía el otro, no tenía amor; pero había tenido sexo, mucho sexo y ahora ya no necesitaba nada más solo quizá cariño.
Llegue a clase y nada más verme, María se me abrazo.
¡Pedro! ¿hoy no viniste a ver el show? Te estuve esperando.
bueno, me salio un plan ineludible.
que lastima, espero que mañana vengas; hemos añadido ya todo.
seguro, mañana seguro que si.
vamos a calentar chicos. - soltó Miguel.
Me fije en que algunas personas eran diferentes, pero otras estuvieron en la clase de ayer; el ritmo comenzó a sonar y me di cuenta de lo diferente que era este de la bachata, los pasos también eran todos distintos. Se me dio mejor que el otro día, lo pille todo a la primera; el sexo me había centrado, relajado y obvie lo buenas que estaban las muchachas.
En medio del calentamiento entro la mejor amiga de María, disimulando lo de las piernas; le sonreí a través del cristal, vi en sus ojos que le afectaba pero ella desvió su mirada como si nada.
Saludo a María y se metió en el calentamiento a mi lado sin mirarme, como si no existiera; pero no iba a permitir tal cosa y así de fácil, roce su mano bailando como sin querer queriendo y ella me dio un manotazo.
Sonrei y ella me miró mal de reojo, María frunció el gesto; poco después termino el calentamiento y mientras Miguel me felicitaba por lo bien que lo había cogido hoy, María se lleva a su amiga a parte para hablar.
Gracias a los que comentan y votan realmente me da vida.
¿que os parecen los personajes?
Gracias por leerme.