Asqueada pero intrigada
Una confesión de cómo descubrí lo que hacía un viejo con las ovejas
No estoy segura de si esto iba en voyerismo o en zoofilia, así que lo puse en esta categoría. Como pueden ver no soy escritora ni pienso serlo, solo quería confesar esta situación que me ocuriró hace unos años (si, es real, lo crean o no).
Fui criada por mis abuelos y crecí en la estancia de la que son dueños, no es grande y no da muchos beneficios pero se mantiene. Crecí rodeada de animales y trabajando de pequeña con ellos, así es como surgió mi deseo de estudiar veterinaria (lo que actualmente hago)
Bueno vamos a lo importante...
Ruben es uno de los trabajadores de la estancia, trabaja aquí desde que tengo memoria, es viejo pero no decrepito ha envejecido bien. Me enseñó a silbar, ordeñar las vacas y cómo cuidar los caballos, si técnicamente es como de la familia. Todo sucedió hace unos años, estaba paseando a caballo cuando a lo lejos vi a Ruben arreando unas ovejas hacia un galpón. En ese momento pensé " aún es pronto para encerrar las ovejas" pero lo dejé y seguí adelante. Avancé un par de metros y el caballo se movió incomodo, estaba cojeando así que desmonté y lo lleve con calma a los establos. Después me encaminé a buscar a Ruben, que supuse debía aún estar cerca del galpón de las ovejas, me pareció extraño que aún hubiera ovejas afuera si antes él las estaba metiendo al galpón así que entré sin mas a ver que hacía Ruben...
Al entrar lo primero que se me vino a la cabeza fue volver a salir antes de que me viera, ya que vi a Ruben desvistiendose, lo segundo que pensé fue " vaya que grande "... se había quitado la ropa interior y podía ver su miembro erecto en todo su esplendor, enseguida se giró para dejar su ropa en un rincón y en un apuro me oculté detras de una carretilla volteada que había junto a la entrada. Desde detrás de la carretilla me asome con curiosidad, ya se había girado y ahora noté con extrañeza que se acercaba a una oveja que había amarrado a un poste. Ruben silvó mientras se masturbaba...
"Te toca a ti" dijo y le dio unas palmaditas, haciendo que la oveja diera un balido.
Después, aún masturbandose se arrodilló tras ella, justo a la altura perfecta para penetrarla, lo cual hizo sin ninguna delicadeza. La oveja se retorció para safarse de la situación, pero Ruben la tomó con firmeza y se comenzó a mover con una energía tal que casi levantaba a la pobre oveja del suelo. Yo estaba tan impactada que no podía mas que respirar de manera entrecortada mientras miraba como ese viejo amable tomaba esa oveja como si él también fuese un animal. Cuando acabó, soltó a la oveja, la cual salió corriendo del galpón y, luego de vestirse, salió silbando. Mientras yo quedé tras la carretilla varios minutos, asqueada y asustada... asustada no de él, si no porque ver eso me habia exitado de tal manera que mi jean se humedeció y parecía que me había orinado encima.