Amigas para esto
Irati va a ordenar el apartamento que sus padres tienen en la ciudad donde vive su amiga ane y otra chica y acaba saliendo siendo sumisa y remata con el inicio de su sumision
AMIGAS PARA ESTO
Irati abrió la puerta con su juego de llaves. Pensaba que no habría nadie. Era verano y en teoría no debía haber nadie. Era un pequeño apartamento que se componía de dos habitaciones muy bien comunicado por metro y autobuses a los distintos campuses universitarios.
Allí se alojaban Ane, a la cual Irati conocía porque veraneaban en una ciudad cercana y otra chica que también estudiaba en la Universidad. Irati entró pensando que estaba vacio pero oyó la ducha. Al entrar vió que la cama de Ane estaba deshecha. Traspasó el umbral y lo que vió la dejó sin habla.
En el suelo un plástico extendido. Sobre él varias manchas de cera rojas, blancas y negras extendidas sobre el lienzo de plástico sin orden ni concierto. Sobre la cama unas pinzas, una fusta y algún juguete sexual. Se quedó sin habla. No era una mojigata, incluso había usado algún juguete de esos pero las esposas y las cuerdas atadas a la cama que vió y sobre todo la fusta la asustó.
Bueno no sabía si se asustó o no porque su sexo reaccionó de una forma que no esperaba, se fue humedeciendo hasta casi sentir los muslos mojarse. Luego se acercó, se agachó, cogió la fusta y poniéndose de pies de nuevo la acercó a su nariz y olió el cuero. Con los ojos cerrados y olfateando ese instrumento la encontró Ane que con una toalla había salido de la ducha.
Ane puso su mano en su hombro y éste inocente gesto hizo que Irati se sobresaltase. Completamente roja se dio la vuelta tirando a la cama la fusta. Ane la recogió y con la punta y partiéndose de la risa la tocó con ella en la nariz y cuestionó?
Huele bien?
Irati completamente avergonzada asintió.
Te gusta el olor del cuero o directamente te gusta el BDSM?--- se atrevió a preguntar Ane.
Buueeeno…he leído algún libro y es algo que me atrae pero ni me atrevo ni se si me atreveré porque no se si es completa fantasía o parte de una base real.
Todos están basados en algo real, luego cada uno y una lo dirige y lo encamina por donde uno más le gusta y l@s sumis@s marcan los limites de ese escenario.Y tu ya que estamos que te sientes más Dómina o sumisa?.
Pues si algún día me atrevo o deseo llevarlo a cabo sería sumisa, esa es la única parte que tengo clara.--- respondió Irati.
Tranquila, si de verdad quieres dar el paso confía en mi y te guiaré pero no necesita ser hoy ni mañana, hay tiempo piénsalo y cuando lo tengas claro me lo dices.
Luego Irati ayudó a Ane a recoger la habitación. Guardaron todos los juguetes, vió la ropa que Ane usaba para el BDSM y su amiga incluso la sorprendió poniéndose delante de un espejo y observando los trajes delante de ella.
Ane si tu me guías y me juras que no me harán daño entonces acepto dar el paso y que eso que he leído sea real.
Irati, de acuerdo, ahora vas a ver un contrato como el que firmé yo en que viene una larga serie de prácticas y cosas que puede que tengas que hacer y después en unos días te avisaré para que conozcas a alguien.
Acabaron de recoger todo. Luego leyeron todas las prácticas. Ane la fue aclarando todo y ayudando con los papeles hasta que terminaron. Quedaron que al día siguiente irían a la Universidad a realizar unos trámites y al despacho de una profesora a preguntar unas dudas.
Habían quedado a las 9 de la mañana y subieron al campus. Irati vió a su amiga que estaba espectacular ese día. Ane llamó a la puerta del despacho de la profesora y abrió la puerta cuando desde dentro la dijeron que adelante.
Entraron las dos chicas. Eva la profesora las hizo sentar en las dos sillas que había frente a ella. Ane tomó la palabra:
Aquí mi amiga Irati desea entrar en el grupo como sumisa y poder aprender a servir y ser usada por aquell@s miembros que lo deseen.
Irati no salía de su asombro. Su profesora Eva era una de las Amas y Ane la estaba entregando a ella.
Ahora perrita si de verdad quieres pertenecer a este grupo deberás obedecer y servirnos en todo lo que te digamos.Así que para empezar te vas a poner de pies al lado de esa pared, con la espalda pegada a la pared.--- ordenó Eva.
Irati dudó, por dentro estaba deseándolo pero tenía mucho miedo pero se levantó y fue a la pared. Eva se situó a su lado. La observó detenidamente. Ane se colocó detrás de ella con las manos en la espalda.
Irati ese día aparte de muy guapa estaba muy elegante. Vestía un largo vestido que llegaba a sus tobillos pero completamente pegado al cuerpo en tono azul marino. Eva palpó su rostro, hizo que abriera su boca y fue observando casi diente a diente. Luego revisó su mandíbula. A cada toque de la profesora Irati se excitaba más y más. La hizo levantar los brazos hasta que las dos manos se tocasen. Retiró sus gafas y se las dio a Ane que las dejó perfectamente colocadas en la mesa. Luego Eva siguió tocando por los laterales del cuerpo hasta los pies. Ahí ordenó a Ane que retirase los zapatos y ésta fue soltando las hebillas y los quitó colocándolos también ordenados. Luego por delante fue cacheando y sobando todo su cuerpo, sus tibias, sus muslos, su cintura, su tripa y por fin sus pechos. Detectó que sus pezones estaban duros como dos garbanzos.
Así me gusta perrita, tu cuerpo reacciona como debiera---- susurró Eva al oído de la obediente Irati.
Ahora la hizo darse la vuelta y colocarse mirando a la pared. Repitió el mismo proceso que por delante pero cuando fue subiendo fue levantando la falda hasta descubrir el culo de la chica que llevaba un tanga negro lo cual disgustó a Eva que reprendió a Ane por no haberlo previsto pero ella se defendió sacando de su bolso unas braguitas blancas e inocentes con pequeños dibujitos.
Después que terminemos aquí te pondrás esas braguitas blancas que cada día cambiarás por otras del mismo color y misma inocencia hasta que Ane te lo ordene porque ella además de guía será enlace con el grupo y mandará sobre ti aunque su collar indique que también es sumisa.
La hizo desnudarse. Desnuda estaba todavía mas impresionante. Ane no pudo evitar sonreírse y excitarse a tope. Eva se dio cuenta y la cogió del pelo y la llevó a la mesa donde la hizo apoyarse y la dio diez azotes que la chica contó obedientemente. Irati se asustó un poco pero se quedó quieta sin decir nada.
Eva después de los azotes ordenó a Ane que se vistiera y comprobase que no hubiera movimiento en el pasillo. Ane luego acompañó a Irati hasta la mesa. Las dos mujeres observaron primero admiradas a la chica. Morena con el pelo largo, ligeramente con pecas unos pechos medianos rematados por dos pezones que miraban al techo de color café. Un pubis de vello recortado y con solo un mechón en la zona superior. Luego cuando la hicieron tumbarse completamente sobre la mesa y observaron su culo, redondo, duro, respingón con las dos nalgas como enfrentándose.
Ane sabía lo que venía a continuación. Una hora antes de la cita había recibido un mensaje de Eva con todo lo que debía hacer y organizar así que cuando Irati ya estaba completamente tumbada. Ane fue a un armario que arriba era librería y abajo tenía dos puertas que se cerraba con una llave que la chica cogió de un cajón. Abrió y sacó dos esposas y unas muñequeras de cuero, luego una barra separadora y unas tobilleras. Cogió luego un antifaz con el que tapó los ojos de la chica. Con las muñequeras y las esposas ató las muñecas de la joven a las patas de la mesa. Luego colocó la barra separadora y con las tobilleras también inmovilizó sus piernas.
Sin que Irati viera nada ayudó a Eva a desnudarse y a ponerse el arnés. Con una pera para enemas que habían rellenado con lubricante penetró en la vagina de la sumisa y apretó llenando de lubricante todo su coñito. Luego se retiró a la silla de Eva donde tenía permiso de la profesora para masturbarse. Se desnudó, puso una de sus piernas apoyada en la mesa y bien abierta de piernas se fue acariciando.
Eva aprovechó al oír los primeros gemidos de Ane para penetrar a Irati que estaba descolocada por los gemidos de su amiga y no esperaba la embestida de Eva. Eva la fue follando cada vez mas fuerte. Ane se tocaba también cada vez más fuerte. La profesora mientras se follaba a la sumisa con el arnés tuvo que tapar su boca por sus fuertes gemidos. Ane no pudo aguantar más y se corrió quedándose completamente relajada sobre la silla.
Luego se acercó a Irati y le sacó el antifaz. La chica vió delante de su cara el coño de su amiga la cual la cogió del pelo y la obligó a lamerla su coño mojado de sus propios fluidos. Luego a indicaciones de la Dómina se acercó a ella y se dejó besar.
Eva hundió sus dedos en el coño de Ane y los dio a probar a la chica y también a su amiga a la cual tenía empalada sobre la mesa.
Por favor Ama me puedo correr?--- preguntó la sumisa tumbada sorprendiendo a las otras dos mujeres.
Eva le dio permiso y la chica no aguantó nada emitiendo un agudo silbido y apretando por completo sus músculos.
Cuando hubieron terminado Ane liberó a la chica, guardó todos los juguetes salvo el arnés que fue colocado en una bolsa para que Eva se lo llevase a casa. Se limpiaron como pudieron y se vistieron sentándose de nuevo como al comienzo de la cita.
Ahora a partir de hoy cada día aparte del tema de las braguitas deberás llevar el collar que te daré al final. Como observarás el collar es fino que indica que eres sumisa. Ane lleva uno como el tuyo solo que tiene derechos sobre ti y te puede usar cuando ella diga pero deberá pedir permiso a mi o a otras Amas o Amos que ella sabe quienes son. Hoy no te ha pasado nada, solo ha sido algo divertido pero la sesión de verdad será pronto, en ella aparte de azotarte, etc, desvirgaremos tu culo. Como con Ane deberás aceptar cualquier propuesta que no rompa tus limites de cualquier persona que lleve un collar como el tuyo pero ancho que querrá decir que es dominante. Por cierto, una vecina tuya a la cual ves a través del balcón es Ama aunque tiene algún Amo o Ama con derechos sobre ella y tienes otra vecina de tu mismo portal que es tan sumisa como tu con ella estarás de igual a igual. Siempre que estés con Ane o con alguien del grupo deberás orinar siempre de tal forma que ell@s lo vean y ahora creo que ya no me dejo nada. Podéis marcharos.
Ane ya se había vestido. Ahora lo hizo Irati que se puso las braguitas blancas. El tanga negro lo olió Eva y lo guardó en un cajón. Al salir besó la mano de su Ama lo mismo que Ane.
Te voy a matar---- dijo Irati a Ane cuando salieron.
Ane no podía contenerse la risa.
Jajajaaa serás cabrona, si lo has disfrutado muchísimo, no veas como gemías y pedías más.----- respondió Ane fingiéndose ofendida.
Gracias, te tengo que reconocer que si, que lo he disfrutado mucho
Continuará…….
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