Aquel inolvidable silencioso ascensor (II)

Tras abrirse la puerta una señora entro, retrocediendo varios pasos hacia atras, hasta toparme con el cuerpo de uno de estos hombres... note algo duro chocar contra mis desnudos gluteos... mmm

Aquel inolvidable silencioso ascensor (II)

Buenos días ante todo aquí comienzo a narraros una nueva confesión tan caliente como yo, antes de hacérosla llegar os debo confesar que me ha costado mucho acabarla... más por qué no ha habido momento que no me haya acabado por masturbar... uuummm. Bueno como suelo decir... aquí llega mí ultima confesión recién sacadita del horno (mmm... aun huelo el olor inconfundible de mis jugos), aun recordarla no puedo evitar llevar mis manos bajo mi falda e introducirla entre mis muslos... mmm, satisfacer la necesidad imperiosa de masturbarme... ooohhh, el sentir de como mis dedos rozan mis sensibles labios vaginales... por no decir dedear mi ardiente vulva... mmm, de arriba hacia abajo y luego en circulo... hasta hacerme estremecer y tener que cerrar mis muslos ante el tremendo orgasmo que voy sintiendo... aaahhh... ooohhh. Y mientras me estremezco... hasta a veces lloro del placer compaginando con los espasmos y mi respiración acelerada... ooohhh, no pierdo el sentido o la conciencia por pura fuerza de voluntad o porque Dios no quiere.

Como publique en mi anterior confesión “Vacaciones al Sur de Andalucía”, tenía supuestamente unos planes pero mi novio me los cambio a última hora y la verdad es que el comienzo fue esperanzador, su propuesta fue irnos a la costa almeriense sin coste alguno con su hermana, hijos y amiga de esta... pero bueno todo eso ya lo sabéis y seguramente estaréis esperando que mas me ocurrió, por lo que os lo hare saber... por favor poneros cómodos o cómodas... mmm.

Aun recuerdo como en recepción estaba repleta de personas mayores... dándonos a entender que era ese esperado autobús de la tercera edad de la ONCE, descubriendo que tenía una particularidad que para nada era malo... pues nosotros creamos que iban a ser invidentes y nos encontramos que estos eran sordomudos, pero bueno lo que íbamos que no era otra cosa que continuar con mi confesión.

Nuestro segundo día en ese lugar tan parasitado del sur de Andalucía, donde llevábamos disfrutando no solo de ese estupendo tiempo a pesar de ser junio, sino de sus maravillosas playas y por qué no admitirlo de nuestra propia satisfacción, como hacía tiempo que no disfrutábamos... pero para que mentiros algo echaba de menos (joder, obviamente me faltaba algo de morbosidad).

Como ya mente anteriormente este hotel contaba con 5 ascensores, cuatro de ellos nos dejaban en recepción... siendo dos panorámicos y el quinto, nos conducía a la zona de acceso a la playa. El primer día que lo utilizamos nos fijamos en una placa informativa en la cual nos informaba... “solo se admite a 6 personas y máximo 450 kilos”, claro esta estábamos tranquilos y asombrados por dicha placa informativa pues creo que al menos yo era la primera vez que la veía.

Sigo, el martes tras desayunar volvimos a subir a la habitación a ponernos el bañador y para ese día me puse un bikini rojo tipo brasileño (joder, para haceros una idea era un bikini en color rojo, la parte inferior era de tipo tanga, con tiras elásticas y la parte superior era anudado al cuello, espalda y cadera... muy sexy y picante... mmm), un pareo y unas sandalias. Pero antes de bajar a la playa nos pasamos por la habitación de su hermana que como bien os he mentado está en la cuarta planta, , decidimos retirarnos temprano para poder descansar en la habitación y poder salir más tarde, dicha parada no tenía otro significado que dejarle tanto a su hermana como a su amiga sendos bikinis sexy para tomar el sol y como dicen ellas calentar algún que otro “macho”. Una vez que bajamos y nos encaminamos a la playa nos quedamos allí hasta las 16:00 horas más o menos, hora en que decidimos retirarnos y descansar un poco pues deseábamos salir un poco, recuerdo que cuando nos dirigimos a la zona trasera del hotel... zona donde se encontraba el ascensor al cual se accedía a la playa.

Nos dimos cuenta que delante de nosotros había un grupo de cuatro hombres sordo mudos (eran integrante del grupo de la tercera edad de Sordomudos de la ONCE que llego en la mañana del martes de algún lugar de Andalucía) que conversaban entre extraños sonidos y signos con sus manos, llegando estos antes de nosotros al ascensor y que no nos preocupo más ante la placa informativa de que debíamos de ser 6 personas las ocupantes. Pero tras entrar primero estos cuatro caballeros sordo mudos y luego mi novio y yo... quedando yo detrás, nos sorprendimos bastante al no moverse en ascensor y que este mostraba no solo de forma luminosa sino hasta sonora que habíamos sobrepasado el peso estimado (450 kilos) a pesar de ser 6 los ocupantes.

Aun recuerdo nuestras caras más al mirar hacia detrás de nosotros y ver las caras de estos cuatro hombres señalándonos a modo de hacernos entender que sobrábamos... o al menos uno de nosotros, fue mi propio novio quien se ofreció a abandonar el ascensor... mientras me calmaba haciéndome saber que no me preocupara y que subiera yo primero, al tiempo que bromeando me dijo... “mira por dónde no te vas a aburrir, pues vas a tener con quien hablar mientras subes... mostrándome una sonrisita maliciosa”. Tras cerrar mi novio la puerta del ascensor fueron estos quien me hizo un gesto a modo de que fuera yo quien pulsara el botón de mí planta... pulsando yo el 7. Me di cuenta que cuando el ascensor comenzó a elevarse ninguno de ellos había marcado botón alguno... mientras nos indicaba de forma sonora que habíamos sobrepasado el primer piso, el segundo y el tercero. Sentía las miradas penetrantes de estos hombres y mientras mi nerviosismo iba en aumento, más porque nunca había estado con hombres con esta deficiencia y aun mas encerrada en dicho lugar.

Note como estos no dejaban de hacerse señales mientras reían... os juraría que hasta entendían lo que se decían, pues un hombre sordo mudo es como cualquier hombre cuando tiene a una mujer delante, quizás aun más al tener a una jovencita con semejante bikini (coño, que a pesar del pareo se me debía de notar que debajo llevaba tanga) y solo cubierta con un pareo, creo que debieron de pensar que les había tocado la lotería. Mi respiración se hizo más delatadora de mi estado e incluso me sentí bastante acalorada, ya no solo por el mismo calor que desprendía mi cuerpo de las horas al sol... sino del calor que hacía en ese espacio tan pequeño.

Recuerdo que me sentí algo aliviada al detenerse el ascensor en la cuarta planta y que tras abrirse la puerta... una señora entro, retrocedí varios pasos hasta toparme con el cuerpo de uno de estos hombres (coño, note algo duro chocar contra mis nalgas desnudas... mmm). Nuevamente el ascensor hizo señal de sobre carga y la señora enrojecida salió del ascensor, tras cerrarse la puerta y continuar la subida... di un paso hacia delante... claro está para separarme de estos. Entre tanto silencio lo único que se escuchaba era mi respiración acelerada y el extraño murmullo de estos hombres, agregándose el ruido de su calzado al dar un paso hacia delante... lo justo para notar la entre pierna de uno de ellos toparse nuevamente contra mis glúteos duros y desnudos... mmm.

Continuaron avanzando y al mismo tiempo empujándome hasta toparme contra la puerta, proteste y de manera aireada contra estos... obviamente inútil mas al ser estos sordomudos. Aun recuerdo cuando tras sonar que habíamos pasado la quinta planta... intente hacerles comprender que se retiraran, pero obviamente lo mío no era hablar con las “manos” (joder, con lo bien que se me da hacer otros tipos de gestos), tuve el presagio que algo iba a pasar... notaba como esos cuatro hombres me estrujaban... mmm, estaba siendo acosada por estos cuatro hombres maduros sordomudos... mmm (joder, iba a ser un acoso muy silencio).

Sentía las manos de algunos de ellos rozar mis muslos... otros mis nalgas y aunque con rapidez las aparte, pero aprovechaban otros por acariciar mis pechos o mi vientre y nuevamente las apartabas e incluso mediante la fuerza... mmm. Ahora me viene a la memoria que uno de ellos en especial me asombro... pues no esperaba que este fuera también sordo, no me asombro por su físico (robusto a pesar de su edad, cabellos abundante y blanco como su bigote, marcando músculos) o forma de vestir (un bañador tipo bóxer negro y camisa blanca ajustada) sino por su descaro... pues coloco sus manos en mi cintura y me atrajo hacia el... mmm (Dios... que fuerza de voluntad).

Comenzó a mover sus fuertes brazos moviendo mi cuerpo a modo de restregarme contra su ingle... contra su hambrienta entre pierna... ooohhh (coño... que dura). No tenía ni idea lo que este decía... pero sus amigos reían, intente apartarme de él con mis manos al echar mis brazos hacia atrás... pero me fue imposible mas al aprovechar como uno de ellos, tomo mi mano para restregársela contra su entrepierna... mmm. Mientras los otros dos... mientras el gordo, calvo y asqueroso magreaba mis pechos e intentaba besarme, su compañero todo lo contrario físicamente... menos guapo comenzó a restregar la palma de su mano sobre mi entrepierna... ooohhh, haciéndome sentir lo caliente que me estaban poniendo... aaahhh.

Solo el sonido de haber pasado la sexta planta los calmo un poco... continuando con su labor, sintiendo el duro miembro y desnudo ya contra mis glúteos... ooohhh (joder, pensé que me violaría), el que tomo mi mano para poderse pajear... ignoro los motivos por lo que no aparte la mano. El gordo, calvo y lascivo maduro me estuvo llevando por el camino de la perdición mediante besos y lamidas por mi cuello... ooohhh, mientras magreaba mis ya desnudos pechos... aaahhh. Dejando por ultimo y no por ser menos a ese delgado maduro y muy grande en longitud, pero de aun más largos y delgados dedos... los cuales me penetraban después de haber apartado la tela de mi prenda... ooohhh.

Con rapidez me apartaron y se apartaron... tratándome como un trapo o como un peluche que ya no quieren al sonar mi planta, tras abrirse la puerta de la séptima planta muy cortésmente uno de ellos me indico mediante gestos que saliera. Salí y claro esta no dije palabra y ni tan siquiera me volví para verlos bien, solo camine hacia mi habitación... estaba como sonámbula o quizás hipnotizada, aunque la verdad era la primera vez que me había ocurrido algo así... como mucho en otras ocasiones, solo me han acariciado las nalgas o muslos... pero nunca habían llegado a este extremo. Aun que la verdad cuando subió mi chico por fin ni tan siquiera le mencione lo sucedido... tampoco pensé que esto podría ser obra suya, claro esta sería demasiado retorcido por no decir el poco tiempo que había para maquinarlo con estos, durante toda la tarde estuvimos juntos y obviamente follando como locos pues yo estaba como un tren... muy caliente.

Mi campeón me hizo alcanzar hasta cuatro orgasmo no solo con su hermosa y juguetona lengua... sino con esas hábiles manos, por no mentaros como me penetraba cada uno de mis orificios y no solo me refiero al vaginal... sino al anal y por supuesto oral, me baño en su leche e incluso cuando me penetro analmente no se le ocurrió otro sitio mejor que mirando por el balcón, cada una de sus embestidas me hizo gritar como una loca... creo que algún vecino me tuvo que oír a pesar de ser sordomudos, pues aunque sean sordos... creo que ciego no eran.

El miércoles tras despertarnos bajamos a desayunar y mientras pasaba con mi bandeja con mi desayuno hacia una de las mesas, pase al lado de la mesa de mis acosadores los cuales algunos de ellos tenía esposas, sentí algo de miedo al ver sus miradas lascivas... mmm (joder, os lo admito sentí escalofrió). Tanto su hermana como Ana su amiga me informaron de la mala cara que tenía... aconsejándome quedarme en mi habitación, cosa que rechace mas por no hacer ver a estos que me habían vencido y les dije... “que bajaría... que quizás fuera la tensión”.

Aun recuerdo como de las dos veces que levante la mirada hacia estos hombres... solo uno me miraba, no era otro que el bigotudo y que en la segunda vez me señalaba algo con su mano que no entendí hasta horas después, os digo horas después pues una de las chicas monitoras de apoyo que les acompañaba nos explico el lenguaje de signo. Como algo natural y por mi ignorancia le pedí que me explicara que significaba unos signos (obviamente se lo hice con las manos) que me fije que hacia uno de los hombres, esta amablemente me explico que el significado de esos gestos no eran otra cosa que una “cita”, me indico que los siguientes gestos que aunque me parecieran extraños eran el lugar y la hora... significando que eran la misma hora y en el mismo lugar. Mi novio y el resto de sus parientes rieron entre gesticulaciones y exclamaciones hacia como se iban a poner los viejos sordomudos, obviamente no tenían ni zorra idea a quien iba dirigido.

Aunque durante toda la mañana me tuvo pensativa sobre la cita... desde un principio me deje a mi misma que no iré, bueno sigo... pero creó que mejor os la dejo aquí y por no alargar aun más, continuare mi final en una nueva confesión… besis. Bueno mis queridos lectores y lectoras hasta aquí llego mi confesión, esta ardiente sevillana debe de marcharse... pero si queréis saber más de mí, os invito a pasaros por mi blogs personal:

http://susanabix-misconfidencias.blogspot.com.es/

Preguntarme aquellos que tenga la suerte de verme conectada por mí Skipe, e incluso si deseáis pasaros por mi Facebox:

https://www.facebook.com/Susanabix?ref=ts&fref=ts

O porque no por mi Twitter:

https://twitter.com/Susanabix

Bueno queridos lectores… lo dicho, si alguno desea expresaros dejad vuestros comentarios os invito a que lo hagáis y porque no, haber si alguno desea calentarme... ya sabéis mi dirección: susanabix@hotmail.com , yo os responderé.