Aprendiendo a Amar Cap.97

Quiero estar con vos y con el bebe – puse mi mano en su abdomen – Quiero ser su otra mamá...

Estoy publicando este capitulo aqui porque mucho no pueden leerlo en mi Facebook o no lo encuentran...

Saludos ;)

Capítulo 97

Sami>>

Sabía que reaccionaria mal pero no creí que de esta manera, me expuso y humillo delante de todos nuestros amigos, todos la miraban asombrados, después de varios segundos sentí las miradas sobre mí y Juanjo, mis mejillas me ardían de la vergüenza que sentía, antes de poder decir algo Jenny se puso de pie y empujo a Tami haciéndola sentarse en su silla

-      Te estás pasando Tamara – mi novia volvió a ponerse de pie – Si no sabes cómo son las cosas no hables mejor

-      Jenny, no es manera de reaccionar – Sofía se dirigió a mi mejor amiga

-      No podes defenderla – Jenny respondió – Venir borracha a la empresa y tratar de esta manera a Sami, no es algo tolerable

-      Basta – me puse de pie y todos me miraron – Si, estoy embarazada – mire a Tati – No es como ella lo dijo, Juanjo va a explicarte como son las cosas – mire a Tami – Tenemos que hablar – ella asintió – Vamos a tu casa

En silencio bajamos hasta el estacionamiento, nos subimos a mi auto, abroche su cinturón de seguridad ya que por su estado le costaba mucho hacerlo, encendí mi auto y sin decir una palabra maneje hasta su casa. Al llegar deje el auto en la entrada, le pedí que me diera las llaves y entramos, le dije que se sentara y fui a la cocina a prepararle un café bastante cargado. Una vez que ya estaba servido en la taza regrese a la sala y se lo entregue

-      No quiero tomar nada – insistí y la agarro – Me quedo claro ayer

-      No, no te quedo claro nada porque no me dejaste explicarte – iba a hablar pero no la deje – Toma el café, date una ducha y después hablamos

Obedeció sin decir más nada, casi una hora después regreso con su pijama puesto y su cabello mojado, se sentó frente a mí y me miraba esperando que comience a hablar

-      Jamás te engañe y jamás lo haría – lleve mi flequillo hacia atrás – Tengo dos meses y medio de embarazo – abrió su boca asombrada – Sucedió antes de separarme de él

-      ¿Cómo no te diste cuenta antes? – pregunto aun sorprendida

-      Mi periodo se volvió irregular y no tuve síntomas hasta que empezaron la semana pasada los vómitos – me levante y me senté a su lado – El sábado cuando nos viste entrar a la clínica me acompaño a hacerme el análisis y recién ayer tuvimos el resultado

-      ¿Por qué no lo hablaste conmigo? – me reclamo – Yo podría haberte acompañado

-      Recordé la vez que tuve dudas estando con Juanjo y vos te pusiste muy mal, creí que estando juntas te pondrías peor y me asuste – baje la mirada – Si te lo oculte fue porque no quería venir a contarte dudas o sospechas, quería decirte las cosas teniendo la certeza

-      Me duele mucho que no hayas podido hablar conmigo y me duele mucho que quien me haya dado esta noticia haya sido él, con su enorme sonrisa como si no pensara el efecto que podía causar en mi – levanto mi cabeza poniendo su mano en mi mentón – Pero ya está, no se pueden cambiar las cosas y a parte sé que soy muy difícil – sonreí al ver que ella también lo hacía – Supongo que un bebe es algo lindo

-      No lo sé, tengo mucho temor – tomo mi mano – No me siento preparada

-      Creo que nadie está preparado cuando viene de sorpresa – asentí – Juanjo se ve muy feliz

-      Tami, esto no cambia nada – lleve su mano a mi abdomen – Él lo tiene claro, yo te amo a vos

-      Pero él es el padre – tapo su cara – Esto me deja como la tercera

-      No, no sos ni vas a ser la tercera – tome sus manos – Juanjo va a ser el padre, jamás le vamos a quitar ese rol en la vida de este bebe pero quien quiero que me acompañe en cada paso, en cada etapa de crecimiento, en su educación, cuando de sus primeros pasos, cuando diga la primera palabra, cuando le salgan los dientes – sonreí – Cuando se enamore y haga sus travesuras como las que hicimos nosotras – la mire a los ojos - Esa quiero que seas vos – trague saliva – Quiero que seas su otra mamá

-      Se puso de pie y clavo su mirada en mi – No sé si puedo, necesito pensar sobre todo esto – sentí un nudo en mi garganta – Te amo, con toda mi vida pero saber que tu ex novio va a estar siempre en nuestras vidas no sé si puedo aceptarlo

-      Te entiendo Tami – me puse de pie – Voy a irme a casa, ambas necesitamos estar solas un rato

-      Camine hacia la puerta – Sami – voltee a verla – Anda con cuidado – asentí y me fui

Me subí a mi auto, apoye mi frente en el volante y deje salir mis lágrimas. Sabía que sería difícil, sabía que estaba dentro de las posibilidades que esto pasara pero me duele muchísimo. Casi veinte minutos después encendí el auto, maneje hasta mi casa y al llegar me encerré en mi cuarto y me puse a llorar abrazando mi almohada tratando de desahogar todo este sentimiento.

Tati<<

No podía creer lo que acababa de escuchar, mire a Sami que se veía muy sonrojada, Juanjo me miraba negando y lo único que pasaba por mi mente era que necesitaba una explicación, Jenny comenzó a recriminarle a Tami y Sofí salto en defensa de su mejor amiga, Sami pidió que dejaran de discutir, me dijo que las cosas no eran como parecían y que Juanjo me explicaría. Después de que todos observamos a Tami y Sami salir de la sala de reuniones Juanjo vino hacia mi

-      ¿Podemos hablar? – pregunto nervioso

-      Solo esperame hasta las 4 pm que termino una reunión y después vamos para mi casa – asintió – Te veo más tarde

Camine hacia mi oficina, decidí no precipitarme, dejar que Juanjo me diera una explicación sobre el asunto y a partir de ahí hacer lo que menos dolor me cause a mí ya que aun seguía superando mi separación con Tami y no estaba preparada para permitirme sentirme mal.

La reunión con el cliente boliviano salió muy bien, en un mes tendría que viajar para que firmemos el acuerdo y comenzar con la obra.

Me deje caer en mi asiento, me prepare mentalmente para la conversación que tendría y fui hacia la oficina de Jenny, golpee y cuando me autorizo a entrar abrí la puerta

-      ¿Vas a ir a hablar con Juanjo? – asentí y me senté – Escuchalo, no te cierres como Tami

-      Tendrá sus motivos para haberlo hecho – iba a responderme pero me adelante – Yo fui cómplice de que le mientan, me involucraron en esto sin yo tener nada que ver

-      ¿Qué vas a hacer? – me encogí de hombros

-      Primero voy a hablar con Juanjo y después quiero ir a ver a Tami – me puse de pie – Mañana nos vemos – bese su mejilla

-      Te llamo a la noche – sonreí – Hasta mañana

Baje la escalera, fui en busca de Juanjo a su oficina y nos dirigimos hacia su auto ya que me había traído en la mañana. Durante el viaje hablamos de la reunión y del acuerdo con el empresario boliviano y cuando intento hablar sobre el tema le pedí que esperara a que lleguemos a mi casa.

Una vez que estábamos sentados en mi sala, lo mire a los ojos y decidí tomar la iniciativa de comenzar a hablar

-      Solo voy a decirte algo antes de que me expliques – afirmo con su cabeza – Lo único que me causa mucho malestar es que me hayan involucrado en mentirle a Tami – me miro sin comprender – El sábado dijeron que iban al médico y que no le querían decir a Tami y me hicieron inventar una justificación para cubrir lo que estaban haciendo

-      Tati, conoces a Tami – asentí – Sami tenía miedo de que si se enteraba de sus sospechas se enojaría

-      Pareciera ser que mentirle resulto peor – suspire – Quiero escuchar lo que me tenes que decir

-      Sami y yo no tenemos nada – me cruce de piernas y deje que continuara hablando – La última vez que tuvimos relaciones fue una semana o diez días antes de la boda

-      Entonces está embarazada de casi tres meses – movió su cabeza hacia arriba y hacia abajo

-      Cuando Sami me planteo sus dudas maldije muchas veces pero luego pense y no es malo un bebe, hasta por un momento me emocione – sonrió – Jamás pense en estar de nuevo con ella – tomo mi mano – No te voy a negar que sentí cosas fuertes por ella pero eso fue en el pasado – se acercó más a mí – Ahora estoy disfrutando de estar juntos y conocernos, me siento muy bien con vos y no me gustaría que esto sea un problema para lo que sea que estamos teniendo

-      Te voy a ser sincera, para mí el bebe no es un problema entre nosotros – note que sonrió levemente – Solo quiero que asumas tu responsabilidad como padre hasta donde llega y que no utilices a tu hijo para acercarte a Sami y ocasionar un problema entre ellas – negó bastante serio – Si queres continuar conmigo solo te voy a pedir que realmente estés conmigo, necesito estabilidad – resople – Mi relación con Ramiro fue un desastre y la relación con Tami fue linda pero no fue lo que yo esperaba y necesitaba, el sentimiento no fue reciproco y eso me ocasiono mucho dolor pero a pesar de eso me abrí a conocerte y realmente me gustas, no quiero que lo nuestro termine mal

-      Tengo bien claro que solo soy el padre del bebe, no me interesa interponerme entre Sami y Tami – me abrazo – Te juro que me siento aliviado por tu respuesta

-      ¿Preparo algo para comer? – besos mis labios

-      Vamos a preparar algo juntos – nos pusimos de pie

Fuimos a la cocina y entre los dos preparamos un rico pollo al horno. Por el horario no era almuerzo ni cena pero nos sentamos a comer. Conversamos sobre cómo se lo contaron a Tami y coincidimos en que realmente no fue muy agradable la manera en la que se había enterado. Cuando nos dimos cuenta ya eran las 11 pm, agarro su chaleco y me beso

-      Ya me voy preciosa – acaricio mi mejilla – Es tarde y mañana a primera hora tengo que reunirme con un cliente

-      Si queres podes quedarte a dormir – levanto una ceja y sonrió – Es tarde y sinceramente quiero dormir abrazada a vos esta noche

-      Me encanta la idea de dormir abrazados – dejo su abrigo sobre el sillón – Vamos a dormir, quiero tenerte entre mis brazos

Fuimos a la cama, estuvimos besándonos y acariciándonos hasta que nos quedamos dormidos.

Tami<<

Vi a Sami salir y me quede en la puerta viéndola, no arrancaba, sé que está llorando dentro del auto pero no me siento con la fuerza suficiente para ir a consolarla y decirle algo que en este momento no sea claro para mí. El tiempo pasaba rápidamente hasta que reaccione al verla partir, cerré la puerta y me detuve mirando hacia el interior de mi casa, necesitaba hablar con alguien pero todos mis amigos estuvieron presentes en la escena estúpida que hice en la empresa, saben que la cague y no tengo ánimos para que me recriminen por mi actitud. Camine hacia la cocina, pense en buscar refugio en una de mis botellas, busque en mi vinoteca y me decidí por la de vodka, la destape y antes de dar el primer trago la aleje de mi ¿Qué solución me va a dar beber? Ninguna, al contrario, me hace tomar acciones estúpidas. Me acerque al fregadero y la vacié, tire el envase en el cesto de basura, fui a mi cuarto y busque mi ropa deportiva, me vestí, conecte mis audífonos a mi IPhone, me los puse y salir a correr sin querer pensar en nada más. Casi una hora después me detuve en una tienda a comprar una botella de agua. Después de pagarle a la amable señora que atendía me di vuelta y note que estaba frente al gimnasio al que iba, busque en mi billetera y aun tenía el carnet de socia, también tenía dinero en efectivo así que no dude en cruzar la calle, entrar y camine hacia la recepción, sonreí al ver que aun trabajaba Nacho que me saludo muy efusivo, le mostré mi credencial y le pague la cuota del mes, fui hasta la bicicleta y durante veinte minutos no me baje de ahí. Luego fui haciendo con calma la rutina que hacia anteriormente, tan lento lo hice que me di cuenta que ya habían pasado tres horas desde que había entrado. Regrese a mi casa, me di una ducha y luego prepare algo para cenar. Sentía mi cuerpo muy cansado así que me fui a la cama, abrí mi laptop y busque un libro en línea para leer. Cuando menos me di cuenta ya lo había acabado, eran las 12.30 am, cerré la computadora, apague la lámpara de noche y a pesar de que di demasiadas vueltas en la cama me pude quedar dormida.

Mi alarma sonó como siempre a las 6.30 am, pense varias veces antes de levantarme y decidí tomarme el dia libre, me acomode en la cama y me dormí hasta que mi cuerpo me pidió que me levantara a darle algo para comer.

Mientras tomaba el desayuno que estaba más cerca del almuerzo revise mi celular, note que tenía varios  mensajes de WhatsApp

Naty~

~~~Hey hermanita ¿Cómo te sentís? Llamame, quiero saber cómo estas… Te amo

Mica~

~~~Tami, sé que no es buen momento pero quiero saber cómo estas… Avisame para quedarme tranquila

Caro~

~~~Sé que es muy difícil todo esto pero recorda el amor que se tienen… No tomes una decisión precipitada… Te quiero mucho

Sofí~

~~~Supuse que no vendrías a la empresa ¿Queres que vaya para tu casa? Si necesitas hablar sabes que acá estoy… Te amo

Tati~

~~~Hola Tami, espero que no hayas bebido, no es la solución a los problemas… Me gustaría hablar con vos sobre lo que paso… Avisame si nos podemos ver

Respondí cada uno de los mensajes para que estuvieran tranquilas de que no había hecho nada malo y diciéndoles que por ahora necesitaba estar sola.

Fui hacia la cochera y saque el auto, aproveche para limpiarlo profundamente. Una vez que estaba reluciente me quede mirándolo y comencé a hablar para mi

-      Este auto no es para trasladar un bebe – puse mi mano en mi mentón sin apartar  la mirada de mi BMW – Tendría que comprar otro, es más tendría que ser una camioneta para cuando crezca – suspire - ¿Qué estoy diciendo? No, nada de eso, voy a mantener mi auto – sacudí mi cabeza, me subí en mi M4, lo encendí y lo metí en la cochera – Vos vas a seguir siendo mi coche – pase mi mano delicadamente por el capó

Entre a mi casa y en ese preciso momento escuche mi celular sonar, creí que podría ser Sami pero al ver la pantalla supe que no era ella, respondí sabiendo que si no lo hacía se aparecería en la puerta de mi casa y no quiero ver a nadie

-      Hola Pablo – salude lo más animada que pude

-      ¿Cómo estás? – pregunto con voz cauta – Creí que vendrías a la oficina

-      Me siento muy extraña, aun la cabeza me da mil vueltas – me deje caer en el sillón – Tengo ganas de estar sola, necesito pensar

-      Entiendo el mensaje oculto – sonreí ante su respuesta – Solo quería asegurarme de que estés bien

-      Bien no estoy pero si te réferis a si estuve tomando – hice una leve pausa – No, no lo hice

-      Suspiro aliviado – Sé que a partir de nuestra pelea cuando te separaste de Sami nada entre nosotros volvió a ser igual pero quiero que sepas que para mí siempre vas a ser como una hermana, estoy y voy a estar siempre y voy a apoyarte ante cualquier decisión que tomes para tu bienestar – ambos hicimos silencio unos largos segundos – Te extraño demasiado

-      Yo también te extraño Pablo – sentí el nudo en mi garganta – Disculpame por todo, siempre vas a ser mi hermano, la persona que nunca me dejo sola en mis peores momentos

-      ¿Segura no queres que vaya un ratito? – pregunto de manera muy tierna

-      Prefiero que hoy no pero mañana me podes invitar a almorzar al restaurant italiano al que íbamos cuando vivía en la pensión – recordé que amábamos ese lugar

-      Hoy mismo llamo a Jorge para que nos reserve la mesa que siempre elegíamos – respondió muy alegre – Me llamas si necesitas algo

-      Te quiero demasiado Pablo

-      Y yo a vos Tami – colgué la llamada

Me hizo muy bien esta pequeña conversación con mi mejor amigo. Tenía razón, desde nuestra discusión hace dos años todo había cambiado, nuestra amistad ya no era la de antes y ahora que hablamos de esta manera me di cuenta de lo mucho que lo extraño y que siempre, a pesar de todos los problemas que tengamos, va a ser mi hermano de corazón.

Aunque no quería pensar no pude evitar recordar la última conversación con Sami, todo lo que me dijo, la manera en que me explico cómo eran las cosas, no estoy preparada para tomar una decisión, me puse de pie y fui a prepararme una leche chocolatada como cuando era chica, agarre galletitas y me senté a ver televisión.

El timbre sonó, cuando mire la hora en mi celular note que eran las 8 pm, no me imaginaba quien podía ser pero al pensar que era Sami sentí emoción y a la vez angustia. Me puse de pie y camine hacia la puerta, un tanto nerviosa la abrí y me encontré con Bruno sonriéndome

-      Hola hija – sin dejar que responda me abrazo y deje salir mis lágrimas – Eso chiquita, llora – lo abrace más fuerte – Saca todo eso que tenes adentro

Aunque no quisiera hacerlo mi cuerpo no obedecía a lo que mi mente le ordenaba, mi llanto empeoro. Tarde varios minutos en calmarme y separarme de él que me sonreía, seco mis lágrimas y entramos a mi casa. Hizo que me sentara en el sillón y fue hasta la cocina, regreso con un vaso de agua y me lo entrego

-      Gracias – bebí de un solo trago todo – No me esperaba que venga

-      ¿Cuándo vas a tutearme? – sonreí – Hable con Pablo esta tarde y me conto todo lo que estás pasando – baje la mirada – Tami, vos sos como una hija para mí – puso su mano sobre la mía – Creo que soy lo más cercano a un padre que tenes – asentí – Quiero preguntarte algo y que me respondas con el corazón – respondí afirmativamente con mi cabeza - ¿Amas a Sami?

-      Hice silencio varios segundos – Si, la amo demasiado pero…

-      ¿Qué es lo que tanto te hace dudar? – pregunto serio y viéndome a los ojos

-      No sé si estoy preparada y no sé si puedo aceptar convivir toda mi vida con su ex novio – sentí el nudo en la garganta hacerse más grande

-      Te voy a contar algo que ni mis hijos saben – cerro sus ojos, suspiro profundamente y luego los abrió – Carlos, el hermano de Pablo no es mi hijo – abrí mi boca sorprendida – Salí un tiempo con la madre de los muchachos pero por cosas de la vida nos separamos – aclaro su garganta – Varios años más tarde nos reencontramos, ambos estábamos sin compromisos y decidimos estar juntos nuevamente pero unos meses después nos enteramos que estaba embarazada

-      Pero ¿Aceptaste sin problema seguir con ella? – pregunte bastante confundida

-      El amor que sentía por ella era muy fuerte así que no dude ni un segundo en hacerme cargo del bebe – aun seguía asombrada – Tu duda sobre convivir el resto de tu vida con la ex pareja de tu novia – resoplo – Vos la tenes mucho más fácil que yo

-      ¿Por qué? – me adelante

-      Juanjo está dispuesto a aceptarte en la vida de su hijo, solo quiere ser un padre presente pero es consciente de que vas a ser parte importante en la vida de su hijo – acaricio mi mejilla

-      Pero no va a ser mi hijo – baje mi mirada

-      Eso será así si vos queres que así sea – lo mire confusa – Yo crie a Carlos como mi hijo, le enseñe a caminar, a andar en bicicleta, lo lleve el primer dia de clases a la escuela, lo lleve a emborracharse cuando su primer novia le rompió el corazón y estuve presente el dia que se casó – sus ojos se cristalizaron – La pensión en la que viviste fue un regalo para él – froto sus ojos – No tendremos la misma sangre pero en los papeles y en mi corazón es mi hijo

-      Siento mucho miedo y creo que no pasamos suficientemente tiempo juntas como pareja para ser madres – paso su brazo detrás mío y me abrazo – Regresamos hace casi tres meses pero estuve un mes secuestrada y después sobrellevando todo el proceso de superarlo – me miro y asintió – Quiero vivir muchas cosas más con ella antes de enfocarnos en un hijo

-      Va a tener tíos, padrinos y un abuelo muy presente que va a cuidarlo para que ustedes puedan seguir disfrutando su relación como pareja – sonrió – No te encierres en excusas, si la amas no la dejes ir

Lo abrace fuerte y ambos comenzamos a llorar, tiene razón, me estoy escudando en excusas y por mi estupidez estoy corriendo el riesgo de volver a perder al amor de mi vida. Nos separamos y nos pusimos de pie

-      Ahora anda a bañarte y cambiarte – levante una ceja – Vamos a ir a pasear

-      Pero… - me interrumpió

-      Ya basta de peros, desde que llegue escuche mil peros salir de tu boca – sonreí – Váyase a bañar así nos vamos

Fui a mi cuarto, agarre una toalla, me di una ducha rápida, me vestí, desenrede mi cabello y fui hacia la sala, Bruno se puso de pie y me sonrió. Subimos a su auto y comenzó a manejar mientras me contaba cómo iban las cosas en su empresa y que está pensando un proyecto en el que nuestra constructora sea la que lo realice. Cuando menos me di cuenta estábamos estacionados en la puerta de la casa de Sami

-      ¿Qué hacemos acá? – sonrió - ¿Cómo sabes dónde vive?

-      Recorda que tu mejor amigo también es amigo de ella – negué sin dejar de sonreír – Antes de que te bajes quiero darte algo – saco un sobre del bolsillo de su saco y me lo entrego

-      ¿Qué es esto? – no respondió así que lo abrí y saque las hojas – Son las escrituras de hotel de Puerto Madero – asintió – Está a nombre de Carlos, Pablo y… - levante la mirada y clave mis ojos en el – De mi

-      Como te dije, ustedes son mis hijos – nuevamente comencé a llorar y lo abrace – Ya saben cómo administrar un negocio y sabrán hacerle las modificaciones necesarias para que sea un grandioso hotel

-      Bruno, de corazón te agradezco muchísimo todo lo que estás haciendo por mí – acaricio con sus pulgares mis mejillas – Sos un gran padre

-      Anda, decile a tu chica lo mucho que la amas – beso mi mejilla

Me baje del auto y antes de que se fuera me despedí levantando mi mano. Paso a paso atravesé todo el caminito hasta llegar a la puerta, toque el timbre y resople al ver que me abrió Nelly que me veía con mala cara, me dejo pasar y una vez adentro hable

-      ¿Esta Sami? – asintió - ¿Esta en su cuarto?

-      Está durmiendo – se cruzó de brazos y mire hacia la escalera – No es momento, prefiero que descanse

-      Tengo que hablar con ella – negó y se paró delante de las escaleras - ¿Qué tenes en mí contra Nelly?

-      Mi hija no se siente bien así que podes venir mañana – mire hacia el techo y suspire – Por favor retirate

-      Permití que siempre te interpongas entre nosotras, no lo voy a permitir una vez más – la mire con mucho enojo – Dejame subir por favor

-      Es mi casa y yo decido si podes o no ver a mi hija – escuche que alguien venía desde la cocina

-      También es mi casa así que hacete a un lado para que Tami suba a ver a nuestra hija – Nelly apretó sus labios y dio dos pasos hacia su lado derecho – Anda tranquila

-      Gracias José – le regale una sonrisa y subí

Al llegar pense en golpear pero ya me habían dicho que dormía así que solo abrí la puerta, estaba la luz del cuarto apagada pero la lámpara de su buró estaba encendida así que la podía ver, tenía los ojitos cerrados, me acerque lentamente y me senté al borde de la cama y comencé a acariciar su cabello, esto la hizo abrir sus ojos y aun adormilada me miro

-      Hola Sami – rápidamente reacciono de que era yo y se sentó en la cama – Despacio – sonreí - ¿Cómo estás?

-      Bastante cansada – acaricie su mejilla - ¿Paso algo? – negué – Me hace muy bien que estés saca

-      Quiero pedirte perdón – la mire a los ojos – Sé que mi reacción del lunes y la de ayer no fueron las que esperabas – se encogió de hombros – Sé que va a ser difícil, que voy a tener que asimilar todo esto pero si no estás a mi lado jamás voy a poder hacerlo y voy a vivir con la angustia y el dolor de haberte dejado ir por estúpida – una leve sonrisa se dibujó en sus labios – Quiero estar con vos y con el bebe – puse mi mano en su abdomen – Quiero ser su otra mamá...