Atrapados por mi sobrina

Este primer relato sirve para situar al lector sobre la familia y una pequeña experiencia sexual con mi mujer.

ATRAPADOS POR MI SOBRINA

Hoy empiezo a escribiros mis relatos productos de la fantasía, de la realidad, de la ficción, de la verdad.

Hace ya mucho tiempo que comparto mi vida con mi mujer Luna (por ejemplo) de 35 años…yo 37. Digamos que en 17 años que llevo con ella nunca me he arrepentido de haberla encontrado en mi vida. Es la típica mujer interesante y atractiva en invierno…y explosiva y sorprendente en verano.

En todos estos años he notado siempre como mis amigos al encontrarse con nosotros en la playa me han buscado las vueltas para contemplar a mi mujer.

Como decía, en invierno sus atributos están escondidos, pues no suele llevar ropa que los marquen…pero en verano sus bikinis, shorts, tops, camisas, etc… dejan al descubierto a una mujer de 1.65 cm, cuya figura desde las tetas a la rodilla corta el hipo.

95-64-92…ahí queda eso. Y un pelo a media melena, liso, color caoba y una boca sensual y grande…o sea que no me arrepiento.

Follando me ha costado llegar a mi plenitud…¡no todo podía ser fantástico!…pero verán porqué afortunadamente esto también ha cambiado.

Mi mujer tiene 3 hermanas (ya empezamos con las cuñadas), Candela de 38 y medidas aproximadas 120-65-95…Tierra de 28 y 100-60-90…y Agua de 24 y 110-58-91.

Es decir, si han sido capaces de focalizarlas con las medidas…!vaya 4 pares de tetas!

Al igual que muchos otros hombres mis cuñadas son "el plato fuerte" de mis masturbaciones y…demás cosas…por ejemplo mi sobrina Ceniza, hija de Candela, que hoy en día cuenta con 18 años y que como verán es la protagonista de esta serie interminable que hoy me he decidido a contaros.

En mis primeros 11 años de convivencia con Luna, nuestra vida sexual ha sido irregular en la cantidad…rachas malas y buenas; y con 3 asignaturas pendientes respecto a la calidad: no le gusta tragarse mi semen (lo probó), no le gustan las enculadas (se intentó pero sin éxito) y no le gusta sentirse "esclava" pues es muy dominante.

Algunos se preguntarán que porqué sigo con ella o cómo es posible de que le sea fiel con estos "suspensos". La respuesta está en su cuerpo, la convivencia por supuesto, y en que cuando la chupa o folla lo hace con mucho arte…pero nunca olvidaré el día que se tragó toda mi leche.

Era de noche y nos habíamos salido del bar en el que estábamos con los amigos para hacernos un canuto en el coche. En aquel entonces llevaríamos unos 2 años juntos

(22 yo-20 ella), y Luna estaba con la chispa de la bebida y el ambiente nocturno, así que mientras me hacía el canuto empezó a juguetear con mi paquete aprovechando que tenía las manos ocupadas.

Ten cuidado.- le dije.- que te vas a quemar.

Ella se rió, me bajó la cremallera, me sacó la polla (17x 7) y comenzó a masturbarme suavemente mientras me besaba la cara y la oreja derecha.

Joder Luna…que se me cae el petardo!

que no se te caiga otra cosa.- dijo entre risas.- y con dulzura siguió tocándomela para lentamente resbalar su cuerpo y llegar con su boca a mi polla erecta.

Encendí el canuto, le dí la 1ª calada y eché la cabeza atrás…!estaba tocando el cielo!

Luna la estaba chupando con maestría, lengua arriba lengua abajo, se paraba en mis huevos, me besaba la polla desde la base hasta la punta y se la metía toda de una tacada.

Conociéndole bien la avisé:"Luna…no tengo pañuelos al alcance ni tengo ganas de buscarlos…"

Luna seguía chupando con sus labios carnosos, su ritmo había crecido y me estaba chupando el nabo como si se lo fueran a quitar de la boca…apretaba su mano y me lamía una y otra vez el capullo cuando subía.

Paró de repente, mi cuerpo estaba tenso, mis huevos cargados

No se te ocurra dejarme así!.- le dije mirándola; ella sonrió con esa boca preciosa y grande que tiene y dijo.-agárrate!

Se la volvió a meter en su boca y esta vez empezó a succionar y masturbarme a la vez con gran energía…era cuestión de décimas de segundo y flash…mi pene endureció brutalmente y comenzó a derramar toda su leche en la boca de Luna.

Ella seguía con la polla dentro y pude ver como le salía leche por la comisura de sus labios lo que me calentó aún más y le empujé levemente su cabeza contra mí.

Ella entonces se apartó, abrió la puerta del coche y vomitó…pero la corrida en su boca fue bestial.

Al terminar y limpiarse con los pañuelos que yo le tendí (jejeje) me confesó que decididamente sería la última vez (lo que cambia la vida)…yo respiré hondo y la besé.

Después de esta primera experiencia…en el próximo relato os contaré como al cabo de los años mi mujer cambió y aprobó sus asignaturas pendientes…con la inestimable "ayuda" de mi sobrinita Ceniza.

Llevábamos ya 11 años juntos, ella 29 y yo 31, y mi Luna seguía chupándola y follando de mil maravillas…pero cuando le daba la gana a ella y como ella quería. No había corrida oral, ni enculada…ay mi Luna!

Yo seguía masturbándome bastante y pensando sobre todo en mis inaccesibles cuñadas, todas riquísimas y todas bien casadas también.

Pero el cambio se produjo gracias a mi sobrinita Ceniza. Hija de Candela había heredado de ella la belleza y seguramente el ardor por lo presumida y divertida que era. Evidentemente nunca he pensado en aprovecharme de las menores…bueno, sigan leyendo y comprenderán.

Un buen día mi mujer me comentó que Ceniza se quedaría con nosotros una noche, ya que su hermana Candela y su marido tenían que ir a un pueblo a asistir a un funeral y pasarían la noche fuera. No le di importancia puesto que no era la primera vez que mi sobrina se quedaba en nuestra casa.

Sobre las 7 h. de la tarde llegaron mis cuñados con su hija, y algo menos de ½ hora después ya se habían marchado.

Pasamos la tarde en casa, entretenidos con las labores del hogar y con nuestra invitada que gustosamente nos ayudó; también estuvimos mi mujer y yo hablando de mi suegra y otras de sus intromisiones desacertadas en asuntos familiares.

Después de cenar, Ceniza se acostó y Luna y yo nos quedamos en el comedor…a los 10 minutos mi mujer ya me estaba comiendo la polla con mucha ansia y rápidamente me corrí…fuera.

¿A qué vino eso?.- pregunté.

Tenía ganas de postre.

¡Podías haberlo rematado con algo de leche!...apostillé, mientras me limpiaba.

Ella me miró algo enfadada y continuó mirando la tele.

Enseguida yo me acerqué a ella y momentos más tarde hacíamos un 69 en el sofá. Yo también tenía mis recursos y sabía que mi mujer cuando ha empezado, si se sabe tocarle bien el coño no puede pararse.

Enfrascados estábamos en este mágico número cuando una vocecita sonó en la sala: "Tita, ¿qué hacéis?.

Mi mujer que estaba encima, saltó como un resorte y fue a llevarse a mi sobrina, pero ésta no se dejaba…mientras miraba atónita mi polla erecta, habiendo quedado al descubierto tendido en el sofá.

Venga Ceni, vamos a la cama.- decía mi mujer.

Yo quiero quedarme…y también quiero chupársela al tito.

Niñaaa!.-gritamos al unísono Luna y yo.-¡venga a la cama y no digas tonterías!.

Si no me dejáis le contaré a la abuela lo que habéis dicho de ella esta tarde.- sentenció Ceni.

¿Qué has escuchado?.- preguntó mi mujer.

Y Ceni empezó…"Lo de que es una bruja y metomentodo, lo de mi tito Río, lo de…"

Para, para…-dijimos otra vez al unísono.

¡Impresionante!...silencio absoluto entre mi mujer y yo.

¡Impresionante!...una cabecita de 18 años chantajeándonos.

¡Impresionante!...¿un callejón sin salida?.

Venga Ceni…vete a la cama y olvida todo.- dije yo intentando no se qué.

No.- muy seca y segura respondió una increíble niña.

Mi mujer que siempre ha sido muy especial y reservada para el sexo, seguramente no accedería al chantaje de mi sobrina; por eso me sorprendió al escucharla:

"Venga Lunes (yo por ejemplo), siéntate bien que te la vamos a chupar las dos".

¡Tu estás loca!

Ésta es capaz de contarle a mi madre todo…(silencio)…y no lo voy a consentir

.- dijo Luna.- así que prepárate

Al decir esto me pareció ver en la cara de mi mujer un brillo especial…nunca visto.

Allí estaba yo…con la polla semiflácida, pues se había ido encogiendo en la conversación…y frente a mí arrodilladas: Luna, mi mujer y mi sobrina Ceni de sólo 18 años dispuesta a mamármela…¡Qué situación!¡Una menor se iba a aprovechar de mi!.

Mi mujer me cogió la polla y rápidamente ésta reaccionó…a ésta poco le importaba los parentescos y edades!. Dura y tiesa en tres vaivenes, a pesar de que tenía encima clavados los ojos de mi sobrinita.

"Yo quiero cogerla".- dijo en ese momento. Mi mujer me miró otra vez con ese brillo y le dijo. "Sujétala por aquí abajo".

Eché la cabeza hacia arriba porque prefería no ver a mi sobrina y porque el gusto que me estaba entrando era bestial.

Dos manos me pajeaban con decisión de arriba hacia abajo, mi mujer…la muy joía empezó a tocarme las tetas, el abdomen, el culo…y ella sabía que eso me ponía a cien.

"¡Que grande ahora!, tita…efectivamente mis 17 eran 18 seguramente, mi capullo tenía un volumen y brillo inusitado;

"La quiero chupar ahora"…dijo Ceni, y mi mujer bastante animada respondió: "mira".

Cerró los ojos y comenzó a chupármela como de costumbre…fenomenal.

No sé si por intuición o por no se qué mi sobrina interrumpió el momento:"Tita, yo quiero también". La parada me vino muy bien porque ya estaba a punto.

Luna dijo: "ahí la tienes" y se aupó en el sofá poniéndome su coño en mi boca…¡joder con Luna!.

Pienso que ni ella ni yo queríamos ver el momento crucial…pero sentirlo lo sentí al instante. Con mis manos apreté el culo de Luna contra mí, mientras me comía su rico coño y Ceni se introdujo el capullo en su boca…parada… y algo más. Evidentemente todavía tenía más de media polla fuera pero en ningún momento quería dañarla por lo que mis manos seguían pegadas al culo de mi mujer que resoplaba sin parar.

Hasta dos orgasmos tuvo Luna encima de mí, sus jugos me empapaban la cara y al mirarme se acordó…¡no te corras en ella!...¡imposible Luna!.-contesté como pude.

Ceni seguía chupándola, más bien lamiéndola porque tenerla dentro le era más difícil debido a las diferencias físicas…pero su mano no soltaba la base de mi polla y no dejaba de subir y bajarla,y ésta siempre erguida relucía ante los lengüetazos de Ceni.

Mi mujer desmontó de mi cabeza y le dijo a Ceni: "yo termino, mi vida".

Ceni se apartó y pudo ver como Luna después de mirarme a los ojos se introdujo toda la polla en la boca."Guau".-soltó Ceni.

Luna me la chupaba como nunca y tras unos segundos comencé a correme salvajemente en su boca; ella tragó como una campeona sin parar de pajearme, Ceni miraba atónita la escena y yo empujé levemente la cabeza de Luna para que me exprimiera…y así lo hizo, una y otra vez me la chupó y me relamió hasta dejarla limpia…brillante.

Aquella noche dormimos los tres juntos y mi mujer no me soltaba el rabo…¿no se fiaría de mi sobrinita?.