Amantes de otras vidas
Creer en la reencarnación no es cuestionable. Cuando dos almas se encuentran de nuevo, el cuerpo rememora todo lo vivido.
Eres el único hombre al que me imagino perfectamente follándome.
A veces miro a los hombre e intento imaginar cómo follarán. Cómo la tendrán, cómo será su cuerpo: con vello, sin vello; su polla: grande, ladeada, venosa...; cómo se moverán y qué cosas harán y cómo me tratarían en la cama.
Casi nunca consigo sacar nada en claro, todo se queda en conjeturas que van cambiando con el tiempo.
Pero contigo, no.
Contigo no tengo ninguna duda de nada de lo que harás: de cómo me mirarás penetrándome y haciéndome tuya sin siquiera tocarme. De cómo sin hablar, ni moverte, me ordenarás que vaya hacia a ti. De cómo me atraerás hasta rozar tu cuerpo: con un brazo sobre mi cintura y tu mano rotunda en mi culo y tu otra mano rodeando mí nunca, agarrando mi pelo fuerte y decidido y dejando tus labios a un milímetro de los míos, sé cómo caería entonces tu saliva en mi boca abierta y jadeante, y en lo que se siente cuando tus labios se posan en los míos, y abres mi boca con tu lengua y buscas la mía y me besas como ningún otro hombre besa.
Sé cómo me vas a desnudar: rudo, fuerte, a tirones, a tu voluntad.
Sé cómo me vas a ir tocando mientras, cogiendo lo que es tuyo por derecho
Sé lo que voy a hacer: entregarme a ti sin resistencia
Sé cómo me vas a poner, y tú también lo sabes
Sé cómo me vas a penetrar y lo que vas a decir al hacerlo, sé cómo me vas a agarrar y llenar de ti
Sé cómo me vas a dar
Sé cómo voy a gemir
Sé cómo me vas a gozar
Sé cómo vas a gruñir
Sé cuándo te vas a calentar más y así me voy a mover para ti
Sé cómo te vas a volver loco y yo no te voy a importar
Sé cómo vas a buscar tu placer
Sé cómo estaré gozando, poseída
Sé cómo vas a parar el tiempo, y te vas a tensar y me vas a horadar entera y me vas a morder, y cómo vas a gritar y cómo me vas a colmar y cómo vas a resoplar y cómo vas a caer sobre mi cuerpo tendido y cómo vas a respirar y te vas a recuperar y vas a coger aliento vital…
Sólo contigo lo sé todo, todo todo todo sin excepción. Y es porque ya nos conocemos, Amor, y ese imán que nos ha unido siempre sigue estando ahí y no quieres, lo sé, no te quieres creer lo que sientes, pero lo sabes, no puedes negar lo que tu cuerpo te dice y en breve lo vas a volver a sentir conmigo.