Aprendiendo a Amar Cap. 36

Era obvio que había pasado la noche juntas aunque tenía la esperanza de que no haya pasado pero cuando Tami me lo confirmo sentí demasiada desilusion

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28/09/2016 02.37 pm (HORA MEXICO)

Capítulo 36

Sami<<

Mica me invito a su fiesta pero no tengo ganas de ir, no quiero ver a Tami, me acosté en mi cama y puse una película, me llego un mensaje de WhatsApp de Luis preguntándome si no tenía nada que hacer, le respondí que estaba en mi casa, me envió otro más diciéndome que me arreglara para salir, que tenía ganas de verme. Me di una ducha rápida, me puse un short negro, una blusa verde aqua y unos bonitos zapatos altos color negro, cuando me aviso que estaba afuera, me despedí de mis papas y salí, me saludo con un beso en la boca, lo separe con una sonrisa en mis labios, no me lo esperaba pero no le dije nada, subimos a su auto y me comento que sabía de una fiesta. Cuando llegamos enseguida fuimos a la barra a buscar unas bebidas y sin dudarlo me ofreció otra de sus mágicas pastillas, dude al recordar lo que le hice a Jenny pero que más daba, no vería a ninguna de las chicas, la metí en mi boca y con ayuda de un shot de tequila la pase. Rápidamente sentí como todo mi cuerpo se aceleraba, pedí varios shots más y me puse a bailar.

No paso mucho tiempo cuando le dije a Luis que fuéramos a la fiesta de Mica, a pesar de estar drogado y borracho manejo hasta el boliche y entramos, cuando encontré a Mica fui a saludarla y después de que Jenny empezó a cuestionarme agarre a mi compañero y nos fuimos a bailar.

Estuvimos horas bailando hasta que él se puso muy caliente y empezó a bailar más pegado a mí, sentía sus manos tocar mi cuerpo, no lo quite pero unos minutos más tarde llego Tami y empezó a insultarlo, él no le hacía caso hasta que ella le doblo su mano y le grito que se fuera, yo le gritaba que lo dejara pero de nada sirvió, él se fue y ella me llevo molesta a la barra y me dijo que la esperara. Al rato volvió y me llevo hasta su auto, puso en marcha y empezó a cuestionarme sobre lo que hacía con Luis, me molesto bastante ya que no es problema suyo lo que hago pero la vi realmente enojada cuando antes de llegar a mi casa le dije que estaba drogada, a pesar de que estaba hecha una furia le pedí que me dejara quedarme en su casa y ella accedió.

Una vez en su casa acomodo el cuarto de invitados para que pueda acostarme a dormir, cuando termino entre, me quite mi ropa y me acosté. Empecé a recordar todas las veces que me había quedado en su casa durmiendo con ella, como me hacia el amor por noches enteras, la temperatura de mi cuerpo empezó a subir descontroladamente, pensé en masturbarme pero ¿Por qué conformarme con eso si podía ir a que ella me quitara estas ganas? Me levante de la cama, salí del cuarto y fui directo al suyo, abrí la puerta y me termino de encender verla en ropa interior, ella me preguntaba que me pasaba, no quería responderle así que fui derecho a lo que iba, la bese y pasamos el resto de la noche juntas.

Me desperté con mucho dolor de cabeza, sentí sus brazos rodeándome, voltee a verla y me miraba con una sonrisa en sus labios

-      Buen día mi amor – me iba a besar pero me levante de la cama -¿Qué pasa?

-      No te confundas, solo quería coger, estaba demasiado caliente – iba a decirme algo pero no salía ni una sola palabra de su boca – No voy a volver con vos – empecé a cambiarme ante su mirada y una vez que termine volví a hablar – Ya me voy – agarre mi bolso y sin ni siquiera despedirme salí de su cuarto y luego de su casa

Pare un taxi, le indique la dirección de mi casa y mientras el conductor manejaba recordé la noche, se sintió bien haber tenido sexo con ella pero no fue más que eso, creo que era lo último que necesitaba para cerrar lo que quedaba de la relación que tuvimos.

Tami<<

¿Solo fue coger? No lo puedo creer, no pude ni reaccionar, creí que sería una broma pero al ver que realmente se fue sentí un vacío en mi pecho, me puse a llorar, revolee la almohada que utilizo ella, no quiero sentir su aroma, me levante y saque las sabanas, las tire al piso y me senté en la cama, como pude ser tan estúpida de creer que volvería conmigo.

Agarre mi teléfono y llame a la persona que más necesitaba en este momento

-      Por favor, veni – el llanto no me dejaba hablar con claridad – Te necesito

-      Voy para tu casa – deje caer mi celular

Estuve ahí sentada, mirando el piso. No sé cuánto paso hasta que sonó el timbre, me di cuenta que seguía desnuda, me puse lo primero que encontré y fui a abrir

-      Hey – Jenny me abrazo fuertemente –Tranquila – acaricio mi cabeza y luego me llevo hacia adentro - ¿Qué ocurrió?

-      Pasamos la noche juntas y para ella solo fue coger – las lágrimas salían descontroladamente – Se fue sin importarle como estaba – me reí con sarcasmo – Lo peor es que mientras la “cogía” – hice las comillas con los dedos de mis manos – Le dije que la amaba

-      Nos sentamos en el sillón – No sé qué le pasa – se encogió de hombros – La semana pasada hizo un show en una fiesta, me beso y hasta me pidió de pasar la noche juntas, todo delante de Sofí – la mire sorprendida mientras secaba mis lágrimas – Ayer le regalo un labial a Mica que ni siquiera se lo regalo porque se lo quedo – ambas reímos al recordarlo pero mi tristeza no me dejo disfrutar la risa – Y ahora esto con vos

-      ¿Sabes que está consumiendo éxtasis? – se puso de pie y abrió sus ojos – El tipo con el que sale se las da

-      La voy a matar a esta pendeja – camino por mi sala agarrándose la frente y sonó el timbre – Yo voy, es Sofí – abrió la puerta y su novia entro - ¿Podes creer que la estúpida de Samanta se está drogando?

-      Sofí me miro y asentí - ¿Desde cuándo? – vino hacia mí y beso mi mejilla

-      El sábado pasado me dijo que fue la primera vez – ambas se sentaron – Realmente no se

-      ¿Qué mierda tiene en la cabeza? – Jenny estaba bastante molesta, agarro su celular – La voy a llamar

-      Me levante y le quite su teléfono – No, no es para hablar por celular – asintió – Es grave lo que está haciendo, mezcla droga con alcohol, se puede matar

-      ¿Estuvo con vos? - pregunto Sofí y asentí - ¿Por qué dejaste que se quedara si estaba en ese estado?

-      Dijo que no podía volver a su casa, que sus papas la matarían – me tape la cara – Cuando entro a mi cuarto y me beso creí que nos reconciliaríamos

-      Ojala se hubiera ido a su casa así la mataban – resoplo Jenny

-      Tami, esto te deja un aprendizaje – mire a Sofí sin entender – Tenes que hacer tu vida, fue muy lindo lo que tuvieron pero ya se acabó, mira hacia adelante y disfruta lo que te rodea

-      Esta es la última vez que lloro por ella – seque mis lágrimas – Sufrí demasiado en toda mi vida para sufrir por alguien que ya no vale la pena

-      Aunque me duela sé que es verdad – Jenny agarro mi mano – Ambas cometieron errores que no supieron superar pero ya está, ya no hay vuelta atrás

-      Si queres estar con alguien o si queres estar sola es tu decisión pero ya solta la relación que tuviste con Samanta – Sofí me sonrió – Te mereces ser feliz

-      Tienen razón – me puse de pie – Gracias por venir – abrace a ambas – Tengo mucha hambre, me visto y ¿Vamos a comer algo?

-      Perfecto, acá te esperamos – la pequeña rubiecita me abrazo nuevamente – Te queremos mucho Tami – mire a Jenny y sonrió

-      Yo también las quiero – me fui a mi cuarto a cambiarme

Compramos para hacer sándwiches, fuimos a buscar a Santiago y pasamos todo el día los cuatro en un parque.

Ya de noche me llevaron hasta mi casa, me di una ducha y me acosté a dormir ya que al otro día tenia clases.

Una semana nueva, cambie mi chip, quiero estar bien y rodearme de gente que quiera estar conmigo, fui a la universidad y luego a mi trabajo. Cuando llegue fui directo a la oficina de mi jefa

-      Hola Tati – me sonrió y siguió leyendo algo en su computadora - ¿Necesitas algo? – negó sin dejar de ver la pantalla - ¿Pasa algo?

-      No, nada – fui hasta su escritorio - ¿Cómo estás?

-      El sábado pase la noche con Samanta – asintió sin ni siquiera verme – Ya se acabó todo con ella

-      ¿Por qué lo decís? – levanto su vista – Pasaron la noche juntas, seguramente se reconcilien

-      Me reí – Textuales palabras de ella – me senté – Solo quería coger, estaba caliente – abrió su boca sorprendida – No quiero volver a saber nada de Samanta

-      No sé qué decirte – me encogí de hombros - ¿Estas bien?

-      Ayer estaba demasiado mal pero ya no quiero eso – me levante y fui hacia ella – Quiero rodearme de gente buena, mis compañeros de universidad, mis amigos – agarre su mano – Vos

-      Sabes que siempre voy a estar con vos – beso mi mejilla – Sos una persona muy bonita por dentro y por fuera – la abrace – Si puedo ayudarte, en lo que sea, no dudes en decírmelo

-      Gracias Tati – nos separamos – Me voy a trabajar porque tengo una jefa muy exigente y no quiero problemas

-      Se rio – Te aviso cualquier cosa – asentí y me fui a mi escritorio

Todo el día estuve ocupada y eso me ayudó mucho a no pensar en Samanta, hasta que dieron las 5.40 pm cuando escuché abrirse el ascensor y una persona salió gritando

-      Quiero hablar urgentemente con la Dra. Peretti – levante mi vista asustada y sonreí al ver a Pao – Hubieras visto tu cara

-      Me levante y fui a abrazarla – Tarada me asustaste, te extrañe mucho

-      Yo a ustedes, por eso me vine para acá porque si no no las vería – se hizo la enojada - ¿Tu jefa?

-      ¿Por qué tanto ruido? – Tati salió de su oficina y corrió hacia su mejor amiga al verla – Al fi viniste, te espere el mes pasado

-      Se escuchaba que alguien subía las escaleras, volteamos y nos reímos al ver quien era – Hay Dios, subí 150 escalones, el ejercicio de todo un año – puso sus manos en sus rodillas y buscaba aire – Deberían cambiarse a planta baja – nos reímos – abrácenme ustedes taradas ¿No se dan cuenta que no puedo moverme? – la fuimos a abrazar – Es la última vez que las visito al trabajo

-      ¿Por qué subiste por escalera? – pregunte curiosa – Hay ascensor

-      A parte de que no quiero estar en un lugar tan chiquito y cerrado con esta loca – señalo a su prima – Me dan pánico las cosas esas

-      Desde chiquita fuiste tan exagerada – se rio Tati – Lamento informarte que ya vamos de salida y yo voy a tomar el ascensor porque no soy tan loca como vos

-      No me jodas Tatiana – nos miraba suplicándonos que sea mentira

-      No seas miedosa, vamos en el ascensor – negó – Te abrazo y se te va todo el miedo – Agus me guiño e ojo – No seas tonta queres

-      Voy a tener que dormir con vos así que no te vas a salvar – Agus la abrazo y mi jefa la quito – Ahora te haces la difícil pero no te vas a resistir ante este cuerpito sensual – nos reímos – bueno, voy bajando en lo que agarran sus cosas

Agarramos nuestros bolsos y bajamos por el ascensor, obviamente esperamos unos minutos a que Agus llegara a la planta baja, agarramos las valijas que le dejaron encargadas a Anita, la recepcionista, fuimos al estacionamiento y subieron su equipaje al auto de Tati

-      Tami, te pasamos a buscar en un rato para ir a cenar, tenemos que hablar con ustedes dos – me decía Pao

-      Está bien, me doy un baño y las espero – subí a mi coche y me fui

Tati<<

Era obvio que había pasado la noche juntas aunque tenía la esperanza de que no haya pasado pero cuando Tami me lo confirmo sentí demasiada desilusion aunque mi esperanza regreso al escuchar que ya todo se había acabado, ella me hablo con mucha suavidad y me remarco que soy alguien especial para ella, sentí mucha felicidad, no voy a negar que ahora más que nunca quiero estar con ella.

El día se pasó muy rápido, estaba revisando un caso cuando escuche gritos afuera, me levante muy molesta y abrí la puerta, mi día se volvió mejor al ver a mi mejor amiga, fui a abrazarla y mi sonrisa aumento al ver a Agus, estas locas sí que saben ponerme feliz.

En el estacionamiento nos despedimos de Tami, subimos a mi auto y empecé a manejar hacia mi casa

-      ¿Cómo va todo con Tami? – mire a Pao sonriendo - ¿Sigue con su novia?

-      Ahí vas con tu interrogatorio – se encogió de hombros – El sábado pasaron la noche juntas pero se acabó todo – me dio un codazo – Que bruta que sos – me sobe las costillas

-      Es tu oportunidad de avanzar – negué - ¿Por qué?

-      Tatiana, ¿Me vas a decir que ahora tenes miedo? – me pregunto Agus

-      No, solo no quiero avanzar, si ella siente algo por mí, cuando esté preparada para que estemos juntas veremos qué pasa – ambas hicieron silencio y voltee a verlas - ¿Qué?

-      Se me hace que sos una cobarde pero para eso están las amigas – Pao estallo en risa – Hoy empieza la operación cupido

-      Sí, claro – se rio Agus - ¿No pudiste elegir un nombre mejor? – le pellizco el cachete a su prima

-      Cállense mejor – deje el auto fuera de la cochera

Bajamos y dejaron sus valijas en el cuarto de invitados, las tres nos arreglamos y fuimos a buscar a Tami y de ahí nos fuimos a un bonito restaurant llamado Incanto, que está ubicado en zona norte de la ciudad.

Nos sentamos, trajeron las cartillas y mientras mirábamos que ordenar, Tami hablo

-      Es muy hermoso el lugar – volteaba a ver la decoración – No había venido

-      Fue al primer lugar que vinimos cuando Tati volvió de Estados Unidos – las tres nos volteamos a ver – Pastas con salsa bolognesa – nos reímos

-      Yo también quiero ser popular así que voy a pedir lo mismo que ustedes – volvimos a reír

-      Juntate con nosotras, vas a llegar lejos – Agus señalo a Tami con su tenedor y le guiño el ojo – el mozo se acercó, tomo las cartillas – Todas queremos pastas con salsa bolognesa y trae el mejor vino – asintió y se retiró – Vinimos por dos motivos

-      A ver, decinos – respondí ansiosa

-      Porque teníamos ganas de verla y porque les queremos ofrecer un negocio – Tami y yo nos miramos sorprendidas

-      Queremos volvernos a vivir a Argentina y se nos ocurrió abrir un restaurant – intervino Pao – Ya conseguimos lugar pero nos faltan fondos – nos miró – Ahí entran ustedes

-      Yo le entro, aunque de comida solo se comerla – me reí - ¿Qué decís Tami?

-      Explíquense mas – se veía dudosa

-      Ambas somos Chef y sinceramente nos cansamos de trabajar para que alguien más se llene los bolsillos – Tami asintió – Soy muy buena preparando cualquier comida pero mi especialidad preparar de distintas maneras todo tipo de carne – Agus le comento a Tami – Pao es muy buena con los postres y pasteles

-      A los que van las chicas es ¿Tenes dinero para invertir en el negocio? – fui directo a lo que realmente les interesa a mis amigas

-      Desde chica soñé con ser Chef pero con el tiempo se me paso y quise ser abogada, pero nunca se me fue la idea de tener mi propio restaurant – sonreí al conocer un poco más sobre ella – Cuenten conmigo

-      Si – Pao y Agus chocaron sus palmas – Mañana podemos ir para mostrarles el lugar que nos interesa

-      Me parece genial – llegaron nuestros platos y cenamos planteando ideas para nuestro próximo negocio

Cerca de las 11 pm lleve a Tami hasta su casa, se veía muy cansada, nos despedimos y nos fuimos a mi casa, al llegar nos fuimos a dormir.

Jenny<<

Amaneció, Sofí fue a bañar a Santi, cuando termino lo fui a buscar y lo vestí con su ropa de la escuela mientras mi novia se bañaba, luego me bañe yo, cando termine de cambiarme baje a desayunar con mis rubiecitos hermosos. Subimos los tres al auto, primero dejamos a el pequeño en la escuela y luego fuimos a la empresa, le hice un rato de mimos a mi novia y luego nos pusimos a trabajar.

En la tarde agarre mi celular y llame a Samanta

-      Hola Jenny – decía muy tranquila - ¿Cómo estás?

-      Solo te llamo para decirte que vengas a la empresa, quiero hablar con vos – hable lo más calmada posible

-      Bueno señorita enojo, me tomo un taxi y voy para allá – corto la llamada

Llame a Sofí y le dije que si tenía algo para la tarde lo cancele, que había llamado a Samanta y que iba a hablar con ella. Casi 40 minutos más tarde, mi mejor amiga entro a mi oficina

-      ¿Qué pasa ahora? – puso las manos en su cintura

-      ¿Estas molesta? – asintió - ¿Vos? – volvió a asentir, me levante, camine hacia ella y le di un cachetazo - ¿Sos estúpida o que te pasa por la puta cabeza?

-      Me iba a devolver el golpe pero la detuve - ¿Por qué me pegas?

-      Porque te estas drogando y no solo eso lo mezclas con alcohol – me miro sorprendida – Aunque te hayas comportado mal con Tami está preocupada por vos y me lo conto

-      ¿Yo me comporte mal con ella? – se rio – No sé si recordas que me cago con su jefa

-      Hay Samanta – resople – No cogió con vos por calentura – se iba a ir pero la agarre del brazo – No quiero que vuelvas a ver a ese pendejo, si volves a drogarte voy a hablar con tus papas

-      Ya no lo voy a volver a ver – bajo un poco el tono de su voz – No me interesa él – me abrazo – No voy a consumir más nada de eso

-      La pegue más a mi cuerpo – No quiero que te pase nada Sami – la separe un poco de mí y la hice que me vea a los ojos – Puedo ayudarte ¿Me dejas? – asintió – Esperame un segundo, salí de mi oficina y volví con mi novia – Sofí quiere proponerte algo

-      ¿A qué hora salís de la uni? – ambas miramos a Sami

-      A las 12.30 pm ¿Por qué? – nos observaba sin entender

-      Es perfecto – mi novia sonrió – Queremos que cuides a Santi en las tardes – abrió sus ojos sorprendida – Te vamos a pagar los taxis que ocupes y obviamente por las horas que te quedes con él

-      Claro que lo puedo cuidar pero no hace falta que me paguen – clave mis ojos en los de mi amiga – Solo los taxis

-      Está bien, ¿Segura podes hacerlo? – asintió – Te estoy confiando a mi hermano, me tenes que prometer que vas a dejar esas tonterías de drogarte y tomar

-      Se los prometo a las dos, no sé porque lo hice pero si sé que no quiero volver a hacerlo – despeine su cabello con mi mano – Me costó mucho planchármelo para que me lo alborotes – nos reímos – ¿Mañana empiezo entonces?

-      Me parece genial – Sofí la abrazo – Nos vemos mañana entonces

-      Si, te llamo en la noche para que me digan bien cómo hacemos – nos abrazó – Las dejo seguir trabajando – antes de irse la detuve – Perdón por el cachetazo, estaba demasiado molesta

-      No te preocupes, sé que lo hiciste para hacerme entrar en razón – beso mi mejilla – Te amo hermanita

-      Y yo a vos – solté su mano, se fue y mire a Sofí – Gracias mi amor

-      No me agradezcas – me dio un beso cortito y volvimos a nuestras tareas

A las 4 pm Sofí se fue, yo trabaje un rato más y después me fui a buscar a mi cuñadito a la casa de su abuela.

Rosy me hizo entrar para que tomáramos un café, conversamos un rato. Ya eran casi las 8 pm cuando le dije a Santi que agarre su mochila para irnos a casa, obedeció y vino hacia mí un poco cabizbajo, nos despedimos de su abuela, lo hice subirse al asiento de atrás, abroche su cinturón de seguridad y luego me subí al auto, puse en marcha y tome el camino hacia casa. Por el espejo retrovisor lo veía, iba con un juguetito en la mano pero no jugaba, iba muy pensativo

-      ¿Qué pasa enano? – no respondió - ¿Algún problema en la escuela?

-      Rodrigo ya no quiere ser mi amigo – contesto con voz triste

-      ¿Por qué no quiere ser tu amigo? – detuve el auto y voltee a verlo

-      Porque mi Ñeña es tu novia – me quede impactada, no sabía que decirle – A mí me gusta que sea tu novia pero sus papas le dijeron que eso está mal

-      Me baje del auto, abrí la puerta de atrás, me subí y me senté a su lado – Santi, no tiene nada de malo que dos personas se amen – asintió con su cabecita – Cuando llegue tu Ñeña voy a hablar con ella para solucionar esto y que Rodri siga siendo tu amiguito ¿Si?

-      Pero yo no quiero que dejes de ser la novia de mi hermana – bese su frente – Ella es muy feliz desde que es tu novia

-      Vamos a casa a preparar la cena que Sofí va a venir con mucha hambre – sonrió, volví a mi lugar y seguí rumbo a nuestra casa

Una vez dentro climatice la temperatura de la casa con el aire acondicionado ya que afuera está haciendo bastante frio y nos pusimos a cocinar carne al horno con papas, puse música y mientras cocinábamos bailábamos, quería subirle el ánimo al pequeño y por suerte lo conseguí.

A las 10 pm llego Sofí y su hermanito corrió a sus brazos y la lleno de besos, me uni a ellos y salude a mi princesa con un beso cortito y fuimos a cenar. Al terminar Sofí llevo a dormir a Santi y yo lave los platos. Casi media hora después mi novia bajo y me abrazo

-      Me dijo Santi que queres hablar conmigo – asentí y beso mi mejilla – También me dijo que no quiere que nos separemos

-      Un compañerito no quiere ser más su amigo porque sus papas le dijeron que está mal que nosotras seamos pareja – resoplo – Mañana deberíamos hablar con ellos

-      ¿Por qué es tan complicada la gente? – bese su cuello – Si, mañana hablemos - puse mis manos en su cola – Amor tengo tarea para mañana – me separe de ella

-      Sí, claro mi amor – le sonreí – ¿Necesitas ayuda?

-      No mi amor, es algo rápido – me dio un beso

Me fui al sillón a mirar un rato televisión en lo que Sofí terminaba con su tarea, me sorprende lo entera que está, no para en todo el día entre el trabajo, la escuela, su hermano y yo. El reloj marco las 1 am y nos fuimos a dormir no sin antes mimarnos un rato.

Al otro día llevamos a Santi a la escuela, le preguntamos quienes eran los papas de su amigo, le dimos un beso cada una, entro a clases y nosotras fuimos hacia ellos toque el brazo del papá y el volteo

-      Disculpe, ¿Usted es el padre de Rodrigo? – asintió - ¿Podemos hablar con usted un momento?

-      Me miro con desprecio – Yo no tengo nada que hablar con ustedes dos….