Ardiente Persuasión

Esta madura mujer sera capaz de aceptar el esperma de su yerno en su vientre con tal de satisfacer sus deseos.

Ardiente Persuasión

"Oh Joel!, si así cojeme!"

Concha gimió y se movió en su cama con los gemidos que venían de la habitación contigua y que resonaban en sus oídos. El sonido de la cama chocando contra la pared acentuó los gritos de placer.

Concha escucho a su marido Jorge también moverse levemente en la cama y se pregunto si se encontraría también despierto. Mientras tanto su hija y su yerno continuaban con sus ruidosas relaciones sexuales.

"Oh si me estas cogiendo tan bien, oh si así!"

Concha siempre había sido bastante reservada en la cama, no podía creer las palabras que salían de la boca de su hija, por supuesto su hija había cambiado mucho desde que se había casado hacia siete meses, parecía que disfrutaba mucho su papel de ama de casa, teniendo que dejar su trabajo para dedicarse a atender a su marido Joel, capataz de una construcción que acababa de empezar a invertir en el pueblo.

Concha y su marido le habían ofrecido a su hija y su marido compartir su casa con ellos, mientras la que ellos habían comprado estaba lista para instalarse. En las primeras horas de llegada su hija le había confesado que estaba embarazada, pero por lo que Concha sabía, su hija nunca había estado interesada en los niños, pero ahora ella brillaba de alegría al saber que seria madre, esto convertiría a Concha en abuela a la edad de 50 años.

Joel su yerno es un hombre alto y corpulento de 27 años, con fuertes brazos y piernas, quien se encontraba también muy feliz de ser padre. Se jactaba de esto constantemente en la casa de cómo había persuadido a su mujer para que aceptara ser madre.

"Ella quiere sexo, pues le dije que si lo íbamos a hacer no usaría condón" Rió Joel mientras nos contaba.

"Joel por favor!" interrumpió Ana su esposa

"Que?," respondió Joel parando la protesta de su mujer, "Ve y tráeme una cerveza" De nuevo El se rió mientras le daba una pequeña nalgada a su esposa que caminaba hacia la cocina para traerle otra cerveza.

Concha no sabia con que estar mas enojada si con la vulgar conducta de su yerno o con la actitud servil de su hija, aun con toda la antipatía que sentía por su yerno, su hija parecía feliz.

"Ahhhh! Joel, sigue así eres fantástico, cogeme así fuerte así yo te adoro ahhh!" Gemía Ana.

Concha trato de cerrar sus ojos y dormir pero los sonidos llegaban fuertes hasta sus oídos. No sabia que le pasaba pero podía sentir como su maduro cuerpo respondía ante las morbosas palabras que gemía su hija.

Lentamente deslizo su mano hasta la parte baja del camisón y levanto su dobladillo, deslizando su mano hasta sus muslos, sus medias estaban mojadas y cuando acaricio con sus dedos a través del delgado material sobre su vagina, sintió una corriente eléctrica recorrer todo su cuerpo.

Repentinamente su marido se movió, poniendo una mano sobre el muslo superior de esta, acariciando su vagina, Concha gimió girando hacia su marido, extendió su mano hasta tocar su pene ya erecto dentro de su calzoncillo.

Parecía que el sonido de las relaciones sexuales de su hija también habían excitado a Jorge, con ansias Concha acaricio las 6 pulgadas de longitud del pene de su marido, escuchando como este gemía ante sus caricias.

Ella seso de acariciarlo y se giro boca arriba, levantando su camisón hasta la cintura, bajo completamente sus medias hasta los pies. Su marido extendió su mano buscando apresuradamente en la gaveta de su mesa de noche un condón, Jorge era muy conservador en cuanto a esto y siempre prefería protegerse aunque su mujer fuese madura había escuchado muchas historias de mujeres que aun a esas edad recibían noticias inesperadas sobre embarazos. Así que aun cuando se encontraba mas excitado siempre usaría condón.

Concha tomo el paquete y lo rompió con sus dientes mientras su marido se quitaba el calzoncillo, lentamente ella estiro la membrana plástica sobre el pene de su marido hasta asegurarlo apretadamente alrededor de la base.

"OH si sigue fuerte ahhh ahhh!"

Su hija gimió en el otro cuarto y como si fuera la voz de su esposa Jorge empujo su pene fuertemente en la vagina de su esposa, estaba mojada y su pene se deslizo fácilmente en el interior de esta, Jorge no podía contener su entusiasmo e inmediatamente empezó a penetrar a su mujer con fuerza, a pesar de los gemidos que escucha por parte de su hija, Concha no experimentaba las sensaciones que señalaban un orgasmo, le tomaba generalmente mucho tiempo y caricias para alcanzar su punto culminante e incluso pocas veces llegaba completamente al orgasmo, su marido sin embargo se notaba que estaba completamente excitado con los acontecimientos y bombeaba rápida y fuertemente en su vagina. Al ritmo que lo hacia Concha pensaba que su marido no podría resistir mucho tiempo mas.

Ella trato de tranquilizarlo un poco haciendo más lento su ritmo, pero su marido estaba demasiado excitado para seguirla, lo sentía tenso y sabia que El estaba próximo a terminar.

"Por favor Jorge, no acabes todavía!" suplico suavemente en el oído de su esposo.

Su suplica fue ahogada por el fuerte gemido de su hija en la habitación próxima.

"Ohhhh siiiiiii! Lléneme con su semen, lléneme amor, acabe dentro de mí ahhhh!"

Una vez mas, como su hija se lo pidiera a El, Jorge alcanzo su orgasmo gimiendo, aunque Concha no podía sentir el esperma de su marido disparando dentro de su vagina, ella sintió como el pene de este bombeaba desenfrenadamente su semen dentro del deposito en la punta del condón.

Agotado Jorge se separo de su esposa, desplomándose sobre la cama.

"Perdón amor" jadeo "pero no lo podía aguantar mas"

Concha suspiro, sintiéndose frustrada porque su marido no había podido satisfacerla, como pasaba desde hacia muchos años, pero ocultándolo sabiendo que si decía algo haría sentir mal a su marido, le hablo

"Estuvo bien amor, fue bueno de todos modos"

Jorge se inclino y le dio un beso en la mejilla.

"Te amo Concha"

"Te amo también"

El día siguiente era sábado, pero Jorge aun tenia que terminar algunos asuntos en la oficina, Ana también había salido temprano diciendo a su madre que una amiga le ayudaría con unas compras que necesitaba para la casa.

"Mas cervezas, me imagino!" Pensó Concha

Concha estaba un poco nerviosa sabiendo que estaba sola en su casa con su yerno, pero cuando se preparo para hacer los quehaceres, no lo veía por ningún lugar, se imagino que estaba todavía en la cama, reponiéndose del efecto de las cervezas que se había tomado la noche anterior. Así que se dispuso a limpiar la casa.

Concha limpio desde la cocina hasta el baño, cuando paso frente al cuarto de su hija lo miro abierto, cuidadosamente se cercioro de que su yerno no estuviera dentro. La habitación estaba vacía y Concha entro para quitar el polvo tratando de mantener sus ojos lejos de la cama donde sabia su hija y su yerno habían tenido una noche de lujuria el día anterior. La cama estaba completamente deshecha y las sabanas arrugadas.

Decidió acomodar la cama, retiro la primera sabana cuando escucho un ruido detrás de ella.

Asustada, Concha se giro para encontrar a su yerno Joel allí, vestido únicamente con un pequeño calzoncillo blanco de algodón.

"Buenos Días suegra!" Joel se mofo mirando de arriba abajo el maduro cuerpo de su suegra.

Concha llevaba una falda larga y una holgada blusa blanca de botones, como estaba en la casa, no se había molestado por ponerse sostén ni medias, pero de pronto sentía la mirada fija de su yerno sobre ella.

"OH Joel, no sabia que usted estaba aquí!"

"Estaba tomando una ducha" Respondió Joel señalando con su pulgar la puerta ahora abierta del baño de la habitación.

"Ah" era todo lo que Concha podía pensar y decir al mirar a su yerno casi desnudo, mientras empezó a caminar hacia la puerta para salir de la habitación.

Joel daba un paso delante de ella.

"Espero que su hija y yo no los despertáramos anoche"

Aturdida Concha dejo caer su plumero, mientras las fuertes manos de su yerno la sujetaban por la cintura.

"Joel!, Deténgase! Que esta haciendo?" grito Concha empujando sus manos con su pecho. Pero era como golpear un pedazo de granito, por la dureza de sus músculos, luchar contra su yerno era inútil.

"Que?" gruño Joel, empujando a la madura mujer mas cerca de El "No puede un hombre obtener un abrazo de su suegra?, Recuerde somos familia"

Joel acerco su cara y empezó a besar el cuello de su suegra, mientras movía sus manos hacia sus nalgas, lentamente El empujo su abdomen adelante presionando su calzoncillo contra el vientre de su suegra. Los ojos de Concha se ensancharon al sentir algo inmenso punzando contra su vientre. Joel se echo para atrás, sonriendo bajo con su mano el calzoncillo.

Concha jadeo al ver el inmenso pitón que apuntaba fijamente hacia arriba en la mano de su yerno, debía medir por lo menos 10 pulgadas de largo y era tan grueso como su muñeca, parecía hacerse mas grande mientras Joel lo acariciaba con su gruesa y fuerte mano.

"Le gusta señora?, esto es lo que hizo que su tierna y dulce hija se transformara en una mujerzuela anhelando verga, apuesto a que podría hacer lo mismo con usted"

Concha sacudió su cabeza como si estuviera en trance, incapaz de apartar la mirada de la enorme virilidad de su yerno.

"Por favor Joel, deténgase, yo nunca traicionaría a mi marido, mucho menos con usted"

"Se que piensa que usted es mejor que yo suegra, se que se cree muy por encima de mi, pero una vez que usted tenga mi verga dentro de su raja, veremos cuan digna y superior es usted en realidad".

Joel movió sus manos rápidamente, tomando su blusa la rasgo fuertemente, Concha grito al ver como los botones volaron por el cuarto, Joel gruño y empujando su cabeza adelante, metió los enormes senos de su suegra en la boca.

"Oh NO, Joel, deténgase..:!" suplicaba Concha, sintiendo como su cuerpo empezaba a responder involuntariamente ante las salvajes caricias de su yerno. Ella trato de empujar su cabeza lejos, pero Joel sujetando fuertemente una de sus manos, la forzó hacia abajo sobre su verga, haciendo que ella sujetara su dura verga, indicándole que la moviera arriba y abajo sobre su inmenso miembro.

Ella nunca había sentido un pene tan grande antes, ardiendo bajo su diminuta mano, inconsciente empezó a acariciarlo lentamente mientras su yerno continuaba mamando sus senos.

"Verdad que le gusta suegra, le gusta sentir mi enorme verga verdad?"

Concha se negó a contestar, pero no soltaba el hinchado miembro de su yerno. Joel se rió y la madura cara de su suegra se torno roja de vergüenza.

"Bien señora, si usted no quiere hablar, yo puedo encontrar algo mas que hacer con su boca"

Joel empujo fuertemente a Concha de rodillas, sabiendo que esta quedaría en frente de su inmensa verga, ella nunca había chupado un pene, pero cuando miro el masivo instrumento de su yerno, sintió su boca hacerse agua. Concha se dio cuenta repentinamente de que ella quería chupar ese pene. El pene de su yerno.

Instintivamente Concha abrió la boca, virgen hasta este momento, y empujo la gruesa cabeza púrpura de su yerno entre sus labios, su hambrienta boca era llenada con la abundancia de carne de la verga de Joel, lentamente ella metió pulgada a pulgada en su boca hasta sentirla tocar su garganta, abrió sus ojos, sorprendida al darse cuenta de que solamente tenia la mitad del miembro de su yerno en la boca.

"Creo que es mas de lo que puede tragar suegrita"

Rió Joel, sujetando la cabeza de su suegra con sus manos y comenzando a bombear cruelmente en su boca, cogiendose su boca como si fuese una segunda vagina. La boca de Concha estaba completamente llena con el grosor y longitud del miembro de este empujando dentro.

Concha advirtió que su vagina se mojaba también, su cuerpo había despertado ante las agresivas acciones de su yerno. Nunca se había sentido tan avergonzada, se encontraba dominada por otro hombre y lo que mas le apenaba era que ella sentía que anhelaba esa sensación. Gimió lastimosamente cuando Joel retiro su verga de su boca, acercando su cara trato de meterlo de nuevo en su boca, no queriendo renunciar a este. Joel miro de reojo como su madura suegra inclinada abofeteaba su mojada verga contra su cara.

"Se da cuenta suegra, usted es como cualquier otra mujerzuela, ven una verdadera verga y no se pueden mantener lejos de ella, pues bien suegrita hay mas para usted de donde esto vino"

Joel la tomo en sus manos y la levanto, tirandola sobre la cama donde El y su esposa habían cogido la noche anterior, Concha resignándose a su destino y anhelando más, miro silenciosamente como su yerno se quitaba completamente el calzoncillo y lo tiraba sobre ella.

Concha permaneció allí, impotente mientras su yerno se coloco entre sus piernas. Fue en ese momento que se dio cuenta que El estaba a punto de poseerla sin protegerse.

"Joel….por favor… no sin condón"

Joel froto la gorda cabeza de su verga contra la entrada de la empapada raja de su suegra, haciéndola gemir al sentirlo rozar su hinchado clítoris.

"Desea sentir mi verga suegra o no?"

"OH si Joel, lo deseo" suplico Concha, odiándose por dejarse llevar por su cuerpo.

"Entonces usted recibirá mi verga de la manera que se la ofrezco o de otro modo todo se detendrá en este momento"

Concha no lo podía creer, esta era su oportunidad de detener a su yerno, pero sabia que ella quería su verga dentro de su vagina, quería que Eel empujara su pene profundo dentro de ella. Colocada sobre la cama, lo sintió retroceder

"Joel no se vaya, cojame!, por favor cojame de la manera que usted quiera!"

"Y su marido suegra?"

Lagrimas de vergüenza llenaron los ojos de Concha cuando pensó en lo que le hacia a su marido, pero en este momento no podía detenerse, sabia que solo su yerno podría satisfacer la lujuria que sentía.

"No lo deseo a El, es su enorme pene el que deseo, por favor!"

Joel sonrió con su triunfo, empujo las piernas de su madura suegra hacia arriba, levantándolas hacia su pecho, la impotente raja de su suegra quedo expuesta completamente, Joel la azoto con su inmenso miembro. Su raja estaba tan mojada que su verga se deslizo completamente en el primer empuje, estirando las carnosas paredes de su vagina, hasta que sintió como sus gordas pelotas chocaban fuertemente contra la entrada de la raja.

Empujando su verga fuertemente en las profundidades de la raja de su suegra, Concha sentía como el enorme miembro de su yerno llegaba hasta lugares que nunca habían sido tocados, solo había tenido sexo con su marido, nunca hubiera imaginado que un pene tan grande pudiera hacerle sentir sensaciones tan maravillosas.

Joel empezó a bombear dentro de ella, sus pelotas chocaban rítmicamente contra la entrada de su raja, su verga traspasaba completamente la entrada de su indefensa matriz. Concha había dejado de ser la esposa fiel y recatada y en su lugar había sido transformada en una ardiente mujerzuela disfrutando de la enorme verga de su yerno.

"Oh Joel esto es maravilloso, nunca he sentido tanto placer, oh!

Joel la penetraba mas duro, con una fuerza y velocidad tremendas, se la estaba cogiendo como a una común puta.

"Mejor que la débil verga de su marido, suegra?"

"Oh si si mucho mejor ohhh!"

La traición de Concha ahora estaba completa, su maduro cuerpo se convulsiono, un intenso y masivo orgasmo embargo su cuerpo completamente, ella nunca había sentido tanto placer, gemía y jadeaba completamente extasiada.

Joel gozo al mirar a su madura suegra totalmente derrotada, su turno de acabar se acercaba.

"Oh si suegrita, ahora me toca a mi, voy a llenar su raja con mi abundante y espesa leche"

Concha miro lujuriosamente a su yerno, en el momento en que este se disponía a disparar toda su esperma dentro de su raja, dándole a este la oportunidad de realizar lo que su marido hacia mucho no había hecho. No había marcha atrás, solo le quedaba una cosa.

"Oh si si!, hágalo Joel, lléneme con su esperma, déme todo su semen, acabe dentro de mi ahhhh!"

Joel no pudo aguantarse mas, enterró su verga profundamente dentro de la raja de su suegra. Concha sentía como potentes chorros salían disparados de la verga de su yerno e iban a estrellarse en lo mas profundo de su vientre, sintiendo la ardiente semilla de su yerno llenando sus entrañas Concha volvió a alcanzar otro orgasmo.

Joel finalmente termino, apartándose se levanto de la cama y tomando su calzoncillo en la mano, giro y miro a su suegra sobre la cama, quien se encontraba completamente satisfecha con sus jugos y su esperma chorreando fuera de su raja.

"Levántese mujerzuela y limpie todo esto antes de que su hija vuelva!"

Joel dejo el cuarto, Concha permaneció un momento mas en la cama con lagrimas en sus ojos, luego se vistió y empezó a limpiar.

Joel y su esposa pronto tuvieron su casa terminada y pudieron mudarse a ella, aunque Joel seguía visitando periódicamente la casa de su suegra para cogersela, después de la primera vez le ordeno que deberían hacerlo en su dormitorio, en el cama donde dormían ella y su suegro, cogiendosela fuertemente hasta que Concha le suplicara que llenara su raja con su semen.

La sorpresa llego cuando Concha se dio cuenta de que a su edad tenia tres meses de embarazo, no se sintió avergonzada de su infidelidad, por el contrario, estaba orgullosa de que a pesar de su edad llevaba en su vientre un hijo de un hombre tan poderoso como Joel. Todavía adoraba a su esposo. Jorge se sorprendió mucho con la noticia.

"Como puede haber sucedido esto?, nosotros siempre utilizamos condones"

"Amor, no seas tonto" Concha rió, "Sabes que esas cosas no son 100% seguras!"

Jorge abrazo feliz a su esposa, mientras esta haciendo lo mismo, sonrió pensando en la sorpresa que daría a su yerno cuando se enterase que iba a tener un hijo suyo.

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