Antiguos alumnos

ANTIGUOS ALUMNOS

Los antiguos compañeros del instituto, normalmente se solían reunir algunos años para recordar viejos tiempos. Lo hacían unos pocos que habían mantenido el contacto a lo largo del tiempo, pero esta vez quisieron ampliar y a su vez convocaron a los profesores y profesoras. Fueron bastantes exalumnos y alumnas, todos en la veintena larga y un par de profesoras.

Como una de ellas era de gimnasia y tenía las llaves del gimnasio y de los vestuarios pidió permiso para poder usar éstas instalaciones. Iban a jugar un partido de baloncesto mixto y más actividades. Aitor se apuntó para ir, tenía ganas de volver a ver a mucha gente. Para el partido se cambiaron como siempre en los vestuarios de chicos los chicos y en el de las chicas las chicas. Las dos profesoras en el de profesoras.

Empezó el partido y se vio que era una fiesta porque aparte de la técnica y la táctica se producían situaciones graciosas. Lo que sorprendió es un pequeño pique entre Aitor y Nerea, pero desde el punto de vista de la amistad. Aunque el pique acabó produciendo una tensión sexual alta y muy ardiente.

Falta----- pitó la árbitra.

Cómo que falta, pero si es ella que está metiéndome el culo cada vez que la intento marcar---- protestó Aitor con una sonrisa.

No será que eres tú el que me empujas con la polla---- respondió Nerea.

Técnica--- pitó la árbitra.

La árbitra fue donde los dos y les susurró sin que lo oyera nadie, como sigáis así os hago ducharos y cambiaros en mi vestuario. Nerea la retó diciéndola que no se atrevería. Pues lo vas a hacer por hablar es lo que la respondió la árbitro y Aitor no dijo nada porque no se aguantó la risa. Lo que no se dieron cuenta es que entre Yolanda y Mauro hacía tiempo que había saltado la chispa y de forma disimulada se metían mano en cada lance del partido.

El partido transcurrió entre risas y terminó. Todos se dirigieron al vestuario. Aitor y Nerea iban cada uno al vestuario de chicos y chicas, pero Itxaso les paró. Cuando se quedaron los últimos les dijo que a esos vestuarios no que al de ella. Se lo dijo de broma, pero ellos se miraron y la preguntaron si tenían permiso. Itxaso sorprendida que responder porque ella también se cambiaba en ese vestuario. Había tres duchas individuales y amplias y luego un pasillo lleno de duchas. Respondió afirmativamente.

Ellos pasaron por el vestuario común a recoger sus cosas y recibieron las mofas de sus compañeros y compañeras. Fueron y se situaron en los bancos frente a la ducha más amplia. Por la forma del vestuario los bancos para sentarse frente a las distintas duchas estaban independientes y los que estaban frente a la comunitaria no tenían por qué ver a los de las individuales y entre las individuales también podían cambiarse sin ver y ser vistas.

Menudo embolao nos ha metido la exprofa----- dijo Aitor, estaba deseando follar con Nerea pero no se atrevía a dar el paso.

Sí pero tú y yo hemos aceptado.------ respondió Nerea.

Aitor se había quitado la ropa de deporte y estaba sólo con el bóxer que se había recogido un poco y mostraba la polla un tanto morcillona. Nerea lo vio y se sonrió. Se quitó la camiseta y se bajó los pantalones de deporte. Estaba solo con el tanga. Se giró a dejar la ropa en el banco y Aitor pasó de estar morcillona la polla a estar dura como una piedra. Con agilidad se quitó el bóxer y entró en la ducha. Se puso de espaldas a la entrada para que Nerea no pudiera verle con la erección. Por la hora que era tenían mucho tiempo hasta la hora de la comida. Empezó a jabonarse, a la espalda llegaba malamente. Nerea había entrado. Se colocó a aproximadamente unos tres metros de e´. El agua era bastante caliente y generó una gran cantidad de vaho. Ellos se veían, pero no había mucha visibilidad. Nerea se acercó donde el otro hombre y con el jabón se lo vertió en la espalda y empezó a extenderlo. Él dio un respingo y giró la cabeza para recibir un suave y delicado beso en la boca de ella que luego añadió:

No te recordaba tan atractivo---- dijo Nerea.

Pues yo si recordaba que tenías un culo perfecto y no me he equivocado. Respondió Aitor.

Tú ahora déjame a mí y disfruta ----- dijo ella.

Nerea siguió jabonando hasta tener toda la espalda mojada. Lo empujó cariñosamente bajo el grifo, él quería poder tocarla y darse la vuelta, pero ella de manera cariñosa le pidió no hacerlo hasta que ella lo dijera. El agua fue aclarando los dos cuerpos. Nerea conforme la espalda dejaba de tener jabón fue descendiendo con la lengua por el sinuoso camino de la columna del joven hasta llegar a sus nalgas. Mordió las dos montañas y luego dirigió la lengua al desfiladero que acababa en el agujerito estrellado. Allí mojó con la lengua el agujerito e introdujo un poco la lengua para luego con un poco de gel e introducir la yema del dedo buscando la próstata que por su formación sanitaria no le costó demasiado.

Aitor sintió una punzada de placer inmenso. Ella con la mano izquierda llena de gel fue haciéndole una suave y muy lenta paja a la vez que con el índice de la derecha estimulaba la próstata, pero sólo quería llevarle a una tensión máxima en la polla. Lo logró con facilidad. Entonces se puso de pies y ahora sí lo hizo ponerse de pies y lo hizo sentarse con la espalda apoyada en la pared. Ahora ella se orinó en la cara y el cuerpo de él. Quiso Aitor protestar. Hace tiempo se hubiera enfadado, pero no supo por qué ahora eso le excitó muchísimo. Nerea así desnuda de pies y con ese pelo como la mala de Rocky IV estaba sumamente sexy.

Ella puso el pie en la boca del chico y luego se fue agachando poniéndole los pechos en la boca. El con la boca succionaba los pezones y los mordisqueaba y ella siguió con su camino hasta completamente mojada se sentó en la polla del chico.

Empezó a cabalgarlo. Primero un trote corto, luego un trote más largo. Le pareció ver que alguien había acudido a la entrada de las duchas, pero no vio a nadie. Era Nuria, la otra profesora de gimnasia. Les había escuchado. Más bien los gemidos de Nerea y había acudido. Todavía iba en braguitas. Introdujo su mano dentro de ellos. Primero recreó sus dedos en su vello púbico. Fue venciendo el tacto rudo de esto para atravesarlo y llegar a su vulva. Allí pasó el dedo varias veces sintiendo la humedad en sus dedos para luego introducir dos dedos y por fin frotar su clítoris. Lo hacía de forma ruda para a veces parar y volver haciéndolo suavemente. La postura se le hacía incómoda y entonces se sentó a la entrada y con las piernas completamente abiertas. El agua caliente le caía por la cara haciendo que el maquillaje se corriese y sus jadeos y que el vapor ya no era tan abundante hizo que Aitor la viera. El chico eso le excitó todavía más. Mucho más.

Nerea, al observarle distraído, miró hacia atrás y vio a la profesora masturbarse y entonces empezó a cabalgarle, pero quería mirar a la profesora entonces se levantó y se giró dándole a la espalda a él. Él la sujetaba ya que Nerea se colocaba ahora en cuclillas. Volvió a acompasar sus acometidas. Una de las veces que se levantó se le salió la polla del coño y aprovechó Aitor para empujarla y hacer que cayera hacia delante. Estaba con la cara sobre el suelo y el culo levantado. Aitor con el calentón no pensó en lubricantes y embistió como un toro, solo tuvo un poco de cuidado a la hora de meter el glande. Nerea con el calentón que llevaba no sintió dolor, solo una ligera molestia. La sodomizaba suave, fuerte, suave, fuerte. Nuria, todo el maquillaje corrido que le hacía parecer un cuadro, se deslizó y se tumbó boca arriba colocando las dos piernas a los lados de la cabeza de Nerea y la cogió de la cabeza haciendo que la comiera el coño.

No había preguntado si la chica era lesbiana ó como mínimo bisexual pero la chica no sólo se echó atrás, sino que aceptó el resto y adoraba el pubis, vulva con una gran gula. Aitor con la escena se ponía más y más bruto y en una de las embestidas Nerea quedó tumbada sobre el suelo boca abajo. Nuria no pudo aguantar más y tuvo un orgasmo que la conmovió y la hizo emocionarse. Nerea no tardó tampoco en correrse emitiendo un gutural sonido tan fuerte que hizo que Itxaso, a la otra profe viniera. Nerea al correrse apretó todos los músculos y apretó la verga de Aitor que al ver venir a Itxaso que también estaba desnuda estalló en una corrida que llenó el culo de Nerea de semen que al levantarse se le caía por los muslos justo cuando aparecieron Yolanda y Mauro que habían estado follando en otra de las duchas.

Itxaso también les vio llegar y se quedó flipada:

Veo que aquí folla todo el mundo menos yo. Ahora me toca a mí. Os propongo algo, queda tiempo hasta la comida. Los seis podemos jugar, las únicas reglas son que mando yo y que tiene que ser todos con todos. El que quiera que se quede y el que no que se marche.

Accedieron todos y todas. Itxaso alucinaba.

Veo que la temperatura está altísima.

Itxaso primero comprobó que no quedaba nadie en ningún vestuario. Primero los tapó los ojos a los exalumnos, dudó si tapar también a Nuria, pero al final no lo hizo. Los condujo hasta el gimnasio. Colocó el potro de tal forma que pudiera atar a los que quería de forma longitudinal. Entonces cogió a Aitor y con ayuda de Nuria le ató al potro inmovilizándolo completamente. Acercó completamente a Mauro. Cogió un poco de lubricante. La verdad ese día había llevado el bote porque había previsto intentar ligar con alguno ó alguna de sus exalumnos. Calculó la altura del culo de Aitor sobre la polla de Mauro. Cuando lo tuvo hizo que Nuria destapase los ojos de las dos mujeres. Con la mano derecha descapulló el glande de Mauro, con los dedos le hizo un suave masaje pausadamente. Luego cogió el tronco de la polla y lo fue acariciando arriba y abajo, abajo y arriba haciendo que se fuera endureciendo hasta que tuviera tanta tensión que pareciera que el glande fuera a reventar. Entonces lo colocó a la entrada del ano de Aitor y lo fue empujando. La entrada fue difícil y Aitor en cuanto notó que era la polla de Mauro la que pugnaba por entrar se excitó, pero le dolía y se quejaba, pero empezó a ronronear y a disfrutar. Su polla empezó a ponerse más dura. Luego se situó detrás de Mauro y cogió un guante de látex y vertió un poco de lubricante y lo extendió sobre todo en el culo de Mauro. Lo penetró al chico. Mauro la miró extrañada y empezó a recibir caricias de la profesora en su ano, alrededor del agujerito muy lento. Con la ligera presión que ejercía las yemas empezaban a invadir poco a poco su culo.

Luego entró un dedo para poder localizar la próstata y seguido metió un segundo dedo. Empezó a mover en círculos en la próstata. Mauro se iba poniendo a cien como un auténtico toro y se sujetaba de las caderas de Aitor. Nuria, por su parte, cogía la polla de Aitor y la iba masajeando y masturbando. Durante todo este proceso Nerea había besado a Yolanda. Las dos se besaban apasionadamente a la vez que se acariciaban hasta colocarse en un apasionado 69. Itxaso le había sacado los dedos a Mauro y fue al vestuario a por un strapon que llevaba en la bolsa. Volvió y penetró a Mauro acompasándose al chico.

Nuria lo había visto y le preguntó riéndose:

Jijijiiji. Capulla, tu tenías ya previsto esto ehhh.

No, pero quería ligarme a alguno ó alguna y si caían por eso lo traje.

Yolanda y Nerea comiéndose y lamiéndose con pasión. Las caricias no tenían tabúes. En un momento Nerea la cogió y la llevó bajo Aitor e hizo que se metiera entera la polla de Aitor en la boca que con la poca libertad que tenía la follaba la boca. Nerea por su parte se masturbaba sentada en el suelo completamente abierta de piernas y de forma desaforada. Nuria besaba a todos y los acariciaba cogiendo a Nerea del pelo para que la comiera el coño.

La temperatura fue subiendo de temperatura grado y grado y desatándose todo hasta que fueron estallando todos en un orgasmo, pero Itxaso que estaba controlando los de éstos. Soltó a Aitor y llevó a los dos chicos donde Yolanda y los pajeó como si no hubiera un mañana hasta que eyacularon sobre la cara de la chica. Quedaron todos exhaustos. El strapon de Itxaso llevaba un plug vibrador con lo que lo sujetaba dentro y que hizo que tuviera su orgasmo y  la excitación de sus vibraciones fueron las que llevaron a que perdiera el control de los movimientos de sus manos y que hicieron a los chicos correrse.

De seguido, fueron los seis a la ducha colectiva y allí aparte de ducharse fue una sucesión de besos y caricias que todavía alguna tuvo algún orgasmo más.