Asuntos de familia (2)

La relacion entre miembros de una familia en sus vacaciones en la casa de campo familiar.

Alex, nos condujo por un camino distinto de donde habitualmente se llega al río, íbamos por un camino lleno de tarajes que no nos dejaban ver el paisaje, después de conducir durante unos diez minutos llegamos a un lugar donde una arboleda servía de refugio contra el sol del coche, bajamos y caminamos un rato por un terraplén llegando a una ribera del río que era un vergel, aquí no dijo Alex bien conocedor del terreno, no tendríamos privacidad alguna, sigamos un poco mas adelante.

Tras caminar unos metros llegamos a un lugar donde unas rocas hacían la ves de un pequeño peñón y por detrás de este nos metió llegando a un patio pequeño donde el remanso del río se convertía en una piscina natural rodeado de lascas de piedra, junto a estos varios chopos daban sombra y se podía decir que se gozaba de bastante intimidad en aquel lugar nuevo para mi.

Este lugar es una maravilla, ¿Alex como lo has descubierto? Dijo tío Carlos.

Pues uno que es curioso y explora, esto está dentro de la finca y poca gente por no decir nadie tiene acceso.

Cómo habrás llegado tú hasta aquí, dije yo de manera socarrona.

No creo que venga al caso contarlo ahora, primito, mejor lo dejamos en la caja de los misterios.

Nos desnudamos junto al peñón, se estaba mas resguardados del sol, quedamos totalmente en bolas los tres, no se podía decir que tuviéramos mal cuerpo ninguno, todo lo contrario, seria de familia, pero manteníamos excelentes figuras bastante apetecibles.

Alex fue el primero en entrar al agua, le seguimos a la vez el tío y yo, el agua estaba a una temperatura muy apetecible y allí comenzamos a nadar, explorando donde había más profundidad o si había alguna corriente que arrastrara.

Una vez hechos al lugar Alex el mas nervioso de los tres, jugueteaba con nosotros, sí restregaba su ardiente cuerpo contra los nuestros, no dimos ahogadillas, forcejeamos y hicimos los juegos propios de niños, pero nos divertimos muchísimo en aquel primer baño en aquel idílico paraje.

Salimos del agua la temperatura era excelente, Alex nos dijo que siguiésemos así como estábamos, nos acercamos mas a las piedras que formaban ese peñón y vimos como entre ellas se abría un estrecho paso que daba acceso al interior de ese cúmulo de rocas allí cimentadas, anduvimos por ese oscuro pasadizo unos pocos metros y este nos condujo a una especie de sala semi circular que se había quedado en el centro después de los desprendimientos de rocas que conformaron aquel peñón fortuito.

El suelo del lugar tenia una alfombra de hierba frondosa pero no muy crecida debido a la falta de exposición al sol de manera continua, la luz era buena pero tamizada por las ramas de árboles nacidos de entre las rocas, pero la visibilidad era perfecta, el espacio estaba limpio, exento de humedad y de animales, por lo que podía decirse que era un lugar apetecible para lo que los tres estábamos deseando hacer.

Pues aquí tenéis nuestra suite, dijo Alex, es bastante complicado que nadie nos descubra en nuestro picadero, si queríais discreción, pues ya está.

Perfecto Alex, me encanta este sitio, tiene algo de misterio y curiosidad, esta francamente bien.

Yo añadí, creo que este sitio debe ser guarida de mas gente, pero bueno, tampoco creo que vengan a molestar ahora, además si vienen podemos darles algo que les puede gustar, ¿no chicos?

Reímos los tres y comenzamos nuestros juegos preparatorios para lo que se intuía iba a ser una buena sesión de sexo entre tres hombres jóvenes de la misma familia que sabían perfectamente que es lo que le gustaba.

Alejandro fue el responsable de romper el hielo y sin reparo comenzó a pajear al tío para que se le fuera poniendo dura la polla, al mismo tiempo, comenzó a darle mordisquitos en el cuello y le fue bajando a lamer y morder sus pezones que tenían una pinta excitante.

Mientras tanto, yo comencé a darle una buena lamida de nabo a mí primo que tenia un carajo precioso de buen tamaño y grosor, su capullo blandía como bandera al viento manifestando su poderío y yo, no anduve rezagado me lo metí en la boca y lo unté bien con mi saliva.

Pasado un rato de mamarle a Alex, el tío se había tumbado en el suelo y mientras mi primo lo embadurnaba entero con su saliva el, me dedicaba un cúmulo de caricias y lamidas por mis partes bajas, mojaba mis cojones, mi hoyo anal y pasaba la lengua por mi polla que estaba contentísima de tanto cariño familiar como le prodigaban.

Así estuvimos un buen rato, ya los tres completamente excitados mostrábamos una respiración mas acelerada y gemíamos del gusto que sentíamos provocados por tanta caricia como nos prodigábamos los tres familiares.

Carlos el tío, me atrajo hacia el, quería probar mi culito desde el mediodía pero el primo se había adelantado anteriormente, el ahora me colocaba en posición por la cual me iba a encular con su verga y yo podía a la vez seguir chupandole a Ales todo los que me diese la gana.

Una vez con el estoque del tío dentro de mi, este comenzó a clavármela rítmicamente provocándome unos espasmos dignos de una película porno, menudo cabrón, no sabe nadie como folla el hijo de puta, como taladraba con esa maravillosa herramienta que posee, te vuelve loco de gusto.

Ales de camino es estaba llevando una espectacular mamada y no contento con ello me puso su culito ante los labios y le di una comidita de ano, propia de hora en la que nos encontrábamos, justa para merendar tan rosadito y rico manjar.

Aquella follada merecía un gran orgasmo y no tardó en venirme, tenía los pelos de la espalda erizados, ese gusto que te corre por la columna vertebral y termina haciéndote correr de manera incontrolada.

Alejandro sintiendo mí venida por los sonidos que soltaba se llevó mi polla a su boca y le largué unos buenos trallazos de lefa que le llegaron hasta la campanilla.

Al ver que me había corrido Carlos, sacó su nabo y sin mediar palabra atrincó a Alex y lo colocó en postura adecuada y le endiñó un trancazo llenándolo de carne, el chico gimió de puro dolor placentero pero en vez de iniciar la huida reculó evitando que aquel buen pollón se saliera de sus entrañas.

Yo me dedique a lamerlos a los dos indistintamente, me gustaba el sabor que desprendían las carnes de mi tío y mi primo y al poco los dos hombres comenzaros a soltar gruñidos furiosos que anunciaban una inminente corrida monumental.

Después de aquello, caímos abatidos al suelo y allí nos quedamos inmóviles por unos minutos hasta que recuperamos el resuello.

Salimos de aquel laberinto y nos lanzamos al agua de ese remanso del río, nadamos y nos quitamos los sudores y restos de semen, durante un buen rato mas nos quedamos tirados al sol encima de una piedra, hasta que llegó la hora de regresar a la casa.

Esa noche comimos con mucho apetito y yo al poco de terminar la cena, me excusé por cansancio y me retiré a mi cuarto, estaba cansado, el culito adolorido y tenia ganas de estar desnudo sobre la cama, dormí como un angelito toda la noche hasta el amanecer.

Al día siguiente volví a encontrarme con Alex mi primo y con tío Carlos en el desayuno, Carlos tenia planes de salir de la finca, había quedado con unos amigos para ir a comer a algún sitio que desconocía, Alex me dijo que estaría un rato por las cuadras viendo los caballos y después si quería podríamos ir al río un rato a darnos un baño, a lo cual respondí afirmativamente.

Durante ese tiempo me senté en el porche de la casa que a esas horas estaba fresco y tranquilo y me dediqué a la lectura de un libro, pude observar a lo lejos como Carlos se marchaba en su coche y Alex estaba hablando con uno de los empleados de la finca encargado de los caballos que mi abuelo criaba y domaba allí.

Se me hizo extraño la familiaridad con que se trataban y creí intuir en la distancia que el chico algo serio le debía andar contando o recriminando a Alejandro pues este le miraba y escuchaba seriamente. Continué con mi lectura y pasado un buen rato alguien posó su mano sobre mi hombro, era Alex que al mirarle, me lanzó una sonrisa picarona y me decía. Que primito, ¿te hace un bañito los dos juntitos?

Si claro primo, vamos al río con los demás ¿no? Cambiémonos y salimos, así tenemos mas tiempo antes de la comida.

Fuimos cada uno a su cuarto nos pusimos el traje de baño y toalla y salimos a la entrada principal de la casona para ir al río.

Alex apareció luciendo sus largas y velludas piernas, siempre con esa sonrisa picarona que le daba todo el atractivo y me miró diciendo. Creo que vamos a tener compañero de baño e hizo un gesto para mirara tras de él.

Tras de Alex venia en traje de baño nuestro primo Cristian, un chico de veinte años, deliciosamente guapo, rubio con los ojos azules y un cuerpo precioso para su edad.

¿Y donde va este? Dije yo asombrado por la aparición del chico.

Pues ya ves, se antojo de bañarse con sus primos y bueno me sentí débil y le dije que si. Pues vamos los tres al río, venga no nos demoremos mas, cogimos el coche y conducimos por los caminos de tierra que van en la dirección donde todos los demás bajan al baño, pregunté a Alex que era quien conducía que a donde nos dirigíamos y este mirándome me dijo, tu calla que Cris tiene su propio refugio que nos va a enseñar hoy, subimos por una escarpada carretera forestal y abajo íbamos dejando una vista muy pintoresca del río que cruzaba la finca de los abuelos. Llegamos a una explanada que hacia un claro en ese bosque de arbustos diversos que existían en aquel monte mediterráneo y bajamos del coche, en vez de caminar buscando la orilla del río que se veía mas abajo lo hicimos en sentido contrario, Cristian , caminaba delante guiándonos por la senda, hasta que llegamos a un bosquecillo de alcornoque y en el centro de este un picacho sobre salía por encima de los árboles, estábamos en un lugar opuesto donde el río y los demás miembros de la familia ahora se refrescaban antes del almuerzo.

Para mi sorpresa nuevamente descubría un paraje nuevo en esta magnifica finca de mi familia que era maravillosa, lugar de encuentro, donde desde niños hemos vivido momentos inolvidables.

En medio de aquel promontorio junto a un acebuche encontramos una poza de agua cristalina de un tamaño aceptable, dejamos nuestras cosas al resguardo del sol que a esa hora quemaba en todo su esplendor y nos desvestimos por completo sin ningún tipo de pudor por parte de Cristian que lucia un envidiable cuerpo atlético y le colgaba un goloso paquete entre sus vellos rubios.

No sabia cual eran las intenciones de Alex, ni tampoco los gustos del primito mas pequeño, pero nada mas de verlo se me estaba poniendo la polla morcillota, para risa de los dos chicos que comentaron, será salido este cabroncete, ya se está poniendo cachondo, hasta entonces no comprendí que Cristian conocía del tema y tenia entendimientos con Alex, para mi regocijo, porque el niño estaba bastante buenorro.

Nos metimos en las frías aguas de la poza, nada mas entrar mi polla se encogió tanto que ni me la sentía, una vez dentro ese frío gélido pasaba a ser muy agradable y es verdad que el agua estaba deliciosa.

El tamaño de la poza y menos con tres tíos dentro no permitían muchos alardes natatorios, el baño era de refresco y nada mas, calmar la temperatura que hacia y la que tenia nuestros jóvenes cuerpos ardientes de sexo y pasión. Tras un buen rato en remojo en aquella maravillosa agua salimos y nos colocamos no sin antes extender nuestras toallas en un lugar cubiertos de la solana junto a unos alcornoques.

Allí Cristian dejando claro que el era allí el mas deseado y el consentido del día quería probar el sabor de mi polla y sin remilgo comenzó a darme una imponente mamada en mi polla que estaba bastante trabajadora estos dos últimos días.

Alex se echó a la boca la polla del chico y le propinaba una buena lamida, que duró un buen rato , hasta que Cris decidió que ahora fuera yo quien le mamara a el y a la vez Alex le comiera su culito, cosa que le encantaba, pues nada, mamemos al niño que hoy por ser la primera vez lo vamos a dejar contento, así anduvimos poniéndolo como un burro un buen rato , hasta que nos pedía que le diéramos fuerte por el culo, lo tenia que le ardía de calentura y Alex se me adelantó hincándole su troncho durísimo de una sola estocada, joder que burro que eres , dije yo, a la ves que Alex le daba hierro al jovencito primo, yo me puse en sus delanteras y me enchufé su nabo en mi ojete, así hicimos un trencito muy divertido que duró el tiempo que los tres tardamos en venirnos sonoramente.

Reímos y jugamos sobre la hierba durante un rato, nos bañamos en esas gélidas aguas y decidimos que seria bueno volver al cortijo donde ya estarían a punto de llegar los demás para la comida.Quedamos que al día siguiente volveríamos a la poza y experimentaríamos nuevas posturas y juegos.

Ese día la mesa de comedor estaba mas llena de habitual, habían venido mas tíos a pasar el fin de semana y dos primas que trabajaban también venían a descansar de los bullicios de Madrid, el tío Carlos no estaba en la comida, se había excusado porque comía con amigos fuera. Alejandro me hizo señas de que no hiciera planes con nadie, después de la comida me diría que tenia pensado.

Tras tomar café en el salón con todos, nuevamente cada cual se fue retirando a sus aposentos para pasar el tedio de la tarde estival lo mas recogido posible dada el calor que hacia en Andalucía por esas fechas. Me fui a mi cuarto y al instante de haber iniciado mi desvestimenta sonó un repicar en la puerta que era diferente al que Alex me tenia acostumbrado. Abrí aun vestido y era mi madre que quería que esa tarde a la fresca le acompañase al pueblo a comprar unas cosas, le dije que si, lo haría encantado y se marchó, no había cerrado aun la puerta y ya tenia a Alex en mi cuarto metido.

Primito querido, tenemos un pequeño problema y es algo bastante serio que te voy a contar, te ruego seas cauto y no sueltes ni media delante del tío Carlos que sino me la cargo.

Nos tumbamos sobre la cama unos al lado del otro, yo por supuesto me había quitado toda la ropa y Alex antes que yo también estaba desnudo a mi lado restregando su polla contra mi costado.

A ver chiquitín, no seas melodramático, cuéntame y veremos que podemos hacer, pero no te sientas agobiado, ¿Qué hiciste?

Veras, resulta que Andrés el hijo del encargado de la finca, es muy coleguita mío desde que éramos niños, si, lo se, dije yo afirmando. Pues bien juntos descubrimos ese lugar donde estuvimos ayer hace ya mucho tiempo y había sido nuestro lugar secreto de encuentros, porque el y yo mantenemos relaciones desde hace varios años y hoy le he contado que estuvimos ayer allí con tío Carlos, se ha puesto hecho una fiera y por poco no me mata del cabreo que ha pillao el animal.

Le dije que para resarcirle de mi imprudencia te iba a llevar a ti hoy allí y podríamos follar juntos, el te tiene muchas ganas desde hace tiempo y no sabía como entrarte.

Pero tío, eres un gilipollas, por que me mezclas a mi en ese lío, ahora resulta que estaremos dos con él complicados en vez de tu solito, como se entere alguien mas nos van a montar un pollo del carajo Alex.

No te pongas así hombre, nadie tiene porque enterarse y segundo te va a encantar, el tío este tiene un cuerpazo y es una maquina follando.

Alex, no tío, lo siento pero no quiero meterme en líos, bastante que ayer nos hemos liado con nuestro tío y hoy con Cris, pero ahora con un empleado del abuelo ni de coña.

Además esta tarde le acabo de prometer a mi madre que la voy a acompañar al pueblo, entonces hoy es inviable.

Bueno, que se le va a hacer, veo que no estas por la labor, iré luego mas tarde y le diré a Andrés que tu tenias que salir y ya, ¿ok?

Si, ahora vamos a dormitar un poco anda, que eres un obseso y nada más que piensas en el sexo.

Alejandro se acurrucó junto a mi nos quedamos dormidos como dos tortolitos hasta que llamaron a la puerta y los dos dimos un brinco poniéndonos los bañadores, abrí la puerta, era mi madre avisándome que era la hora de salir, así que en cinco minutos me quería listo en la puerta principal de la casa.

Pasé el resto de la tarde con mi madre de compras por el pueblo mas cercano a la finca, era una población serrana con una incipiente industria de manufactura de materias primas y frutas como la fresa y hortalizas, se notaba que el nivel adquisitivo era bueno y por ello podíamos encontrar cosas que quizás en otro Pablito mas cercano era impensable, caminamos un buen rato con paquetes y terminamos tomando un refresco en una terraza de la plaza donde estaba el ayuntamiento, muchísima gente del pueblo se daba cita allí con la fresca para conversar y tras un rato ahí , regresamos a la casa ya casi anocheciendo.

Al haber mucha mas gente en la casa, la cena fue muy divertida incluso después de esta los abuelos permitieron que se pusiera música en el porche y tomamos una copa al fresquito de la sierra, el ambiente familiar era calido y muy divertido, jugueteamos con las primas de nuestra edad , gastábamos bromas e incluso alguno de los de mediana edad se lanzaron a bailar alguna canción de moda en aquel verano, así estuvimos hasta bien entrada la madrugada, el tío Carlos al ser el mas pequeño tenia mas afinidad con los sobrinos mayores que con sus propios hermanos y a veces estos lo trataban como si fuera un sobrino mas, cosa que a el no le disgustaba se aprovechaba de la coyuntura sacando partido de ambos status, hijo y nieto.

Cerca de las dos decidí irme a dormir, Carlos estaba conversando con mi hermana Patricia un año menos que yo y Alex estaba enfrascado en una discusión política con unos cuantos primos que en su calidad de universitarios se sabían la teoría de todas las revoluciones económicas del mundo.

Sin decir mucho que me marchaba comencé mi retirada, pero cuando ya estaba en el patio del cortijo mi tío Miguel me llamó, volví la cabeza y le respondí a su llamada, Miguel era un par de años mayor que Carlos, se había divorciado ese año de su mujer y había pasado por una guerra judicial agotadora para poder ver a sus hijos, pues su mujer había interpuesto demandas y historias varias que ya están resueltas favorablemente para los dos.

Dime tío, me llamabas, Hola sobrino, me preguntaba si no querrías tomarte una copa conmigo, me encantaría que me dijeras que si.

Bueno, porque te iba a decir que no, a ti menos, ya lo sabes.

Gracias, eres un encanto,

Miguel era un hombre de treinta y muchos años, con pinta de ser muchotas joven, tenia un atractivo especial que era su famosa timidez, pero gozaba de un bonit cuerpo y una mirada cautivadora de esos ojos verdosos que tenia.

Pues si te apetece podemos salir, aun siendo tarde podríamos dar una vuelta, necesito salir de este sitio, airearme.

Comprendí que Miguel estaba en un momento delicado y volqué todo mi cariño hacia el y accedí sin problemas a complacerle.

Nos montamos en su coche y salimos a la carretera, durante un buen rato condujo hasta llegar a un lugar desconocido para mi, pero que pintaba agradable, era una especie de venta de carretera pero muy bonito el lugar la casa era como una antigua chocha nueva con un bonito jardín donde había muchas mesas colocadas estratégicamente junto a árboles y plantas creando un ambiente intimista.

Nos sentamos en una de ella apartados de cualquier bullicio y al poco vino un hombre con unos modales bastante amanerados que saludó muy familiarmente a mi tío.

Hola Miguel, ¿Cómo estamos? Hacia tiempo que no venias a vernos, eh.

Hola Currito, este es mi sobrino Nicolás, hijo de mi hermano mayor, hemos venido a tomarnos una copita.

Encantado hijo, aquí estamos mi marido y yo para lo que necesites, ¿Qué vais a tomar?

Pedimos una copa cada uno y al instante Currito vino acompañado de su marido que se llamaba Toni y me presentó al hombre que era un chico mas joven que el, con cierta propensión a la obesidad pero con modales mas masculinos que Currito, nos sirvieron los whiskeys y ya nos quedamos los dos conversando.

Mi tío Miguel era un tipo muy agradable, de buena conversación cuando estaba en confianza y su filosofía de vida a mi me atraía muchísimo, se había divorciado por que la mujer con quien se casó jamás supo entenderlo y le estaba haciendo la vida imposible, obligándole a hacer algo para lo cual el no había nacido. Llevar una vida de sociedad, y apariencias la cual no había vivido en su casa, pues mis abuelos era gente sencilla y muy campechana a pesar de ser inmensamente ricos.

Hablamos un buen rato de todo pero sin entrar en tema preciso, Miguel no se atrevía a comentar conmigo lo que le estaba perturbando esos días a pesar de que conmigo por proximidad de edad tenia muchísima afinidad y confianza.

El ambiente en aquel lugar era peculiar había gente de todo tipo, hombres del campo que tomaban allí su copita, gentes que venían de la ciudad ocultando un plan o una parejita de hombres que a escondidas disfrutaban de una copa en un ambiente discreto y relajado.

Miguel conocía a Currito desde niño, era el mariquita del pueblo, en su juventud emigró a Alemania y se llevó con el a Toni y tras varios años de inmigración entre los teutones volvieron con su dinerito y compraron esa finquita construyendo allí su casa y su negocio que según mi tío les marchaba muy bien. Hacia poco con la aprobación de la ley de matrimonio entre homosexuales organizaron una boda de tronío (palabras de Currito) y los dos hombres llevaban ya casados más de un año.

Era bastante tarde, pero Miguel no hacia ningún tipo de manifestación de que nos íbamos a ir, decidí que podríamos tomar otra copa y tras preguntar a mi tío fui a la barra a pedirla a los dos propietarios del local, los cuales me respondieron coquetamente, no te molestes mi rey, ahorita mismo te las llevamos.

Efectivamente, en un santiamén teníamos dos nuevos whiskeys servidos en nuestra mesa, la verdad que eran de los más eficientes.

Miguel, dijo Currito a mi tío, este niño cuídalo muy bien, que puede venir una zorra y lo robe.

Yo reía a carcajadas y mi tío me secundaba, Esperarse un momento que va a venir una charanga muy divertida, ya veras como os gusta.

Gracias Curro, si esperaremos, mañana no tenemos prisas, así que nos dislocaremos un poco hoy.

Continuamos nuestra agradable charla, Miguel se estaba animando con el segundo copazo que nos estábamos tomando y he de reconocer que yo también me sentía mas desinhibido de lo que estaba al principio de llegar a aquel lugar tan especial.

Al rato comenzaron a sonar acordes de música muy graciosa, un grupo de hombres vestidos con camisas negras de lentejuelas y pantalón blanco tocaban sus instrumentos, era una charanga propia de pueblo, divertidísima, la gente comenzó a levantarse de sus mesas y comenzaban todos a bailar, unos juntos otros no, hombre s y mujeres bailaban al son de aquellas melodías tan populares. El ambiente era de lo más gracioso y pintoresco, algo que no podría contar en la ciudad donde vivo porque la gente no lo entendería.

A pesar de la hora tardía que era nadie hacia gesto de marcharse ni los dueños de cerrar el chiringuito, todo lo contrario hubo un momento que hasta Currito se puso una bata de cola flamenca y cantó una canción de una conocida tonadillera española, cosa propia de los mas mariquitas de pueblos. Tonisinsfrazar se marcó un paso doble español precioso y la gente enardecida aplaudía a rabiar a los dos artistas y la charanga que los acompañaba, la verdad que lo pasamos muy bien, eran las seis de la mañana y allí continuábamos los dos bailando y bebiendo como dos jovencillos, pasándola estupendamente. Decidimos que seria mejor llegar a la casa antes que se hiciera el día y nos pusimos en marcha, tío Miguel me pidió condujera yo el coche porque se sentía bastante mareado como para manejarlo y allá que nos fuimos y yo también llevaba dos copas de sobra, pero fuimos despacio y a esas horas apenas nos cruzamos con un coche de frente.

Llegamos al cortijo, dejamos el coche y entramos a la casa, Miguel daba algún que otro tropezón con las antiguas piedras del suelo y se agarró a mi como pudo, yo lo llevaba cogido de la cintura por lo que pudiera pasar y cuando iba a subir las escaleras para dejarle en su cuarto me dijo que le encantaría dormir conmigo, que no se sentía con ánimos de quedarse solo en ese cuarto tan grande que tenia en la casona.

Pues bien, vamos a mi cuarto, llegamos y tras cerrar la puerta, me dispuse a ayudarle a desvestirse, algún trabajo me costó porque el a la vez hacia intento de quitarme a mí los botones de mi camisa montando un lío fenomenal con los brazos de los dos.

Todo esto entre risa resultó de lo mas divertido y terminamos los dos quedándonos en calzoncillos en medio de ese enorme cuarto que tenia el privilegio de ocupar en la parte baja de la casa.

Nos tumbamos en la cama , el uno junto al otro y el tío se volvió hacia mi quedándose de costado, le imité y así estábamos frente a frente mirándonos a los ojos, nos entró un ataque de risa , parecíamos dos colegiales, pero llevábamos una borrachera de lo mas cachonda .

Oye sobrino ¿tu duermes en calzoncillos? No tío, jamás, pero como tu estabas aquí conmigo me ha dado corte quitármelos.

Joder tío, es incomodísimo dormir con estos boxers, has el favor de quitarme los míos ahora y te quedas tu también en bolas, vamos a estar mucho mas cómodos ¿no crees?

Pues si, la verdad que mas cómodos si que estaremos. Me levante a medias de la cama y tiré de los calzoncillos de mi tío con suavidad, dejando al aire sus zonas mas intimas que no eran nada despreciables.

Continuamos un rato mas en la postura anterior por la cual los dos podíamos mirarnos cara a cara y también podíamos desfrutar de la vista del cuerpo del otro, nuestras risas se hicieron nerviosas y ya las copas parecía que habían dejado de hacer tano efecto sobre nosotros.

Miguel se acercó a mi y amarrándome por la cintura con sus manos me atrajo hacia el, uniendo nuestros cuerpos, el aroma de mi tío era agradable a pesar de las copas que habíamos tomado esa noche, tuve el atrevimiento de darle un beso en su boca y el me respondió mordiendo mis labios y metiendo su lengua en mi boca, jugando con la mía como si fueran dos colegiales.

Miguel gastaba una importante polla, que ya estaba durísima de excitación, soltaba gran cantidad de flujos que mojaba mi tripa pero eso me ponía aun más cachondo. A pesar de nuestras copas de mas, comenzamos a frotarnos el uno contra el otro mientras nos comíamos las bocas, sabrosísimo plato el banquete que nos estábamos dando, de nuevo tío y sobrino en la cama practicando un delicioso sexo, si Alex se enterara de estos, me pegaría una buena paliza, pues muchas veces me ha comentado lo buenísimo que está el tío Miguel.

Comenzamos a lamernos el uno al otro el deseo de ambos era inmenso y de forma feroz íbamos atacándonos los dos sin piedad, hambrientos de saborearnos cada parte de nuestros cuerpos, a mi esa noche se me antojaba saborear el culito tan bonito que tenia mi tío y darle una buena follada, a costa de todo quería llevármelo al huerto y se el no se corría mientras que yo me lo jodo pues después me puede meter el su voluminosa herramienta.

Lo volví de espaldas en la cama y comencé a darle una buena lamida de culo, unté sus nalguitas con mi saliva y introduje mi lengua en su culito, Miguel gemía de placer, parecía que nunca había probado aquella clase de sexo que yo le estaba proporcionando en ese momento, una vez que lo tenia bien lubricado y dándole un poco de dedo para dilatarle comencé a meterle muy despacio mi rabo que el dolorido aceptaba dentro de sus entrañas, una vez lo tuve ensartado , lo coloque en posición de perrito y di rienda suelta a mi cabalgada durante hermosos minutos que corrieron como una bala hasta que me vacié dentro de sus tripas un denso y blanco lechazo que rebosaba por sus muslos.

Miguel continuaba cachondisimo, aun no se había corrido, le mordí su boca con pasión y le dije al oído, es tu turno chico, quiero que la coloques directamente en mi culito.

El tío me agarró de manera enérgica, me besó lamiéndome la cara como si de un perro se tratara, alzó mis piernas a sus hombros, escupió saliva en su mano que untó a su polla y me la clavó de una estocada en lo mas hondo de mi ser. Sin parar un instante me fue bombeando con tanta eficiencia que logró se me pusiera dura de nuevo y al instante sentí su caliente leche en mis adentros, una sensación maravillosa el sentir que un hombre de tu misma sangre se derrame dentro de tus entrañas. Al momento volví a correrme como jamás podía haber imaginado.

Quedamos los dos exhaustos sobre la cama, respirábamos cansinamente pero poco a poco, cogimos un sueño reparador que no nos abandonó hasta mediodía.

Buenos dias sobrinito lindo, dijo Miguel. Hola Miguel ¿como has dormido?

Oye tío eres un fiera tío, me lo he pasado de puta madre contigo, follas de maravilla, es un grato descubrimiento para mi.

Joder sobrino, no sabes la maravilla que eres en la cama, ahora si, te ruego guardes el secreto, así es mejor para los dos y podremos follas mas a gusto cada vez que nos plazca, a demás de salir a divertirnos como anoche que lo pasamos genial

Si tío, yo me reí muchísimo, fue una noche divertidísima. Espero repitamos muy pronto.

Nos dimos una ducha, el tío me pidió subiera a su cuarto y le trajera un pantalón corto y un polo así podría salir de mi cuarto sin dar muchas explicaciones.

Fuimos a desayunar y todos andaban ansiosos de donde nos habíamos metido la noche pasada que tan borrachos volvimos. Tío Miguel fue el encargado de dar explicaciones y fue bastante creíble su historia.

Pasé lo que restaba de mañana en el jardín junto a la piscina, los mas pequeños chapoteaban en el agua, mis abuelos hablaban con unos y otros mientras leían el periódico y llegaba la hora que sirvieran el aperitivo, yo me enfrasqué en la lectura de mi libro, pero controlaba los movimientos de cada uno en esa mañana no muy calurosa donde la armonía era la tónica de todos los que allí pasábamos unos días de descanso en familia, ya mañana debía regresar a mi trabajo ordinario lejos de mi tierra y de mis seres querido, pero francamente me sentía agotado de la intensidad con que había vivido esos dos días atrás de sexo, alcohol y baile.

Mis dos tíos amantes estaban allí cerca de mí, pero entre ellos no sabían de nuestros comunes juegos amatorios, Alex había ido a la poza con Cristian y de seguro que estaban echando un buen polvo, menudo es mi primito Alex que no pierde oportunidad de comerse una buena polla.

Sirvieron el aperitivo, me serví un refresco incapaz de beber ni una gota de alcohol después de las copas que tomamos en lo de Currito, conversábamos con total naturalidad de cosas cotidianas y así hasta que me fui a la piscina a darme un calido baño antes del almuerzo.

Carlos me siguió al agua y una vez dentro de la piscina me propuso nos viéramos después de comer, a lo cual no quise ser muy claro, pero la verdad, necesitaba un respiro sexual, tío estoy resacoso y creo que me va a venir muy bien dormir un rato, si quieres podemos luego vernos mas tarde y decidimos que nos apetece.

Bueno, resulta que ahora mi sobrino me trata con evasivas, tendré que recurrir a otros sobrinitos que de seguro sabrán satisfacerme mejor que tu.

Bueno, prueba a ver, dice el refranero que siempre hubo un roto para un descosido, así que como tienes donde pedir, ahonda y hallarás.

Filosófico te veo, dejémoslo estar, después os hablamos y vemos que podemos montar, creo que sabes mas cosas que yo y me gustaría me informaras.

No se de que me hablas, pero si, después concretamos la faena, un bañito en el río viene bien a todos.

Miguel no dejaba de observarnos desde su posición, estaba sentado junto a mi padre y desde allí veía como Carlos su hermano y yo conversábamos en un tono extraño, era amigable pero a la vez sentía que yo marcaba distancias, nada mas hice salir del agua el se levantó a servirse una copa de vino e hizo lo indecible para poder estar ami lado de forma fortuita, yo astuto me di cuenta de su jugada y le dije; Tranquilo tío, después te daré el parte de guerra aunque no tiene nada que ver contigo.

Gracias Nico eres un sol, he notado cierta tirantes en vuestra conversación en la piscina y me he alarmado, mi hermanito pequeño es muy largo él y no quiero tener ningún tipo de problemas por su culpa.

Ni te inmutes, no es asunto que vaya contigo Miguel, son cosas entre nosotros dos, solo eso, luego hablamos tranquilamente los dos, ¿te apetece?

Perfecto, después nos vemos.

Volvió a ocupar su sitio, yo fui a cambiarme de ropa para la comida y cuando volví la abuela ya levantaba a todos para que ocupáramos nuestros puestos para que sirviesen el almuerzo.

La comida se desarrollo de manera divertida, éramos muchísimos en la mesa, era sábado y todos habían venido a pasar el fin de semana, comíamos a la vez que alguno de los mas jóvenes contaban alguna anécdota, las chicas comentaban las bodas venideras y cosas así, después de laceré como era habitual en mi, me retiré de los primeros a mi cuarto y Alex no tardó en visitarme, hola primito me tienes que contar donde anduviste a noche, me han dicho que has venido esta mañana con un puntazo increíble.

Alex no creas nada de lo que te dicen, hazme caso, preocúpate de tus asuntos y te irá todo mejor.

How mi primo mas querido está hoy un poco borde, pero no me importa, se que el me quiere y tarde o temprano me contará sus andanzas.

Bien, si eso crees, espera sentado, pero ahora será mejor que te vayas quiero dormir y después veremos que pasa, ¿OK? Un beso cariñoso y te vas a tu cuarto ¿vale?

Bueno, veo que estas cansado, no te molesto, que sepa que he quedado con Andrés luego, iremos a nuestro rincón favorito, si te apuntas dímelo.

Nos dimos un beso superficial en los morros y salió del cuarto, cuando me disponía a quitarme los pantalones, otra vez sonó la puerta. Abrí y era Miguel.

Me gustaría dormir contigo la siesta, ¿puedo?

Miguel creo que no es buena idea, este cuarto parece un confesionario no eres el primero en venir ni el ultimo así que será mejor que te vayas a tu habitación porque a mi no vana dejarme tranquilo y no quiero que piensen cosas raras si ahora voy y desaparezco.

Está bien, dame un toque cuando te despiertes, nos besamos tiernamente y salió del cuarto.

Solo hizo salir y de nuevo mi puerta volvía a ser aporreada, al abrí me llevé una grata sorpresa porque el que estaba en el quicio de la puerta ni mas ni menos que Cris mi guapísimo primito rubio.

Hola Cris, pasa, no te quedes ahí,

Hola Nico, perdona que te moleste quizás he tenido una mala idea viniendo pero bueno, ya estoy aquí.

Cristian no seas bobo, ponte cómodo, no me molestas lo mas mínimo, así que relájate, me encanta que hayas venido a verme.

Yo cerré la puerta esperando que nadie mas viniese por esa tarde, me quité mis pantalones y la camisa y desnudo me tumbé en la cama, hice señales al chico para que me imitara y se tumbase a mi lado.

Cris sin pensarse dos veces la cosa, me imitó se quedó totalmente desnudo y vino a mi lado donde se tumbo de costado para poder mirarme mientras me hablaba.

Mi primo pequeño era un tío alto de metro ochenta y algo, su cuerpo era atlético y tenia un pelo rubio precioso que lo llevaba con cierta largura pero un corte muy agradable que le hacia hasta mas interesante si cabe.

Nico, tú eres mi primo mayor y quería hablar contigo que estos días le ando dando vueltas a la cabeza mogollón de cosas sobre mi identidad sexual.

Por un lado me da pánico aceptar que soy homosexual, me quiero engañar diciéndome que soy bisex, pero no, seria engañarme continuamente, se perfecto que soy gay.

Bueno, al menos llegas a una conclusión, tienes clara tu condición, ahora debes aceptarte como eres ¿no crees Cristian?

Ahí viene la cosa, es dificilísimo ¿no?

Pues si, chico, no creas que es comer con los dedos, es jodido y bueno no se logra en poco tiempo, es fruto de madurar y de ir asimilando tus sentimientos.

Nico además hay otra cosa, que me da palo decirte, pero quiero hacerlo.

Venga tío, desembucha aquí estamos en familia y todo queda entre nosotros.

Resulta que Alex me tiene todo el día de acá para allá yo no estoy muy puesto en sexo, mi experiencia es corta, la cosa es que a mi no me mola hacerlo con Alex, me quedo cortadísimo y no se como decirle que me deje en paz, al menos un tiempo que yo me aclare.

A mí con quien me gustaría echar un buen polvo y que fuera quien me desvirgara es contigo Nicolás.

Bueno, lo primero, Alex no tiene porque obligarte a nada, tu debes hablarle e imponer tu criterio y el debe respetar tu decisión.

Respecto a lo mío, Cris, si tienes claro lo que dices a mi encantado, estas como un tren y no tengo inconveniente en echar cuantos polvos quieras contigo, pero yo mañana me vuelvo a Madrid así que aquí va a ser complicado, porque este cuarto escomo un casino, todo el mundo se pasa por aquí a buscarme. Ja ja ja

El chico reía conmigo.

Si, cabrón estas muy solicitado, todo el mundo te quiere mucho. Pero bueno imagino que de aquí a mañana tendremos algún momentito para estar a solas ¿no?

No lo se Cris, antes que tu han venido tres personas al cuarto y se que van a volver y no quiero mezclarte en chismes familiares.

No me gustaría que nos atrincaran con la polla dura a los dos, aunque a mi es difícil que no se me ponga a tu lado.

Joder Nico, mira como la tengo yo ahora mismo. Y mirando para abajo vi que el chico tenia su pollon durísimo y mirándome directo a la cara.

Ja ja ja, será cabrón el tío, está cachondisimo, me encantas primito eres un tío guapísimo de físico y de forma de ser.

Le cogí su cara entre mis manos y lo besé tiernamente en los labios a lo cual el respondió mordiéndome ansiosamente la boca.

Nos unimos en un calido abrazo, mientras que nos besábamos ansiosamente, de nuevo estaba yo con la polla dura y no habían pasado cuatro horas y otra vez estaba liado ahora con mi primo pequeño.

Cris quiero ser sincero contigo, no me preguntes ahora me encuentro agotado y no puedo echar un polvo como es debido, si quieres correrte conmigo encantado, pero no soy capaz ahora de penetrarte si es lo que deseas.

No Nico, tranquilo, estoy súper bien así contigo, no necesito hacer nada en especial, como estamos así los dos juntos en bolas, besándonos y acariciándonos estoy perfecto.

Lo besé tiernamente, continué frotando mi cuerpo contra el del chico que se retorcía de gusto de sentirse pegado a mi cuerpo.

Estando en esa posición llamaron a la puerta, pegamos un salto de pánico que nos entró sabíamos que hacer, al fin respondí ¿Quién es?

Abre Nico soy Carlos.

No, no abras, no quiero que me encuentre aquí así tío, pues nos ha pillaos Cris, este viene a buscar rollo, con que te jodes y lo aguantas conmigo.

Abrí la puerta, Carlos nuestro tío sonrió al vernos los dos con los rabos tan evidentemente exaltados y dijo. En este cuarto siempre que vengo me llevo una sorpresita.

Yo respondí, esto más que un dormitorio parece la plaza del pueblo, todo el mundo se da un paseo por aquí.

Carlos saludo al sobrino revolviéndole el pelo y le dio un beso en los morros, así de entrada.

Cristian estaba cortadísimo, sonrojado después del beso de tío Carlos, este se quito los pantalones que traía y se echó en la cama llamándonos a nosotros que del susto aun no nos habíamos repuesto.

No puede ser, mi cuarto se había convertido en un picadero, todos los que venían querían tener sexo y ya no puedo mas.

Tío Carlos, me vas a perdonar, pero yo no tengo ganas de sexo ahora, nosotros estábamos muy tranquilitos en la cama acariciándonos, pero soy incapaz de ahora ponerme a follar, estoy cansado.

Bueno, si tú no quieres, seguro que a Cristian le apetece, ¿no sobrinito?

No tío, precisamente me había venido aquí a estar tranquilo con mi primo mayor, porque lo que no quiero es seguir teniendo sexo porque así.

Que chicos mas modositos, perfecto, si me dejáis ya que he venido, me gustaría quedarme aquí con vosotros, ¿os molesto?

Para nada tío, no eres nada molesto, solo te advertía que ahora estoy cansadísimo, no te estoy negando nada quizás luego en la noche, podamos pasarlo bien juntos.

Para calmar los ánimos, me acosté junto a tío Carlos y comencé a besarle tiernamente, llamé Cris y le indique que se colocara junto al tío y el chico me siguió la corriente.

Al rato entre los dos comenzamos a juguetear con el cuerpo de nuestro tío, besándolo y lamiéndolo por todos lado, los dos a la vez nos bajamos hasta su polla y juntos saboreamos su nabo prodigándonos en mamársela y a la vez nos comíamos nuestras bocas, hasta que Carlos comenzó a soltar chorreones de leche espesita que los dos a juego fuimos tragándonos glotonamente,

¡Cabrones! Menuda mamada me habéis dao tíos, que jodidos cabrones que sois los dos, nosotros nos besábamos robándonos la leche del tío y este se unió a esos besos glotones lamiéndonos los morros a los sobrinitos.

Dormimos juntitos por un rato, pero sobre las seis de la tarde pedí a mis dos amantes se marcharan, sabia que vendría gente y ya estaba cansado de visitas, sería mejor que nos fuéramos a la piscina, así que me puse el bañador y Salí con ellos marchándome al jardín donde me tumbé en una hamaca antes de darme un baño.

Me aseguré de tener siempre cerca de alguno de mis padres, tíos mayores o incluso a mis abuelos, no quería que me forzaran a mas sexo por ahora, realmente estaba saturado y deseaba pasar una ultima tarde noche de vacaciones en casa de los abuelos tranquila, quizás a la noche saliera con Miguel, me divierte muchísimo mi tío es una persona encantadora además de que esta bastante bueno.

Entre baños en la piscina y amenas charlas con la familia pasé la tarde en el jardín, no me moví de allá para nada, no vi ni a Alex ni a los tíos, Cris pasó mucho rato en agua bañándose conmigo y los demás primos, charlamos un rato, así hasta la hora de la cena que fui a darme una ducha y cambiarme de indumentaria.

Esa noche la cena era especial, dado que éramos muchos entre padres hijos, nietos, todos al fin y al cabo estábamos ese fin de semana visitando a los abuelos, la cena no sería servida, por ser sábado noche el personal de la casa gozaba de noche libre, solo dos mujeres mayores que llevaban toda la vida trabajando con los abuelos estaban encargadas de preparar la cena y ayudada por las mujeres de la familia esa noche la cena era mas informal pero a la vez mas divertida para todos.

Tras servirte lo que deseabas comer, podías sentarte bien en la mesa principal o en alguna de las mesas colocadas en diferentes lugares del jardín. Miguel me pidió le hiciera sitio pues quería sentarse conmigo, al final acabamos en una mesa próxima a la piscina y allí fue llegando todo el que quiso, pero Miguel se sentó junto a mi al igual que mi hermana mayor, estábamos charlando animadamente y tío Carlos se unió al grupo, mas tarde a mitad de la comida Alex al vernos tan divertidos vino a compartir nuestra fiesterita que no era otra cosa que mi hermana contaba unos chistes muy divertidos y Carlos hacia bromas con su hermano Miguel.

Cuando llegamos al postre, mi hermana decidió cambiar de mesa y nos quedamos solo los tíos, Alex y yo, Cris al vernos vino tímidamente preguntando si podía sentarse con nosotros.

La conversación estaba ya muy suelta dada las copas de tinto que habíamos tomado durante la cena tan animada nos habíamos tomado un par de botellas de rioja y ya Carlos había mandado a Cris a buscar unos whiskeys.

Reíamos ya por estupideces pero francamente lo estábamos pasando muy bien con una conversación de lo más inocente y simple.

Miguel me susurró al oído que si quería podíamos ir al bar de Currito a tomar una copa, al ser sábado seguro que estaría muy animado.

Tío creo que a estos no nos lo quitamos de encima ni con agua hirviendo, creo que estamos condenados a permanecer aquí, pero si me divertiría mucho bailar un rato en el bar de los chicos.

Carlos que no se le escapa una inmediatamente preguntó a su hermano que andábamos susurrando, a lo que Miguel respondió que podíamos ir a Casa currito a tomar una copa en el jardín.

Perfecto excelente idea dijo Carlos, yo asombrado miré a Miguel que me devolvió el gesto de resignación. Alex y Cris esperaban que alguien les explicara que era aquello de lo que hablaban, jamás habían oído hablar de ese sitio, esperad un poco ahora os explico, les dije a mis primos y llevándolos a un lugar apartado les expliqué de que se trataba el asunto, los dos sonrieron y guardaron silenciosos deseosos de una nueva diversión allí donde tan pocas había.

Tío Miguel inventó una historia por la cual todos complacidos nos dijeron adiós y nos marchamos en el coche del tío al jardín de Currito.

Cuando llegamos el aparcamiento tenía el triple de coches que la noche anterior, el jardín estaba lleno de gentes en sus mesas decoradas con velitas y además de Currito y Toni tres chicos mas servían las mesas.

Curro al vernos llegar, dejó lo que hacia y vino a saludarnos afectuosamente. Ay tengo aquí esta noche a la familia que viene a divertirse a mi humilde casa, Uy Carlitos hijo, que guapo está, mira que niños tan altos y tan guapos ¿sobrinos también?

Si Currito estos son sobrinos nuestros también este de mi hermana Cristina y este de mi hermano Juan. Los chicos saludaron muy cariñosos a Currito que al vernos a todos juntos estaba boqui abierto, mira os voy a sentar en esa mesa que me gusta a mi mucho, pero antes la voy a limpiar y le digo a mi Toni que venga a saludaros y ver estos niños tan preciosos que tenéis por sobrinos.

Nos reímos mucho con lo amable y sincero del trato que nos dispensaba Curro, los chicos preguntaban de donde había salido esta pareja singular y Miguel le explicó la historia.

Al momento vinieron los dos propietarios, presento a mis primos a Toni y a Carlos que lo conocía menos y nos sentaron en una mesa muy agradable junto a un lentisco enorme y con dos bonitas velas en la mesa, nos tomaron nota de lo que deseábamos tomar y al momento teníamos nuestras bebidas en la mesa.

Charlamos animadamente, los chicos estaban alucinados como estaba yo el día antes que en medio de la nada hubiera ese espacio tan sumamente distinto y donde conviviera gente de faunas tan dispares.

Pasado un buen rato un grupo de música distinto al de la noche anterior comenzaba su actuación tocando temas del pop mas puro de los ochenta y todos los que ocupaban las mesas se lanzaban a bailar en la improvisada pista delante de la orquesta.

Nosotros también anduvimos bailando, especialmente los tres primos hicimos nuestros pinitos en la pista incluso tuvimos nuestros galanes que se unieron al baile con nosotros queriendo ligar , Alex el mas lanzado de los tres coqueteaba con un chico alto y muy delgado que no le había quitado ojo desde que salimos a bailar, era un chico rubito de pelo rizado con pinta de ser hijo de un hombre de campo, el chico tenia una boca muy bonita con unos morritos respingones que le hacían muy morboso, se llamaba Paco y no dejó de coquetear con el primo, pasado un rato se fueron a la barra donde Alejandro le invitó a una copa.

Cris y yo volvimos a la mesa agotados de tanto baile en medio del campo, los dos tíos mantenían una charla muy amena por las posturas que tenían se les notaba relajados y entretenidos entre ellos. Cuando nosotros volvimos, preguntaron donde andaba Alex y le dijimos que había tenido una conquista y riendo estuvieron observado como era el chico con el que ligaba el conquistador de Alex.

Pasado unos momentos cesó la música y el siguiente show era el de una travesti que disfrazada como Lola Flores cantaba la famosa canción miedo, tengo miedo. Reímos mucho viendo la interpretación y tras esta salió otra que hacia de vedette de cabaret enseñando unas estupendas piernas para ser la de un hombre.

Y apara terminar vino la charanga del día anterior y ya volvió el jolgorio mas exuberante pues hasta las travestis y la pareja propietaria del local se lanzaron a la pista a bailar con todos sus clientes, fue un momento divertidísimo.

Alejandro había desaparecido del mapa, ya no estaba en la barra y por mucho que buscábamos no supimos donde andaba metido, eran ya las cinco y los tíos querían que nos marcháramos a casa, estábamos todos alegres de las copas y divertidísimos, pero eran horas de regresar.

Al poco Alex salió entre la oscuridad al fondo del jardín junto a Paco y una vez que nos vio se despidió de su nuevo amigo y vino junto a nosotros. Hola, que bien que lo estamos pasando ¿no? Dijo con una risa picarona.

Carlos le contesto divertido, sobre todo tu, vemos que te lo has pasado divinamente, Miguel lo miró tiernamente diciéndole, que, ¿has dejado descendencia por el lugar? No tío, como te crees, uno es juicioso y esas cosas se toman precauciones. Je je je.

Bueno niños vamos a casa, es tarde y estamos con copas, así que vayamos con cuidado.

Nos montamos en el coche no sin antes despedirnos de los dueños del bar que nos despidieron con toda clase de algarabía y besos rogándonos volviéramos pronto.

Alex nos contó por el camino con toda clase de detalles como era paco. Sus cualidades y sus medidas y que le había dado su teléfono para cuando quisiera llamarle, que quería volver a verlo porque le había sabido a poco lo que les dio tiempo de hacer allí en el fondo del jardín.

Cállate ya cabroncete, me estas poniendo cachondo, dijo tío Carlos que iba sentado junto a su hermano en el asiento delantero, detrás íbamos los tres mas jóvenes, escuchando la aventura de de Alex que mientras lo relataba no dejaba de acariciar a Cris y a mi con cada una de sus manos.

Tío Miguel mas prudente permanecía callado pero muerto de la risa por los disparates que contaba Alex y lo desinhibido que estábamos los cinco, además iba atento a la carretera porque no fuera ser que las copas le hicieran una mala pasada.

Bueno, chicos y ahora que mas, imagino que no tendréis ganas de iros a la cama , dijo el tío Carlos intentando buscar un poco de acción antes de dormir y de regresar a nuestras labores cotidianas al día siguiente.

Cristian que venia muy callado escuchando a todos dijo. Podíamos ir a la choza a tomar una copa y nos bañamos en el río, hay buena luna y ahí se ve perfecto.

Yo lo miré sorprendido por su atrevimiento y el me sonrió muy cariñoso, dándome un beso en los labios de complicidad.

¿Hay bebidas en la choza? Dijo el tío Miguel como admitiendo que le divertía la idea, bueno, hay algunas, lo que no hay es hielo, pero whiskey y coca colas seguro, ayer llevé yo.

La choza era la antigua piscina de la finca, donde antes nos bañábamos de pequeño, estaba alejada de la casa junto al río, allí ahora se reunían los primos que tenían edad de bailar y tomar copas y seguían usando esa piscina, pero con menos frecuencia porque el río hacia un remanso allí mismo y no era peligroso bañarse.

Bueno, iremos a la casa, entramos a la cocina y cogemos un poco de hielo y seguimos a la choza, ¿Qué os parece? Dijo el tío Miguel.

OK, yo me bajo por el hielo, dijo Alex voluntarioso, dijo el muy calentorro.

Después de recoger hielo en la casa principal subimos por el camino que nos llevaba hasta la casa, efectivamente hacia luna llena y el monte se veía con claridad.

El sitio estaba de lo mas tranquilo , solo el sonido que hacían los animales del monte en la noche nos vigilaba , entramos en la casa y encendimos las velas que los chicos tenían allí, había luces de gas pero los tíos dijeron seria mejor no encenderlas, además esa luz era mas agradable, la choza estaba decorada con varios camastros que tenían bonitas telas cubriéndolos a modo de sofás, una mesa y una pequeña cocina , un mueble donde había varias clases de bebidas, vajilla y demás cosas para tomas una copa que era lo que los chicos venían a hacer aquí.

Salimos fuera, varias tumbonas y butacas estaban por el porche, un gran camastro lleno de cojines servio para tumbarse en el frescor de la noche.

¿Alguien quiere bañarse en el río conmigo? Dijo Alex, no me vendría mal darme un refrescon, después de haber estado con Paco.

Bueno, dijo Cris si quieres te acompaño y me baño contigo, así me despejo de las copitas que hemos tomado.

Miguel se dedicó a servir copas para todos, mientras que Carlos se denudaba por completo, quedándose en bolas por allí en medio, esperando le diesen un whiskey.

Los dos primos se quitaron sus ropas y desnudos bajaron al río donde se dieron un baño, debido a la claridad de la noche se les veía perfectamente como nadaban, Carlos cambió de opinión y bajo a darse un baño, mientras Miguel y yo una vez nos servimos una copa nos tumbamos en ese gran camastro lleno de almohadones a escuchar música que habíamos puesto.

¿no te apetece desnudatarte Miguel?

Le dije a mi tío.

Bueno, no estaría mal estar aquí desnudos, al final cuando vengan estos revoltosos si no lo estamos, ellos nos va quitar la ropa.

Sin decirle nada, dejé la copa sobre la mesa, me coloqué sobre el pecho de mi tío y comencé a quitarle la camisa botón a botón. El en vez de quedarse quieto me iba acariciando mis tetillas metiendo sus manos por abajo del polo que llevaba puesto, jugueteando también con los vellos de mi pecho. Una vez le hube desabotonado la camisa le ayudé a sacarla, momento propio para darnos un tierno beso en la boca, después él me sacó el polo y ya los dos con los torsos al aire nos incorporamos quitándonos uno al el otro los pantalones y los boxers.

Nada mas nos hubimos quedado en bolas, volvían los tres bañistas de su remojon y para jugar con nosotros nos salpicaron con el agua y comenzamos una pequeña guerrita de todos contra todos, llena de sensualidad y morbo.

Cristian sugirió que porque no nos metíamos en la vieja piscina que a pesar de ello estaba en perfecto mantenimiento y su agua era del río pero tratada.

Preferimos por ahora darnos una ducha en una instalada junto a la piscina y eso si fuimos todos juntos rozándonos nuestros cuerpos , entrando todos en una excitación mayúscula de vermos allí enredados todos con todos.

Para elevar la morbosidad del asunto, Carlos el mas experimentado de todos, decidió comenzar probando el sabor de la polla de su hermano, se agachó y comenzó propinándole a Miguel su hermano una tierna mamada, lamiéndole poco a poco el glande y recorriendo con su lengua los huevos, besando todo la zona velluda que rodea a los órganos genitales, Miguel lo alzó y lo besó apasionadamente en la boca, era la primera vez que ambos hermanos se enrollaban de esa manera. Nosotros de verlos nos comenzamos a poner súper cachondos y Alejandro goloso como el que mas acariciaba a Cristian que se dejaba pero no sin mirarme a mi profundamente buscando mi atención.Yo le di un tierno beso al chico que alargaba sus brazos para acariciarme mientras nuestro primo le daba una buena mamada en su preciosa pija.

Carlos tomó las riendas de la orgia que se estaba montando y nos arrastró a todos hacia el camastro donde fuimos tumbándonos unos junto a otros, cada cual fue agarrando lo que más le apetecía del que tenía al lado.

Cristian no me quitaba ojo y tampoco se separaba de mí, yo lo agarré y separándolo un poco de los demás, le dije.

Cris, no tengas miedo de nada, disfruta de esto, es solo un juego con mucho morbo y debes disfrutarlo, si te sientes mal o te duele algo nadie quiere hacerte daño, lo dices y ya, tu disfruta ¿vale primito lindo?

Gracias Nico, eres un amor conmigo, te quiero mucho, la verdad que todo esto es muy morboso y divertido, procuraré pasarlo a tope.

Me besó con gula y nos volvimos hacia donde estaban los demás, Carlos y Miguel habían cogido gusto a lo de liarse con ellos, era la primera vez que ambos abiertamente tenían un mas allá de una simple masturbación que se hicieron cundo eran unos adolescentes.

Alex descubría que tío Miguel tenia un bonito cuerpo y estaba concentrado en lamerle sus bolas mientras que Carlos le daba una buena mamada, yo al ver la polla de Carlos que dura apuntaba al techo le dije a Cris que le diera alivio a aquel cacho de carne, mientras yo me dediqué a darle estimulo a los órganos genitales de Alejandro que gustoso abría sus piernas al ver que era yo quien le daba caricias en sus partes bajas.

Fuimos cambiando de posturas y posiciones, Miguel y Cristian no dejaban ambos de buscarme y hubo un momento que los tres estábamos enredados besándonos a trío y los dos me mamaban a mi la polla al alimón, pasaba el tiempo y desbocados como estábamos no nos dimos cuenta que se nos hizo de día allí en medio del campo. Seguíamos jugando con nuestros cuerpos de manera incansable, hasta que al sentir la amanecida, decidimos que debíamos pensar en una buena acabada.

Carlos quería que fuese Cris quien lo follara y Miguel buscó mis ojos para pedirme fuera yo quien le penetrara, para no violentar a Cris le dije, que yo le Daria gusto a el mientra se tiraba a tío Carlos y el chico aliviado fue jugando con el culito de este esperando que yo me acercara a él, estaba clarísimo, Alex debía poner el culito para que tío Carlos se la enchufara así fuimos ensalivándonos unos a otros los hoyitos anales, a excepción de Cris que yo no quise violentar ese día y me dedique a prodigarles besos y caricias mientras le ensarto su rabo al tío, después de una monumental follada nos fuimos corriendo unos tras de los otros, dejando que Cristian me soltara su lefa en mi boca, cosa que al chico le encantó viniendo a besarme junto a Miguel y juntos saboreamos el semen de Cristian.

Estábamos extenuados, eran las siete de la mañana pero ninguno quería marcharse de allí, estábamos súper bien allí juntos rebujados los cinco, los unos con los otros sobrinos y tíos.

Nos dimos un baño en la piscina, el agua azulada estaba a una temperatura exquisita y jugamos un buen rato como críos, pasándolo estupendamente allí juntos, agarrándonos, besándonos, peleando como guerreros.

Miguel había descubierto en su hermano Carlos un buen compañero de sexo y tenían pendiente una buena follada ellos dos solos, que dentro de poco podrían tener, Carlos también se marchaba como yo ese día y bueno, era un poco triste el tener que abandonar la casa familiar para volver a la rutina de la gran ciudad y nuestras labores profesionales.

Cristian anhelaba su reencuentro conmigo en Madrid, le prometí que cuando viniese para iniciar sus estudios pasaríamos juntos mas de una noche en mi casa y cumpliríamos nuestro deseo que ahora por premura no habíamos podido realizar.

Salimos de la piscina y aun durante un buen rato continuamos allí tumbados entre almohadones, hasta que el sol hizo acto de presencia y el hambre alertaba a nuestros estómagos que algo debíamos comer.

Nos vestimos, recogimos lo que habíamos usado y procuramos no dejar huellas de nuestras actividades sexuales, nos marchamos a casa donde nos prepararon un suculento desayuno que tomamos en la cocina.

Después del desayuno aun no queríamos separarnos y como mi cuarto era el mas escondido y discreto de todos, allí que nos fuimos a hacer la digestión en mi cama, que era un lugar muy solicitado estos días en la casa.

Estuvimos un raro mas de charla y caricias, nos fumamos un cigarrillo y todos decidieron ir a dormir un rato, Cristian dormía con dos hermanos mas en el mismo cuarto y seguro que andarían levantándose pronto, por ello me pidió quedarse conmigo y yo encantado le invité encantado a que el chico durmiera conmigo porque era amoroso.

Una vez que se fueron todos, nos desvestimos y procuramos que la habitación quedara lo más oscura posible cerramos bien persiana y cortinones y nos metimos en la cama.

Estábamos bien cansados pero nos apetecía estar juntitos como dos amantes.

Nos acurrucamos los dos bien juntitos y nos besamos, así nos dormimos hasta pasada unas horas que debíamos levantarnos para ir a comer a la piscina con toda la familia.

Sonó el despertador, nos recompusimos como pudimos, estábamos agotados de tanta fiesta que habimos tenido, pero eran las dos del mediodía y nos esperaban en la piscina todos, Cris me besó dándome los buenos días y se puso sus pantalones, salió del cuarto corriendo para ir a buscar su traje de baño, yo me puse el mío, me lave los dientes y la cara y salí camino del jardín por una puerta distinta que todos usan.

Todos los primos y tíos se congregaban en el porche y la piscina, yo debía tener malísima cara, porque todos me miraban sonriendo irónicamente.

¿Dónde anduviste Nicolás? Dijo me abuela que desde su sillón me observaba, eh, abuela estuvimos tomando unas copas y nos quedamos charlando hasta muy tarde.

Nos olvidamos de poner todos la misma excusa, así que preferí no ser preciso en la información que daba para no crear ningún tipo de violentas situaciones con mis tíos y primos.

Procuré zafarme de las preguntas de mi abuela , tirándome al agua, allí estaba mi adorado Cris ya metido hablando con sus hermanos y unas primas de su edad y al verme nadó hasta mi diciendo, joder tío, no veas la de preguntas que me han hecho,

¿Qué has respondido? Pues nada dije que habíamos estado por ahí tomando una copa y me he tirado al agua, estaba dormido y no podía pensar,

Pues me parece que debemos quedarnos en el agua hasta que aparezcan los tíos que ellos nos saquen las castañas del fuego, ja ja ja. Los dos reímos divertidos pícaramente.

Al poco rato apareció Alex con un careto increíble, se le veía hinchado de dormir y tras de el tío Miguel le decía, niño vete al agua y te espabilas, le dio un empujón y el chico calló a nuestro lado.

Joder tío, que violencia, ja ja ja, dijo Alex que parecía que andaba sonámbulo, tengo un sueño del copon primitos, creo que voy a morirme.

Tío Miguel al poco entró al agua y nadó hasta nosotros, buenos días perlitas, ¿como os ha sentado la siesta matutina?

Yo le respondí en nombre de todos, creo que mas mal que bien, ¿y tu? Perla del Cantábrico. Ja ja ja. Ahí viene la perla del mediterráneo, dijo riendo tío Miguel al ver aparecer a Carlos su hermano enfundado tras unas gafas de sol, viene que ni ve, dijo Alex.

Los cuatro reíamos desde al agua, llamándole para que se bañase con nosotros. ¿Que pasa hermanito? ¿Te pico un bicho en un ojo?

Carlos saludo a sus padres, y dejando las gafas vino al agua donde nosotros le hacíamos bromas, callad malditos, no tengo la cabeza para gritos, necesito un buen refrescón y una fuente de agua cristalina que llevarme al buche, estoy malísimo, no sabéis que mal me han sentado las copas.

Nadó un rato entre los sobrinos, jugueteo con los mas pequeños y dijo cosas bonitas a la chicas de la casa y volvió junto al grupo de las perlas como nos habíamos autodenominado entre bromas.

Estuvimos un rato flotando en las frescas aguas de la piscina y ya nos avisaron a todos para comer, acordamos el mensaje que debíamos dar de donde anduvimos y salimos a la comida.

Como la noche anterior el almuerzo por se domingo de verano se serviría en plan buffet y después de comer, sentado con los abuelos y mi padre, decidí descansar un poco antes de preparar la maleta e iniciar el regreso a la ciudad.

Dormí una profunda siesta, que ayudó a reparar el desvelo que tenía, Cris apareció nuevamente en mi cuarto y se acurrucó junto a mí, diciendo.

Nico, me da mucha pena que te vayas tío, contigo me lo paso genial y además me gusta dormir aquí juntitos los dos.

No seas bobo Cris, veras como vas a seguir pasándolo bien, dentro de poco volveremos a vernos en Madrid y lo pasaremos muy bien juntos, hasta entonces diviértete mucho aquí con Alex y los tíos.

¿Por qué no vienes algún fin de semana a vernos?

Tengo aún días de vacaciones, pero iré a Ibiza con amigos y otros días al norte a la playa, no creo que durante el verano venga más, pero si puedo vendré a verte, te lo prometo.

¿Por qué no me llevas a algún lado contigo? Me encantaría estar por ahí contigo, seguro que lo pasaríamos genial.

Cris, no líes las cosas, imagínate la que armarían nuestros padres si andamos los dos juntos en Ibiza por ejemplo.

Mejor dejemos las cosas como están. ¿Vale primito?

Vale Cris, tienes razón.

Una cosa si te doy, apúntate mi numero de teléfono y cuando quieras algo me llamas ¿vale? Me encantará hablar contigo y saber de ti

Gracias Nico, eres un encanto conmigo, apunto tu numero y tu has lo mismo con el mío.

Nos dormimos un poquito pero quería antes de irme tomar otro baño en la piscina y merendar con los abuelos y ya vestirme para ir al aeropuerto, mi padre nos iba a llevar a tío Carlos y a mi que volábamos juntos.

Ya habían acabado estas cortas pero intensas vacaciones de verano, inolvidables momentos que recordar y que me dejaban un sabor de boca especial y con ganas de volver pronto a la paz de la familia.