Amor Inválido (14): Decisión

No parecíamos amigos…éramos como unos simples extraños de páginas de sexo después de haber copulado. Era solo una decisión en lo que respectaba a los dos

saludos a todos ustedes! antes que nada lectores tengo que dar algunas aclaraciones.

se que algunos pueden estar muy enojados conmigo. por empezar a entregarles los ultimos dos capitulos tarde. estaban planeados para antes de que se acabara el 2014. y pasaron varios meses in subir nada de Amor Inválido. lamento mucho no haberlo hecho, he tenido algunos contratiempos y espero que con lo que dejo aqui con los dos capitulos que subí. se sientan satisfechos.

como lo especifique anteriormente, lo subiria el 5 de enero de 2015, puesto en mi facebook y aqui estan, no es uno, son dos jeje, les advierto, si son lectores pacientes, los capitulos estan largos. asi que tomense su tiempo para leerlo, cuando esten sin hacer nada o en su tiempo libre

no los molestaré mas. gracias por leer la intro.

/-/-/Aquiles/-/-/

-este es el tipo?

-jefe…fue el causante del accidente de por la mañana…del chico que atropellaron

-…el segundo sospechoso

-si jefe…se lo traje como lo pidió, esposado sin ningún arma corto punzante y desalojado de algún bien monetario

-perfecto – viejo estúpido e idiota, como ansiaba matarlo ahí mismo, asegurado como cerdo apunto de azar y espigado directo a la hoguera. Estaba era imposibilitado de ejecutar algún acto malandrín hacia ese ente de mierda – Rebolledo, siga haciendo su trabajo…gracias por traérmelo

-de nada jefe…

El muy lambón chupa medias se descartaba con el saludo de los pendejos policías, la levantadita de mano con ganas ay si… ¡soy rudo! ¡Pamplinas de maricadas que se ingenian! Y claro! No podía sentarme bien, así que el lamesuelas me tiro en esa silla frente a la oficina del policía comisionado

-bienvenido señor Ballesteros ¡lo estaba esperando!

Ironía, odio cuando la usan conmigo… su uniforme fosforescente y su gorro verde de idiota y su cara de jurisdicción mandante, observaba plenamente como esos dientes patituertos y feos denotaban poderío de gobierno, maldito…

-¿sabe qué? diga la parafernalia que tiene que decir y listo…yo solo sé que estoy jodido como la mierda aromática de un caballo

-si usted lo prefiere señor Ballesteros...claro, la comidilla de este día ha sido usted todo este tiempo…pero si, su ‘astucia’ no permitió poder llegar a lo que quería llegar usted ¿si me explico?

Se atajaba de su silla yendo espaciosamente como en cámara lenta hacia mi puesto…la distinguida impresión de un jefe de policía si era totalmente indiscutible, cabe resaltar.

-no…y no me importa

-ya hombre, solo, déjeme le quito sus esposas…y le sugiero señor…si hace algo indebido conmigo, hay cámaras alrededor en esta oficina…cuando se las quite, no vaya a hacer algo estúpido porque el que se clava la soga al cuello es usted mismito.

¿Y que podía hacer? ¿Ahorcarlo?, sacarle los ojos con las uñas ¿o quebrarle el cuello? lo podía hacer. Soy tan sádico para hacer eso y aventarme…pero, sé que estoy más vuelto mierda que un putas así que no se…no quería hacerle nada como para lapidarlo y acoger una condena peor…que más podía hacer yo…nada, el ‘nada’, esa maldita palabra que salía en mi mente, desnucando todas mis trastornos, mis sentimientos, mi forma de ver la vida ahora…por una simple venganza…

Dejé que lo que más quiero en este mundo, este tentando la vida y la muerte en este momento.

Y bien, solo cogió mis manos, dijo que estirara los dedos y que dispusiera a colocarlos en un papel impreso con todas mis huellas dactilares mientras se ponía a limpiarme cada uno

-señor Ballesteros, así como en las películas mijo…tiene derecho a guardar silencio, si renuncia a este derecho, todo lo que diga puede y será usado en su contra, tiene derecho a un abogado y que esté presente durante el interrogatorio y en caso de no poder pagar uno, el estado le proporcionara uno sin costo.

-si no digo nada… ¿me salvo el pellejo cierto?

-más hondo de lo que esta no puede ser mucho mejor para usted ¡señor Ballesteros!

-genial…-ahora si todo era la verga de la re cochina verga. – perfecto…¿cuantos años me podrían estar dando?

El tipo seguía mirándome y mirándome como con su ojeada todo lo explicaba brevemente insinuando: ¿acaso es un estúpido?

-¿me ve que tengo la autoridad para decirle eso? eso es cuestión con un juez

-¿usted no es la autoridad aquí? vaya que es muy importante aquí señor…-sarcástico

-típico de ustedes los delincuentes…hacernos quedar mal como una plasta de materia fecal sabiendo que los que están perdidos y desamparados son ‘otros’

-y que piensa que voy a hacer? Tirarle flores? Me vio con cara de agradecido por la vida? ubíquese!

-pues papi – volvía a esposarme el muy hijo de puta. – esperemos que el agradecimiento se lo dé el juez cuando almenos le de 20 años de cárcel como mínimo

20?? Mierda…yo y mi puta bocota. Aún estaba con la ropa con la que asistí al ‘evento de clausura’ de Roger…estaba completamente arrasado. Y si…nunca pensé que Franco se accediera a equivalente cosa pendeja y cliché de novela por esa bazofia. ‘¡Ay te voy a salvar! te voy a rescatar de este demonio que te llevara al infierno ay, ay’ . Nótese el tono de niña tierna en mi voz y en mis escuelas para completar dichas oraciones. ¿Era capaz de seguir con todo esto? Roger? no. El muy maldito hizo que me esposaran, que me introdujeran en una camioneta de la policía y a Darlan se lo llevaron también y el carro que nos robamos se fue para los patios.

-comandante, teniente, mayor…lo que usted sea… ¿iré para la cárcel no?

-primero ira para un centro de reclusos justo donde queda también la policía, oh mire señor Ballesteros! Por si no lo sabía está en la policía nacional, el comando donde interrogamos a los nuevos delincuentes como usted que van en camino hacia la desgracia.

-deje de poner ese tono de sarcasmo conmigo socio porque si no yo-

-tampoco respete a la autoridad señor ballesteros…aún es tiempo de que usted haga nuevos amigos mire! – había un cuarto vigilado por policías con armas y cascos grandes, uniformados y adentro la gente…ese tipo de gente…mañosa, descuidada, maldita, asesina, llena de odio, delincuentes que irán al mismo paradero que yo…solo que yo pues… - Justo aquí…si me pregunta por lo de la audiencia con el juez mi querido señor ballesteros, lo sabrá pronto - abrió la reja con toda su fuerza me tiro al suelo empujándome y yo todavía esposado, raspándome un poco el mentón por ese piso carrasposo y ser liberado de las esposas.

-cuando el juez lo mande para la puta mierda – cambiaba su tono de voz por uno más maquiavélico – hahaha – ni sabía cómo reírse, intentaba incorporarme hasta que dos tipos se me acercan

-qiubo papi, pase pues los tenis!

-y si no lo hago qué? – me quitaba el mugrerío de mi ropa con su cara de idos y perdidos por tanta hierba excesiva, sabía que no se permanecerían con mi pregunta hecha

-ahh amenazando? Míralo como se cree este pelao

-pase pues los tenis a ver! Páselos

Los dos como idiotas se arremetieron contra mí. Angustiados no sabían que hacerme, uno se iba aproximando por detrás mientras cogía algo de ventaja y el otro solo me distraía, no soy estúpido. Era cuestión de que el de atrás recibiera un golpe en su nariz mientras le daba con mi puño más un cabezazo trasero profundizando más su caída al escucharlo y el otro con un golpe de rodilla en el estómago malgastando el aire conviniendo ese olor a tufo de hierba que salía por su boca al perder ese aliento de enfermo.

-ojo conmigo…que yo no soy ninguna perita en dulce

Ambos se iban…derrotados por mi manera de defenderme y mi mala maña de poder enfrentar la situación de mi poderío. Buscar algún lugar disponible, algún puesto vació para yo esperar mi destino, esperar la jodera y no precipitarme tanto por tanto problema o por tanta locura… cuando lo vi. Descalzo, destruido y con la cara ida cerca de uno de los escondrijos del lugar amacizando una de las varas de esta prisión en miniatura.

-Darlan…

Intentaba ver donde se aparecía el toque de mi voz, era el momento justo para que me distinguiera…y lo hizo

-no pensé que fuéramos a terminar en las mismas

-‘Aqui’ –e-estamos…estamos muy pero que muy ahogados…con la soga al cuello…’Aqui’…

-ya ya…pero era tomar el riesgo…tú mismo me lo dijiste…no querías que el hijo de puta ese del Roger estuviera cerca con Franco y yo tampoco lo quería, ambos necesitábamos hacerlo…

  • mira como salió todo…-serio…raro verlo serio y con…miedo, miedo? Darlan siempre ha estado jodido, muerto en vida cada vez que me lo encuentro y nunca había tenido miedo…y ahora…ahora coño ¿en serio?  Estaba en sus últimos momentos de estar disoluto. 983 veces debió estar más que jodido y ha sobrevivido...porque… ¿porque ahora?

-Darlan… -me arrinconaba a su lado y este tipo, joder este tipo no era el mismo, no era él. – Darlan…¿qué te pasa?

-no entiendo como…estas tan tranquilo después de esto ‘Aquí’ sabes en la mierda en la que nos metimos?

-si pero…saldremos de esto

-dentro de cuánto eh? 20 años? 50? 70? Maricón! Nos quedaremos aquí toda nuestra hijo de puta vida!

-yaaa calmatee ¡jamás te vi así! Estando como siempre estas y deberías preocuparte más por eso, de vivir y seguir así de arrastrado como lo sos vos y ¿crees que no vas a salir de esto?

-ya vi que vos no conoces una cárcel… - aun serio

-quien sabe…talvez…no sea tan malo después de todo…lo que necesitamos es salir sea como sea y pues yo tengo fe de que podemos

-lo decís así a sangre fría…como si no te importara… ¿acaso a vos te importaba el ‘pelao’?

Lo miré, me fijé con ganas…aterrado estaba y con algo de odio en esos ojos perdidos y sus ojeras ocultando la dichosa vagabundería de Arboleda.

-la verdad…Franco es mi amigo y lo que hicimos pues…nos jodio pero

-solo respóndeme…

-no, no me importa

La gente…era solo lo que cada persona que estaba cerca de nosotros, cada preso, cada policía rondando, acarreando papeles y otros vigilando puertas y aceras, cumplían con su deber…pero el mío, ser ignorado. Ser ignorado por Darlan parándose del cochino suelo, solo siendo despedido por su espalda, de no dejarme ver su cara y esa indignación que me dio cuando vi que me veía como un ser inhumano. Solo me aprovechaba de Franco…su dinero y varias cosas que el tenia y yo no podía conseguir. Le tenía envidia, después de él estar en su penúltimo semestre y ya con chances de poder ocuparse en lo que le gusta y yo…aquí sin nada? Sí. Con demasiada desazón lo engatuse lo considere mío y no me importaban muchos de sus sentimientos.

Me tomé un momento para reflexionar. Si a mí no me importaba Franco porque coños me daban celos, rabia, puteria inmarcesible, impulsivo cantando el himno nacional con toda la rabia del planeta? Me malgastaba por dejar a Roger en la mismísima calle por ser un puto proxeneta para vivir. Pero…y yo? Yo que he venido siendo? Un traficante de cosas expedidas ilegalmente sin importar lo que los demás hagan o si me pilla la policía y endeudándome como un idiota? Que era eso eh? No podía juzgar. ¿Desde cuándo tanta moral se interponía en mí? Desde cuándo tanta demencia se colapsaba como para yo embelesarme en un mar de ira furibunda y vanagloriosa como para sonsacar el pecho y matar a todos con una sierra?

-aun me acuerdo de lo que me dijo… - hablaba solo, que idiota… -…en serio, realmente…que ganaría yo con esto sabiendo que-

Un idiota me empujaba la cabeza llegando casi a la baranda para golpearme. Iba a arremeter contra el cuándo fuera a tomar represalias contra él pero, observaba que a Darlan lo jodian de nuevo…tres maricas distintos de mala pinta seguían abucheándolo…pero qué? que les podía ofrecer? Solo él tenía sus ropas desaliñadas como moribundo de la calle alguna defensa? Ninguna. Ósea, puede que me odie pero…necesitaba defenderlo, pero…porque.

Darlan no es nada mio solo que-

-un mariquita que se va a poder defender? Quien dice que un marica va a servir algo en esta vida? si tuviera una pistola te daba en tu puta frente para que no me jodieras la vida.

Ya iba ver de lo que era capaz un marica…

/-/-/Roger/-/-/

-¿¡Donde esta!? ¿¡Dime dónde está!?

-e-espérate Maxi no! para!

-¿¿¡DONDE PUTAS ESTA ROGER!??

-Cálmate Maxi! No tienes que sulfurarte!

-¿¡sulfurarme!”?  ¡Cómo quieres que no me sulfure sabiendo que mi mejor amigo está en cuidados intensivos en este momento! Apunto de saber si requiere operación o no! Como crees que me voy a poner Roger eh?

-yo sé, yo sé solo ¡intenta relajarte! ¡Yo también estoy preocupado por Franco! lo importante es que lo pude traer y están haciendo todo lo que pueden para-

-¡¡NO!! ¡No me digas eso de que todo lo que pueden! ¡Eso significa que no harán nada! ¡Que no lo van a salvar! ¿¡Que no entiendes que ese peladito tiene que vivir!?

Estaba como listo para saltar a la arena de boxeo y apreciarme vencido por cada palabra arrolladora de Maxi, estaba devastado, destrozado y no sabía cómo ayudarlo. Como hacer que mi amigo reaccione, que se pusiera en mis zapatos. Que me diga lo que yo debo saber pero, carajo ¡no sé porque estoy tan calmado! Quizás fue cuando se llevaron a Aquiles en esa patrulla junto con…con mi mejor amigo ¡mierda! aún no lo digiero bien!

-ROGER! PONME ATENCION DE UNA PUTA PORQUE YO- -O-O-O-O-O-O-R-R-R-R-R-G-G-G-H-H

Maxi solo de repente se puso a temblar y balbucear como pendejo sin remedio, sin querer lo vi fue en el suelo estremeciéndose un poco forjando una especie de baile de sapo o que se yo, no sé, doy vuelta a ver al frente viendo como cierta chica asiática se guardaba algo en su bolso.

-Aiko…pero que…

-Déjame a mi Roger…sé lo que tengo que hacer ahora

Que iba A hacer? Acaso ella? No…solo se agacho en cuclillas volteo a Maxi mientras este abría los ojos y se disponía a –

-¡HETU KUSO! ¡ATAMA KECHI WARU SOO!! ¡¡OKAMA HANAKOSAN!!

Slap! Esa cachetada sonó en todo el pasillo y la gente paro de hablar por un segundo, yo quede con la boca abierta por la semejante actuación que se fajo Aiko…calm’o a Maxi en un dos por tres y su cara pues…esa mano de asiática se la dejo bien marcada. Y pues, no sé si ella arregla las cosas de esta manera o qué, pero.

-¿Vas a dejar de hacer una escenita de quinta como en las telenovelas o en los Dramas orientales? Maxi aterriza Baka! ¡¡Sabes que Franco el idiota ese saldrá de este apuro tú mismo lo dijiste una vez!!

-ouch…-el solo seguía sobándose la mejilla – ¿que dije?

-que siempre hay que tener fe y que todo va a salir bien, que siempre es lo que tenga que pasar, pero para bien, siempre se lo decías a Franco ¿no? Pues bueno aprovecha esas palabras para este momento – ella solo volteaba, su gran y cabello lacio de color negro serenaba el viento en cada raíz de su melena – voy a buscar algo para tomar…espera a los demás aquí…

¿los demás?

-ah y Maxi aparte de eso estás d-

-FUSAKENNAYOO!!!!!!!

Maxi gritaba esa palabra que ni yo entendía. Aiko solo, lo miro, quedo en silencio y se fue

Ayudaba a Maxi a levantarse, como que, estaba en sus labores de logística de nuevo, estaba sucio, con manchas en su uniforme, unos guantes de lana con acero y su pantalón lleno de tierra en algunas partes. Por su cinturón tenía unas gafas protectoras y su pelo algo descuidado, medio reseco. El no paraba de masajearse la cara y si claro, Aiko le dio tan duro que se notaban las marcas de sus uñas en la cara

-las mujeres dan duro

-ni que lo digas Roger…este…discúlpame

-tranquilo…solo que pues…estabas desesperado

-y ella ya me tiene la confianza completa para hacer este tipo de cosas…

-Maxi... jeje…em ¿qué te dijo?

-¿qué me dijo de qué? – El pobre parecía un niño sobándose la cara – no entiendo

-¿qué te dijo en japonés?

-ah…eso, creo que fue: idiota, mierda, que me romperá la cabeza, marica maldito, no se…

-wow…que boca

-por eso lo dice en japonés, que creíste?

-y tú que le dijiste?

-que ¿dejara de joder?

-y como sabes todo eso?

-El libro ‘como hablar japonés en menos de 30 días’ está dando sus frutos

-jajaja – por inercia me sobe la cara también, ni ideas porque

-hey! De algo tengo que distraerme mientras Franco no este. Aparte me ha servido.

No parábamos de reír. Pues…no sé, para serles especifico, era lo que necesitaba, estar ahí solo con el codo vendado, recibí un raspón grande tras ese impacto del que me proporciono el que se encuentra en operación. Estoy preocupado si, lo sé pero. Me siento…algo despejado, como si un soplo fuera a consentirme por las entradas y las rendijas de mi cuerpo, orejas, boca, nariz, eso, sí. Estoy sereno porque Franco saldrá bien, pero siempre existirá esa punzadita que me tendrá loco dentro de poco y quien sabe, pueda surgir. Maxi me distraía con sus tonterías, apoyando a su amigo y yo esperando, que dicen sobre mí-

-¿y que estabas haciendo?

-¿qué cosa?

-realmente estas muy ido Maxi, lo que llevas puesto, las gafas, los guantes. – le señalaba

-ah…esto.  Estaba haciendo las entradas de madera para cada zona, esas grandes como las del oso yogi

-eh?

-‘bienvenidos a Jellystone’ oye bubú! Pásame la canastillaa’ – colocaba un acento pendejo

-jajaja que te fumaste Maxi? Inhalaste el olor de la pintura? el thinner talvez?

-no se…cuando estoy preocupado pienso a decir pendejadas…

No me acordaba…sentados en esa sala de espera y no captaba la realidad del asunto, heridos, enfermos, muertos. Que desgracia estar aquí y ver alguien que quieres, irse por la borda.

-oye – quería animar el ambiente, mucho vinagre – los demás que vienen…

-ah…-los del trabajo…y Renata.

-milagro que me respondiste bien, pues… ¿tú les avisaste?

-Fue Renata que lo hizo, tú le avisaste a ella y salí lo más rápido que pude cogiendo un taxi sin importarme nada.

Sin…importarle nada? Maxi debe… de querer mucho a Franco…pero mucho…Darlan nunca habría hecho eso por mí. Ni siquiera se percataría de eso.

-yo se…pero Maxi tú y Franco-

-¡ahí estas pendejo de mierda!

Se escuchaba una voz tenue y algo aguda pero sin salirse lo macho, mire y vi que era el amigo de Maxi y Franco, Oliver, el que me parece…no sé, raro

-¿porque no nos esperaste? jalaste a Aiko como un trapo viejo y ni te dignaste a avisar como se debía

-discúlpame ¡pero tú sabes porque tenía que llegar rápido!!

Sabe?

-Hola Roger – me estrecha la mano, ofreciéndosela claro – disculpa, no te vi

-descuida Oliver – sonreía

-¿sabes algo de Franco?

-está en operación. Sufrió un corte punzante que afecto un poco los órganos que tenía por la costilla especialmente por el pulmón…pero que no hay que alarmarse. Aunque se demorara

-¡Que buena noticia! ¡Me alegra mucho escuchar esa información que me hace estar tranquila!

Otra voz…mire y no, no era Renata. Era…la Jefa de Franco, Clara y varios de los trabajadores compañeros de Franco.

-ay Roger…estaba tan preocupada, llegamos en cuanto pudimos, aunque deje a algunos en varias labores mientras.

-no, no se preocupe señorita Clara, buenas tardes, gracias por venir

-ay Roger…tranquilo, la modestia no va contigo - me sonreía…y lo más chistoso de todo es que podía verle su mano izquierda, descansando. Según Franco siempre la tiene ocupada por su laptop. – descuida, sé que tu estarás aquí vigilando demasiado a tu chico, lo importante es que está bien

-Jefa…discúlpeme por – Maxi se paraba, el con ese vigor y verse de esa manera, algo preocupado y desfallecer frente a su jefa – discúlpeme…solo eso.

-tranquilo, yo sé que tú quieres mucho a Franco, esa fue tu reacción como la de mucha gente también. Pero para la próxima me avisas con antelación, necesito saber si todo mi equipo de trabajo se halla en óptimas condiciones – Clara tocaba su hombro delicadamente dejando percibir esos ojos bellos por sus rizos dorados semi teñidos – te acuerdas de mi lema cierto? ‘una maquina…

-es perfecta si todos sus engranes giran y giran’ lo sé jefa… - exhalaba – gracias.

-eso…ahora, ¿quién de ustedes puede traernos café de la cafetería? El café es un adictivo importante en un trabajo pero sin estar tan cargado ¡es bendito!

-yo, yo jefa yo! – todos los demás en multitud se enfrascaban para ofrecerse, hasta Oliver también! Iban a ir pero-

-atrás…acasos ustedes no se anticipan a las cosas? ‘bakas’

Aiko traía una bandeja con varios cafés con leche en vasitos desechables y con sorbetes cortos y un café late con azúcar encima entre todos esos vasitos – hay que anticiparse a las cosas, tomen cada uno y me dejan el grande por favor

Cada uno asentía, Maxi me pasaba un vasito sin tratar de que se me regara y Aiko le entregaba el café late a Clara

-mil gracias Aiko! Que servicial eres! Pero he querido saber una cosa - se sentaba con cara de pocos amigos a mi lado

-dígame jefa? – Clara sorbía un poco de su café y los demás también

-¿qué significa ‘baka’? es un insulto? Una abreviación para decir ¿’amigo’?

Aiko parecía el volcán del Kilimanjaro rebotando en toda su cara semi maquillada, apreciaba la vergüenza más grande del siglo

-anda Aiko respóndeme, no se mucho de tu idioma.

-es que…yo…jefa yo…

-okey, me responderás luego…pero me la debes vale? Por ahora mañana estarás de 5 am a 3 pm

-¿¿cómo!? – ella soltaba un grito y Maxi no paraba de reírse sutilmente. – ¡pero jefa!

-si me dices que significa talvez cambie de opinión okey? mira el lado bueno! Saldrías a las 3 y no a las 5, tienes la tarde hoy

-ash… ‘ ba-

-y sin palabras subidas de tono en japonés Aiko, quieres que sea 4/2?

Aiko termino de quedarse callada sin decir nada mientras todos nos tomábamos nuestras bebidas. a veces la jefa de Franco juega muy indecente jejejeje me gustaba mucho la cara de Maxi, quizás estos ánimos sirvan de a mucho para poder salir de estas.

/_..._\

-Me la jugo muy sucio…Roger, no sabía que decirle

-pues…dile Aiko. Creo que debe de saber porque creo que la dices a diario ¿no?

-no me la puedo sacar de mi lenguaje, está dentro mío desde que aprendí a hablar

-dijiste ‘baka’ ¿cuando eras bebe? – me rascaba la cabeza

-si! Y no le puedo decir a mi jefa que ‘baka’ es idiota en español! ¡Me sanciona! Joder…debí haber sido más discreta, eso me pasa, con Franco al lado…lo podía hacer

-creo… - suspiré - que nos hace falta el…no crees?

Aiko resplandecía esa contemplación, sabe que tengo razón

-si pero…hay que esperar a que se recupere.

-lo sé…pues Aiko, solo dile de la forma más sincera, eso lo aprendí yo a las malas, decir la verdad para no seguirte ahogando en una mentira

-lo sé Roger…este ¿te quedaras aquí? – miraba mi ropa algo sucia por el accidente. – deberías ir a cambiarte y volver

-no dejare a Franco solo, esperare a Renata. Almenos decirle los detalles

-qué bueno que estas aquí…sé que Franco saldrá de esto, pero pues…ya van a ser las 12 y 30 tengo que irme dentro de poco…

-lo sé…tu jefa se fue algo ajetreada para afuera

-sí, unos problemas con unos inversionistas…le ha tocado duro ella sola sin que Franco no esté – sonaba preocupada

-en verdad necesitamos al ‘nerdito’…demasiado.

-si…Roger

-cuéntamelo – me arreglaba la bota de mi pantalón sin que se me corriera la silla.

-¿sabes dónde están Maxi y Oliver? No encuentro a ese par de pendejos

-déjame ya los busco, ¿me prometes que le contaras? – por más gay que fuera, levanté el meñique, ella me correspondió de buena manera. Haciéndolo también

-lo haré

-vale – le sonreía – ahora déjame yo los busco.

Mi camino ahora era encontrarme a ese par que a veces los dos se desaparecen, será que poseerán algo entre los dos? De repente me acuerdo que en la fiesta Maxi se ponía de fastidioso con Oliver y Oliver se hartaba. Ahora ya ellos se tratan de lo más serio, pero sin perder la amistad entre ambos. Y llegar así de la nada. Sus compañeros de trabajo, su jefa, intranquilizándose por él. Me acuerdo que yo le decía en esa época: no digas que nadie se preocupa por ti, todos te quieren, tu familia te quiere, yo te quiero, sin importar nada …en cambio yo y ese vacío angustioso era el que me sosegaba y el que me daba tanta clemencia de mí mismo, porque nadie me valoraba, ni se preocupaba por mi después de tanta desgracia que hice. La vida sigue Roger…y ahora es tu deber salir y cuidar a Franco.

Fui al baño y empecé a mirar, no había nadie. Entre pero…se escuchaban susurros. En una puerta…será que

- escúchame…tú no puedes colocarte de esa manera Maxi…acuérdate lo que hablamos ayer…

Maxi y Oliver…escondidos en el…baño?

-no puedo Oliver! Sabes que se puede ir inesperadamente y no quiero que pase! Si ese niño se va yo me muero! Me muero!

-la vida es así! Pero tienes que empezar a mirar que es lo que tú quieres! Que es lo que deseas, yo sé que tu-

Se escuchaban sollozos…y obviamente Oliver no era el que lloraba.

- ese niño Oli…ese niño tiene que estar conmigo…es el único que hace que mi vida no sea amargada de por si…

-Maxi…

-y si, sé que es mi todo, me gusta, lo adoro…no quiero ser un idiota que no pudo expresar bien lo que sentía, ofrecer ese cariño y que él no este, me quedaría con esto adentro! Y no quiero!

Aun…

Aun Maxi siente cosas por Franco…apenas me vengo a enterar de esto…que ridículo

-tienes que seguir tu vida, pero por ahora tienes que ver lo que tu deseas en tu vida.

-sabes? – Sollozaba – que el haya sido el persistente para yo tratar de seguir mi vida y buscar a alguien…hace ver lo que realmente quiero…estar con el

-y Roger?

…yo?

-Roger…es un caso que tengo que hablar con él, ser sincero con él, es mi amigo, lo quiero, que porque lo conozca desde hace poco. Hace que lo sienta como de toda la vida.

Pero… de que quiere hablar conmigo?

-pues inténtalo…hay que aprovechar los momentos que tienes con él para serle sincero, de lo que sientes por franco y lo de él también.

Pero…

-vale…lo haré…quien creyera que te estaría contando esto a ti carajo! Jajaja

-no se…soy tu amigo, te apoyo.

No quería oír mas…Salí rápido de ahí, en silencio, dejándome ser embaucado por las mesas de pacientes y los enfermos en cada sala, los pacientes esperando y los trámites para cada tipo de cosa. De veras se pondría en esas? Yo le gusto a Maxi? Fue algo transitorio pero yo pues…es bonito, gallardo, bien parecido y todo pero pues…yo no puedo, él y yo no congeniaríamos, imagínate tu coherente conmigo alguien tan bien como el enfrascado con alguien tan poca cosa como yo. ¿Lo veo como una realidad? No… pero ¿acaso siento enorme desesperación y sentirme inseguro de no poder tener una cosa con maxi? Volví a la sala de espera, seguían dando esa novela ‘miaminesca’ de por la mañana, la cambiaban las enfermeras para ver el clima.

Tome un vaso con agua del dispensador y me enfoque para beberlo frio y sin entorpecimientos. El dúo maravilla hacia su escena. Maxi delante y Oliver detrás

-y los demás? - Preguntaba Maxi.

-ah…a tu jefa se le presento una emergencia y está hablando afuera, ¿ya se van a ir también?

-eh si, algo…pero mañana pediré permiso para ver si puedo estar con Franco estos días hasta que se mejore,

-ah ya…

-y pues…era para ver si podíamos… hablar

-eh…si dale vamos, pero no tienes que irte? – Maxi me miraba confundido, como si realmente no supiera – será rápido o largo?

-no yo digo…mañana, los dos solos

Sí, claro, no sabía…a veces es muy pendejo

-ah…dale, pero hay que decirle a Renata lo del-

-PERMISOOOOOOOOOOOOOOO QUITEEEEEEEEEEEEE MUEVASE!!

Alguien caía al piso, a toda velocidad y sin importar lo que hubiera a su paso llegaba una chica con varios elementos de papelería, una maleta sudada y rancia caía en la sala de estar mientras le arrebataba el control del televisor a una de las enfermeras y pues…me iba dar retraimiento pero-

-Rennie que coños haces? Estamos en un hospital!

-ah hola Roger! Como estas? yo muy bien gracias, pero tienes que ver esto de una buena vez! Ya! El canal 7! El bendito canal 7!

-¿pero qué paso? – preguntaba Maxi

-no me quiere dar este puto botón!

-ya, ya déjame, pásame lo a mi! – el intento fallido de Renata era imposible pasarlo, dándoselo a Maxi y este sin querer se pasó de canal en el 77 y luego dio al 07 para quedar bien en el canal que era, daban las noticias pero-

-En otras noticias al noroccidente de Cali se presentó un accidente a pocas horas de la mañana, un joven de 23 años llamado Franco Pallares sufrió un accidente automovilístico dejándolo en un estado recaído y siendo remitido a la clínica más cercana donde ocurrió dicho suceso. Lo poco práctico fue ver como los involucrados en el accidente estaban en la escena del crimen intentando, asesinar a un transeúnte en silla de ruedas y no decidieron escapar de la policía, vamos en vivo con nuestro corresponsal Carlos Gutiérrez quien tiene toda la información, Carlos adelante

Mostraban lo del accidente. No me pude percatar de lo que sucedió con los presentadores, porque me llevaron en una ambulancia.

-así es Mónica buenas tardes, pues el joven de nombre Franco pallares, se encuentra en este momento en operación debido a que sufrió un golpe fuerte ocasionándole una herida grave en su costado izquierdo ocasionándole una lesión fuerte, pero no está en estado recaído como cuando sufrió el accidente. Los dos implicados en el crimen fueron dos jóvenes uno de 25 años llamado Aquiles ballesteros y uno de 24 llamado Darlan Faney Arboleda siendo el ultimo el que conducía el automóvil, pero con intención de atropellar a un transeúnte en silla de ruedas, lo loco del caso es que el detenido Aquiles fue el que detuvo al transeúnte con el nombre de Rogelio Cardona intentando propiciarle su muerte, pero el que salió implicado fue el joven Franco veamos la siguiente nota.

Mostraban donde Franco me empujo, mi silla de ruedas, las caras de Darlan y Aquiles intentando taparse y esposados metiéndolos a una patrulla. Mientras varios policías hablaban y los entrevistaban. Fotos de Franco como de tamaño cedula y solo me mostraban a mi entrando a una ambulancia

-así que eso fue lo que paso…

-yo te llame Renata solo que pues…no pensé que fuera tan noticioso

-¿¿¿¿cómo???? ¡¡¡Es mi hermano mierda!!! ¿Tú qué crees? Que el solo se pondrá así nada más? Obviamente esto fue un accidente, accidente. Menos mal dentro de poco nos darán noticias, solo falta que la universidad me deje más trabajos para que me este jodida.

-ustedes si hablan no? – nos interrumpía Maxi - ustedes no saben la gravedad del asunto cierto?

-¿qué? –ambos al unísono

-¡que el hijo de puta ese del Aquiles y otro tipo intentaron matar a Roger! ¿¿¡No lo ven!?? ¡Yo nunca voy a confiar en esa rata nunca! Nunca lo haré

-pues…eso lo sabemos, o es que no te habías dado cuenta?Massimo aprende a ver las cosas!

-ah sí? Pues tú lo venerabas y lo colocabas en un pedestal! Y ahora qué? Lo detestas mira tú la perdida!

-ajá y entonces? Tu sabes que-

Yo solo dejaba que ellos discutieran…al fin eso quería, que los malévolos se fueran al mismísimo demonio. Lo que no quería era que esos demonios fueran inducidos por Darlan…es lo que a mí me preocupa, él nunca ha estado en una cárcel al menos eso es lo que creo…solo que vas a estar jodido allá y pues…él dijo que se lo había buscado…no puedo hacer nada. Así es la vida…

Aparte de Franco, me está preocupando Maxi.

/-/-/Aquiles/-/-/

-Lo siento señor Ballesteros…ehmmm la verdad su caso

-no te preocupes abogaducho…heh, yo sabía que estaba en mi jodida miseria, ni un juzgado de medio pelo se encargaría de mi

-pero… ¿porque tan campante? – el no paraba de observar mi incredulidad irracional y de mi sonrisa pendeja en mi cara, acaso se notaban las moscas putrefactas en el rostro? – señor ballesteros, son 5 años de cárcel y si el que sufrió el accidente fallece, serán 25

-lo que sea…comprensiblemente no me quedare en una cárcel.

-¿no sabe lo que es una cárcel cierto? No tuvimos los argumentos suficientes como para poderle testificar una libertad o algo equilibrado, libertad condicional, no hubo suficiente material que atestiguara a su favor

-es lo más probable – el policía aferrándome con sus esposas no me hacía moverme tranquilo, caminando por esos tribunales. Vaya que era fastidioso andar esposado. – ¿pero qué? el caso es que yo no persistiré mucho tiempo abogado, créame, si usted sería capaz de estar siempre aprovechable para mí por si pueda estar sometido ante una corte o-

-ehmmm yo… yo no

-típico de todos ustedes, ya cuando a uno lo ven en la inmunda, ya es caso perdido

-no, no es eso señor Ballesteros solo que-

-sí, sí, ya, entendido perfectamente…voy derecho a una correccional, eso se sabe, de todas formas le agradezco toda la ‘ayuda’ que me brindó, justo como la de un perro sabiondo cuando no encuentra nada que comer.

Solo me fui, bueno…me llevaban como la escoria más grande que pueda existir. Cargos hacia una persona que no tenía nada que ver con mi vida, claro, el abogado defensor, el fiscal, su señoría que por cierto, las niñas lindas tiene cargos relevantes frente a su apariencia, una mujer esbelta y posicionada me mando a una correccional. 5 años de prisión por intento de asesinato y por causas posicionadas del destino, si Franco se muere, se aumenta al doble. Y pues que pudo decir yo a ese tipo de improperios? Acaso no ven lo terrible que es el tal Roger? No se fijan en lo que le hizo a Franco? Ahora yo soy el culpable! Tome un arbitraje arriesgada pero ya pues! No es como para yo alardear y decir joder! Realmente no me importa! Y si! Realmente no me importa! Si se murió bien! Si no, también!

Que tan malo puede ser una cárcel? No me dieron puños y tácticas para poderme defender personalmente?

-hey! Cuidado! Con mañita! No te importa que me lesione? – el muy hijo de puta policía me tiraba con ganas a la camioneta estilo bulto de papas. Joder que el hombro casi me lo disloco – ¡policía hijo de puta!

Me cerraba la puerta de la van en la cara…iba hacia dónde? Ni idea, solo que ya no sé qué hacer o que decir, al presenciar toda esa oscuridad metalizada y carbonífera y solo una luz en rejas de los copilotos del vehículo. Me olía mal la boca y sentía mi boca algo seca, mis manos algo sucias y mi desaliñado estilo no iba para más…no se de Darlan tampoco, su audiencia fue temprano que la mía.

Tengo que decir que esta es una desdicha en mi vida? la más grande? Solo…

/_..._\

-Jefe, uno nuevo le traigo

Con fuerza me tiraban en una silla, me llevaban aun esposado y con severas influencias varios uniformados de camuflaje azul marino y azul oscuro, con su cara me matones serios y destructivos, seguían a mi acecho.

-vaya vaya! – Me dejaban solo con el jefe, un tipo grande y alto, pero medio desvaído – señor Ballesteros, que bueno que venga a su nuevo hogar.

-por favor pendejo, no se ponga con ese tonito de mariquita benevolente que yo no me creo ese cuento

-¿ah sí? pues, yo solo le quería dar la bienvenida, nada más. Pero bueno, podía tener amigos aquí, pero como todos son mierdas y sin uno ni siquiera darle los parámetros, se hace lo que se debe de hacer.

-pues? ¿Me va a pegar? ¿Me va a tratar mal como los otros policías?

-no para nada señor Ballesteros, cada uno recibe su bienvenida como Dios manda, es cuestión de que se acomode bien, ahora – pude detallar su nombre en su uniforme…Magallanes – el encargado soy yo y pues…al menos tiene decencia y coraje para seguir el paso y escucharme, no como los demás

-los demás?

-si claro! Hace una semana vino un corrupto abusador de menores, sucio, depravado, cortaba miembros de su victimas para sentirse satisfecho, un enfermo mental, lo tuvimos que llevar de a 5 hombres porque el muy subordinado no quería estar en nuestra celda especial, incluso Ballesteros, se proclamó el ‘Mike Tyson’ del confinatorio, si ves por ahí a uno de mis hombres sin una parte de su oreja, bueno, ya sabes

Su preponderancia, su autoridad machuca y su dominación de pendejo. Y su mirada…verlo como se giraba de un lado para otro en su escritorio y observando esas paredes blancas de entremés, daría lo que fuera para que le cayera una piedra y se muriera, pero… ¿qué puedo hacer yo?

-si cómo no? Me vio cara de guevon o qué?

-no es porque lo vea…sino porque pues, nosotros no somos los que masacramos a los presos como las películas…solo pues, te digo la realidad de todo amigo mío

-no soy su amigo.

-eso lo se…nadie es amigo de nadie aquí – presionaba un botón de su contestadora – ‘Estíbaliz’, llego otro, traiga a su compinche – dejaba su botón sin presionar y luego contestaban

-enterada comandante

-y bien, como le decía señor ballesteros…tenemos un código aquí. Aquí no hay diferencias, todos se visten igual, todos comen igual, todos duermen igual y todos se entretienen igual. Solo basta que usted se adapte

-como en la escuela, solo que no estudiar, viviré enjaulado como animal rastrero

-casi parecido…dígame – tomaba su recorrido pero aún me observaba – porque está aquí?

-ahmm… pues

-hágale! Estíbaliz aun no llega, para poner a los demás al tanto

‘los demás’?

-pues…

-he escuchado los peores casos que puedan existir y ellos viven feliz mente en sus ‘casas’. Celdas precisamente dispuestas para ellos y para su clase, hágale!

  • …quería matar a alguien, pero resulte dejando a la persona que más quería en un hospital por mi culpa

-que usted quería? Ja, las personas de tan baja calaña como usted y como los de aquí, solo se preocupan por ustedes mismas y por salir del caño hacen hasta donde no les alcanza para dejar a otros muriéndose, agradezco que existan las cárceles

Era verdad?...solo bastaba con que dijera joder…que soy la peor sabandija del mundo, aunque…son solo palabras

-puede que no me haga caso Ballesteros…pero lo que le espera no se lo deseo a nadie, y ver que toda su familia o las personas que más quiere son engullidas por una hijo de puta maldad, lo hace ser fuerte? Ya verlo y que este jodido aquí, lo hará mas fuerte?

No respondí a eso…

-Aprenda de sus errores Ballesteros, como yo lo hice… 27 asesinatos, 35 años y míreme ahora…

Aparecía una tipa grande y gorda con el mismo uniforme del comandante de la prisión. Magallanes hizo que dejara de fruncir el ceño y dejarme guiar por la gorda ofuscada. Nunca sabré si le podría ver la cara al tipo de nuevo. Aun no me la creía, ella me llevaba, como si fuera el enfermo de un aborto o un necesitado ladrón seguía con su tremendo ímpetu de llevarme a un cuarto con dos señoras más, ambas uniformadas y listas para

-quítese toda esa ropa, vea, lo que le tengo aquí es más bonito y agradable

Tosca y enfurecida, como una turba de aldeanos en una sola persona. Era un uniforme azul verdoso oscuro, una camisa blanca, interiores blancos, zapatos sin cordones y medias blancas. Fui hacia un vestidor, sin las esposas se reflejaba ese cambio tan grande de mover bien mis brazos, pero pues…un intento de escape? No solo que pues…era cuestión de quitarme mi última ropa… ¿normal? De por vida… me quitaba el saco negro por el cierre, la camisa maloliente, el jean negro, los zapatos y demás interiores para luego…depositarme en esta ropa de…’convicto’ y pensar que ya eso es lo último que me pondría por un largo tiempo.

-¿cómodo muchachito?

-eh si…algo

-bien, cuide mucho esa ropa

Y volvían a empujarme y de nuevo las esposas. Esta vez iba con la otra uniformada mientras pasaba por las demás instalaciones, un campus bien grande de color blanco con varias ventanas enjauladas, pasando por un pasillo grande lleno de gente y convictos esposados. Y por último, la jungla de las barras. y vaya sorpresa estaba-

-qué bueno verlo así Ballesteros, uniformado

Magallanes

-preparado?

-para qué?

-se quedó callado de repente, porque? Le sucede algo?

-no…nada, solo que

-ahora sabe a lo que se enfrenta no? Sabe lo que realmente debe de pasar aquí. Esto no es un juego de guerra, es la vida que le toca vivir.

Sabré defenderme? Claro uno afuera las cosas pueden estar cerca de ti, manifestarme como quiero y como se me dé la gana. Basta solo con hacer lo que quiera, aquí? talvez si solo pudiera

-sus padres saben que ira preso?

-yo no le importo a mis padres…

-porque lo dice?

-porque piensan que soy una desgracia. Porque creen que yo ser lo que yo hagas y lo que pida, es una puta desgracia para ellos.

-dígame una cosa…¿que le parecería mejor? Sus padres diciéndole lo que me acabo de decir? O…esto?

No quería decir nada…lo que veía era desolador. Varios tipos, grandes, macizos, flacos, sádicos, tatuados, con perforaciones sin accesorios  y barbudos o desgarbados. Amenazando, tirándose como monos a esas jaulas empujando con fuerza esas barras y todos detallándome a mí y Magallanes aún seguía su camino a mi lado. Palabras como : puto maricon, bonito de mierda, veni yo te parto el culo, de aquí no te podes escapar, esta es la desgracia de tu vida y bla bla bla. Como en las películas, una chifladera ni la más hijo de puta. Joder, no soy el mismísimo diablo y la gente cree que sí.

-yo se…esto es tan ambiguo que ya la gente no le da miedo esto. Son amenazantes y que tales…sin embargo uno prefiere mil veces ser juzgado por tu familia todas las veces que quieras que ser masacrado por uno de ellos

Solo miraba más caras de miedo, de temor y de puro dolor hacia mí. Iguales a mí de apariencia pero…yo no me comparo con esto.

-Ballesteros…una cosa aprendí de la vida…de que uno comete errores que se pagan caro. Pero si uno perdona al que uno le dio la espalda, es gratificante y vale más que toda la plata del mundo.

-¿porque me lo dice?

Quedo parado frente a mí en medio de una celda y delante de todos esos tipos enjaulados.

-¿te importaría tener el perdón de la persona a la que le hiciste ese improperio? ¿De que este en el hospital por tu culpa?

Franco…tú en el hospital soportando por mi culpa, de tanto que te insistí y mira cómo te deje, fue el peor dolor que se rebasó ante semejante dolor y temor hacia mí y lo que cause…pero, así es la vida. El perdió, no tengo la culpa, solo el tiempo lo dirá. Volvía a mí ese ámbito de supremacía. Ese del cual me ha sacado de muchas y creo que de esta

-heh…para que si dentro de poco se va a morir. No bastaría…

Algo me intimido en el ceño de Magallanes…algo que hizo que me quisiera arrepentir por el resto de mi vida.

-muchachos hagan lo que tengan que hacer…

Dos uniformados se hacían frente a mí de la nada, me quitaban las esposas y luego iban hacia un lado llevándome a una celda oscura y abierta. Tirándome con todas las ganas posibles, el cielo oscuro cayendo la noche y el frente a mí mientras disponían a cerrarme la celda. Lo mire en el suelo…en ese cochino suelo y su mirada de predominio interno.

-…espero que sepa vivir aquí Ballesteros…así como le valió mierda lo que pensara de Franco…así mismo pensare de usted.

Solo se fue…él lo sabía…y yo de idiota no pude darme cuenta pero acaso era idiota claro que-

-uyyyyy ‘cucho’ mira aquí! marica veni! Carne fresca

Mierda…dos tipos grandes y con cara de atenuados depravados sucios y con los dientes fermentados avecinaban mi caída, uno de ellos, con el pelo largo y una barba de candado llena de mugre arremetían a mi cara

-pero como esta de lindo este maricón

-s-suéltenme! Déjenme en paz! – no sé porque el miedo se fue entrando más en mí. El pavor era jodidamente grande

- pero que le pasa? Si solo te damos la bienvenida! vas a dormir con nosotros dos, necesitábamos un espécimen nuevo para poder platicar!

-déjenme en paz! No quiero usar la fuerza

-ayyyyy pero mira el cachorrito como tiene de miedo! Que nos vas a hacer eh? Nos vas a pegar?

No sabía si defenderme o no…sin forjar algún movimiento brusco, realmente mi deber era proteger mi integridad y eso papi…es lo único que me queda. Mira donde estoy. Okey, nuevo plan, era tiempo de que esa rectitud que era lo único que me beneficiaba aquí, fuera a salir a flote. El otro tipo manaba más hacia mi cuello como para desnucar sus mocos por fuera de su maloliente nariz y llenarme de bacterias, aunque era turno de mi cráneo

-aghh! Ve este hijo de puta! Me cabeceó! – este por reacción apretaba con fuerza su nariz.

-ve este mariconcito!, veni para acá! Que la vas a pagar caro!

Intente escabullirme, lanzar todas mis proezas a un desdén afortunado y dejarme guiar por el auxilio de alguien, nunca lo hice, nunca lo hare. Porque? No sé, pero así como he mentido, esta vez me miento a mí mismo. Gritaba todas las ayudas posibles, el sacudón que le ofrecía a esas barandas y a esa cerradura oxidada. Lo se… era una ruina infranqueable, me enardecía de semejante dolor que me tiraran, que me dieran golpes en la cara…que me sacudieran todo mi organismo fomentándome una agonía alterable y opresora. Me metí tanto en el cuento de que no me iba a pasar nada…realmente fallé. Realmente nunca supe en verdad que tanto iba a destruirme realmente. Magallanes me lo dijo…

Sentir los restos de una pared fea y arcillosa no es algo que me guste pero…estaba pegado a esa feroz pared que me lastimaba el cuerpo y el rostro, abusado por una gran mano partida y raída en las grietas de cada huella. Al descubierto…jamás pensé que fuera así…nunca me digne a precipitarme de ese modo…sin ese uniforme…completamente en el suelo, lastimado, magullado…y sin poder hacer nada…de como empezaba a causar ese ardor en mí. Sin dejarme guiar por algo. Solo eran esas caricias violentas que desnucaban todo lo que tenía desesperanzas…esto no era un juego Aquiles. No lo era. Ese dolor amargo y jodido en mi interior como para yo afrontar esa partida desgargante que me hacían. Era lo que me merecía.

No sé por qué después de que me siguieran agujereando mi orto virgen…no era por el dolor o por culpa…era por perdón que lloraba. Que me surgían esas lágrimas…

No sé por qué la imagen de Franco aparecía en mi mente…era todo lo que se me venía venir…

Mi…vida

/-/-/Maxi /-/-/

-Massimo, las señalizaciones en madera y estampadas a un buen color de relieve con iluminación fosforescente ya-

-están instaladas en un diámetro de 3.5 grados a la redonda en cada lugar que me pidió que lo hiciera. Verá jefa que cuando usted use una linterna a una hora nocturna, será capaz de poder mirar que se verá brillante y podrá notarlo fácilmente

-vaya…no sabía que habían avanzado en conocimientos de pinturas estampadoras para poder ver en la oscuridad!

-son como los chalecos de las motos…una iluminación digamos…por así decirlo, tenue a la vista en época nocturna.

-interesante…

-estampado moderno jefa jejeje como lo pareció – a la deriva, Oliver me asesinaba con una de esas miradas devastadoras que él siempre me da cuando salgo a relucir, amigo o no amigo, es capaz de mostrar la envidia en cierto perímetro contiguo – que le parece?

-quedo impresionada, además tu habilidad de hacer estas cosas tu solo me hace ver…que aún se puede dejar más bonita la reserva de lo que esta ahora

-mil gracias jefa… ehmmmm y – sonreía para que se acordara, claro que tiene que acordarse! – si me-

-qué? espera…oh sí! – cerraba su laptop luego de mostrarle el prototipo instalado – dale! Te daré la tarde libre!

-yahooo! – hice como homero Simpson. Aiko, Oliver y Fernando no paraban de darme esas miradas de: sos un maldito bastardo

-pero con la condición que te dije, te quedaras aquí y te avisaré cuando te necesite okey?

-okey Jefa, estaré a su disposición pero vea que me lo he ganado, jejeje

Fue duro pero valió la pena, la jefa es un hueso duro de roer, necesitaba ir y cumplir mi misión, saciar las dudas despreciables que me inquietan la vida y lo que realmente quiero…a decir verdad aun soy privilegiado de saber qué es lo que tengo que decidir. Constantemente me designo un papel en mi vida ya sea de acuerdo al dinero, amor, desdicha y poder. Por ahora quiero descifrar lo que muchos quieren, los que pocos tienen y los que algunos quieren mandar a la porra. El amor

Hice un saltito brincando y chocando talones bajando por el caminito de la entrada, pisando de nuevo el suelo, por poco y tambaleo y me caigo. Dedique todo el camino a pasar lo más rápido posible y llegar a la entrada para luego esperar. La espera rindió sus frutos. Ese taxi era mi salvación. Entre al carro y vi que-

-espera Maxi yo le pago al conductor

-jejeje voy voy

-hace rato estabas ahí esperando? – Le entregaba el dinero al taxista, al viejito de gafas con arrugas y pelo blanco – si si, discúlpame, muchas gracias señor

El señor devolvía el gesto de agradecimiento estando yo abriendo la puerta del carro para al fin

-qué haces Maxi?

-sube!

Posaba para cargarlo a caballito.

-dale anda!

-pero-

Sube carajo!

No me dijo nada y de un brinquito se situó frente a mí para yo cerrar el carro y abrir el capo del taxi estando el aferrado fuertemente

-ojo ahí

-relájate, yo sé cómo mira – en un abrir y cerrar de ojos la abrí de una limpiándola un poco

-no debiste…

Era cuestión ahí en la mitad de la calle sentarlo y acomodarle la gorra y su ropa como debía, él estaba listo y dispuesto. Llevaba al invitado a la portería mientras le agradecía al conductor. Y claro el portero ya lo conocía, aunque me dio un vale de ‘visitante’ me incorpore llevándolo por el mismo senderito…pero por otro lado.

-creía que-

-haremos senderismo por la reserva… ¿qué te parece?

-Maxi yo-

A decir verdad…me gustaba que el chico guapo en silla de ruedas hubiera aceptado mi invitación.

-me alegra que estés aquí Roger…gracias por aceptar…

-de nada pero – él estaba bien vestido…jamás lo había visto sin uno de sus sacos de capucha grandes. Usaba una camisa bien bonita. Blanca de rayas, jeans azul oscuro y tenis rojos con blanco y negro haciendo juego con su gorra – ehmmm tu qué piensas hab-

-Solo…es un paseíto y ya…me dijiste que querías conocer la reserva un día no?

-si claro…

-bueno, déjame ser tu guía.

Y eso hice…anduvimos por los senderos del bosque y todas las hojas desechas en el suelo eran amacizadas por rines metálicos y ruedas de caucho incandescentes hacia la fricción. Ver la luz del día acariciando los prados y la represa de agua junto con los bosques y paramos cortos mirando la tremenda vista que le apreciaba al chico. No decíamos nada…éramos el, yo, nuestros compañeros, los mutismos, el sonido de los pájaros y los bichos, cada uno deleitándose en un apogeo matinal dedicado solo…a relajarse…

-Maxi…que horas son?

-12:25 PM por?

-no es hora de almuerzo?

-si…

-y pues no vas a ir a almorzar? Es tu horario.

-no te preocupes por eso sabiondo, además, ya estamos cerca de donde quiero llevarte.

Roger no musito palabra añadida. Era mi tiempo, mi deber y el solo era el que yo acarreaba con todo el gusto enfocando más el camino y mirando más el cielo… ¿en verdad estas preparado Maxi? En verdad? Lo tienes al frente tuyo…con el mismo sentimiento de preocupación que tú. Y aun quieres descifrar todo ese rompecabezas mental que te agobia.

Y sabía cómo…

/_..._\

-llegamos…

-ah sí? Es aquí?

-ajam

Era obvio que el lunes no me iban a dar permiso. Le dije a mi jefa que si podía solo trabajar medio día y que el sábado se lo galardonaba completo. Así estuviera solo y sin nadie. No me importaba. Necesitaba hacer todo esto. Y mi plan iba bien…era solo indagar el lugar y momento correcto. El lugar estaba listo.

-qué es esto Maxi…joder

-¿te gusta?

-es una…bonita vista

Lo traje a la intersección. Esa misma entre la reserva norte y la sur. La mitad de las dos está dividida en un risco grande lleno de los árboles que la rodean y al frente está la represa de agua donde se ve la entrada a lo lejos y las oficinas al lado izquierdo. Un vasto cielo azul y el sol en su más feroz incandescencia.

-me gusta…es tranquilo…pero tú no dijiste que las cámaras estaban por todas partes?

-cámaras? No! Como van a poner cámaras en los arboles? Además, no hay postes de luz aquí. Solo es en las oficinas y en los lugares construidos. Si vieras que aquí varios tienen sus aventuritas pero son muy discretos con eso.

-oohh…como este lugar es tan…pacifico

-lo sé

-que buscas coño? – me enfoque en ir a ese montecito pequeño con un hoyito para encontrar lo que deje guardado. – ¿tenes a una zarigüeya ahí metida?

-no...Solo que…está muy…guardado, mierda! Ya, ya lo saque!

Era una canasta enrollada con una sábana gruesa que traje desde mi casa…adentro si señoras y señores…estaba mi almuerzo…y lo que le prepare a Roger.

-un…un picnic?

-seeeh jajaja te dije que no te preocuparas, ven

Había un sitio plano cerca y tire la sabana ahí acomodándola bien organizada. Puse la comida en toda la mitad y coloque al susodicho encima de la sabana y la silla a un lado. Para que no se ensuciara tanto, le quite el tenis a Roger y me quite las botas para no ensuciar lo que comamos y tirar hojas secas o ramitas o lo que sea. Sin notarle lo deportivo que osaban sus medias en la planta unas rayas azules y de resto el conjunto negro.

-sabes en que eres muy pero muy gay?

-dime

-en tu escogencia para usar tus medias

-joder! – me puse unas de rayas con los colores beige, turquesa, azul oscuro y negro – me gustan carajo! Es muy llamativo para mí

-se nota jajaja

-mira lo que te prepare

saque de la canasta un recipiente para abrirlo y notar que la cara de Roger sonreía un poco y luego me observaba a mí. Estaba a gusto

-jajajaa…arroz cocinado con verduras y pedazos de pollo junto con costillas al carbón- la comida que comía cuando estaba en Cartagena, mi plato favorito…¿como lo supiste?

-tu qué crees?

-si yo se

-Franco – los dos al mismo tiempo…empezamos a reírnos un poco y después quedarnos callados un rato. Cogí mi comida y me puse a comer sirviéndole un poco de refresco a Roger.

-Maxi…

-ah?

-¿tú lo quieres verdad?

No podía negarle la mirada…sinceramente asentí con la cabeza diciéndole que si…

-aun te gusta…

-si…si Roger…aún sigo enamorado de el

-lo estabas antes?

-si…él y yo…tuvimos nuestras aventuras en el pasado y pues…

-en el colegio…lo sé.

Forjaba algo de ruido cuando comía mi arroz con lentejas. Me sentía un poco incomodo

-hace poco…estuvimos juntos…

Fue horrible verle la cara…no me gusto ese gesto…fue como…ese gesto de que todo estaba disipado.

-cuando?

-hace 2 días…después del accidente…

-yo…estuve con él también…pero el día de ayer, de ese día que tú dices.

-y pues… yo-

-a ambos nos gusta Franco Maxi…y no puedo negar que tú también a mi…me gustas…

Mierda! ¡Tengo que abortar este hijo de puta plan! No pensé que…no, no puedo negarlo, no puedo.

-es loco no? De cómo te puedes enamorar de dos personas al mismo tiempo.

-yo también te gusto pero pues…

-lo sé – trague en seco...mientras comía, era una acción evasiva que odiaba – nos gustamos, pero…ambos queremos…

-a Franco…

Decíamos al mismo tiempo. No era más que el ruido de nuestros cubiertos, de nuestras soportadas de comida y terminando de comer… deje que reposara su comida. Todo lo iba guardando, hasta acabar de ver los dos la vista que nos ofrecía la naturaleza…

-sabes?

-qué?

-creo…que deberíamos ver si lo que sentimos…nos hace ver más allá de lo que apreciamos por Franco…no crees?

-pero…ósea hacerlo eh…

-no te obligaría a nada Maxi. Solo que pues…me acuerdo de cuando lo hicimos y…

-¿y? – me tiré en la sabana colocando el muslo de mi pie derecho en la rodilla del izquierdo.

-qué pues…no se…aun quiero…quiero saber qué es lo que siento por ti Maxi…en serio.

Ya el terminaba de acostarse mirando el cielo, entrelazando dedos y su gorra volteada hacia un lado. Cuál era el daño? Yo no tenía nada con nadie…Roger estaba solo y Franco se recuperaba de su choque siendo cuidado por Renata…sin tener a nadie a su lado tampoco. Quise buscar las variantes de este…triangulo, coño, bendito triangulo…si estuviéramos en un trio…si fuéramos capaces de ir más allá y descubrir los que sentimos los tres…

Pero… era hora de ver quién de los dos combatía por el amor de Franco…con quien él quería permanecer. Con quien quiere transitar el resto de su vida. La mejor forma era averiguándolo como yo sabía hacerlo…

Roger…no sé cómo Roger entro en mí así de fácil y con esa mirada de esos ojos oscuros, ese café marrón intenso se propagaba aún más en mi diversificando ese poderío que posee y engancharse…fue capaz de presenciar ese acto de estar carnalmente juntos entreteniendo el silencio con el ruido de nuestros labios rozándose. Era cada vez más profundo lo que ambos sentíamos y lográbamos a renacer constantemente ciertos pensamientos locos hacia nuestro alrededor. De cómo sus manos medio frías alteraban mis pezones metiendo sus manos adentro de mi camisa de trabajo, sostenía su cadera con fuerza yendo más al fondo de su retaguardia elástica enfocándome más en apretar dentro de su pantalón. Era un juego o una verdad?

No sabía, mi deber era salir de esto…saber si yo estoy enamorado de él o del chico que se recupera en el hospital…es cuestión de arriesgarme y necesitar que era lo que me dejaba en la deriva. Iba en cada uno de los botones de su camisa y devorarlos, manosear sus botones y precipitarme más para diferenciar entre la tela pálida y el color de su piel. Mi mano quería saborear más de su piel y tocar su pecho y su abdomen, su lindo color de piel morena, me hacía vacilar más. Mi mano era la guía perfecta de un avión en aterrizaje y solazar mi carga cerca de su bulto. Jugar con el abriendo las puertas del cierre del pantalón y amasar ese paquete entelado rosado pálido de su bóxer.

Roger no dejaba de besarme, de corromper mi boca y de deshacerla salvajemente pero con un toque de finura coqueta y ese sabor que me desprendía y me volvía loco de remate. Roger emprendía a desabrochar cada botón de mi uniforme. Sudaba un poco, las axilas algo mojadas y mi ombligo algo húmedo, no interrumpía el sabor que le gustaba al tacto de las manos de Roger hacia mi cuerpo. Estaba horrible, por pensar y en preocuparme por Franco, no he jugado futbol, no he hecho ejercicio...nada…pero pues, ese pensamiento era lo más ilógico que podría fomentar ahora.

Afuera iban mis pantalones de trabajo pero antes Roger estaba sin ellos también, desalojados del mundo, por ese bóxer empecé a manosear fuertemente brotando un poco de precum, este sin querer brincaba y se alteraba un poco. Se veía tan sexy con esa gorra, su camisa abierta, ese bóxer. Empecé a retirarle las medias para oler su sudor en su planta…olía a macho puro… lo que quería era su verga. Vi ese falo moreno y comencé a sacudir más esa verga y darle más y más con mi boca por largo rato…no era mi intención que jadeara…pero mi estrepitosa sed de querer más proponía un poco el morbo y el ardor de ese chico.

-jodeer…Maxi…veni yo te la pruebo. No sabes las ganas.

Roger y su carita de alocado…en la mitad de ese bosque con hojas esplendorosas verdes, cafés, anaranjadas y amarillas, eran las únicas testiguas de mi culo desnudo cayendo mis interiores al suelo y presenciar el aire por los dedos de mis pies luego de quitarme mis medias a rayas. Mi verga algo lactada de leche estaba dispuesta para entrar a la boca de Roger y mamar como él sabe hacerlo. Esas metidas y esas cosquillas en mi glande me hacían dar más y más…espere siglos de placer. De cómo Roger abusaba de mi verga y le hacía de todo. Sin embargo era mi turno ahora de poder verificar más mi deber…por ahora todo lo sentía placentero aunque…

-Maxi…que…que haces?

-me…me quedo gustando…- me quitaba la camisa de trabajo. Estaba completamente desnudo buscando esa palanca cerca de mi culo estando apoyado en los hombros de Roger…

-pero yo te-

-no te preocupes…es placentero…además…es lo único que podemos hacer ahora…

Aún estaba con sus dudas. Mi poder de convencimiento era lo más apetecido por Roger. Antes, envolví el mástil con su debida protección y no. No me lubrique…era un riesgo. Empecé a meterla adentro y coño que si dolía bastante! Mierda estaba adolorido, ese hueco no es a prueba de folladas. Lo necesitas Maxi… comenzaba a tambalearme un poco…era sabroso pero jodidamente doloroso.

-ahh Roger aghhh - sabía que el sudor se apoderaría de mi – coño

-si…si quieres paro

-no, no...

-pero te esta do-

Era solo el zarpazo hacia esa boca y dejar que todo se dejara hacia el exterior. Que me lo haga mientras lo hago anhelar y volverlo como loco. Era cada choque, cada golpe y cada toque me dejaba extasiado, completamente anonadado y mi mirada era la que todo el mundo tiene cuando va a disfrutar. Cuando tiene el florecimiento del deseo uno no sabe que más esperar de querer y de precipitarse hacia más allá. Sin embargo la mirada de ambos expresaba la plena excitación más grande y codiciada del planeta tierra. Ahora lo que creo es que yo…

Roger volvía a besarme…y algo quieto dejo de penetrarme con la cara algo dudosa…

-¿qué paso? Acaso…

-tu serias capaz de… ¿penetrarme?

Eso me dejo algo dudoso. Porque

-pero…tu…tu si sentirías eso? serias capaz de-

-no me importa…jamás…lo he hecho…ni estando así ahora, ni antes…pero quiero ver cómo se siente…

-como yo no…

-anda…

-es que no sé cómo hacerlo…que posición tomar, o como ponerte

-boca abajo…

-eh – estaba algo preocupado porque pues…no sé si lo sentiría…es solo cuestión de

-está bien Roger.

/_..._\

-jajajaJa

-qué? – el solo intentaba girarse pero era plan fallido

-me gusta ese culito – era moreno, un poquito oscuro y algo grande, no digamos que es así jugosito como el de franco pues, el tipo sabia defenderse solo que…ibas a penetrar por primera vez a alguien que nunca ha sido pasivo y más raro aun…a un invÁlido. Roger solo lo que le faltaba por quitarse era su gorra roja. Pero no, no quería quitársela…se veía tan sexy así, esa espalda, eso brazos vigorosos, ese culito. Tocaba un poco de ese culo. De los vellos por debajo de su raja. Él era con esa pose intacta de persona asoleándose la retaguardia. Empecé a babear un poco mis dedos

-qué te parece?

-eh…

-sientes algo?

-yo…un poco…

-bueno…eso es algo no?

No me respondió, me aventure más, fue más a fondo lo que pretendía hacer. Saborear un poco, empezar a irme por ese lado peludito, relativamente un poquito empecé a babar su culo…necesitaba agacharme más. Ir por mas allá y apreciar ese sabor…Roger se estremecía un poco…iba por buen paso. Mi deber era el siguiente, tocar un poco más. Adentrarme. Use mi dedo índice para tantear la zona para al fin mirar cómo era ese terreno no explorado. Se sentía caliente. Algo baboso pero la carita de Roger decía todo. Le gustaba y solo era un dedo…joder! Necesitaba meterlo, en serio, no cabían las ganas. Saque de mi jean un condón de mi billetera, el otro era de él. Me metí más al fondo para dejar bien asegurado mi amigo, acomodé fuertemente como para sentir los lazos de amistad y los latidos del corazón de ambos.

-estás listo?

-algo…

-confía en mi…

Me agarro la mano, me aferró como pudo estando yo en lo mío. Empecé a meter más…primero mi cabeza estaba algo impávida pero logre retomar la erección al ver el paisaje que me ofrecía mi amigo. Aprendí a cavilar más en mí y logre entrar pero…Roger solo se quedaba quieto…intentaba seguir con el metido y con más fuerza comencé el ataque penetrando un poco más…y claro, logre retomar mi cometido. Estaba adentro…la primera vez Maxi…a un chico que tenía su primera vez ahí. Y no podía usar las piernas. No sabía si estaba haciendo lo correcto. Pero Roger estaba en su imaginación. En su nebulosa, en su lugar alejado y estaba un Roger equilibrado. Uno sexy con ganas de más. Y eso le daba.

Ubiqué mis manos en sus posaderas y empecé más el ritmo, el vigor de darle mucho más y meterlo dentro, más dentro…aun, aun eres capaz de buscar lo que quieres? Pensaba. Aun debes y aun lo necesitas. Aun sabes cuál es el misterio de tener ese deber de saber que sientes…y por Roger…tú. Le daba con más fuerza. El sí empezaba a sentirlo, en una posición medio latente pero lo hacía. Era solo chocar ambos y degustar entre los dos…sacudirse. Desnudos en un bosque, en la reserva natural donde trabajo…los dos…luchando, por un amor que no era inalcanzable…que éramos capaces de alcanzar los dos…el amor por un chico genial que nos esperaba y él tenía la última palabra. Y uno de nosotros…era el que saldría perdiendo.

-ahhh ahhh Roger yo…no aguantoo

-aff yo tampoco!

-jodeer arghhh

-ahh ahh ahhh!

-arghhhh…

-ah…

Como un perrito cansado me acosté en el lecho de la persona con la que acababa de tener diplomacias sexuales. Él no se tocó…dejo una mancha grande en la sabana. Y yo eyaculé en el condón…

Ambos no dijimos nada…quedamos adversos en esa sensación…esa de…sentir…amor…

/_..._\

-Discúlpame si me excedí…

Solo me faltaba abotonarme la camisa y Roger estaba sin ella

-no te preocupes Maxi…quería saber que se sentía…

-¿y bien?  - empezaba a abotonarme

-no lo sentí así que diga ‘joder me siento putisimo’ debido a las terminaciones nerviosas de mi cuerpo, pero sí…aprecie algo

-bueno…en verdad ayude en algo no? Jejeje

-algo si…

No parecíamos amigos…éramos como unos simples extraños de páginas de sexo después de haber copulado.

-sabes? La mamá de mi hijo salva…

-qué?

-dejo al pobre niño solo en su casa…

-como sabes eso?

-lo abandonó. Me dio el ultimátum de que si no lo cuidaba lo dejaría solo…menos mal mi padre fue a verlo y ahora está con él. Pero pues…

-Rog-

-son muchas cosas Maxi…que mi hijo lo hayan dejado solo llorando diciendo porque no está su mamá y su papá, que mi mejor amigo este en la cárcel. Que lo que yo más quiero este en el hospital…es…no sé. Puede que todo eso se me vaya, hasta…

-hasta qué?

-incluso vos…

Baje la cabeza por un segundo…luego pensé…puede que tenga razón.

-aquí estoy para ti socio…en serio, jamás te abandonaría.

-el que lo piensa hacer soy yo…mi padre viene con mi hijo y tengo que ver qué es lo que haré…si quedarme aquí o-

-ya…

-Maxi…gracias por intentarlo conmigo…

-yo se amigo… - ofrecía un abrazo en mí. Era solo una decisión en lo que respectaba a los dos…

-Salí de dudas…yo…no siento cosas por vos…fue solo…pasa-

-pasajero…lo se

Destruíamos ese abrazo con una sonrisa, me paré y le acomodé la silla

-bueno socio, ya está todo listo nos toca-

Sonaba mi celular…el sonido de la canción me indicaba una cosa…no era mi jefa, ni mucho menos Aiko era

-alo Renata? – Roger dio un brinco

-Maxi! Qué bueno gracias a Dios! que me contestas! – joder lo tenía en vibrador para que no nos jodiera nadie, luego lo activé a normal – Roger tiene apagado el cel!

-pero que fue lo que pasó? Franco está bien?

-está estable ya…ya salió de peligro

-en serio? Qué bien! – saque una sonrisa de oreja a oreja y dije sin hablarle a Roger ‘franco está fuera de peligro’ y volvía a lo mío -  no te imaginas lo feliz que-

-espera…aunque no todo es color de arcoíris como a mí me gustaría

Trague en seco…mierda

-porque que fue-

-Franco sufrió un daño colateral en uno de sus riñones, puede estar estable si le retiran uno de ellos, puede durar bien como por 5 años, sino ya después sufriría problemas renales y puede estar enfermo varios meses. Lo más recomendable es que le puedan donar un riñón para que no le causen esas molestias, solo si es compatible y que el cuerpo de Franco pueda aceptar el riñón del donante…más la sangre. Así estaría bien, pero por ahora está estable…ah…Maxi?...estas ahí…?

Miraba a Roger con incertidumbre…ambos daríamos hasta un órgano…

Por amor?

Qué vida tan jodida

Epsero que les guste la ultima parte, gracias por leer esta un abrazo :)

ZeroSubZero