¿Bailamos? 1. Primer encuentro

Capítulo 1. Primer encuentro.

Mi idea del segundo día en el pueblo y el primero que despertaba allí, era despertarme temprano; hacer los ejercicios pasivos que mi padre me enseñó para adelgazar, recorrer un poco la zona y acercarme a ver los horarios de la academia.

Pero mi segundo día tampoco es que empezará muy bien, a pesar de haberme dormido temprano estaba tan cansado ayer; que cuando ha sonado el despertador lo he apagado estando dormido, me he despertado justo a tiempo para desayunar volando e ir al trabajo corriendo.

Lo que más odio en el mundo es correr, conseguí llegar 5 minutos tarde solamente; a pesar de haber corrido no pude evitar llegar tarde, solo conseguí quizás llegar menos tarde. Mi tío a pesar de eso me recibió con una sonrisa, mi segundo día a pesar de mis espectativas no me fue mejor; lie aun más las cosas, incluso un par de clientes se enfadaron.

Cuando mi tío me vio tan decaído intento animarme pero fue inútil, no estaba el horno para bollos; llegue a casa me duche y fui directo a la academia, para mi sorpresa estaba cerrada. Leo los horarios de la puerta, falta 1 hora para que abran; entonces la música empieza a sonar dentro, aunque no quiero mi curiosidad me llama y me asomo al gran cristal.

Veo a una preciosa belleza bajita tumbada en el suelo, con el pelo largo recogido en una coleta; una mallas cómodas y un top, estaba embobado con ella hasta que vi que un chico alto fuerte y sonriente se acerca a ella.

Este la acaricia con un movimiento bastante sensual, ella se sienta levantándose cómo una sirena que sale del agua; este la coge en brazos cómo un recién casado y empieza a girar con ella en brazos, luego la lanza hacia arriba y la coge en el aire. No pierdo detalle del baile que están practicando, hasta que el chico para el baile; ambos conversan y ríen, con el corazón alterado por ver lo que he visto decido retirarme antes de que me vean.

Empiezo a pensarme seriamente el entrar en la academia, creo que ese tipo de baile definitivamente no es para mi; además ella es demasiado hermosa, llevo mucho tiempo soltero y sin nada...no me voy a poder concentrar estando ella allí, además ambos están delgados; si el baile debe ser para gente delgada, ¿que pinta ahí un ceboso cómo yo? La verdad es que nada.

Pensando en esas cosas, empiezo a pasear por las calles del centro cercanas a mi casa; no me gustaría perderme en un lugar donde no conozco a nadie, mientras paseo observó varias cosas y es que observar es una de mis pocas virtudes. Todas las calles céntricas son casas de un, dos o tres pisos de color blanco; muchas están abandonadas y algunas incluso a la venta, pocas en alquiler. Estepa esta llena de flores y es que sino hay macetas grandes, hay árboles y sino flores en macetas pequeñas enganchadas a las paredes de los edificios o ventanas; por si fuera poco me he cruzado con algunas chicas jóvenes y mujeres maduras que son auténticas bellezas, he descubierto para mi mala suerte que las mujeres de Estepa son particularmente hermosas y que las flores no son las únicas flores de la ciudad.

No me viene muy bien dado el tiempo que llevo sin nada, pero vamos no creo que siendo tan hermosas y teniendo esos cuerpos; se fijen en un tipo cómo yo, paso de nuevo de vuelta hacia casa por la academia. Iba a pasar por la misma acera cuando veo gente fuera esperando, es increíble la cantidad de chicas guapas que hay por metro cuadrado; cruzo y veo como abren la puerta, ambos con una sonrisa saludan a todos que entran. Por un momento me entran ganas de darme la vuelta y volver, me gustaría conocerles; conocer ese tipo de chicas, bailar como ellos.

Pero eso en un sueño nada más, en la vida podre bailar igual que ellos; voy a casa y práctico lo que vi de su coreografía, me miró delante de un espejo para comprobar si imitó bien los movimientos de el pero claro sin mujer.

Poco después hablo con Antonia y Pablo mis padres por teléfono, les cuento las cosas de mi tio; las cosas que me pasan y ellos me aconsejan como trabajar mejor. Poco después mi tío me llama para cenar, ha hecho una cena especial.

• ¿a que viene esto tío?

• ¿el que?

• mi comida favorita y este tapeo.

• bueno, solo intento animarte sobrino.

• pero estoy a dieta, tío.

• si, lo se; mañana nos ponemos a plan los dos, este es el premio antes de empezar.

• esta bien no te haré el feo, pero a partir de ahora a dieta; por favor.

• si, tranquilo.

Tras eso tuvimos una buena cena en la que me pregunto que hice y obvie la coreografía, conté el resto; el me estuvo escuchando atentamente, y cuando termine de contarlo.

• a mi nunca me ha gustado el baile sobrino, pero es verdad que es buena idea para hacer ejercicio y para conocer gente; si hay chicas guapas mejor, no deberías dejar que eso te intimide...si lo quieres hacer azlo.

• pero no voy a poder concentrarme con ellas ahí.

• ¿que pasa que en Gadir no hay chicas guapas?

• si, pero no tantas; tanto y no bailo con ellas, no es lo mismo.

Mi tío se río ante mi comentario.

• tu imaginatelas desnudas

• ¿y eso para que me sirve?

• para nada, pero al menos pasas un buen rato.

Ambos nos reímos y negué con la cabeza.

En casa me tumbe mirando el techo recordé toda la coreografía parte por parte, las caras de ella en cada momento; la elegancia de sus movimientos, las acciones de el y las posiciones de ella respecto a el.

Con una sonrisa tonta puse un segundo despertador para asegurarme de que me levantaría temprano, mientras empezaba a pensar un detalle que se me había pasado hasta ahora.

• ¿cómo se llamará ella?

Pensando eso y montandome una película, me quedé dormido.

GRACIAS por tomarte la molestia de leerme, espero haberte echo disfrutar; te agradecería que te tomarás el tiempo de comentar y votar, pues eso me ayudara a mejorar más.