Amar y Querer (15)

Espero que les guste ésta entrega, el drama queen como le dicen ustedes sigue, pero ya va a terminar, se los prometo, quisiera complacer a tod@s con las peticiones que me hacen de deshacerme de uno u otro personaje pero yo creo que ellos solitos se esfuman por sus malas elecciones, muchas gracias a tod@s por leer mi relato, se que a algun@s les agrada más que otr@s pero aquí estamos sólo para servirl@s, muchas gracias por sus bendiciones y buenos deseos eso es algo que siempre se agradece, sean bendecid@s ustedes también y disfruten...Mili

CRISTINA

El sol ilumina, es un sol penetrante que aunque quisiera seguir pegada a éstas sábanas, su calor me hace salir sin permiso, como siempre no dormí bien, y no es la fiesta ni la parranda la que me hace no poder descansar nada pero esos sueños que me atormentan tanto, Ana demonios  Ana cuando vas a salir de mi cabeza, porque cojones no puedo odiarte como tanto quisiera, porque cuando más trato de olvidarte más te metes en mi cabeza, si que el destino y la vida es una contradicción…me sacudo la cabeza para evitar cualquier recuerdo ingrato, y trato de poner mi mejor sonrisa que hoy regresamos a Alicante y quiero que mis amigas me miren con cara de alegría y no de pena…Ana ya está olvidada en lo que a mí me respecta…me estiro sobre la cama cuando suena la puerta de la habitación, es Bruno, le abro y lo dejo pasar

Bruno: Buenos días preciosa, descansaste bien?

Cristina: si creo que sí, y tú?

Bruno: bien mujer, que te parece si tomamos un desayuno, mejor dicho si comemos antes de zarpar?

Cristina: me parece genial que ya tenía hambre

Bruno: entonces te espero…(ring ring ring)…espera mujer dame un segundo que contesto esta llamada

Cristina: claro ve – Bruno se alejo de mí y hablando casi en susurro, se notaba algo preocupado, no dejaba de preguntarle a la interlocutora si estaba segura, parecía que lo que le decían no era algo que le agradara mucho –

Bruno: ya esta mujer, vamos a comer?

Cristina: estas bien Brunito? Tienes una careta como que no…sé, fue una mala noticia esa llamada?

Bruno: no no nada mujer tu cámbiate que yo te espero abajo vale?

Cristina: vale cariño y cambia esa cara

No demoré mucho en cambiarme, dejé todo listo, las maletas listas y baje a encontrarme con Bruno al cuál vi sentado en una mesa del extremo del restaurante totalmente pensativo

Cristina: estas bien cariño?, es que sigues con una cara

Bruno:  no pasa nada mujer es sólo….que….nada no me hagas caso

Cristina: es acaso la llamada que recibiste?, una novia o algo?

Bruno: no no nada de eso era Jessica, me dio….se podría decir que una mala noticia

Cristina: mira no sabía que eras amigo de Jessica

Bruno: bueno si desde crías casi, pero no tiene importancia es sólo una noticia que no esperaba y que me dejo pensando nada más

Cristina: bueno pero quita esa cara vale que no quiero que el camino de regreso a Alicante estés así

Bruno: va no te preocupes….Cris…te puedo preguntar algo?

Cristina: claro dime Brunito

Bruno: que pasaría si digamos….es una suposición volvieras a ver a Ana…como…no sé….digamos que se apareciera en éste restaurante

Cristina: – su pregunta me pareció de lo más absurda, para que preguntar por ella ahora – Bruno no se a que viene tu pregunta ahora, para que quieres saber

Bruno: es una suposición y bueno para saber cómo reaccionarías, eso es todo

Cristina: pues nada Bruno, como crees pues con desprecio, esa mujer que me ha hecho tanto daño que no merecería más que mi desprecio – mis palabras salían con mucho sentimiento pero lo que el corazón latía era totalmente contrario a lo que expresaba en sílabas –

Bruno: claro tienes razón esa arpía no merece más que eso…..pero…..y si te dice….no sé qué te ama….no sé por decir algo, como para que regreses con ella o yo que sé

Cristina: que te pasa Bruno, Ana no me ama ni me amó pero de verdad no entiendo tu afán en traerla a la conversación, lo que menos quiero hacer es hablar de ella por favor

Bruno: lo siento cariño, sólo quería saber un poco como te sentías respecto a eso pero ya va…no pregunto más y que tal si ordenamos ya!, te parece?

Cristina: si por favor

No entendía el afán de Bruno de traer a Ana como plato de conversación, especialmente él que sabía el tipo de persona que era y todo el daño que me había hecho…pero definitivamente esa llamada había sido la causante de su interrogatorio…Ana Ana Ana, siempre metida en todo y en la boca de todos, porque no podías tener un nombre más difícil del recordar….volví a recordar todo lo que Bruno me había revelado de ella, el engaño, desde que me lo había confesado yo no había vuelto a pensar en ello, me causaba dolor recordarlo y simplemente quise sacarlo de mi mente, pero ahora con más cabeza fría y gracias a Bruno y a su insistencia con Ana, comencé a analizar las cosas…porque Ana esperó hasta regresar de Barcelona para dejarme, si tuvo la oportunidad de hacerlo la primera vez, para que llevarme a Barcelona, no tiene sentido…que más quería de mi si ya me tenía…..no entiendo….algo no está bien….algo no concuerda….será que Bruno me mintió….pero para que hacerlo, si….no no no creo pero Ana, para que esperar hasta Barcelona…desde un principio para que hacer la escenita en el cumple de Lu, si ya…ayy no entiendo nada nada…esto es muy confuso….algo no anda bien….será que Ana me ama de verdad?

Bruno: mujer que te pasa de repente te perdiste en tus pensamientos, no has probado nada de la comida

Cristina: – lo miré fijamente, tratando de hallar respuestas en sus ojos pero no hallé nada – nada Bruno sólo es que…no sé….Bruno tu me quieres de verdad? Y no me mentirías verdad?

Bruno: claro que si corazón, jamás te mentiría

Cristina: entonces dime de verdad Ana me engaño?....porque hay algo en ésta historia que no cuadra – Bruno se quedo mirándome fijamente algo sorprendido por la pregunta, bajo la vista a su plato de comida y la volvió a subir para enfrentar a mis ojos con mucha seguridad –

Bruno: Ana te engaño cariño, y todo cuadra nena, porque ella se fue y te dejo a pesar del mucho amor que supuestamente te tenía

Cristina: si pero es que hay algo que no me convence

Bruno: nada mujer deja de pensar en esa mujer, que lo único que ha hecho es hacerte sufrir, vale?

Cristina: está bien….y apurémonos en terminar que no quiero que salgamos muy tarde

Bruno me miraba siempre sinceramente, y cuando le pregunte de Ana, la seguridad en su mirada no cambió nada, me estaba diciendo la verdad, pero mi instinto o yo que se me decía que aún así había algo que no cuadraba en ésta historia….quizás compartiendo lo que me hizo Ana con Lu y Mari podría entender mejor la pieza que me faltaba.

Terminamos de comer y sacamos las maletas y a bordo del yate partimos destino a Alicante, el viaje era cerca de 5 horas pero bien que las valía, el camino de regreso viendo el atardecer reflejarse en las aguas era fantástico ese naranja que pintaba todo era simplemente hermoso, Bruno estaba en la cabina, conversaba con el capitán pero más que eso estaba muy pensativo, hizo una que otra llamada pero de verdad que lo que sea que le estaba rondando la cabeza era bastante pesado porque la cara que llevaba era de bastante incomodidad….salí del salón y me fui hasta la proa para apreciar de manera más directa el atardecer….era hermoso de verdad….me senté cerca de las barandas y desde allí podía ver como Bruno no despegaba la vista de mí, el estaba enamorado de mí y me miraba sólo con amor, pero yo no podía corresponder, no sólo por el hecho de ser lesbiana pero por tener  a Ana tatuada en el corazón, Ana, otra vez Ana, siempre presente pero a la vez ausente, aún recuerdo como rompí todas las hojas de su libro, lo despedace la única hoja que no pude romper fue la de su dedicatoria, simplemente no pude, creo que observe esa hoja por días, y al final termine por reunir todos los pedazos de las hojas y pegué cada una de ellas y mientras lo hacía leí su libro, cada detalle cada palabra cada frase, amor, sólo había amor en ese libro, dedicado a quién nunca lo sabría pero era puro y simple amor, creo que leí su libro unas 10 veces, algunas oraciones me las sabía de memoria….como una persona que escribe del amor pudo haber sido tan cruel y despiadada con una persona que la amo sin medida….que la amó?....a quien miento….que la ama sin medida, si algún día me llegara a enterar si de verdad me amo o no, creo que ya no importaría, porque como dice la canción… porque el corazón de darse llega un día que se parte ¡el amor acaba! ...no sé cuándo ni cómo será pero mi amor por ti Ana Cervantes acabará.

Me quedé sentada un poco más abrazada a mis piernas viendo como el sol se terminaba de ahogar en las aguas, como una llama encendida que era apagada al contacto con el agua, y con ese último reflejo de luz, llego la luna y las estrellas y el cansancio a mi cuerpo y el frio que envolvía me envolvía mi alma, me paré y camine hasta el salón me senté al lado de Bruno y al cabo de no se cuento tiempo perdí el sentido de mi mente me deje llevar por el abrazo de mi amigo y me quede dormida.

Cristina: uhmm mi amor….Ana mi amor

Bruno: Cristina!! Despierta ya llegamos

Cristina: ahh…cómo…me quede dormida

Bruno: si y no sé qué estabas soñando

Cristina: – me separé de su brazo que me había sostenido todo mi sueño y aún con el beso de Ana en los labios de aquel sueño me levanto – perdón amigo no sé en qué momento me quede dormida

Bruno: con que soñabas Cris?

Cristina: – con Ana, siempre es con Ana, que no quiere salir ni de mis sueños – ay no se Bruno, nunca me acuerdo de lo que sueño

Bruno: bueno mujer nos vamos?

Cristina: claro qué hora es?

Bruno: pasada la media noche….Cris estás segura de querer ir donde Lu, porque no te vienes conmigo al hotel, ya es tarde mañana te llevo a donde Lu

Cristina: – que insistencia de éste por querer que me quede con él – si estoy segura de querer ir donde Lu, pero y tú qué tanto de querer que me vaya contigo al hotel…me quieres emborrachar para meterme en tu cama?

Bruno: no me ofendas Cris, mira que oportunidades contigo he tenido de sobra para meterte a mi cama que bien borracha te he tenido en los brazos, pero yo te respeto y si tiene que pasar algo entre nosotros será porque los dos lo queramos pero si tanto te preocupe que pueda hacerte algo pues te llevo ahora a tu casa

Cristina: no es para que te enfades Brunito era una broma nada más, y me iría al hotel contigo, pero de verdad tengo ganas de ver a Lu y Mari, quiero darles la sorpresa de que ya llegué vale?

Bruno. Pues vale mujer

Subimos al auto y enrumbamos al piso, Bruno estaba callado desde que bajamos del yate, eso era algo extraño en él pero no quise preguntar, seguro que eran cosas suyas, llegamos en 40 minutos, las luces del piso estaban prendidas, seguro que era una de esas noches de desvelo de las chicas, Bruno me ayudo con la maleta y juntos subimos por el elevador hasta el piso, decidí tocar mejor el timbre para que se lleven la sorpresa, toque dos veces al timbre y nadie abría, la música estaba bastante fuerte y seguro no escuchaban nada, volví a tocar, pero nada, cuando me disponía a meter la llave en la cerradura alguien se me adelanta y la abre de un solo jalón llevando mi mano y brazo con ella, quedando al frente de la persona que abrió, me quedé estática, quise hacer y decir muchas cosas pero simplemente me quede inmóvil y muda.

ANA

Mari y Lu me ofrecieron la habitación de Cristina mientras me quedaba, Cris había dicho que demoraría un par de días en regresar lo que me dio cierto alivio, pues así tendría tiempo de pensar que le diría, o al menos intentar algo para que no me desprecie más, estaba casi segura que Bruno seguro se habría encargado de embarrarme con ella, sabe Dios qué cosas le habrá inventado de mí…me senté en la cama de ella y la acaricie, volví a recordar aquella noche juntas, el amanecer en su balcón, cuando contemplé su sueño cuando se cayó, recordé todo, me quede pensando un poco en todo, y lo difícil que ha sido la vida conmigo, no sólo con el amor pero con todo, mis dudas de universitaria cuando por primera vez me beso una mujer y me gusto, la muerte de mi mejor amigo al que nunca pude decirle que lo amaba, el rechazo de mi familia cuando estaba con Eliana, mi lucha por hacerme de un lugar en la práctica médica tan lejos del hogar y la patria, si que había sufrido en ésta vida, y lo seguía haciendo, supongo que ese sufrimiento me había hecho la mujer que soy, muy dura de superficie pero tan blanda e indefensa de relleno, supongo que la primera persona que descubrió esa cualidad fue Eliana por eso estuve tanto tiempo con ella y me deje maltratar tanto, bueno y a la que maltrate también y luego Javier que descubrió casi de inmediato lo indefensa que era y no dudo en protegerme y hacérmelo saber…supongo que fue por eso que decidí casarme con él no por amor pero porque me conocía y me hacía sentir segura, además siempre he temido sentirme sola, le tengo pavor a la soledad, será por eso que siempre tenía a “novios y novias” todo el tiempo, al final no quería a nadie, sólo quería alguien al lado, alguien a quien abrazar por las noches pero que no despierte a mi lado, pero esa soledad sólo se iba incrementando cuanto más y más gente tuviera al lado, contradictorio e inverosímil pero tan real, creo que me casé por dejar de sentirme sola, por querer tener a alguien siempre a quien acudir que siempre este ahí que no se separara jamás, ay Javier cuanto mal te hice….Cristina mi amor, todo contigo fue diferente, y es que ya no era la soledad la que quería cubrir pero simplemente te necesitaba a mi lado para respirar, y es que aunque sabiéndote lejos de mi y con alguien más me siento contigo y ya no me siento sola, estás conmigo siempre en mi corazón y en mi alma…(toc toc toc)

María: se puede?

Ana: pasa si claro adelante

María: y esas lágrimas mujer?

Ana: ahh? Lágrimas? – me toque con los dedos la cara y la encontré empapada – mira ni me fije que estaba llorando – me sequé las lágrimas y me paré de la cama y me puse frente al ventanal que daba a la pequeña terraza –

María: estas bien cariño? Te veo un poco pálida

Ana: estoy bien Mari, el embarazo no me ha tratado muy bien pero quien se lo puede reprochar

María: Ana…Lu y yo hemos estado pensando que será mejor que no estés aquí cuando Cris llegue, no es que te estemos botando ni nada pero es que….seguro que si te encuentra aquí, se va a querer ir de inmediato

Ana: tienen razón, mañana buscaré un hotel

María: no no un hotel no, sabemos que tu situación económica ha cambiado y preferimos ahorrarte el gasto, y pues Olga está encantada de ofrecerte su casa para que te quedes, su casa es inmensa y seguro estarás muy cómoda

Ana: vaya muchas gracias, ustedes siempre pensando en todo, gracias de verdad

María: nada de gracias cariño que para eso estamos, y bueno ahora te dejo descansar que se que tu vuelo ha sido devastador, trata de descansar vale?

Ana: vale y gracias otra vez

Mari y Lu tenían toda la razón, intentar quedarme y que después Cris al verme quisiera irse, no era bueno, pues seguro se iría con Bruno y eso no me convenía, que prefería a Cris enojada en su casa que con Bruno, me empecé a desvestir y otra vez admire la pequeña pancita, cada día crecía más, pero aún así era difícil distinguir entre una subidita de peso y un embarazo….prendí mi celular, y para mi sorpresa sólo había llamado mi madre, y Jessica, de Javier ni las luces, no revise ninguno de los mensajes porque ya me imaginaba que dirían, me eché en la cama y abrazada a la almohada tratando de rescatar algún rastro de su olor pero no encontré nada, me acurruque y termine por dormirme.

Desperté cerca de las 10 de la mañana, Lu me tenía todo el desayuno listo y para mi sorpresa Olga también estaba, me senté con ellas y desayunamos juntas, Olga a la que no tuve oportunidad de conocer a fondo antes, me agradaba muchísimo, era demasiado graciosa y se burlaba de todo e incluso de ella y su acento…estaba encantada de tenerme en su casa, me decía que le daría un toque femenino a su cubil, del desayuno pasamos a hablar de todo un poco, desde los amantes de Olga hasta la fecha para el casamiento de Lu y Mari, me sentí muy bien, estaba muy relajada y tranquila, en esas horas que hablamos de todo, no tuve en la mente, ni a Javier, ni el embarazo, ni Bruno ni nada, sólo de vez en cuando aparecía Cris en mis pensamientos pero sólo era por momentos, Mari nos trajo la comida y comimos como cerditos, mientras conversábamos de las peripecias de Lu en sus primero trabajos como tatuadora a Olga se le ocurrió la fantástica idea de organizar una fiesta como mi bienvenida, yo me opuse de inmediato pero al final me termino por convencer, sólo seríamos nosotras allí en el piso, algo de música y un poco de locura y alcohol, yo no tomaría estaba claro pero ellas no dejarían de hacerlo por mí…y así quedo todo listo para una fiesta improvisaba por mi llegada, yo estaba preocupada por querer irme a casa de Olga, no quería que Cris me encontrara en su casa, pero con toda la fiesta y demás me dijeron que no me preocupara que ella iba a llamar antes de venir y que no lo había hecho así que no había problema pero aún así yo tenía un presentimiento.

La fiesta que empezó relajada y al final parecía eterna se extendió hasta pasada la media noche, las chicas se estaban divirtiendo y estaban también bastante bebidas, Olga ya estaba en el otro extremo de la borrachera llegando casi al coma alcohólico

Ana: chicas no quiero ser aguafiestas pero ya es la una y creo que Olga y yo nos debemos ir

Lucia: mira mujersh shi te preocupash que venga Crishh..hip…eshaa no va a venisshh, tiene que shamarsss

Ana: Mari por favor de verdad ya me tengo que ir

María: va va mira corazón ya te vas a ir, un ratico más y te vas, si?

Olga: vale mujeyrg que cho te lhhebol

Ana: que!? Que dijiste Olga?

Olga: quhe coho qte hshobo…..yeeeeeeeee

Mari era la única todavía con algo de sobriedad en el cuerpo pero Lu y Olga ya estaban en la etapa de hablar lenguas muertas o mejor dicho de matar a la lengua, me quede un rato más pero como nadie se movía me dispuse a irme, jalé a Olga, le pedí las llaves del auto y de a pocos la jale hasta la puerta, ella no se dejaba, era una borracha terca pero al final me siguió en el paso, tomé la manija de la puerta  y jalé con fuerza, encontrándome de frente con lo que más deseaba en la vida, con la persona que más quería ver en esta tierra era…. Cristina que tenía por detrás a Bruno….fueron los segundos más interminables de mi vida, nadie decía nada Olga apoyada a mi hombro levantó la cabeza para verla y luego se escondió en mi cuello y me lo beso, era un beso totalmente inocente pero Cris al ver eso se le inyectaron los ojos con rabia, Lu y Mari no se dieron por enteradas de lo que paso, y Bruno me miraba con rabia con odio, con no se qué pero tampoco decía nada, nadie hablaba ni hacía nada las dos estáticas en el umbral de la puerta con nuestras miradas fijas, yo quería lanzarme a ella y abrazarla y besarla, pero mi cuerpo no respondía, todo era hielo, no pude soportar el martirio del silencio y yo hablé

Ana: Cris, llegaste – pero que estupidez salió de mi boca…ni que se fuera –

Cristina: qué demonios haces aquí Ana, que carajo está pasando aquí porque todas están ebrias – entró al piso empujando a Olga para pasar, y soltó la maleta en medio del salón y dirigiéndose a las chicas grito – qué coño está pasando aquí

Ana: – Bruno que estaba detrás de ella la alcanzó en la mitad del salón y le dijo algo al oído y del brazo se la jaló para salir del departamento – no te vayas Cristina por favor – alcancé a gritar –

Cristina: - ella volteó y  me miro con ira y me dijo – para que quieres que me quede Ana, para ver cuánto daño has causado?, pues quédate tranquila Anita que no hay daño que no se pueda reparar ni herida que sanar ni recuerdo que borrar – siguió caminando para salir cuando la agarré del brazo y la sujete –

Ana: Cris, tenemos que hablar, te tengo que explicar muchas cosas, Cristina yo te amo

Cristina: - su cara volteó con rapidez y su mirada enfrento la mía – no me hagas reír Ana Cervantes, tu no amas a nadie sólo a ti, yo ya sé bien qué clase de persona eres gracias a verdaderos amigos como Bruno

Ana: - mi entraña se lleno de furia, mis mano se hicieron puños y la cara se me lleno de sangre – Cris yo no sé qué mierda te habrá dicho Bruno pero yo te juro que todo es mentira, el me engaño también a mí y lo está haciendo contigo porque nos quiere separar

Cristina: no hables estupideces Ana, el único sincero en esto ha sido él, no me vengas tu a querer envenenar la cabeza contra él…pero que paso Anita, a que has regresado?...otra vez tienes conferencias y quieres a una amante de turno?

Ana: no digas eso Cris, lo que sea que te haya dicho él es mentira, yo no te quiero como amante yo te amo, perdóname leí tu nota tarde y cuando quise regresar no pude, por favor déjame explicarte

Cristina: no voy a escuchar nada de lo que tengas que decir, porque no quiero, yo a ti ya no te creo nada, y si quieres una amante….ahí esta llévatela a Olga, que yo ya tengo con quien pasar la noche – estiro su mano y la estrecho con la de Bruno – y déjame decirte que él es mucho mejor amante que tu, pero si quieres te nos unes haríamos un tri…- no me pude controlar y la abofeteé que le volteé la cara, me miró con rabia y me grito– a mi no me vas a venir a golpear putaaaa – se abalanzó sobre mí haciéndome caer en el piso, y casi sin control me pegó en el rostro

Bruno la trato de sostener pero Cristina estaba demasiado enfurecida, Mari vino a tratar de ayudarme pero ella también había bebido y su coordinación no le ayudaba mucho, yo sólo trate de cubrir mi barriga y me quede enrollada como un ovillo y dejé que me golpeara…más que golpes eran manotazos, que iban más dirigidos a mi rostro, yo sólo lloraba ni siquiera me defendía y ella también lloraba, cuando Lucia de repente se aparece y de un jalón la aparta de mí y Mari me jaló a un costado, mientras Bruno la tenía prácticamente sostenida en el aire

Lucia: estashh loca?....estaa embarazhsdahhs – Lu seguía ebria pero algo de lucidez todavía la hacía hablar –

María: – María me estaba abrazando en el piso mientras yo seguía llorando y le dijo – Cris de verdad que estas trastornada, está embarazada por el amor de Dios, tu orgullo estúpido y los malos consejos han hecho que se te nuble la mente que ni siquiera puedas ver la verdad que está en tus narices

Cristina: tú estás muy equivocada Mari, Ana es una víbora sin corazón y todo su amor incondicional fue un engaño, me engaño no lo entiendes?

María: lo que yo entiendo es que alguien te está engañando y no es precisamente Ana

Bruno: tú no te metas Mari, que Ana es lo que es y no va a cambiar….vámonos Cris, tú no tienes que hacer nada aquí – vi como Bruno se la llevaba del brazo cuando Olga les impide la salida –

Olga: Crishtitra, pero no esshtahas con Ashas, ains nosh entiendsosh, mejorsh tomemoshd unash coshpash..hip…

Cristina: suéltame borracha – le separó la mano que le sostenía el brazo –

Olga: aishh te faltashh un buensh polvosh

A Cristina se le puso toda la cara roja por el comentario que hizo Olga, que en su media lengua se logro entender, se volteó para salir por el umbral cuando yo me paré de un solo intento y le grité – para soñar no hace falta saber hacerlo y yo sueño contigo , tu lo haces? – se que ella entendió porque lo pude ver en su mirada, Bruno se la llevo jalándola del brazo y yo sólo vi como se perdían en la distancia, María me ayudo a sentarme en el sofá y Olga cerró la puerta y empezó a reír, no sabía bien porque pero luego empezó a hablar

Olga: hip…anahsh, no te prcheocupesh, te ashegurosh que Crish no she acuesta con Brshuno

Ana: que!

María: que te asegura que Cris no se ha acostado con Bruno

Ana: y tu como lo sabes, si ella misma lo dijo?

Olga: pporshhsuqe eshta shalida

Ana: que!!

María: va mujer que dice que esta cachonda, o sea que le falta tu sabes “cariño”

Ana: ah bueno, pero eso no me preocupa la verdad, lo que me preocupa es que ella me odia, me odia Mari, no me puede ni ver…auchh Lucia…que me pones?

Lucia: sholosh hielosh, tienesh la carahs infladahs

María: perdónala mujer, mejor las mando a dormir a las dos que están de más pasadas

Ana: si ve llévalas

Vi como Olga colgada de Lucia y ésta de María las subía hasta el dormitorio, estaban totalmente ebrias que no creo que se acuerden mañana de todo lo que paso, podía sentir mi cara latir, me fui al cuarto de baño y pude ver una gran hinchazón en el párpado izquierdo y en la mejilla también izquierda y uno que otro arañazo en el cuello, tenía el labio sangrando pero no podía identificar el lugar exacto, me eché un poco de agua al rostro, y sentí como me ardía todo el lado izquierdo de la cara, era increíble y el dolor que recién empezaba a delatarse, me revise el cuerpo y encontré unos cuantos arañazos en mis antebrazos que supuse serian de cuando trate de protegerme y moretones repartidos por todas partes, me levante la camisa y me divisé la barriga, no tenía señas de nada, y no sentía ningún dolor ni nada, sólo esperaba que mi bebé estuviera bien.

María: cariño estas bien?, te golpeo en la barriga acaso?

Ana: – me acomodé rápido la camisa y le respondí – no no te preocupes Mari, sólo me golpeo la cara, pero igual estaba revisando

María: la cara mujer, pero si mírate los brazos y el cuello si parece que hubieras tenido una pelea con una gata, la verdad yo no sé que se le metió a Cristina pero se desquició mujer, no la reconozco Ana, Bruno la ha cambiado, ya no queda nada de nuestra Cris

Ana: no digas eso Mari, yo se que la mujer de la que me enamore todavía está allí, sólo tengo que hallar la manera de hablar con ella de explicarle todo

María: ya mujer, ya pensaremos en algo pero creo que por hoy fue suficiente, ven vamos a descansar, que tú más que nadie lo necesitas, vale vamos a acostarnos, que hoy nos toca dormir juntas, que las dos ebrias se apoderaron de mi cama, vamos mujer

Subimos y nos acostamos, yo trate de conciliar el sueño pero me fue casi imposible, repasaba una y otra vez lo que paso, la mirada de odio y de rabia de Cris hacía a mí, repasaba ese primer momento, la primera vista de ella hacia a mi tratando de encontrar alguna chispa, una pizca de cariño hacia mí pero sólo encontré rabia y más rabia…puede ser posible que sólo en un par de meses ella haya logrado odiarme tanto, despreciarme tanto?....mi almohada otra vez se lleno de lágrimas, trataba de no hacer mucho ruido para evitar que Mari se despertara, pero el dolor de mi corazón no me dejaba controlar mis lágrimas, sentí una punzada en el vientre que me hizo estremecer, traté de obviarla, de no hacerle caso, pero la punzada seguía se hacía más profunda más intensa, abracé mi barriga y rogué porque no fuera nada, y abrazando mi barriga y con lágrimas en los ojos me quedé dormida.

María: cariño despierta ya que ya pasan de las 11, debes comer algo, Ana despierta

Ana: – escuchaba a Mari hablar pero me negaba a despertar, abrí los ojos, a la fuerza y con ellos regreso la punzada en mi vientre, me enrolle como un ovillo y me abracé a mi barriga – No me siento bien Mari

María: cariño pero si estas pálida, que pasa te duele algo, estas sangrando?

Ana: no lo sé, sólo tengo un gran dolor en el vientre

María: tranquilízate cariño mira que llamo a Lucia….Luciaaaaa!! ven pronto Ana esta mal

Sentí como Lucia subía las gradas rápidamente, sentí sus pasos por el corredor hasta la habitación, y con todo eso el dolor se hacía más intenso

Lucia: que pasa?...Ana cariño que sientes, que hago?

María: déjame buscar el coche y nos vamos al Hospital

Ana: - miré a Lu que estaba arrodillada en el piso al lado de la cama – Lu tengo miedo, no quiero que le pase nada a mi bebé

Lucia: - Lu me miro y me sostuvo la mano y me dijo – no va a pasar nada mujer….Mariiii!!!! Apúrate por favor, pero donde se metió esta mujer…Mariiiiiii!!!!, tranquila cariño que todo va a estar bien

Ana: no te vayas Lu, no me dejes – sentí como mis párpados pesaban cada vez más, como todo lo que veía se nublaba y en el silencio y en toda esa oscuridad sentía la voz desesperada de Lu…Noooo Anaaa no te duermas, Annnaaaa!!! –

CRISTINA

Salí del piso a jalones del brazo de Bruno, las últimas palabras, soñar, soñar, soñar una vida contigo, claro que soñaba con ella, todos los días y cada vez que cerraba los ojos….yo le escribí eso en la nota, pero porque me lo decía ahora….Bruno seguía jalándome hasta que llegamos a la entrada del edificio, a empujones me metió dentro del coche y partimos rapidísimo, Bruno no me miraba y yo sólo trataba de asimilar todo lo que había pasado…golpeé a Ana, que he hecho, Ana esta embarazada, su criatura, Diossss….todo lo que paso lo que hice me golpeo de repente, recién llegaba a mi mente toda la información de lo vivido….que hice, que hice?...las imágenes regresaron, yo encima de Ana golpeándola sin compasión en el piso, ella sólo se cubría y trataba de cubrir su barriguita….soy un monstruo, soy despreciable…..comencé a sentir nauseas y sentir mareos y le grite a Bruno – para el coche Bruno –

Bruno: pero que pasa Cris, ya estamos por llegar, espera a que lleguemos

Cristina: para el puto coche Bruno o me tiro

Bruno se asustó y lo paró en seco, se arrimo al costado de la vía y yo salí, me alejé un poco y caí de rodillas y empecé a vomitar, Bruno bajo también, me sostuvo el cabello, me limpió la cara y después me sujeto a su pecho, y lloré desesperadamente – Que he hecho Bruno?, soy una bestia, un monstruo – él sólo me acariciaba la cabeza y yo seguía llorando.

Bruno: no eres un monstruo cariño, sólo que a veces la decepción toma diferentes caras para expresarse tu sólo te desfogaste, ven regresemos al coche, que te hace falta un buen baño y un buen descanso

Me levanto y como si fuera un ser totalmente indefenso, me acomodó en el asiento de atrás, y partimos para el Hotel, me dejé llevar por él, me llevó hasta la habitación, me desvistió y me acostó, me abrazó por la cintura y se quedo conmigo acostados en la misma cama, yo traté de descansar pero cada vez que el sueño parecía vencer, la imagen de Ana tirada en el suelo tratando de protegerse, me invadía la mente y me hacía llorar otra vez, me levante de la cama y dejé a Bruno sólo totalmente dormido, me senté en el sofá frente al televisor y traté de recapitular todo lo pasado, comencé a analizar detalles, la mirada de Ana, el tono de su voz, sus gestos, sus palabras, todo parecía sincero…no leyó la nota cuando debió, pero porque demoro tanto en regresar?...” alguien te está engañando y no es precisamente Ana”, esa frase de Mari, que sabía Mari, porque todas estaban del lado de Ana, si yo era la víctima, será que Ana engaño a todas….no entiendo nada, “ no puedas ver la verdad que está en tus narices”, que verdad? Si yo sabía la verdad a que verdad se refería Mari…mi cabeza daba tumbos y tumbos sobre las mismas y mismas palabras “ Cristina yo te amo”, Ana me dijo que me amaba, puede ser que siga siendo tan cínica, pero para que regreso, no entiendo, será que yo soy, para que regresaste Ana para que?....el sol del alba entraba por la ventana directo a mi rostro, no pude dormir ni un segundo, me sentía muy confundida, Bruno, todas lo indicaban como el creador del engaño el dador de mentiras….pero Bruno se había portado tan bien conmigo, me cuesta creer que el haya hecho algo en mi contra, no lo creo, no me niego a creerlo, no Bruno…” el me engaño también a mí y lo está haciendo contigo porque nos quiere separar”, Bruno engaño a Ana?, no no no, todo está mal tengo que hablar con Ana, no no no tengo que hablar con Bruno, que voy a hacer?

Bruno: Waow, buenos días preciosa, ya te sientes mejor?

Cristina: no Bruno, no me siento mejor, en realidad me siento peor, lo que hice ayer fue una bestialidad

Bruno: mira Cris, ya deja de pensar en eso si?

Cristina: pero es que no entiendo porque regreso, si estaba con su esposo, para que regresar no entiendo para que?

Bruno: mujer Ana seguro que regreso por algún negocio pendiente, te aseguro que esta con Javier de repente vinieron a ver a la familia de él y de paso a visitar a Lu, aprovechando que tu no estabas en la casa, la agarraste por sorpresa por eso no supo cómo actuar y te dijo todas esas cosas.

Cristina: - las palabras de Bruno tenían mucho sentido, seguro Ana estaba con Javier, pero que tonta – si tienes toda la razón Bruno, mejor que tal si me invitas a desayunar si?

Bruno: perfecto princesa, nos cambiamos y nos vamos a desayunar

Bruno se metió a la ducha primero, yo trate de buscar mi maleta y no la encontré y de pronto recordé que con todo lo que paso ayer la había olvidado en el piso, demonios regresar otra vez allí, esperé que Bruno saliera de la ducha y le explique lo que paso, el me dijo que no era necesario ir a recogerla que él me compraría ropa nueva, pero igual le insiste y acepto llevarme, bajamos rápido y partimos hacia el piso, Bruno estaba nervioso, no hablaba nada y tenía la mirada fija en el camino, cuando por fin llegamos al piso el quiso ser quien trajera la maleta pero yo lo evité, le dije que sería mejor que esperara en el auto, que yo no demoraría, subí hasta el piso y abrí la puerta con mi llave.

Cristina: holaaaa hay alguien en casa?

María: - María sale de la cocina y me mira fijamente – vaya si que tienes la cara dura de venir después de lo que paso ayer no?

Cristina: de venir Mari?, si bien no lo recuerdo este piso es mío, pero bueno no he venido a pelear ni nada sólo quiero mi maleta que me voy

María: está al lado del sofá

Cristina: - fui a recogerla mientras veía como Mari colocaba, bocadillos en un bolso – y donde está Lucia? Se van de picnic?

María: Lu esta en el Hospital

Cristina: que le paso algo?, esta bien? Que pasó?

María: ella está perfecta, esta con Ana, se desmayó y temíamos por la salud del bebé

Cristina: - sus palabras caían como agua helada por mis espalda, Ana en el hospital, todo era mi culpa, yo la golpeé – que!!!!, no me digas eso Mari, es mi culpa yo….esta con Javier?

María: que Javier ni que nada Cristina, Ana vino aquí sola, vino por ti, porque te ama, como puedes ser tan ciega de no darte cuenta, yo no sé qué te habrá dicho Bruno, pero….pero nada Cris tu no la mereces

Cristina: que te pasa Mari, tu eres mi amiga, y estas de su parte?

María: yo cariño te conozco más de 4 años y ese estúpido de Bruno recién lo conoces, pero si eres capaz de creer en él y no en nosotras

Cristina: creer en que Mari, dime, cuéntame que paso realmente entonces dime

María: Cristina….sabes que, ya ni siquiera mereces la verdad, y discúlpame que no siga la conversación pero tengo que llevarle algo de comer a Lu que ha estado todo el día en el Hospital

Cristina: dime en que Hospital esta por favor?

María: para que? Para que vayas a ver tu obra, olvídalo Cris, y déjala en paz

Mari salió del piso y me dejo parada allí con todas sus palabras rondándome como nubes a punto de explotar en un aguacero, Bruno, que hizo, que hice?, yo creí todo sin siquiera investigar si era la verdad, me deje cegar….pero Bruno el no pudo haber hecho algo tan vil, él no pudo, tengo que ir con cuidado si le hago saber que sospecho que me engaño él lo negará todo el no me dirá nada.

Salí del piso, baje y me metí en el coche, me senté y ni siquiera lo volteé a ver, el me miraba expectante pero yo no decía nada

Bruno: donde esta la maleta?, porque demoraste tanto

Cristina: Ana esta en el Hospital

Bruno: que!! Que paso?

Cristina: eso es lo que quiero averiguar, llévame al Hospital

Bruno: pero Cris para que?, su esposo ya debe estar atendiéndola tu vas a sobrar, además si te ve fácil te quiere poner una denuncia por agravio, Cris es muy peligroso

Cristina: Javier no está y quiero ir al Hospital, por favor averigua donde

Bruno: -  Bruno se quedo frio con mi respuesta, no esperaba que yo supiera que Ana estaba sola – pero…pero….no me…

Cristina: averigua donde esta ella, sólo quiero saber si la causa de su internamiento es mi culpa o no, yo no quiero cargar sobre mi conciencia que puse en peligro la criatura que lleva dentro – lo miré muy seria, trataba de descubrir un indicio de arrepentimiento de que revelara su engaño pero nada –

Bruno: el hospital más cercano aquí es el Hospital General, déjame llamar y preguntar si ella ha sido ingresada

Bruno hizo su llamada y le confirmaron que Ana estaba ingresada, le pedí que me llevara hasta el Hospital y durante todo el camino no nos dirigimos palabra, estábamos a la entrada de urgencias y yo me bajo del coche

Bruno: te espero Cris, no vas a demorar no?

Cristina: Bruno tienes algo que decirme que no sepa?

Bruno: - me miro sorprendido y con los ojos abiertos de par en par y fijos en mis ojos me dijo – el corazón te hace hacer cosas que la mente jamás entendería….te amo Cris

Cristina: - ahí en ese momento, lo supe, no me tuvo que dar la confesión no nada, Bruno me había engañado –

Cerré la puerta del coche y me puse de espaldas a él, no volteé, no sabía aún el calibre de su engaño ni la razón exacta porque Ana no se presento antes, pero estaba segura que no quería volver a ver a Bruno….sentí una fuerte opresión en el pecho, por haber sido tan estúpida, por haberme dejado engañar por haber desconfiado de ella, Ana mi Ana a la que orille a estar ahora en una cama de Hospital, cuánto daño te he hecho, sólo espero su perdón porque yo no me puedo perdonar.

ANA

Me desperté en una cama de Hospital, no reconocía a nadie ni nada, Lu estaba a mis pies en el improvisado cuarto hecho con cortinas azules, el dolor que sentía había disminuido bastante pero aún lo sentía, traté de levantarme pero el suero en mi brazo me lo impidió y Lu se despertó para tratar de evitar que casi me sacara la vía

Lucia: Tranquila mujer, estamos en el Hospital, tranquila, yo estoy contigo

Ana: que me paso Lu que hago aquí?, perdí al bebé?

Lucia: tranquila Ana, te desmayaste y no perdiste al bebé, estoy esperando al doctor para que me diga algo pero es que hay mucha gente y éste es un hospital público y hay mucho paciente, pero seguro ya viene, tranquila mujer

Ana: pero porque no tengo un monitor chequeando los latidos del bebé, como saben que está bien, Lu por favor llama a un doctor quiero que me digan la verdad por favor Lu la que sea

Lucia: tranquila mujer por favor, no quiero que te vuelvas a desmayar

Doctor: buenos días soy el Doctor Contreras y soy su médico

Lucia: gracias a Dios doc, esta mujer está histérica que dice que el bebé esta muerto

Doctor: jajaja, nada de muerto mujer, pero quien te golpeó la cara si te quería desfigurar, pero igual sigues siendo hermosa….mira Ana?....

Ana: si doctor

Doctor: tu bebé está bien, lo que pasa mujer es que estás anémica, tu examen de sangre dice que tienes la hemoglobina por los suelos, mejor dicho tienes poco oxígeno en la sangre, y eso causa que tu bebé se agote rápido y tu también, por eso te desmayaste, aunque parece sencillo es algo que puede ser fatal….has estado sangrando o algo?

Ana: no doctor no para nada

Doctor: entonces lo más probable es que sea porque no te estás alimentando bien o me equivoco

Ana: si doctor tiene la razón

Doctor: mi ojo casero no se equivoca, pues nada mujer que a comer rico, hacer un poquitín de ejercicio, y tomar tus vitaminas, te estamos pasando un suerito con vitaminas, y por favor deshazte del animal que te dejo la cara como mapache vale?

Ana: si doctor

Doctor: bien entonces, te voy a pedir unos exámenes más de sangre, y un ultrasonido para ver bien a ése bebé aunque déjame decirte que sus latidos son fuertes, hasta tu amiga los escucho, es un bebé muy fuerte, sólo tienes que cuidarte tu, voy a dejar firmada tu alta y a penas termine el suero y te saquen el ultrasonido y la sangre te vas  y ya regresas por consulta para darte los resultados vale?

Ana: vale doctor gracias

Lucia: gracias doctor….mujer yo comiéndome las uñas con todo esto y todo era culpa de tu mala alimentación, en éste momento llamo a Mari para que te traiga algo rico.

Ana: gracias Lu no se qué haría sin ti, te quiero mucho amiga

Lucia: y yo a ti preciosa

Lucia salió de la habitación improvisada y cerró las cortinas dejándome sola, no me gusta quedarme sola, me siento indefensa y eso me aterra, cómo quisiera que Cris estuviera conmigo que me tratara con la dulzura que me tenía tan acostumbrada, como es no?...como bastan las mentiras para restarle importancia a los detalles, a los besos, a los deseos, que aunque uno se ponga a llorar ya no le crean, creyéndome fuerte luché por adelantado, puse en impresión que mis intentos serían eternos, ahora en ésta cama y casi vencida y derrotada creo que Cris fue una mentira que creo mi mente para tener a alguien a quien amar de la forma indicada, pero supongo que ya no hay forma indicada ni nada, basta saber que el amado fue una mentira cuando su esencia será de otro cuerpo, a otro que tiene por trofeo lo que uno tuvo algún día….Dios sabe que cometí muchos errores en la vida pero mi único pecado fue nunca haberme entregado por completo, pero cuando por fin lo hago mi nuevo pecado fue no haberlo hecho en el momento indicado, supongo que es cierto eso que se dice que cuando no tomas las oportunidades en su momento éstas no volverán, yo creo que perdí mi oportunidad con Cris, quizás lo nuestro nunca estuvo destinado a ser, quizás confundí los sueños con soñarla…me acomodé en la camilla y cerré mis ojos tratando de encontrar el descanso que me de un poco de paz, cuando escucho una voz que me llama… Ana, mira cómo estás, nunca me podré perdonar el daño que te he hecho… era ella mi amor Cristina.