Ansiedad de tu cuerpo

Exposición del ansia que se apodera de mi cuerpo cuando pienso en ella y los momentos placenteros que hemos disfrutado juntos.

ANSIEDADES

Quiero hoy gozarte

entre las sombras,

siempre excitantes,

de regia alcoba,

los dos desnudos,

faltos de ropa,

como quien dice,

sólo en pelotas.

Besar ansioso

tu linda boca,

hasta ponerte

toda cachonda;

por tu garganta,

grácil y hermosa,

tierna, lamiendo,

por tu piel toda,

irá mi lengua

excitadora,

y por tu espalda,

de piel fogosa,

iré pasando

lenta mi boca,

llegando abajo

donde te adornan,

de tus dos nalgas,

las lindas formas;

cálidas nalgas,tibias, redondas,

a acariciarlas

invitadoras;

y yo, excitado,

hasta la bolas,

hundiré lúbrico

mi lengua ansiosa,

buscando el ano,

que es regia cosa,

para lamerle

toda su aureola,

hasta dejarla

muy bien ganosa,

ansiando verga

perforadora.

Yo, que me encanta

tener la rosa

te tu culito,

tibia y ansiosa,

bien, bien clavada

por mi vergota,

no pondré peros

si bien la aloja.

En lo profundo

de esa tu cola.

iré metiendo

mi verga sola,

poco a poquito,

hasta las bolas,

para dejarla

clavada toda

en tus entrañas,

tibias y ansiosas,

que irán chupando

todas las gotas

de leche tibia,

dulce y sabrosa,

que por los ductos

de mi vergota

se irán fugando,

lubricadoras.

¡Placer de reyes!

¡Miel de victoria!

De derramarse,

las ganas locas

llegarán pronto,

cuando, espasmódicas,

exploten fálicas,

fuentes ansiosas;

ríos de leche,

de semen olas,

bien rebosarse

te harán, la cola,

y poseída

de ansias ignotas,

querrás que leche,

mucha, se absorba,

sin derramarse

sola, una gota,

dejando secas

mis dos pelotas.

Yo, en el espasmo

de gratas cosas,

ansiando siempre

gozarlas todas,

daré mi verga,

chorreando goma,

pero de goces

todavía ansiosa,

queriendo, lúbrica,

clavar tus fosas,

que son calientes,

muy ardorosas,

ante el placer

que te vuelve loca.

Con jabón y agua,

que siempre borran

las huellas lácteas

de ricas jodas,

pondrán mi pene

en regia forma,

para meterla

pronto en tu boca,

y así, lamiéndola,

todita, toda,

ansiosamente,

siempre golosa,

podrás ponerla

como la adoras,

bien, bien parada,

bien, bien ganosa,

queriendo, rápida,

clavarse ansiosa

en tu coñito

que la soporta.

Con el deseo

que otra vez brota,

pues con tu magia

me la alborotas,

podré enterrártela

hasta las bolas,

en embestidas

cual más furiosas,

entrando aprisa,

saliendo toda.

Pronto el orgasmo

te hará dichosa,

y yo, en la magia

de estas horas,

gozaré al verte

venirte ansiosa.

Nuestras jodiendas,

¡qué deliciosas!

¡Oh, cómo adoro

tu tibia boca,

tu coño húmedo,

tu culo en forma,

tus ricas tetas

de oscura aureola

y pezoncitos

para mi boca!

Todas tus partes

son muy sabrosas,

¡cómo he gozado

con ellas todas!

Y más disfruto

cuando tú gozas

al ensartarte

mi verga ansiosa,

que extraña siempre

las gratas horas,

en que bien pudo

clavarte toda.

¡Oh!, cuanto ansío

tenerte a solas,

para gozarte

en todas formas;

muy productoras

mis dos pelotas,

vaciando leche

entre tus cosas,

en recordadas

lúbricas horas.

Y, es que las ganas

que a mí me brotan,

slo tú sabes

hacerlas pocas,

ya sea mamando

mi verga airosa,

o, recibiéndola

como dispongas.

Ahora que escribo

sobre estas cosas,

la verga férrea

se me alborota,

y se me inquieta,

se pone roja,

y quiere darse

a ti, en mil formas;

no quiere el clímax

que no conforma,

si no el disfrute

que al par se goza:

¡unión de espíritus

que se confortan!