Amor entre rejas...19
Perdón por la tardanza...
Perdón por la tardanza es que fueron muchos los festejos, luego estuve una semana en cama enferma, y después no tenía muchas ganas de escribir seguía un poco malita, pero les prometo que subo la continuación el fin de semana, ahi les dejo la conti.
-¡Wooouuu eso estuvo fantástico! – besa a Audrey pero luego se separa un poco.
-“Tú amor eres fantástica”, amor – habla en un tono aún agitado.
-Sí, dime preciosa – responde de lo más cariñosa Sabrina.
-Te puedo decir algo – dice Audrey mirando a los ojos y con los brazos cruzados sobre los pechos de Sabrina.
-Claro muñeca, puedes decirme lo que tú quieras – acariciando el cabello de Audrey.
-Lo que pasa es que cuando entré vi en tú mesa una caja de chocolates y yo pues quería saber si me invitas algunos, se me han antojado – responde apenada.
-Chocolates, claro que sí, puedes tomar los que quieras, no te sonrojes, que no es para tanto, anda toma los que quieras – le da un besito.
-Audrey se levanta semi desnuda – amor están ricos estos chocolates, pero que haces, ya te estás vistiendo, no puede ser, eso me dice que ya no vamos a seguir – mirando a Sabrina que se viste.
-Ah nooo, lo siento muñeca pero estoy muy agotada, no tengo muchas fuerzas que digamos, y las pocas que tenía tú me las quitado, más bien toma, vístete también, y espera a que me recupere al 100 % y serás tú la que pidas, que te de una tregua, para descansar un poco.
-Oh mi amor, eso quiero ver, ummm, amor están buenos estos chocolates, pero sabes que se me antojan comerlos con salsa de ajo.
-Audrey que mezcla es esa, chocolates con salsa de ajo – responde sorprendida – de solo pensar que sabor serían ya me dio cosa – poniendo cara de asco.
-Ja ja ya quita esa carita de asco que pones, no me gusta verte así – vuelve a comer.
-Se abre la puerta – buenas noches, Sabrina y Audrey que están haciendo – pregunta la Alcaide.
-Buenas noches mi Alcaide, aquí conversando, bueno mientras ella come – responde Sabrina asustada al ver que entró la Alcaide.
-Ah bueno, solo quiero saber si te encuentras bien, ¿porque tienes una cara muy pálida? – se acerca un poco – y si no me equivoco estás traspirando, y tú cabello mojado, estas bien, Sabrina.
-Sí alcaide, bueno tenía algo de calentura, pero ya se me pasó, tomé mis medicamentos, y si traspiré un poco, pero justo le estaba diciendo a Audrey que me ayude a buscarme ropa para cambiarme – habla toda nerviosa.
-Así es alcaide, eso me dijo, yo iba a buscarle que ponerse – responde Audrey chupando uno de sus dedos que tenía restos de chocolate.
-Buenas noches, perdón alcaide no sabía que usted estaba aquí – responde Lourdes ingresando a su cuarto.
-Buenas noches Lourdes, sí eh venido a ver el estado de Sabrina, si es necesario que venga Jacqueline para cuidarla.
-No es necesario, Alcaide, seguro estoy bien, no se preocupe, está todo bien – responde Sabrina.
-Bueno si es así, me retiro, no te preocupes en ir a la lista, descansa, cuando ya estés bien irás a la formación – empieza a retirarse – Audrey tú no te vas a quedar ni un minuto más después del timbre, voy a ir a buscarte a tu cuarto – dice la Alcaide y se sale.
-Sí Alcaide, solo estaré hasta que toquen el timbre, no se preocupe.
Se quedaron las tres hablando hasta el toque de timbre, luego se retiró a su pabellón Audrey. Al día siguiente Sabrina recibe visita a primeras horas de la mañana…
-Aquí es el cuarto de Sabrina – dice una telefonista tocando la puerta – Sabrina la buscan, está despierta.
-Sí, que por favor pase – responde Sabrina.
-Buenos días mi licen Sabrina – ingresando.
-¡Hola Alvarito!, buen día, que gusto verte, pasa – se levanta de su cama dejando de leer un libro y abrazando a su visita. – que alegría en serio es verte, pero toma asiento.
-Gracias mi Licen, va disculpar que no hubiera venido antes, es que usted sabe con todo lo que ha pasado nos tienen cargado de trabajos hasta fines de semana nos hacen ir a la oficina, pero ayer buscando unos documentos encontré este sobre, que me lo dejó doña María, la que le hacía a usted la limpieza de su oficina, se acuerda – responde Álvaro.
-No te preocupes por eso, pero por favor no me digas Licen, me haces sentir no sé cómo, además no estamos en la oficina, dime por mi nombre, y claro que me acuerdo de ella, si cuando me cambiaron de área yo insistí bastante para que sea ella la que siga haciendo la limpieza de mi oficina, lo recuerdas.
-Pero mi Licen, no puedo dejar de llamarla así, siento que le falto el respeto al llamarla por su nombre, y cómo no voy recordar que fue todo un revoltijo de las de limpieza, porque esas preferencias, pero a usted no se le podía decir no, si ya era Jefa y la adulada de su papi, el presidente de la empresa.
-No me faltas para nada el respeto, pero si te sientes bien así, solo espero que no te escuchen ni una de mis compañeras de por aquí, pero a todo esto que es de mi papi, no sé nada del licenciado.
-El está bien, pero muy preocupado por esta situación, además no puede venir a verla, porque le han prohibido hacerlo, y a otros que estaban muy cercanos a usted en el trabajo, pero eso sí yo quiero decirle mi Licen, que todos creemos en usted, sabemos que usted no ha hecho nada de lo que dicen, por eso todos estamos de acuerdo que nos descuenten de nuestros salarios una cantidad que ya acordamos para ayudar a pagar el abogado que contrató su papi, aunque no quería aceptar, pero todos insistimos, es lo menos que podemos hacer por usted, que siempre ha sido muy buena con nosotros, hablamos con la Licenciada Roxana para que ella haga el descuento y ella haga el pago al abogado.
-Así, no sabía eso, pero no era necesario que hagan eso, pero quienes están dando – responde Sabrina muy sorprendida al escuchar eso de sus colegas de trabajo.
-No pues Licen, claro que es necesario, nosotros no queremos verla aquí, y todos los del área que estábamos en contacto con usted, claro que hubo par de ciertas personas que nos sorprendieron que no estén de acuerdo, pero igual nosotros no le hemos hecho caso y sabemos que usted no ha hecho nada de eso.
-Um, pero quienes fueron, anda dime Alvarito, no te quedes callado dime todo lo que está pasando en la oficina y que se dice de mí.
-Pues bueno quienes no estaban de acuerdo fueron la Licen Shirley y el Licen Joaquín, eso nos sorprende mucho, porque la Licen Shirley se supone que es su amiga, y anda hablando muy mal para usted, dice que si está aquí es por algo, además el estilo de vida que usted llevaba, eso de gastarse 3.000 bolivianos en una sola noche y el lujoso auto que usted tenía lo dice que es por algo, o si no de donde saco tanto dinero para comprar un auto de ese estilo y último modelo, ella anda muy insoportable con todos, si antes era odiosa, ahora que está embarazada y la han puesto de no sé qué cosa es, pero es jefa según , nadie la soporta ni la quiere, pero eso sí mi Licen, nosotros confiamos en usted.
-Así, que anda hablando para mí, pues yo creo que eso está de sobra, si me daba el estilo de vida de gastar 3.000.- bolivianos en una noche, es porque mi salario me lo permitía, además ustedes muy bien saben que me costó tener ese auto, fueron varios meses de ahorro y además que un saldo lo estaba pagando a crédito, y todo por insistencia tanto de papi Ricardo y de ustedes que me decían, no pues Licen usted tiene que manejar un auto que vaya relacionado con su cargo, pero no entiendo porque hace todo eso.
-Si nosotros sabemos que usted ganaba bien, además debe ser esa vez que fuimos a festejar la compra de su auto, y usted pago todo, sabemos que antes la molestábamos porque varios meses usted no quería salir ni participar en ninguna de las fiestitas que hacíamos, porque estaba ahorrando, no tiene porque decirnos nada a nosotros, pero más bien ellos andan muy engreídos porque el Licen Joaquín recibió una herencia de un pariente y se ha comprado una movilidad de este año también, y la Licen Shirley está manejando otro autito no muy lujoso, pero a nada, hasta casa ya se compraron.
-Así, una herencia pues haber si aprovecha Shirley y se case con Joaquín y no quede de su amante. Pero y porqué María te dio ese sobre.
-Mi Licen, prométame que no se va enojar conmigo.
-Alvarito, tú vienes a visitarme y esperas que yo me enoje contigo, claro que no, que pasa, que tiene ese sobre.
-Pues……… hay es que María, me dio este sobre un día después que usted había salido de vacaciones, antes de que se vaya, porque el Licen Joaquín presento una carta diciendo no sé qué cosas de ella y la hicieron votar, así que ella fue y me preguntó por usted, yo le dije que volvería recién dentro de quince días y me pidió que por favor se lo entregue en sus manos, y yo pues Licen, me olvidé, recién ayer que buscaba unos documentos lo vi, pero le prometo que no lo eh abierto no sé que hay, pero ahí lo tiene – alcanza el sobre a Sabrina.
-Hay Alvarito, tú como siempre tan olvidadizo, pero que hizo María para que la voten, si era muy buena empleada, para mí era muy de confianza y horrada, un par de veces yo la probé dejando dinero mal puesto por ahí, y ella no lo levantaba, hacía su trabajo y me dejaba las cosas todo en su lugar y me entregaba lo que encontraba, por eso era que yo solicité que ella siempre me haga la limpieza en mi oficina.
-Sí pues, pero ese día que usted fue todavía a la empresa, a ella la mandaron hacer la limpieza en la oficina de la Licen Shirley porque la que hacia la limpieza ahí, estaba enferma y no fue, y no sé qué pasaría pero lo que yo sé es que el Licen Joaquín la acusó de haberla encontrado en los almacenes no sé qué haciendo y antes de que la hagan meter presa la votaron, fue fuerte eso, no sé muy bien.
-Va, pobrecita, que pasaría pues, pero que pena que la voten, gracias si por el sobre, luego veo que tiene.
-Bueno mi Licen, yo me tengo que ir, solo pedí permiso por la mañana con la condición que en la tarde le devuelvo las horas.
-Está bien Alvarito, pero cómo si es sábado, vas a ir en la tarde, que pena, pero vamos te acompaño a la puerta y nuevamente muchas gracias por tu visita.
-Vamos Licen, pues sí, ahora están más jodidos, pero usted no se preocupe que todos la queremos y esperemos que esta vez, ya no se enferme y pueda ir a su audiencia – se van caminando hacia la puerta.
-Pues diles, a todos que muchas gracias, y que no me lo esperaba lo que están haciendo ustedes por mí, no sabré como pagarles, y esperemos esta vez para la próxima audiencia pueda llegar.
-Listo mi Licen y no tiene porqué pagarnos, más bien ya veo que nos extraña y aquí me la están atendiendo mal, como se nota que no le dan los desayunitos que en la oficina nos dábamos, está muy delgada así, está no sé cómo.
-Ja ja ja si pues echo de menos los desayunos, eso era tragar no desayunar, ¡pero me estás diciendo que estoy fea!.
-No mi Licen, no me mal interprete, solo que no sé cómo se la ve, porfa coma un poco, que cuando salga le prometo que la vamos a llevar a desayunar como antes – le da un abrazo.
-Está bien lo prometo, voy a comer y claro que cuando salga quiero esos desayunos, gracias por venir. – corresponde al abrazo y se despide.
- Vaya que cosas pasan, pero me alegra saber que algo bueno habré hecho en todo este tiempo con mis colegas de trabajo, para que ellos tengan ese desprendimiento hacia mí…… Pero raro hoy no he visto a mi muñeca, donde andará, la voy a buscar quiero darle muchos besos, ya me estoy acostumbrando a ellos, que siento que me falta el aire sino me besa, quiero abrazarla y mirar esos bellos ojitos que me hipnotizan, ah pero ahí viene, esa carita que trae me dice que no se levantó nada bien, ahora que habrá pasado -¡buenos días muñequita linda!, porqué trae esa carita, que fue – habla Sabrina acercándose y levantando la cara de Audrey con la mano derecha.
-Buenos días amor, por lo visto ya desde temprano recibes visitas, quién era ese, y sabes me dormí, ahora vengo de la alcaidía y me piden una coca cola de 2 litros para que no me saquen a trabajar afuera – habla Audrey con voz apenada y carita triste.
-Pues sí ya temprano con visita, él era un colega de trabajo, pero no te pongas así, ven compremos una coca cola y listo, se soluciona el problema, yo no quiero que salgas a ningún lado a trabajar, mejor vamos a coliseo un rato y estamos todo lo que se pueda juntas, te parece muñequita – habla Sabrina y alcanza dinero para comprar.
-Está bien amor, me esperas cerca de la alcaidía yo compro le entregó y nos vamos al coliseo – realiza la compra y se va a entregar a la alcaidía.
-Como te fue, y ese pequeño de quién es?
-Pues bien amor, ya no me van a sacar a trabajar y mira este pequeño tan lindo, es de Jennifer, que te parece, no es precioso el pequeño, es tan lindo, mira lleno de ternura, anda tómalo, mi amor anda cárgalo un momento – extendiendo al bebe a Sabrina.
-No quiero cargarlo, deja, no quiero, para ti será todo eso, pero no me lo des por ahí me ensucia, y ese olor a leche no, ¡aléjalo!, mejor anda dáselo a su madre, ya te dije que íbamos hacer yo no pienso estar de niñera de un mocoso que ni siquiera es algo mío – dicho esto se aleja.
-Amor no pensé que te moleste tanto, es solo un bebe, yo pensé que te gustaban los bebes – ahora veo que ella no va aceptarme, no va querer a mi bebe, no es algo suyo, ya lo dijo, no piensa ser niñera, yo solo quería ver su reacción con este bebe, pero ya veo, con esto me queda todo claro – se va toda triste.
-Como se le ocurre traer un bebe, cuando yo lo que quiero es estar con ella, no estar de niñera, ah pero linda niña, donde estará su madre ya se cayó esta pequeña – se acerca a levantar a la pequeña – hola preciosa que pasó, no llore, ven yo te ayudo – levantando y limpiando a la pequeña niña – ya está ahora sí, que linda niña, eso ya no llore, y cómo te llamas – Sabrina habla toda cariñosa.
-Keyita – dice la pequeña niña.
-Keyita… oh que lindo nombre.
-Vo como te yama – dice la niña.
-Yo soy Sabrinita, quieres ser mi amiguita, sí, dame un besito Keyita.
-Asienta con la cabeza y le da un besito a Sabrina, en eso se acerca – que paso hija te caíste – dice la madre de la pequeña.
-Se cayó su hijita y estaba hablando con ella, ya casi se le entiende todo lo que dice, me dijo que se llama Keyita – dice Sabrina dirigiéndose a su compañera.
-Ya era hora, ya casi tiene 3 añitos, y es keyla su nombre, pero al parecer a ti te gustan los niños.
-Así que keylita, oh que lindo nombre tiene mi nueva amiguita, pues sí me gustan los niños en especial a esta edad, porque ya se puede hablar con ellos y jugar, cuando son bebes no mucho, pero cuando me toque, pues me va tocar lidiar con ellos, bueno con permiso, chao keylita.
-Eso sí cuando toca pues toca, gracias por ayudar a mi hijita, keyla dile chao a tu amiga.
-Chao amiguita – responde keylita.
-Que niñita más agradable, y Audry no piensa venir, tanto se tarda……… preciosa que estabas haciendo que te tardas, ven vamos al coliseo.
-Ya pero que tanto es tu apuro, no podes esperarme – tono molesto.
-Y ahora de qué estas molesta – van caminando al coliseo.
-Nada, no es nada y que quieres hacer en el coliseo.
-Pues entremos y ya sabrás lo que quiero hacer – toma la mano de Audrey e ingresan al coliseo – esto quiero hacer – se acerca a Audrey y toma de la cintura para atraerla hacia ella.
-Oh ya veo, cual es tú apuro – rodeando con sus brazos el cuello de Sabrina, y empiezan a besarse mientras caminan.
-Muñequita me encantan tus besos, y deja de poner esa carita, no me gusta verte así – vuelve a besar.
-Te gustan mis besos mi vi – corresponde al beso – no puedo estar enojada con ella, no tiene la culpa de que yo esté así, creo que ya sé que es lo que tengo que hacer, así las cosas no van a cambiar y podremos estar bien. – ahora que es esa bulla mi vida.
-¡Rayos no puede ser!, están entrando aquí – se separa rápidamente de Audrey – y quienes son todas esas y que pasa, van a jugar.
-Esas son las que van a jugar en el campeonato la próxima semana, van a jugar contra las mujeres de los internos varones y con el equipo de las policías – responde Audrey
-Así que campeonato y todas participan interesante si juegan las policías, así uno se desquita con algunas, ja ja ja, y quién es la encargada del equipo de aquí.
-Ja ja ja pues sí no faltan algunas que quiera hacer eso, pero te castigan pues si lo haces a propósito, y mira esa que está allá es la encargada, ella es Joanna, es la pareja de Regina te acuerdas de ella.
-Así, ya veo que se cree Mesi, y sí me acuerdo de esa Regina, pero vámonos de aquí, no me interesa ver a esas como juegan peor si se creen la octava maravilla – salen del coliseo.- preciosa vamos a mi cuarto tengo que tomar mis medicamentos.
-Está bien amor, vamos, mira esas son visitas para ti, al parecer te dejaré con tus visitas yo tengo algo que hacer nos vemos luego, ve a recibirlas.
-Si son mis visitas, yo te busco luego de que se vayan, por lo menos me quedo contenta porque te di unos besitos, nos vemos preciosa.
Sabrina recibe a sus visitas, luego toma sus medicamentos y pasa un tiempo ameno en compañía de sus visitas, mientras Audrey se dirige a buscar a Yoli, necesitaba confirmar que para ese día le tengan preparado la infusión de hierbas.
-Cari, ya está todo listo, estás segura de lo que vas hacer – dice Yoli.
-Sí lo estoy, ya te conté todo lo que paso ahora, eso me lo confirma, así que no hay marcha atrás, de una vez tengo que hacerlo – responde Audrey.
-Chicas, que haciendo, será que me pueden ayudar con unas cositas en mi cuarto, por favor – dice Ninoska.
-Claro Ninoska yo te ayudo, vamos, tú Yoli mejor ve por eso y lo traes al cuarto de Ninoska ahí te espero.
-Está bien Cari, yo voy a traer eso y te lo llevo al cuarto de Ninoska – se retira.
-Vamos pues y cuéntame cómo te fue ya se lo dijiste a Sabrina.
-No Ninoska y no habrá necesidad de hacerlo, pues ya lo decidí y no lo tendré, además hoy comprobé que no le gustan los bebes – habla melancólicamente.
-Pero no digas eso, yo ahora vi cuando ella estaba jugando con la hija de la telefonista, deberías decírselo.
-No creo que sea buena idea, yo estaba con un bebe y ella lo rechazó, hasta le tuvo asco, la vi como se puso, no sabes que sentí ese rechazo como si fuera a mí, mejor no le digo nada y sigo con lo que ya pensé hacer.
-Ninoska se puede, permiso, ya lo traje aquí tienes, debes tomarlo todo para que haga efecto – dice Yoli.
-Pero es arto, y a que sabe, pero ni modo tengo que hacerlo ya.
-Audrey piensa bien lo que harás, en serio no lo hagas – ruega Ninoska.
Mientras tanto en el cuarto de Sabrina…
-Hija ve de una vez a buscar a Audrey, para que almuerce con nosotros.
-Pero mamá, en serio quieres que ella nos acompañé.
-Sí ve de una vez, dile que venga, porqué no quieres que esa chica comparta con tú familia, más bien deberías estar pendiente de ella, más es su condición, debes preocuparte por su bienestar, desde lo que viste hasta lo que come.
-¡Uju madre usted!, ya para que todo eso, pero bueno ahora que lo menciona, para mañana cuando venga tráigame dos pares de tenis, sino me equivoco calza lo mismo que yo, ah y una chamarra más.
-¿Es para Audrey?, está bien así es mi hija que debes hacer, tú debes cuidarla, para algo fue que te quedaste en este lugar, si Dios permitió que tú no salieras libre, es porque te dejó para que tú puedas ayudar a alguien aquí, y ese alguien es esa chica que está embarazada ella y su bebe te necesitan, así que no me pongas esa cara y ve de una buena vez a buscarla. – habla la madre de Sabrina muy animada por el embarazo de Audrey.
-Sí madre, es para ella, y bueno debe ser por algo que yo no salí cuando todos pensamos que tenía que salir, y dele con el embarazo, ya voy por ella – lo último lo dice de malas ganas.
Sabrina sale de su cuarto, en busca de Audrey, en eso ve a Yoli y decide seguirla, para poder preguntarle si sabe donde está Audrey.
-Esta mi madre no sé qué le pasa, porque sigue con eso del embarazo, ¿ que está embarazada?, pero no me ha dicho nada, ¡ah no!, que no me venga con estar ocultándome algo así, no me gustan esas sorpresitas, ya tan pronto que me esté ocultando las cosas, que no me diga, creo que hasta el momento le eh dado a entender que puede confiar en mí, pero ahí va Yoli le voy a preguntar donde esta ella, y luego en la noche le voy a preguntar si está o no embarazada, aunque no estoy en las condiciones de ofrecerle un buen bienestar para ella y su pequeño, pues si lo está tendríamos que ver que vamos hacer, aquí yo no quiero que se crie un bebe, no es buen ambiente, ah pero sería el bebe más lindo que venga a este mundo, yo lo amaría tanto porque es de ella, y pues a ella la cuidaría, como dice mi madre me preocuparía por ella desde lo que viste hasta lo que come, y le pediría que me deje estar a su lado en todo momento, tendría que hablar para el momento del parto que nazca en una clínica, hay rayos son muchas cosas, pero no creo que lo esté, ya me lo hubiera dicho, si me oculta algo así, es que no me ama como dice ……ah pero Yoli entró al cuarto de Ninoska, esa ingrata no ha ido a verme, voy a verla que le pasa que no busca al padre de su hijo que soy yo, seguro ya me cambio, así son todas, uno medio se da la vuelta y ya lo están cambiando, ojala fuera por algo bueno – pensaba.
Sabrina ingresa al cuarto de Ninoska y logra escuchar…
-Audrey piensa bien lo que harás, en serio no lo hagas – ruega Ninoska.
-Ya está decidido, este bebe no tiene que nacer, porque esto solo me separa de Sabrina ella no lo quiere – toma la botella y empieza a beber.
-¡Qué está pasando aquí!, ¿qué es lo que estas tomando y que bebe no tiene que nacer Audrey? – dice Sabrina elevando la voz.
-Dejando de beber - Sabrina yo te puedo explicar lo que pasa – dice Audrey toda nerviosa al ver la expresión de Sabrina.
-Que me vas a explicar, o mejor dicho, que estas tratando de tapar, todo este tiempo me has estado mintiendo, tú estabas embarazada y en vez de decírmelo, se te ocurre que lo mejor es no tenerlo, que te pasa, que clase de mujer eres, que piensas que soy yo, acaso no te eh dado la suficiente confianza para decirme las cosas, tenía razón mi madre cuando dijo que tú estabas embarazada, y tú nunca pensaste en decírmelo, claro tú tomas tus propias decisiones sin consultarme si yo estoy de acuerdo o no, a caso no somos pareja, pues hasta donde recuerdo lo somos o me equivoco, creo que sí, me equivoco, porque algo así es cuestión de dos, no de uno, si yo acepte estar contigo, todo lo relacionado contigo me importa, pero ya veo que a ti eso no te importa, pero que te va importar lo que yo piense si no te importa ese bebe, como si él tuviera la culpa, pensé que eras… ¡mierda ya no importa lo que piense de ti!, has con tú vida lo que mejor te plazca total ya no tengo nada que ver contigo – habla Sabrina muy exaltada, luego se va del cuarto de Ninoska.
-Amor yo pensé – Audrey trata de detenerla a Sabrina.
-Déjala Audrey, no es conveniente que la sigas, está molesta, espera un poco a que se le pase, y yo te lo dije, ahora tú misma lo echaste a perder – dice Ninoska tomando del brazo a Audrey para que no salga del cuarto.
-Cari, no vayas, tiene razón Ninoska ahora ella está muy molesta, y puede reaccionar de alguna forma que tal vez te lastime, pero tú debiste decírselo, ahora tú misma la has perdido, tarde o temprano se iba a enterar. – habla Yoli.
-Yo no quiero perderla, yo la amo – Audrey empieza a llorar.
-Ahora que harás, ya te tomaste la mitad, ¿vas a seguir con esto? – pregunta Ninoska.
-No sé qué hacer, quiero estar sola – dice sollozando, tomando la botella sale del cuarto.
Sabrina sale del cuarto de Ninoska toda aturdida, asombrada de lo que había pasado, no se da cuenta que se dirige a su cuarto por la parte de atrás por donde están los baños, pues no quería llegar a su cuarto y responder a las preguntas de su madre.
-No puede ser, ¿por qué me mintió?, que está haciendo, no puede ser que quiera perder un bebe por nada más que tenerme a mí, de donde rayos sacó de que yo no quiera a ese bebe, que ciega soy, cómo no me voy a dar cuenta que ella está embarazada, debí habérselo preguntado, ahora que le voy a decir a mi madre, no le voy a decir: “sabe que madre que la que dice ser ahora su nueva hija, pues decidió darle fin a la vida de su nieto, y ahora le pido que ya no le diga más hija porque yo no quiero estar con alguien así”. – Sabrina perdida en sus pensamientos.
-Sabrina, por favor ayúdame, niña por favor – habla Lourdes quejándose – Hey Sabrina – lo dice gritando, sacando de sus pensamientos a Sabrina.
-¡Que!…… que pasa Lourdes, lo siento no te escuché, te sientes bien – acercándose
-Estas muy enamorada que no me escuchas, ayúdame ir al cuarto, los dolores ya se me han aumentado, necesito alistar mis cosas para que me lleven de una vez.
-Enamorada yo, ¡sí seguro es!, pero que cosas vas alistar a dónde vas ir, a caso tenes audiencia hoy, por los dolores – habla calmada y aún distraída.
-No niña no tengo audiencia, hoy es sábado por si lo has olvidado y a estas horas de la tarde ya no hay audiencias, la única audiencia a la que iré es en la maternidad, porque al parecer ya va nacer mi bebe, así que te voy a pedir que le vayas a decir a la Alcaide para que se solicite mi salida y que puedas llamar a Jacqueline del micro hospital, dile que venga para que ella aliste mis papeles.
-Ah ya va nacer, rayos perdón no me acordaba de eso, disculpa estoy distraída, pero claro ahora mismo voy a decirle a la Alcaide – habla rápido y dirigiéndose a la alcaidía.
-Sabrina, donde vas, primero llévame al cuarto, anda ven – habla gritando. – niña disculpa que te grite, pero te has puesto nerviosa, y no me has prestado atención a lo que te he dicho, vamos al cuarto primero.
-Es que ya dijiste que va nacer y pues ya mi lié con eso, yo no sé pues si todavía puedes esperar, si por ahí nace aquí, pero vamos al cuarto – sosteniendo a Lourdes ayuda a llegar a su cuarto.
-Madre ayúdeme, que ya está mi compañera con los dolores de parto.
-Lourdes ya llegó la hora, bueno ven siéntate aquí y dinos que ropa vas a llevar, ya tienes un bolsón para el bebe, tienes todo listo lo que vas a necesitar o donde están para alistarlo, tú hija ayuda a tu amiga a que se siente, y tienes que avisar a las guardas o encargadas, de este lugar, o cómo se hace – habla la madre de Sabrina.
-Sí señora hay un bolsón con las cosas para el bebe, que está en ese estante, y mi ropa tiene que ponerla en ese otro por favor, Sabrina será que puedes hacer lo que te venía diciendo de ir a la Alcaidía y avisar, también te puedes anotar el número de teléfono de mi mamá, para que le digas que vaya a esperarme. – habla Lourdes indicando donde estaban las cosas.
- Mamá ya Audrey está con los dolores de parto, ya tengo el bolsón con las cosas, donde están las llaves mi auto, vamos de una vez, tenemos que llevarla a la clínica, hay que hablarle a Miguel que vaya alistando todo, para que la atienda, yo no quiero que mi hijo nazca en la maternidad, hay que llevarla a una clínica privada, por ahí necesita que la intervengan, pues en una clínica estará mejor atendida, ¡vamos dese prisa!, ¡no hay tiempo que perder! – habla toda nerviosa y hace las cosas apuradas.
- Hija mantén la calma, no te pongas nerviosa, que todavía hay tiempo recién le empezaron los dolores, eso toma su tiempo, vamos a llegar a tiempo, y debes manejar bien, no te turbes – habla la madre tranquilizando a Sabrina.
- Ya mamá, no me regañes, pero por ahí se adelanta el parto, no…no…no, yo tengo que estar ahí, es mi primer hijo madre yo tengo que estar para cuando nazca………-llegando a la clínica- Hola miguel ya está todo listo, ¿cómo está ella?, dime todo no me ocultes nada.
- Si amiga tranquila, todo está en orden, ella está en la sala de parto, más bien ponte esa bata y vamos, para que presencies el parto, ella lo pidió que tú estés ahí para cuando nazca tu primogénito – dice Miguel.
- Yo no debería estar aquí, y para qué son esas cosas, porque la ponen así, no Audrey no grites, rayos parece que le duele mucho, será que no hay una tableta o inyección para que ya no grite tanto, y todavía quiere yo esté a su lado, ¿cómo que amor ven?,¡ no aquí estoy bien!, rayos tanta sangre sale, ¡qué asco!, no yo no voy aguantar – plot se desmaya…
- Sabrina, despierta estás bien amiga.
- Ay que dolor, Miguel eres tú, dime como salió todo, porque estás con esa cara, anda dime todo lo que paso, no me ocultes nada.
- Sabrina, tienes que ser fuerte, hicimos todo lo que pudimos, pero solo salvamos a la madre, pues el bebe, lo lamento lo perdimos, lo siento.
- ¡Que!, noooooooooo!, mi bebe noooooooooo! – empieza a llorar Sabrina.
-Se está desvaneciendo, Sabrina hija, estás bien hijita, que pasó, tranquila, que tienes, por qué empiezas a llorar, ven siéntate – dice la madre de Sabrina evitando que se desmaye.
-¡Que!, ¡ah!, que, madre yo, ¡rayos que pasó!, no sé, no me siento bien, y el bebe – habla Sabrina saliendo de sus pensamientos.
-Hijita al parecer no estás todavía del todo bien, mejor siéntate y toma tu medicamento, el bebe no ha nacido, ya viene en camino, ahora que vengan tus primas te quedas con ellas, yo voy hacer lo que tu amiga te pidió que hagas, mejor acuéstate y descansa – dice la madre dándole una tableta.
-Es decir que el bebe está en camino, y no fue…… no nada madre, no me haga caso, mejor me tomo esto y me acuesto, necesito descansar, no me siento bien.
La madre Sabrina hace las diligencias necesarias para que Lourdes sea llevada a la maternidad, mientras Sabrina se queda con sus primas, así transcurrió el resto de la tarde hasta que el horario de visitas se terminó y se tu vieron que retirar.
-Sola, por fin tengo el cuarto para mí sola, pero ahora de que me sirve, si no lo puedo aprovechar con mi muñeca, pero porqué no me dijo de su estado, porque se calló, no quiero pensar en lo que ya hizo, yo la hubiera apoyado, sé que no tengo las condiciones para darle todas la comodidades pero al menos, sé que le daría todo lo necesario, no le haría faltar nada, no quiero seguir pensando en algo que ya no puede ser, será mejor que ya no piense en ella ni en ese bebe, creo que es mejor no volver acercarme a ella, con algo así que me oculta, pues todo puede pasar, mejor aseguro bien la puerta y trataré de buscarle al sueño, aunque no sé porqué me siento muy relajada, con lo que pasó, solo tengo sueño, que serán esas tabletas que tomo, solo me hacen sentir relajada y con bastante sueño.
Sabrina debido a la medicación que tomaba, hacía que tenga sueño y se duerma profundamente, mientras que Audrey.
-No entiendo, porque reacciona así, si todo este tiempo cuando yo le insinué sobre el embarazo, ella siempre me decía que no estaba en las condiciones, y hoy cuando la acerque a ese bebe ella lo rechazó, pero según Ninoska dijo que la vio jugando con la niña de una de las telefonista, joder Sabrina porque no te entiendo, yo pensé que era lo mejor para nosotras ahora resulta que no es así, y en vez que estés a mi lado ya te perdí, no puedo entender esto, pero yo tengo que buscar la forma de hablar con ella y preguntarle si quiere seguir conmigo y apoyarme con este embarazo, solo así yo pondré todo de mi para que este bebe, sea nuestra unión, voy a esperar después de lista para ir a buscarla y hablar con ella.
Audrey se quedó en su cuarto, luego fue a lista, esperó un rato y decidió ir a buscar a Sabrina.
-No puede ser, ya llevo como cinco minutos aquí tocando y ella no me responde ni hace la intención de abrir la puerta, ya no insisto entonces, creo que está por demás de seguir intentando algo que no va ser. – empieza a retirarse.
-Audrey, buscas a Sabrina.
-Pues sí Rossy, pero creo que ella no quiere hablar conmigo.
-Ella está dormida, hace más de media hora que cerró su puerta, lo que yo escuché a sus primas hoy, es que le están dando unos antidepresivos, los cuales le provoca sueño y duerme muy pesado, todo para que no esté mal después de todos esos días que ha estado en cama, así que mejor espera hasta mañana, porque no se va despertar, Ninoska vino también y tocó más fuerte que tú y no se ha despertado. – responde Rossy, compañera de pabellón del cuarto de lado.
-¡En serio!, va, no puede ser que duerma tan profundo, bueno gracias Rossy, creo que yo también intentaré hacer lo mismo. – dicho esto se retira a su cuarto.
Así transcurrió esa noche para ambas, a la siguiente mañana, día domingo un día de visitas, Audrey intentó hablar con Sabrina, pero no tuvo éxito pues esta seguía dormida profundamente, así que ni modo tuvo que volver a retirarse, para poder esperar a que su niña, que ahora era su bella durmiente, se digne en levantarse.
-Estirándose al despertar - ¡oh que sueño! – bosteza – ¡por Dios que manera de dormir!, ah pero aún estoy con sueño, que hora será, debo ir a lista, ya estuvo bueno, amar tanto la cama, oh no puede ser, pero que tarde es, más bien debo darme prisa pronto llegaran visitas, mejor me levanto y arreglo este cuarto, voy y me ducho, y a esperar a mis visitas se dijo – se levanta, se pone a tender su cama – ah pero este sobre se había caído, mejor lo pongo entre mis libros, luego veo que es………… listo, ahora me voy a las duchas. – toma sus cosas de higiene personal y se dirige a las duchas.
-Bueno como que ya es hora como para que mi amor este ya despierta, voy a buscarla antes de que lleguen sus visitas – se va apurada al cuarto de Sabrina – toc…toc – Sabrina – empuja la puerta y se abre – ¡joder!, no está, ahora donde se fue, no al parecer no podré hablar con ella, pero mejor me siento en el piso así la espero a que vuelva, pero mejor cierro la puerta, cómo va dejar su puerta abierta, no está Lourdes y ella la deja abierta – cerrando la puerta se sienta en el piso Audrey.
-Listo, ahora después de un buen baño, ya estoy lista para recibir mis visitas, por la hora que es ya no tardan en llegar, ¡oh no!, ahí está ella, no tengo ganas de hablar con ella, ahora que me va decir, no quiero escucharla, no quiero nada ya – sigue caminando hacia su cuarto – ah pero que bien, salvada por la campana, o mejor dicho por las visitas, ahí veo que están entrando mis primos.
-Será que no va venir a su cuarto, ya lleva buen rato, ahí viene, ya debí imaginarme que se había ido a las duchas, bueno es hora de hablar y aclarar las cosas, ah por la cara que ha puesto, no quiere hacerlo, ya se detuvo, debí suponer eso que no quiere hablar conmigo, joder… lo que me faltaba, esos que vienen son visitas de ella, ni modo, mejor me voy antes de que me diga algo delante de ellos. – Audrey se levanta y decide irse a la chocita de visitas.
Sabrina se queda en su cuarto con sus primos hasta que llegó su madre, la cual había visto a Audrey de lejos.
-Hijita, como estas mi amor, sabes que a cabo de ver a mi otra hija, porque no vas y la llamas, porque ya traje lo que me pediste para ella, además quiero saber bien de cuántos meses está de embarazo.
-Hola madre – saluda dándole un beso – así la viste, que la llame, poro madre luego le doy lo que trajiste, y para qué quieres saber de cuantos meses está – responde Sabrina no muy emocionado con llamar a Audrey.
-¡Como que para qué!, para poder ir alistando las cosas del bebe, para cuando nazca, acaso tú no vas hacerte cargo de ese pequeño que viene en camino, qué es lo que te pasa hija, no me vas a decir que piensas abandonarla en ese estado, quién más que tú para hacerte cargo de ellos, a caso no es tú amiga, que clase de persona te estás volviendo, ¡no Sabrina!, no porque estés en este lugar vas a dejar de ser la amiga incondicional de las que todos hablan que eres, eso no te voy a permitir, que cambies la forma ser.
-¡Pero mamá!, yo no he dicho eso, además para cuando yo salga no sé que me espera, si voy a encontrar trabajo de inmediato, yo no estoy en las condiciones - no termina de hablar cuando la interrumpen.
-¡Condiciones de que!, ¡dime condiciones de que!, no mi hijita no me salgas con tonterías de no hacerte cargo de ese pequeño, tú te harás cargo de ellos porque te lo digo yo que soy tu madre y no me pongas esa cara, ni quiero escuchar una palabra en contra, ya he dicho, te haces responsable de ellos dos, y te vas a cambiar de cuarto, y vas a buscar la forma de trabajar y cuidar de ellos, no permitiré que les hagas faltar nada, me entendiste – dice todo con voz de orden.
-Si madre, entendí todo, pero a donde me voy a cambiar, no tengo para alquilar otro cuarto, cómo así mamaaaaa
-No te preocupes hermanita, que el cuarto que compartimos con nuestra hermana menor, será el que vas a ocupar, nosotros nos vamos a tu cuarto, y quiero de una vez conocer a la famosa Audrey, mamá habla de ella, como si fuera la diosa de la belleza, y a nosotros nos anda reclamando de que no le hemos dado una nuera agradable a sus ojos, como tu amiguita – habla Tito el hermano menor de Sabrina.
-Menos mal, yo dije ya me votaron, bueno ese cuarto es más grande, puede entrar la cuna del bebe, y bueno pues no es la diosa de la belleza pero es muy linda, mejor mira a nuestra madre y es su versión, además ustedes perdieron el sentido del gusto hermanitos, porque a tener eso que tienen ustedes, mejor es nada, ja ja ja ja ja.
-En serio primita, cómo está eso del bebe y esa chica quién es, no me has contado nada, hay que conocerla, ya que te vas hacer cargo de ella y su bebe, mejor que va ser ella de nosotros – pregunta Robert.
-Hay hijos, lo que pasa es que Audrey es amiga de Sabrina, y aquí ustedes ya saben que andan diciendo que su prima pues le gustan las mujeres y ya se la echaron a esa chica, pero ustedes ya saben como es, y sus reacciones, así que yo le dije que tome las cosas con calma y les siga la corriente, así que ella según aquí es la novia de su prima, mejor ve por ella ya, así la conocen, ¡que es bien linda y es la única nuera que acepto!, además me va hacer abuela, que esa casa ya necesita un niño corriendo en ella.
-Ya está bien, luego te cuento primo, ah Tito por favor llévate todos esos libros, ya los leí todos, me traes otros cuando vuelvas, ya vengo voy a buscar a mi “amiga” – dice Sabrina saliendo luego de su cuarto.
-Todos estos libros dijo, pero aquí hay un sobre, será que lo llevo también, mejor lo dejo en medio de esta revista, ella dijo libros no me dijo revista, madre páseme el bolsón para guardar esto. – habla Tito.
Los primos y el hermano de Sabrina, estaban a la expectativa de conocer a la famosa Audrey, la novia de su prima, además que era la única nuera aceptada por la madre, Sabrina no le quedó más que salir a buscarla, pues su madre ya había hablado y más le valía hacer caso a lo que había dicho, solo que Sabrina decide hacer llamar a Audrey con una telefonista, para que fuera a su cuarto, mientras ella se fue atrás de las duchas, hacer hora para no ver a Audrey.
-Audrey, te hablan en el cuarto de Sabrina, es su mamá la que te está haciendo llamar, que por favor fueras. – habla una telefonista.
-A mí, pero no sabes para qué, bueno gracias. – responde Audrey
-No sé para que te llama, pero solo que fueras – dicho esto se retira.
-Hay Yoli, para que será no, y Sabrina irá querer que yo vaya.
-No sé Cari, pero la señora te está haciendo llamar debe ser por algo, y Sabrina no creo que se comporte mal delante de su madre, mejor ve tranquila, así sabes que es lo que quiere la señora, anda Cari. – responde Yoli animando a que Audrey fuera al cuarto de Sabrina.
-Está bien, voy a ir, solo porque la señora me hace llamar – Audrey se levanta y se dirige al cuarto de Sabrina – perdón, se puede.
-Claro entra hija, ven dame un abrazo hija, mira te quiero presentar, ellos son mis sobrinos Robert y Wilbert, y este es mi hijo Tito, es el menor de Sabrina y ella es Cecilia mi hija menor. – habla la madre de Sabrina indicando a cada uno.
-¡Hola chicos!, mucho gusto en conocerlos, y tú eres la pequeña, que linda eres Ceci – se acerca a darle un beso a la menor.
-Hola Audrey, así que tu eres mi cuñadita, y vas a tener un bebecito que mi hermana va cuidar, yo también puedo cuidarlo cuando ella salga a trabajar – habla Cecilia abrazando a Audrey.
-Es un gusto pues cuñadita, pero yo creo que ese pequeño va necesitar un padre que le dé el apellido, pues yo puedo ser ese alguien, al fin y al cabo mi hermana no puede hacerlo, además estas muy guapa, y quién sabe mejor tú puedes ser parte de la familia de verdad y no solo un supuesto – habla Tito muy hecho el galán.
-¡Eh primo!, tranquilo, sos lo peor, que va decir la chica, no ves ya se puso toda roja, tranquila prima, no le hagas caso a este. – dice Wilbert
-Ja ja te pasas vos primo, como así, ya quieres bajarle la novia a tu propia hermana, mejor dile a Sabrina que te consiga una así, ya que la que tenes no se iguala a la prima Audrey, je je je – dice Robert.
-Tranquila hija no le hagas caso a estos tontos, mejor toma esto es para ti, me dijo mi hija que te trajera esto, así que tómalo ahora son tuyos, y mejor dime de cuantos meses ya estas, para ir alistando las cosas del bebe.
-Gracias Tito por ofrecerte a ser el padre y de darme el apellido para este bebe, pero creo que no es necesario, tú también eres guapo pero ya escuche que tienes novia, y yo creo que ella no estará de acuerdo con eso, mejor dejémoslo ahí, porque ya soy parte de la familia no es así mamá, gracias pero está segura que su hija dijo que es para mí – habla Audrey sonriente y a la vez en dudas con lo que le habían entregado.
-Claro que sí, ella misma me pidió que te los trajera, más bien donde andará que no está aquí, pero bueno dime de cuantos meses estas, porque ese va ser mi nieto, ya hablamos con Sabrina al respecto y no te preocupes que ella se hará responsable de ti y tú bebe.
-Ah pues eso dijo ella, en la próxima semana cumplo los tres meses, pero está segura que ella se hará responsable de mi y el bebe. – habla Audrey con una cara de dudas.
Estaban hablando cuando una telefonista se acerca al cuarto en busca de Audrey, para indicarle que en Garita la estaban esperando por que tiene visitas, ella se retira agradeciendo por las cosas, mientras tanto Sabrina habla con Ninoska que estaba saliendo de una de las duchas.
-¡Sabrina!, que bueno verte, será que podemos hablar – dice Ninoska acercándose.
-De que quieres hablar, pero no tengo otra opción así que habla de una vez, que más me da que escucharte – responde Sabrina de malas ganas.
-Está bien, entiendo que estés molesta conmigo, pero yo no era la indicada de decirte que ella estaba embarazada, tú bien lo dijiste que ustedes eran pareja y ella era la que debía decirte todo, yo se lo dije varias veces, pero siempre pasó algo y nunca pudo hacerlo, yo sabía que tarde o temprano te ibas a enterar, y en serio disculpa si te oculté decírtelo.
-Es cierto lo que dices, era ella quién tenía que decírmelo, pero ahora me confirmas que tú sabías desde hace tiempo y no me lo has dicho, esas cosas no se ocultan Nino, pero ya no importa, ahora ya lo sé, y para qué total si ella no pensó nunca en decírmelo es porque ella no lo quería tener, así que cual es la diferencia que ahora yo lo sepa.
-Pero cómo así cual es la diferencia, a caso tú no piensas estar con ella, la vas a dejar en estos momentos, me sorprendes Sabri pensé que más bien tú ibas estar con ella.
-Cómo quieres que esté con alguien que no me tiene confianza, que me oculta algo importante relacionado con su vida, y tú también estas sonando como mi madre, de que yo debo estar con ella, y que me encargue del cuidado de ella y de ese bebe, ya me lo ordenó, no sé cómo voy hacer para hacerla cambiar de opinión a mi mamá, la verdad no quiero ni verla ni hablar con ella, estoy muy dolida con esto.
-Bueno tienes razón, y que vas hacer si tu madre ya te lo ordenó, pero sabes mejor dale tiempo al tiempo, no sabemos si ella terminó de tomar esa infusión de hierbas, que tú viste que estaba tomando, no sabemos si lo va perder o no, mejor esperemos que pasa y así tú piensas que harás, solo dale tiempo al tiempo, no hagas nada todavía, mejor esperemos que pasa, y bueno tarde o temprano tendrás que hablar con ella, porque ella estaba haciendo eso, por ti, para que nada les impida estar juntas, ella te quiere de verdad, pero en vez de tenerte a su lado, te aleja, piensa en eso amiga, Audrey te quiere.
-Creo que tienes razón Nino, dejaré que el tiempo diga, si ella va seguir con el embarazo o no, y eso que me quiere pues no lo sé, con esto no sé qué decirte, no quiero pensar en eso, sabes, mejor me voy a mi cuarto, deje a mi familia ahí, deben estar con ella, no sé cómo la haré para disimular las cosas delante de mi familia, te dejo, nos vemos más tarde.
Sabrina retorna a su cuarto después de haber hablado con Ninoska pasa el resto del día al lado de su familia y amistades, aprovecha de pedir que le trajeran ciertos equipos electrónicos, mientras que Audrey recibe la visita de Betty.
-¡Hasta que por fin me dejaron entrar!, dime que tenías, por qué estabas en la enfermería y desde cuando no se permite que yo te pueda visitar, que según indicaciones médicas no puedes recibirme – dice Betty con un tono de voz de molestia.
-Betty no empieces por favor, ¡basta!, no quiero escuchar reclamos de nada, si te dejé entrar y es solo para escucharte molesta con cosas que yo no sé porque las hacen pues mejor vete, no quiero pelear.
-¡Así que no quieres escuchar reclamos, yo me doy la molestia de venir a verte y me sales con esas, mejor no hagas que me moleste de verdad porque ya sabes cómo me pongo cuando me haces enojar!, a parte que te traigo las tabletas para que de una vez por todas te deshaga de eso, toma aquí la tienes, tienes que tomarlas todas para que haga efecto, y se puede saber de dónde sacaste esas cosas, ¿quién te las dio?
-Está bien, luego las tomo, y mejor tranquilízate, que no quiero problemas, no estoy nada bien para estar discutiendo, y pues esto me las trajo una señora, ¡Joder Betty!, hay un problema con eso, por lo menos otras se preocupan por mí y ven que necesito para luego traérmelas, no como tú que vienes a reclamarme de todo.
-Que señora te trajo esto, porque están casi nuevas esas cosas, mírame a la cara cuando te estoy hablando, Audrey con quién estas ahora. – Betty habla elevando la voz.
-Ya te dije Betty que fue una señora quién me las trajo, vas a empezar una discusión o lo que es mejor vas a empezar a golpearme, Joder, ya estoy cansada de esta mierda y tú empiezas con suposiciones absurdas – habla Audrey exaltada.
-Ya está bien, mejor vamos por unos tickets así nos calmamos y la pasamos mejor.
Audrey paso el resto del día consumiendo droga junto con su visita, hasta que el horario de visita terminó y se retiro, después de lista, decidió irse a su cuarto y no buscar a Sabrina, una vez estando sola…
-Y ahora que voy hacer, Sabrina no quiere verme, no quiere hablarme, yo a ella la amo, me siento muy bien a su lado, con ella siento que soy mejor persona, porque no se lo dije, pero es que yo pensé que ella no me aceptaría así, cuantas veces de alguna forma le tocaba el tema y ella me respondía en forma negativa, lo que más me hizo decidir a no tener este bebe fue el rechazo cuando le acerque a se bebe, y después resulta que reacciona dejándome, diciendo que ya no quiere nada conmigo, por otro lado está su madre, que me trae cosas que según su hija le dijo que haga, pero ella ni siquiera está cuando me la dan, luego hablan de que ella se va responsabilizar de mi embarazo, su madre habla emocionada con que le voy a dar un nieto, y su hermano que está muy guapo me dice que él le puede dar el apellido, hasta me hace insinuaciones de que yo verdaderamente sea parte de su familia, y ahora tengo las famosas tabletas que me ayudaran a perderlo de una vez, y no sé qué hacer…
Audrey se quedó pensando en cada momento con Sabrina, en las cosas que habían vivido, vuelven una y otra vez las palabras de Sabrina al enterarse del embarazo, así también vienen las palabras de la madre, y también piensa en que ya fue Betty y no le dijo nada de ya no seguir con ella, también mira las tabletas que le trajo, se la pasa así un buen rato hasta que por fin toma una decisión.
-Creo que después de tanto pensarlo, ya sé que voy hacer, pues lo que hare es……
Hasta aquí no más por el momento, les prometo que voy a subir la continuación en el transcurso de estos días, espero que esta entrega les hubiera gustado, así que gracias por sus Valoraciones y Comentarios que harán al respecto, Bueno creo que a muchos les gustó la noticia que nuestra amiga nos dio, y sobre todo el mensaje que nos deja a cada uno de nosotros, ahora yo entiendo muy claramente cuál es el VALOR que tiene el ser LIBRE, y espero que ustedes también sepan el valor de serlo, como muchos de los comentarios son dirigidos a ella, pues le pedí que les pueda responder a sus comentarios, aprovechando que estaba descansando unos días, ahí los dejo con nuestra amiga.
Hola a todos, gracias por seguir esta historia, gracias por sus comentarios, y comentarles yo que ya estoy tramitando todo para mi audiencia, gracias por todos sus buenos deseos, ahora paso a dar las gracias a:
Natzi – Muchas gracias pues te confieso que hasta el día de hoy no me doy cuenta cuando una chica está embarazada tengo mala percepción, creo, pero a mi madre no se la chalan ni la pueden disimular. Gracias natzi por el abrazo y también yo espero que mi nombre sea limpiado de toda acusación, un abrazo para ti amiga.
Solsouza – Gracias Sol, no te me infartes ni te me mueras, si no quién va terminar de leer la historia por ti, no sabrás en que va terminar, mejor sigamos de amigas, para que sepas el gran final, bueno ha sido un gusto conversar contigo, gracias por los abrazos y bueno no la disimules tanto que más estas a favor de Audrey que de mí, según el relato, pero tienes razón sé que me he merecido un par de golpes, pero menos mal no te conocía, sino ya me hubieras golpeado, es una broma. Y bueno no creo que me indemnicen, aquí no pasa eso, yo solo espero que mi nombre sea limpiado nada más. Un abrazo para ti querida amiga, espero sigamos en contacto.
Lamusasolitaria – Gracias por seguir la historia y por haber comentado en esa entrega, tienes mucha razón, no importa el lugar porque donde menos te lo esperas, te puede llegar el amor de tu vida, es que Cupido anda por todos lados, un abrazo para ti y espero sigas comentando.
Alexa – Gracias nena, pues me alegra saber que tú hayas entendido bien el mensaje que traté de darles, así que amiguita tú también puedes llegar muy lejos, besos para ti también.
Jessbe04 – Gracias linda, es bueno saber que amas esta historia, y si no sube rápido la continuación no es mi culpa, porque yo le doy los detalles de todo lo que me pregunta, arréglatela con tu autora, es ella que la flojea, y no permite que tú sigas soñando con esta maravillosa historia, gracias por compartir mi alegría de estar en libertad, un fuerte abrazo para ti amiga.
Sofy1592 – Gracias amiga, en serio me admiras, pues te confieso que no me considero una persona fuerte y valiente, hasta hoy me cuesta mucho poder seguir adelante, cada día es un reto para mí, un saludo para todos en Costa Rica, y hazme un favor comete un budín de pan o arroz con piña en mi nombre, eso me encantaba comer en la casa de una muy buena amiga que es de allá y ahora ya está en tú tierra. Con respecto a los saludos a Lita y Gigita, claro que se los doy a ese par de tortolita. Un abrazo para ti amiga y sí que voy a disfrutar de mi libertad.
Nestor – Gracias amigo, creo que para muchos fue algo que los dejó sorprendido, pero bueno esto fue algo que me sucedió y que en esta peor circunstancia pues conocí el amor y que ha formado parte de mi felicidad, un abrazo, gracias por ese excelente.
Shantyy – Gracias querida, pues a mí también me sorprendió mucho la reacción de mi madre, inclusive hubieron situaciones en las cuales ella da a favor siempre de Audrey, como en esta continuación, me ordenes y pobre de mí si se me ocurre decir o hacer algo en contra, pero bueno gracias por tu comentario, con respecto a la cabo, te cuento que desde la última vez que la vi, no me la he vuelto a topar, bien por ella. Sabes que tienes mucha razón de las peores experiencias puedes aprender mucho, y sé que aprendí la lección de no confiar demasiado, pues yo pensé que todas las personas son buenas y que las personas malas no existían, pero ahora tengo mucho cuidado con eso, ahora estoy a la espera de la fecha de mi audiencia, ya tendrás noticias mías, tengo una curiosidad, por si acaso no eres abogada, es que sabes tan bien esos términos que solo escucho decir a mi abogado.
Peke – Muchas gracias por haberte dado un tiempito para poder comentar, y tú también te pones en la lista de las que me querían matar, ni modo creo que me lo merecía en algunas ocasiones, pero lo bueno es que ya ves que las cosas pueden cambiar. Sabes te apoyo cuando me dices que mi familia me quiere y me apoya, te confesaré que cuando yo caí en prisión las relación de toda mi familia se había desunido, todos andábamos por nuestros lados, pero cuando paso esto permitió que toda mi familia se una y estén a mi lado, familiares que viven en el interior del país fueron a visitarme, algo cierto dijeron ellos, que Dios tiene su forma de hacer las cosas y que esta vez había dado justo donde sabía que les iba a doler, para mi abuelita soy la nieta adulada, para mis tíos también era la consentida, y para todos mis primos era el modelo a seguir, para mis padres pues era su orgullo, y para mis hermanos la mejor hermana del mundo, aunque ellos dicen que lo sigo siendo, doy gracias a Dios por la familia que me dio, un fuerte abrazo, gracias por tus buenos deseos.
Gigita – Muchísimas gracias por todos tus buenos deseos, y pues tienes mucha razón, Dios tiene su tiempo, aunque a veces pensemos que no es así y nos impacientamos, de todo lo malo siempre hay algo bueno y es eso lo que se tiene que rescatar, sé que ahora las cosas van a cambiar, ya podré seguir con mis planes tranquilamente sin temores a que me estén apuntando, sé que tengo sueños que alcanzar y también sé que con amigas y confidentes como tú pues me será más fácil lograrlo, gracias porque sé que puedo contar contigo siempre, un mega abrazo y besos para ti. Ah una cosita no quiero meterme, pero no dudes del amor que te tiene cierta persona, esa chama está tragadísima por ti, o como se dice aquí, está camote por voj.
Absa – Gracias Bea, para mí ha sido el gusto de conversar contigo y que bueno es saber que puedo considerarte mi amiga, pues ya vez no todas las historias son inventadas, algunas pueden ser ciertas como en este caso, recibe un fuerte abrazo de nosotras, y macky dice que no hay de qué con respecto a lo visual.
Aurora la diosa – Gracias nena, por tus buenos deseos, sí lo haré de seguir para delante, pero esta vez con la frente en alto y no dejarme vencer por nada, un abrazo para ti. Y sabes que hasta ahora no entiendo porque rayos produce esos cambios de humor en la chicas embarazadas, será que no pueden ser normales y relajadas sin estar fastidiando con esos cambios que solo afectan a la pareja, jajajaja bueno yo solo digo. Saludos a México.
Adelai – Gracias amiga, por los éxitos que me deseas pues sí lo seguiré haciendo el de ayudar a quién se pueda sin en esperar retribución, pues todo al final se llega a cosechar, así que tú también tienes que hacer lo mismo y sobre todo cuida mucho y disfruta tu Libertad, un abrazo para ti. Con respecto al Bombón sino sube rápido la continuación es de floja, porque a mí me pregunta todos los detalles para escribir su continuación, así que reclámale, dale duro se lo merece, cómo te va hacer esperar tanto, mejor dile que deje de pensar y de estar tanto con su barbie, que también la deje escribir su relato.
Bebe2412 – Gracias amiga, fue un gusto conversar contigo, me alegra saber que andas muy enganchada a esta historia, y pues tienes toda la razón el amor siempre tiene que perdurar, por eso te mando un fuerte abrazo.
Nagisa – Gracias por considerar excelente esta historia, es bueno saber que te gusta la forma en que la escriben, que te puedes imaginar los momentos, y que puedas vivirla, gracias por tu comentario, espero no te ausentes mucho, un abrazo.
NenaEle – Aún sigues sorprendida, por favor ya no lo estés, y cómo no estuviste cerca para que me dijeras del embarazo, porque créeme que yo me enteré después de un mes, sino me equivoco todo el penal lo sabía menos yo, aquí solo han puesto algunas situaciones no todas, pedí que de una vez pusiera la parte de cómo me enteré, así que por qué no me dijiste, si lo sabías, jajaja. Gracias por seguir esta historia un abrazo para ti, no te pierdas tanto.
Karina – Gracias amiga, por tan buenos deseos de éxitos y prosperidad, pues te diré que las personas que me hicieron daño, pues Dios se encarga de cobrárselas, lo bueno y la satisfacción que yo tengo es que no tuve que hacer alguna maldad contra ellos para que la paguen, y tienes razón que doy gracias a Dios por tan buenos amigos que me han tocado tener, yo pedí a Dios que si él existía me lo demuestre no dejándome sola y sabes que de todo el tiempo que estuve en prisión solo cuatro días no tuve visitas, así que pude sentir su presencia en cada abrazo que recibí de las personas que me quieren, muy bonitas esas palabras de Rosana, un abrazo para ti.
Nahomy – Gracias amiga por los abrazos, pues sí que todo este tiempo para mí no han sido fáciles que digamos, pero uno tiene que luchar día a día para no dejarse vencer por nada, y también te apoyo a mí me gustan las cosas claras, que todo se diga desde el principio que no se de tanta vuelta pero ya ves no todas somos así, y pues por eso ahora la relación se tambaleó, eso ya lo habrás notado en esta entrega, esperemos que las cosas cambien, un abrazo para ti y porfa no tardes con tu relato, no te contagies de cierta personita que no digo su nombre pero que estoy pensando.
Blue – Primero que nada no soy Audrey, está bien quién que te guste más ella pero no me cambies el nombrecito soy Sabrina, y pues con el mensaje no quiero que solo se vea como algo tierno, si no más bien que sea de reflexión para todos, y tienes razón al decir que las personas juzgamos fácilmente y no sabemos el daño que se causa, gracias por seguir esta historia y para mí también es un gusto haber conversado contigo, gracias amiga un abrazo, ah claro que podemos seguir en contacto por medio del correo de tu autora.
Puropogo – Gracias por los deseos de que yo goce mi Libertad, pues sí que lo haré, y con respecto a la prueba grafologica aún no entiendo porque no me la hicieron, además no hay los documentos que dicen que yo firme, misteriosamente han desaparecidos, pero yo que puedo hacer ellos son las autoridades y a mí me mandan a prisión, pero lo bueno es que ya paso y ahora el que no aparezcan esos documentos me favorece, no hay pruebas en mi contra, gracias por comentar un abrazo para ti, saludos a Colombia.
Olga – Gracias amiga, sé que usted me entiende, y que sabe que los momentos o situaciones que se relatan aquí, pues suelen pasar en un recinto penitenciario, y lo que se sufre estar privada de libertad, me agrada saber que ya los tiene todos los capítulos coleccionados, al parecer no es la única, me agrada en serio, y eso de que se convierta en una película o una serie para adultos, pues ya me habían dicho que sea una novela, por lo visto no sería una mala idea, ya que piensan que tiene un buen guión, podría ser, ahora falta el productor. Un abrazo para usted.
G.G. Gracias mi amor por hacer de mis días los más bonitos y felices, te quiero mucho, Feliz Anivesario amorcito.