Amigas para siempre

Dos amigas hetereas descubren un gozo maravilloso.

Amigas para siempre.

Soy una chica de 29 años, mí nombre es Ángela, pero mis amigos me llaman Angi.

Mi estado actual es de una chica soltera, qué mantiene una relación bastante estable con un chico, esperando como todas las chicas llegar al matrimonio.

Os comentare que la historia que continuación relatare él, la conoce y la ha

comprendido muy bien. Por lo que aun le amo más de lo que él pueda imaginar. Pero vayamos a la historia que es lo importante.

Transcurría una Fría tarde de invierno, en una ciudad del nordeste de España. Habíamos decidido mi amiga Margarita y una servidora ir de compras por las tiendas en busca de alguna prenda bonita,(por cierto cuando en adelante me referiré a mi amiga lo haré con el nombre de Marga ya que así la llamamos cariñosamente).

Andábamos ya bastante cansadas de andar y algo heladas, ya que hacia mucho frió, cuando para acabar de arreglarlo se nos vino encima un chubasco. El agua que caía parecían cubitos de hielo por lo fría que estaba, por suerte Marga vivía cerca de allí, en un pisito pequeñito pero coqueto.

Así que decidimos salir corriendo, para guarecernos de aquel horrible chubasco tan frió.

Cuando llegamos al piso, estábamos ambas empapadas y el frió nos había calado hasta los huesos, decidimos darnos una buena ducha de agua bien caliente. Así que nos desnudamos para ducharnos y empezamos a bromear. ¡mira tienes los pezones enrojecidos y de punta!, Me comento Marga a lo que yo le repliqué ! pues anda que tu!, parece que te hayan estado metiendo mano de lo salidos que los tienes, y con lo sofocado de la carrera que nos hemos dado tienes los colores subidos.

Si pero no tengo los pelos del conejito de punta como tu Angi. Veras como te pille una teta, te daré un pellizco en el pezón que ya verás.

Pues mas valdría que me hicieses unas friegas, me contesto Marga, para que entre en calor, y así jugando que jugaras, acabamos las dos en la ducha.

Yo le dije a marga oye por que no medas jabón en la espalda, ella me contesto claro enseguida no faltaría mas. A si que empezó a enjuagarme la espalda.

Anda date la vuelta, que también te enjaguare por delante, procedí a darme la vuelta para que me enjaguase. De repente, aquel ir y venir de la esponja por mis senos, me iba poniendo a cien. Notaba como mi conejito se iba humedeciendo, así que cogí otra esponja, y empecé a pasarla por los pechos de Marga.

Al cabo de un ratito Marga, me comento que se estaba poniendo caliente, y sin saber como nos empezamos a besar, y lamernos los pezones. Marga se agacho, e introdujo sus largos y finos dedos en mi conejito, de mi garganta salió un grito de placer, como jamás había experimentado.

Entonces Marga saco sus dedos, y separándome las piernas acerco sus labios a mí conejito, y empezó a besarlo hasta llegar a introducir su lengua en el, haciéndola girar, moviéndola con un ritmo que tuve que apoyar mis manos en la pared de la ducha, debido a la gran cantidad de placer que estaba experimentando.

Chille como una loca hasta llegar a un orgasmo que jamás había experimentado con mi novio.

Cuando pude rehacerme de tanto placer, comprobé que Marga se había introducido en su conejito sus dedos, y se estaba masturbando. Retire su mano, y agachándome me dispuse a introducir mi lengua, dentro de su conejito húmedo y chorreante, hasta conseguir que ella también chillase como una loca de placer.

La verdad es que aun hoy en día, lo comentamos y no nos arrepentimos de nada de lo sucedido. Pues fue una experiencia maravillosa que quizás queriendo no hubiese sido tan maravillosa y bonita.

Fin

Energi.