Aquella primera mañana (luego vendrían otras)

Hola soy un chico de 24 años y os voy a contar mi primera experiencia homosexual, que fue hace un año.

Todo pasó en la típica noche de borrachera, aunque no íbamos muy bebidos. Mi amigo Fran y yo habíamos salido con algunos amigos, ero ese día a la hora de ir a la discoteca nosotros decidimos no seguir a los demás porque estábamos algo cansados. La casa de Fran le pillaba lejos y le dije que se subiera a casa(de estudiante, aunque aquel día estaba yo solo) a descansar un rato. Yo por supuesto no llevaba ninguna intención, y él tampoco, simplemente le dije que subiese.

Una vez en casa y después de ir acomodarnos y tomarnos una copita mas, estuvimos viendo los típicos infocomerciales que ponen a altas horas de la madrugada y nos reíamos a carcajadas de los productos los personajes y las situaciones. Así estuvimos un buen rato charlando y riendo. Al rato recordé que Fran quería escuchar algunos discos míos de los que yo le había estado hablando. Así que nos fuimos a mi habitación.

Lo bueno de los pisos de estudiantes es que siempre hay una habitación de matrimonio con una buena cama, y en esta ocasión esa habitación era la mía. Total que le puse unos discos y él muy cansado se tumbó en la cama. Como la cama era amplia me tumbé al otro lado porque la verdad es que yo también estaba agotado. Entre la música, baja de volumen, y la única luz de una lamparita de la mesilla de noche, nos quedamos los dos dormidos.

Como digo habíamos bebido, y como todos alguna vez habréis comprobado, en esos momentos uno se duerme con mucha facilidad, y con la borrachera aun encima pues mejor. Pero en esas situaciones también te sueles despertar a media mañana, es cuando notas que aún el alcohol recorre tus venas pero que ya estás más recuperado. Aquella mañana el primero en despertarse fui yo.

Serían las diez de la mañana más o menos. Me desperté, y con media borrachera aun encima, noté que me había levantado con una erección considerable. Yo me excito mucho cuando me despierto después de una noche de copas,¿vosotros no? Siempre aparezco empalmado, y cuando estoy solo suelo hacerme una buena paja. Pero aquella mañana no fue así.

Miré a Fran que parecía que también se despertaba, y para asombro mío él se había quitado los pantalones para dormir, yo no me había fijado, y lo mejor de todo es que la vista se me fue hacia su paquete y vi que también se había levantado empalmado. Cuando me vio mirándole aquello empezamos a reírnos. Entonces empezamos a hablar del tema de hacerlo con tíos, somos buenos amigos y hablamos de ello sin tapujos y sin nada de vergüenza. Escuchándole hablar yo cada vez me excitaba más, y él sin duda también.

Entonces él decidió dar un paso más, se acercó un poco y me dijo.

-¿Probamos?

Empecé a reírme, lo pensé muy poco y le dije

-Venga

A partir de ahí todo fue increíble. Él me besó y yo le acaricie el pecho. Empezamos a besarnos cada vez con más fuerza, y nuestras lenguas se movían rápidas, nunca los dos habíamos hecho aquello, pero nos iba bastante bien. Él empezó a desabrocharme el pantalón y yo pasé a acariciarle su culito. Cada vez estábamos más acelerados, y yo estaba ansioso por meterle mano por debajo. Así que metí la mano y noté su polla dura, aquello me puso a mil, y como él lo notó hizo lo mismo y me la agarró.

Empezamos a masturbarnos mirándonos a los ojos, aquello me encantaba. Miré hacia abajo y vi nuestras manos en movimiento y vi aquellos glandes que sobresalían, cada vez me excitaba más. Entonces Fran empezó a disminuir e ritmo y me dijo:

-¿Nunca has tenido curiosidad por chuparle la polla a alguien?

-Sí, muchas veces, me la he meneado pensando en ello- hice una pausa y le dije –Quiero chapártela tío

-Venga!!Házmelo!!

Le quité la camiseta y los calzoncillos, y él hizo lo mismo conmigo, y rápidamente empecé a bajar por su pecho, poco a poco besando aquellos pezones, su ombligo su barriga...mmmm..hasta llegar a su polla. La cogí con la mano y la menee un poco , miré su glande y la descapullé. Ya no podía más, lamí el extremo y poco a poco me la metí en la boca. Cogí sus huevos y los acaricié al tiempo que lamía, mamaba, chupaba, sorbía. Él empezó a moverse lentamente, estaba muy excitado y paraba, eso me ponía mucho. Seguí chupando, la sacaba la meneaba, la volvía tragar. Lo había visto tantas veces en las pelis porno, y ahora lo hacía yo, y no lo hacía nada mal. Lo escuchaba gemir y creo que comentaba algo, pero yo estaba a lo mío. Cuando estaba algo cansado subí hasta él, le besé en la boca y le pregunté

-¿Te gusta como lo estoy haciendo?

-Síiiii, ¿seguro que no has hecho esto antes?

-No tío.......¿Sabes?

-¿Qué?

-Quiero que me la metas por detrás

-Tío como me pones

Con él tumbado en la cama me senté encima, y empecé a rozarme su glande contra mi culo para lubricarlo. Me metí dos dedos poco a poco, y luego agarré su polla, le puse un condón, y la llevé hasta mí. Un dolor muy intenso me recorrió, me quedé inmóvil, me dolía mucho. Empezamos a movernos y aquello entraba cada vez mejor, mi culo estaba cada vez más húmedo, y su polla encontró el camino hasta el fondo rápidamente. Me encantaba. Estaba en la gloria, ya no me dolía, y entraba y salía de mi con facilidad. Yo no dejaba de subir y bajar y él gemía de placer. Empezó a masturbarme.

Los gemidos empezaron a salir de los dos, él me la meneaba con fuerza, yo estaba a punto de reventar, y seguía metiéndomela por detrás, yo no dejaba de moverme, y ya no pude más.....Me corrí , me corrí como nunca, con su polla metida en mi culo, y fue la corrida más grande que jamás he tenido, mi culo parecía una fuente de placer y mi leche le llenó todo el pecho. Él cogió un poco con los dedos y los chupó y luego me los dio a probar a mi. Aquello me excitó muchísimo y empecé a gritarle "Fóllame cabrón, vamos no pares, fóllame, dame fuerte hijo de puta!!!". Aquello lo puso como un tren, salió de mi me puso a cuatro patas y empezó a follarme con fuerza. Yo gemía de dolor y de placer, y me empecé a empalmar de nuevo. Él no paraba, me follaba y me decía. "Como me pones cabrón, eres un cerdo vicioso, toma mi polla!!" Éramos dos posesos.

Yo ya la tenía de nuevo a tope, muy dura. Y noté que él ya no podía más. Saqué su polla de mi, me giré le quité el condón y me la metí en la boca. Estaba muy húmeda, llena de fluidos, a mi me encantaban me los tragaba todos. La chupé rápido, con fuerza, mientras le apretaba los huevos, él chillaba de placer, yo succionaba, lamía. Aflojé un poco el ritmo y me recreé en su glande, lentamente. "Quiero que te corrras en mi boca"-le dije. No le dejé hablar porque ya estaba otra vez chupando y él se derretía. Ya casi estaba, chupé un poco más y entonces note su leche en mi boca, jugosa, caliente, cremosa y amarga. Me la tragué un poco, y joder, me gustaba mucho. Seguí chupando, él se retorcía en la cama. Me guardé un poco de leche en la boca, ya no salía más leche. Entonces se la empecé a menear, me encanta menear pollas después de haberse corrido, y con la boca llena de su leche le besé y se la pasé. Se tragó un poco y el resto me lo echó en el pecho y me lamió.

Para esos entonces yo ya estaba a tope, y mientras él se recuperaba me la estuve meneando, él se metió un dedo en el culo, y me invitó a follarle. Fui hacia él y estando los dos tumbados se la metí, empecé lentamente y a medida que se lubricaba fui acelerando. Me encantaba tenerle, estar dentro, y agarrarle desde detrás. Mi polla queria rebentar, estaba follandomelo con fuerzas, el se giraba y me miraba la cara y me decia"no pares, sigue" "follame", yo seguia dándole fuerte, empujando. Entonces él me guió las manos hasta su polla que ya estaba dura y le masturbe con todas mis fuerzas. Disfrutaba mucho, lo veía gemir moverse y quería correrme, pero yo quería que experimentase lo que es correrse con una polla detrás, asi que segui meneando, hasta que noté que se desvanecía, me llené las manos de leche y le metí los dedos en la boca.

Con mis dedos en su boca y mi polla detrás lo puse a cuatro patas y le di fuerte, empuje hasta el fondo, una y otra vez, embestidas de placer, follándole a tope. Ya no pude más y me corrí dentro, no paré hasta estar bien vacío, y se la saque, me tumbé a su lado. Pero él quería más, y bajo hasta mi polla me quito él condón y me la comió tragándose toda la leche y luego ofreciéndomela a mi.

Fue el final de la fiesta, absolutamente increíble, irrepetible. Cuando luego nos duchamos y descansamos, comimos algo y estuvimos hablando de ello y llegamos a la conclusión de que había que repetirlo, y así lo hemos hecho otras veces.....pero ya os contaré como fueron estas.......