Bacanal en honor a la diosa
En el pueblo de los supervivientes la vida progresa. Después del sufrimiento llega la alegría y la vida sexual de los habitantes se desboca. Lilith, por su parte, desea organizar una semana santa muy especial.
La odisea de Virgilio (15: Bacanal en honor a la Diosa )
Era marzo. Isabel ya llevaba en aquel pueblo unos 8 meses. Ahora formaba parte de una familia muy peculiar. Era una especie de concubina de un matrimonio de 18 años. El de nombre Pedro, ella de nombre Beatriz. Isabel a sus 30 años no terminaba del todo de asimilar su nueva situación. A pesar de todo la tragedia que vivió en el año anterior ahora en cierta forma volvía a ser feliz aunque seguía recordando con pena a sus familiares difuntos. En el pueblo tenia que trabajar en el campo en diversas labores. Según la época en el verdeo del olivo, en la recolección de algodón, del trigo que formaban en cooperativa en todo el pueblo. Por otro lado disponía de una pequeña huerta hortofrutícula de regadío. Los días laborales estaba muy ocupada en el campo. Allí tanto hombres como mujeres trabajaban codo con codo para que el campo siguiera dando frutos. También las labores de la cosa eran compartidas. Lilith fue exigente en ese tema y pidió a los hombres que no se escaqueasen en esas funciones.
En casa en cierta forma al ser mayor hacia un poco de "madraza" del matrimonio. El cariño y la ternura eran las notas dominantes en la convivencia. En cierta forma la inspiración de la sacerdotisa Lilith en el pueblo había modificado el comportamiento de los habitantes. Tanto a nivel sentimental como sexual las relaciones eran una balsa de aceite. Incluso parejas mayores no dudaban mostrar su afecto en publico de manera ostentosa. Mujeres y hombres no paraban de besarse a abrazarse. Esas continuas muestras de cariño eran fundamentales para el espíritu de las gentes en una situación tan difícil como la que se estaba viviendo.
Isabel no fue la única que se encontraba en una situación así. La mayoría de los refugiados eran mujeres . Casi todos los hombres fueron reclutados en la guerra del apocalipsis y murieron. Así es como diversas parejas del pueblo "adoptaron" a una refugiada. Por ejemplo Juliana y Alberto pasaron a tener como amante a una chica asiática joven. Era una china de 22 años de nombre Xian. De esta forma muchos matrimonios pasaron a ser de tres. Muchos escogieron a gente de su edad pero también se produjeron enlaces de gentes de diferentes generaciones.
El matrimonio de la sacerdotisa fue fuente de inspiración para este fenómeno. Era ya conocido por todo el pueblo que el matrimonio de Virgilio, Lilith y Laura era bisexual. Lilith era en cierta forma la líder del pueblo a las que todos seguían. Pero no dudaba en ser muy complaciente con sus amantes en el plano sexual aún siendo un ser celestial. Lilith impuso un nuevo calendario de forma que los Jueves eran los días santos de la diosa madre Asherah y los Domingos eran los días sagrados de Yaveh. Así que había dos días de descanso a la semana. Durante ellos se celebraba el acto social y espiritual de sus misas. Estas regocijaban todos los corazones, y las penas y los temores se disipaban. Pero lo más curioso es la insistencia en el tema sexual que hacia Lilith. Era la cara anversa a como se hacían las cosas antes. Donde antes el sexo era motivo de pecado ahora era motivo de alegría. Donde antes era motivo de vergüenza ahora era lo más valioso a compartir. Sus sermones en defensa del placer dieron lugar a progresivo cambio en las mentes de las supervivientes. En poco tiempo las mujeres en los tríos empezaron a probar las relaciones lésbicas como complemento. Eso era agradecido por sus maridos. Ver a sus amantes en acción era muy excitante así como que les permitía a ellas darse placer mientras sus maridos se recuperaban. Ahora teniendo que atender a dos mujeres era fundamental hacer eso para estar todos satisfechos. Afortunadamente los celos no se producían y las mujeres también les resultaba muy excitante ver a su maridos dar amor a la amante. Al final de cada sesión sexual todo terminaban en una buena sesión de abrazos y besos entre todos. Aún a pesar de todo esto no se esperaban lo que iba a suceder.
Un Jueves por la tarde se celebro la típica sesión en grupo de las mujeres presidida por Lilith y Laura. Ahora la sesión casi albergaba toda la capilla y asistían casi 100 mujeres.
- Estimadas compañeras. Nos acercamos a la primavera y es el momento de sugeriros que hagamos los preparativos de las fiestas.- Inicio Lilith
- ¿Te refieres a la semana santa? - comento una vecina
- No exactamente. La semana santa como tal ya no volverá a celebrarse. Nunca más volveremos a celebrar la tortura y muerte del hijo de Yaveh. Eso no es motivo de celebración sino de pena. Debemos hacer fiestas de alegría vida. Si hemos quitado al crucificado de la iglesia no lo sacaremos a las calles.
- Entonces ¿Que quieres hacer?
- Volver a celebrar unas tradiciones perdidas. Cuando los humanos celebraban el retorno de la vida. El florecimiento , el clima cálido, la promesa de la cosecha. la brisa, el viento, el hermano sol y la hermana luna, campos y praderas donde ver crecer a nuestros hijos amaneceres bañados con el perfume que estornudan las flores en primavera puestas de sol decoradas por los sueños aun por concebir. Las fiestas de la primavera. Sera una semana santa totalmente distinta en honor a Asherah y Yaveh. Pero en vez de celebrar la muerte agradeceremos todo los que nos han dado con alegría y más vida. No iremos vestidas de negro detrás de un paso con mantilla y peineta. Haremos algo mucho más agradecido y que los dioses desean.
- De acuerdo. ¿Pero que es lo que quieren los dioses?
- Lo he dicho en multitud de sermones. Lo más deseado por el matrimonio divino es el canto de sus hijos. Debemos formar un coro en honor a Asherah y Javeh.
- ¡¿ El canto ?! No lo entiendo
- Pues creo que Lilith ha sido clara a que canto se refiere- interrumpió Laura
- Entonces Lilith se refiere a que hagamos el amor.
- Exacto Adelaida. La celebración seria ir con vuestros esposos y amantes y celebrar la primavera follando delante las figuras de Asherah y de Yaveh en la iglesia- sentenció Lilith
El silencio fue sepulcral. Todas las asistentes se miraban entre si y se sintieron cohibidas. Poco después empezaron los cuchicheos. La reacción era la esperada. No podían hacerse a la idea de que Lilith a la que amaban y adoraban les pidiese eso. Otra mujer al final se atrevió a hablar.
- Lilith. Creo que hablamos entre todas. Te amamos y apreciamos. Haremos todo lo que tu nos ordenes. Pero me resulta muy difícil hacer eso que pareces pedir. Nos estas pidiendo que hagamos una orgía multitudinaria ¡ni más ni menos que en la iglesia!
- Entiendo muy bien que os sintáis incomodas. Pero no os asustéis tanto solo os pido que le hagáis con vuestro esposo o compañero. No se trata de que todos los hombres os pasen por la piedra. La idea es concentrar todos vuestros cantos sexuales y que los dioses los reciban. Hacer una comunión de amor entre todos.
- Aún así sentiría mucha vergüenza hacer eso delante de otros.
- Virginia el sexo ya he dicho muchas veces no es motivo de vergüenza. Es más tú compartes a tu marido con Esther. ¿No me digas que te sientes incomoda si Esther te mira?
- No en realidad me gusta. Y me gusta verle a ella siendo tomada por mi marido. Me toco la guitarra a base de bien mientras ellos follan. A veces me corro más fuerte masturbándome viéndolos que haciéndolo.
- Pues ahora ese morbo que tanto te excita se va a multiplicar. Ya se que estáis especialmente enamorados de un solo hombre y eso debe seguir siendo así. Pero también formamos una sola hermandad entre el pueblo. Abandonar el pudor chicas y preparaos para pasarlo bien.
- Lilith, cariño. Eres un ángel y te seguiría hasta el infierno. - Dijo una señora de en torno a 30 años Pero tengo un hijo pequeño. No puedo dejarlo e irme a una bacanal.
- Lo sé Antonia. La fiesta es voluntaria y los que no podáis ir aún podéis celebrar a los dioses en cierta forma en vuestras casas. Ya os daré instrucciones sobre como hacerlo. Aún así os pido a todas las que estáis aquí que intentéis venir.
Beatriz se le vea entusiasmada por la idea y se atrevió a intervenir.
Lilith puedes contar conmigo
Y conmigo dijo Isabel
- Muchas gracias, hijas mías
Poco a poco muchas mujeres aceptaron participar. Al final se apuntaron a la celebración unas 84 mujeres. Incluso la pareja de lesbianas María y Judith. Estas al igual que Laura disfrutaban unas tripitas de embarazadas de 3 meses. Beatriz intervino de nuevo
- Lilith , puedes explicarnos en más detalle como será la nueva semana santa.
- Como sabéis tenemos dos días sagrados. Los jueves son los días de Asherah y los Domingos son los días de Yaveh. Ambos son el sexo femenino y masculino respectivamente. De esta forma celebraremos en la semana de la cuarta luna llena del año dos orgías. Una en honor a la primera y otra en honor al segundo. Una en el antiguo Jueves Santo y la otra en el antiguo Domingo Santo. Una en honor a la mujer y otra en honor al hombre. Cada una sera con sus peculiaridades.
- ¿Peculiaridades?
- Como te he dicho la de Asherah sera para nosotras. El Jueves santo la orgía se concentrará en hacernos disfrutar a nosotras todo lo que podamos y nuestros maridos se esforzaran en hacernos gozar. Si tenéis amantes también debéis daros placer entre vosotras.
- ¿Y la del domingo?
- Muy fácil. En la de Yaveh le devolveremos la moneda a nuestros esposos y los pondremos en órbita de tanto placer que les daremos. Una especie de hoy por ti dentro de 3 días por mí.
Al final la reunión termino. Todas las mujeres que aceptaron participar fueron informadas sobre la importancia de seguir asistiendo para ir preparando los detalles del acontecimiento. Unas vez terminada la reunión Lilith y Laura se citaron en la sacristía. Se saludaron con muchos besos en la boca y se sentaron a comentar las reuniones.
- Bueno Virgilio. ¿Como ha ido la tuya? - pregunto Lilith
- Bueno le comente lo de las fiestas de primavera y cuando le explique los detalles se entusiasmaron todos.
- Como sois los tíos se burlo Laura en nuestra reunión les hemos tenido casi que retorcerles el brazo para que aceptasen.
- Bueno, ya sabes Laura. Es que pensamos con el pito le devolvió la broma Virgilio.
- Desde luego que si. Como es mola follarnos- se jacto entre risas Laura
- Vale de güasa. Cuéntame- interrumpió Lilith
- Algunos son padres de niños y no se apuntan. Por lo demás he reunido a 53.
- Nosotras tenemos a 84.
- Al final va a ver una ligera desproporción.
- No te quejes- volvió a cachondearse Laura.- que eso de estar con dos mujeres a la vez os pone berracos.
Después de la risas comenzaron la planificación de las siguientes semanas. Había mucho que hacer. Una cosa que pidió Lilith es que fuese a los restos de la cuidad más cercana con más hombres en busca de unas mercancías muy peculiares.
Llego la nueva semana santa y con ella el nuevo Jueves santo. Isabel , Beatriz y Pedro estaban dormidos y Beatriz en medio de la cama recibía el abrazo de los otros dos amantes. Las primeras luces del día asomaban por la ventana. El primero en despertarse fue Pedro. Hoy tenia ciertas cosas que hacer. Se vistió y descendió a la planta inferior. Al rato subió con bandejas de desayuno.
- Venga dormilonas , que hoy vais a gastar mucha energía.
- Anda mira. Si hoy nos traes el desayuno.
- Por supuesto. Hoy estoy para serviros.
Al terminar Pedro las invito a entrar en el cuarto de baño. Beatriz y Isabel quedaron anonadadas . Pedro la había decorado como si fuese un Spa. Multitud de velas de colores que emitían fragancias relajantes. Las desnudo como se desnudó delicadamente como a un bebe y las coloco con sus brazos en la bañera. Allí aparte de enjabonarlas con un gel muy oloroso también se acompaño con aceites perfumados. Poco a poco también las masajeo. Todo ello acompañado de besos de devoción.
- Pedro me gusta como me tratas- dijo Isabel
- Hoy quiero mimaros a mis princesas. Sois mi vida ahora. Y si intento imaginarme sin vosotras todo se vuelve dolor. Os necesito y os amo. Y merecéis que os trate como a reinas. Permitirme que lo intente.
- Lo estas haciendo maravillosamente- dijo Beatriz
Saco el pie de la bañera de Beatriz y lo beso con un amor casi religioso. Luego hizo lo mismo con uno de Isabel. Mas tarde apretó con suavidad los cansados cuellos de sus amantes por el trabajo.
- Vamos , cariños relajaos y disfrutar. Por la mañana relax. Por la noche placer.
- Pedro me siento algo culpable, no es preciso esto.- dijo Isabel
- Si lo es. Lo que me dais vosotras dos no tiene precio. Y quiero demostraros con todo mi alma cuanto os quiero.
Pedro siguió enjabonando los cuerpos de las mujeres con mimo y delicadeza. Isabel y Beatriz se sintieron momentáneamente en la gloria. Recibían las delicadas atenciones de Pedro mientras les lavaba el pelo. Él también disfrutaba dando esa atención, jugar con el cabello de sus mujeres era apasionante. Cada tacto con la piel de Beatriz le estremecía al enjabonarlas.
Cuando termino las seco también con ternura. El brillo de los ojos en las mujeres denotaban que habían disfrutado de esas atenciones y la devolvieron con besos a Pedro.
- Mis queridas. Hoy me encargo de la casa. Por favor iros a tomar un respiro por el pueblo. Yo hoy preparo la cena.
Despidieron a Pedro con muchos besos. Isabel y Bea pasearon por el pueblo y se besaban entre ellas cada dos por tres. El amor era entre todos los miembros de la familia. También se citaron con otra compañeras de la futura orgía y comentaron las expectativas que tenían para la noche. Después del anochecer iba a comenzar la bacanal que duraría hasta el amanecer. Aparte de eso tenían un almuerzo de hermandad presidido por Lilith para así aumentar la confianza entre las mujeres que iban a mostrar sus cuerpos desnudos a las demás y a sus compañeros. A eso de las 8 de la noche volvieron a la casa. Una vez más Pedro les deparó otra sorpresa. Había preparado una cena romántica con velas y vino. Había preparado una vianda que había cocinado durante el día.
- ¿ Y esto ? - preguntó Beatriz
- Bueno, en las reuniones de Virgilio hemos realizado un taller de cocina pensando en el día de hoy. El francés Lauren era cocinero profesional y nos enseño esta receta. Con los materiales que disponemos es lo mejor que hemos podido hacer. Es pollo a la no se que. Un nombre francés muy raro. Por favor. Probarlo- les dijo abriéndoles las silla como si de un camarero de un restaurante elegante se tratara.
Las mujeres degustaron y el resultado les sorprendió por sabroso. Pedro cocinaba de vez en cuando. Sus platos no eran nada sofisticados pero estaban bien. Pero ese pollo estaba delicioso.
- Felicidades al cocinero. Esta genial, cariño. Hoy los hombres os estáis portando maravillosamente.
La velada prosiguió entre risas y bromas. Las miradas eran de deseo, cada broma tonta , cada tono de voz eran seguidos con fuerte atención. Ambas mujeres le hubiesen tirado sobre la mesa y le hubiesen hecho el amor hasta la extenuación allí mismo. Pero había otros planes. Las mujeres estaban citadas a las 10 de la noche. Se volvieron a duchar, se perfumaron y vistieron de forma elegante. Llego dicha hora y fueron en dirección a la capilla. Los hombres llegarían más tarde. Una detrás de otra iban llegando y fueron recibidas por Lilith y Laura. Allí se encontraron las 84 mujeres. Unas jóvenes , otras más maduras. Entre 18 y 50 años. Lilith habló
- Hijas mías. Bienvenidas a las celebraciones de la primavera. Hoy sois las invitadas de honor. El objetivo es que gocéis todo lo que podáis. Cada gemido de placer, cada orgasmo que tengáis es un regalo para los dioses. Así que sed generosas. Eliminad de miedos e inhibiciones vuestras mentes. Relajaos todo lo que podáis y concentraros fuertemente en disfrutar. Llevaros a los orgasmos y que estos circulen como una catarata. Hoy vuestros compañeros os servirán todo el placer que os puedan dar. Ya les daremos el mismo tratamiento el domingo. Por favor desnudaos.
Todas ellas se quitaron la ropa. No hubo apenas muestras de pudor. Estaban entre mujeres aún y no había ningún hombre distinto a su marido aún. Ahora Laura se dirigió a todas ellas abriendo un armario.
- Para aumentaros el placer los hombres fueron a una patrulla para obtener unas cosillas divertidas. ¡ Fijaros !
Abrió y las mujeres quedaron alucinadas. Estaba llena de juguetes sexuales de todo tipo. Dildos, plugs , consoladores de todas formas y colores. Algunas fueron más timidas, pero Beatriz, Isabel , Juani y otras fueron más lanzadas y se dispusieron a recoger juguetes. Juani pregunto por uno en particular
- ¿Y esto que es?
- Es un bend over boyfriend. Sirve para que una mujer pueda penetrar a la vez que siente placer con un consolador que es la parte con forma de alcachofa.
- Jajajaja. Penetrar. Me pongo esto y mi Alberto se caga de miedo.
- Bueno. Virgilio lo ha probado en multitud de ocasiones y le ha cogido el gusto. Últimamente es él que nos lo pide. Fíjate Juani
- Increíble Laura. Pero si le meto esto por el culo seguro que le hago daño. El me sodomiza pero yo estuve entrenando con los dilatadores 2 semanas como me pedisteis. Aún así dolió bastante la primera vez.
- Tienes razón. Pero hoy lo probaremos en directo con Virgilio. A ver si conseguimos que algunos de los chicos se animen a probarlo. Si os dicen que si basta que entrenen sus esfinteres como lo hiciste tú.
- A ver si se anima. Me da morbo darle por el culete como el me da a mí.
- Si lo hacéis bien. Él lo disfrutara un montón. Cuando se lo metas se muy suave. De todas formas esto lo puedes usar esta noche con Xian.
- ¿Que opinas Xian, te gustaría que te follase con esto?
La chica respondió con un beso en la boca de la madura.
- Una cosa Xian, ¿Alberto te penetra analmente a ti también?- pregunto Laura.
- Si respondió con su particular acento oriental- cuando vi que mis amos disfrutaban haciendo esa practica quise probar. Juani me paso los dilatadores pero aún así dolió horrores la primera vez que me lo hizo Alberto. Pero ahora me encanta y más aún cuando veo como disfruta él.
- Cariño no digas amos. Ni que fuéramos esclavistas. Tu formas parte de la familia. Para mi a parte de amante eres casi como mi hija y te quiero como tal - Dijo Juani
- Perdona Juani. Pero cuando practicamos juegos fuertes me pone que me dominéis. Ahora mi culo pertenece a Alberto y con esto también a ti, Juani.
- Pues podéis probar hacer dobles penetraciones. Mientras Alberto penetra por la vagina a una que la otra la sodomice. Si ya toleráis la entrada por detrás eso os dará nuevas cotas de placer.
- ¿Y por que no al revés?- preguntó Juani- él por detrás. Ya que es el agujero que más le gusta. Esto solo es plástico y que más da donde entre.
- Jejejeje. No te preocupes que el domingo los hombres tendrán culo hasta que se harten. Además ellos son más impulsivos y se vuelven brutos fácilmente. Sodomizar les excita una barbaridad. Hoy las penetraciones anales que sean suaves. De mujer a mujer.
- Y que lo digas. Alberto me da una caña que no veas. Estoy por pedirte el cacharro este y llevármelo a casa.
- Todo tuyo. Fíjate que este es el interruptor para activar la vibración.
Laura lo pulso y el aparato empezó a vibrar. Xian y Juani rieron al verlo.
- De todas formas ¿Donde te gusta más que se te corra?. ¿Por delante o por detrás?
- Por delante
- Pues ya esta todo dicho por hoy.
Al final las mujeres se quedaron con una colección de juguetes. Uno de los objetivos era que las mujeres siguiesen disfrutando aún cuando su hombre estuviese descansando después de un orgasmo. Llegaron al edificio central de la iglesia. Todas las hileras de sillas se habían retirado y habían sido substituidas por colchones tendidos en el suelo. Todo la sala estaba acolchada. Habían también un colchón muy grande tendido enfrente del altar. Allí era el lugar establecido para Lilith, Laura y Virgilio. En el altar estaban las figuras de Asherah y de Yaveh, Pero hoy había una peculiaridad. Debajo de Asherah había una candelabro de 9 velas rojas y debajo del acuario había otro de velas azules. Lilith empezó unos rezos arrodillada enfrente al altar. Todas las mujeres se situaron entre los colchones y se arrodillaron ante las figuras. Laura hizo lo mismo en el colchón central justo detrás de la sacerdotisa. Laura como buena monaguilla encendió las velas. Las mujeres dieron un grito de sorpresa al ver el color que desplegaban. Rosadas y azuladas.
Poco antes de las 12 de la noche llegaron los hombres por la puerta de la sacristía. Allí Virgilio les conmino a desnudarse y entrar en la capilla. Allí las recibieron sus esposas y amantes. Cada uno se encuadro con su pareja y concubina si la tuviese. Lilith volvió a dirigirse a todos.
Bienvenidos todos. Muchas gracias por venir. Lo que vais a hacer es extraordinariamente importante. No os sintáis cohibidos. Ya que vais a mostrar vuestro amor a vuestros amigos. No avergoncéis por ello sino hacerlos con orgullo. Pero a parte de mostrar vuestro amor en sociedad lo más importante es que vais a cantar a Asherah hoy. La diosa quiere que sus hijas, las humanas disfruten de la alegría del placer. Hombres tratar de hacer lo mejor que podáis y llevar a vuestras compañeras al climax. Os llamo hijos por que en cierta forma yo con lleve adelante este especie gracias a dos hijas mías. Ellas dos también forman parte de la redención de las sucubo. Yo he sido ordenada para obtener mi perdón para reconvertir a los restos de la humanidad hacia el Edén. Pero el Edén no es un lugar físico sino espiritual. Y el Edén es un lugar de alegría y placer. Y eso es mi objetivo y las de mis hijas. Convertir la tierra en un cierto Edén. Un Edén de sexo y amor. No soy la única. Otras hijas sucubo están en otros lugares distantes del mundo y en este mismo día y a este misma hora están haciendo con otros supervivientes lo mismo. Solo sois unos cuantos miles en todo el planeta. Pero todos juntos haremos que los dioses recojan la música celestial que es el origen de la vida. Por que hijos míos vosotros sois importantes. Ellos os dieron la vida pero la vida de los dioses depende de vosotros. Y para ser exacto de vuestros actos de amor y sexo. Cada acto de ternura, cariño les da vida a Asherah y a Javeh. Cada jadeo, cada gemido y cada grito de placer les da vida. Cada orgasmo que sintáis les fortalece. El mundo humano ha sido destruido por los humanos, demostrarle que merecéis una segunda oportunidad y que el amor y el sexo a partir de ahora en adelante y por siempre será lo que domine la nueva sociedad que vamos a construir. Ya nunca más se ordenará matar a otros en orden de Dios. Eso ha sido la mayor de las atrocidades cometidas. Porque el mandato divino más importante es el que esta noche vamos a practicar. Hijos míos amaros. Ese es el pedido de los dioses y el mio propio.
Así lo haremos Dijimos entre todos.
Así que cada oveja se dispuso con su pareja, o trío. La esposa según lo determinado sería la primera en recibir las caricias. Así que Laura recibió las atenciones de Virgilio y Lilith. Beatriz las de Pedro e Isabel. Juani con Alberto y Xian. Y así sucesivamente. Las caricias recorrían los cuerpos de las mujeres que no habían ningún recodo sin que el tacto las palpara. No tardo en hacer la excitación hacer en aparición y la iglesia se lleno de un luz azulada procedente de las velas de Yaveh. Estaba recogiendo el placer de las mujeres. Las manos fueron luego acompañadas por las bocas. Así que desde los parpados se bajaba poco a poco al cuello y luego a los pechos y luego las piernas. Aún no se tocaba el sexo. Primero las mujeres disfrutarían de esas apreciadas caricias por todo su cuerpo.
Isabel se concentro en los acariciar los pechos con suavidad y Beatriz. Entonces Pedro se arrodillo entre las piernas y busco entre el depilado sexo de su joven esposa el clitoris. De manera muy coordinada, como si estuviese ensayado, los hombres accedieron a los sexos de sus mujeres a practicarlas cunnigulus. Beatriz se estremeció de placer mientras recibía el beso de Isabel. El acumulado de placer fue tal que una detrás de otras la mujeres empezaron a caer en sus respectivos orgasmos. Corriéndose en la boca de los hombres que recogían la miel con delectación. Beatriz descanso con la respiración agitada. La habitación vibro de luz azulada.
Ahora era el turno de Isabel. Beatriz y Pedro se esforzaron denodadamente en hacerla gritar de placer. Sus caricias estremecieron su ser y las señales eléctricas que se emitían por toda su piel rebotaban en su cerebro haciéndola tiritar. Otra vez Pedro se ofreció en practicar de nuevo sexo oral. Pero esta vez la acompaño con una penetración a dos dedos en su vulva. Pedro se estaba haciendo muy experto en esa combinación de paja más comida de coño. Sabia manejar muy bien sus dedos en su cavidad y localizar su puntos más sensibles. Por su parte Beatriz no paraba de darle besos y caricias en sus pechos. Isabel deseo cuando se acercaba al clímax de que la penetrara pero eso debía esperar. Acaricio la cabeza de su amante mientras este le miraba desde abajo. Parecía un esclavo dando placer a su ama. Que contradicción, fue ella misma la que juro ser sirvienta de esos dos jovenzuelos y ahora era Pedro quien se humillaba a hacerle una comida de coño en esa postura. Pero Pedro parecía disfrutar viendo la cara de éxtasis de Isabel que mostraba su máxima expresión en el brillo de los ojos. Pedro amaba con locura a Beatriz, pero ya su corazón también pertenecía a esa treinteañera. Isabel elevó una de sus piernas , sus hombros se encogían y por momentos su cuerpo se tensaba como cuerda de arco. El placer estaba acercándose a su máxima expresión. Isabel estuvo a punto de pedir a Pedro la penetración. Este giro sus dedos y apretó severamente en el punto G. Los jadeos pasaron a un grito , su cuerpo se convulsionó y gran parte de su fluido orgásmico cayo a los labios de Pedro. Este los recogió con devoción. Pedro adoraba y las cuidaría hasta el fin de sus días. Hoy se esforzaría en darle a ellas lo que se merecían por el cariño que le profesaban.
Isabel se tumbo en la colchoneta del suelo y observo como todas las mujeres recibían el mismo tratamiento que había recibido ella y Beatriz. Los hombres se habían juramentado en volverlas locas de placer. Pero no era solo placer sexual. El placer era global, a todos los niveles. Pedro y Beatriz la habían llenado física y emocionalmente. Se sintió plena en autoestima. Dos almas estaban junto a ella para hacer que se sintiera completa, querida, deseada.
El cansancio hizo acto de presencia y se hubiese abrazado en los brazos de Morfeo. Pero la noche era joven y debía seguir disfrutando y dándole cantos a Asherah y Yaveh. Ahora las mujeres se dispusieron en 69 , esposa con concubina. Beatriz en el colchón e Isabel, encima. Ahora eran las lengua expertas de mujer las que se daban placer entre ellas. Pero Pedro no se quedo quieto. Se puso detrás de Isabel y empezó a lamer su ano.
- ¡Ay! Eso no es justo. Me correré antes.
- No es cuestión de justicia. Dale otro orgasmo a los dioses.
El tratamiento simultaneo le provoco un orgasmo rápido y contundente. A pesar de que se esforzó en hacer correrse a Isabel el clímax le hizo desmayar. Isabel se apartó y vio como Pedro se colocaba a besar a Beatriz.
- Pedro, por favor entra en mi ya.
- Como quieras mujer mía. Ahora soy todo tuyo. Haz conmigo lo que quieras.
Pedro se tumbo en la colchoneta y Beatriz apunto al erecto miembro de Pedro a su vagina. La lamida de coño por parte de Isabel la había dejado muy cerca del orgasmo así fue como en muy pocas bajadas y subidas Bea se desmayo sobre el cuerpo de su esposo.
Pedro aún no se había corrido y se dirigió a penetrar a Isabel que estaba aún tumbada recuperándose del cunnigulus y analingus simultaneo. La penetración era ya muy deseada por parte de ella. Cuando percibió la entrada del pene en su cueva casi llega al orgasmo. Hoy se sentía terriblemente sensible. Su sexo le picaba de deseo y el vaivén de su amante era gloria bendita en ella. Por fin sentía su polla en su interior. Isabel sintió el ímpetu, el deseo y la pasión del joven. Su cuerpo se contraía al sentir las lanzadas como si lo quisiese albergar dentro de ella. La gloria del orgasmo volvió hacer acto de presencia. Pero Pedro disciplinadamente se controlo a pesar de que las contracciones del sexo de Isabel le estaban provocando terribles oleadas de placer. Tenia que reservarse ya que la noche solo acababa de empezar. Ambos sexos se mojaron entre si y los besos se llenaron del otro.
Bea se había recuperado y Pedro fue directamente hacia ella a penetrarla en misionero. De esta manera fue saltando de una a otra. Sus mujeres se corrieron 2 veces y el aún resistía el suyo. Otros en la orgía no tuvieron tanto aguante y solo pudieron proporcionar uno.
- Pedro. ¿Aún tienes más? Hoy estas increíble- dijo agradecida Beatriz recibiendo de nuevo sus envestidas
- Pues ya estoy que no puedo más. Creo que no podre darte otro. - dijo entre gruñidos
- Tranquilo cariño, eyacula en mi. También quiero sentir tu esperma. Viertete
Esas palabras hicieron que Pedro dejara de concentrarse en retener el placer. Se relajó y como un geiser contenido por una piedra, su clímax estallo explosivamente. Se derramo copiosamente en la vagina de su mujer con un intenso orgasmo que se había condensado, una ligera luz rosada salie de las velas de Asherah. Beatriz percibió el caliente liquido deslizarse por su sexo y un suave placer psicológico hizo acto de presencia. El esfuerzo hizo desfallecer a Pedro que se tumbo con suavidad sobre el cuerpo de su esposa. Isabel sintió el peso de su cuerpo pero ahora le parecía liviano y lo acariciaba como un niño, arropándolo con sus brazos. Pedro se retiro lentamente y trato poco a poco de recuperarse. Pero el esfuerzo había sido tremendo y su pene perdía la erección. Mientras Beatriz e Isabel le mimaban con multitud de besos y caricias.
- Lo siento chicas. Creo que por ahora no puedo.
- Nada de lo siento. Has estado maravilloso. - dijo Beatriz
- Bueno, y tenemos planes alternativos. Mira lo que tenemos aquí. - Dijo mostrando la colección de consoladores.
- Creo que habéis hecho bien trayendo la artillería pesada. Ahora la infantería esta para el arrastre- bromeo Pedro dando lugar a risas por parte de sus amadas.
Bea e Isabel volvieron a colocarse en 69. Primero volvieron a practicar un poco de sexo oral y luego lo acompañaron por consoladores. Los hombres en su batida habían traído una buena colección de todas la formas y tamaños. Isabel y Bea se quedaron con unos de tamaño medio pero gruesos y con protuberancias para estimular al mismo tiempo la entrada del ano, el clítoris y el punto G. Esos aparatos las hicieron hervir de placer. A nivel físico eran tremendamente estimulantes pero a nivel psicológico preferían la penetración de Pedro. Ambas se dieron con esos penes mecánicos una buena sesión de orgasmos. Mientras Pedro observaba que cerca estaba también descansando Alberto. Su esposa Se había colocado un arnés con el que con un dildo penetraba a Xian. Esta estaba apoyada por la parte superior de su espalda, las piernas estaban elevadas. En esta posición tan sumisa era penetrada por la madura de Juani. Esta se apoyaba con la punta de los pies mientras se apoyaba con las manos.
¡ Si ! ¡Mi ama, follame! ¡Follame! ¡Soy toda tuya!
¡Vamos Xian! Córrete. Dame tu orgasmo. Me gusta verte disfrutar.
El sexo de la asiática estaba encharcado de fluidos. El plug entraba y salia con suavidad. La sensación de sometimiento excito sobremanera a Xian de forma que descendió bruscamente al clímax. Un potente grito salio de su garganta retumbando en la iglesia. La luces azuladas eran predominantes.
Más allá María y Judith se amaban entre si. Sus barrigas dificultaban levemente ser muy arriesgadas en las posturas de esta forma se daban sexo oral por turnos. Que era su preferido. Ya eran muy expertas en proporcionárselas entre ellas. María en esos momentos es la que recibe las atenciones de Judith. María tumbada y Judith con la cabeza en la entrepierna de su mujer. En ese momento Judith bajo a los labios y los separo buscando la entrada a la gruta de Laura. Y empezó a penetrarlo con su lengua mientras sus dedos seguían dándole atenciones al clítoris.
Unas sensaciones empezaron a recorrer todo el cuerpo de la mulata, su vagina rebosaba de fluido. Aquella sensación era gloriosa, sentía como todo el universo se concentrarse en su perlita y su vagina. Una corriente eléctrica la recorría desde los pies hasta la cabeza, la columna vertebral le circundaba esa poderosa sensación espasmódica. María empezó a mover la cabeza casi desencajándola. Sus jadeos que pasaron a ser gemidos ahora eran gritos. Las convulsiones de su cuerpo parecían casi epilépticas. Mientras el clítoris vibraba las paredes vaginales se encogían y expandían. El delirio del placer dominaba su mente. El dulce cansancio hizo presa de ella. Mientras Judith le besaba su boca. Aquella acción de amor por parte de su amada siempre era arrebatadora para ella, María le devolvió los besos con caricias en su cara.
Virginia y Esther se animaron y también probaron la dulzura de las caricias de Lesbos. Aún con la timidez de su primera relación con el mismo sexo disfrutaban mientras el esposo de la primera, Francisco, descansaba con la polla aún morcillona.
Virginia dirigió su entrepierna hacia la cabeza de Esther y esta teniendo la de Virginia. Ambas viendo lo que hacían sus vecinas intuyeron como proceder para darse placer la una a la otra. Ambas tenían un abundante pelo en su monte de Venus. En posición de 69 las amantes se llenaron de caricias con sus lenguas en sus clítoris. Virginia observo como lo hacían Laura y Lilith y trato de imitar. Introdujo dos dedos en la vagina de su concubina. Esta dio un pequeño respingo pero se acostumbro a la invasión e imito la misma maniobra con el coño que se asomaba encima de su cabeza. Los dedos realizaban un vaivén. Ambas mujeres empezaron a jadear. La ternura de un amor compartido con su esposo. El morbo de lo prohibido por su cultura y educación se fundieron en un todo que hizo que amabas tocasen el cielo con los dedos. Sus almas parecían levitar en un cuerpo que se languidecer en sensaciones placenteras. Virginia paro de realizar la labor de entrega de placer por que estaba siendo dominada una vez más por otro orgasmo deleitándose de las percepciones deliciosas que recorrían su cuerpo.
Una vez recuperada de las sensaciones se dispuso a continuar la labor de entrega de placer sobre su amada. Virginia veneraba y admiraba a Esther. Adoptaron a aquella mujer bajo su techo y descubrieron que su amor y el de su marido salio reforzado. Virginia se giro y puso su piernas en dirección opuesta alejado su sexo de la cara de Esther. Virginia de nuevo atendió el clítoris de los genitales del amante compartido por ella y por su adorado Francisco. Este se había recuperado y apunto su pene a la entrada vaginal de su esposa. La entrada del preciado miembro fue recibido por un grito de placer y una mirada de amor y agradecimiento hacia él. De nuevo volvía a la acción. No tardo mucho en que la inundase de nuevo el orgasmo mientras al mismo tiempo recogía los restos del agua de vida que emitía Esther. Era la primera vez que probaba fluidos de otra mujer y descubrió que el agua de vida femenina era también maravillosa de recoger con sus labios y lengua. Ahora no solo el semen de Pedro sino también el fluido vaginal de Esther serian sus fuentes de agua con las que calmar su sed. El corazón latía con intensidad mientras este se fascinaba de sentimientos.
Esther y Virginia miraban a su alrededor mientras Francisco seguía penetrando a la última. Acababan de descubrir con la celebración en honor a Asherah un mundo de posibilidades. Ya no seria solo posible que solo se acostase una con Francisco mientras la otra se masturbaba. Ahora habían descubierto un mundo lleno de posibilidades. Montandoselo bien era posible darse placer simultáneamente entre los tres.
Unos metros más allá observaron algo que las inspiro. Pedro estaba tumbado , Beatriz se penetraba con su pene e Isabel recibía las caricias orales de Pedro. Ella se había abierto sus piernas en la cabeza se este. Isabel y Beatriz se besan mientras se acarician la una a la otra los pechos. Debajo Pedro se encarga de darles placer a la una con el pene a la otra con la boca.
Dirige su lengua al clítoris de Isabel y lo rodea con su lengua, le da soplidos, lo coge con los labios. Ella reacciona rápidamente y sus gemidos delatan un inminente orgasmo. Pedro introduce profundamente su lengua en la vagina.
- Si Pedro, ¡¡¡¡¡ Si !!!!!! ¡¡¡AHHH!!!!
Pedro percibe las convulsiones, oye los gritos de placer, los gestos incontrolados. Esta deleitándose del orgasmo que ha provocado a su amante.
Un poco a su lado el cuarenteañero Alberto esta tumbado en el colchón. Encima de ella tumbado esta Xian, su cuerpo liviano y de baja estatura no es problema. Encima de ella esta Juani, se ha colocado el bend over friend y esta penetrando analmente a la joven de ojos rasgados mientras su marido le da placer a esta por la vagina. Los gritos de placer que esta dando Xian al sentir por primera vez ser el fiambre de un sandwich son potentes. Muchos miran hacia ella. Esta claro que esta teniendo una serie larguísima de orgasmos uno detrás de otro. Sus "amos" disfrutan también de como le están haciendo gozar y el matrimonio ante la visión del placer de la oriental también caen en los suyos. Algunos hasta aplauden al ver por primera vez una doble y esto les da ideas. Los juguetes vuelven a hacer acto de presencia intentando aumentar el placer a las mujeres. Todo el sagrario esta iluminado de luz azul procedente de las velas debajo del aquario. También las luces rosadas de Asherah brillan pero no con tanto intensidad.
El cuerpo liviano de Xian permite un cierto juego malabar. De pie Alberto la sujeta mientras esta se abraza con fuerza al pueblerino. Por detrás la tendera la sigue sodomizando con suavidad. La cara de placer y los continuos gritos de la mujer de piel amarilla retumban en la ermita. Ese tratamiento simultaneo la esta haciendo muy escandalosa. El número de orgasmos en las mujeres se esta haciendo incontable.
Por su parte enfrente al altar principal Virgilio está tumbado encima de Lilith penetrándola. Al ver los juguetes en acción Laura se anima y hace una cosa que deja anonadados a los presentes. Con ayuda de lubricante dilata con los dedos el culo de Virgilio. Luego se coloca un bend over friend con sus respectivos arneses. Y entonces penetra el ano de Virgilio. Este da un potente grito de placer. Él es la parte central del bocadillo. Esa imagen le llena de morbo a Beatriz. Pedro esta entretenido penetrando a Isabel que esta en perrito. Pedro no se espera lo que le viene. Esta concentrado después de más de media hora de coitos alternativos con sus mujeres paralizando su orgasmo. Pero ese esfuerzo se volverá fútil ante lo que le va a hacer su mujer. Esta sutilmente acaricia con su mano las nalgas de Pedro y sin poder hacer este nada recibe la penetración de un dedo. La caricia en la próstata la provoca que entre en eyaculación de forma inmediata. Su orgasmo es intenso. Virgilio también se corre. La estancia se cubre ahora de luz rosada. La diosa recolecta los orgasmos de los hombres. Isabel percibe la explosión de esperma de Pedro y ella también alcanza el suyo al notar el cálido fluido. Ha sido un orgasmo fuertemente psicológico al recibir por primera vez en la noche el semen de su amante. Algunos hombres se sienten intimidados por lo que acaban de ver. Otros sonríen.
La noche va transcurriendo y el agotamiento se hace sentir especialmente en los varones. Según su edad algunos han echado unos 7 polvos otros más de una docena. Muchos tiempos muertos son cubiertos entre las caricias entre las mujeres y los juguetes. Entre todo las mujeres han perdido la cuenta de los clímax que han sentido.
Llegan las luces de la mañana y Lilith anuncia el fin de la celebración. Los hombres se sienten agarrotados pero las mujeres se encuentran felices. Pero la celebración a merecido la pena para todos. Todos terminan entre besos y caricias entre los amantes mientras se visten para irse a sus casas a descansar. En 3 días habrá una nueva celebración y los grandes invitados serán los hombres. Es hora de recuperar fuerzas para continuar la celebración dominical.
Al llegar a casa Pedro, Beatriz e Isabel. Alberto, Juana y Xian. Virginia, Francisco y Esther. Maria y Judith. Todos los que participaron yacen abrazados en los dormitorios de sus casas. El haber participado en esta orgía los ha unido aún más y se sienten más enamorados. A muchos les ha abierto a nivel sexual. Nuevas cotas de placer se abrirán. Las mujeres por su parte piensan en como devolverles el placer a sus maridos el Domingo. Ahora se sienten dispuestas a todo.
En el dormitorio de la sacristía están acostados Lilith , Laura y Virgilio. La sacerdotisa y sus apóstoles. Han tenido un gran éxito. Las mujeres llenan de mimos a Virgilio.
- Dime Lilith ¿Ha salido como tú querías?
- Ha salido magnifico. Me ha gustado lo bien que has preparado tu parte. Ha estado muy bien eso de la cena y lo del baño me ha encantado.
- Pues eso lo preparamos en mi terapia de grupo.
- O sea que lo han disfrutado todas las mujeres
- Asi es.
Lilith le dio un profundo beso a Virgilio.
- Eres un magnifico jefe de terapia. Sabia que eras mi mejor elección como apóstol.
- Y por la noche ¿Como hemos estado todos?.
- Tú has estado sensacional y por lo que podido ver los has entrenado bien a todos. Se han portado como campeones. Las velas de Yaveh estaban gastadas de tanto iluminarse. Nos habéis derretido a placer a todas. Me ha gustado que hayáis sido tan cuidadosos en darnos muchos orgasmos así como que habéis sido a la vez tiernos y dulces.
- A mi me encanta ser dulce y cariñoso con mis mujeres. Eso del típico machito duro que solo sabe meterla a mi no me va. Yo quiero darle pasión a mis mujeres en todos los ámbitos. Que se sienten a gusto no solo en el plano erótico sino también sentimental.
- Y por lo que veo estas transmitiéndolo a todos los varones de la terapia.
- En eso estoy.
- Dime Laura. ¿Que puntuación le damos al trabajo de terapeuta de Virgilio?
- Un 10 de 10. Ni yo me creía que lo fueses a hacer tan bien.
- Pues a dormir Virgilio que el domingo os toca a vosotros. Y te garantizo que os vamos a devolver esto con creces. Creo que por la cara con la que han salido las mujeres os vamos a dejar que hagáis con nosotras lo que queráis. - dijo Lilith
- ¿Lo que queramos? Eso son palabras muy fuertes.
- Déjamelo de mi cuenta. Creo que soy capaz de convencerlas a todas para hacer realidad todas vuestras fantasías.
Continuara ...