Amaia (5)
AMAIA sigue con su educación hoy recibe sus joyas para lucir como sumisa, debe pagarlas de una morbosa forma y luego se las muestra al Jefe del grupo
AMAIA, SIGUE SU EDUCACION(V)
Después del baño en la sede de la empresa de Alfonso Vicky la condujo al baño y luego a su coche. Esa noche era mejor que la pasara con ella porque al día siguiente había muchas cosas que hacer. Amaia durmió en el suelo a los pies de la cama de Madmoiselle. Como pijama su ropa, como colchón la madera del suelo. La noche la pasó excitada por todas las situaciones que la estaban ocurriendo.
Que era eso que la estaba golpeando el brazo?. Entreabrió uno de sus ojos y vió el pie desnudo de Vicky, estaba empezando a jugar con su cara. Se despertó y se arrodilló a los pies de la cama.
Eres muy guapa Amaia, aparte se te nota que tienes muchas ganas de aprender y ser mejor sumisa y satisfacer en todo también en lo sexual a Julio. Eso me gusta, tu sigue comportándote como hasta ahora y nos llevaremos bien. De todas formas recuerda que aunque te castiguemos es que te queremos. De todas formas aunque tus padres pertenezcan al grupo tu lo podrás abandonar cuando quieras.
No deseo abandonarlo, al principio tuve dudas porque pensaba que Julio solo me quería por el sexo y solo quería degradarme pero ahora veo que también me ama. El dolor me da algo de miedo pero por mis Amos lo intentaré superar.
Amaia tuvo que preparar el desayuno para Vicki. Ella solo tomó un cuenco de leche dispuesto en el suelo. Se tuvo que lavara la cara. No se pudo cambiar de ropa porque no tenía otra y cuando estuvo preparada para salir Vicki la colocó el collar ajustándoselo al cuello. Salieron de casa. Fueron caminando por la ciudad, bromeaban en los escaparates hasta que llegaron a una tienda. No era una joyería al uso. Vendía también avalorios y otras cosas.
Cuando entraron el joyero cerró la puerta y las condujo a la trastienda. Allí estarían mas cómodas y a salvo de la mirada de personas extrañas. Aitor era un artesano de la madera, el cuero e incluso hacía bonitas piezas en diversos metales decorados con cristales, madera o cuero.
Tienes lo que se te encargó? Preguntó Vicki.
El joyero entonces sacó la primera pieza del encargo. Una pequeña placa redonda hecha en esmalte rojo con un triskel negro y tres inscripciones. 48 era a la izquierda, representaba la provincia, I el grupo de esa provincia y Ju el símbolo de su Amo. Se lo pusieron al cuello tras quitarle el collar más de perra que llevaba y fueron ajustando el cordón hasta que el esmalte quedase justo sostenido por el comienzo de los pechos.
Ahora iban por la siguiente joya, una pequeña cadena plateada con una plaquita que ponía Amaia. Para lo último Amaia se tenía que desnudar pero Vicki la paró.
Habrá que pagar el encargo de Aitor y como se la tarifa creo que esto nos ayudará.
Aitor era un hombre maduro. Tenía más de cincuenta. Pocas oportunidades solía tener de ligar con mujeres tan guapas aunque últimamente con esos encargos tan especiales solía tener mucha suerte porque los pagos merecían la pena. Retiró el pelo a la chica de su cuello. La besó en la nuca, se acercaba a ella rozándola. La fue quitando la ropa. Amaia solo llevaba puesto ahora un tanga. El se había sacado la polla de los pantalones y se la metió entre la tela del tanga de su culo. Fue lamiendo el cuerpo de la chica por delante y por detrás.
La arrancó el tanga a Amaia. Vicki a un lado se había levantado la falda y haciendo a un lado sus braguitas se estaba masturbando. Paró porque si no Aitor podía correrse sin completar el jueguecito. Le ordenó al joyero que le diera el instrumental para terminar con el pago. Ella se puso los guantes de látex y vertió una cantidad generosa de crema lubricante en el ano de Aitor.
Amaia recibió la orden de arrodillarse delante del hombre y mamársela hasta ponérsela dura y luego ponerse de pies para ser sobada a gusto por el joyero. Amaia comenzó con la mamada muy suavecita pero no necesitaba más. La verga del hombre reaccionaba y fue elevándose poco a poco hasta ponerse muy dura ligeramente curvada hacia arriba. Rozaba el paladar de la sumisa. Cuando Amaia se levantó Aitor la sobaba con las dos manos se rozaba con su polla por todas partes.
Vicki por su parte estimulaba la próstata a través del recto, jugaba con ella y hacía que la polla del joyero aumentase de tamaño cada vez más. El joyero gemía y decía cada vez más incoherencias hasta que eyaculó llenando a Amaia de semen. Luego con la lengua Aitor limpió todos sus restos y vistió a la sumisa dejándola perfecta.
Que pago más raro dijo Amaia cuando salieron.
En el sexo hay de todo, todas las fantasías son perfectas siempre que sean seguras y consensuadas.
Se montaron en el coche y condujeron de nuevo hasta el edificio de la empresa de Alfonso. Subieron en el ascensor de servicio hasta el ático. Era donde Alfonso tenía un pequeño apartamento para cuando se quedaba a trabajar hasta tarde.
La hizo apoyarse en la camilla tras desnudarse y dejar toda la ropa bien doblada. Iba a pasar el resto de la velada con Alfonso pero antes iban a probar la joya para su culito. Vicki esposó las muñecas de la chica para que no se moviera. Alfonso llegó vió a la chica. Con el culo y el coño expuestos en pompa. Vicki había tomado la precaución de taparle los ojos a la chica.
Alfonso se preparó, cogió un condón y se lo puso. Luego con un tubo de lubricante se untó bien la polla con la crema lubricante. Se acercó al culo de Amaia. Fue empujando poco a poco hasta que toda la polla entró dentro. La follaba con suavidad, lo hacía guiándose por los gemidos de la chica que como le habían indicado era muy expresiva. Cuando los gemidos de la sumisa alcanzaron unos decibelios que demostraban que estaba fuera de si.
Se la sacó y se quitó el condón. Se masturbó hasta alcanzar el punto que él quería. La penetró y en el momento que su glande se iba descapullando a la vez que su polla entraba iba eyaculando. Alfonso la sacó y cogió la pequeña joya en forma de plug rematada con el símbolo del grupo. La condujo desnuda, solo vestida con un tanga para sostener el plug. La indico que ropa debía ponerse para la velada.
Continuará……….
Este relato es imaginario pero si queréis podéis escribirme sobre todo mujeres(animaros y hacerlo así los haré más a vuestro gusto) a: