Amores Para Recordar Capítulo 4

Ha pasado un mes del encuentro de Juan y Pablo en el callejón, ahí donde sucedió la pelea con el bravucón de la preparatoria y ahora los chicos se han hecho amigos muy cercanos, incluso han salido en diferentes ocasiones a la ciudad. Llegados a este punto parecen amigos de toda la vida tanto que Sara comienza a dudar de Juan, sus salidas continuas llegan a dejar fuera a sus amigos más cercanos y han observado como se ha vuelto difícil mantenerlos alejados durante horas. Pablo ha continuado su entrenamiento en el gimnasio por las tardes, incluso Juan lo acompaño en varias ocasiones con la excusa de ir, a hacer tarea con él y Lupita a pesar de conocer todos sus movimientos, sigue esperando Juan abra su corazón con ella.

Luis lleva tanto en tiempo silencio que han creído, desistió de su venganza, el mismo que continúa reuniéndose secretamente con sus aliados en las sombras y sigue esperando el momento para poner en marcha su plan contra Pablo. Sin embargo, las victimas no han notado los sutiles cambios a su alrededor, chicos misteriosos vigilan sus actividades a cada hora del día para mantener informado y ahora Luis va un paso adelante con la información que reúne de ellos. El gran día cada vez esta mas cerca de suceder, lunes por la mañana Pablo está esperando el autobús en la parada y pensaba en llevar a Juan a ver una película, quien se siente muy emocionado de pasar toda la tarde con él.

Esta vez el autobús paso antes de lo esperado por el vecindario, después de 20 minutos finalmente llego a la escuela y se bajo del transporte para caminar a la entrada de la institución, ahí se sentó bajo la sombra de un gran árbol a descansar tranquilamente. Estuvo meditando sobre sus planes con Juan por la tarde, mientras yacía con la cabeza en las nubes fue interrumpido precisamente por el y se vio obligado a abrir los ojos para responder a su saludo.

Juan — ¡Buenos días Pablo! Veo que no pierdes el tiempo para descansar — El tono de sus palabras hizo a su oyente soltar una risa, misma que usualmente escuchaba cada vez que le jugaba una broma a su amigo.

Pablo — ¡Buenos días Juan! Jajaja Solo estoy despejando la mente de mis ideas, por un momento mientras las clases comienzan, vamos siéntate a mi lado — Señalo con la mano un espacio a su lado para Juan, mismo que ocupo su amigo sin rechistar.

Juan — ¿Qué tienes planeado para el día de hoy? — Intento bromear de nuevo para ocultar su emoción de asistir al cine, solo estaba probando si todavía recordaba sus planes.

Pablo — Acaso has olvidado iremos a comer hamburguesas y ver una película en el cine. Además, según recuerdo esta vez te toca elegir la película, la última vez fue mi elección —

Juan — Es verdad. Ya había hecho mi elección hace un tiempo para hoy, solo espero que te gusten las películas con temática postapocalíptica y también tengo una buena noticia, mis padres me han existido en quieren conocerte — Juan tenia miedo de hacerle la invitación a Pablo, pero sus padres insistieron tanto en la idea de conocerle y finalmente termino por ceder a su petición de preguntarle a su amigo.

Aunque Pablo le hubiera encantado negarse a la idea de asistir a la cena, tenía curiosidad por conocer a las personas que habían descuidado mucho a Juan y acepto la propuesta para verle feliz, seria extraño si el dijera que su sonrisa le hace sentir bien. Quizás realmente le empieza a gustar Juan como un novio, es cierto que su amistad ha ido muy deprisa desde el incidente con Luis en el callejón y ahora tiene un vínculo muy fuerte, quizás solo necesita a esta persona para ser feliz en su vida y ahora que la encontró no puede imaginarla sin él.

Pablo ­— Estaría encantado de poder ir a tu casa con tus padres, es la primera vez que recibo una invitación de este tipo y solo espero no decepcionarlos con mi presencia. Igual te considero un buen amigo por eso no debes preocuparte —

Juan — ¿Si estás hablando enserio? Les diré a mis padres sobre tu respuesta en la noche, quizás la dejemos para el fin de semana o igual yo te confirmare la fecha exacta, una vez que hable con ellos sobre la cena —

Pablo — Claro que lo estoy Juan, de verdad me gustaría asistir a tu cena con ellos, pero debes confirmar la cita o mi padre no creo que me deje ir contigo. ¿Cambiando de tema como te fue en los exámenes del parcial? —

Juan — He tenido problemas con inglés e historia, tú sabes que no soy bueno recordando los hechos del pasado… Quizás salga un poco bajo en mis calificaciones, pero estoy mayormente bien con el resto y ¿tú? —

Pablo — Pase todos sin muchos problemas gracias a ti — No podía olvidar las tutorías que le daba en ocasiones en la cafetería, realmente lo trataba tan bien para solo ser un amigo.

Los estudiantes continuaron su conversación hasta el toque del timbre, se levantaron para caminar los dos hasta su salón y luego se separaron para tomar sus clases, ahí estaban esperando sus amigos a un lado de su pupitre. Tras una breve despedida con la mano de Pablo, Juan camino hacia su aula a unos metros para iniciar sus actividades. En la hora del almuerzo se reunieron para comer sus alimentos, los amigos de Juan cada vez tenían una mejor relación con su héroe y se turnaban para interrogarlo como parte de su diversión, sin embargo, los dos chicos parecían siempre estar en propio mundo.

Erick — ¿Como va la amistad de mi amigo y tú? Últimamente pasan mucho tiempo a solas después de clases, si no conociera tan bien a Juan diría que son novios a escondidas — Estaba tratando de confirmar los rumores, realmente le importaba poco si fueran novios… entretanto los dos fueran felices.

Juan — Deberías de dejarte de bromas Erick. Pablo es solo un amigo, pero si fuera mi novio, aunque no descartaría la idea de intentarlo, por ahora somos amigos y si hablan no me molesta en absoluto, Pablo es un buen chico para mí —

Pablo — Esos rumores están equivocados pero la verdad no es raro escucharlos, si es verdad que estamos mucho tiempo, pero tampoco tengo problemas con que digan que es mi novio —

Sara — Aunque la verdad es que lucen muy lindos juntos. Yo creo que harían una buena pareja si salieran como novios, yo estoy del lado del amor por eso no se preocupen por mi —

Miguel — Si decides salir con mi amigo. No tengo problemas en apoyar su relación desde el inicio, igual me encantaría ver siempre feliz a Juan, sonriendo como últimamente lo hace y creo que tu serias muy buen candidato para el —

Erick — Nosotros conocemos a Juan desde el preescolar pero nunca lo vimos sonreír tanto, recuerdo la vez que nos fuimos a una feria a escondidas de sus padres y reconozco fue una experiencia inolvidable con las atracciones mecánicas —

Juan — Inolvidable el castigo que me dieron por desobedecer sus órdenes — Aun recordando como Lupita trato de disuadirlos de sus intenciones, sin embargo, todo fue inútil porque igual termino castigado en su habitación. No tuve mi computadora por una semana, ni videojuegos y menos mi teléfono celular para comunicarme con el exterior.

Sara — Me acuerdo claramente como te subiste a todos los juegos y gritabas de emoción, además tu fuiste quien más se divirtió de nosotros 4 y quien más tomo fotos ese día — Ella no podía evitar reírse de ese momento con un poco de culpa.

Erick — Tus gritos casi lograron dejarme sordo. No sé cómo me dejé engañarme a última hora por ti, la verdad también recibí un castigo de mis padres, pero eso no tiene importancia ahora —

Sara — Recuerdo esa vez que decidimos acampar en el bosque. ¿Según pasaríamos el fin de semana, pero alguien tuvo miedo verdad Erick? — Las palabras de Sara hicieron revolverse en su lugar a Erick, quien sentía vergüenza desde ese día.

Erick — La culpa ha sido de Miguel por empezar a contar historias de terror. Él sabe que tengo miedo de los fantasmas y su broma fue la peor parte de la noche, realmente te odio por ser tan infantil — Sino tuviera sentimientos muy en fondo de su corazón, sería fácil odiarlo de verdad como a un persona común y corriente.

Pablo — ¿Realmente fue tan cruel la broma como para hacer enojar a Erick? — Poso sus ojos en Miguel que estaba completamente tranquilo, casi parecía no tener ningún remordimiento.

Miguel — Todo inicio cuando les dije que haría una fogata para sentarnos alrededor del fuego, contaríamos algunas historias de terror con la noche fría y la luna llena en el cielo, el ambiente perfecto para una velada en el bosque. La historia de asesinatos basada en hechos reales fue ideal, después de terminar de contarla me fui a orinar para colocarme una mascara y ropa desgarrada, además de un hacha falsa con sangre para la broma y salte de los arbustos a sus espaldas con tal de espantarlos —

Pablo — ¿Enserio fuiste capaz de una broma así? ¿Y qué hicieron ellos? — El simplemente se le hizo difícil imaginar una broma de ese tipo, quizás la llevo muy lejos tanto como para hacerlos enojar de más.

Miguel — Ellos gritaron tan fuerte como locos, pero cometí el error de comenzar a reír. Sino hubiera sido por mi risa todo habría salido perfecto — Diciendo esas palabras todavía pensaba en volver a intentarlo, sino fuera por Sara que casi lo mata a golpes ese día.

Sara — Sino fuéramos amigos nunca te perdonaría — Aun recordando ese día con mucho coraje por la broma de su amigo, casi pudo haberla matado del susto.

Miguel — Olvidemos los malos recuerdos del pasado — Deseaba con su corazón que se olvidaran de ese día, así podía continuar sus bromas como siempre.

Después de sonar el timbre del final de receso, los estudiantes volvieron a sus aulas; durante las clases se imaginaba si a Pablo le gustaría la película y se empezaba a cuestionar si las palabras de sus amigos, quizás solo estaban exagerando, pero no podía negar el hecho de sentirse bien. Pablo siempre se preocupaba por sus sentimientos en todo momento, entretanto el día continuaba normalmente con los maestros cambiando de aulas y los alumnos mirando el reloj, la mayoría estaba prácticamente esperando el final de la jornada. A la salida de la preparatoria su cita estaba esperando con sus audífonos, sentado tranquilamente en una banca escuchando su música favorita y viendo la puerta de entrada. La canción “Solamente Tu” de Pablo Alborán resonaba en su mente, casi inconscientemente comenzó a cerrar sus ojos para dormirse y tuvo que ser despertado por Juan, quien toco su hombro para hacerle volver a la realidad.

Juan — Despierta Pablo tenemos que irnos a ver la película — Casi sintió un poco de culpa por tener que despertarlo, claro tampoco podía dejarlo ahí a dormir hasta la noche.

Pablo — ¿A dónde vamos a ir primero? Ya empiezo a tener un poco de hambre — Frotando su estomago con un mano, creía seria lo suficiente bueno para influir en la decisión de Juan.

Juan — Es decisión tuya porque aún tenemos un poco de tiempo libre — Sabia claramente por la expresión de su amigo que tenia hambre, así que decidió cederle la elección de donde irían primero.

Pablo — Vamos primero a comer hamburguesas cerca del cine y luego vemos la película — Ese truco le había funcionado a la perfección con Juan, era como hacer carita de perrito triste.

Juan — Date prisa que la película empieza a las 5:00 pm o tendremos que esperar mas tiempo en el cine, espero encontrar un lugar con pocas personas en el centro — El deseaba solo no tener que esperar mucho por la comida, las criticas sobre la película hablaban muy bien de la trama en general y estaba emocionado con la idea de verla el mismo.

Ellos decidieron hacer una carrera como castigo el perdedor compraría los dulces, si bien Juan le reclamo a Pablo las veces que hacia trampa en sus competiciones y este siempre lograba salirse con la suya para evitar pagar el castigo. A regañadientes Pablo se tuvo que abstener de sus intenciones de volver a sus malas mañas, haciendo mas pareja la competición de los jóvenes por igual y esta vez fuera un reto justo con un ganador real, no un tramposo. Incluso le dio una ventaja de 5 minutos a su capitán, misma que no dudo en aprovechar al máximo como buen amante de las competiciones y salió corriendo a toda velocidad del lugar, esta era la oportunidad de hacerlo pagar por primera vez y mientras Pablo se quedaba a la distancia, no creía que estuviera respetando su palabra de dejarle ganar.

Pasados los 5 minutos el otro chico salió a toda prisa para recobrar el tiempo, igualmente tenia una carta escondida bajo el brazo y dudo en usarla para mostrarle a Juan, esta vez podía usarlo para ganarle, pero lo evito y decidió jugar limpio. Calles mas adelante el chico a la cabeza pensaba en su amigo, minutos más tarde logro alcanzarle tanto que Juan se preguntó como lo hizo y casi tropieza por accidente en la calle, debido a que perdió la concentración en la carrera.  Esta vez fue un empate por los dos, ellos se sintieron frustrados con el resultado y Pablo en un acto de humildad acepto pagar los dulces, el plan de comer hamburguesas tuvo que cambiar por comer pizza en un lugar cercano.

Entraron al establecimiento con estudiantes de su preparatoria y parecía un buen ambiente el lugar para disfrutar de su pizza tranquilos, viarias mesas distribuidas en el lugar de color amarillo con blanco y bancos negros para sentarse en ellos. Ordenaron una pizza especial mitad hawaiana y mitad pepperoni, pidieron refrescos sabor Coca Cola para acompañar sus alimentos y también un rico pastel de limón de postre. Pablo quiso retomar la conversación de la cafetería con los amigos bromeando sobre relación, este era un buen momento para empezar a mostrarle a Juan sus intenciones y quiso probar su suerte en un ambiente como este.

Pablo — Recuerdas la conversación de la cafetería con tus amigos sobre nuestro estatus, mentiría sino dijera que no me siento atraído por ti… no solo me refiero a como un amigo —

Juan — Creía que solo era yo quien se sentía de esa forma y me alegra que el interés sea mutuo, te diré que rechace en el pasado a un chico que se me declaro y no logro entender la razón de porque me gustas —

Pablo — Me gustaría que me dieras un tiempo para pensar sobre nuestra amistad y también consideraras la posibilidad de ser algo mas en el futuro… Nuestras vidas nunca han sido fáciles por eso me siento tan cómodo contigo —

Juan — Es un tema muy difícil para mí… Seria bueno si aclaramos primero lo que hay en nuestros corazones y luego le dejamos al tiempo el resto de nuestras vidas —

Después fueron interrumpidos por el mesero con la pizza en una charola, comieron en silencio sin mencionar una palabra más sobre el asunto y tras pagar la cuenta se marcharon a ver la esperada película de los “JUEGOS DEL HAMBRE. Esta vez solo compraron palomitas de maíz en la dulcería del cine y una soda grande para beber durante la función. Luego caminaron por el pasillo hacia la sala a donde verían la movie, un salón totalmente a oscuras con solo la iluminación de la pantalla y muchas personas reunidas para ver el estreno, muchas de ellas parejas de chicos y chicas tomados de las manos en plan novios.

La película demoro aproximadamente 2 horas 45 minutos en la pantalla, resulto superar las expectativas de los dos jóvenes con la actuación de los actores y cuando ambos chicos salieron de las instalaciones del cine, miraron el cielo; la luz del sol había dado paso a la oscuridad de la noche con la luna en el firmamento. La última acción de Juan fue dejar a Pablo en una parada de autobús cercana, despedirse con un abrazo de su amigo y volver a su propia casa en un taxi con la buena noticia de que Pablo acepto la invitación de sus padres.

En el camino a las afueras de la ciudad en el autobús, las palabras de Juan comenzaban a hacer eco en su mente y sus pensamientos que mantenía ocultos se liberaban, las ganas de contarle a Juan como admiraba su forma de ser, su inteligencia y sobre todo su amistad incondicional en estas semanas. Además de explicarle que le provoca sensaciones únicas que nunca tuvo con nadie y menos un chico como él; su sonrisa que lo cautivo desde la primera vez, su voz que eriza su piel, el negro de sus ojos donde se pierde y como se ha vuelto la fuerza que lo impulsa a salir adelante cada día. Como decirle que el es primer pensamiento por las mañanas y el ultimo cuando se duerme en la noche.

Continuara…