Amor o sexo-6
Salió disparada, ambos soltaron: ¡Woow, Woow, que inmensidad!
AMOR O SEXO-6
Como cada noche Ricardo (Rico) me deja agotado, dos folladas con sus corridas dentro de mi culo me dejan exhausto y él volvió a preguntarme sobre los años que no estuvimos juntos, mientras él estaba con su mujer Mónica embarazada de riesgo, luego él trabajando y finalmente en prisión, pero él insistía en saber mis andanzas, ya le había contado mi primera experiencia con Tony y luego con su amigo Pedro sus excompañeros del bar, también le conté mis andanzas por la discoteca, las saunas, los bares y mis alocados “cruising” en el parque, pero él notaba que yo no le contaba todo y era cierto, en parte y comencé:
Mientras iba a todos esos lugares luego yo los dibujaba hacía bocetos para más tarde hacerlos mejor, estaba para presentar mis dibujos para el final de carrera cuando mi profe dijo que mis dibujos eran demasiado formales y en ése momento resbaló mi libreta de bocetos rápidos, él lo cogió mirando algunas hojas y dijo: ¡Déjamelo mañana te lo devuelvo! Eso me preocupó todo eran de escenas totalmente gay teniendo sexo o acariciándose también ligando entre varios. Al día siguiente el profe se encontraba fuera del aula con otro hombre y me lo presentó como Agente Artístico además estaría presente durante el examen final, dijo que me había señalado tres de mis bocetos para ése examen y lo tendría que hacer en el aula dos días más tarde. En fin que así lo hice y dibujé lo que ellos decidieron que me podía ayudar mejor, los bocetos eran menos agresivos, aprobé con honores y mis dibujos se colgaron en la Web del Instituto con mi firma debajo junto a los otros ganadores. Una semana más tarde me llamaba el Agente para tomar un desayuno y me contó que le habían llamado de una editorial en Japón interesándose por mis bocetos y soltó: ¿Te gustaría ir una semana a Tokio? ¡Por supuesto con todos los gastos pagados! Yo salté de alegría abrazándole mientras soltaba: ¡La capital del Manga! El hombre sonrió diciéndome: ¡Nunca te has mirado al espejo, tú eres un joven Manga, tienes sus atributos, ojos verdes grandes algo almendrados, cabello negro, cuerpo escultural y delgado, solo tendrías que peinarte como esos héroes Manga! Era una adulación y más calmado dije: ¿Dónde está la trampa? Dijo: ¡Que yo seré tu agente y cobraré un 20 por ciento de cada dibujo que vendas, lo mismo que cobran todos los agentes y te buscaré trabajos! Yo sabía eso ya se habló en clase de los agentes y acepté.
Quince días después estaba volando rumbo a Tokio y justo a mi lado un compañero de clase, Víctor que siempre parecía estar disgustado conmigo sin haber cruzado ni una palabra, había quedado detrás de mí en los finales, al sentarse me miró de arriba abajo y no soltó prenda, pero tras la primera hora su conducta fue cambiando y poco a poco comenzamos a hablar el viaje era muy largo unas 16 o 17 horas sin escalas, así supe que mi compañero Víctor venía de una familia con medios, sus padres tenían varias clínicas dentales y a él le horrorizaba una simple limpieza de boca, yo me reí. Yo le dije que me había criado mi abuela y ahora ya estaba muerta era independiente buscándome la vida, me comentó que le habían impactado mis dibujos sin ser pornográficos eran muy sensuales, yo dije que los suyos eran con mucha sensibilidad y así pasaron las horas, al llegar a nuestro destino nos esperaba un joven con un rótulo con nuestros nombres, se presentó como Noorito (Noor) hablaba un poco el castellano y el resto en inglés, en el hotel dijeron que nuestra habitación no estaba vacía todavía, que por el mismo precio nos dejaban otra pero con una sola cama de matrimonio, Víctor y yo nos miramos y aceptamos esa habitación, yo estaba agotado, pero Noor insistía en llevarnos a ver cosas, yo les dije que fueran ellos dos que yo descansaría un poco tras el” jet lag” y se fueron, me di una ducha rápida tendiéndome en la cama para descansar. Siempre dormía desnudo pero en éste caso al compartir cama no creí correcto hacerlo poniéndome un pantalón corto de atletismo y una camiseta de tirantes al poco estaba frito.
Me parecieron minutos pero ya era de noche cuando me despertaron unos cuchicheos y risas apagadas, yo era reacio a abrir los ojos, se encendió una luz tenue y una mano apartó la sábana a un lado, la voz de Víctor dijo: ¡Verdad que está de muerte y él no se da cuenta de ello! La voz agitada de Noor dijo: ¡Es como Gray Fullbuster de Fairy Tail, está para comerle hasta las uñas de los pies! Víctor preguntó: ¿Quién es ése Gray Fullbuster? Noor riendo dijo: ¡Es un personaje manga muy atractivo, que tiene poderes para derrocar a los malos y tu amigo se le parece! Noor se iba a despedir pero Víctor le dijo: ¡Quédate a pasar la noche no puedes conducir en ése estado, en la cama cabemos juntos! A través de las pestañas vi que se desnudaban uno al otro y se acostaban lejos de mí para no despertarme, Noor con sus piernas separadas frente a la cabeza de Víctor le entregaba su verga que mi compañero se tragaba levantando incansablemente la cabeza, Noor gemía en susurros mientras acariciaba con una mano la cabeza del joven y la otra sobre mi hombro suavemente, poco después Víctor le tapó la boca para apagar sus gemidos mientras el joven nipón derramaba su semen dentro de la boca de Víctor, luego Noor deslizó su cuerpo hacía abajo entre las piernas de mi colega tomando entre sus dedos la verga de éste se la metió en la boca chupándola con ganas ¡Hummm, Hummm, que buena! La cara de Víctor miraba hacia mi lado los dedos de su mano izquierda tomaron un mechón de mis cabellos frotándolos con sus dedos. Yo tenía dolor de huevos ante tal calentura y estando boca abajo aún era peor, cambié de posición girando mi cuerpo boca arriba, no se oía nada, todo era un silencio, mi polla apretada en el pantaloncito palpitaba pero me hice el dormido y ellos continuaron hasta que Víctor terminó vaciándose en la boca de Noor, luego tendidos se besaron mirando mi pantalón y mi gruesa verga entre mis piernas que también se movía, Noor dijo: ¡No es bueno que la tenga tan aplastada! Bajando de la cama junto a Víctor deslizaron mi pantalón hacia abajo dejando respirar y moverse a sus anchas mi polla salió disparada, ambos soltaron: ¡Woow, Woow, que inmensidad!
Víctor se tumbó cerca de mí mientras Noor se quedaba de rodillas sobre la alfombra y mi colega tomó mi verga con una mano cerrándola y poniendo la otra por encima de la primera, aún quedaba un buen trozo de polla al descubierto, Noor paseó su lengua sobre su mano y la puso por la parte al descubierto comenzando a masturbarme con su mano húmeda, yo gemía como en sueños y sus bocas sustituyeron las manos, uno a cada lado apretaba sus labios sobre toda mi polla mojándola de saliva subiendo y bajando sus cabezas sobre mi tronco, mi dureza estaba a punto gemí varias veces y sus manos tomaron de nuevo mi verga acercando sus bocas al glande esperando la explosión final y notando mi final comenzaron a chuparla los dos mientras yo estallaba de placer dejando salir mi semen entre sus ansiosas bocas que se lo disputaban, luego uno tras el otro la chuparon abrí los ojos como en un sueño y dije: ¡Gracias chicos, tenía un sueño tan agradable y me habéis ayudado! Noor subió a la cama y besé a los dos, apagaron la luz y nos dormimos.
Al día siguiente fuimos a la Editorial y nos presentó a su jefe y al cual siempre se refería como “domo” repetidamente, era un hombre mayor de unos 50 años delgado y muy elegante se podría decir un dandy, su mirada algo rasgada junto a sus facciones le daban una hermosa armonía e imposible leer en ellos su pensamiento, nos fue enseñando todo al terminar la visita nos entregó un bloc de dibujo a Víctor y a mí diciéndonos que dibujáramos alguna cosa para asegurarse de nuestra eficacia y rapidez, nos pusimos manos a la obra sin decirnos nada entre nosotros, casi una hora más tarde apareció Hiroshi el “domo” de Noor miró el dibujo de Víctor y luego el mío, se echó a reír diciendo: ¡Me gusta que me vean ambos así! ¡Podríamos hacer una serie de historias sobre ése personaje! Nos levantamos acercándonos a ver nuestros dibujos junto a él, Noor también se acercó al verlos gimió por lo bajo, el de Víctor era el propio Hiroshi desnudo con una simple gabardina estilo Bogart cubriendo al jovencito Noor desnudo también, casi enfrente bajo un árbol sentado en una roca Víctor dibujando con el torso desnudo y con pantalón short de atletismo marcando una ligera erección y de pie apoyando su desnuda espalda contra el árbol me encontraba yo con unos pantalones tipo militar por debajo de mi cintura marcando verga en el camal militar y también dibujando mientras el viento soplaba removiendo mi negro cabello casi al estilo manga. Víctor al ver el mío silbó mientras sonreía, el mío era Hiroshi con tanga y correajes de tachuelas desnudo con una sola bota en el pie mientras que Noor medio agachado sobre un costado, también con arnés y sin tanga con correa al cuello la cadena en la mano del “domo” y el joven olía la bota descalzada de su amo, en el suelo su ropa bien doblada y pulcra, entre los matorrales dos jóvenes retozan desnudos mirando la escena uno con pelo castaño claro y el otro negro como un cuervo.
Hiroshi dijo: ¡Creo que será muy interesante uniros para las nuevas series que vamos a lanzar, los dos habéis tenido la misma idea, Víctor me tiene como un salvador y Luc como un dominante y lo soy por lo menos en el trabajo! ¡Vamos a comer, Noor pide el coche! Más tarde nos mostraron lugares de la capital que todo turista debe ver, pero Hiroshi hablaba poco, su mente daba vueltas a algo sin soltar palabra y antes de despedirnos dijo: ¡Dentro de un par de días hay una fiesta en casa de uno de los grandes ilustradores, no es de gala se puede ir en ropa de calle informal y os presentaré a unos cuantos de los mejores dibujantes del manga, Noor estará a vuestro servicio durante todos estos días para cualquier cosa que deseéis! Y recalcó: ¡Para lo que queráis y él os complacerá! Noor con una amplia sonrisa dijo: ¡Sí “domo”!
Esa noche fuimos a cenar y después recorrimos los bares gay muy pequeños comparados con los nuestros apenas cabían 10 personas dentro y se amontonaban en las puertas hablando o ligando, le comenté a Víctor que me apabullaba la inmensidad de tanto neón en las calles, pantallas por doquier y anuncios distintos, a pesar de haber tanta gente me asombraba que no hubieran peleas o discusiones e incluso algún disturbio, todos apenas levantaban la voz para hablar entre ellos, aquí en nuestro país seguramente gritaríamos para hacernos oír, Noor sonrió diciendo: ¡Aquí la gente es más suave, más amable y apenas levantan la voz! Más tarde fuimos a otro local algo mejor se llama Member´s Yui y estaba a rebosar era agradable la música, finalmente terminamos en una discoteca mixta pero primordialmente se veía claramente que los chicos se buscaban entre ellos ligando desapareciendo un buen rato cuando reaparecían se les veía más relajados y divertidos. Noor se quedó de nuevo a dormir con nosotros en el hotel.
Tras desayunar fuimos de compras me percaté que Noor y Víctor se gustaban, compramos unas prendas para el día de la fiesta aconsejados por Noor, pero yo no estaba muy seguro de su elección, luego unas botas estilo casi militar con hebillas a los lados del tobillo y cordones, un cinturón ancho y algunas cosas de bisutería, una pulsera, un colgante el mío en forma de cruz terminado en punta de espada con una piedra azul en el centro de la cruz y un sombrero estilo Borsalino que me hizo sonreír al probármelo parecía los que usaba Sinatra, por supuesto unas gafas de sol al día siguiente íbamos a Kioto en el tren bala y venga a comprar, todo era cargado a una tarjeta que llevaba Noor, Víctor y yo nos plantamos diciendo que si no se compraba él nada devolvíamos todo y se compró un par de cosas, ya de vuelta al hotel estábamos derrengados, ellos dos comenzaron a hacerse arrumacos y yo fui sacando cosas de las bolsas había ropa que yo no me había probado, pero lo colgué todo, ellos estaban desnudos besándose y tocando sus vergas, verlos me calentó fui al baño me desnudé entrando en la ducha tras enjabonarme mi erección fue increíble y me fui masturbando, los dedos de mi otra mano forzaban la entrada de mi ano, al poco me follaba con ellos gimiendo quedamente, me senté en el taburete de plástico doblando mi cuerpo deslicé mi lengua sobre mi glande con varios movimientos más conseguí chuparme el capullo mientras que mis dedos entraban y salían de mi ano y al fin estallé llenándome la boca de mi propio semen, tras secarme fui de nuevo al cuarto, Víctor estaba follándose a Noor pero casi al instante fue a la inversa Víctor sentado sobre la polla del nipón mientras él levantaba su pelvis golpeándole con fuerza las nalgas con cada embestida de polla y ambos gemían de gusto al poco Noor sacó su duro rabo masturbándose lo mismo que Víctor y terminaron juntos soltando su semen uno sobre las nalgas de Víctor y éste sobre el pecho de Noor, se besaron mientras se levantaban entrando en el baño, la habitación olía a sexo y me gustaba ése olor, me acurruqué en la cama donde ellos follaron excitándome de nuevo, mi mano se deslizó sobre mi cuerpo hasta mi verga pajeándome.
Estaba disfrutando oliendo las almohadas con su aroma cuando aparecieron recién duchados tumbándose a mi lado mientras me miraban acariciándose, al poco Noor se puso entre mis piernas levantándolas enterrando su boca en mi culo y Víctor me chupaba la verga mientras me masturbaba, los dedos de Noor entraron en mi ano follándome con ellos y momentos después me corrí llenándome el pecho de semen, que de forma voraz ellos chuparon sin dejar rastro y nos besamos los tres.
Por la mañana Noor insistió en ponerme una calcomanía estilo tattoo sobre mi pecho derecho, era casi circular de un azul cobalto parecido a unas llamas en un lado, luego me puse una camisola blanca sin botones con unos pantalones de loneta oscura de cintura baja, también me puso el colgante, la pulsera y una cadena de la presilla del pantalón hasta mi bolsillo con la cartera sujeta al final, el cinturón, las botas de hebillas y Noor sacó un liviano abrigo oscuro, al salir me puse el sombrero hacía atrás como solía hacer el jugador Neymar y las gafas de sol, Víctor también se vistió con prendas nuevas y Noor le ayudó a terminar de acicalarse, nuestro amigo nipón hizo lo mismo y fuimos al tren bala, casi dos horas después estábamos visitando Kioto, su palacio imperial, sus jardines, los santuarios, se respiraba una gran paz y tranquilidad aunque a veces fuera rota por niños turistas gritones que jugaban, comimos en tranquilidad, me gustaba ver los arrumacos que ellos se prodigaban sin percatarse de mi presencia, se miraban a los ojos y sonreían, de vez en cuando sus manos se rozaban y también sonreían, parecía que yo iba de carabina, pero tal vez mi indumentaria causara furor ya que mucha gente, incluso del país me observaban detenidamente, me compré un foulard de color azul celeste con algún dibujo en negro y me lo puse a media tarde mientras paseábamos por la calle de las geishas, en un escaparate miré mi aspecto sin reconocerme apenas, estaba espectacular.
Tomamos el último tren bala de vuelta a Tokio y se llenó de gente, toda muy silenciosa, nosotros algo cansados tras largas caminatas, Víctor y yo nos acercamos a mirar el paisaje cambiante mientras hablábamos y al girarnos no vimos a Noor donde estaba antes allí había unos jóvenes 5 o 6 y uno llevaba una pequeña cámara, de pronto descubrimos a Noor en medio de esos chicos para desaparecer de nuevo entre los cuerpos de estos, todos estábamos enfrente de las puertas , apreté la mano de Víctor silenciándolo y nos colocamos detrás del chico de la cámara, estaba grabando a Noor siendo obligado a chupársela a uno de ellos mientras el resto le sacaba la ropa, me puse tras el que era chupado sacándome el foulard lo pasé por sus antebrazos atándolos mientras en inglés le decía: ¡Es tu turno de chuparla! Y dándole con mis rodillas detrás de las suyas cayó de rodillas al suelo y sujetando su cabeza la enterré entre las piernas de unos de sus amigos, éste no tardo en sacarse la polla metiéndola en la boca de su colega, mientras los otros sacaban las suyas a pasear al fresco, le giré la cabeza y fue chupando una tras otra las pollas de sus amigos, mientras Víctor ayudaba a Noor a reponerse del susto y colocarse bien la ropa. Finalmente me abrí la cremallera del pantalón sacando mi polla fuera y la puse frente al joven mamador, intentaba apartarse pero sus colegas le sacaron la camisa obligándole a chuparme la verga, todos metían mano sobándomela, al poco el mamador estaba por los suelos lleno de semen de sus amigos mientras ellos inclinaban sus cuerpos para chuparme la polla, mi camisola blanca se fue abriendo mostrando mis pectorales, mi estrecha cintura, el colgante y mi cínica sonrisa, hubo uno de ellos que soltó: ¡Es Gray, es Gray Fullbuster que nos quiere castigar! Y como por arte de magia comenzaron a retirarse como diablos arreglándose las ropas, al de la cámara le dije: ¡Ya puedes subirlo a Internet o te encontraré también! El mamador quedó sobre el suelo manchado de semen, le di la mano levantándolo y le dije en inglés: ¡Ves tus amigos no te respetan, se van dejándote tirado, has recibido lo que te mereces! ¡Arregla tu ropa y desaparece, si no quieres que te perfore el culo con mi polla! Y casi a gatas desapareció de nuestra vista, mi nuevo foulard estaba en el suelo y me lo puse de nuevo, la gente del tren creo que no se percató de todo el revuelo acontecido y si lo vieron no dijeron nada.
Me acerqué a Noor poniendo mi mano en su nuca y besé su cuello soltando: ¡Me alegro de haberte sido de ayuda, pero Víctor estaba muy preocupado por ti!, Me aparté y ambos se besaron cariñosamente, casi una hora después estábamos de nuevo en el hotel y esa noche se despidió de nosotros y regresó con Hiroshi su “domo”. Víctor quedó algo desolado, pero le dije que nos veríamos en breves horas en la fiesta a la que estábamos invitados y eso le animó un poco, durmió abrazado a mí y sujetando mi polla.
Por la mañana tras ducharme la calcomanía casi había desparecido en parte y Víctor dijo que me quedaba de muerte marcando mi escultural musculatura, era su primera lisonja sobre mi cuerpo y con un rotulador azul lo repitió quitándome el resto de la calcomanía, nos vestimos para desayunar y paseamos por el barrio, me gustaba la Capital pero no terminaba de conocer a la gente, eran casi sumisos a todo, el percance del tren así me lo demostró, yo pensaba siempre en un lugar perfecto pero mi decepción iba en aumento, no digo que en nuestro país sea distinto, pero a veces alguien te socorre ante los problemas.
Noor apareció para ayudarnos a vestir, según él de forma informal, pero parecía todo estudiado, Víctor era un guapo seductor enfundado en un traje ajustado con la camisa rosada y la corbata estrecha negra, los pantalones le marcaban un buen culo y la polla también quedaba bien definida, sobre sus hombros un liviano abrigo y una bufanda blanca larga, Noor iba muy atractivo todo de blanco sobre su traje un foulard oscuro, yo había seleccionado la misma ropa del día anterior, pero Noor comenzó a sacar otras prendas, finalmente terminé casi disfrazado con una camisa de lycra casi transparente oscura con algunos destellos brillantes, tan ajustada que los botones gemían para no estallar al respirar, los pantalones los mismos negros del día anterior, Noor me puso el colgante y la pulsera a juego, en el otro brazo una muñequera de cuero negra casi hasta el codo, las botas con hebillas, el cinturón grueso, la cadena con la cartera y de una bolsa sacó una prenda algo extraña, de un color casi militar, parecía un abrigo bastante ligero con una parte triangular sobre mi pecho como un pañuelo de atracador. Tras unas líneas en los ojos por parte de Noor recogió parte de mis cabellos de la sien apretándolos en una corta coleta sobre el resto de mi cabellera, el sombrero y las gafas de sol completaban el aspecto requerido, sonó dos veces el sonido del claxon y bajamos a reunirnos con el “domo”, un Rolls Royce blanco nos esperaba frente a la entrada del hotel, dentro Hiroshi todo de blanco como Noor nos esperaba, solamente llevaba una pequeña orquídea en su solapa de tonos púrpura, al vernos sonrió asintiendo y el chofer arrancó el coche para llevarnos a la fiesta, yo notaba la mirada fija de Hiroshi sobre mí y eso me intranquilizaba.
Llegamos a una gran mansión y bajamos del coche, Hiroshi siempre delante, Víctor y yo detrás de él y terminando el grupo Noor, en el interior había mucha gente, todos hombres de distintas edades, muchos se acercaban a saludar al “domo” apretando su mano mientras inclinaban sus cabezas en señal de respeto, mientras cruzábamos el salón la gente parecía separarse para dejarnos paso, sobre una tarima no muy alta se encontraba un hombre de unos 40 años, no era guapo pero se notaba un donaire de poder a su alrededor, al ver a Hiroshi bajó de forma apresurada tomando las manos de éste entre las suyas mientras se inclinaba frente a él diciendo: ¡Gracias “domo” por acudir a mi cumpleaños! Levantó su mirada y nos repasó a Víctor y a mí de arriba abajo soltando: ¡Padre, me has traído unos hermosos presentes! Hiroshi rió añadiendo: ¡Lo siento hijo mío, pero no quiero que estropees a mis invitados, recalcando con su tono de voz lo de sus invitados! El joven cuarentón dijo: ¡Así será! Y nos presentó formalmente diciendo nuestros nombres y el motivo de estar allí, nos hizo sentar a su mesa hablando un poco entre todos los reunidos en ella, el hombre de la fiesta se puso a mi lado diciéndome: ¡Mi nombre es Ito Mishima y yo soy tu creador! Yo le miré a los ojos a través de las gafas de sol diciéndole: ¡No creo eso para nada! Y me quité las gafas guardándolas en el abrigo y él soltó: ¡Por lo más sagrado, ojos verdes, nunca imaginé que Gray pudiera ser más atractivo que ahora que te tengo delante y con ése sobretodo que nunca quise ponerle a mi personaje! ¡Ven, me has robado el corazón! Casi me arrastró llevándome a una amplia habitación, junto a su amplia cama se encontraba una figura inmóvil, era su creación, Gray Fullbuster, sin camisa y los pantalones un poco abiertos mostrando el vello púbico apoyando sus manos en jarras mostrando todo su esplendoroso cuerpo, me puso a su lado, yo era algo más alto y comenzó a sacarme la parte superior de mi ropa, mientras me desnudaba decía: ¡Te juro que no te dañaré, pero necesito ver más, tocar más, saborear más, te necesito, sí algo te molesta me abofeteas! Y dejé que me desnudara por arriba, su boca me besaba el cuerpo por todos lados, su lengua no paraba quieta lamiéndome.
Agachado frente a mí me abrió el pantalón pero su rostro se apretó contra mi entrepierna mientras que sus manos se apretaban en mis nalgas ¡Hummm, Hummm, es así como siempre soñé que sería! Y de rodillas fue deslizándome el pantalón lentamente saboreando cada minuto de ése momento cuando mi verga salió de pronto soltó: ¡Joder, nunca pensé en ése gran tamaño! Sus manos tomaron mi verga como si fuera a rezar y su boca se unió a ellas haciéndome una mamada, yo gemía quedamente, solamente se escuchaba el sonido de su boca chupándome hasta el fondo de mi alma, mientras chupaba se sacaba la ropa y al poco estaba desnudo, tumbó su cuerpo sobre la cama quedando de rodillas diciéndome: ¡Fóllame, por favor te necesito! Me terminé sacando el pantalón y acercándome a él giré su cuerpo bruscamente dejándolo boca arriba y solté: ¡Quiero que recuerdes mi cara cuando te folle, no seré uno más, seré el único al que pedirás clemencia! Levanté sus piernas apuntando bien comencé a penetrarlo sin mojarle el culo a palo seco, él se quejaba de dolor pero empujaba su cuerpo contra el mío, mi polla entraba muy ajustada abriéndose paso hasta que quedó totalmente encajada dentro de su culo estaba seguro de habérselo desgarrado, con mi cuerpo inclinado sobre el suyo le escupí la cara paseando mi lengua sobre ella y abrió los ojos, nos miramos y dejé caer mi saliva sobre su boca escupiéndole de nuevo, mi verga cimbreaba dentro de él y gimió, comencé a retirarme clavándome de nuevo dentro y gimió de nuevo, sus ojos seguían clavados en los míos, mis labios se acercaron a los suyos y paseé mi lengua sobre ellos, sus manos apretaron mi nuca para besarme, pero levanté la cabeza y el beso no llegó, le escupí de nuevo sobre la cara, incorporé mi cuerpo poniendo sus piernas juntas apretadas contra mi cara mientras entraba y salía de su culo con fuerza, él gemía resoplando, minutos después volvía inclinarme sobre él sujetando su nuca con fuerza devoré su boca de tal forma que casi no podía respirar, al separarnos soltó: ¡Guau que intenso, necesito más! Giré sus piernas a un lado penetrándolo con más ímpetu y decía: ¡Fe-liz Cum-ple-a-ños! Y con cada sílaba lo traspasaba, se quejaba pero su rostro indicaba lo bien que lo pasaba, lo besé de nuevo con rudeza, su polla palpitaba sobre su vientre. Me subí de pie a la cama levantándole casi todo el cuerpo, solamente se apoyaba la cabeza y hombros en ella mientras enterraba mi verga de nuevo con rotundidad cuando la retiraba metía los cuatro dedos de mi mano izquierda para luego clavarle la polla de nuevo y lo masturbaba con fuerza, mi cara lo miraba mientras dejaba que mi saliva se deslizara hacia su boca a tanta altura y él la capturaba con ansia, su ojete estaba totalmente dilatado mi mano se aceleraba lo mismo que mis empujones y estalló entre mi mano mientras apuntaba su polla sobre su boca teniendo un orgasmo de caballo, que capturaba su propio semen y en bastante cantidad, mientras él se corría apretando su ano su cuerpo se convulsionaba y terminé estallando dentro de su culo inundándolo completamente con tal intensidad que mi semen salía y entraba de nuevo con mi polla en su culo, al retirarme de su interior metió sus dedos recogiendo mi semen llevándoselos a la boca saboreándolo le azoté la nalga levantándome de la cama y comencé a vestirme.
Ito Mishima también se vistió y antes de volver a su fiesta de cumpleaños de la escultura de látex tomó el colgante y lo cambió por el mío diciéndome: ¡Este te traerá suerte y tal vez alguna vez te acuerdes de mí! Y añadió: ¡Si Gray fuera un personaje porno, tú serías ése perfecto prototipo! Y me besó los labios reuniéndonos con sus invitados. Hiroshi el “domo” respiró de nuevo con tranquilidad al vernos llegar sin problemas, Mishima le dijo algo al oído luego recibió una respuesta y se fue cabizbajo.
Nos presentaron a otros dibujantes, Hiroshi me susurró: ¡Me ha preguntado por cuanto dinero te puede comprar, yo le respondí que para ti dibujar era un hobby, ya que eres hijo de príncipes y como tal no puedes ser comprado! Yo respondí: ¡Gracias “domo” Hiroshi, no soy hijo de príncipes pero sí nieto del último Duque de Aosta, de sangre noble pero arruinados! Él añadió: ¡Debes haberle agradado mucho ha cambiado tu colgante por el suyo, que es de oro blanco y un zafiro central azul, cuando pases por la aduana piensa que es una baratija más, pero cuando él lo compró hace muchos años creo recordar que ya le costó casi el equivalente a 120.000 euros, ahora desconozco su valor actual, guárdalo bien! Continuamos un rato más en la fiesta y nos retiramos los cuatro, pero antes vi a Ito mostrándole una nota a Hiroshi y éste sonreía se despidieron y nos fuimos.
Hiroshi me miró diciendo: ¡Veo que has recuperado tu baratija! ¡Ja, Ja, Ja, Ito se ha quedado mudo de asombro al descubrir tu nota tras hacer de nuevo el cambio del colgante! Siguió diciendo: ¡A ver si recuerdo lo que escribiste! “Cada vez que mires tu colgante me recordarás golpeándote la boca con mi poderosa polla para luego partirte el culo con ella a placer, ése pensamiento te hará empalmarte con dureza”, muy buena poesía le has dedicado, pero el muy bastardo le gusta recibir golpes pero disfruta más darlos, lesionando a los chicos jóvenes. El coche parecía volar cuando miré por las ventanillas salíamos de la capital Hiroshi dijo: ¡Vamos a pasar la noche en mi Quinta de las afueras! Y una hora después el coche entraba por una gran puerta hasta detenerse frente a una gran casa, como sacada de una película antigua rodeada por un inmenso jardín muy bien cuidado frente a la entrada dos jóvenes de unos 20 o 21 años nos esperaban, abrieron las puertas del coche para que saliéramos con inclinaciones frente a nosotros diciendo: ¡Domo todo está preparado! Tras entrar nos descalzamos andando simplemente con los calcetines, Noor y Víctor fueron instalados en una habitación y a mí me llevaron a otra, en un rincón empotrada en el suelo una bañera para cuatro personas con un biombo que la separaba de la cama baja con un futón que era para dos personas unas mesitas a cada lado bajas y una rectangular igual de bajita, yo estaba admirando los escasos muebles pero muy lindos cuando entraron tres jovencitos de no más de 10 u 11 años con uno de los de la entrada, me dijo en un perfecto inglés: ¡Mi nombre es Sikoi y tienes preparada la bañera! Los jovencitos llevaban un quimono blanco, Sikoi de un azul cobalto, los jóvenes comenzaron a desnudarme y me ayudaron a entrar en la bañera, ellos se quitaron el quimono blanco entrando conmigo dentro y Sikoi también se desnudó mientras los chicos me enjabonaban el cuerpo, me pusieron de pie mientras yo estaba absorto admirando el bonito cuerpo de Sikoi me enjabonaban la verga y el culo, el mayor entró en la bañera se acercó a mí diciéndome: ¡Señor sois los primeros extranjeros que el “domo” ha traído a su Quinta y he de deciros sin ánimo de ofender que sois muy atractivo espero que con el tiempo yo encuentre un “domo” como vos y no echaré de menos ésta mi casa! Se acercó a mí diciéndome: ¡Es necesario señor que os lave bien por dentro! Yo respondí: ¡Puedes llamarme Luc! Notaba su cuerpo contra el mío y sus labios susurraban a mi oído ¡Luc, Luc! Deslizo su mano bajo mis genitales y sus dedos comenzaron a entrar en mi ano mientras me susurraba el nombre al oído, esos dedos eran sabios y me abrían completamente hurgando dentro cualquier resto de suciedad, pero como siempre yo estaba preparado para cualquier eventualidad similar, le dejaba hacer su trabajo y mi verga estaba orgullosa, mi ano se contraía de placer, retiró sus dedos, acarició mis huevos y luego sujetó mi polla le asombró la dureza con la que se erguía esa potente verga deslizó sus manos sobre ella suavemente llevándome a la gloria sus labios se posaron sobre los míos de forma liviana notaba su dura verga contra mi pierna alargué la mano pero me detuvo diciendo: ¡No debo, sin pedir permiso al “domo”, lo siento estoy instruyendo a los jovencitos! Se levantó saliendo de la bañera dejándome excitado a regañadientes salí, me secaron con unas fragantes toallas y me pusieron un quimono negro con estampados blancos, me pusieron unos calcetines y tras arreglarse ellos sus quimonos les seguí.
Entré en otra estancia similar a la mía, los jovencitos se retiraron en la mesa baja central se encontraba Hiroshi sentado sobre sus talones con un quimono similar al mío el otro joven de la edad de Sikoi estaba preparando el té su nombre es Tong, al entrar levantó la mirada señalándome mi sitio frente a la mesita me puse como el anfitrión, Tong y Sikoi sirvieron unas tazas humeantes de té sentándose a la mesa con nosotros en ése momento Hiroshi apretó el mando de un televisor en un lado de la estancia diciéndoles a los chicos: ¡Os he enseñado a ser sumisos, pero cuando yo ya no esté con vosotros tenéis que haceros cargo de todo y seréis el “domo”! ¡Mirad y aprended a dominar sin dañar a nadie! Y en pantalla apareció el video colgado en la web lo ocurrido en el tren bala, al terminar dijo: ¡Sin casi esfuerzo dominó a todo el grupo salvando a Noor de ser forzado para su placer! Apretó de nuevo diciendo: ¡Éste es más asombroso de cómo puede dominar a un ser malvado, sádico y lujurioso sin apenas decir nada! Y aparecieron imágenes en la habitación de Ito Hishima siendo penetrado de todas las maneras posibles y pidiendo casi a gritos lo que él solía hacer con los jóvenes, maltratarlos y lo único que conseguía era sufrir siendo penetrado incansablemente por esa enorme polla suplicando que terminara su placer. Entonces me di cuenta que era yo el que lo penetraba mi colgante quedó con una imagen fija de la cama cuando me lo quitó para ponerlo al maniquí de Gray, Hiroshi dijo: ¡Siento haber puesto una cámara en tu colgante pero estaba seguro que él no podría resistirse para apartarte de mi lado durante la fiesta para demostrarme que tenía ése poder! Continuó: ¡Para mi desgracia en su día me enamoré de él, pero me utilizó yéndose con un hombre poderoso que le mostró el lado oscuro del sadismo, desde entonces no he vuelto a confiar ni a intentar querer a alguien para no cometer los mismos errores! Mirándome a mí dijo en castellano: ¡Padezco de cáncer no sé cuánto voy a durar, es necesario que ellos estén preparados lo mismo que Noor y te he escogido para que les enseñes algunas cosas y perdóname por utilizarte!
Me levanté arrodillándome tras él y pasando mis brazos por sus hombros comencé a acariciarle Hiroshi inclinó la cabeza un poco hacía atrás y mi boca capturó la suya mi lengua entró dentro de su boca regodeándose con la suya que respondía con ansia, mis manos separaron el quimono acariciándole el duro pectoral gimió mi boca abandonó la suya para deleitarse con su cuello yo miraba de reojo a los dos jóvenes que no dejaban de mirar atentamente, fui deslizando el quimono de sus hombros dejando su parte superior al descubierto, Hiroshi levantó sus brazos acariciándome la cabeza mientras susurraba en inglés: ¡Que placer es sentirse amado de nuevo! Mis dedos rozaban sus tetillas y gemía de nuevo ¡Ahhh, Ahhh! Lentamente terminé desnudándole, también a los dos jóvenes, levanté el cuerpo de Hiroshi llevándole a la baja cama en susurros dije a Sikoi y Tong: ¡Sé que amáis a vuestro “domo” es hora de hacérselo notar, lo mismo que sentís entre vosotros, él os ama pero tiene miedo a decirlo! Ambos jóvenes como cachorros se lanzaron sobre Hiroshi como si fuera la leona para darles de mamar y los dos inclinados le chupaban la verga, yo le comía la boca con dureza en algún momento me inclinaba sobre su polla dejándola bien mojada para continuar con su boca, puse mis rodillas a cada lado de su rostro dejándole mi verga sobre la boca que capturó levantando la cabeza su mano la sujetaba con firmeza mientras la chupaba con ansia paseando su lengua sobre todo mi largo y grueso tronco, sus manos no dejaban de acariciar todo mi cuerpo y yo gemía de gusto, al poco sus manos separaban mis nalgas enterrando su boca y lengua frotando mi ano. Tong se puso de pie sobre el futón con las piernas separadas frente a mí y tomando su polla me la metí en la boca, el joven gimió inclinando su cabeza hacia atrás mientras sus manos se apretaban las nalgas, casi al instante a su lado se puso Sikoi y también degusté su polla algo mayor que su amigo y alterne una tras la otra, todos gemíamos.
Me aparté de ellos poniéndome entre las piernas de Hiroshi las levanté dejando su culo frente a mi boca enterrándola bien dentro de su pequeño trasero, mi lengua mojada tardó poco en conseguir que su ano palpitase, a Sikoi el domo le comía el culo mientras él chupaba la polla de su amigo, mis dedos entraban dentro del ano de Hiroshi mientras lamía el ano del joven Tong, alargué el brazo tomando a Sikoi y vino a mi lado dejando las piernas sobre la cama del domo le dije que se sentara sobre él, se agachó sujetando la polla de su jefe y fue entrando toda dentro de él gimiendo, se quedó inmóvil unos instantes para luego subir y bajar sobre ella sin prisas, tiré de Tong y lo puse tras su compañero inclinando el cuerpo de Sikoi le ayudé a penetrarlo junto a la polla del “domo” Sikoi se quejó de dolor pero aguantó valientemente la doble intrusión, el sonido de ¡Clop, clop! El incesante golpear de los huevos de Tong contra el culo de su amado amigo, las respiraciones entrecortadas de los tres el placer que sentían era enorme e Hiroshi gimiendo descargó su semen dentro de tan ansioso culo, Tong al notar la corrida de su jefe tan cálida dentro del ano de Sikoi comenzó a retorcerse mientras lo llenaba con su semen, el joven penetrado se masturbó mojando a Hiroshi el pecho con su corrida, las vergas se aflojaron y Tong se tumbó al lado del “domo” besándole, yo levanté el trasero de Sikoi enterrando mi lengua dentro de su ano abierto lamiéndole el semen, que él iba expulsando haciendo presión, luego se tumbó al otro lado de su jefe y yo lamí el semen sobre el cuerpo de éste.
Tong se levantó y de una pequeña nevera sacó un jarro de cerámica junto a cuatro vasos del mismo material nos entregó uno a cada uno y llenó cada vasito hasta el borde una vez servidos todos levantamos en señal de brindis y bebimos, era fuerte, ya había probado el sake anteriormente peo caliente, éste era frío y entraba genial, nos terminamos el vasito y Sikoi los llenó de nuevo, al poco estaban de nuevo vacíos los vasos estilo cuenco, me fije en la forma de servirlo, si lo sirven con una mano has de sujetar el vaso de igual forma, si es con las dos también has seguir la misma manera de sujetarlo para beber y la tercera ronda la serví yo llenando de nuevo todas vaciándose minutos más tarde algo más animados.
Me incliné sobre Tong comiéndole la polla levantándole el culo para luego enterrar mi cara allí, la apartaba enterrándola de nuevo y él gemía moviendo su trasero, lo puse sobre la verga de Hiroshi que lo penetró y detrás suyo Sikoi que sujetando su verga también la enterró dentro del culo de su amigo y follaron de nuevo esta vez como locos gimiendo a viva voz los tres las embestidas continuadas provocaron que fueran terminando dentro del culo de Tong y éste sobre su jefe, yo repetí lamiendo el semen de los tres mientras ellos se comían la boca. Esta vez de la nevera Hiroshi sacó otra jarra de sake llenando de nuevo los vasos. Tras vaciar la jarrita, los dos jóvenes amantes se follaron a su “domo” pero esta vez de una forma casi brutal las embestidas eran más potentes, más fuertes y devastadoras. Terminando los tres por tercera vez soltando su semen que yo fui lamiendo y otra ronda de sake servido por Sikoi y mientras brindábamos dije: ¡Habéis demostrado vuestro amor unos a otros y que esto sirva para reconocerlo, por vuestra unión!
Hiroshi entre mis piernas levantó mi culo clavándome su verga dura de nuevo empujaba con fuerza mientras me miraba a la cara yo lo acariciaba incluso metiendo mis dedos dentro de su boca, cuando pellizqué su tetilla gimió y noté como se derramaba dentro de mí, agotado se apartó y mi culo fue montado por Tong, que parecía tener prisa por llenarme el culo, notaba sus huevos chocar contra mi culo y también se vació de nuevo, se puso a mi lado besándome mientras Sikoi enterraba su polla dentro de mí, me penetraba lentamente mientras me lamía y chupaba los dedos de los pies produciéndome gran placer, mi boca se turnaba con Hiroshi y Tong juntos o por separado metían sus lenguas dentro de mi boca, el joven Sikoi arreció inundándome el ano con su semen, agotado se apartó.
Me acerqué a la nevera tomando otra jarra de sake llenando los vasos y mientras la terminábamos dije: ¡Ahora tengo para cada uno un presente para que lo retengáis en la memoria! Los tenía a los tres espatarrado frente a mí, fui chupando la verga a Tong mientras mis dedos entraban en su ano abriéndolo para mi enorme polla y con suavidad me fui clavando dentro de su estrecho culo, gimió con fuerza casi llorando de dolor, él movía su culo acomodando mi miembro dentro de su culo terminando por empujarlo contra mí de golpe casi gritó, me incliné sobre su cara limpiándole los ojos que fue abriendo me sonrió complacido, acarició mi cara y dejé salir mi saliva sobre su boca para comérsela al instante en que empujaba con fuerza mi polla dentro de él, gimió dentro de mi boca y lo follé de forma salvaje, su flácida verga se levantó de nuevo y mientras yo empujaba la mía una y otra vez la suya babeaba de nuevo y arqueando mi cuerpo mientras gemía de puro placer me corrí en su culo llenándoselo de semen mientras su polla se sacudía de forma compulsiva soltando su resto de semen en su cuerpo mirándome extasiado dijo: ¡Ha sido brutal!
Repetí lo mismo con el “domo” Hiroshi, chupé su verga clavándome dentro de él sujetándole los hombros con mis manos para que se quedara bien clavado con mi polla mientras devoraba su boca, su cuerpo se convulsionaba hasta el punto que apenas se tocó la verga se corrió de nuevo apretando su esfínter y yo le llené el culo con mi semen de nuevo.
Me enfrenté al guapo Sikoi sin preámbulos levanté sus piernas clavándome dentro de él de un solo golpe, notaba la aceleración de su corazón mientras que sus ojos lloraban intensamente, puse sus piernas a cada lado de mis caderas levantando su cuerpo y apretándolo al mío mientras le acariciaba la espalda mientras yo me sentaba sobre mis talones y balanceaba su cuerpo con mi polla clavada dentro de él, le comía la boca pasándole mi saliva y él la suya sus brazos me rodeaban la nuca apretándose más contra mi cuerpo, baje mis manos a sus nalgas y fui subiendo y bajando su cuerpo mientras lo follaba me devoraba la boca con ganas y yo la suya, notaba su polla entre nuestros cuerpos húmeda y endurecida que palpitaba incesantemente con cada embestida, mi boca se deslizó sobre su cuello chupándolo ansiosamente mientras él arqueaba su cuerpo gimiendo un sonido se escapó de su boca estaba teniendo un fuerte orgasmo ése sonido llenó mi corazón rebosando un gran placer, lo clavé de nuevo sobre mi verga y experimenté un fuerte orgasmo mientras eyaculaba dentro de Sikoi y él sobre nuestros cuerpos apretados, sus brazos parecían querer fundirnos en uno solo, me devoró la boca al terminar de corrernos.
Hartos de sexo y algo bebidos nos quedamos los cuatro fritos durmiendo apretados y juntos. Cuando llegó el amanecer todo volvió a la normalidad, los jóvenes ya estaban preparando los desayunos, los más jovencitos trajeron agua para el baño y poco después tras vestirnos desayunamos con Víctor y Noor que se les veía relajados lo mismo que nosotros, los dos días siguientes fueron más tranquilos y me dediqué a dibujar en mi cuadernos todo los pormenores que habían pasado durante mi estancia en el país nipón, al día siguiente visitaríamos el Monte Fuji y me llevé el cuaderno para dibujar lo pasamos muy bien y nuestros días llegaban a su fin, me dolía marcharme, sentía en mi carne la separación de Noor y Víctor, lo mismo que el amor que noté en mis compañeros de sexo, incluso Hiroshi habló con Tong y Sikoi explicándoles su enfermedad, eso pareció reforzar aún más el amor entre los tres y me alegraba por ellos. Y a pesar de todo regresamos a Barcelona algo dolidos por esas ausencias.
Ricardo sonrió en la cama sobándome la polla mientras llevaba mi mano a la suya soltando: ¡Joder tus movidas debieron ser apoteósicas que me han puesto cachondo de nuevo y te necesito! Se coló bajo la sábana y comenzó a chuparme la polla, apartó las sabanas y se sentó sobre mi verga clavándosela hasta el fondo gimiendo diciéndome al oído: ¡Fóllame como a Sikoi! Me puse de rodillas sentado sobre mis talones y con mis manos en sus nalgas lo fui clavando sobre mi polla levantándolo y bajándolo mientras Rico apretaba sus brazos alrededor de mi nuca y su polla se frotaba entre nuestros cuerpos mientras balanceaba nuestros cuerpos y terminamos juntos mi semen dentro de él y el suyo entre ambos cuerpos mientras nos devorábamos la boca con ardor.
Pero quedaron un par de cosillas que no le conté.
Continuará.