Amor a dos manos a la vez

Tres amigas TV, se encuentran y juegan al fisting y a la masturbación simultánea, junto con calzar tacones altísimos.

Amor a dos manos.-.

Había encontrado dos amigas con “ventaja” (pene) que eran realmente lindas, muy calientes, con cuerpos preciosos y lo mejor de todo era que tenían el mismo fetichismo mío, ya que les fascinaba fanáticamente salir a pasear y a aventurar, calzadas por lo menos con tacones finísimos de 13 cm. de alto, sin plataforma y muchas veces con tacones todavía mucho mas altos, ya que los tacones de 15 cm. no eran problema grave para ellas, siempre los usaban hasta para salir a bailar a las fiestas, con tal de que no tuvieran que caminar muchas cuadras con ellos, pero jamás con plataforma.

También eran aficionadas a jugar a las mujeres en pareja como lesbianas y eran verdaderas maestras en ese arte, ya que usaban en sus juegos lesbianos, toda clase de ayudas y artefactos sexuales con los que gozaban a concho como las locas que eran, masturbándose, enculándose, besándose y lamiéndose los respectivos culos (Anos) y “clítoris” (Penes), cual de ellos mas caliente, duro y poderoso.

Yo por mi parte, no trepidaba en unirme a ellas ya me encantaba su compañía y jugaba sus mismos juegos totalmente travestida(o), lo que ellas adoraban, ya que hacíamos un trío de locas imbatible para gozar de lo lindo y dispuestas a todo con tal de gozar con nuestros sexos de cualquier modo, aunque que fuera algo difícil y duro de aceptar, siempre que ello nos proporcionara un gran gozo sexual, lo que era un propósito ineludible cuando nos encontrábamos listas para correr las mejores juergas de sexo.

Fue así como un una noche de la primavera recién pasada, yo me vestí lo más cuidadosa y sensacionalmente sexy posible, para lo cual me endosé, primero que nada un corset de cuero negro ajustadísimo, que me achicaba la cintura desde mis 98 cm. a menos de 85 cm. dejándome unas caderas y unos glúteos abultadísmos, aumentados por unos rellenos de silicona muy apropiados y casi realísticos que engañaban a cualquiera persona de lo perfectos que eran.

Este corset también tenía unas medias copas que dejaban asomar por encima mis ya bien abultados y muy sensibles pezones, ya que mis senos son ahora sensacionales, con rellenos internos de silicona de 1,5 Kgs. c/u, que me hice implantar hace ya casi un año con un éxito fabuloso, ya que mis sostenes ahora tienen que ser de un tamaño de norma EE.

La medias iban sostenidas por 4 tirantes de seda con encajes similares a los del corset, en cada una, todo mi ano y mi sexo estaban absolutamente afeitados en un 100%, al igual que el resto de mi cuerpo, cosa que me era muy fácil, ya que tengo mi cuerpo prácticamente sin vellos, por lo cual entre las medias y el corset, sobresalían airosos mis dos bolas y mi grueso pene, que en esta ocasión no ocultaba en absoluto.

Completaba mi ajuar de fiesta, un par de botas negras de charol, a la rodilla, con cierre lateral, adornado con brillantes hebillas de metal, y con una par de tacones de acero cromado de sólo 6 mm. de diámetro y la fabulosa altura de 18 cm. que parecían dos estiletes finísimos del mas duro acero, pilares donde se apoyaban mis ya muy adiestrados y ágiles pies del Nº 40.

No me era imposible caminar con esos estiletes, ya que el largo adiestramiento por mucho años, con tacones de los más altos posibles e incluso imposibles, hacían que mis arcos quedaran tan quebrados, que estaban totalmente entrenados para caminar con verdadero y casi envidiable garbo con esa, al borde de lo imposible, altura de mis fabulosos tacones.

Es así como una noche como ya dije, salí así vestida como una mina super caliente, envuelta sólo en una capa de seda negra, rumbo al departamento de mis amigas, por mi largo adiestramiento en el tema, no me costaba casi nada manejar mi sensual Jaguar 800-ZT a pesar de la enorme altura de mis tacones, así es como llegué sin problemas al ascensor después de atravesar el lobby del edificio en medio del asombro y las miradas libidinosas de los que estaban allí, las hembras con evidente envidia y lo varones con una cara de lobos en celo que se veía claramente a la distancia.

Entré al elevador y me dirigí al último piso, lugar donde vivían mis amigas en un departamento maravilloso y muy independiente, con jardines en la terraza alrededor de él., entré cuando la Chabuca me abrió la puerta y me abrazó cálidamente empinándose en sus tacones de 6,5” ya que yo con los míos tan enormes la sobrepasaba por bastante, diciéndome que con la Gaby me tenían preparada una sorpresa muy especial que la iban a ensayar conmigo, pero que no me iban a contar nada de ello.

Abrazadas entramos desde el recibidor al living, donde nos esperaba ya lista la Gaby, ella estaba vestida realmente fabulosa, al igual que la Chabuca.

Llevaban solo un peto rojo la Gaby y Verde la Chabuca, y ambas una faldita muy corta del mismo color que apenas les tapaba el culo, llena de tablas y blondas, sin nada mas que las medias con liga de color igual y los preciosos zapatitos de tacones de 6,5” (16 cm.) , de igual color que los vestidos. Se veían como dos preciosas muñequitas muy sensuales y esbeltas, haciendo pininos en sus maravillosos tacones que para ellas eran sensacionales ya que calzan tan solo Nº 38 la Gaby y Nº 37 la Chabuca.

Me alabaron a rabiar mi tenida tan sensual y lo altísimo y afiladísimo de mis tacones, los que les causaban mucha envidia, sin embargo el arco de ellas era tan quebrado como los míos ya que su pie era bastante menor y no podían subir mas su altura porque les era físicamente imposible llegar a una mayor.

Enseguida nos servimos unos tragos de un líquido ambarino que decían que era una ambrosía regalo de unos amigos volvían de la China y que decían que allí era la última palabra como afrodisíaco, lo que parecía ser verdadero, ya que las tres nos pusimos de inmediato muy cachondas y comenzamos a manosearnos, besarnos y acariciarnos sin parar, llenas del mas intenso deseo sexual.

Gaby me tomó entre sus brazos y raudamente me llevó al lecho en el dormitorio vecino a pesar de los alto de sus tacones, y lo hizo ayudada por Chabuca que no cesaba de besar uno por uno mis preciosos tacones mientras me decía que esos tacones tan finos y tan altos la calentaban al máximo y que me iba a follar de todos modos de inmediato, en la compañía de Gaby.

Gaby no me dejó tiempo para nada, me puso de espaldas en la cama, con los tacones en lo alto y echándose a mi lado empezó a chupar mi pija que estaba tiesa mas no poder de lo ultra caliente que me encontraba, pero la Chabuca no se hizo esperar y armada con un consolador gigante, me penetró por mi trasero a la vez que la Gaby me chupaba, lo que me dejó casi al borde de acabar de inmediato, pero al darse cuenta de ello, ambas se detuvieron en su accionar a la espera de mas gozos de los tres.

Gaby se puso encima de Chabuca y la penetró con su enorme pene, por lo que Chabuca comenzó a a gritar con loco frenesí al sentirse empalada por ese mastodonte hasta las bolas, las que le golpeaban muy fuerte entre los cachetes del culo, en ese momento completamente enloquecida Gaby se puso en acción contra mí cuerpo y comenzó a penetrarme el culo con sus dedos de la mano izquierda uno por uno, hasta que tuvo los cinco juntos, ensanchando al máximo mi esfínter.

Con esa operación mi pene se puso tan tieso como si fuera de fierro y como en ese momento ya Gaby estaba casi por acabar con la follada de Chabuca en su ano, sintió un intensísimo calor y sin pensarlo mas y de un solo golpe me entró por entero su mano izquierda en mi culo dejándome completamente empalada por ese “fisting” que por primera vez sentía en mi intestino.

Era como si un burro me estuviera follando, una cosa que no soy capaz de relatar con la total fidelidad, algo monstruoso me había entrado allí y me estaba causando un gozo tan enorme que casi perdía el sentido, algo tremendo y brutal a la vez, una cosa que no se puede describir de lo fabuloso del placer que estaba disfrutando, sentía como que quería que Gaby entrara entera dentro de mí y gozar con eso hasta el final de mis sentidos, algo realmente inenarrable.

Pero no terminó la cosa allí, ya que la loca de Gaby, dándose bien cuenta del placer que me estaba brindando quiso llegar al súmun de la delicia y tomando con la mano derecha mi pene tieso mas duro que nunca lo comenzó a masturbar con frenesí.

Yo sentía que ahora estaba entregado por entero a ella, sentía que mis entrañas estaban por completo en sus manos y en un éxtasis de maravillosa felicidad sentí que mi semen salía a borbotomes de mi ultra estrujada próstata y tomando en torrentes el camino de salida por mi uréter, saltaba afuera como un raudal de furioso caudal, dejándome totalmente vacío y absolutamente extasiado por la dicha infinita que me había proporcionado Gaby, empujada por su gozo al ser empalada por el monstruo de Chabuca, que casi le había roto su ano al golpearla sin piedad, mientras me hacía gozar como jamás me había sucedido.

Fue así como la sorpresa de ambas, me hizo gozar como nunca lo hice antes, ya que es terriblemente delicioso sentir que alguien tan sensual te está haciendo gozar a concho, metiéndote ambas manos, una por el ano y la otra por fuera, moviendo con gran rapidez y fuerza, tu erectísimo pene, el que no tarda en llegar al mas fabuloso de los climax, con tanto y tan delicioso estímulo sexual.

Es fabuloso sentir que estás poseído totalmente por las dos manos de tu amante, la que te aprieta tus entrañas donde jamás persona alguna lo hizo antes y sabes que ella esta gozando a su vez de hacértelo, a la espera de que tu le devuelvas pronto esa caricia indescriptible que tanto te hace gozar.

Esa noche las tres gozamos como unas perras en celo y nos fuimos turnando en gozar de la misma delicia, sabiendo que habíamos descubierto una jugada nueva que nos iba a deleitar por mucho tiempo.