Atrapados en la cabaña 3
Llegan los hermanos y padre e hijo aprovechan la última oportunidad de tener sexo una última vez y ver como los hermanos se portan cuando los ven que están bien
ATRAPADOS EN LA CABAÑA 3°
Llegan mis hermanos
Después de un domingo agotador pero lleno de caricias sexo y leche de mi padre, estuve mandándole mensajes a mi hermano mayor, Oscar para sabes cómo estaba todo. El lunes como a las 11 de la mañana me llamo mi hermano Oscar, para ponerme al tanto de la situación cuando recibí la llamada de mi hermano, yo estaba desesperado por saber que estaba ocurriendo tanto con el puente como con la universidad y después de haberle dejado varios mensajes por fin me llamo a las 11 de la mañana.
llamada de Oscar. Hola pollo ¿cómo están mi papá y tu todo bien? Disculpa por no contestar tus mensajes, pero andaba algo ocupado y haciendo algunas llamadas, ya fui a la universidad... – antes de que terminada de contarle a mi hermano me interrumpe para preguntarme sobre la universidad y el puente.
llamando, Brayan. ¿Qué te dijeron en la universidad y que has sabido sobre el puente? – estaba desesperado por saber que ocurría.
llamada, Oscar. Pues deja que termine de hablar para explicarte, la universidad está en paro y no tienes clases al menos por esta semana, el puente ya quedo hoy para dar pase, pero no se muevan dile a papa que ya vamos a la cabaña Roberto y yo, espérenos ahí llevamos algunas cosas, si les falta algo me llamas para llevarlo. – queríamos distraernos y al ver que mi hermano no tendría clases podríamos aprovechar la ocasión y también ver como se encontraban mi padre y mi hermano menor.
llamando, Brayan. Está bien yo le digo a mi padre que ya vienen para la cabaña y no creo que necesitemos nada en caso de que ocupemos algo ahorita te regreso la llamada. – le comenté a mi padre lo que me dijo mi hermano en la llamada y mi padre respondió.
Pedro. Háblale dile que no nos hace falta nada y démonos prisa en tener sexo una vez más antes de que lleguen tus hermanos, quero darte tu despedida y penetrarte una vez más, bueno dile que nos traiga aceite comestible. – mi hijo supo que lo del aceite fue broma pues teníamos de sobra y aún no terminaba de decirle a mi hijo lo que deseaba, cuando ya se estaba quitando su ropa.
Brayan. Mientras me desnudaba tome el celular para marcarle a mi hermano y mientras tanto mi padre me tomo de las nalgas y empezó a besar mi cuello fue bajando por mi espalda hasta llegar a mis nalgas, me las empezó a morder levemente, mi hermano atendió mi llamada y mi padre me seguía comiendo el culo, no sé cómo me pude contener y decirle a mi hermano que no necesitábamos nada, después de colgarle a mi hermano, mi padre no se detuvo hasta dejarme el culo bien dilatado, metía sus tres dedos a mi ano y me decía al oído ya estas bien a abiertito papa papi, pollito te voy a comer el culo una última vez este día para que no extrañes en toda esta semana.
Mi padre apunto su verga en mi culo y la empezó a deslizar suavemente por mi culo dilatado y lleno de saliva, la verga de mi padre llena aceite que estaba usando como lubricante, fue metiéndome lento hasta que logro meterla toda se detuvo y me empezó a besar el cuello me subió a la mesa y me empezó a taladrar el culo, luego me llevo al sofá y ahí me dio otro rato luego me la saco se recostó sobre el piso me dejo que lo montara una vez más, para terminar me llevo al baño y ahí me empino sobre la taza de baño y me estuvo sujetando de las caderas dándome fuerte.
después me llevo a su cama me coloco boca arriba y me la volvió a meter una vez más, continúo metiéndomela y sacándola con más rapidez y fuerza, de repente mi padre empieza a gemir y respirar más grueso sabía que estaba a punto de terminar me apresuré a masturbarme y en pocos segundos comencé a eyacular y mi esfínter se contaría con cada chorro de semen que lanzaba, mi padre pego un gemido metiéndome por completo su verga con una fuerte envestida para inundar mi recto de su semen.
Nos quedamos acostados y desnudos sobre su cama y nos quedamos medio dormidos ya que nos despertó el sonido del motor de un auto, rápido nos vestimos y salimos para ver que quienes llegaban eran mis hermanos Oscar y Roberto, lo bueno fue que antes de que ellos entraran mi padre y yo ya estábamos en la sala esperándolos, pero si algo adormilados y pegajosos de semen.
Oscar. ¿Buenas tardes como le fue? Papa disculpa la tardanza hemos traído algo de comida, también vinimos a su rescate. - Esperaba encontrarme con otro ambiente algo de tención caras largas, esperaba ver a mi padre y hermano de mal humor enfadados, pero veía todo lo contrario se sentía un ambiente tranquilo ambos parecían relajados contentos.
Pedro. Gracias, hijo, aun que han llegado un poco tarde, pero la intención es lo que cuenta, gracias por venir a ayudarnos. – me daba gusto ver a mis dos hijos, pero también admito que me la estaba pasando de lo mejor con mi hijo el más chico.
Roberto. Ya vez padre dicen que más vale tarde que nunca, yo esperaba verlos despedazados locos de la soledad y el encierro, pero veo lo contrario, es ventaja encontrarlos aun cuerdos, pollo ya te extrañaba un chingo tenía ganas de verte. - mi padre y el pollo solían ser muy distantes pero ese día había algo en el ambiente que se sentía tan cercanos, el aura que despedían ambos era diferentes a días anteriores, pero estaban muy bien muy calmados.
Brayan. Hola a los dos, gracias por venir, tranquilo Roberto si hemos durado más tiempo sin vernos, gracias, Oscar por acudir a la universidad más tarde me gustaría hablar contigo. – mi hermano Roberto desde que se enteró de lo de mi primo y yo, dejamos de pelear se portó más comprensivo, desde entonces me empezó a abrasar besar en la cara y de vez en cuando repagarme su verga, más cuando la traía parada, en casa cuando estábamos solos me agarraba mi mano y se sobaba su verga con mi mano e incluso llego a eyacular dentro de su ropa mientras se tallaba su verga con mi mano, pero no paso de ahí, fue hasta cuando tenía 17 y Roberto 20 años me pidió tener sexo pero en ese entonces yo me negué a hacerlo, pero nada cambio entre nosotros.
Brayan. Mi relación con mis hermanos tanto con Oscar como con Roberto es buena ya que con ambos hablo y me la llevo bien, con mi hermano Oscar al ser el mayor siempre lo vi como mi protector como mi ejemplo a seguir, mientras que con Roberto siempre fue mi compañero de pelea con quien peleaba por todo, años más tarde mi compañero de juego y cómplice en algunas salidas que tenía con chicos, el me cubría siempre y cambio de su silencio me dejaba que me repagara su verga cuantas veces quisiera y también que usara mi mano como funda para hacerse una paja.
Después de la cena uno a uno nos bañamos y después nos fuimos a dormir obviamente seguía haciendo mucho frio y mi hermano Roberto se fue a mi cama mi padre y Oscar durmieron juntos, aunque yo quería dormir en la cama de mi padre, tanto el como yo no nos quisimos arriesgar a ser descubiertos, al día siguiente después del desayuno mi padre y Roberto se pusieron a limpiar lo que habíamos ensuciado al desayunar y Oscar y yo salimos a dar un paseo.
Oscar. ¿y cómo te fue con mi papa? Siento que las cosas han cambiado, pero me gustaría escucharte y contarte por que el motivo del viaje. – mi hermano sonrió cuando le hice la pregunta, después solo suspiro y me miró fijamente con una mirada diferente a la que tenía había algo y quería que me contara que era lo que paso esos casi 10 días solos él y mi padre.
Brayan. Todo bien, si todo ha cambiado y creo que, para bien, en mi punto de vista, yo enfrente mis miedos con mi padre, él se mostró abierto a escucharme y se acercó a mí, al principio pensé que esto sería un desastre, pero fue todo lo contrario pues ya nos llevamos mejor y aparte que el frio hizo de las suyas, pues nos obligó a juntarnos más de lo habitual. – mi hermano me sonreía y se le veía con algo de curiosidad en saber lo que paso esos días, pero obviamente no le contaría todo ni a detalle lo sucedido, no en ese momento.
Oscar. A que te refieres con tus miedos, y ya te explicare porque mi padre se mostró abierto como tú dices, me alegro haberlos encontrado de esta forma contentos relajados, pues era la idea del viaje entre otras cosas. – estaba decidido a contarle por que se decidió ese viaje y con que finalidad.
Brayan. Mis miedos eran, que mi papá me rechazara, sintiera vergüenza de mí, me viera como un fenómeno y que no aceptara mi homosexualidad. Su silencio hacía que yo pensara todo eso de él, pero entendí estos días que mi papá es así como yo de callado, - Oscar siempre ha sido serio acepta mi homosexualidad, pero no la de otros, aunque es bueno y amable no termina de aceptarlo por completo, ya que siempre que nos saludamos me abrasa me sonríe habla conmigo es buen hermano y me quiere, pero me ha dicho que nunca le valla a presentar a un chico como mi novio que eso no le gustaría oír de mí.
Oscar. Veras pollo te voy a contar como fueron las cosas y que siento que es necesario que sepas, para que en un futuro que tomes una decisión sepas esto que te contare, un día llego mi papa a la oficina más callado que lo de costumbre, estaba pensativo, serio, inactivo y con la mirada perdida, en eso me acerque a él y le pregunte por qué razón estaba así de decaído y triste. Me respondió que era por ti, que ya tenías más de 4 meses sin siquiera háblales por teléfono mucho menos ir a visitarlos, me dijo que un día te hablo y que le respondiste lo ciento no te puedo atender tengo mucha tarea, mi papa se puso más triste de lo que estaba.
Brayan. Si recuerdo ese día que me hablo, yo estaba de malas había tenido un día terrible y me porte como un patán con mi padre. – ese día no me interesaba nada mi día fue terrible y había decidido alejarme de mi familia y me porte muy grosero con mi padre me llene de remordimientos, pero eso no era todo aún tenía más que decir Oscar.
Oscar. Mi padre me confeso su dolor, recuerdo que me dijo; Oscar estoy perdiendo a mi pollito, ya no me quiere, mi pollito se está alejando de mí, no me habla cuando de casualidad viene se aparta de mí y no me cuenta nada, extraño a mi pollito lo quiero recuperar, pero no sé qué hacer él no se acerca a mí me huye cada vez que me acerco a él ¿qué puedo hacer Oscar? Fue entonces cuando se me ocurrió lo de la cabaña y pues juntos Roberto y yo haríamos que mi padre y tu pudieran hablar y arreglar las cosas. - Observe atento a mi hermano
Brayan. No sabía que mi padre se sintiera de esa manera y es verdad cada vez que el me buscaba yo me alejaba cuando iba al departamento yo lo evitaba buscaba alguna excusa para no estar en el departamento mientras él estaba ahí. – me sentía tan miserable que no sabía que decirle a mi hermano para disculparme.
Oscar. Ahora ya lo sabes, pues al parecer las cosas salieron mejor de lo planeado. Después de todo la meta se ha conseguido y es lo que vale la pena. – mi hermano se veía avergonzado triste después de decirle lo que mi padre pensaba de él, mi padre siempre ha tenido más cariño por el pollo que por nosotros dos, eso lo sé ya que cuando habla de su pollo se le ilumina la cara.
Brayan. Oscar y yo seguimos hablando de muchas cosas y también de mi padre, lo que le conto a Oscar de mí, me comento Oscar que mi padre siempre ha sentido más afecto por mí que por el o Roberto, pero yo nunca me di cuenta de eso hasta estos días, me sentía confundido y triste pues mi padre me quiere más de lo que yo creía.
De regreso a la cabaña estaba mi padre y Roberto preparando algo de comer, cuando mi padre se dio la vuelta para saludarnos sentí unas ganas de darle un abrazo, pero no sabía si era o no correcto dárselo y no estaba seguro de su respuesta.
Brayan. ¿Papá te puedo dar un abrazo? – no sabía cómo pedírselo así que sin rodeos se lo pedí y esperar su reacción, mi padre se limpió las manos y me miro atento.
Pedro. Claro que puedes ven aquí. – mi hijo camino vacilante hacia mí y pude ver en sus ojos que estaban a punto de llorar.
Brayan. Le di un abrazo a mi padre, sentía muchas ganas de llorar pero mi padre me dijo al oído; tranquilo todo está bien, las cosas están como deben de ser y no tenemos nada que decirnos este abrazo lo dice todo, tranquilo mi pollo, en ese momento Roberto se acercó a mi padre y a mí y nos abrazó a ambos, luego mi padre le pidió a Oscar que se uniera al nuestro abrazo, Oscar se puso a mi lado y nos abrazó medio tímido sin pegar tanto su cuerpo a los nuestros mientras que Roberto todo lo contrario se pegó mucho a nosotros y más que nada a mí.
Al día siguiente mi padre y Oscar como era de esperarse salieron de la cabaña y Roberto y yo nos quedamos en la cabaña para esperarlos a comer y también tener la oportunidad de poder hablar, con mi hermano Roberto aunque seguido hablaba con él por teléfono no es lo mismo que hablar en persona, empezamos a hablar de cosas sin mucha importancia me puso al tanto del pueblo de los negocios de papa entre otras cosas, pero de repente se puso serio y me empezó a platicar de lo que le sucedió a él y a recordarme una vez más lo que sentía por mí.
Roberto. Sabes cometí la mayor estupidez de mi vida, no sé cómo paso, pero lo hecho, hecho esta y lo peor es que no quiero hacerlo y mi padre prácticamente me ha obligado a hacerlo ya que no me ha dejado otra salida. – antes de terminar de hablar y decirle a mi hermano lo que tenía el me interrumpió.
Brayan. Pero de que estas hablando de repente has cambiado de tema estábamos hablan de las personas del pueblo de los negocios de mi papa y de repente me sales con esto, a que te obligo papá ¿qué es lo que está pasando? ve al grano que no entiendo nada. – de repente mi hermano se puso serio hasta se veía algo enojado más no entendía a que se refería mi hermano.
Roberto. No sé cómo paso, que mi novia quedo embarazada y su padre fue a ver a mi papá y le pidió que nos casáramos, mi padre accedió a que nos casáramos no me ha dejado otra salida. – mi hermano se empezó a reír y a verme de frente así que espere su respuesta.
Brayan. No me vengas con que no sabes cómo paso, ni que no supieras y pues si no querías que sucediera, existen muchos métodos para evitar embarazos, cual es la razón de que no quieras casarte si tarde o temprano lo tendrías que hacer. – como que no sabía cómo paso si es algo fácil de saber y entender, pero lo que si mi hermano no se quería casar.
Roberto. Lo sé, pero la calentura es mendiga, no me quiero casar porque yo quiero ser libre, la verdad tú la sabes, pero nunca me has preguntado, tú sabes cuantas veces te he pedido que me la mames, pero te has negado a hacerlo, tengo ganas de meterte la verga muchas veces te lo pedí y nunca me hiciste el paro, yo te hacia paros con los chavos esperando algún día me dieras la oportunidad a mí, pero no paso. soy bisexual, me gusta andar con mujeres y hombres, pero al que siempre le he querido meterle la verga se ha negado, miles de veces me la jale pensando en tu boca y tu culo, a Oscar le dije un día que no descansaría hasta meterte toda la verga y él se sorprendió y me dijo que no es posible ya que somos hermanos, pero eso a mí no me importa quise violarte una vez que andabas borracho, pero Oscar me detuvo.
Brayan. sé de tus intenciones, intentos y confesiones, pero nunca pensé que te gustaran los hombres por tu forma de ser tan varonil, nunca lo pensé hasta ahora que me lo dices y si me negué siempre fue por miedo a mi padre a todos, siempre me ha gustado como nos tratamos, cuando te agarraba la verga y te masturbaba, hasta cuando me la pegabas en mis nalgas todos esos juegos, más no me sentía seguro de hacer algo contigo o con cualquier familiar, después de los sucedido con mi primo y nos descubriera mi padre. – la verdad no sabía si continuar con ese tema ya después de lo sucedido con mi padre no sabía que hacer que pensar o que decirle a mi hermano.
Brayan. Ese día estuvimos jugueteando después de dejar de lado el tema de mi hermano y entre juegos le estuve agarrando la verga, hasta se la saque, una verga gruesa morena de 18 cm muy parecida a la de mi padre, mi hermano quería que fuéramos más adelante, no solo fuera acariciarla y masturbarlo, pero yo no estaba seguro de volver a pasar por una situación semejante a la de mi primo y arriesgarme a que llegaran mi padre y Oscar nos encontraran en una situación fuerte, aunque debo de confesar que mi padre ya nos ha visto cuando Roberto me abrazaba por detrás y me pega su verga en mis nalgas y pues a lo que me conto Oscar.
Más que nada Oscar me conto que en una ocasión que tome demasiado en la fiesta de cumpleaños de mi prima, Roberto se ofreció llevarme a mi habitación y cuando Oscar entro en la habitación yo estaba tirado en la cama boca abajo y con mi culo al aire, mientras mi hermano Roberto se estaba preparando para meterme la verga, pero en eso Oscar lo detuvo y empezaron a discutir, obviamente yo no me di cuenta hasta que Oscar me lo conto.
Entre nuestros juegos Roberto y yo escuchamos que mi padre y Oscar habían llegado, el resto de los días la pasamos bastante normal ya mi confianza con mi padre había mejorado, así el día que nos regresamos yo me fui en la camioneta de mi padre y mis dos hermanos en el todo terreno, cuando estábamos de camino a casa mi padre me dijo en tono serio;
Pedro. Esto que ha pasado entre nosotros en la cabaña se quedará ahí, solo quiero que continuemos con nuestra relación parental, lo del sexo no se repetirá y más nos vale que ambos lo olvidemos, no se repetirá. – en ese momento tenía miedo a lo que pudiera surgir y que mi hijo se hiciera ilusiones con la persona no adecuada, también que no sabía cómo reaccionar y si solo fue la soledad que teníamos y por ello paso lo que paso.
Brayan. No te preocupes padre estaré al pendiente y procurare visitarlos más al pueblo y si es mejor que todo lo del sexo quede ahí en esa cabaña. – no tenía intenciones de continuar con la relación con mi padre ya que si me sentía algo preocupado por lo sucedido y lo mejor sería olvidar. Ahora el reto es ¿lo podremos olvidar?
Pedro. Continua con tu vida no te estanques en esto que pasamos, lo bueno de todo esto es que reparamos las diferencias y nos llevamos mejor y ambos tenemos más de que hablar ya lo hemos probado, pero lo del sexo dejémoslo olvidado. – no sabía que hacer, pero confiaba que con el paso de los días todo se normalizaría.
Brayan. Mi padre me dejo en la ciudad llegaron mis hermanos al departamento y tomaron agua después se despidieron y cuando Roberto me dio un abrazo me dijo al oído vengo después tengo algo pendiente contigo, me quede mudo en ese momento después mi hermano Oscar y mi padre se despidieron, una vez más me quede solo en cas pensando en todo lo ocurrido y no podía sacar de mi mente a mi padre, los días pasaron y poco apoco estaba acoplándome a mi vida, pero justo cuando estaba en eso me llego el mensaje de Roberto “te veo mañana tengo cosas que hacer y llegare a visitarte quiero hacer algo antes de casarme” solo le respondí: te veo aquí.
Ya como a las 3 de la tarde toco Roberto a mi puerta yo estaba terminando de recoger la casa y fui a abrirle la puerta, como siempre me saludo con un fuerte abrazo y me dio un pequeño beso en la mejilla, Roberto entro y cerró la puerta se puso a platicar conmigo y después me pidió entrar al baño, me dijo que estaba muy sudado y quería darse un baño, Roberto entro a darse un baño yo fui a preparar mi ropa para darme un baño después de Roberto.
Cuando Roberto salió del baño solo salió con la toalla alrededor de su cintura, entre al baño sin darle importancia a mi hermano y después Sali con una short deportivo y la toalla en la espalda, Roberto me vio desde donde estaba la sala, sin disimulo se empezó a tocar la verga de una forma descarada, lo ignore pues no estaba seguro de querer que algo pasara pero mi hermano tenía otros planes, entre a mi habitación y de repente entro Roberto pero ya no llevaba la toalla en la cintura, estaba por completo desnudo, me le quede viendo y antes de que pudiera decir algo se abalanzó sobre mí me empezó a besar en la boca y aunque al principio me resistí poco a poco fui cediendo a los besos de mi hermano, me empezó a desvestir quitándome todas la prendas hasta dejarme desnudo.
Luego cuando vio que me había dado por vencido y estaba a su total voluntad, bajo sus manos por mi espalda y comenzó a meterme uno de sus dedos me quise sacar pero su voz cálida me dijo al oído; tranquilo esta noche hare realidad mis fantasías, déjate llevar hermanito que vamos a disfrutar lo que por tanto tiempo hemos postergado, me deje llevar pues no tenía nada que perder o que ocultar, deje que mi hermano recorriera mi cuerpo con sus caricias y besos y hurgara con sus dedos en mi culo, solo me deje llevar sentir el placer que me daba con cada caricia y beso, luego me inclino y metió su cara entre mis nalgas, me estaba mamando el culo yo estaba tan concentrado que estaba por venirme y le avise a mi hermano pero este no paro de mamarme el culo, morder mis nalgas y metía sus dedos, jugaba con su lengua en mi ano fue tanta la excitación que termine eyaculando antes de que siquiera me tocara mi verga.
Me quise separar al haber eyaculado pero mi hermano me detuvo y me tumbo en la cama, dejo sus dedos dentro de mi culo, al principio me sentía incomodo ya que yo ya había terminado, pero el decidido dejar sus dedos en mi culo, poco a poco empezó a mover sus dedos y yo aun no sentía deseo de tener sexo, después con su lengua empezó a jugarla en mi culo poco a poco las ganas de tener sexo volvieron, mi hermano se levantó puso su verga a la altura de mi cara, me pidió que se la mamara, cuando tuve frente a mí la verga de mi hermano, la metí a mi boca se la estaba mamando y el seguía jugando sus dedos en mi culo, pronto estaba mi culo dilatado y de repente mi hermano me paro para ponerme boca arriba sobre la cama, se colocó justo frente a mí apunto su gruesa y morena verga en mi culo, empujo despacio a su verga fue entrando lentamente.
Roberto no paraba de suspirar y hacer gestos se mordía los labios y me decía: que rico estar así con mi verga entrando en ese culito que tanto había soñado tener y hoy es real, la fue metiendo hasta que la tenía por completo dentro de mí se acercó a mis labios me beso y de a poco se empezó a mover entrando y saliendo lentamente de mi culo sin dejar de besarme, fue poco apoco dándome lento al principio y después fue acelerando un poco, cuando estaba a punto de venirse cambiábamos de posición, pero antes de volverme a penetrar en la nueva posición, me daba unas mamadas de culo luego me pedía que le mamara la verga y después me la metía una vez más.
Los gemidos no eran silenciosos o no teníamos cuidado ser escuchados, nuestros gemidos estaban descontrolados yo empecé a gritar de placer en cada envestida que mi hermano me daba, solo me callaba cuando nos besábamos, luego mi hermano me coloco de rodillas al borde de la cama y apuntaba su verga en mi culo bien dilatado su verga entraba sin ningún problema me la metía toda de un solo empujón y la volvía a sacar por completo, en ese momento le pedí que me diera con todo lo que tenía, mi hermano me la ensarto una vez más y me dio fuerte un par de minutos, después me coloco sobre el borde de la cama boca arriba, tomo mis dos pies con una sola de sus manos y con la otra apunto su verga en mi culo me la metió de un solo empujón, grite de placer al sentir como mi hermano me la estaba metiendo.
Cuando tenía dentro de mí la verga de mi hermano, tomo mis pies en lo alto sujetándolos juntos con sus dos manos y empezó a moverse más rápido en cada movimiento acelerado y me fue dando, rápido fuerte que sentía que me ropería todo el culo, comencé a gritar una mescla entre placer y dolor, pero Roberto no se detuvo en unos minutos me dijo que estaba a punto de venirse, acelero aún más yo no paraba de gritar y la verga de mi hermano empezó a ponerse más dura y luego lleno mi recto de semen, bajo la intensidad de sus embestidas poco a poco fue aflojando mis pies y me dio unas cuantas envestidas antes de sacarme su verga del culo, se derrumbó sobre la cama con su verga ya flácida y respiro profundo, me puse de pie fui al baño a limpiarme y vi que mi hermano me había hecho sangrar de lo fuerte que me dio, cuando regrese Roberto estaba desnudo y dormido en mi cama, no me quedo más remedio que dormir y esperar al día siguiente.
Al día siguiente Roberto me despertó con besos y caricias y esperando que una vez más tuviéramos sexo, pero le dije que aún estaba cansado y adolorido así que solo se acercó a mí con su verga dura la metió en mi boca se la mame durante varios minutos y después me lleno la garganta de leche, después de haber desayunado los dos, se despidió de mí y se regresó al pueblo, me quede con unas punzadas tremendas durante todo ese día por la metida de verga que me dio mi hermano Roberto, al final no me sentí tan mal ya que mi padre me pidió que continuara con mi vida que lo que paso entre nosotros se tenía que olvidar, pero valla que eso no se olvida.