Amor frente al ocaso VI: Abriendo puertas

¿Cuántas veces perdemos la libertad y morimos por dentro, solamente por sentir miedo de abrir la puerta de nuestros sueños? Temo, que esta vez no cometa el mismo error.

Christian

  • Te estuve esperando.. - Fue el susurro detonante de la atracción que sentía por el. Ya me había enamorado, pero de todas formas no estaba seguro si lo dijo como amigos.. o como algo más.

Alex, me liberó de entre sus brazos. Saludo con un abrazo de colegas a Nico, y a Sofía un beso en la mejilla, que me pareció de lo más cortante, claro.. sabiendo que habían sido novios y que no habían terminado como los mejores Amigos. Una vez ya saludado a los otros dos, nuevamente el tacto de sus manotas sobre mis hombros empujándome e invitándome a avanzar entre la multitud. Sentir su respiración calidad sobre mi nuca, su torso desnudo en mi espalda, simplemente maravilloso.

  • Pero si hasta parecen pareja - Bromeo Juan cuando llegamos a las orillas de la playa, donde estaban los chicos sentados en un círculo. Hice una mirada rápida, logré observar a Juan, Tomás y Fernanda. Saludé como de costumbre, nada fuera de lo normal. Hasta que Alex se sienta cruzado de piernas en esa pose de indios en la que estaban todos, pero al hacerlo y al tenerme agarrado de los hombros, me obliga a sentarme en sus piernas, sobre el.

  • No quiero que te alejes de mi.. - Volvió a susurrarme Alex en mi nuca, volvió a rodearme con sus brazos y a hacerme sentir la potencia de sus músculos y la virilidad de sus pecho.

Al parecer nadie le dio demasiada importancia a aquella situación, en la cual yo estaba sobre las piernas de Alex. Pero quien no dejaba de mirarme con una mirada inquisitiva fue Fernanda. Tenía una mirada que traspasaba barreras y comence a ponerme nervioso. Evitaba sus ojos que no me quitaban de encima. Cada vez que volteaba hacía ella.. ¡Paf! estaba allí con los ojos sobre mi, con el ceño levemente fruncido. Todos reían e intentaba hacerlo también, pero.. supongo que me entienden, sentirse observado. Además sentía que la vergota de Alex se estaba levantando, y el hacía presión con sus brazos para sentarme más aun en aquella polla, y joder que se sentía enorme, Ambos con el torso desnudo en trajes de baño. Para mi no tan sorpresa, la exitación comenzó a acumularse en mi polla, mis 18 cm comenzaban a tomar una mezcla entre fuerza y dureza sorprendente. Entrelacé mis manos y las posicione sobre el bulto para "Disimular", creo.. que funcionó. Sin importar que la voz fuerte, ronca, viril y encantadora de Alex no ayudara para nada, creo que el quería hacerme notar su bulto.

Alex

-Okey.. que yo escojo reto - Respondió Tomás, Estábamos jugando a "verdad o reto" y era el turno de el. Aunque a este echo no presté atención, tenía a Chris entre las piernas y sus nalgas me provocaron una erección de caballo, mi pene se erecto. Me causaba daño el traje de baño pero más calentura aún por tenerlo sobre mis muslos. Aunque le veía incomodo, no prestaba atención a lo que decíamos, miraba hacia todos lados, y pestañeaba rapidísimo. Hace 7 años, recuerdo que el de niño gustaba de jugar al fútbol con sus amigos en una cancha cerca de aquí, y cuando nosotros queríamos jugar íbamos donde ellos para obligarles a que nos den su balón, el siempre comenzaba a pestañear más veloz que el aleteo de un colibrí. Aunque ahora no se si sudaba por el calor o por nerviosismo, y si fue por esto ultimo.. porque estaba nervioso.. ¿Sería por mi?. No lo se, pero no quería soltarle, quería hacer un solo cuerpo, el y yo. Dios, ¿me estoy volviendo puto?...

  • Dale Christian, escoge verdad o reto - Propuso Juan al chico que me estaba haciendo perder la cabeza, aunque este pegó un salto al escuchar su nombre, tenía la mente en otro lado..

-Que? Que cosa?- Dijo de una manera preocupada

  • Joder, presta un poco de atención weon- rió- Que si elijes verdad.. o desafió.

-Amm.. amm.. Verdad..- Respondió

  • Jajajaja ¿A que le tienes miedo? Maricón- Respondió Tomás con tono burlesco sobre su hermano. Juro, que si no hubiera sido por tener a Christian encima, me hubiera levantado y le partiría todos los putos dientes a Tomás. Solo cause apretar más a Christian con mis brazos debido a la tensión que recorría mi cuerpo en ese momento, quería sacarle la reputa madre.

Christian

Tengo por hermano a un Hijo de Puta, eso es científicamente comprobado. Es que encima de violarme me llama maricón. Pero no podía darle en el gusto, ni menos quedar como maricón enfrente de Alex, tengo que demostrarle que no soy un niño. Además de que el bulto en mi pantalón, por el enojo hacia mi hermano había bajado.

  • Maricón tu, haber si tienes los huevos para darme un reto difícil - Soltándome de los brazos de Alex, me levanté  para poder estar en un nivel de superioridad mayor al de ese neanderthal.

  • Haber pendejo.. - Tomás se levantaba de la arena- Te reto.. - Observa hacía el mar, e indica las boyas flotando que marcan el límite hasta donde bañarse-.. A que llegues hasta las boyas amarillas nadando..- Rió-.. Seguro no podrás.

  • Como sabes que no podre?.. - Pregunté ingenuo, Tomás acerca (más bien agacha) su rostro al mio. (Yo le llegaba hasta los pectorales) y dice

  • Fácil, porque eres maricón.- Rió a carcajadas.

-Callate Gil, que te parto la madre si le vuelves a decir maricón a tu hermano- Dijo Alex, sentado aun en posición indio, mirando hacia arriba con todos los músculos del cuerpo tensado, con el sudor luciéndolos por completo brillante, y su mirada fría penetrando a la de Tomás.

- Sorry .. que era una broma- Respondió Tomás con una pisca de temor

Había tensión en el aire, pero aun así no podría dejar que me dijera maricón enfrente de Alex, y para demostrarle al más cachas de todos, de ojos verdes dije con firmeza

-Dale, acepto y el maricón serás tú. - Fui caminando hacía el agua.

Todos quedaron perplejos, sentía las miradas de todos a mis espaldas pero ya no había vuelta atrás. El mar siempre me ha inspirado respeto, creo que a todos, esta playa tenía un mar oscuro, solo era claro a las orillas pero a la mitad del Área entre las boyas y la arena, el agua por causa de las rocas en el suelo, se tornaba de un color oscuro. Para mi agrado, las olas no eran enormes, de echo ni siquiera habían olas, nada más la corriente.

Di un paso, un escalofrío helado recorrió desde mis talones a mi muslo, continué avanzando. Era refrescante, contrarrestaba el sofocante calor del sol. Aspiré aire, junte mis brazos estirados sobre mi cabeza, me incliné, y me tiré de un golpe al Agua. El refrescante chapuzón me hizo para entrar "en calor" y que el cambio de temperatura no sea sufrido como al entrar de apoco. Comencé a brasear hacía el horizonte. Deberían ser unos 20 metros. Nadaba con los ojos cerrados, levantando un brazo para bajar el otro, pataleando a mi máxima potencia. Solo pensaba en la cara que pondría el imbécil de Tomás cuando le haya ganado.

Mis fuerzas comenzaban a acabarse, considerando aun me faltaba 1/3 de recorrido, ya había cruzado el punto de no retorno.

-No puedo.. cansarme ahora- Dije para mis adentros, continuando con el braceo hacia el horizonte.

El peso del agua hacía mas difícil levantar los brazos, me sentía como en un estanque de barro. Casi sin poder mi propio peso, logre llegar a la boya. La abracé como pude intentando no caerme, aunque por la fuerza de gravedad ejercida en ambos, la boya se hundía un poco, lo necesario para no ahogarme y poder descansar.

Divisé a la playa, estaban todos levantados a la orilla, esperando por mi. Agitaban sus brazos, pero no tenía fuerzas para levantar los mios. El pie derecho lo sentía medio dormido con ese cosquilleo tan peculiar, y me pesaba una cantidad enorme.

  • Vale Chris.. ahora solo queda devolverte- Hablé conmigo mismo.

Aspiré una enorme bocanada de aire, me lancé al agua con mis pocas energías y comenzé a bracear nuevamente. Pero esta vez.. ni las ganas ni las fuerzas pudieron con lo que sentía en el pie. El cosquilleo en el pie derecho se extendio desde los dedos hasta mi muslo, comenzé a sentir pinchazos leves. Por el leve dolor me detuve.. gran error.. El peso de mi propio cuerpo me comenzó a undir, entré en un estado de desesperación completa, agitaba mis brazos por la desesperación, hasta que me hundí, ya no tenía caso.. no podía salir de alli, bajo el agua no se veía nada.. Todo de un color Verde u Azul, casi negro.. bien oscuro.. Luego no vi más..

Alex

Intentaba devolverse, nado unos segundos, cuando notamos que empezó a hundirse en el agua, aleteando para poder salir a superficie. Hasta que se hundió. Coraje, es todo lo que recorría por mis venas en esos momentos... Sin pensarlo ni quedarme observando como los demás, corrí como pude hacia el agua. Me tiré de un piquero y obligue a mis potentes brazos a moverse sin piedad hasta donde estaba Christian hace unos segundos.

Aleteaba y pataleaba sobre el agua, volteando la cabeza hacia la izquierda o a la derecha, pero nada.. la desesperación se inundaba, no le veía. Aspiré una bocanada de aire, incline mi cuerpo hacia el agua y me hundí.

Repetí el proceso que hice sobre el agua, busqué pero no le veía, todo estaba de un Azul oscuro. Salí a la superficie, aspiré otra bocanada de aire para después volver a bajar, pero esta vez baje hasta las rocas del fondo. Enorme rocas negras, me moví de un lado a otro. Estaba desesperado.. esto.. no podría estar pasando. Gire en 180 grados, es decir, volteé a mi espalda, y vi el destello del color naranja de su  traje de baño. Me acerqué a toda hostia, nadando sin control. y le vi alli.

Tenía los párpados cerrados, la boca abierta, estaba recostado en una gran roca, por lo que pude darme cuenta después no tenía moretones, eso quería decir que cayó despacio. Le cogí por las axilas, puse mis pies en la roca, y de un impulso subí a la superficie.

No fue difícil llegar a la orilla, pero por el peso extra, se me hizo más lento. Cuando yo necesitaba llegar lo antes posible. Mis pies al tocar la arena blanda se hundía levemente, me eche a Christian a los hombros, hice fuerza para salir del agua y echarlo sobre la arena.

  • ¡Llamen a un salvavidas! ¡A una Ambulancia! - Grité con desesperación, Tenía que darle primeros auxilios.

Me arrodillé frente a su rostro, levanté su barbilla un poco. Pude notar que tenía los labios morados, por lo procedí a hacerle respiración boca a boca.

Christian

En un acto de reflejo,  comenzé a escupir agua sin control. Creo que fueron unas dos o tres escupidas sin contar los otros intentos, ya voluntarios, por escupir el agua. Me sentía completamente mareado, aun mis cinco sentidos no estaban funcionando del todo bien. Lo primero que vi, fue el hermoso rostro chulo de Alex sobre mi, y me pareció sentir sus labios, con unos cuantos apretones en el pecho, segundos antes de comenzar a escupir el liquido. Respiraba muy alteradamente, intentando compensar la falta de oxigeno. Alex me dedico una de sus hermosas y blancas sonrisas, para después darme un beso en la mejilla, juraría que fue un poco cerca del labio, sumado a un abrazo muy apretado, al que (ya estando yo de pie) se unieron Sofía y Nico.

La Ambulancia y el salvavidas habían llegado, en este caso, afortunadamente tarde. Solo me hicieron unos cuantos controles médicos y al cabo de una hora me dejaron libre. Les conté a todos los chicos sobre mi experiencia. Y claro, le di un abrazo enorme a Alex, aprovechando que podía sentir su dura y voluminosos tableta, para también apoyar mi cabeza en sus acolchados pectorales, era el cielo, era mi héroe.

  • No sabes cuanto me alegro que estés vivo - Bromeó Juan- Pero ya tengo que irme..- Se despidió seguido de Fernanda.

  • Yo, también..- Fernanda le dio un morreo hasta atragantar a Alex, para despedirse. Que zorra, siento.. que lo hacía a propósito.

Luego del "Beso", Alex puso su mano en mi hombro. Me preguntó si me podía quedar con el un tiempo, que quería caminar conmigo y charlar un rato. Con todo el amor que tenía, me salió un "Claro" de la boca, que luego dudé pues.. quizás el notaba lo que siento por el.

-Nico, Sofi.. estaré alli para la noche. - Les dije a ambos

  • Vale, tranquilo. Te vemos en la plaza ¿De acuerdo?- Respondió Sofía, para después darme un beso en la mejilla.

No voy a negar que un momento a solas me ilusionaba, Si ya físicamente siempre me había atraído, incluso de pequeño cuando era delgado. Ahora sentía que me estaba enamorando de el. Solo quedamos el & yo, Faltaban unos cuantos metros para que el sol toque el horizonte, y la gente al notar que pronto anochesería se estaba levantando para irse de la playa.

Comenzamos a caminar por la orilla del mar, con el cielo naranja alumbrándonos, sentía una felicidad enorme, además me sentía cuidado.. como si mi amor fuera correspondido, el agua mojaba nuestros pies para segundos después retirarse y volver a hacerlo.

  • Chris.. ¿Sa.. sa.. sabes?- Me dijo Alex, mirando sus pies undirse en la arena, mientras caminábamos camino a un roquerío.

  • ¿Dime? - Voltié hacia el para dirigirle una de mis mejores sonrisas, que logró que el también me mirara a los ojos y me sonriera- Dale, Alex dime.. Abrete, con confianza.- Sonreí de nuevo.

Ya habíamos entrado al Roquerío, Era una zona, a la orilla del mar, alejado de la playa, pero era un lindo lugar con arboles frondosos. Me senté en la arena, estábamos rodeados de rocas en círculos y un árbol tapandonos por arriba con sus hojas.

-Hoy, cuando  casi te ahogabas.. - Respiró, pero me comencé a desesperar.. no tenia idea de a donde quería llegar.

-S..Si?- Estaba nervioso, con alguien así, a solas.. evitando y haciendo lo posible por empalmarme.

  • ..No te quería perder.. otra vez-

De allí en adelante, lo que ocurrió, no se si fue un sueño, o estoy muerto y en el paraíso, o.. real. Alex se inclina ante mi, poniendo sus dos brazotes al lado de mi cabeza. Siento su respiración, me recuesto en el suelo completamente. El Alza la cabeza, la inclina un poco y me besa. Allí, en el ocaso, como la primera vez que nos encontramos.

Continuará

Bueno espero no haberlos decepcionado, y que hayan gustado de leerlo. Desde ahora, el Amor y el Sexo se haran más presentes. Me encanta leer sus comentarios, los invito a hacerlo y a valorar. Saludos, Chris c: