Amigos o algo así. 2 de 2.

Fue la última vez que nos acostamos cuando en uno de esos juegos nos hicimos unos arañazos que al descubrir Pol se me ocurrió decir que había sido tu “jugando” y trate de explicarle que como tantas otras ocasiones nos habíamos hecho cosquillas y fue cuando me arañaste sin querer, aunque lo de jugando no lo tuvo en cuenta y estalló la tempestad; después del lio que se formó me faltó valor para aclararlo y como unos y otros te condenaron preferí dejarlo como estaba para no liar más el asunto. Berta me dijo que pensaba dejarte porque jamás podría volver a confiar en ti.

— No le des más vueltas, podemos compartir nuestro tiempo y Pol no tiene por qué enterarse, vendré aquí cuando quieras y de vez en cuando podemos ir a mi casa si eso te da morbo.

Javi se quedó pensativo unos instantes al cabo de los cuales propuso.

— Primero tendrás que ganarte mi perdón y eso será a base de mamadas como la del otro día, por el momento no pienso darte más caña al menos hasta que se me pase el cabreo por lo que hiciste y aún más por lo que dejaste de hacer pero tranquila, porque soy un hombre comprensivo como bien sabes.

Raquel sonrió y comenzó a acariciarlo por encima de la ropa, se arrodilló entre sus piernas y tras desabotonar el pantalón accedió sin dificultad a la verga que comenzó a lamer aplicando la mejor de sus técnicas; se entretuvo jugando con ella, con el escroto y acariciando el perineo y aunque logro hacerlo llegar al límite en varias ocasiones tardó mucho rato en hacer que se corriera entre sus labios que como la vez anterior no dejaron escapar ni una gota; esa fue la única satisfacción física que obtuvo, la otra y mucho más importante fue convencerse de que lo había logrado otra vez.

Había conseguido enredarlo y seria su amante a pesar de la gran putada que le había hecho en el pasado. Esa fue su gran recompensa y el pago tampoco era nada desagradable aunque habría preferido otro, como ser su esclava por ejemplo; algo que deseaba desde que Raúl le dio la primera nalgada.

Javi, en esta ocasión no la besó y después de ofrecerle una copa que ella rechazó le dio su abrigo y la ayudó a colocárselo dando por terminada la visita; cuando ya estaba en la puerta le dijo.

— Te enviaré algunas instrucciones por Whatsapp pero no respondas más que cuando estés en condiciones de cumplirlas y no admitiré ninguna excusa para que se cumplan.

Raquel simplemente afirmó y se dirigió al ascensor, mientras bajaba pensó.

• < ¡Ya se está comportando como un amo y esa es una buena señal, pronto será totalmente mío! >•

Al quedarse solo Javi paró la grabadora y comprobó con satisfacción que había sido un éxito, había quedado todo perfectamente registrado, pasó el fichero al ordenador y guardó una copia en un pendrive y otra en “La nube” por si fueran necesarias.

Llamó con el otro móvil a Tania y al responder le dijo de corrido y sin darle la oportunidad de responder.

— Soy Javi y puedes colgar pero te necesito y sé me darás al menos una oportunidad, siempre que nos hemos necesitado hemos pedido ayuda y es lo que te estoy pidiendo. Ayúdame.

Quedó a la espera y poco después oyó la voz de Tania.

— ¿Dónde quedamos, Voy a tu casa? Dime dónde vives, sé que dejaste el piso que compartías con Berta.

Le dio la dirección y esperó pacientemente; faltaba poco para la hora de comer pero ya lo haría cuando tuviera oportunidad; en poco más de media hora sonó el telefonillo, abrió el portal y esperó en el descansillo y al detenerse el ascensor el corazón le dio un vuelco.

Al salir del ascensor, aquella embriagadora fragancia que tan bien conocía lo envolvió y en su mente se formó la imagen de su último encuentro.

Tania lo llamó para verse a solas y a esas alturas del partido tal petición no le pareció insólita; llegó al apartamento que compartía con otra chica que había ido a pasar el fin de semana con sus padres y después de los saludos lo abrazó para no mirarlo a la cara y le susurró al oído.

— Hoy no quiero que me folles, necesito que me hagas el amor con ternura, sin grandes estridencias y haciéndome creer que soy importante para ti; quiero notar cariño en tus caricias y que no sean lo que busco siempre para satisfacer mi lujuria.

Javi la besó en los húmedos ojos y abrazados caminaron hasta la habitación, se sentaron juntos en la cama y con un brazo rodeando su cintura besó su cuello y hombro y después la dejó caer de espaldas quedando tendido a su lado, los besos fueron dulces sin el desespero que suelen tener y al rato, aun vestido ambos la penetró con delicadeza y se quedaron inmóviles varios minutos besándose antes de que Javi comenzara a moverse hasta que mucho rato después llegaran juntos al clímax; era la primera vez que lo conseguían y la sensación fue extraordinaria, permanecieron abrazados mucho rato y fue Tania la que estando aun abrazados habló.

— Gracias; eres un buen hombre y mejor amigo. La semana próxima me mudo a casa de Raúl y quiero empezar esa nueva etapa sin ningún tipo de distracción y no digo que tú lo seas o lo hayas sido; acordamos que lo importante era el presente y que el pasado era el pasado y no debíamos compartirlo para no reprocharnos nada de esa época y quiero que esto sea un broche de oro que culmine mi pasado; como te digo a partir de la próxima semana mi vida será otra.

— Mientras estemos bien como pareja dejaremos aparcada esta faceta de nuestra vida en común, pero recuerda, siempre serás una persona muy importante para mí al que tengo mucho que agradecer y estarás por siempre en mis pensamientos.

Javi reaccionó cuando Tania avanzó hacia él.

Se besaron en las mejillas, entraron en la casa y mientras cerraba la puerta ella se desprendió del abrigo; estaba más guapa que nunca con unas enormes gafas oscuras a pesar de que amenazaba lluvia, lo besó en los labios como en otro tiempo y Javi preguntó cómo estaba y su respuesta lo desconcertó.

— ¡Mal! muy mal, desde que te apartaron del grupo no tengo a quien recurrir y cada día estoy peor. Mi mundo se desmorona y nadie me comprende ni ayuda; mi madre dice que se trata de una fase y que necesitamos tener un hijo para que todo se normalice aunque lo dudo y los demás están por sus asuntos, Sara se enfadó conmigo porque no insistí cuando traté de ayudarte y le sugerí hablar contigo; sigue pensando que entre las dos podríamos haber hecho algo.

Se sacó las gafas y Javi vio el moratón en un ojo.

— ¡Canalla! ¿Por qué te trata así? No me digas que te has golpeado con una puerta porque no me lo trago.

Ahora todo encajaba, fue Raúl en todo momento quien de alguna manera evitó que la verdad respecto a la supuesta violación saliera a la luz, una infidelidad la convirtieron en un delito que pudo llevarlo a la cárcel. Javi la abrazó y comenzaron a besarse de aquella forma tan dulce como lo hicieron la última vez aunque en esta ocasión había mucho más cariño que entonces; ella se sentía afortunada de estar junto al único hombre que se preocupaba sinceramente por ella y él, él la tenía entre sus brazos de los que no debió dejarla escapar; todas aquellas ocasiones en que estuvieron juntos los cuatro desaprovechadas por una tonta inercia.

Los cuatro se entendían de maravilla y no era necesario que formaran parejas “tradicionales” más que para alguno de los formulismos que exigía la sociedad que los rodeaba, pero juntos podían haber vivido su amor sin trabas de ningún tipo pero la comodidad o la cobardía lo evitó y ahora eran cuatro individuos con mucho tiempo perdido.

Hicieron el amor de forma sosegada y tratando de gozar el momento del dulce reencuentro y después de mucho rato abrazados hablaron al tiempo atropelladamente aunque Javi la invitó a proseguir.

— Tenemos que solucionar este malentendido, no creo trataras de violar a Raquel ni que hicieras nada que pudiera confundirla de ese modo. ¿Qué querías decirme tú?

Javi la ayudó a levantarse y en silencio la guió hasta el ordenador, puso la grabación y desde atrás la abrazó llevando sus manos a los pechos, más como apoyo que por excitarla y al oír las primeras palabras de Raquel.

— A qué tanta urgencia; ya te dije que nos veríamos pero no era necesario que me amenazaras .

Se giró sorprendida pero Javi la besó en la mejilla instándola a escuchar atentamente. Continuó escuchando y de vez en cuando se removía, puso sus manos sobre las de Javi para que la estrechara más entre sus brazos y casi al final de la grabación Javi notó que las abundantes lágrimas mojaban sus manos; la giró, paró la reproducción y se besaron hasta que les dolieron los labios.

— ¡Cabrón! ¡Cabrón! ¡Cabrón! ¡Cabrón!

Esas palabras mostraban el estado de ánimo de Tania que entendió de inmediato como habían sucedido las cosas y la hizo reaccionar.

— Tenemos que contarles a todos lo que pasó, no quiero pasar ni un minuto más junto a ese hombre y he de dar gracias a mi padre que apenas habla pero cuando lo hace es siempre para mi bien; llevábamos dos meses juntos en su apartamento alquilado cuando papa propuso cederme su piso porque ellos querían trasladarse a su casita en el campo.

• < ¡Lo pondremos a tu nombre ya que en su día lo pagamos nosotros!

— Mama replicó que como era para que viviéramos juntos lo lógico era ponerlo a nombre de los dos; papa insistió y como mama también lo hizo, él se negó a firmar la escritura.

— Estuvieron de morros más de dos semanas pero papa suele intervenir poco en los asuntos que lleva mama, pero esta fue una iniciativa suya y solo aceptó firmar si era de ese modo. Raúl no supo nada hasta que estuvo todo firmado y mamá, para congraciarse con él, dejo muy claro que había sido una decisión en contra de su opinión y ese día cuando nos quedamos a solas tuvimos el primer disgusto, fueron solo un par de guantazos y después me hizo el amor como si no hubiera pasado nada; en ese momento debí denunciarlo o al menos, contaros lo que había pasado y estoy segura que vuestro consejo habría sido unánime. ¡Déjalo! Pero fui cobarde, lo hable con mama que me convenció que se trataba de una fase y lo estoy pagando.

Javi respondió con decisión.

— ¡No! De momento no lo haremos público, esta vez haremos las cosas bien y lo primero es hablar con Sara. Háblale, cuéntale que nos hemos visto y sin entrar en detalles hazla venir “solo a escuchar” de lo demás me encargo yo.

— En ese caso la llamaré para que venga ahora mismo, quedamos en comer juntas hoy, y estará en el restaurante porque Álvaro está de viaje; al recibir tu llamada me disculpé sin explicarle porque y quedamos que la llamaría esta noche.

Tania llamó a su amiga, le dio la dirección y simplemente añadió.

— Ven en cuanto te sea posible y trae algo para comer dos porque no he podido comer nada aún, tengo una grata sorpresa para ti.

Sara respondió que llegaría en media hora y se sentaron abrazados en el sofá recordando algunos de los gratos momentos que habían compartido. Sonó el telefonillo, respondió Tania en tono jovial y salió a recibirla al descansillo, entró detrás de ella y al ver a Javi se giró y su amiga la tranquilizó.

— Tranquila, escúchalo y entenderás porque estás aquí.

Javi la ayudó a sacarse el abrigo y no hizo intención de besarla, fue ella la que se aproximó y besó sus mejillas como habría hecho tiempo atrás, mucho más cerca de los labios de lo que recomienda la etiqueta. Se sentó en el sofá dispuesta a escuchar y mientras Javi le servía un armañac consciente que lo agradecería Tania preguntó a Javi, que si le apetecía comer alguna de las delicatesen que había traído su amiga le prepararía un plato combinado.

Con un gesto aceptó ofreciéndole unos auriculares a Sara, cuando se los colocó, puso en marcha la grabadora que le entregó y marcho a la cocina con Tania que había preparado dos platos y servido vino para ella y un refresco para él; comieron en silencio y mientras ellos lo hacían, y Sara en el salón escuchaba la confesión completa de Raquel, Javi recordó también aquella última noche que compartieron tiempo atrás.

Fue un par de meses después que aquella tarde con Tania aunque en este caso y a diferencia de su amiga, Sara quería proponer lo que sería un “punto y seguido” empezó como en otros casos con un Whatsapp.

— ¡Quiero verte! ¿Cuándo podrá ser? Estaré sola todo el fin de semana y necesito consejo.

Respondí que ese fin de semana también estaba solo y podíamos cenar juntos; quedamos en un restaurante del puerto olímpico pero no quiso comentar de que se trataba escudándose en un.

— ¡Después lo hablamos en tu casa tranquilamente!

Llegamos a mi casa, la que tiempo después compartí con Berta y que por el momento tenía para mí solo y como siempre que nos encontrábamos, en lugar de hablar nos dedicamos a jugar.

Su fijación siempre ha sido tener el control y lo ejercía de maravilla, con sus soberbias mamadas conseguía que me doblegara y supongo que del mismo modo todos los afortunados que cayeron en sus “fauces”.

Me comió la polla hasta lograr su recompensa y mientras me reponía comenzó a explicarme.

— Tengo una duda. Álvaro me ha pedido que nos casemos y le he respondido que lo primero sería ir a vivir juntos una temporada aunque me lo estaba pensando. La pregunta es. ¿Si me voy a vivir con él dejaras de verme? Ya sé qué hace mucho tiempo, cuando comenzamos a salir con nuestros chicos hicimos una gran fiesta de despedida; también sé que Tania cerró definitivamente esa puerta hace unas semanas, pero yo no tengo tanta fuerza de voluntad; Pol me ha asegurado que si era imprescindible nos veríamos cuando pudiera ser aunque no con la frecuencia y facilidad que hemos tenido hasta ahora y aunque lo aprecio mucho, lo cierto es que además de con él me gustaría continuar en contacto contigo, al menos hasta que decidamos casarnos o incluso alargarlo hasta que pensemos en tener un hijo.

Calló para alojar mi verga en su boca y como en tantas otras ocasiones supuso que con eso lograría convencerme para aceptar cualquier cosa; me dejé hacer y cuando mucho después logró con su insistencia y buen hacer que me vaciara por segunda vez en ella; se movió hasta quedar tendida junto a mí y abrazándome preguntó que me parecía la idea.

Mi respuesta, además de sorprenderla la indignó, aunque después de razonada la aceptó como correcta.

— ¡No! No podemos hacer eso, si algún día que ojalá no se presente nunca volvemos a quedarnos solos sabes que estaré a tu entera disposición y sabes también que puedes contar conmigo para cualquier cosa que se te ocurra, pero lo que no podemos hacer es comenzar una relación basada en una mentira plagada de infidelidades.

— ¡Me niego a ser parte de eso! y te agradecería que liberases a Pol del compromiso que contrajo contigo. Hemos corrido muchas más juergas que la mayoría de los que conocemos y si llega el caso y el futuro nos vuelve a reunir lo aceptaré pero no creo que sea honesto planearlo desde ya.

Las manos de Sara en mis costados me hicieron regresar a la realidad; apoyó su cuerpo en el mío y al notar sus pezones pensé que no tenía corazón pero sus lágrimas mojando mi camisa me mostraron que estaba equivocado.

Y con gran indignación vociferó.

• ¡¡Ese desgraciado!! Lo voy a destrozar en cuanto me lo eche a la cara.

— La última vez que estuvimos juntos me convenciste para comportarme lealmente y ser una mujer fiel; esa tarde al despedirnos hable con Pol como me aconsejaste y agradeció mi cambio de actitud; al encontrarme con Álvaro nos prometimos sinceridad y muy serio me dijo, que si alguna vez nos atraía otra persona lo mejor era hablarlo y que si así lo acordábamos podríamos hacer alguna escapada, pero al hacerlo con el conocimiento del otro y ser sinceros evitaría cualquier reproche.

— En todo este tiempo no he estado con ninguna otra persona; no he necesitado a nadie y no porque Álvaro sea ni la mitad de fogoso que ninguno de vosotros y cuando sentía la necesidad me masturbaba recordando alguna de nuestras fiestas pero jamás se me pasó por la imaginación salir a buscar a nadie, y tampoco él ha mostrado interés por nadie; luego va y se enrolla con esa mosquita muerta que después permite o directamente te acusa de violación y no es capaz de salir en tu defensa...

— Estoy segura que cualquiera de nosotros lo habría aclarado al instante.

Javi la abrazó para que se tranquilizara y mirándola fijamente a la cara le dijo.

— No se te ocurra enfrentarte a Álvaro por el momento, primero hay que hablar con Pol y aclarárselo todo. ¿Mantenéis el contacto?

Las dos respondieron atropelladamente. Y Tania aclaró.

— Raquel ha intentado apartarlo y prácticamente lo ha logrado aunque siempre que le mando un correo responde de inmediato. Lo puedo intentar y veremos qué pasa.

Tania se sentó en una butaca para redactar el correo y en el sofá, Sara se acomodó junto a Javi y le pidió que la abrazara; comenzaron a besarse y lo dejaron cuando Sara les dijo que Pol había contestado y estaba de camino.

Raquel había ido de compras con su hermana y cenaría con ella en casa de sus padres.

Media hora después llegó Pol; Javi se escondió en la cocina y al entrar preguntó que pasaba y que sitio era ese pues no era la casa de ninguna de las dos. Tania le respondió que era “su refugio”, el lugar que empleaba para encontrarse con su amante y que ahora necesitaba su ayuda; sirvió un whisky para cada uno y puso en marcha la grabación en el punto en que se oía a Raquel decir.

—Es cierto que nuestro proyecto empresarial fracasó y Pol trabaja ahora en una de las empresas de las que pretendía ser competencia y yo estoy en el paro; tengo mucho tiempo libre porque trabaja mucho y no me atiende como merezco; ayer, al verte, recordé lo mucho que me has atraído siempre y que a pesar de todo has sido el único del grupo que jamás ha intentado llevarme a la cama.

—Tanto Álvaro como Raúl lo consiguieron sin demasiado esfuerzo y eso que jamás me atrajeron como tú que hasta ayer eras mi asignatura pendiente; por eso te llevé a mi casa y me demostré que soy capaz de tenerte y satisfacerte plenamente; a nadie se la he mamado como hice ayer contigo y eso es muy importante para mí y debería serlo también para ti.

Entonces y por primera vez sonó la voz de Javi.

—Lo que paso hace un año. ¿Por qué permitiste que los demás creyeran que intenté violarte? Sabes que no es cierto, he de reconocer que siempre me has parecido una mujer extraordinaria y posiblemente si aquel día no hubieras venido con Berta me habría decantado por ti, pero ambas me parecisteis muy simpáticas y al minuto de llegar el poco sentido del humor de Berta chocó con Pol y por eso la aparté de él dejándole el camino libre hacia ti.

—¿Eres tonto? Siempre me gustaste. ¿Por qué si no crees que te hacia tantas confidencias? ¿Recuerdas cuantas veces te he elegido para ser árbitro de mi moda?

— O cuando te conté que me encantaría ponerle los cuernos a Pol por saber que se siente siendo infiel; quería ponérselos contigo pero eras tan cándido que no captabas las señales y ni siquiera esa vez que estaba tan claro supiste...

... después del lio que se formó me faltó valor para aclararlo y como unos y otros te condenaron preferí dejarlo como estaba para no liar más el asunto...

Pol oía las palabras de su pareja que lo herían como puñales. Estaba sentado en la punta de la butaca con el cuerpo muy recto y mirando a sus amigas exclamó con un hilo de voz.

— ¿Dónde está Javi? Soy imbécil y jamás debí dudar de él, pero esa...

Saliendo de su escondite Javi le dijo.

— ¡Aquí estoy amigo!

Se abrazaron y ellas también se unieron al abrazo formando esa piña que tantas y tantas satisfacciones habían compartido. No hicieron falta más explicaciones y después de que las chicas lograran separar a los amigos de su abrazo Tania preguntó.

— ¿Ahora qué? Sé que lo tienes todo planeado. ¿Cuál es el siguiente paso? Ya te dije que no quiero compartir ni un minuto más con ese canalla y tampoco creo que a Sara le apetezca demasiado estar con Álvaro.

— Ahora que los cuatro conocemos la verdad de lo que pasó y se vuestra postura al respecto es cuando me gustaría conocer la opinión de Pol. ¿Te fías de mí? Tengo algunas ideas para el acto final porque esto acaba aquí, aunque no sé si hoy mañana o cuando.

Pol le respondió que también quería terminar con ese engaño y su relación con Raquel que tanto dolor había causado y además de engañarlo entonces, trató todo este tiempo de apartarlo de sus verdaderos amigos y ahora quería volver a engañarlo.

— En ese caso llamare a Raquel para que venga a verme ahora y veremos cómo reacciona.

La llamó y su respuesta fue un entusiasmado.

— ¡Ahora mismo voy para allá!

Javi puso la calefacción al máximo para caldear la casa y por tanto el ambiente que era una parte importante de su plan; instantes después Pol recibió un Whatsapp.

— Me quedo a dormir en casa de mis padres, mi madre no se encuentra muy bien. Mañana nos vemos .

Estaba claro que en breve aparecería y eso en lugar de enfurecer a Pol lo llenó de satisfacción; sin conocer los detalles de lo que planeaba su amigo estaba claro que sería divertido a la par que definitivo.

Al sonar el telefonillo los tres se escondieron por separado para poder espiar sin ser vistos ni que los cuchicheos los descubrieran; Javi la esperó en la puerta, la besó en las mejillas aunque Raquel se aplastó contra su cuerpo esperando algo más pero Javi se mantuvo firme y después de ayudarla con el abrigo le preguntó si le apetecía tomar algo.

— Si, dame algo fresco porque fuera hace bastante frio pero aquí noto mucho calor.

Javi le sirvió una cola y para él sirvió un copazo de “mosto” de una botella de whisky de malta que previamente vació en otra, apurando su contenido para evitar que también ella quisiera otro. Y la reacción de Raquel fue la esperada.

— Pensé que no bebías. Es la primera vez que te veo con una copa de licor.

— Han cambiado muchas cosas desde que dejamos de vernos. Se lo qué esperas de mí pero primero quiero que hagas un estriptis muy erótico y me muestres la zorra ardiente que eres antes de darte lo que mereces y por eso tengo la casa caliente, para que no te excuses en que tienes frio.

— No hace falta mucho para que me muestre como soy y puedo ser todo lo puta que quieras, follar donde me digas o incluso con quien me señales si eso te satisface de alguna manera, pero siempre que después me lo compenses follándome como la otra tarde en mi casa antes de que nos interrumpiera el cabestro de Pol y tuviera que llevármelo a cenar fuera para que no te sorprendiera en nuestra cama.

Javi puso música y comenzó el espectáculo; lentamente desabotonó la blusa mostrando un sugerente sujetador que seguramente había comprado esa misma tarde; después de sacarse la blusa tocó el turno a la falda que fue bajando estando de espaldas a Javi que la miraba con atención tomando pequeños sorbos de su “whisky” de vez en cuando y mientras ella lo miraba, quedó con un diminuto tanga y el sujetador a juego del que hizo resbalar los tirantes antes de sacarlo de golpe tirándoselo a la cara; Javi lo apartó dejándolo con delicadeza sobre la mesita que tenía al lado y siguió con atención los contoneos que acompañaron el tramo final del espectáculo que fue cuando se desprendió del tanga.

Raquel iba a avanzar hacia él cuando Javi la paró casi gritando.

— ¡No! Aún no. Ahora. ¡Baila para mí!

Raquel comenzó a danzar acariciando sus pechos con una mirada felina que a cualquiera habría engatusado pero Javi tenía otros planes y en el momento que ella llevó una de sus manos a la vulva la sorprendió con una pregunta.

— Siento curiosidad por algo que ya no tiene importancia, pero sabes que me gusta llegar siempre al fondo de la cosas y ayer, me dijiste que Berta te comentó que pensaba dejarme porque jamás volvería a confiar en mí, pero ella pasó aquella semana en Menorca visitando a sus padres y cuando fui a recogerla al aeropuerto no quiso volver a casa conmigo y antes de tomar un taxi me dijo.

• — No quiero saber nada con un “violador” déjame recoger mis cosas y ve después a esa casa que no pienso pisar jamás; estaba ciega pero al fin lo veo todo claro .

— ¿Cuándo hablasteis? Dímelo con entera confianza porque como ves ahora no hay porque mantener nada en secreto y esa duda me perseguirá, apareciendo en mis pensamientos cada vez que nos veamos y no quiero distraerme con ideas absurdas.

— La llamé para evitarle un disgusto al enterarse a su regreso; pensé que lo mejor dadas las circunstancias era que fuera haciéndose a la idea y aunque nunca fuimos tan amigas entre nosotras como lo son Tania y Sara supuse que la chica necesitaba saberlo y como viste no fue capaz de escuchar tus explicaciones.

En ese momento Javi la habría abofeteado pero en lugar de eso dijo.

— ¡Vamos chicos ya podéis salir!

La cara de Raquel se transfiguró al ver aparecer a su pareja y las chicas que la miraban con desprecio y en un triste intento por justificarse dijo mirándolos desafiante.

— ¡Esto no es lo que parece!

Pasaron todos por su lado camino de la puerta desde la que Pol le dijo.

— Espero por tu bien que no rompas nada o juraremos en comisaria que has sido tú la vándala que ha destrozado la casa; voy a la nuestra con mis amigos a recoger las pocas cosas que tengo en ella de interés y el lunes iré a rescindir el contrato de alquiler de la misma, si quieres conservarla ve tú también y negocia un nuevo contrato.

Cerraron la puerta y marcharon los cuatro en el coche de Tania a su casa; la ayudaron a guardar todo lo de Raúl en unas cajas que dejaron en el trastero y Tania, después de alojar una copia de la grabación en “La nube” le envió un correo con el enlace y una frase muy corta.

• — Escúchalo con atención y después lee la nota adjunta pero no lo hagas antes.

La nota decía.

Ahora comprenderás porque no nos encontraremos jamás y si me ves por la calle cambiaras de acera para evitarme y si no te das cuenta pasaras junto a mí sin detenerte ni mirarme siquiera, tampoco quiero que hables con ninguno de mis conocidos pasados, actuales o futuros y si alguien te habla o pregunta por mí escapa.

Si no cumples estas sencillas instrucciones te denunciaremos como violador y si la justicia desestima los cargos publicaremos esta grabación una y mil veces en la red, la enviaremos a tus amigos, jefes, clientes y a cuantas personas puedas imaginar, para hundirte la vida como hiciste con todos nosotros; tampoco entres en contacto con Raquel y si ella lo intenta de cualquier modo hazla desistir ignorándola, pero. ¡Sin explicaciones de ningún tipo!

Sara fue casi cruel en el extenso whatsapp que envió a Álvaro.

• — Eres un cabrón, nos exigimos fidelidad y ha estado engañándome con Raquel y a saber con cuantas putas más; dejare el apartamento y no quiero que me busques y si me encuentras puede que le cuente a mis hermanos alguna de estas cosas; sabes que te tienen ganas los tres y no les gustaste nunca para su hermanita pequeña.

Después de eso, aunque era tarde marcharon a cenar los cuatro a un restaurante del puerto olímpico al que no habían vuelto desde que se unieron otras personas al grupo; al regresar a casa de Tania, las chicas que quizás lo habían pactado aunque sin palabras eligieron a su compañero y marcharon cada pareja a una habitación; Tania después de unos besos murmuró.

— Por fin juntos otra vez Javi. ¿Por qué nos separamos con lo bien que estábamos? Que importa, ahora será diferente, solo los cuatro y cuando lo decidamos tendremos niños, pero eso ya lo hablaremos más adelante los cuatro, porque tendremos que organizarnos para no preñarnos las dos al mismo tiempo.

Algo semejante sucedió en la otra habitación y de madrugada, Sara arrastró a Pol a la otra habitación y se metieron en la cama junto a sus amigos con los que intercambiando las parejas, estuvieron de fiesta hasta que amaneció un nuevo día cargado de energía renovada.

©PobreCain