Amor compartido

AMOR COMPARTIDO

Ya se qué siempre vos tenés razón, Alejandro. Para qué discutir... Qué esta inquietud mía por sentirte a mi lado, conmigo, amándome, hundido en mi orto, cogiendo hasta morir, bombeando como loco, recorriendo mis tripas con tu leche que es como lava de un volcán incendiado, abrazado a mi cuerpo con desesperación, es una fantasía, un error en el libreto del destino, una mentira que ya lleva veinte años..

Ya se que es mentira, que tu pija me pertenezca, que tus huevos que desafían la ley de gravedad ,sean míos. Ya se que estos orgasmos que nos regalan nuestros cuerpos semejantes y tan diferentes son inútiles, sin significado, descartables. Pero debo confesar que me resultaba intolerable que alguien todavía piense que amas a una mujer y que yo, soy tan solo un puto conveniente que con cierta frecuencia calma tus inquietudes, sosiega tus calenturas, acalla tus rebeldías, y te saca la leche que de otro modo, quién sabe dónde iría.

A veces pienso que he sido una exitosa práctica anticonceptiva para vos, de ese modo, te salvas de procrear bastardos, hijos sin reconocer, o sea amenazas a la integridad de tu patrimonio y el de tus herederos legítimos. Claro, nada mejor que un gay para garantizar la absoluta imposibilidad de ampliar la prole en forma indeseada. No hay nada mas indefenso que un gay amante de un hombre que funge como heterosexual : no tiene derechos, ni posibilidades , ni esperanzas. El puto debe vivir en silencio y en las sombras. Y si se rebela , se lo manda a la mierda.

Se que ahora estás con ella, con la madre de tus hijos, la abuela de tus nietos, la socia de tus bienes gananciales, la señora bien que lleva tus apellidos, luce tus anillos, habita tus casas, elige la vajilla para tus comidas, selecciona tus amistades, ordena a tu servidumbre y de vez en cuando recibe en su concha anquilosada, tu pija , y tus huevos que son míos y finge un goce que nunca experimentó. Ella, estoy seguro, no conoce o ya se olvidó de tus besos tiernos, tu lengua consuelo y brisa , tus caricias locas, tus palabras al oído, tus declaraciones de amor, y desconoce tus lágrimas cuando comprendés la desdicha de lo que somos. Ella no reduce tu fiebre, ni calma tu desesperación, ni te recita poemas ni te canta canciones de amor.

Me has visto Alejandro? Mirá mis cabellos cortos que a los 37 años invadieron ya las canas, mirá mis ojos puro ojeras y ansiedad que solo saben mirarte, mira mi cara que comienzan a azotar arrugas y patas de gallo. Observa mis brazos mi pecho, mi cuerpo que fuera tan deseado, mi pija, mi culo, mis piernas, mi piel Todo ha comenzado a caerse. Empezó ya , una lenta decadencia que paso a paso me lleva al fin de la juventud. Y entonces que?. Nada hay peor que un puto viejo, solo, sin familia y con poca plata.

Por eso te engañé esta tarde. Levanté a un tipo en un chat de gay com, . Tiene mi edad, es médico, vive en un departamento muy luminoso en un piso 34 con vista al estuario del Rio de la Plata. Es soltero y sin compromisos y gay, aunque no lo declame por ahí.

Hablamos largamente por el chat y me pareció muy educado , muy culto , muy inteligente. A diferencia de otras conversaciones de chat, no nos preguntamos nuestras medidas de altura, peso, tamaño de pija, ni que nos gustaba hacer en la cama. No hablamos de sexo casi, en esas largas horas. Pero supo de vos claro, de tu mujer, de tus hijos, de tus nietos, del color de tu automovil, de la fuerza de tus brazos, del calor de tu piel, de las promesas incumplidas, de las escapadas clandestinas, de ese eterno vigilar para no ser vistos, de ese permanente huir. Supo de todas las mentiras y disimulos que debemos inventar para que esto que tenemos no trascienda., para que nadie sepa que alguien tan importante como vos, alguien de tu alcurnia y prosapia, alguien de tu estatura social y familiar y de tus irreprochables antecedentes occidentales y cristianos, se la come doblada, chupa pijas , es maricón, se traga el sable, es marcha atrás , puto , invertido, comilón, trolo, mamón, joto, culo roto, bujarrón, pederasta, uranista, depravado, sodomita, marica , gay......

Tomamos con el del chat un café en la confitería Richmond , como dos señoras gordas que no somos, y luego fuimos al río a caminar por la costanera sur y nos sentamos en un banco a charlar y ahí le dije que estaba dispuesto a tener sexo con él, si el quería. Sos loco eh, me dijo.

Tuvo la lealtad de preguntarme incluso si estaba dispuesto a tirar veinte años de mi vida, prácticamente toda mi vida adulta a la basura, por despecho y yo le contesté que era una decisión largamente pensada, deseada y tomada con toda premeditación.

Me emborraché con Tia María , con licor de huevo , con vino de Jerez., Lo único que faltó fue el Licor de las Hermanas (uno que nos daban en el colegio para el dolor de barriga). Cómo se emborracharía un maricón de mi clase si no fuera con bebidas que toman las mujeres, y así me convertí en el tipo descarriado y sin frenos que nunca fui.

Se llama Darío sabes, es rubio , alto , delgado, pero fuerte, la cara se le enrrojece por cualquier cosa, es como si viviera sonrojado, hablamos mucho en inglés, el desciende de irlandeses y en su ojos claros encontré algunas preguntas, que preferí no contestar.

Fuimos a su departamento tan alto con vista al estuario, y como si fuera un chico, me tomó la mano, y descubrí una calidez que no conocía, una ternura insólita, y en mi borrachera, percibí su compasión , el valor de las cosas no dichas, la generosidad de no preguntar ni aprovecharse de la situación.

Sin preámbulos y porque yo lo quise, nos besamos, nos acariciamos, el tiene unos labios finos y suaves y un aliento dulce y una manera hermosa de jugar con su lengua y yo le besaba al principio como buscando vanamente tu cara , tu boca, tus ojos, tu frente, tus sienes.

Lo desnudé , y me saqué toda la ropa, y le busqué la pija y me la metí en la boca para tragarme toda la desesperación que llevaba llantos a mi boca. El me decia, "flaquito no es necesario, no lo hagas si no te gusto". Pero lo malo es, que me gustaba, lo malo es que esa pija que chupaba con deleite, ese culito lindo y suave que acaricieé en la oscuridad, me provocaban una erección como hace mucho no sentía. Lo malo es, que esa pija circuncisa y gruesa , tan fuerte tan dura , tan derecha me conquistó con su tersura, con su potencia, con la fuerza de su juventud, y se la mamé por horas, y me dio su leche como quien me da el remedio que me da vida y me mata. Y cuando mucho después, me dormí, me sacó los zapatos, las medias, me tapó y se dio vuelta, como presintiendo que yo al despertar, ya sobrio, lo despreciaría.

Pero sabés Alejandro, al despertarme en los brazos de Darío, no sentí ni arrepentimiento ni culpa, fue como recobrar la vida , como amanecer a algo diferente , por eso lo besé con ganas, como queriendo desayunarlo, merendarlo , y el me devolvió uno a uno los besos y buscó mi culo , mi hoyo despreciado y me dio su pija, me puso su verga como quien inyecta un suero antiofídico, imprescindible para salvarme la vida. Y cogimos , sabes, cogimos como nunca recuerdo haber cogido, cogimos , garchamos, copulamos, cogimos, sin saber donde terminaba su pija y empezaba mi culo, y qué bien coge Darío, es como si te apuñalara de amor, como si su leche fuera un bálsamo de risas y perdones, y uno no se siente clandestino , huyendo, fugitivo de una sociedad perversa , del qué dirán , de las miserias cotidianas con nombre y apellido, calladas, enmudecidas y mientras el me llenaba de su leche , de su miel , del amor que tanto buscaba, pensé en medianoches en las que no esperaría tu llamado, en que no extrañaría el calor de tu cuerpo, el sonido de tu voz , tu pija , tus huevos, tu deseo , tus besos, tu pasión, tu necesidad oportunista de mi cuerpo entregado. Noches en las que no sintiera odio por la mujer que te tenía, por los hijos que te ocupaban, por tu vida de padre y esposo que te apartaba de mi ..

Y feliz después de 20 años, decidí escribirte esta carta Alejandro. No se, cómo saberlo si Darío es la respuesta. Pero hoy es una puerta, una posibilidad, una apuesta , hoy es un rayo de luz que ilumina mi vida oscura, hoy es una tibieza hermosa que me aliviana el corazón.

Mañana pasaré a recoger mis cosas.

galansoy

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