Amigos del alma
Lo salude como se saludan dos amigos de toda la vida, pero se notaba en el ambiente la tensión. Me pregunto si estaba segura y le conteste afirmativamente, lo tome de la mano y
Ese viernes era el acordado mis papas no estaban en casa, así que Dani toco el timbre a las 9 de la noche.
Lo salude como se saludan dos amigos de toda la vida, pero se notaba en el ambiente la tensión. Me pregunto si estaba segura y le conteste afirmativamente, lo tome de la mano y lo lleve a mi cuarto. No había preparado nada especial porque no me parecía a tono con la situación.
No recuerdo si cerré la puerta de mi cuarto solo se que desconecte el teléfono y el timbre y apagamos los celulares.
Quedamos parados uno frente al a otro en silencio, volvió a preguntarme si estaba segura, no le conteste solo junte mis labios con los de el y tiernamente me empezó a besar. No eran besos apasionados eran tiernos, dulces y tímidos apenas nos rozábamos los labios.
El me acariciaba mi pelo y mis brazos que estaban adormilados junto a mi cuerpo.
Yo comencé suavemente a desabrochar su camisa y el hizo lo mismo con la mía, seguíamos besándonos sin abrir los ojos.
Luego continúe con su pantalón y el con mi pollera todo suavemente sin prisa... sin pausa y besándonos apenas los labios los cuales tiernamente mordisqueaba.
Dani acariciaba el contorno de mi cuerpo llegaba a mis caderas y suavemente subía hasta mi rostro. Bajo los breteles de mi corpiño que desnudaban mis pezones duros.
Note su erección sobre mi estomago así que intente bajarle su slip el ayudo e hizo lo mismo con mi bikini, quedamos completamente desnudos parados besándonos pero con temor de abrir los ojos.
El continúo acariciando mis contornos y yo coloque mis dos manos sobre su pecho, su corazón latía rápidamente...
Subió suavemente sus manos por mi abdomen y llego con sus manos a mis senos, con el pulgar acariciaba tiernamente mis pezones, mientras yo emitía un pequeño gemido de placer.
Entonces tiernamente beso mis senos, mientras yo rodeaba su cuerpo con mis brazos, levanto su vista y por primera vez nos observamos desnudos el uno al otro.
Volvió a besar mis pezones y yo tome su cabeza y lo dirigí hacia abajo.
Llego hasta mi cosita besándome mi cuerpo y con sus manos sobre mi cola le dio pequeños besos a los labios de mi cosita que estaba casi totalmente rasurada. Lo obligue a incorporarse y nos besamos tiernamente nuevamente, mientras el me acariciaba mis senos con una mano yo tiernamente comencé hacer lo mismo con su pene, tuve una sensación difícil de describir, me sentía rara acariciándolo y teniendo eso tan duro en mi mano.
Lo tome de la mano a Dani y nos fuimos a la cama, nos recostamos uno frente al otro y por un rato nos miramos y nos brindamos caricias.
Luego comenzó nuevamente a besar mis pechos hasta que ya lo tenia sobre mi con mis manos lo fui llevando a mi vagina y tiernamente comenzó a besarla e introducir suavemente su lengua, mientras yo lo apretaba mas con mis piernas y a la vez trataba de abrirle mas mi cuevita virgen. Tuve así mi primer orgasmo mientras el hábilmente llevaba sus manos de mis nalgas a mis pezones. Me di la vuelta y el comenzó a besar mi cola, yo me puse en cuatro patas y deje mi vulvita a su merced el con mucha dulzura comenzó nuevamente a practicar sexo oral, así tuve dos orgasmos mas y casi caí rendida.
Tome aire y lo vi como un cachorrito mirando a su mama para ver su aprobación, así que lo tome por sus mejillas y le di un beso apasionado por primera vez en su boca todavía estaban mis fluidos. Mientras nos besábamos tome su pene que estaba ya muy duro y comencé a masturbarlo muy pronto sentí su semen correr por mi mano y los pequeños gemidos que Daniel daba. Me pareció correcto premiarlo por todo el placer y la ternura que me brindo como nunca una mujer lo había hecho.
Luego nos fuimos a la ducha seguimos acariciándonos mientras nos enjabonábamos el beso mis pechos y mi vulvita nuevamente, yo comencé a besarle su pecho baje mas y me quedo su pene nuevamente erecto frente a mis ojos así que comencé a besarlo y también sus testículos mientras metía suavemente mi dedo en su ano el gemía y su pene se endurecía mas. No pude más y lo metí en mi boca mientras seguía con mi dedito mas profundamente en su culito de pronto sentí todo su esperma caliente en mi boca sabia bien así que terminamos los dos arrodillados en la ducha besándonos.
Nos vestimos y antes de salir lo bese tiernamente sin decir nada. El se fue y no volvimos hablar del tema. Esa noche casi no pude dormir muchas sensaciones juntas, todas lindas. Mañana volveremos a ser los mejores amigos solo eso.