Amor por accidente
Al llegar a donde se encontraba la persona, se quedo sin palabras, era un belleza, tenia una carita superlinda, unos ojos que la miraban con miedo y con ilusión a la vez y unos labios que le encantaron, pero se centro en lo que estaba haciendo...
DESCRIPCIONES DE LAS PROTAGONISTAS:
MARTA: Tiene 24 años, es residente de primer año de medicina, tiene los ojos grandes color café, mide 1,70 y un cuerpo normal, con la piel bronceada, cabello oscuro y la gente que la conoce dice que tiene un buen cuerpo. Es una persona cariñosa, alegre y a su entender tiene un buen culo.
JOSEFINA: Tiene 22 años, esta acabando su carrera, es una chica risueña, su piel es clara, sus ojos son verdes, mide 1,60 y su cuerpo de escándalo. Tiene unos labios carnosos y unos pechos que a su novia le encantan. Es inocente, ingenua y se hace querer cuando la conocen.
AMOR POR ACCIDENTE:
MARTA:
Era viernes, sonó el despertador y Marta no tenía ganas de levantarse, hoy le tocaba guardia de ambulancia y las odiaba, más que nada porque no le dejaban hacer nada, solo miraba como el doctor actuaba y eso le aburría mucho. Se levanto con desgana, pero tenia una sensación de angustia y agobio que no entendía.
Llego al hospital tan puntual como siempre, se puso el uniforme y bajo a la zona de ambulancias. Allí estaba su amigo Antonio.
Antonio: hola guapa, tan puntual como siempre (guiñándome el ojo)
Marta: hola a ti. Tan gracioso como siempre (sacándole la lengua)
Antonio: preparada para un día emocionante? (lo decía con burla)
Marta: vuelvo a decirte, tan gracioso como siempre. Pero te digo algo, no se porque hoy va a ser diferente y eso no se si es bueno o malo.
Estuvieron un rato hablando hasta que llego el jefe, el que le comento lo mismo de siempre, que ella solo tenia que estar viendo como actuaban y si veía que algo podía hacerlo se lo mandaba. Marta pensó lo mismo que siempre, parece que soy gilipollas, por eso tengo que aprender del maestro, tiene narices. Pero solo puso su cara sonriente y se fue.
Pasaron todo el día, sin hacer nada, la verdad es que era una guardia de esas que se pueden definir como aburridas, pero no se dice porque da mala suerte. Ya era de madrugada y como siempre estaban Antonio y ella riendo y charlando de trivialidades, cuando sonó la radio, porque ahora pensó. Eran las 3 de la madrugada y eso solo significaba que podían ser pocas cosas. Además vivía con la ilusión que su jefe le dijera que se quedaba en tierra. Pero de repente llego el jefe con un color de piel algo pálida.
Edu: chico, nos vamos!! Es un accidente múltiple y parece que necesitan mucha ayuda
Todos: vamos.
Edu que era su jefe, aunque había sido algo mas, le dijo.
Edu: marta, vas a tener que ayudar?
La sonrisa de marta se veía desde los fines del planeta, estaba emocionada, pero de repente sintió un miedo que no entendía, la angustia de por la mañana volvió a ella.
Marta: vale, y que tendré que hacer??
Edu: cuando lleguemos inspecciono como esta la cosa y así te digo
Marta: gracias Edu (le guiño el ojo)
Habían llegado, eso era un caos, no habían sido muchos coches, pero había un camión, la gente chillaba y todos pedían ayuda, así que Edu comenzó a mirar la situación y con otro de los jefes se asignaron a las victimas. De repente, Edu llego a donde estaba marta.
Edu: marta, ves aquel coche rojo??
Marta: si, lo veo que en el asiento del copiloto hay alguien sin salir y a lado una muchacha como llorando.
Edu: pues ahí es donde tienes que estar. Alguna duda??
Marta: si, a quien atiendo, a la que llora o a la otra persona??
Edu: tu solo tienes que centrarte de la que esta dentro, además, parece que esta aprisionada, así que tendrás que estar hasta que venga la ambulancia, suerte!!!
Marta se quedo mirándolo con cara de malos amigos, la primera persona que iba a ayudar en la ambulancia y le ponían el peor caso, que quería que se le muriera para que así aprendiese, esa pregunta le corrió por la mente, pero se dijo, ni de coña se va a morir, yo la salvo si o si y se dirigió corriendo con el maletín hacia donde estaba el coche y a su lado le siguió Antonio que la miro con “carita de animo pequeña”.
Llegaron al coche y como la muchacha que estaba fuera no paraba de llorar y de gritar, le dijo a Antonio que se la llevara con los psicólogos que habían llegado o que hiciera lo que fuese, pero que no podía estar ahí. Antonio se fue con ella y en ese momento, se puso algo nerviosa, no sabia como hacerlo, se bloqueo, pero era por esa angustia que tenia tan rara y ese miedo que le recorría todo el cuerpo. Se quedo en frente del coche y se dijo: “marta, respira, sabes lo que haces y tienes que salvar a esa persona, así que vamos campeona”. Después de decir eso se dirigió a la puerta del coche que no se abría, así que se fue por la del conductor. Al llegar a donde se encontraba la persona, se quedo sin palabras, era un belleza, tenia una carita superlinda, unos ojos que la miraban con miedo y con ilusión a la vez y unos labios que le encantaron, pero se centro en lo que estaba haciendo.
La exploro y lo mas llamativo que tenia era que en la pierna izquierda tenia a la altura del muslo clavado un hierro que sobresalía por la ventana delantera, probablemente era de los que el camión llevaba, miro el pulso y la respiración, las dos eran bastante débiles e intentaba hablar con ella pero no se le entendía bien lo que decía. La estabilizo lo que pudo y solo tenía que esperar a que vinieran los bomberos para sacarla de allí. Cosa que a marta la tenían algo nervioso.
JOSE:
Se levanto como todas las mañanas para ir a la facultad, no es que tuviera muchas ganas, pero era lo que tenia que hacer. Cuando sonó el timbre, bajo, la estaban esperando sus amigas como siempre.
Durante el camino a la facultad, hablaron de la fiesta que iban a tener por la noche, le preguntaron a Jose que como iba a ir y ella contesto que con su novia como siempre, cosa que a todas las dejo algo sorprendidas, ella no entendió el porque pero no le dio mas importancia al tema.
Paso el día, como siempre con las clases, risas y diversión que todos los días tenían.
Cuando llego la tarde, estaba en casa, descansando para luego arreglarse e irse a la fiesta. Estaba con el ordenador cuando le llego un correo de alguien que no conocía, lo abrió para saber quien podía ser, porque el nombre de Mar Jiménez le sonaba de la facultad. Comenzó a leer el correo:
“hola Jose:
Se que no me conoces y a lo mejor solo me has visto por la facultad, pero yo a ti si que te conozco y mas aun a tu novia. Solo quería escribirte para decirte que tu novia te engaña conmigo y como veo que ella no se atreve a decírtelo, me veo en la obligación de ser yo quien te lo diga”.
Cuando acabo de leer el correo, se quedo sin palabras, no entendía nada, pensaba que era una broma de mal gusto, pero como la gente podía ser así, además, no podía decirle nada a su novia, porque siempre tenia el don de darle la vuelta a todo y hoy no tenia ganas de tener una bronca con ella.
Se arreglo con desgana y cuando le dio un toque de que estaba abajo, bajo. Al llegar al coche, la vio y no pudo hacer mas que darle un beso para saludarla, pero fue un beso frio y sin sentimientos. Cosa que su novia ni se dio cuenta o no dio importancia.
Estuvieron en la fiesta, bebieron, bailaron y Jose estaba con sus amigos pasándoselo en grande y sin preocuparse por donde se encontraba su novia. De repente, vio como esa tal mar la miro y le mostro una sonrisa algo rara, que no entendía muy bien, pero le señalo con la mano los 5 dedos y con los ojos el baño.
Jose entendió que en 5 minutos se dirigiera al baño y la verdad es que le parecía la cosa mas absurda que podía hacer, pero algo le hizo que a los 7 minutos se dirigiera al baño. Entro sigilosa y vio que no había nadie, se rio de la tontería que había vivido en ese momento, pero de repente escucho en uno de los cubículos a alguien gimiendo como loca, se quedo sorprendida, porque esa voz la reconocería con los ojos cerrados, era la de su novia, como podía estar pasando eso. Se armo de valor y toco a la puerta, cuando se dio cuenta que estaba abierta, así que la abrió del todo y la escena era para morirse, Jose solo pudo decir “ya te vale” y con lagrimas en los ojos salió del baño. Su novia se deshizo de su conquista y salió tras ella.
Jose no se podía creer que todo esto le estaba pasando a ella, como su novia le estaba poniendo los cuernos y lo descarada que era, haciéndolo cuando ella estaba cerca. Se apoyo en el coche y no paraba de llorar. En ese momento llego su novia, por cierto, se llama Natalia, y le pido que la disculpara, que ella no quería que pasara eso, que iba algo borracha y no se cuantas excusas mas. Ella no se podía creer que tuviera el descaro de mentirle, porque sabia que llevaba con esa chica bastante tiempo, así que solo le dijo “por favor, llévame a casa”
Natalia: pero cariño, perdóname
Jose: Natalia, solo te pido que me lleves a casa y por lo nuestro, solo te puedo decir que hemos terminado
Natalia: no, no me puedes hacer esto, no podemos terminar por algo tan tonto como esto
Jose solo callo, no le dijo que sabía todo y que era muy asqueroso que le mintiera en la cara de esa manera.
Jose: me vas a llevar o pido un taxis??
Natalia: móntate y hablamos por el camino.
Iban en el coche, Natalia hablaba y jose solo la miraba con las lágrimas en los ojos y sin decir ni una palabra. De repente, Natalia estaba mirándola para que le dijera algo cuando Jose le dijo “nataliaaaaa, cuidadooooooo!!!”, Natalia miro al frente y vio que había habido un accidente, no pudo frenar, intento esquivarlo, pero lo fue imposible, dio un volantazo y acabaron chocando con el camión que se encontraba volcado por el accidente.
En ese momento Jose sintió que algo le atravesaba la pierna, le dolía mucho y sentía como la sangre le salía por la herida, le dolía todo el cuerpo, pero lo que mas su pierna.
Ella escuchaba como Natalia lloraba y como le pedía perdón, pero el dolor era tan grande que no le permitía hablar.
Paso un rato cuando llego la ambulancia, vio como dos personas llegaban a ayudar, una de ellas se llevaba a Natalia para tranquilizarla y la otra entro en el coche para ayudarle. Cuando Jose vio a esa persona se quedo alucinada, era como un ángel, veía como una luz le rodeaba por todo el cuerpo y miro los ojos de esa muchacha, unos ojos color café que le daban tranquilidad y paz. Intento decirle algo, pero no se entendía bien lo que hablaba. La doctora, se acerco a ella a explorarla y cada vez que la sentía un escalofrió recorría su cuerpo, no entendía bien el porque, pero se sentía tranquila y en paz. De repente, escucho como a la lejanía esa voz angelical que le decía “por favor, quédate conmigo”. Ella la escuchaba, pero no podía abrir los ojos, ni hablarle, para decirle que se quedaría con ella para siempre y cuando ya no se encontraba con fuerzas volvió a escuchar “Jose, por favor, quédate conmigo, no me dejes”.
CONTINUARÁ----------------------------------------
HOLA DE NUEVO A TODAS Y TODOS, AQUI OS DEJO UN NUEVO RELATO, ESPERO QUE OS GUSTE COMO EL ANTERIOR.
SI QUEREIS LA CONTINUACION, SOLO TENEIS QUE DECIRMELO. GRACIAS DE ANTEMANO.