Anabel-4

Continúan las experiencias sexuales de Anabel

ANABEL, Cuarta Parte

Como ya he dicho anteriormente, nuestra vida sexual era abundante, amplia y abierta. Ademas de la que teníamos como pareja estable, cada cual tenia libertad en ese sentido para hacer lo que le apeteciera, siempre que se dijera o comentara antes o después del hecho con la pareja. Teníamos ademas amigos que compartían esta forma de pensar, con los que hacíamos juegos, reuniones, tríos e intercambios de pareja entre otras muchas cosas. Todo esto había empezado un fin de semana en casa de unos amigos donde nos juntamos tres parejas para charlar y tomar unas cervezas. Pero entre las copas, las indirectas, las insinuaciones y que a alguien se le ocurrió jugar a un juego erótico, en el que cada perdedor se quitaba una prenda de ropa, la cosa fue subiendo de tono y acabamos todos en pelotas, con bastante alcohol en el cuerpo, cachondos perdidos y con ganas de “fiesta”.

Así pues, el juego siguió y subió de tono, con una apuesta para ver si eramos capaces de  meter unos papelitos con el nombre de las chicas en una bolsa y el de los chicos en otra, de tal forma, que el que ganara la partida, metería la mano en la bolsa contraria y cogería un papel para echar un polvo con la persona que le hubiera tocado en suerte, con la única condición de que tenia que hacerlo allí mismo, delante de los otros cuatro. Y así lo hicimos. Gano mi pareja, Miguel, y le toco hacerlo con Sonia, la anfitriona de la casa. Al ver el nombre del papel, los dos se miraron y miraron a sus respectivas parejas, y encogiéndose de hombros con una sonrisa picarona, ambos se acercaron y empezaron a besarse y a toquetearse, sin mas preámbulos, ante las miradas del resto. Miguel sin cortarse un pelo, empezó a tocarle las tetas y a chuparle los pezones a Sonia, mientras llevaba la otra mano hacia su coño, y empezaba a acariciárle el clítoris y la suavísima, húmeda y cálida rajita, arrancándole con ello los primeros gemidos de placer. Ella entonces cogió con deseo, aunque algo tímida y nerviosa aún, su polla dura y gorda y comenzó a  acariciarla y moverla con verdadero deleite y placer.

Después de un buen rato acariciándose mutuamente, y ya calientes y jadeantes como perros en celo, ella tomo la iniciativa, y agachándose delante de el, cogió la polla con sus manos, la miro con profundo deseo mientras se pasaba la lengua por los labios, miro a su marido,  la llevo hacia su boca lentamente, y empezó a chupársela muy suavemente, metiéndosela poco a poco toda entera hasta los huevos, haciendo gemir de placer a Miguel con tan deliciosa y experta mamada, y todo ello sin dejar de mirar a su marido, que la observaba atentamente sin perder detalle, con los ojos muy abiertos entre sorprendido y excitado. Después, empezó a chupársela con ansia y deseo como una verdadera puta, haciendo que Miguel jadeara cada vez con mas intensidad.  Al rato, y cuando ya estaba a punto de correrse, el la detuvo, se la saco de su boca, la tumbo en el sofá, le abrió  bien las piernas, y se puso a comerle el coño con verdadero deleite y de forma magistral, a lo que ella respondía con fuertes jadeos y gritos de placer mientras su cuerpo se enervaba y retorcía sin parar. Los demás estábamos mirándolos sin quitar ojo, y poniéndonos al rojo vivo ante aquella provocadora y sensual escena. Yo ya estaba cachonda perdida, con el coño chorreando y con unas ganas de macho y de polla que me moría. Así que sin pensármelo ni un momento, le cogí la polla  a Luis, el marido de Ester que estaba junto a mi, que me miro algo sorprendido, pero se dejo hacer, mientras su mujer al verme, hacia lo mismo con el marido de Sonia, que no dejaba de mirar como  Miguel hacía gozar y delirar de placer a su mujer. Miguel y Sonia, jadeaban ya como animales, y ella, con la comida de coño que le estaba haciendo Miguel, y sin poder aguantar ni un segundo mas, se corrió copiosamente en su boca inundándolo por completo, mientras se retorcía y chillaba como una zorra, ante la atenta mirada de su absorto y sorprendido marido. Entonces Miguel sin darle tregua, la abrió aún mas de piernas, se coloco entre ellas y le clavo su enorme y dura polla en el coño, metiéndosela hasta el fondo. Empezó entonces a follarla embistiéndole con fuerza, mientras ella, seguía jadeando y gimiendo como una puta y, completamente ida, le pedía a gritos que la follara y que le diera fuerte, mas fuerte, mucho mas fuerte, a la vez que miraba a su marido con los ojos desorbitados,  la boca completamente abierta y las manos crispadas agarradas con fuerza al sofá, presa del inmenso placer que Miguel le estaba haciendo sentir. Yo me puse a comerle la polla a Luis, que de inmediato empezó a gemir, mientras su mujer, Ester, se entregaba a Juan, el anfitrión y marido de Sonia, y empezaba a chuparle la polla con verdaderas ganas. Juan mirando incrédulo aún a su mujer, al sentir la suave y cálida boca de Ester chupándole la polla de aquella manera, comenzó a jadear a su vez, olvidándose en ese instante por completo de su mujer. Y en un momento estábamos todos liados, pero nadie con su propia pareja. Y aunque cada cual miraba disimuladamente  a su pareja de vez en cuando, viendo como la follaban y como disfrutaba en manos de otra persona, eso parecía de algún modo disparar  la lujuria, haciendo que cada cual se entregara con mayor ímpetu y deseo a los placeres con su ocasional pareja.

La habitación se lleno de continuos jadeos, gritos y gemidos por el placer y las sucesivas corridas de unos y otras. El primero en terminar fue Miguel, que jadeando como una bestia, se corrió abundantemente en el ardiente coño de Sonia, que chillaba y se removía sin  parar, llenándoselo de leche por completo. Juan estaba ahora follándose a conciencia a Ester, que le abría las piernas de par en par para que su polla le entrara hasta el fondo, y chillaba y gemía con fuerza pidiéndole mas y mas y mas, y así estuvo un buen rato follándola y disfrutando de aquel lujurioso coño, hasta que estuvo a punto de correrse, y entonces paro, saco su polla del coño de Ester, se fue con ella hacia su boca y le dijo que se la chupara. Y Ester la cogió con su mano, y empezó a chupársela haciendo jadear de nuevo a Juan, que momentos después empezó a temblar y a gemir con fuerza y a decirle a Ester  que siguiera, que siguiera y  que no parara. Y entonces dió un fuerte gemido de placer y empezó a correrse en la boca de Ester, que abrió sorprendida los ojos ante la gran cantidad de leche que empezó a llenar a chorros su boca y su garganta, mientras el le sujetaba la cabeza, y ella intentaba tragar y tragar toda la leche que le estaban echando. Tanta era que se le derramaba parte de ella por las comisuras de los labios cayéndole sobre sus hermosas tetas, pero se trago casi toda la enorme corrida de Juan, y cuando el termino de correrse, la muy guarra siguió chupándosela suavemente un rato, después la saco y la miro lujuriosa, mientras recorría con la lengua sus labios buscando los restos de leche que allí pudiera quedar, pasándosela después por la punta de su palpitante polla para recogerle la ultima gota, que se trago con deleite y lujuria recreándose en ello, ante la ahora atenta mirada del Sonia, la mujer de Juan. Y en ese preciso instante fue cuando Luis, que me follaba como un semental, dándome polla de una manera increíble y haciéndome gozar como una zorra, empezó a jadear como un animal entre mis piernas, y yo a notar como sus embestidas se hacían mas rápidas, fuertes y profundas, a la vez que su enorme y dura polla empezó a palpitar con fuerza dentro de mi, mientras lanzaba en lo mas profundo de mi ardiente coño, chorros y chorros de leche caliente y cremosa, que me produjeron un inmenso placer haciéndome tocar el cielo con las manos, mientras me llenaba por completo el muy cabrón.

Estuvimos follando como locos toda la tarde, y aquello fue el comienzo de una amistad distinta y diferente. Fue el comienzo de un grupo, que después aumento con unas cuantas parejas mas, y en el que hacíamos con frecuencia reuniones, tomábamos copas y organizábamos fines de semana en los que el sexo en grupo, los juegos sexuales y los intercambios de pareja eran lo habitual. Fue el comienzo de una nueva etapa, que a mi personalmente me gusto mucho y disfrute enormemente, aunque también he de decir, que con el tiempo, parte de aquellas parejas se rompieron, e incluso alguna cambio a la que tenia, por otra del mismo grupo. No se si las relaciones que tuvimos tuvieron algo que ver en todo ello, lo que si tengo claro es que para estos juegos hay que tener las ideas muy claras para que no te afecten negativamente a posterióri, y aún así no hay garantías de ello. A mi personalmente no me afectaron y seguí con mi pareja, pero imagino que es por el tipo de relación que tenemos. A continuación os relato uno de estos fines de semana.

Acordamos salir juntos en un puente festivo de cuatro días, y previamente estuvimos buscando un lugar adecuado, localizando finalmente una cabaña grande de madera en la montaña, que aunque no era barata, al repartir los gastos entre las cuatro parejas que íbamos a ir, nos resulto aceptable. La cabaña estaba situada en la sierra en un claro de un bosque de pinos, al que se llegaba a través de una larga pista forestal de tierra, y estaba completamente apartada de todo, ya que la zona habitada mas cercana estaba a mas de 30 kilómetros de allí. La cabaña era toda de madera y tenia dos plantas y un porche en la entrada, por el que se accedía a un enorme salón con chimenea, ante la cual había una gran alfombra y un par de sofás muy cómodos con una mesa baja de madera delante de ellos. Algo mas atrás había una mesa grande, también de madera para seis u ocho comensales, y en otra zona, un par de sillones y otro sofá junto a una estantería con libros. También estaba situada en esa planta la cocina, una especie de despensa y un servicio. Y en la parte superior había cuatro dormitorios bastante amplios y con unas vistas impresionantes, y otro baño. Vamos lo que se dice una verdadera maravilla. Ademas de la enorme chimenea,  la cabaña tenia calefacción en todas las habitaciones ya que estaba situada a bastante altura y solía estar nevada la zona una buena parte del año, de hecho ahora lo estaba, lo cual aumentaba considerablemente la belleza del paisaje.

Salimos de la ciudad por la mañana temprano, optamos por llevarnos solo dos coches tipo todoterreno, por el lugar en el que estaba situada la cabaña. Íbamos cuatro parejas, Miguel y yo, Sonia y Juan, Ester y Luis y Lina y Julio, ya que otra pareja que quería venir al final no pudo. Llevábamos los coches bastante cargados, pues eran cuatro días y ocho personas y sin ningún lugar donde poder comprar cercano al lugar donde íbamos a estar. Hacía un día esplendido, con un sol radiante. Tardamos casi tres horas en llegar al lugar, y los últimos kilómetros sobre nieve desde poco después de dejar la carretera asfaltada, pero la verdad es que el paisaje se lo merecía todo. Al llegar a la explanada donde estaba situada la cabaña y verla por primera vez, todos lanzamos una exclamación...era preciosa. Aparcamos delante de la cabaña, Miguel fue a abrir la puerta y el resto nos pusimos a acarrear todo lo que llevábamos. Nada mas entrar nos quedamos impresionados, así que dejamos las cosas en el suelo y nos pusimos a ver toda la casa, después y sumamente contentos nos pusimos a ordenarlo todo, encender el frigorífico, la calefacción y la enorme chimenea, ya que hacia bastante fresquito debido a la nieve y a la altura a la que estábamos. Si el salón era bonito, con la chimenea encendida era una verdadera delicia, ahora ya no nos parecía tan caro el precio.

Dedicamos lo que restaba de la mañana a dar un paseo  y ver los alrededores, para después tomarnos unas cervezas al regresar, sintiendo ya el efecto cálido de la chimenea y la calefacción en la casa nada mas entrar. Se estaba en la mismísima gloria. Comimos en la mesa grande del salón entre risas y bromas, y después  nos tomamos un café y unas copitas junto a la chimenea mientras la tarde comenzaba a caer con una puesta de sol idílica y maravillosa. Y entonces empezamos a hablar de que íbamos a hacer, a lo que alguien sugirió hacer un video porno de todos en el salón, haciendo previamente un sorteo de parejas, pero para que no cayera nadie con la suya propia. Así lo hicimos con el resultado siguiente: A mi me toco con Julio, A mi pareja Miguel le toco con Ester, a Juan con Lina y a Luis con Sonia. Pusimos a grabar una cámara desde una zona alta para que se viera todo bien, aunque cada cual podría cogerla para grabar algo desde cerca si quería, y decidimos que las chicas se desnudarían cada una delante del que le había tocado haciéndole un estriptis lo mas provocador posible. Y después serian los chicos los que harían lo mismo para ellas. La gente se descoco con aquello, y se vieron movimientos, gestos y escenas verdaderamente excitantes y provocadores, poniéndose todo el personal cachondo perdido, tanto que hubo gente que ni espero a los demás para liarse, y eso fue lo que le paso a Sonia con Luis, ya que este no se pudo aguantar ante los movimientos y provocaciones lujuriosas de Sonia, por lo que rápidamente se desvistió y se fue en busca de ella, empezando a besarla desesperado mientras con sus manos buscaba impaciente sus tetas y su coño, ante la sonrisa de ella y el resto que le decían...Joderrrrrrr  Sonia como lo has puesto al pobre, madre mía, eres toda una experta.

Los demás seguimos con el juego mientras Luis se empleaba a fondo con Sonia, que ya en lugar de sonreír empezaba a jadear ante las caricias de Luis, y al cogerle esta su polla dura y restregársela entre los labios de su propio coño, hizo que Luis soltara unos tremendos gemidos de placer con ello. Por fin terminamos los demás y cada cual empezó con lo suyo, unos estábamos en los sofás y otros sobre la alfombra, pero todos disfrutando de lo lindo. Yo empece a comerle la polla a Julio de rodillas sobre la alfombra junto a la chimenea. Tenia una polla grande, gorda y dura como  una piedra, y el muy cabrón se retorcía y jadeaba con mi mamada, no quise que se corriera y la saque de mi boca cuando ya lo veía venir, pero yo estaba hambrienta y no quería que el se apagara tan rápido si se corría, el lo entendió perfectamente y me tumbo sobre la alfombra para ponerse a comerme el coño que lo tenia ardiendo y babeando, y joderrrrrrrrrr que bien me lo comía, me hizo gemir desde el principio, me volvia completamente loca...Ahhhhhhhh cabrón que bien me lo comes, siiiiiiii asiiiiiiii siiii  sigueeeee ayyyyyyyy Diossssssss que gusto me das. Siiiiiiiiiii, siiiiiiiiii sigueeeee sigueee asiiiiiiiiiii. Sonia y Luis nos llevaban ventaja, y los muy cabrones ya follaban como locos en uno de los sofás. Luis le daba polla a Sonia con unas embestidas tremendas, se la metía con tal fuerza que a ella se le movía todo el cuerpo y muy especialmente sus hermosas tetas que le bamboleaban sin parar. Ella disfrutaba  con cada embestida, y ponía los ojos en blanco muriéndose de gusto la muy puta mientras le decía. Siiiiiiiii asiiiiiiii dame polla siiiii asiiiii dame, dame, dame fuerte, mas fuerte, asiiiiiiii revientame el coño cabrón asiiiiiiiii siiiiiiiii. Diossssss que bien me follas, siiiiiiiii dame, dame, dame mas, no pares Ahhhhggghhhh Siiiiiiiiiiiiiii Diosssssssssss. Por su parte Ester le comía la polla a Miguel, mi pareja, haciéndole volar de puro gusto junto a nosotros. Ahhhhggghhh que bien me la comes joderrrrrrrr, no pares, sigueeeee, siiiiii, sigueeeeee asiiii zorra asiiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiiiiii. Y en el otro sofá Juan se estaba follando por detrás a Lina que estaba a cuatro patas, y cogiéndola por las caderas se la clavaba con fuerza metiéndosela hasta los huevos mientras le deciá...Ummmmmmm que coño mas rico tienes, siiiiiiiii me gusta, me gusta muuuuucho siiiiiii tomaaaa, toma polla, asiiiiiiiii bien fuerte, tomaaaaaa, ahhhhhggggg Diosssss que gusto, Y ella le decía a su vez..Siiiiiii dameeee, dame, dame fuerte, asiiiiiiiiii dame ese pedazo de pollaaa siiiiiii asiiiiiii sigue, sigue asiiiiiiiiii, fóllame, mass, quiero mass, no pares, siiii dameeeeeeee, dameeeee, dameeeeee.  Tomaaa tomaaaaa tomaaaaaaa ahggghhhhhhh me corroooooo si me corroooo ahhghhhhhhhh toma puta, tomaaaaaa ahhggghhhh, ….Siiiiiiiiiiii correteeee, correte en mi, en mi coño asiiiiiii echamela toda, todaaaaaaa asiiiiiii siiiiiiiiii Ahhhhgghhhg me corrooooo, siiiiii me corrooooo yo también ahhhgghhh cabrón siiiiiiiiiiiiiii. Después de correrse Juan en el coño de Lina llenándoselo de leche hasta hacérselo chorrear por los muslos, y mientras seguían jadeando y gimiendo como obsesos, Luis empezó a gritar como una bestia mientras le empujaba clavándole con fuerza la polla a Sonia  que se  corría con el mientras recibía toda la leche que la enorme polla de Luis le estaba echando, Ahhhhhhhhgggggg me corrooooooo siiiiiii me corrrooooo tomaaaaaaa ahhhgghhh tomaaaa, tomaaaaaaaa.  Siiiiiiiiii damela, echamela toda, la quiero toda en mi coño, siiiiiiiii  asiiiiiiiiiiiii ahhhhgghhhhh me corroooooo cabrónn siiiiiii me corrooooooooooooo ahgggghhhh. Luis se quedo clavado en Sonia con el cuerpo y la polla temblando y jadeando como un animal con la respiración entrecortada, mientras ella jadeante también, lo abrazaba y le decía que se quedara ahí y no se la sacara.  Yo después de haberme corrido con la comida de coño que me hizo Julio, necesitaba que una buena polla, como la suya, me follara bien el coño, y eso es lo que estaba haciendo Julio con bastante maestría en ese momento con su  tremenda polla, y joder como la sentía dentro de mi chochito, bien apretada y gustosa y haciéndome jadear como a una perra.  Asiiiiiiiiiii cabrón asiiiiiii dame fuerte, asiiiii, dame polla, dame ese pedazo de polla siiiiiiiiiiiii revientame cabrón, asiiiiiiiiiii, Joderrrrrrrr como me gusta, siiiiiiiiiiiiiiiii follameeeeeeee asiiiiiiiiiiii siiiiiiiii, Y Julio que ya no aguantaba mas, se corría en todo mi coño a chorros….. Aggghhhhhggg me corrooooo, siiiiiiiii tomaaaaaaaa, tomaaaaaaa, tomaaaaaa, ahgggghhhhghghhhgh, siiiiiiiiiiiiiiiii, asiiiiiiiii ahhhhggggghhhh. Se me dejo caer encima con su gorda polla palpitando y clavada a fondo en mi coño, mientras me soltaba lo que le quedaba de leche, y se quedo allí jadeando echado sobre mis tetas, y yo muerta de gusto por aquella enorme corrida y  seguir sintiendo su polla dentro de mi. Momentos después, fue Miguel el que se corría en el hermoso y agradecido coño de Ester, aguanto mucho el muy cabrón, para gusto y placer de ella, que se corrió un rato antes, y lo volvía a hacer ahora de nuevo con el. Ayyyyyyyy que me corrooooooo otra vez, Joderrrrrrrrrrr que bien me follas Diossssssss Siiiiiiiiiii siiiiiiiiiiii, asiiiiiiiii correte en mi, siiiiiiiiii, siiiiiiii, asiiiiiiiiiiii, mas, quiero mas,  dame polla y dame leche, damelaaaaaaaa, siiiiiii, asiiiiii, fuerteeeeeeeee Ahhhhhggghhh cabrón que me matas, Diosssssss,  ahhhhgghhhgggg siiiiiiiiiiiiiiii.  Tomaaaaaaala, Toma polla, siiiiiiiii y toma lecheee, todaaaa, todaaa para ti, tomaaaaaaaa puta, tomaaaaaa ahhhgggghhhhhhh.

Aquello fue apoteósico, se mezclaban los olores, los gemidos, y las respiraciones aceleradas, las corridas de unos y otros, los coños llenos de leche y las pollas goteando. Unos tirados sobre los sofás, y otros sobre la alfombra frente a la chimenea, mirándonos sonrientes, relajados y satisfechos, y pensando que aún quedaba tarde, noche y tres días mas….. ummmmmmmm que maravilla.

No todo era follar por supuesto, no habría quien lo aguantara entre otras cosas, también teníamos nuestras charlas, nuestras cervezas, vinitos y tapillas, nuestras comidas,  nuestros paseos por los maravillosos alrededores, incluso nuestros momentos de relajación, lectura, música etc. aunque evidentemente no me voy a poner a relatárlos aquí, entre otras cosas porque esto se haría interminable, y por otro lado porque el relato va de lo que va, así que vuelvo al tema y me centro en ello, aunque evidentemente tampoco contare todo lo que hicimos, como y donde, sino solo unas breves pinceladas de todo ello.

Nos habíamos llevado entre otro material, algunos juguetes y juegos eróticos, barajas de cartas, una cámara de video, unas bolitas numeradas para hacer sorteos, un temporizador con alarma, lubricantes etc. Lo siguiente que se nos ocurrió, fue apartar los sofás y la mesa para dejar espacio delante de la chimenea y poner en el suelo mantas ademas de la alfombra para hacer una especie de rueda con nuestros cuerpos de la forma siguiente: Los chicos se tumbaban en el suelo de espaldas con la cabeza de cada uno tocando mas o menos los pies del otro sin dejar demasiado hueco, es decir haciendo un pequeño circulo los cuatro, y después las chicas, nos fuimos colocando a cuatro patas sobre ellos, de tal forma que cada chica pondría su coño sobre la boca de un chico a la vez que tendría a mano la polla del chico siguiente para poder chupársela. Así, una vez todos colocados, a cada chica le estaría comiendo el coño un chico, y ella a su vez le estaría comiendo la polla a otro chico, estando absolutamente todos ocupados. Para complicarlo un poco mas, y ademas darle mas variedad a la cosa, pusimos el temporizador con la alarma para que sonara cada 15 segundos, para que cada vez que sonara, las chicas fuésemos avanzando un puesto, pasando a comérsela al chico siguiente, al igual que a ella se lo comería también otro chico diferente. Osea que finalmente todos le comerían el coño a todas y todas le comerían la polla a todos. Pues así lo hicimos y empezamos con la fiesta, la idea era, ademas de hacer algo distinto, ir calentando el tema.

Pasamos un rato rotando de polla en polla, comiéndonos todas y cada una de ellas, al igual que nuestros coños disfrutaron de las lenguas de cada uno de ellos, y creédme si os digo que se ven, o mejor dicho se notan, las diferencias, pues aunque como se suele decir que a nadie le amarga un dulce, no todos lo hacen igual, ni todas son igual. Pero fuera como fuera, una polla es una polla, y mas con ganas de ella, así que los gemidos de unos y otras se comenzaron a escuchar al momento, e incluso alguna que otra se corrió como una puta, pero intentamos que ellos no lo hicieran, ya que acto seguido cambiaríamos de juego y postura, y no queríamos ordeñarlos tan pronto. Así que cuando estuvimos un buen rato saboreando aquellas maravillosas pollas, y ellos nuestros ardientes y jugosos coños. Nos levantamos y nos fuimos hacia una mesa redonda donde los chicos nos pusieron a las chicas alrededor de ella, echadas y apoyadas sobre el tablero, con las piernas abiertas y con el culo en pompa, para que ellos nos entraran bien por detrás. Cada chico se puso detrás de una de nosotras, y sin mas, nos clavaron sus pollas en nuestros deseosos y hambrientos coños, y empezaron a follarnos. Ni que decir tiene, que nada mas empezar a embestirnos y moverse dentro de nuestros mojados coños, todos empezamos a jadear en coro. Ummmmmmm que rico, como me gusta este chochito, me decía Luis, que era quien en ese momento me estaba dando polla, y yo la sentía bien dura penetrarme dándome un placer enorme, mientras miraba a Sonia, que la tenia justo enfrente, mordiéndose el labio inferior de puro placer mientras la follaba Julio, que jadeaba de gusto con ella. Sonia me miro y me sonrió, mientras se dejaba caer con sus pechos sobre la mesa y extendía sus brazos hacia mi, yo hice lo mismo y nos cogimos de las manos. Los chicos pararon y cada uno se paso a la chica siguiente, ahora me la estaba metiendo Juan, y a ella  Miguel, apenas fueron unos segundos, y nuevamente nos estaban follando con ansia nuestros muchachos.

Sonia se relamía y jadeaba mientras me miraba con ojos lujuriosos, Miguel mientras la follaba, también miraba como me follaban a mi, y el sensual bamboleo de mis tetas provocado por cada embestida. Poco después volvieron a cambiar los chicos, se ve que querían probar todos los coños, y que nosotras igualmente probáramos todas las pollas, y la verdad es que ello nos gusto, al menos a mi, porque también eso se notaba, cada polla era distinta, no solo en el tamaño y el grosor, sino en la forma de usarla. A mi quien me gustaba mas en todos los sentidos era Julio, ya que ademas de se guapo y tener un cuerpázo increible, tenia una buena polla, y sabia que hacer  con ella, joderrrrrr que si lo sabia, y de su boca ni te cuento, era ponérmela en el coño, y hacia que me corría como una zorra, y conste que mi pareja no se le quedaba atrás para nada, pero a el lo tenia todos los días, y a Julio no. Ellos dos eran los favoritos de las chicas, y Sonia y yo las favoritas de los chicos, pues ademas de ser las mas calentorras, eramos las que mejores tetas teniamos, y las que  mas buenas estábamos. Bueno pues así seguimos follando, y ellos cambiándose de una chica a otra, una y otra vez. Nos pasaron cuatro o cinco veces cada uno, cuando ya empezaban a jadear como animales igual que nosotras,  y no se si seria casualidad o no, pero en esos momentos me cogió de nuevo Julio, alegrándome por completo el día. Me clavo su enorme polla hasta los huevos en mi mojadísimo coño, me agarro fuerte por las caderas, y empezó a darme fuerte, y yo me moría de gusto desde la primera embestida, joderrrrrrrrrr que bien me follaba y como me gustaba, temblaba literalmente de pies a cabeza y empezaba a jadear como una puta y a pedirle que me diera mas y mas,  y mas….Siiiiiiiiii dame, dame fuerte, siiiiiiii, asiiiiiiiiii, damela toda, métemela, fuerteeeeee asiiiiiiiiii, ummmmmmm que polla mas rica tienes, Diosssssssss como me gusta, dame, dame, dame fuerte, asiiiiii, asiiiiiiii, mas fuerte. Yo seguía agarrada a las manos de Sonia, y con tal fuerza, que le estaba clavando las uñas sin darme ni cuenta por mi enorme estado de excitación,  y ella me miraba y se reía, entre sus propios jadeos y gemidos, ya que también a ella le estaban dando lo suyo. Joderrrrrrrrr Diossssssss, como me gusta que me follen, decía con la voz alterada y sus tetas danzando como locas. Juan que estaba a mi derecha, empezó a jadear con fuerza y a correrse en el coño de Ester, que al sentirlo también empezó a contraer el gesto de su cara, y a gemir con fuerza por el mucho placer que le estaban dando. Casi al mismo tiempo se corría a mi izquierda Miguel en el coño de Lina que casi arañaba la mesa con las uñas mientras le temblaban las piernas al recibir aquella cantidad de leche en su coño sin que dejaran de follarla, pues incluso después de correrse, Miguel seguía y seguía follándola sin parar. A mi tampoco me aguantaban ya las piernas, me temblaban como cañas, y me iba a correr de un momento a otro, en cambio Julio, aunque jadeaba como un animal no daba señales de correrse aún, pero yo no pude mas, y me corrí como una puta entre temblores y gemidos, Me corrooooooo, cabrón me corroooooo, ahhhgghhhggghh siiiiiiiiii, no paressssss, no, no paresssssss Dame, dame fuerte asiiiiiiiii, Diossssssss que gusto ahhggghhhhggg. Y el seguía y seguía follándome, y yo ya ni veía, tenia los ojos en blanco. Me vas a matar cabrón, me vas a matar, ahhhggghhhhhhg, me matas, ahhhggghhhh.  También a Sonia le llego el momento, se lo note en las manos que aún estaban cogidas a las mías, y me las apretó con fuerza cuando empezó a decir, Siiiii, siiiiiiii, ya, ya, me voy, siiii me voy, ya, siiiiiiiiiii, siiiiiii, ahora, yaaaa ahhgghhhgggggg, me corrooooooo, ahgghhhhhh, dame, dame, dame fuerte, no paresssss, sigueeeeeeee, siiiii, asiiii, asiiiiiiii, asiiiiiiiiii, siiiiiiiiiiiii, ahhgghhhhh, y Luis al escucharla se corrió con ella  llenándole por completo el coño de leche. Julio el muy cabrón seguía y seguía dándome polla con fuerza, y yo empezaba a remontar otra vez, y veía que me iba a correr de nuevo. Aquel cabrón y su pedazo de polla causaban verdaderos estragos en mi. Las piernas me empezaron a temblar de nuevo, y yo a gritar como una loca, Me corro, Diosssss, me corro otra vez hijo puta, Sigueeeeee, siiiiiiii, siiiiiii, no paressss dame, dame, dame, asiiii, asiii, mas, quiero mas, mas, mas aghhhhghhhhh cabrón, cabrón, me corroooooo ahgggghhhh. Me corría toda entera como una bestia, cuando el empezó a jadear, a temblar y a echarme leche a chorros con su enorme polla palpitando con fuerza en mi coño, sin parar de follarme. Tomaaaa, tomaaaaa puta, tomaaaaa, ahhhggghhhhhh y estúbo corriéndose y echándome leche y mas leche un buen rato, y yo volviéndome completamente loca y casi perdiendo el sentido, hasta que por fin paro, se quedo un rato clavado en mi, y finalmente me la saco, con lo que mi coño inundado, empezó a derramar leche que me chorreaba por los muslos, y acababa goteando en el suelo. Entonces vi a Juan que, como había acabado el primero, había cogido la cámara de video y había estado grabando nuestras corridas, y ahora iba pasando detrás de cada una de nosotras, sacando primeros planos de nuestros jugosos coños entreabiertos, chorreando y goteando leche.

Por último os contare lo que me paso la última noche que pasamos allí. Aquel día las chicas estábamos ya bastante cansadas, y poco después de cenar nos fuimos a la cama, pero los chicos se quedaron jugando a las cartas y tomando unas copas en el salón. Yo no terminaba de coger el sueño, y no paraba de dar vueltas en la cama, quizás pensaba demasiado en Julio, no se. El caso es que después de  mucho intentarlo, a eso de las dos de la madrugada y ya cansada de dar vueltas en la cama, me levante y me baje al salón, me puse una copa, y me senté en el sofá junto a la chimenea tranquilamente. No pasarían mas de veinte minutos, cuando apareció Sonia que se sentó junto a mi, diciéndome que tampoco podía dormir. Los chicos estaban en lo suyo y no nos prestaron demasiada atención. Sonia y yo comenzamos a charlar de nuestras cosas y de nuestras intimidades, y entre otras, me hizo alusión, con cierta picardía, a las tremendas corridas que yo había tenido con Julio el día en que nos follaron a las cuatro en la mesa. Alababa igualmente la enorme polla que tenia Julio y lo bien que sabia utilizarla, arrancando con su ocurrencia la picara sonrisa de ambas.

Después empezamos a hablar sobre la depilación de nuestros coñitos, y a enseñárnoslos mutuamente. Yo lo tengo completamente depilado, ella también, pero se ha dejado un mechoncito de adorno ligeramente por encima de la rajita. El caso, es que entre unas cosas y otras, nos acabamos desnudando y entre mirarnos los coñitos y toqueteárnos ligeramente, los pezones se nos endurecieron a ambas, y con las tonterías de mira como se te han puesto y ya te los toco y tal y tal, Sonia se acerco y me beso en la boca sin decirme ni pio mientras me miraba fijamente a los ojos con una mirada entre tierna y sensual. Yo me quede totalmente sorprendida y sin saber reaccionar, entonces ella, al ver que yo no la rechazaba, comenzó a acariciarme las tetas y los pezones primero, y poco después, muy dulce, y suavemente mi coño, que ya andaba bien mojado. Y yo, aunque sorprendida al principio, me deje hacer por el morbo y el gustillo que me estaba dando, y acabe poniéndome cachonda perdida. Entonces ella cogió mi mano y la llevo a su coño, que lo tenia completamente mojado, y yo se lo empecé a acariciar. Lo tenía ardiendo y tremendamente suave, y sentí en mis dedos una delicadísima sensación de calidez y suavidad que me encanto, y me excito aún mas. Y reconozco, que aunque sorprendida, aquello me estaba gustando y dando bastante placer. Los chicos estaban en lo suyo y no se estaban percatando absolutamente de nada. Sonia entonces me recostó sobre el sofá, abrió mis piernas y busco mi coño con su boca. Me paso la lengua muy suavemente por toda mi excitada rajita, ante lo que se me escapo un gemido de placer. No daba crédito a lo que estaba pasando, pero tampoco quería pararlo…….me estaba gustando y mucho. Siguió comiéndome el coño con suma suavidad, mientras acariciaba con sus manos mis tetas y mis endurecidos pezones, y yo estaba subiendo a los cielos por momentos y mis gemidos ya eran constantes. Era de esperar que los chicos se dieran cuenta, y efectivamente así fue. Momentos después  estaban los cuatro alrededor del sofá mirándonos, sin decir nada. Yo al verlos me corte un poco, pero ella hizo caso omiso, y siguió comiéndome el coño cada vez con mayor ahínco y de una forma como nunca antes me lo habían comido, por lo que me olvide de los chicos por completo y me abandone totalmente a las caricias de Sonia, que en segundos me subía de nuevo a los cielos como un cohete, y rápidamente me corrí en su boca jadeando y retorciéndome como una puta sobre el sofá, ante la atenta y sorprendida mirada de los chicos. Pero ella seguía comiéndomelo a la vez que se bebía y tragaba toda mi abundante corrida. Fue un orgasmo bestial, distinto y muy, muy especial, suavísimo y fortísimo a la vez, nunca había sentido nada igual, y reconozco que me encanto. Los chicos se habían desnudado cachondos perdidos, y todos tenían las pollas gordas, tiesas y duras como piedras, con un calentón impresionante, mientras nos miraban con el especial brillo del deseo en sus ojos, destilando la lujuria mas animal en sus miradas, con lo que de inmediato supe lo que nos iba a ocurrir.

Miguel se fue directamente a por Sonia, que estaba sobre mi, le abrió las piernas por detrás y le clavo la polla sin mas en su mojadísimo y ardiente coño, empezando a follarla de inmediato haciéndola gemir al instante. Julio se acerco a mi con su polla en la mano y la llevo hasta mi boca. Y yo al verla empece a chupársela con verdadero deseo, soñaba día y noche con aquella polla y ahora la tenia para mi. Juan que estaba junto a el, cogió mi mano para llevarla hasta su polla, y yo se la cogí y empece a meneársela. Y a Luis se la cogió Sonia mientras seguía comiéndome el coño, a la vez que jadeaba ante las fuertes embestidas que le daba Miguel, que la follaba salvajemente. Momentos después, Sonia dejo de comerme el coño, y empezó a chuparle la polla a Luis, que al momento empezó a jadear ante la placentera caricia. Al quedarse mi coño libre, rápidamente  acudió Juan, y ocupando el lugar de la boca de Sonia, me metió su gorda polla y empezó a follarme con verdadera ansia dándome fuerte y duro. No me podía creer lo que estaba ocurriendo, y todo ello sin haberlo planeado. Cada una de nosotras con dos tíos y con dos pollas dándonos caña, y aquellos cuatro machos jadeando de placer como animales. La polla de Julio me encantaba, y me cambié de postura para poder comérsela mejor, así que puse a Juan tumbado en el sofá, y yo encima de el metiéndome su polla en el coño para que siguiera follándome, mientras yo disfrutaba como una guarra haciéndole una gran mamada a Julio, que jadeaba de lo lindo. Sonia empezó a correrse con la polla de Miguel que la follaba salvajemente, y gemía y temblaba como una zorra, Dameeeee, siiiiiii, follameeee, dame fuerte, asiiiiiiii joderrrrrr asiiiiii, sigueeee cabronnnnn, sigueeeee Ahgggghhhgghh, siiiiiiiiiiiii, me corro, cabrón, me corrooooooo, ahghhhhgggggg, olvidándose por unos instantes de la polla de Luis, que aprovecho el momento, el muy cabrón, para, al verme a mi a cuatro patas sobre Juan que me follaba el coño, cogerme por detrás, y después de untarme el culito con algo, intentar metérmela por allí. Yo al sentirlo me removí un poco rechazándolo, pero el muy hijo puta, me cogió por la caderas e insistió con mas fuerza, hasta que logro metermela, arrancándome un chillido de dolor. Ayyyyyyyyyy cabrón, me haces daño.. le dije, pero Julio me volvió a meter su polla en la boca y me dijo, …...tu sigue, no paressss joderrrrr no pares y sigue chupando. Luis empezó a moverse despacio en mi culo con su polla dura, mientras Juan me seguía follando el coño y Julio la boca. Y Sonia que seguía siendo follada por Miguel, se reía, mientras me decía,.. Anabel eres toda una guarra acaparadora, las quieres todas para ti ¿o que? Jajajajaja. Mi culito se había relajado y dilatado algo y Luis empezaba a coger ritmo follándome con gusto y ganas, mientras Juan hacia lo propio con mi coño, y la boca se me llenaba con el pedazo de polla de Julio. Joderrrrrrr, yo estaba en las putas nubes, aquellos tres cabrones me estaban haciendo volar con sus pollas, nunca antes me habían follado tres tíos a la vez, y aquello era tremendo, me sentía como una verdadera puta, pero Diossssss que gusto me estaban dando y como estaba  yo disfrutando. Esta vez fué Miguel el primero de ellos en correrse, y mientras jadeaba y le llenaba el coño de leche a Sonia, dándole polla aún mucho mas fuerte si cabe, hizo que ella se volviera a correr mientras recibía a chorros, con placer y entre temblores, toda la leche caliente de Miguel en su ardiente y hambriento coño. No tardo mucho en correrse el cabrón de Luis en mi culo, jadeando como un perro encelado, y haciéndome sentir muy intensa y placenteramente las palpitaciones de su polla, y los chorros de leche caliente que me estaba soltando en el interior  de mi estrecho culito, donde finalmente se quedo clavado exhausto y jadeando. Yo seguía chupándole entusiasmada y ansiosa la polla a Julio, y Juan continuaba follandome el coño. Yo me estaba corriendo de gusto, y los abundantes jugos se me derramaban de la boca, pero no me sacaba la polla de ella,….quería mas, y mas, quería su leche, toda su leche, quería ordeñarlo bien y tragármela toda. En eso Juan empezó a jadear y gemir con fuerza y a decir que se corría, mientras me daba mas fuerte.

Me corrooooooo puta, me corrooooooo, siiiiiiiiiiii, toma leche, puta, toma leche, siiiiiiiiiiii ahhhhhgghhhhg, y yo sentí perfectamente como me llenaba el coño. Y apenas medio minuto después, Julio empezó a jadear y temblar, y viendo que se iba a correr  la saco de mi boca, no sin que antes se le escaparan dos grandes chorros de leche, que yo me trague con ansia, deseo y placer, y aunque quería mas, no pude retenerlo allí, ya que el  se fue detrás de mi y me levanto el culo, sacando la polla aún palpitante de Juan de mi coño, con lo que empece a derramar su abundante leche, y Julio metió su enorme polla en mi coño inundado y chorreante, comenzando a follarme con fuerza, mientras terminaba de correrse y echarme toda la leche que aún le quedaba. Y yo al sentir aquella enorme polla dentro de mi, follandome y soltándome leche, me volví a correr como una guarra con el. Siiiiiiiiiiiiiii dame fuerte, fuerte, siiiiiiii, asiiiiiii, ahhgghhhggh, echamelaaaa, asiiiiii, toda, echamela toda, siiiiiiii, asíiiiiiiiiiii, siiiiiiiii, dámela, siiiiiiiiiiii, siiiiiiii, asiiiiiiiiiiii ahhhghhhhhgggggg, Y el, embistiéndome fuerte y jadeando como un animal, me decía:   Me corro puta, me corro en ti, siiiiiiiiiiii asiiiiiiiiii en tu coño, ahggghhhggg, tomaaaaaa, toma leche puta, tomaaaaaaaa, asiiiiiii toda para ti, siiiiiiiiii, toma zorra, tomaaaaaaaa, ahhhhhhhhggggg cabrona que coño mas rico tienes siiiiiiiiiiiii,  ahhggghhggggghhhhhhhh. Siguió y siguió dándome polla y follándome incluso un rato después de correrse, y yo seguía y seguía corriéndome, hasta que finalmente se quedo clavado a fondo en mi coño, con su respiración completamente alterada, todo su cuerpo vibrando y su polla latiendo con fuerza dentro de mi.

Inmenso y bestial fue el placer que sentí aquella noche, algo increíble e inimaginable. Los múltiples y diversos orgasmos que tuve con ellos, y muy especialmente los que tuve con Julio y con Sonia fueron absolutamente bárbaros.

Hubo muchas cosas mas, pero tampoco quiero ni puedo extenderme.

Así que toco regresar a la ciudad, y volver a la rutina de nuevo.

Ni que decir tiene, que tras esta experiencia me volví a ver en mas de una ocasión, tanto con Julio como con Sonia, con la que ya tengo algo mas que una gran amistad y complicidad.