Aprovechandome de mi madre (I)

Inicio de mis intentos de experimentar en mi madre algunas de las cosas que leo en esta página

Siempre he sido muy fan de esta página, he leido multitud de relatos en ella, imagino que el 99% de ellos con ninguna base real, sobre todo en las categorías que mas suelen alimentar mis fantasías, como son las de No consentido y la de Amor filial, precisamente las dos que más evocan a la imaginación porque son de las más improbables que le puedan suceder a una persona a lo largo de su vida...y sin embargo, una de ellas me ha sucedido a mi.

Durante años las fantasias que leía aquí alimentaban mis desempeños onanisticos, tanto cuando estaba soltero, como cuando despues he estado con pareja o desde hace un tiempo que me he casado, la frecuencia si ha variado y cuando al principio, de soltero, eran visitas diarías, despues con pareja y casado, cuando puedes hacer real algunas de las cosas que lees aquí, la frecuencia de ver que se habia publicado nuevo disminuia...Pero siempre, siempre volvia a limentar mi morbo con algunas lecturas que visitaban lo prohibido o lo inalcanzable.

Y no se si por estas lecturas, o por mi propia naturaleza, el morbo es algo que poco a poco ha ido ganando sitio en mi cabeza  cuando afronto las relaciones intimas; en un primer momento, esto es facil cuando todo es nuevo en tus relaciones, el primer beso, el primer pecho tocado, la primera paja, la primera mamada, la primera penetración, el primer anal, la primera corrida facial...pero cuando tu pareja se convierte en estable, y cuando de estable pasas a casarte, esa novedad desaparece, pero tu propio límite del morbo sigue subiendo, ahora quieres probar esto, ahora aquello, siempre un pasito más.

El problema es que en una relación de pareja, ese límite lo marca uno de los dos siempre, y si el otro lo tiene más alto...pues a joderse toca.

Ese era mi caso hasta hace un tiempo, por encima de la treintena, apenas hace unos años casado con mi novia de toda la vida, con apenas un par de rolletes antes que ella de los que lo más que salió fue alguna masturbación furtiva, con una mujer que me quiere un monton y a la que yo adoro, pero que en temas de sexualidad no la saques de sota, caballo y rey.

Y así me encontraba yo, follando y haciendo lo de siempre con mi mujer...y volviendo cada vez más a leer Todorelatos para calmar (o alimentar) mi sed de morbo. Pero cuando uno ya esta por encima de la treintena y como quien dice, con la vida hecha, no tiene los mismos tabues ni consideraciones morales que pueda tener a los 20...y lo que leia cada noche, alimentaba cada vez más mis ansias de ser yo el que protagonizase alguna de ellas.

Y así fue como leer a hermanos que se calzan a hermanas, hijos que se tiran a madres y demás juegos incestuosos hizo que un poco inconscientemente empezase a surgir el pensamiento de si yo podría hacer lo mismo, lo primero que uno evalua son las opciones, yo no tengo hermanas, y del sexo femenino con ligazón directa de sangre solo cuento con primas, dos tias (hermana de mi madre y hermana de mi padre) y mi madre.

Ese germen inicial fue poco a poco anidando en mi cabeza, y día a día tomaba mas forma en mis fantasías, seguía acostandome con mi mujer, pero tambien comenzaba a masturbarme pensando en alguna prima en bikini o similar. Y con el tiempo, uno va llegando a la conclusión que la única más cercana que podría estar dispuesta a hacer algo así, sería una madre por su hijo. De ahí que en mi cabeza quedó poco a poco clara la idea de que unicamente con mi madre sería posible mantener un encuentro incestuoso. No obstante, el tema, como digo, no surge de un día para otro, es un caldo de cultivo que poco a poco se va alimentando, no me levante un día y dije "ya esta, hoy me tiro a mi madre", no, es mas bien un hoy me fijo en su escote, se va a duchar a ver si veo algo, cosas así.

Mi madre es una mujer de 55 años, bajita y de buen tipo, con algún kilo de más, pero bien puesto, media melena castaña y dos buenos pechos que nos dieron de mamar a mi hermano y a mi, vive todavía en el pueblo, con mi padre y mi hermano y una vez al mes o dos, solemos pasar el fin de semana allí.

Como todo, las cosas empiezan por poco y luego van creciendo, las primeras fantasías que tenía con ella eran la de que me hiciese una mamada y llenarle toda la cara de semen al correrme, es una de mis debilidades y con mi mujer me costo años que me dejase hacerlo, por lo que era lo más normal que fuese de las primeras fantasías, pero no pasaba de ahí.

Sin embargo, un fin de semana que estuvios allí, todo cambio de repente, es importante aquí aclarar algunas cosas para entender mi comportamiento, mi mujer y yo, por circunstancias (trabajo, viajes, familia...) llevabamos casi un mes sin tener un roce sexual...y si yo andaba caliente, encima se habia añadido que llevaba toda la semana masturbandome con porno o con todorelatos, pero sin llegar a eyacular, dejandome siempre a medias, con el fin de tener una buena carga de leche que soltar a mi mujer en su cara cuando por fin pudieramos tener un rato juntos (ya he dicho que es una de mis debilidades); eso tiene dos consecuencias, es cierto que cuando por fin te corres, la cantidad de semen que sale es ingente, es ideal para dejar pringada la cara de cualquier mujer; pero como contra, vas caliente todo el puñetero día, no sueles pensar en otra cosa que no sea en sexo y ver cuando descargar ya por fin, por que los huevos te duelen de tanto retener.

Pues como digo ese fin de semana estaba en ese momento de ir con los huevos cargados y pensando todo el día en como descargarlos, y así nos fuimos a mi pueblo para pasar dos días en casa de mis padres.

Los fines de semana en casa de mis padres suelen ser muy parecidos, comidas copiosas, botellas de vino del pueblo para regarlas, siesta y paseos por el rio que pasa a apenas 3 km del pueblo...relax completo y la verdad es que se agradece, y ese finde no fue muy diferente, todo transcurrio de esa manera, hasta el sabado por la tarde, cuando despues de comer, dije de dar un paseo tranquilo hasta el rio y rebajar un poco la comida. Mi mujer y mi hermano dijeron que no, que preferían echarse la siesta y mi padre había quedado para "echar la partida" con los amigotes en el bar, por lo que al final solo mi madre y yo parece que estabamos dispuesto a dar ese pequeño paseo, dudamos un poco, sobre todo yo, pero al final me anime.

Mentiría si no digo que un poco si divagaba, cuando nos preparabamos para salir, que estariamos ella y yo solos, fantaseaba un poco con que bonito seria conseguir una mamada "robada" de ella...pero era eso, fantasear.

Y así nos pusimos a andar en ese paseo, el tiempo acompañaba, hacia sol, pero no calor...y a mi los huevos seguían doliendome...lo que hacia que fuera dificil no pensar en como y donde descargarlos.

  • Hace buena tarde- dijo mi madre

  • Si

  • Has comido bien, la paella me ha salido muy buena

  • ...

Ni respondí, la verdad es que estaba mas pensando en como me dolía ahí abajo que otra cosa, mi madre no continuo existiendo, la verdad es que llevaba un poco taciturno todo el fin de semana, pero era el semen acumulado que me traia por la calle de la amargura, pero imagino que ella supuso que tenia algun tipo de problema más mundano o algo similar.

  • Es que te pasa algo? llevas muy calado estos días - dijo al cabo de unos minutos sin hablar.

  • No, no, es que estoy cansado

  • Ah, mucho trabajo?

  • El de siempre

Y continuamos andando. Al rato llegamos al pinar que precedía la bajada al rio.

  • Bajamos por el pinar - pregunto mi madre.

  • Lo que quieras.

  • Pues venga, vamos.

Y nos tiramos por en medio del pinar camino de la vaguada que llevaba al río.

  • Seguro que estas bien, estas raro nene.

  • No, si no es nada.

  • Ves sabia que era algo.

  • Si, pero no se puede hacer nada.

Jurar que no se porque dije eso, sería mentir, poco a poco una idea se iba abriendo camino en mi mente, lo que no sabia es como afrontarla.

  • Pues que pasa?

  • Dejalo mamá, si ya te digo que no es nada.

  • Hijo, algo será para que este así.

  • Si, pero son cosas nuestras, de Julia y mías - Julia era mi mujer

  • Es que os pasa algo, no me des el susto hijo mio

  • No, no, si nos queremos mucho, estamos muy felices, pero bueno cosas de pareja.

  • Pero estais bien, no?

  • Si, si.

  • Bueno pues entonces serán cosas que pasan, en todos los matrimonios pasan cosas.

  • Si, si, es verdad, no si ya te digo que no es nada.

Ambos nos callamos y continuamos andando, pero al cabo de unos metros mi madre volvio a retomar el tema:

  • Sabeis que lo que podais contar con nosotros hacedlo, si es problema de dinero o algo, sabeis que estamos ahí.

  • Mamá es que es dificil - Yo ya empezaba a calibrar la posibilidad de comenzar a jugar a ver que sacaba de esto...

  • Bueno vosotros sabreis, pero yo quiero mucho a Julia, no me gustaría que por alguna cosa os pasase algo.

En este momento, y viendo por donde tiraba el tema, yo ya empezaba a pensar que bien llevado de aquí podría intentar sacar algo, forzar la situación de manera que aquello acabase con mis pelotas descargadas, era cuestión de hilar bien el tema y tratar de parecer cabal y lógico, sin estridencias. Dejé pasar unos minutos y empece a lanzar el sedal.

  • Veras mamá, es que son cuestiones difíciles, cosas que duelen y que fastidian...pero que son así.

  • Ay hijo, ahora si que me estas asustando, que os pasa?

  • Son cosas de pareja mamá, son cuestiones sexuales.- Dije mirandola a ver como le caia el tema que seguro no se esperaba.

  • Ah....- Su cara era de sorpresa la verdad.

  • Son cuestiones de compenetración en la cama y de resignación y sufrimiento.

Mi madre callaba, aparto la vista y no decía nada.

  • Ya te dije que era dificil...

  • Ya, bueno, en esas cosas sois vosotros los que teneis que entenderos...

  • Ya si esta hablado y mas que hablado y no hay nada que hacer..

  • ....

  • Y yo la quiero, y ella me quiere, pero...

  • Pues eso es lo importante.

  • Si, pero yo lo estoy pasando mal, la verdad, bastante mal. - Tire mas carnaza al hilo.

  • Bueno, tampoco será tanto, si os quereis es lo importante.

  • Claro, es facil decirlo mamá, como tu no estas en el tema.

  • Venga que siempre has sido muy dramatico, no saques las cosas de quicio, que no será para tanto.

  • Que no? que tu mujer no te haga felaciones, que casi no te deje acostarte con ella, que sea con la luz apagada siempre?? - Todo inventado por supuesto, pero debia poner la situación muy, muy negra y muy "dolorosa".

  • Eh....

  • Te parece que es facil eso? pues que te diga que no va a poder hacerlo nunca, que es superior a ella...es todavía peor...saber que esas cosas no vas a poder probarlas nunca

  • ...

  • Y ahora que te parece, dificil y duro o no?

  • Bueno, yo no soy quien, pero si os quereis, es lo que importa...

  • Si, nos queremos, pero mamá tambien soy un hombre...

  • Ya, pero lo importante es ella y que os querais y que esteis juntos...

  • Pero yo no se voy a poder soportarlo mamá, es muy dificil.

  • Tienes que hacerlo, e igual con el tiempo, las cosas cambian.

  • No lo van a hacer mamá, ya lo hemos hablado y no va a cambiar.

  • Si quieres puedo intentar hablar con ella...

  • No!, no! ni se te ocurra, como se entere que te lo he dicho me mata...para las cosas sexuales es muy, muy especial.

  • Pero yo creo que si hab..

  • Que no mamá! prometeme que no le vas a decir nada, no quiero que encima empeore la cosa, de verdad que se pondria hecha una loca, es muy especial, prometemelo.

  • Pero.

  • Prometemelo.

  • Vale, te lo prometo que no le digo nada.

Ambos nos callamos y seguimos caminando por el camino del pinar, pero yo no podia dejar esto así, ya la habia metido en el tema y de aquí tenia que sacar algo.

  • Incluso me he planteado ir de vez en cuando a alguna prostituta para aliviarme.

  • Pero que dices! estas loco, como vas a hacer eso?

  • Pues porque uno tiene sus necesidades mamá...y el amor esta bien, pero no lo puede todo.

  • No puedes hacer eso, no puedes hacerselo a Julia, tienes que ser fuerte.

  • No lo soy mamá, se que voy a terminar por no aguantar.

  • Pues tienes que hacerlo, no puedes irte con una puta.

  • Pues ya me diras que hago, porque yo no aguanto así.

  • Pues disfrutar de lo que Julia te de, las veces que te lo de.

  • No me basta mamá, lo paso mal, no puedo.

  • Pues tienes que hacerlo, ademas os quereis...tienes que hacerlo.

  • Ya te aviso que no voy a poder...

  • Siempre tan tremendista hijo...

Y aquí decidí jugarme ya el todo por el todo, la conversación habia tomado los derroteros que esperaba, la situación habia llegado donde no esperaba que llegase y pense que un paso más podia jugarmelo:

  • Tan tremendista? pues ayudame tu si te parece tan facil.

  • Como que te ayude yo? - Dijo mi madre con la cara sorprendida

  • Si, aliviame tu para que no tenga que hacer otras cosas que no quiero yo, ni tu, ni nadie...

  • Pero estas loco? que quieres que me acueste contigo?, tu estas loco

  • No he dicho eso

  • Entonces que has dicho?

  • Que me ayudes, que me alivies tu cuando este que ya no puedo más.

  • Y eso no es lo mismo?

  • No, acostarse es acostarse, con que me hicieras alguna felación cuando ya no pueda más, que es precisamente lo que se niega a hacerme Julia, creo que podria aliviarme lo suficiente.

  • Pero te estas oyendo, tu te estas oyendo.

  • No decias que era facil, que es que yo era muy dramático?

  • Y lo eres, tu crees lo que le estas pìdiendo a tu propia madre?

  • Solo te digo que yo estoy ya en un punto de no retorno mamá, si no te parece bien lo de las putas, te pido ayuda para evitarlo, porque es que yo no voy a ser capaz.

  • Pero hijo, date cuenta de lo que dices, es una locura.

  • Lo se, pero es que ya no estoy para otras cosas, de verdad, creeme mamá, que uno es como es, y se hasta donde puedo llegar...y a esto no llego, lo siento, que llevo los años que llevo con Julia, que me he hasta casado con ella, que la quiero si...pero al fin y al cabo soy un hombre, y hay cosas que mi naturaleza las necesita, lo siento, no puedo evitarlo.

Mi madre me miró seriamente, calibrando lo que acababa de decirle, no se movia, no movía ni uno solo de sus músculos, solo me miraba, durante un minuto largo solo me miró, despues giró la cabeza y emprendio de nuevo la marcha, yo la seguí apenas unos pasos por detras.

Durante todo el trayecto hasta que llegamos al rio ninguno dijo nada, simplemente nos limitamos a andar. Cuando llegamos al rio hablamos apenas algunas palabras sobre algun matorral que se veia, el nivel del agua y un par de peces que vimos saltar en las opacas aguas verdes.

Un rato despues, mi madre dijo de volver ya, por lo que emprendimos el camino de vuelta, que hicimos tambien casi sin hablar, cuando llegamos ya estaba todo el mundo operativo, mi mujer y mi hermano ya se habian levantado de la siesta y estaban viendo una película en la televisión y mi padre apenas hacia unos minutos que habia llegado y se dedicaba a acariciar al perro.

EL resto de la tarde lo dedicamos a ver algo la televisión y a preparar la cena y los vinos que regaron la caida del sol; tras una sobremesa larga, mas o menos todos nos fuimos iendo a la cama, cuando llegamos a la habitación mi mujer y yo, esta me preguntó:

  • Estaba tu madre rara esta tarde.

Estire las orejas como un buen perro cazador y le pregunte de la manera mas despreocupada:

  • Y eso?

  • No se, me ha estado preguntando y diciendo cosas raras, que si nos veia muy, que si estaba muy contenta que estuviesemos juntos y felices, que si sabia que tu me querias un monton...no se cosas raras.

  • Esta mayor la mujer, je je je- intente quitarle importancia- nos ve de mes en mes y le entran el sindrome del nido vacio.

  • No se, incluso parecia que estaba como con la cabeza en otra cosa y que queria decirme o preguntarme algo, muy raro la verdad.

  • Nada, no le hagas caso.

  • Ya, ya, pero estaba rara.

  • Ya se le pasar, vamos a dormir, que estoy cansado.

Y nos acostamos en la cama, por un momento pense en tontear con Julia un poquito, pero lo que me acababa de contar me habia dejado preocupado por si mi madre se iba de la boca y le preguntaba a Julia por la sarta de mentiras que le habia contado, no podia arriesgarme, tenia que hablar con ella por la mañana.

La noche transcurrio tranquila y acostumbrado a levantarme temprano, a las 8 ya estaba de pie, baje al piso de abajo y alli vi que mis padres tambien se habian levantado.

Intente pillar a mi madre a solas antes de que mi mujer se levantase y 10 minutos despues lo hice en la despensa:

  • Mamá

  • Dime - contesto con gesto algo serio

  • Sobre lo que te dije ayer

  • Ya si...

  • Recuerda que me prometiste que no le dirias nada a Julia

  • Si no he dicho nada

  • Ya, pero se que ayer estuviste tratando de sonsacarle algo...te lo pido por favor mamá, no digas nada, me juego mi matrimonio.

-...

  • Por favor mama, prometemelo

  • Pero...

  • Por favor te lo pido

  • De acuerdo no dire nada, pero debes de hablarlo con ella

  • Mamá lo he hablado no una, ni dos, ni 20 veces...cada vez que nos acostamos lo hablo, antes y despues...y asi llevo mas 13 años...hablandolo y ella con las cosas claras, es imposible mamá.

  • Hijo yo...yo no

  • Lo se, lo se mamá.

  • Ya pero...

  • No te preocupes de verdad, ya veré lo que hago

Y con mi actitud y cara mas compungida y derrotada me di la vuelta y sali hacia el comedor.

El resto del fin de semana transcurrió como el resto de fines de semana en mi casa, no sucedió nada digno de contar, mi madre con un tono serio el resto del tiempo, pero tampoco fue llamativo, seguramente solo lo note yo. El domingo por la tarde, poco despues de comer mi mujer y yo nos marchamos hacia la capital para preparar la vuelta al trabajo del lunes.

Mientras miraba a mi madre cuando salía con el coche vi su cara de preocupación, alternando su mirada tanto entre Julia y yo.

Cuando llegamos subimos las maletas y las colocamos, aun era pronto y quedaba tarde, por lo que nos pusimos a ver una película en la televisión...pero yo seguía con las pelotas cargadas, y alejado de la posibilidad que mi madre pudiera contarle de más a mi mujer, la líbido habia vuelto en toda su plenitud; verla alli tumbada en el sofa hizo que decidiese que ya era momento de descargar lo que tanto retenía.

  • Julia, sabes que estoy necesitado.

  • Ah si? de que?

  • De que va a ser, de atenciones.

  • Y si te atiendo como vas a pagarme.

  • En carne.

  • No esta mal ja ja ja.

Me acerque a ella y comence a besarla, mi mano se metio entre su jersey y alcanzó su pecho desnudo del sujetador que se habia quitado nada mas llegar a casa.

  • Hmmm, ya tenia ganas- me dijo.

  • Pues ya veras las mias.

No he descrito como es Julia, alta, de 1,76 y delgada, rubia y con unas rotundas caderas que llevan a un culo redondo y respingon, de pecho no anda muy bien servida, pero tienen el tamaño justo para poder disfrutar de ambas tetas a dos manos, pezones pequeños y muy receptivos; y con uno de ellos fue con el que me estuve divirtiendo durante un rato, poniendola muy, muy caliente.

Cuando la tuve en su punto, me levante y me baje los pantalones:

  • Quiero que me la comas.

  • Así de repente.

  • Quiero que me la comas y quiero correrme un tu cara.

  • Jooo

  • Estoy que reviento Julia, si me lo haces bien, no duro ni 5 minutos.

  • Es que llevamos mucho sin esto eh?...venga, pero porque te has portado bien.

Y sin decir nada mas, sentandose sobre el sofa, y con el jersey aun puesto, aunque mal colocado, me cogió el calzonzillo y me lo bajo, saltando mi pene cerca de su cara.

  • Vaya, si estas con ganas, si

Con su mano se acerco lentamente y lo cogio, levanto la cabeza y mirandome fue acercando su boca a mi polla, lentamente la abrió y se fue metiendo centimetro a centimetro mi pene en su boca.

  • Joer, que bien.

No es que tenga un gran pene como los que se leen en todorelatos, creo que ando en la media española y mi pene esta en 14-15 cm en erección, aunque no es muy fina que digamos, hablariamos de pequeña, pero gruesa, pues Julia se metio mas o menos la mitad de ellos en su primera introducción.

Tras ello comenzó lentamente a subir y bajar su boca y sus labios sobre mi pene, no lo metia muy profundo, pero tampoco dejaba que saliera de su boca; mientras jugaba de vez en cuando con su lengua sobre mi capullo. No podría decir que fuese la mejor mamada del mundo, pero para mi estado cumplia su función mas que de sobra.

Tras cosa de 3 minutos de estas comiendome la polla le dije que acelerase un poco que queria venirme en su carita y ella obediente acelero su mamada, al rato note que empezaba a llegar al punto de no retorno, por lo que le agarré la cabeza e intente llevar yo el ritmo, apenas dura un minuto, cuando note que me iba a correr, saqué mi pene de su boca y comence a pajearme frente a su cara.

  • Me corro, me corro, en tu cara, en toda tu cara.

Ella cerro los ojos ante la inminencia de lo inevitable y en ese momento comenzaron a salir de mi pene lecherazos de leche grumosa y blanca que impactaron sobre su cara, el primero le cruzo la mejilla y el ojo derecho, el segundo, el mas abundante le cayí sobre la nariz y la frente, el tercer volvio a caerle sobre su mejilla derecha y los demas, mas débiles visitaron su otra mejilla y parte de la boca, boca que mantenia cerrada evitando que nada le entrase ahí (no le suele gustar).

Al acabar el cuadro era ella con los ojos y la boca fuertemente cerrados y una gran cantidad de leche que le recorría la cara y comenzaba a chorrear por su barbilla...el tiempo que habia estado sin correrme habia merecido la pena.

Continuara (...)