Aquel inolvidable silencioso ascensor (III)

Tras romper mí frágil prenda... esta cayo al suelo partido en dos, intentaba taparme con los brazos como pude... mientras le suplicaba “no por favor… No”.

Aquel inolvidable silencioso ascensor (III)

Buenos días ante todo aquí comienzo a narraros una nueva confesión tan caliente como yo, antes de hacérosla llegar os debo confesar que me ha costado mucho acabarla... más por qué no ha habido momento que no me haya acabado por masturbar... uuummm.

Bueno como suelo decir... aquí llega mí ultima confesión recién sacadita del horno (mmm... aun huelo el olor inconfundible de mis jugos), aun recordarla no puedo evitar llevar mis manos bajo mi falda e introducirla entre mis muslos... mmm, satisfacer la necesidad imperiosa de masturbarme... ooohhh, el sentir de como mis dedos rozan mis sensibles labios vaginales... por no decir dedear mi ardiente vulva... mmm, de arriba hacia abajo y luego en circulo... hasta hacerme estremecer y tener que cerrar mis muslos ante el tremendo orgasmo que voy sintiendo... aaahhh... ooohhh. Y mientras me estremezco... hasta a veces lloro del placer compaginando con los espasmos y mi respiración acelerada... ooohhh, no pierdo el sentido o la conciencia por pura fuerza de voluntad o porque Dios no quiere.

Como publique en mi anterior confesión “Aquel inolvidable silencioso ascensor”, os deje con la miel en los labios de lo que me pudiera ocurrir en ese ascensor… pero debéis de estar tranquilos, pues aquí os dejo lo concurrido por lo que os invito a que os pongáis cómodos o cómodas... mmm.

Mirad el miércoles tras despertarnos bajamos a desayunar y mientras pasaba con mi bandeja con mi desayuno hacia una de las mesas, pase al lado de la mesa de mis acosadores los cuales algunos de ellos tenía esposas, sentí algo de miedo al ver sus miradas lascivas... mmm (joder, os lo admito sentí escalofrió). Tanto su hermana como Ana su amiga me informaron de la mala cara que tenía... aconsejándome quedarme en mi habitación, cosa que rechace mas por no hacer ver a estos que me habían vencido y les dije... “que bajaría... que quizás fuera la tensión”.

Aun recuerdo como de las dos veces que levante la mirada hacia estos hombres... solo uno me miraba, no era otro que el bigotudo y que en la segunda vez me señalaba algo con su mano que no entendí hasta horas después, os digo horas después pues una de las chicas monitoras de apoyo que les acompañaba nos explico el lenguaje de signo. Como algo natural y por mi ignorancia le pedí que me explicara que significaba unos signos (obviamente se lo hice con las manos) que me fije que hacia uno de los hombres, esta amablemente me explico que el significado de esos gestos no eran otra cosa que una “cita”, me indico que los siguientes gestos que aunque me parecieran extraños eran el lugar y la hora... significando que eran la misma hora y en el mismo lugar. Mi novio y el resto de sus parientes rieron entre gesticulaciones y exclamaciones hacia como se iban a poner los viejos sordomudos, obviamente no tenían ni zorra idea a quien iba dirigido.

Aunque durante toda la mañana me tuvo pensativa sobre la cita... desde un principio me deje a mi misma que no iré, bueno sigo... tras desayunar regresamos nuevamente a la habitación a cambiarnos y coger las cosas para bajar a la playa, mi novio me sugirió que me pusiera el bikini blanco que el mismo me regalo de su último viaje a Venezuela (coño, para haceros una idea... era un bikini triangular blanco anudado al cuello y espalda y con braguita tipo tanga), me puse nuevamente un pareo y mis sandalias. Cuando nos pasamos por la habitación de mi cuñada a recogerla, tanto esta como su amiga propusieron a su hermano que bajara con sus hijos y que nosotras nos quedaríamos a hablar... entre risas denegué tal oferta.

Por lo que bajamos a la playa y tras quitarme el pareo... notamos como más de un hombre e incluso mujer fijaron sus miradas en mí, obviamente me gusta que me miren y aun más en la playa como a mí mirarlos, siendo sobre las 14:30 horas nos acercamos a un bar cercano donde tapeamos. Mi novio estaba dormido bajo la sombrilla... su hermana junto a uno de sus hijos, mientras los otros dos estaban dentro del agua con Ana su amiga. No me acuerdo bien el motivo por el cual decidid subir a mi habitación... pero creo que algo relacionado con el móvil (fui a buscar un re cargador de batería), tampoco mire la hora a pesar de avisar a mi cuñada y me encamine hacia el hotel, entre por la parte trasera una vez que eche a un lado la verja y me encamine hasta la explanada donde se encontraba el ascensor.

Aun me acuerdo que una vez llegue a la zona donde se encuentra el ascensor… no había nadie, pulse el botón y mire la hora... marcando mi reloj las 16:10 horas, se abrió las puertas y para sorpresa mía en su interior estaban esos cuatro hombres sordomudos del anterior día (joder, no creo que haga falta recordaros que eran parte del grupo de la tercera edad de Sordomudos de la ONCE que llegaron en la mañana del martes). Ni salieron y aun menos se inmutaron... por lo que decidida y tragando saliva entre, marque mi piso y espere que ellos marcaran los suyos... algo que hicieron en esta ocasión al marcar la sexta planta.

Una vez dentro el ascensor se puso en  marcha y como de costumbre iba a su ritmo... o sea bastante lento, note en no más de diez minutos como me palparon las nalgas... retirando la mano con rapidez. Nuevamente lo volvieron a hacer pero en esta ocasión en vez de pasarme la mano fue algo más descarado... me agarraron las nalgas, rápidamente con un manotazo la hice apartar pero este volvió a la carga... subiéndome en esta ocasión el pareo hacia arriba. Me gire y al tiempo que le pedía que me dejara en paz... le amenazaba al mismo tiempo que este tiraba de aun del pareo, otro de ellos se me puso a mi lado mientras un tercero alargando su brazo hasta rozar con sus dedos mi vientre.

Os juro que no supe que hacer pensé incluso en pulsar el botón de socorro del panel del ascensor... pero evitaron esta tentación (joder, como si hubieran adivinado mis intenciones), hasta que por fin me libre del primer acosador... huyendo hacia el lado opuesto del ascensor. Clave error por mi parte por que el hombre gordo y calvo me pego tal empujón que me lanzo hacia su amigo y este me detuvo en seco, me sujeto por mis brazos aprovechando el larguirucho para subirme nuevamente el pareo al mismo tiempo que otro manoseaba mis nalgas y el cuarto magreaba torpemente mis senos... mmm.

Evitaba como pude que me levantaran el pareo e incluso cuando me liberaba del que me sujetaba por mis brazos, apartaba sus sucias manos tanto de mis nalgas como de mis pechos… intentaba evitar lo inevitable, pues mi miedo se convirtió en pánico cuando el hombre de cabellos tan blanco como su bigote se me acerco y tras posar su mano sobre la tela del pareo tiro de mi frágil prenda… cayendo está a dos trozos al suelo. Intentaba taparme con los brazos como pude e incluso con mis manos... mientras le rogaba “no por favor… No”.

Uno de ellos me cogió por la cintura con sus manos fuertemente… oprimiéndome contra su cuerpo, forzándome a restregarme contra su entrepierna e involuntariamente se me escapo un gemido… mmm. Os debo de decir que no hubo vez que no alzara la mano a modo de poder llegar al botón de socorro del ascensor, pero me fue inútil pues ellos me lo impedían e incluso usando la fuerza… a manotazos.

Llegue a morder los dedos de uno de ellos cuando me los introdujo en la boca y emulaba que me penetraba… error por mi parte pues recibí una severa y dolorosa bofetada, las risas y carcajadas llenaron el pequeño habitáculo metálico cuando me bajaron las copas de mi diminuto bañador, mis pechos saltaron desnudos… cubriéndose rápidamente de manos extrañas, donde no tuvieron piedad ya que me magrearon con fuerza e incluso pellizcaron fuertemente mis pezones… aaahhh.

Sujetada fuertemente por el gordo por mis muñecas… obligada a sentir su duro miembro en mis nalgas, siendo mis pechos magreados salvajemente por un segundo al mismo tiempo que el larguirucho, comenzaba a restregar la palma de sus dedos por mi ingle… una vez tras otra. Siendo el canoso el primero en lanzarse hacia mis senos comenzando a besarlos y comérmelos con ansias… como si llevara años sin probar alguno, dedeaba mis pezones para continuar por mordisquearlos y endurecérmelos por mucho que deseaba evitarlos… mmm, uniéndose a los pocos minutos otro.

Por fin el gordo me separo de su cuerpo y teniéndome sujeta por las muñecas me puso en medio de todos, mientras uno se dedicaba a disfrutar de mis pechos… el canoso ataco ms nalgas, comenzando por darme un tremendo mordisco, palmeaba mis nalgas y continuar por pellizcar mis glúteos al tiempo que otro, me masturbaba y me hacia un dedo sobre la tela de mi inferior de mi biquini… mmm.

Obviamente se turnaban pues fue el larguirucho quién me sujeto de las muñecas a modo de el gordo saboree también mi cuerpo, agachándose y ayudar al canoso a devorar mis enrojecidas nalgas… durante un largo tiempo fue manoseada, magreada, masturbada por esos cuatro sordomudos… ooohhh. Hasta que finalmente me quitaron mi parte inferior del bikini… que vergüenza, mientras uno me sujetaba al tiempo que intentaba besarme… otro no dejaba de magrear mis pechos y pezones… al tiempo que los otros dos, se contentaban en penetrar con sus dedos mis orificios ya sea el vaginal como el anal… ooohhh.

Mis sollozos se mezclaban con mis gemidos involuntarios… pues aunque era un acoso el toda regla el morbo por el lugar era total, estábamos expuesto a que por alguna razón este ascensor se pusiera de nuevo en marcha o que se abriera la puerta y fueran descubiertos. Llegue a sentir por unos minutos como sus dos dedos iniciales se multiplicaron… mmm al igual que por mi orificio anal… ooohhh, poco a poco fui dejando de poner resistencia… pero aun así no me soltaron.

Me obligaron a arrodillarme ante uno de ellos… este bajo su bañador y saco de su interior una polla no muy erecta la verdad, pero aun así me negaba a satisfacer a este cabrón. Me restregaba su grande por mis labios e intentaba metérmela en la boca… cosa que no pudo, evidentemente sus amigos le ayudaron y mientras uno de ellos pellizcaba mis pezones… otros tomaba mi cabeza a modo de que pudiera tragármela y fue el cuarto, quien tras pellizcar mi nariz hizo que abriera la boca mas por faltarme el aire. Tras introducírmela apretó mi nuca a modo de que tuviera su miembro en su totalidad dentro, movían mi cabeza a modo de emular las embestidas… mientras el viejo sordomudo gemía y su rostro dibujaba su felicidad.

Tras sacármela me hicieron girarme hacia otro de ellos… el gordo asqueroso, el cual tras sacarse su miembro del bañador apareció ante mi un tremendo ejemplar… mmm, repitiendo la misma operación para tragármela… no sin antes haberme golpeada en repetidas veces mi rostro. Apenas me la pude tragar entera… siendo el muy bruto quien consiguió tragármela a la fuerza, sentí arcadas y ante la amenaza de vomito me la saco finalmente, haciéndome girar nuevamente y hacer disfrutar a otro de ellos… hasta finalizar por chupárselas a los cuatro.

Aun recuerdo que estaba chupándole la polla al larguirucho cuando me doy cuenta que se están arreglando… tras correrse el último me deja caer, ayudándome finalmente a recomponer mis ropas y avisarme mediante gestos de mí planta. Ignoro cómo pude llegar a mi habitación pero lo que recuerdo bien que hasta el jueves no salí… no tuve fuerzas o mejor valor, me duche y caí rendida en la cama… ni tan siquiera recuerdo cuando llego mi chico. El jueves tras despertarnos confesé a mi novio lo sucedido de la tarde anterior dentro del ascensor, mi novio no solo no se lo creía sino que le produje con mi confesión un empalme de cojones.

Durante el desayuno no pude mirar a mis violadores… los cuales si me miraban y me hacían gestos que no pude comprender, pensé en denunciarlos algo que adivinó que no lo hice pues aun seguían allí y no en la jefatura de policía. La verdad es que no supe que hacer a pesar del tremendo masaje que me dieron tanto mi cuñada como su compañera y que las miradas lujuriosa de su hijo mayor tanto a la compañera de su madre como a mí… mmm, hasta que finalmente se me ocurrió mi venganza para mi cuñada… aprovecharme de la inocencia y primera vez de su hijo… mmm (joder, se me hizo agua la boca… bueno y otra cosa con solo pensarlo).

Pero bueno eso quizás os lo deje para otra ocasión… bueno mis queridos lectores y lectoras hasta aquí llego mi confesión, esta ardiente sevillana debe de marcharse... pero si queréis saber más de mí, os invito a pasaros por mi blogs personal:

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Bueno queridos lectores… lo dicho, si alguno desea expresaros dejad vuestros comentarios os invito a que lo hagáis y porque no, haber si alguno desea calentarme... ya sabéis mi dirección y os responderé en cuanto pueda.

susanabix@hotmail.com