Ángela y yo (1)

Me llamo Mariano, soy argentino y tengo 21 años. Aprovecho este momento para contarles cómo empezó mi historia con Ángela. En el principio de mi relación, hace ya 5 largos años, estaba por empezar el último año del secundario y Ángela, casi con 15 años, estaba en 2do año y esto debido a que repitió el año anterior.

Como ambos íbamos al mismo colegio, y yo era mayor, la ayudaba a veces con su tarea y nos veíamos muy seguido, ya sea en su casa como en la mía. Sabía que nuestras madres veían con buenos ojos que lo hiciéramos: Creo que notaban que lo que sentíamos era genuino y puro… Era porque ninguno veía apetecible al otro.

Conforme se acercaban nuestros cumpleaños, el de ella en mayo y el mío a fines de junio, nuestra relación se fue asentando: Tanto que íbamos a todos lados juntos, incluso solos a veces. Nos cuidábamos mutuamente, más yo a ella. Se notaba nuestra alegría a leguas, y muchos nos cargaban diciéndonos que éramos novios, cosa imposible por nuestra situación

Un día, 3 semanas antes de su cumpleaños, Ángela me avisa que le pasó algo hermoso: Un chico que ella quería le había propuesto salir… Y yo me alegré con ella.

Me pidió que, como hombre, le aconsejara cual vestido le quedaba mejor y le pregunté si quería que fuera a su casa en cuanto saliera del trabajo de medio tiempo que tenía, más o menos a las 8 de la noche. Me dijo que sí

Salí rapidísimo y llegué 10 minutos antes de la hora acordada. Ángela me hizo entrar: ¡¡¡Estaba hermosa!!! Tenía una camisita roja semi-transparente que dejaba ver un top y en una silla un sweater de pana… Además tenia un pantalón de corderoy, que hacia juego, por el color con la camisa y por la textura con el sweater.

Se puso el sweater y no pude menos que decirle que le quedaba bien. Me dijo que su mejor amiga había dicho lo mismo, sólo que desde una perspectiva femenina. La miraba extasiado, y creo que a ella le encantaba, porque sabia que el otro chico podría llegar a mirarla así.

Entonces empezamos a conversar… Le dije que todo le quedaba bien, especialmente el pantalón, que con cada pliegue remarcaba sus piernas y ni hablar su cola. Sólo se le notaban los senos si se quitaba el sweater, pero le comenté que la combinación le quedaba bien. Entonces salió corriendo y se puso lo que ella llamó su segunda opción y que yo llamaría la opción perfecta: Una campera ajustada, de tela de avión y con algodón adentro, de color bordó y con una raya azul en el medio. Pensaba ponerse un pull-up, eso me dijo, pero le dije que ya se le notaba bastante. Se pintó los labios de rojo oscuro y los ojos de violeta y se dispuso a salir…Eran las 9

Antes de irse me preguntó si quería quedarme a comer, esperando que regresara… Su intención era contarme lo que sucediera con el chico. Yo dudé: No me había cambiado en todo el día y ya me estaba cansando… Había sido un día de trabajo muy agitado… Aparte, mi madre no sabía que me quedaba

Le dije lo que pensaba y apareció su madre que había oído lo último y me dijo que todo era solucionable: Llamó a mi madre y le dijo que no iba a ir a comer, y que lo más probable era que me quedara a dormir… Me dijo que había aceptado y que quería decirme algo

Atendí, y me dijo que los de mi trabajo dijeron que el jefe decidió hacer una fumigación para el día siguiente y que su secretaria avisó después de irme: Eso quería decir que hasta el lunes no trabajaría… Me dijo que si quería quedarme el fin de semana que no habría problemas que ya habían quedado con la mamá de Ángela… Pero yo tenia una pregunta pendiente: "¿Y la ropa?". Me dijo que la traería el siguiente día a la mañana

Cuando Ángela se enteró saltaba en una pata… Me dio un beso y se despidió… Entonces su madre me hizo unos de los platos que generalmente comíamos los cuatro cuando nos reuníamos: Ravioles de ricota a los 4 quesos… Esperábamos que Ángela volviera a las 2 o 3 de la madrugada, pero tuvimos una sorpresa: ¡¡¡Llegó minutos después de medianoche!!!

Me miró, y se notaba que estuvo llorando. Dudó un momento y me abrazó con emoción… Miraba a su madre que estaba detrás de mí, me soltó y también la abrazó: Era claro lo que había sucedido… O la había plantado o no era lo que ella esperaba, yo me inclinaba por la primera

Estuvimos así un rato, y su madre, con la autoridad moral que tenía sobre su hija, le preguntó que había pasado… Entre lágrimas, y con bastante dificultad, fue diciendo… En conclusión, yo tenía razón… Lo que más le desagradaba era que ella llamó a su casa, y él estaba… Y le dijo que había cambiado de opinión, luego de haberle dicho que también él estaba enamorado y que nunca la dejaría

Le pedí permiso a su madre para opinar y, como accedió, dije que el chico podía haber hecho eso para que no lo moleste más o como una broma. Le conté de miles de ocasiones en que mis amigos me dijeron que haga eso o en que me forzaron a encarar a una chica, pero tengo mi tabla salvadora: Siempre digo si les gustaría que un grupo de chicas haga lo mismo con alguno. O sea, nunca lo hice, pero que se da, se da… Sea como sea, no te conviene: O es manejable o un sinvergüenza… Y la madre opinó igual

Dadas las circunstancias, Ángela se quedó conmigo y no quiso hablar del tema… Ella y yo nos quedamos arreglando la cocina: Lavamos, y limpiamos, porque había restos de lo que comí… Luego, más o menos a la 1 y media, dijo que quería quedarse unos 30 minutos más

Me dijo que fuéramos a la antigua cama de sus padres, que rara vez se usa… "Como hoy estoy deprimida", me dijo, "quiero estar en un lugar similar…". A lo que le respondí: "No digas eso, que el tipo ese no se lo merece… Estás triste, pero no estás sola…"; entonces dijo que era cierto, que me tenía a mí, que siempre estoy, en lo malo y en lo bueno. Y entonces, en broma, le dije: "No lo digas muy seguido que lo que dicen en el colegio puede ser verdad…" Y sonrió, diciendo que tengo una cualidad muy buena: "Sos de elevarle los ánimos a cualquiera, desde familiares a amigos…".

Y ahí me dijo: "¿Te animas a dormir conmigo? Mira que si veo que te excitas, te saco a patadas… Sabes que te quiero como a un amigo…" Yo me animé… Estaba tan cansando que me dormí enseguida y me desperté a las 10 y media, viendo que estaba solo… La macana es que estaba bien excitado, así que abrí un poco la puerta y pegué un grito: "¿Puedo irme a bañar?" Oigo la voz de la madre de Ángela que me dice que sí y que me avisa que mi madre ya trajo mi ropa… Entonces fui y me bañé

Al salir veo a Ángela en el cuarto y con ropa deportiva: Top, remera, y campera con capucha, un mini short, calzas, medias y zapatillas. Estaba que rajaba la tierra: Sus senos bien parados, su ano redondito y bien marcado, gracias al short y a que, suponía, tenia un cola-less abajo; además, los muslos quedaban muy lindos con sus respectivas calzas, y la separación entre medias y calzas dejaban ver unas piernas delgadas pero atléticas… En definitiva, exponían en su máxima expresión el cuerpo de una chica hermosa por donde se la mirara

Se lo hice notar, diciendo, un poco en broma: "Si sigues apareciendo así, lo de la amistad se va a ir al demonio…" Ella me sonríe y jugando se me pone encima y se refriega un poco contra mi cuerpo. Luego me dice: "Veo que estas algo excitado…"

Entonces le cuento que me desperté un poco excitado, y fui a bañarme… "¿Acaso oíste, sinvergüenza?" Asintió con su cabeza y me dijo: "Pero no sabia lo otro". Se la veía juguetona, y le pregunté: "¿Y lo de la amistad?" Me dijo que seguía en pie, que solo estaba jugando y le dije, no sin malicia, que el que juega con fuego, se quema…Y se dio cuenta que tenia razón, que con ciertas cosas no se juega. Pero el daño ya lo hizo: Me pasé el día buscando cómo volver a verla como antes… Era inútil: Me la imaginaba como cuando esa mañana

A la noche, estaba casi decidido a irme a casa. Así les dije… Me preguntaron porque cambié tan rápido de opinión y les dije que no fue así, que lo estuve meditando todo el día y que era porque necesitaba hacer algunas cosas del trabajo para el lunes y no quería empezar mañana porque no sabía si terminaría… Y que sólo en mi computadora tenía el equipo para abrir los archivos

Se resignaron y me fui a casa… Llegué a las 8 de la noche y me puse a terminar … A las 12 y media terminé con todo y entonces salí a un pub que Ángela no conocía y tuve la suerte de estar con una chica… Quedé para el viernes siguiente, que era el día en que generalmente salía con Ángela. Pero hubo cambios: A media semana, ella canceló y, aparte, yo ya no estaba tan seguro… Empezaba a extrañar las charlas con Ángela

Ella volvió a ser la misma de siempre y me dije: "¡Qué va! Ella te cae bien…¿Por qué dejar de verla?". O sea, lo tomé con naturalidad y para el sábado ya estaba todo como antes… El sábado siguiente, algo pasó que me hizo ver cuan equivocado estaba… Ella estaba con otro chico hablando, y cuando volvió la cargué diciendo: "Parece que tenemos un amigo nuevo…"

El viernes cumplía y el jueves le dije: "¿Puedes verme hoy a las 8?". Y ella dijo que sí… En esa ocasión estuvimos muy divertidos, y en un momento le digo: "Salgamos a caminar, ¿sí?". Ahí le conté que sentía algo por ella y que me preocupaba ese hecho: No quería que nos lastimáramos. Ella dijo que a ella le pasaba igual, ya que ella del día que jugó conmigo no pudo sentirse bien, menos cuando yo me fui… Dije: "No te puedo pedir que salgas conmigo, porque nuestras madres creen que no hay nada entre nosotros… Y sería difícil si lo ocultamos"

Hubo un silencio muy largo, y luego Ángela que dice si estaba seguro, y le respondí que sí, que había tenido una salida anterior así y salió muy mal y que, aparte, lo nuestro ya me da miedo por otra cosa: "Ya sabes que nuestras madres ven con malos ojos que salgamos con personas que no tienen nuestra edad… Pensá que no vamos al mismo año…" Entonces, Ángela me dice que igual sería complicado ignorar nuestros sentimientos, que nada sería igual… Y no pude dejar de coincidir

Entonces, nos dimos cuenta que cualquier decisión iba a traer consecuencias… Pero debíamos decidirnos, ya que el día siguiente habría gente conocida y ambos tendríamos que estar tranquilos. Ella me miró y me dijo: "A mí no se me ocurre nada…". Y respondí: "Las veces que dejé de hacer algo, no podía olvidarme; si nos besamos y todo es espectacular, también pasa igual. En definitiva, tienes que parecerme horrenda…". Me preguntó cómo hacerlo e hizo como yo le aconsejé… Veríamos si en la fiesta podía soportarla… Sabía que se vestiría de forma encantadora

La organización de las mesas, cada una con 8 sillas, era así: En su mesa, estaba su mamá, su tía y su tío, los dos tíos y su tía por parte de padre y su abuela materna; en la segunda, mi madre y las amigas de su madre; en la mía, sus 7 primos… También había 3 mesas, llenas de amigos y amigas, algunos eran del colegio

Me pareció muy bueno que no la viera con ojos de amante, y me decía que lo mejor era no pensar más en eso… Lo lindo era que estábamos todos entretenidos: De hecho, todos nos conocíamos… Incluso bailamos el vals y no pasó nada… A lo último, me contó que quería bailar conmigo de nuevo: Era el turno de los jóvenes

Bailamos dance, lo que más nos gustaba, y ritmos brasileños y, luego, cuando todo estaba terminando, hubo una seguidilla de temas lentos… Allí bailó con uno de sus amigos: Los celos que me agarraron al verlos bien agarrados apenas los pude controlar. Terminó y yo le miré de forma tal que sólo ella me viera… Entonces, ella se acercó al baño de hombres, el cual quedaba oculto al salón: Era obvio que quería hablarme

Me dirigí allí y le dije lo que me pasaba y ella me dijo que no aguantaba más. Quedamos en hablarles a nuestras madres para ver si, después de la fiesta, yo podía ir a su casa… No hubo problemas

En cuanto llegamos, su madre se fue a dormir y nosotros fuimos al cuarto de la vez que jugamos… Ángela se durmió y yo, apenas conteniéndome, viendo lo lindo que era su cuerpo, le di la espalda

Tan excitado estaba que tuve un sueño con ella, en el que pasaba de todo… Me desperté y vi que estábamos enredados: Yo casi estaba encima de ella… Y lo peor era que estaba con mi pene erecto

Como me moví, Ángela se despertó… Me mira de una forma extraña y, luego, percatándose de mi perplejidad, mira hacia abajo, y dice: "Parece que ambos estamos excitados…". Y yo contesto: "Parece que mi sueño fue el culpable…"

Nos quedamos hablando y llegamos a la conclusión que era así: Yo tuve el sueño por lo que pasó antes y como ella estaba que no daba más, al más mínimo roce se empezó a excitar, más si yo estaba excitándome también… "Debo haberte rozado con mi pene mientras soñaba y eso nos excitó a ambos: Mi sueño tomó la realidad para hacerse más intenso, con lo que generó mas excitación en la realidad…", eso fue lo que dije.

Pero Ángela no sabía con quién soñé, y lo quiso saber… "No te puedo decir", fue mi respuesta. Y ella insistió: "¿Fui yo?". Y yo, atrapado, volví a decir lo mismo… Sabiendo mi secreto, me dijo el suyo: "Pues bien, con tu sueño, me hiciste tener un orgasmo… Fíjate en las sábanas… Me hiciste acabar…" Eso era un problema mayúsculo para ambos…Pero, como estábamos excitados, le agregamos otro

Estaba feliz, y me decía que Ángela se había excitado conmigo. Y entonces le pregunté: "¿Quieres que te mime?". Y ella, sonriendo, me dijo que sí

Y, entonces, la empecé a besar, mientras con mis manos le masajeaba los senos y los glúteos, sin tocar la piel de los primeros: Lo lindo era que ella me tocaba la comisura entre mis testículos, lo cual me ponía como loco… Eso me ponía el miembro aún más duro… Entonces, la cuestión era si ella quería que le frote el pubis con mi miembro, todo con la ropa puesta… Se lo pregunté y accedió

Mientras lo hacía, la seguía masajeando de tal forma que empezó a gemir… Saqué las manos inmediatamente de sus pechos, las puse en sus glúteos, y le puse la lengua en su boca, lo cual la hizo parar… Entonces le dije: "¿Sos idiota? Está tu madre durmiendo… Si se despierta y nos ve así, estamos fritos…" Comprendiendo que era aconsejable el silencio, me preguntó: "¿Vos sabés como hacerlo sin tanto ruido?". Asentí con la cabeza

Volví a hacerlo, mientras con movimientos por sobre su top, y hacia los costados, iba excitándola más y más, tanto que cuando se cayó su top, gracias a que lo desprendí, ella no dijo nada

Fui bajando hacia su cola, y al llegar, de la excitación que tenía, volvió a gemir, y otra vez le tuve que meter la lengua bien adentro de su boca, lo cual hizo que temblara un poco

Gracias a que un amigo me contó que hacía para que no se moviera una chica, pude hacer que no temblara: Manos en la cola, apuntando a la cintura, cuerpos bien apretados, rodillas al lado del muslo y piernas abiertas para ceñir las de ella, todo esto mientras la besaba

La fui besando con aún más intensidad y profundidad, y ella apenas podía contenerse, hasta que le ofrecí mi dedo gordo: Estaba pensando en acostumbrarla para que quisiera hacer sexo oral… Imagínense: Ella aceptó de una

Me ponía de la nuca verla así: Comiendo entero mi dedo, mientras con mi lengua jugaba con sus pezones y con mi mano libre o le masajeaba los glúteos o tocaba su pubis… Tenía unas ganas tremendas de quitarle lo que tenía abajo

Dejándole mi dedo en la boca, fui bajando hacia su pubis mientras jugaba con su ano…Estaba tan excitada que no decía nada… Jugué hasta que me decidí: Entonces, le quité el mini short y corrí su cola-less

¡¡¡¡La sorpresa que me llevé!!!! Era virgen… Le pregunté y me dijo que estaba esperando a alguien que la entendiera… Y agregó: "Y parece que eres tú, mi amor". Eso me elevó aún más

Luego de eso, le empecé a pasar la punta de la lengua por el borde de su clítoris y por miedo a que gimiera seguí dejándole el dedo en su boca. Mientras lo hacía, ella tan excitada que hacía movimientos circulares con él, vi que movía su mano izquierda

Paré y me dijo que notaba que no me había mimado: Me di cuenta que quería sexo oral, dada su actitud… Me acosté e hice que su cabeza cayera sobre mi zona erógena

Ella estaba tan divertida, además de excitada, que se metía mi miembro bien adentro, apenas aguantando lo grande que era… Para no quedarse sin aire, paraba un poco y me sonreía, para luego volver… En ese ínterin logré quitarle el cola-less sin que ella protestara

Tanto me gustaba que empecé a decirle piropos, tales como: "Mamita, no te imaginas lo feliz que me haces", "Nunca me sentí igual con otra chica", o "Sos tan madura que, con tu edad, pareces una experta… Nunca te dejaré, mi angelito". Mientras, ella hacía otro tanto

Entonces vino lo mejor. Cómo no quería dejarla sin nada, empecé a girar… En definitiva, llegué a lo que yo quería: Excitarla lamiendo su clítoris así tragaba toda mi verga… Con la excitación que ella tenía, lo logré

Pasaron los minutos, y cómo iba aumentando mi excitación, noté que me estaba viniendo… Entonces le avisé… Unos minutos más y ya estaba por salir

Cómo no quería llenarle la boca, le dije: "Como te respeto, no pienso ni penetrarte, dada tu virginidad, ni llenarte la boca de semen. Y te pregunto si lo puedo hacer en tus senos". Ángela, tan excitada estaba, me lo dejó hacer… Cuando terminó, vimos que ella había acabado numerosas veces

Así empezó mi historia con ella, pero continuará aún mejor… Si quieren, en otra ocasión se los cuento